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AL PÚBLICO EN GENERAL
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PARCIALMENTE, TODA VEZ QUE PUEDE
CONSTITUIR EL DELITO DE FALSIFICACIÓN DE
DOCUMENTOS DE CONFORMIDAD CON EL
ARTÍCULO 244, FRACCIÓN III DEL CÓDIGO
PENAL FEDERAL, QUE PUEDE DAR LUGAR A
UNA SANCIÓN DE PENA PRIVATIVA DE LA
LIBERTAD DE SEIS MESES A CINCO AÑOS Y DE
CIENTO OCHENTA A TRESCIENTOS SESENTA
DÍAS MULTA.
MANIFESTACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL PARA LA PESCA RIBEREÑA SUSTENTABLE DE PUERTO
PEÑASCO EN LA PORCIÓN ORIENTAL DE LA ZONA DE AMORTIGUAMIENTO DE LA RESERVA DE LA
BIOSFERA ALTO GOLFO DE CALIFORNIA Y DELTA DEL RÍO COLORADO
‘Pescadores’ por Guillermo Munro
PROMOVENTE DEL PROYECTO:
Asociación de la Pesca de Ribera Regional Organizada y Regularizada de Punta Peñasco A.C. C. Lázaro Espinoza Mendivil (apoderado legal para la MIA).
RESPONSABLE TÉCNICO DEL ESTUDIO:
MAYO DE 2016
*Proteccion de datos personales LFTAIPG*
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I. DATOS GENERALES DEL PROYECTO, DEL PROMOVENTE Y DEL
RESPONSABLE DEL ESTUDIO DE IMPACTO AMBIENTAL.
I.1. Proyecto.
I.1.1. Nombre del Proyecto.
Manifestación de Impacto Ambiental para la Pesca Ribereña Sustentable de Puerto
Peñasco en la Porción Oriental de la Zona de Amortiguamiento de la Reserva de la
Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Rìo Colorado.
I.1.2. Ubicación del proyecto.
El proyecto se ubica en la porción oriental de la Zona de Amortiguamiento de la Reserva
de la Biosfera Alto Golfo de California, misma que representa 430,587.00 h y se
encuentran delimitadas por las coordenadas UTM que se presentan en la Tabla I.1.
Tala I.1 Coordenadas UTM que delimitan la zona de amortiguamiento de la Reserva de la
Biosfera del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado.
I.1.3. Duración del proyecto.
Dos años (24 meses).
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I.2. Promovente.
I.2.1. Nombre o razón social.
Asociación de la Pesca de Ribera Regional Organizada y Regularizada de Punta Peñasco
A.C.
I.2.2. Nombre y cargo del representante legal.
I.2.3. Registro Federal de Contribuyentes.
APR160212BL7
I.2.5. Dirección del promovente.
I.2.6. Presentación de la documentación oficial o legal.
Copia simple de la Credencial del Instituto Federal Electoral del Apoderado Legal
para la MIA.
Acta de Nacimiento del Apoderado Legal para la MIA.
Copia simple del Registro Federal de Contribuyentes del promovente.
Acta constitutiva de la Asociación Civil en donde se otorga poder al representante
legal para recibir notificaciones de la MIA.
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I.3. Responsable del Estudio de Impacto Ambiental.
I.3.1. Nombre o razón social.
I.3.2. Registro Federal de Contribuyentes.
I.3.3. Dirección del responsable técnico del estudio.
I.3.4. Participantes.
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II. DESCRIPCIÓN DE LAS OBRAS O ACTIVIDADES Y, EN SU CASO, DE LOS PROGRAMAS O PLANES PARCIALES DE DESARROLLO. II.1. Información general del proyecto, plan o programa.
Las actividades pesqueras de ribera llevadas a cabo en el Alto Golfo de California (AGC) presiden experiencias en el sometimiento a evaluación de Manifestaciones de Impacto Ambiental Regionales (MIA-R) desde el año 2009, cuando la Secretaría solicitó dicho instrumento de la política ambiental a las localidades que desarrollen la actividad dentro los límites de la RBAGCyDRC. Así, el Sector Pesquero Ribereño de San Felipe se sometió a un proceso de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) ante la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) de manera independiente (MIA-R 2009 “Pesca Ribereña Multiespecífica”), mientras que las localidades sonorenses de El Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, lo hicieron de manera conjunta (MIA-R 2009 “Pesca Ribereña en el Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora”). Por ser las primeras experiencias en el país que manifestaban los impactos ambientales de la actividad ribereña dentro de un Área Natural Protegida (ANP), ambas MIA‟s presentaron varias inconsistencias técnicas señaladas en los términos y las condicionantes de los resolutivos respectivos, así como deficiencias desde el reconocimiento hasta el cumplimiento de las medidas de mitigación por parte de los promoventes. La segunda experiencia, emitida para los años 2011-2012 y con solicitud de extensión para 2013 y 2014 (MIA-R 2011-2012), incluyó de manera conjunta a las localidades de San Felipe, El Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco. La MIA-R 2011-2012 -partiendo del aprendizaje ganado en la experiencia anterior y en gran medida gracias a la participación interinstitucional1 e interdisciplinar en su elaboración-, se erigió como un instrumento muy sólido técnicamente. Sin embargo, se ha percibido que quizá el distanciamiento de dichas instituciones respecto de las „realidades locales‟, conllevaron a que actualmente los desarrolladores de la actividad ribereña consideren que muchos de los impactos identificados se encuentren sobreevaluados y, que una cantidad considerable de las medidas correctivas propuestas, se encuentren fuera de sus posibilidades de concreción. Aunado a lo anterior, se ha manifestado una inminente dificultad en operar de manera eficiente los programas de seguimiento que la MIA-R 2011-2012 planteó conjuntamente para las tres localidades participantes. Sin lugar a dudas, debido a la propia lógica por demás itinerante de la pesca de ribera, así como por las diferentes expectativas y rasgos operativos de cada una de las localidades, se perfila idóneo someter a evaluación de impacto ambiental la actividad de cada localidad de manera independiente.
En atención a dicha tesitura, el sector ribereño regularizado y organizado de Puerto Peñasco presenta el presente proyecto denominado “Manifestación de Impacto Ambiental para la Pesca Ribereña Sustentable de Puerto Peñasco en la Porción Oriental
1El grupo de consultores contó con la participación del Centro Mexicano de Derecho Ambiental
(CEMDA), World Wildlife Fund (WWF), Asociación Interamericana para la Defensa del Medio Ambiente (AIDA), Environmental Defense Fund (EDF), Sustainable Fisheries Partnership Mexico (SFP-Mexico), Pronatura Noroeste A.C., Centro de Investigación y Docencia Económicas A.C. (CIDE), así como del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.
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de la Zona de Amortiguamiento de la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado”, mismo que tiene por objeto someter a evaluación que las diferentes actividades pesqueras artesanales que lleven a cabo, durante el periodo 2015-2016, las 135 embarcaciones menores (31 de unidades de producción, 15 de empresas sociales, 15 de personas físicas y una de empresas privadas) acreedoras de 256 permisos de pesca comercial para el aprovechamiento de 11 pesquerías diferenciadas en el AGC, se desarrollen en un apego integral a los marcos normativos vigentes, sean aceptados socialmente, manifiesten capacidades de desdoblamiento económico y, sobre todo, se fundamenten en un carácter preventivo respecto al ambiente.
Así, con el objeto de sistematizar las experiencias pasadas, presentes y futuras, el
proyecto se llevará a cabo a través de las siguientes etapas: Etapa I. Revisión reflexiva y retroalimentación participativa del promovente y sus representados, y del responsable técnico del estudio y sus colaboradores, de la MIA‟s-R 2009 y la MIA-R 2011-2012.
Etapa II. Elaboración de una Manifestación de Impacto Ambiental modalidad Regional para ser sometida en el 2016, con una duración que incluya dos ciclos anuales de pesca, iniciando en septiembre de 2016 (MIA-R 2016-2018).
Etapa III. Implementación de los programas y entrega de los reportes, para que el promovente y sus representados cumplan con los términos de los oficios resolutivos correspondientes a la MIA-R 2016-2018.
Etapa conexa. Revisión reflexiva y retroalimentación participativa de la MIA-R 2016-2018 y de sus reportes correspondientes, para la elaboración de una Manifestación de Impacto Ambiental modalidad Regional a ser sometida en 2018 con una duración propuesta de cinco cuatro ciclos de pesca (MIA-R 2018-2023).
II.1.1. Naturaleza del proyecto, plan o programa. El proyecto consiste en la actividad pesquera de tipo artesanal o ribereña (Breton, 2001) de 135 embarcaciones menores o pangas matriculadas en Puerto Peñasco, mismas que desarrollan extracción –dentro de la Zona de Amortiguamiento de la RBAGCyDRC- para fines comerciales de nueve pesquerías monoespecíficas o multiespecíficas, abaladas por los permisos de pesca respectivos (ANEXO I). Si bien las operaciones de la flota ribereña en mención se caracterizan por cambiar rápidamente y frecuentemente de especies objetivos, sitios de captura, y artes y métodos de pesca -lo anterior en función de lo itinerante del propio recurso pesquero, las eventualidades operativas y los cambios en el mercado-, a continuación se describen, de manera generalizada, sus principales características operativas.
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Pesquerías.
Con relación en la tipología pesquera de los permisos comerciales emitidos por la Dirección General de Ordenamiento Pesquero y Acuícola de SAGARPA, la actividad ribereña de Puerto Peñasco lleva a cabo el aprovechamiento de las pesquerías estipuladas en la Tabla II.1.
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Tabla II.1. Caracterización general de las Pesquerías desarrolladas por el proyecto.
Nombre de la pesquería
Especificidad pesquera
Especies objetivo Artes de pesca Número de permisos
Camarón Monoespecífica Camarón Azul (Litopenaeus stylirostris). Chinchorro de línea 6
Escama (menor)
Multiespecífica
Sierras (Scomberomorus concolor, S. sierra). Chano (Micropogonias megalops). Corvinetas (Cynoscion parvipinnis, C. xanthulus, C.
reticulatus). Cochito (Balistes polylepis). Lenguado (Paralichthys aestuarius). Mantas (Dasyatis dipterura, Gymnura marmorata,
Myliobatis californica, M. longirostris). Guitarra (Rhinobatos productus).
Chinchorro
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Escama (mayor)
Multiespecífica Baqueta (Epinephelus acanthistius). Extranjero (Paralabrax auroguttatus). Cimbra
Tiburón Multiespecífica Bironcha (Rhizoprionodon longurio). Tripa (Mustelus californicus, M. lunulatus, M. henlei). Cazón (Galeorhinus galeus).
Chinchorro/cimbra 15
Lisa Monoespecífica Lisas (Mugil cephalus, M. curema).
Chinchorro 5
Jaiba Monoespecífica Jaiba (Callinectes bellicosus).
Trampas 74
Caracol chino Monoespecífica Caracol chino (Hexaplex nigritus).
Buceo 47
Callo de hacha Monoespecífica Callo de hacha (Atrina maura).
Buceo 12
Pulpo Monoespecífica Pulpo (Octopus nigritus).
Buceo 30
Almeja Catarina Monoespecífica Almeja catarina (Argopecten ventricosus).
Buceo 22
Almeja sifón Monoespecífica Almeja Sifón (Panopea globosa).
Buceo/motobomba 4
Medusa Monoespecífica Medusa Bola de Cañón (Stomolophus meleagris). Red de cuchara 2
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Embarcaciones, métodos y artes de pesca. Las embarcaciones menores utilizadas para el desarrollo de la totalidad de las pesquerías antes mencionadas, están fabricadas a partir de fibra de vidrio, por lo cual son considerablemente livianas e inertes. Sus dimensiones generalmente fluctúan de entre 21 a 26‟ (6.4 – 7.9 m) de longitud total o eslora, de 2.0 a 2.5 m de ancho total o manga y de 0.7 a 1.3 m de altura máxima o puntal. Así mismo, las pangas cuentan con un castillo o plataforma en la parte interior o proa, comúnmente con una tapa en forma de bodega y una sección cerrada como flotador. Cuentan con de tres a cinco bancos que subdividen a la embarcación de manera transversal, además de conferirle rigidez y resistencia al casco. Usualmente el último banco se modifica a manera de rampa en su parte superior (botado), para facilitar el empleo de las redes ante el movimiento de la embarcación. La última sección de la proa es el banco, que funciona como asiento y se encuentra anexo a la popa donde se atornilla el motor. Finalmente, se utiliza como equipo de propulsión un motor fuera de borda, de consumo de gasolina y de dos o de cuatro tiempos, desde 48 hasta 200 caballos de fuerza (Figura II.1).
Por su parte, las características generales (véase Tabla II.2.) de las artes de pesca empleadas, acorde con Cudney-Bueno y Turk-Boyer (1998) con las adecuaciones realizadas por Pérez-Valencia et al. (2011), son las siguientes:
a) Chinchorros. La estructura típica de un chinchorro consta de dos relingas, una
superior y una inferior las cuales unen los extremos de paños de red. Las relingas, a través del boyaje (boyas colocadas a lo largo de la relinga superior) y la plomada (plomos colocados a lo largo de la relinga inferior) sujetan a la red y le dan forma dependiendo del juego que se les dé. De esta manera, se puede variar la forma de la malla, la altura de la red, y su tensión. Los chinchorros están catalogados basándose en la luz de malla (abertura) de la red y de acuerdo al nombre más común que le dan los pescadores a cada chinchorro. Sin embargo, es importante aclarar que para cada red existen variaciones y sus usos pueden ser múltiples.
b) Cimbras. En términos generales, se entiende por cimbras a las artes de pesca
constituidas por una línea madre de la cual cuelgan reinales con anzuelos y carnada. Antes y después de ser utilizada, la cimbra se coloca en una cruceta o tabla de madera, en la cual se cuelga ordenadamente cada anzuelo.
c) Trampas. Son del tipo denominado Chesapeake. Está hecha de una estructura
rígida de varilla corrugada con dimensiones de 40 cm de altura por 60 cm de largo por 60 cm ancho la cual se encuentra envuelta por un malla galvanizada hexagonal cuyas alambres están recubiertos de PVC. Está dividida en dos compartimentos; en el inferior hay cuatro entradas o puertas (una en cada lado). El compartimento superior (llamado matadero) es útil para despejar el piso inferior conforme las jaibas buscando salida pasan es piso de arriba. Cada compartimento bebe tener al menos un excluidor conformado de un anillo de PVC de 2 ½” de diámetro. En el centro del compartimento inferior se coloca el carnadero (donde va la carnada).
d) Buceo. La pesca de buceo es aquélla donde pescador se sumerge en el fondo del
agua cerca de la costa y respira mediante una manguera con boquilla conectada a un compresor de aire en la panga, equipo también conocido como “hooka”. El equipo complementario consta de visor, traje de neopreno, plomada y bolsa.
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Figura II.1. Características generales de las embarcaciones menores empleadas por el
proyecto para el desarrollo de las pesquerías.
Realces Punta
Eslora
Botado
Castillo
Manga
Espei
Realce
Mampara Falca
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Tabla II.2. Características específicas de las artes de pesca empleadas para cada una de las pesquerías desarrolladas por el
proyecto.
Pesquería
Especificaciones de las artes de pesca
Camarón con chinchorro de línea
Cantidad de equipos: uno por embarcación. Luz de malla: 2 ½” y 2 ¾”. Hilo: nylon monofilamento de diámetro mínimo de 0.27 mm. Longitud: 200 m. Encabalgado: entre 60 y 70%. Calado: 50-100 mallas. Relinga: Superior con boyas de plástico rígido y relinga inferior con plomo redondeado, compensado para que la red arrastre ligeramente el fondo, con boyas grandes con banderas a los extremos.
Escama (menor) con chinchorro
Cantidad de equipos: uno por embarcación. Luz de malla: 3 ½”. Longitud: 600 m. Altura: 4 m. Calado: 50 mallas.
Escama (mayor) con cimbra
Número de equipos: uno. Anzuelo: N° 5, 6, 7 u 8. Longitud de la línea madre: hasta 1,500 m. Grosor del rendal: N° 100 y 120 libras. Número de reinales con anzuelos: 300 a 700. Características: con boyas con banderas a los extremos, plomos a los extremos. Carnada: sardina, lisa, chano, peces de la captura incidental.
Tiburón con chinchorro y cimbra
Chinchorro Cantidad de equipos: uno por embarcación. Luz de malla: 3 ½”. Longitud: 366 m (200 brazas). Calado: 25 mallas. Características: redes de profundidad con boya de plástico rígida y plomo en la relinga inferior, en los extremos con boyas con banderas y anclas. Cimbra Cantidad de equipos: una por embarcación. Características: un máximo de 500 anzuelos, con un anzuelo por reinal y reinales con una longitud de hasta 5 m; con una sección de alambrada mínima de 20 cm y un anzuelo recto con un tamaño mínimo igual o superior a 64 mm de largo por 22 mm de abertura o circular o semicircular con un tamaño mínimo igual o superior de 45 mm de largo por 18 mm de abertura.
Lisa con chinchorro
Cantidad de equipos: uno por embarcación. Luz de malla: 3”. Longitud: 220 m (120 brazas). Calado: 25 a 50 mallas.
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Jaiba con trampas
Cantidad de equipos: generalmente 70 por embarcación. Material de la trampa: alambre plastificado. Tamaño: 40 cm altura, 60 cm largo y 60 cm ancho. Entradas: 4 (una a cada lado). Divisiones: 2. Aberturas de escape: 2 anillos de PVC de 2½” de diámetro. Carnada: esqueletos de manta y guitarra, lisas, cabezas de camarón, sardinas o macarela.
Caracol con buceo
Cantidad de equipos: uno por embarcación. Características: compresor de aire conectado a un tanque o madrina de la cual parte una manguera con un regulador; visor; cinturón con plomos; traje de neopreno; bolsas de red. Buzos: uno. Método de recolección: manual.
Callo de hacha con buceo
Cantidad de equipos: uno por embarcación. Características: compresor de aire conectado a un tanque o madrina de la cual parte una manguera con un regulador; visor; cinturón con plomos; traje de neopreno; bolsas de red. Buzos: uno. Método de recolección: manual.
Pulpo con buceo
Cantidad de equipos: uno por embarcación. Características: compresor de aire conectado a un tanque o madrina de la cual parte una manguera con un regulador; visor; cinturón con plomos; traje de neopreno; bolsas de red; gancho de varilla corrugada. Buzos: uno. Método de recolección: manual.
Almeja Catarina con buceo
Cantidad de equipos: uno por embarcación. Características: compresor de aire conectado a un tanque o madrina de la cual parte una manguera con un regulador; visor; cinturón con plomos; traje de neopreno; bolsas de red. Buzos: uno. Método de recolección: manual.
Almeja sifón con buceo y motobomba
Cantidad de equipos: uno por embarcación. Características: compresor de aire conectado a un tanque o madrina de la cual parte una manguera con un regulador; visor; cinturón con plomos; traje de neopreno; bolsas de red; motobomba. Buzos: uno. Método de recolección: manual.
Medusa Bola de Cañón con red de cuchara
Cantidad de equipos: generalmente tres por embarcación. Material del aro: metálico. Diámetro del aro: .50 m. Longitud del mango: de 1 hasta 1.5 m. Luz de malla: 5”.
Fuente: elaboración propia con base en los permisos de pesca comercial de SAGARPA; Cudney-Bueno y Turk-Boyer (1998); Pérez-Valencia et al. (2011).
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Los siguientes métodos de pesca definidos para cada una de las pesquerías desarrolladas por el proyecto, de igual manera se describen tomando como referencia el trabajo de Cudney-Bueno y Turk-Boyer (1998) con adecuaciones propias:
a) Método para la pesquería de camarón azul. Se captura empleando el chinchorro
de línea, un chinchorro eficaz en aguas de fuertes corrientes, tales como el AGC. Los chinchorros de línea se colocan de fondo, aprovechando generalmente las mareas vivas de cada mes, así como los flujos y reflujos diarios. Durante dicha pesquería se llegan a realizar varios lances a la luz de un día. La permanencia de los lances dependen de factores como: los vientos, la dinámica de las corrientes, la intención de desplazamiento durante una faena de las pangas, la cantidad de la captura objetivo en proporción a la pesca incidental de escama2.
b) Método para la pesquería de bola de fuego. La captura se dirige a la fase planctónica (medusa) y su disponibilidad es desde marzo a junio en las costas de Sonora. Para subir las medusas a bordo se utiliza una red cuchara que consiste en un aro metálico montado en un mango de 1.5 a 2.0 metros de largo. La captura es selectiva. En el aro metálico se coloca una malla de 3 a 5 pulgadas de luz, la cual recoge las medusas más grandes y minimiza la captura incidental de otras especies. Cada unidad de pesca (panga) lleva a bordo hasta tres redes cuchara. La operación de este arte de pesca es sencilla, ya que las medusas generalmente nadan en grupos numerosos por la superficie a muy baja velocidad, por lo que es posible capturar más de un animal de un solo “cucharazo” y no se requiere capacitación alguna para la maniobra. La captura de medusa se efectúa frente a las bocas de los esteros y generalmente en los primeros 500 m de distancia de la playa ó 3 m de profundidad, con arribazones ocasionales hasta la línea de costa. La capacidad de acarreo de las embarcaciones menores varía entre 1.5 y 5 toneladas de medusa. Las jornadas de pesca suelen ser agotadoras, considerando que se realizan bajo el rayo del sol y que se deben capturar grandes cantidades para obtener utilidades atractivas.
c) Método para la pesquería de jaiba. Dentro de las artes de pesca más comunes
para esta pesquería se encuentran los aros, las fisgas o sacadores, y las trampas o nasas del tipo Chesapeake (cubo metálico de 60 x 60 x 40 cm) o similares; siendo estas últimas las que conforman el sistema de pesca más utilizado en la pesquería artesanal de jaiba del norte del Golfo de California (González, Ramírez et al. 1996, Molina 1999, Molina-Ocampo et al. 2006). La pesca de jaiba empezó alrededor de 1994 en el AGC y se utiliza principalmente en zonas someras arenosas. La especie que sostiene principalmente la pesquería en el AGC es C. bellicosus, mientras que C. arcuatus solo se presenta en proporciones aproximadas de 5% en las capturas y se registra junto con C. bellicosus. En las zonas de pesca del El Tornillal a Bahía Adair se captura principalmente durante las mareas vivas (Molina-Ocampo et al. 2006). En Puerto Peñasco se colocan en el fondo en zonas arenosas relativamente someras entre 2 y 8 brazas de profundidad. A cada trampa se le coloca un cabo y una botella de plástico como boya, lo cual sirve para localizarla al día siguiente de ser colocada. Por lo general
2 Es importante mencionar que durante la temporada de camarón azul, la alta captura incidental de
escama resulta inviable en términos eco nómicos, ya que su precio es considerable más bajo que la de este peneido, además de la demora que conlleva desenredar el chinchorro.
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se revisan las trampas a diario pero en mareas muertas y en invierno se revisan cada dos días. Para la extracción de la trampa el motorista se acerca a la boya y levanta manualmente la trampa. A cada trampa se le coloca carnada, la cual puede ser esqueletos de manta y guitarra, lisa, cabezas de camarón y sardina. Todas las trampas son revisadas diariamente durante el amanecer, se obtiene la captura, se cambia la carnada y se vuelve a colocar la trampa en el mismo sitio.
d) Método para la pesquería de caracol. El caracol chino negro es buscado por los buzos cuando empieza a calentar el agua, debido a que es cuando se agrupa (“bultos”) para reproducirse, principalmente en zonas arenosas aledañas a tepetates, áreas de suelo rocoso continuo de poco grosor. A diferencia de otras pesquerías (callo o pulpo), donde se conoce su localización, en esta el buzo tiene que nadar grandes distancias antes de encontrar los bultos de caracol, cargando consigo una bolsa y cuchillo para callo, recogiendo cualquiera que se vaya encontrando en el camino. Una vez localizados los bultos de caracol, el cabo de vida recibe la señal (jalan la manguera o una cuerda) para que haga llegar las bolsas caracoleras (hechas de rin de bicicleta y trozos de redes viejas) a los buzos, las cuales se llenan lo más rápido posible para asegurar que otro buzo no llegue al mismo sitio. Además de poderse llevar parte de la captura, la presencia de otros buzos cerca implica dificultades en la maniobra de pesca ya que se pueden enredar las mangueras. Algunas veces, para reducir conflictos de territorios de pesca el pescador “aparta” su bulto de caracol poniendo las bolsas alrededor de éste. Cada vez que se llena una bolsa se le hace la señal al cabo de vida para que la suba y vacíe los caracoles en la panga. Una vez vaciados, vuelve a mandar la bolsa al buzo si la requiere. En muchas ocasiones, sólo es necesario encontrar un bulto para que el viaje de pesca rinda con ganancias considerables. El caracol chino rosa se pesca de la misma manera, con la diferencia de que éste se empieza a buscar en cuanto escasea el negro, generalmente a principios de agosto.
e) Método para la pesquería de callo de hacha. La extracción del callo de hacha se
realiza empleando buceo semiautónomo tipo hooka, involucrando a tres tripulantes: el buzo, el cabo de vida y el motorista. La distancia recorrida hasta sus principales bancos en el litoral sonorense, son de aproximadamente una hora, y el tiempo de buceo oscila entre las cuatro y las seis horas dependiendo de la abundancia de organismos. El buzo emplea como arte de pesca un pico calero, artefacto de metal con punta en forma de flecha que se inserta dentro de los organismos que están enterrados en el fondo marino, y con el cual se sujeta y facilita su extracción. Una vez depositados en la embarcación, el siguiente paso es el sacrificio del organismo fuera de borda, al separar las conchas (valvas) para obtener el músculo abductor llamado comúnmente “callo”.
f) Método para la pesquería de almeja Catarina. La extracción de la almeja catarina se realiza empleando buceo semiautónomo tipo hooka, involucrando a tres tripulantes: el buzo, el cabo de vida y el motorista. Su aprovechamiento se realiza en los pocos bancos que se encuentran en el litoral sonorense, y el tiempo de sumersión del buzo depende de la abundancia de organismos. La captura se realiza de manera manual, mediante la observación visual y mediante el empleo de una bolsa de colecta llamada “jaba”.
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g) Método para la pesquería de almeja sifón. La extracción de la almeja generosa se realiza empleando buceo semiautónomo tipo hooka, en el cual mediante un compresor a bordo se provee aire al buzo y con una motobomba de agua a presión el buzo observa visual y recolecta manualmente a los organismos que tienen la capacidad de contraerse y extenderse hacia la superficie del sustrato dejando un orificio que sirve de referencia para localizarles. A lo largo del litoral de Sonora se encuentran importantes bancos de la especie Panopea globosa. En esta pesquería participan además del buzo, el "cabo de vida", que suministra el aire y se comunica con el buzo mediante una cuerda o cabo sujeto a la jaba (malla o recipiente de colecta) y el motorista, que maneja la motobomba y controla la embarcación.
h) Método para la pesquería de lisa. Se capturan con redes agalleras de luz de malla de 3 ½ pulgadas, tendiendo el chinchorro en esteros durante las mareas bajas y recogiendo cuando pasan las mareas altas. Entre los pescadores de mayor tradición, aun suelen practicarse los encierros
i) Método para la pesquería de tiburón. La totalidad de las especies se pescan
utilizando el chinchorro tiburonero, principalmente tendido de manera superficial, aunque aún hay quienes permanecen arraigados a tenderlo anclado y de fondo. En las mareas muertas, algunas veces son empleados los garretes. Convencionalmente, la captura de tiburones inicia buscando pescaderos en aguas someras aledañas a la costa, desde las 10 brazas internándose hasta las 35 brazas. Actualmente prácticamente se ha erradicado la práctica de tender las redes toda la noche y recoger al día siguiente, por la usurpación a manos de la pesca ilícita; hoy en día, las salidas a esta pesquería inician en la madruga y terminan llegada la noche.
j) Método para la pesquería de escama (menor). Para esta pesquería se emplean los chinchorros escameros de 4” y los chinchorros tiranteados, ya sea dependientes de las corrientes a la deriva o en el fondo y anclados a una profundidad oscilada de 5 a 20 brazas con periodos promedio de 2-5 horas por lance. Esta pesquería generalmente se dirige a especies objetivo, en función de las altas concentraciones o corridas, principalmente, de las siguientes especies: sierra, chano, corvinetas, lenguados, mantas y guitarras.
k) Método para la pesquería de escama (mayor). Esta pesquería se desarrolla en las profundidades de la zona marina a través del empleo de la cimbra, la cual se tiende durante las subidas y bajadas de marea del mes, ya que requiere de fuertes corrientes para ser eficiente. Los pescadores salen generalmente a las 4 de la mañana, ya que los sitios de pesca de la baqueta y el extranjero se encuentran a 1.5 hrs del puerto; durante el camino se va preparando las carnadas (mojarras, pámpanos, anguilas, sierras, curvinas y chanos). Una vez en el caladero, se suelta una sonda para cerciorarse que el tipo de suelo es adecuado para baqueta. Si todo está bien, comienza el lance o cimbraso. Al tiempo en el que el motorista avanza la panga lentamente, el tripulante cuidadosamente pone la carnada en los anzuelos y los echa al agua uno por uno. La cimbra se coloca atravesada a la corriente para que no se enrede. Cada cimbra tarda aproximadamente 10 minutos en llegar al fondo y se deja que corra con la corriente unos 45 minutos, se pueden dejar con la corriente entre 1 y 3 h. Teniendo las condiciones ideales, se pueden llegar a hacer entre 8-10 cimbrasos, pero generalmente se hacen entre 4 y 5.
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Temporadas de pesca y volúmenes de captura.
En términos generales, la pesca en Puerto Peñasco se lleva a cabo durante todo el año,
ajustándose a las vedas temporales del camarón azul, del 10 de marzo al 20 de
septiembre de cada año; la jaiba, del 1 de mayo al 15 de junio en hembras y del 1 de
mayo al 30 de junio en machos y organismos mayores a 1 año; la lisa, del 1 de diciembre
al 31 de enero; las rayas, del 1 de mayo al 31 de julio; así como los tiburones del 1 de
mayo al 31 de julio , todas ellas en las zonas autorizadas por los permisos de pesca
(SAGARPA, 2014). Aunada a las vedas establecidas, la dinámica pesquera se ajusta
completamente a la distribución y abundancia de sus diferentes especies objetivo. La
pesquería del camarón se lleva a cabo intensivamente durante el periodo comprendido
de septiembre a diciembre. La pesquería de escama en términos generales se lleva a
cabo durante todo el año, a excepción de la veda de rayas, y con intensidades
particulares para la pesquería de sierra de junio a septiembre, de guitarra de abril a julio y
de rayas de febrero a abril. La pesca de las diferentes especies de tiburones también se
lleva a cabo durante todo el año, a excepción de la temporada de veda, y con
intensidades de captura particulares para los meses de septiembre y octubre y para el
periodo comprendido de enero a abril. La pesquería de jaiba se lleva a cabo de julio a
noviembre y de febrero a abril, con incremento en las intensidades de captura durante
abril y de julio a septiembre, respetando las temporadas de veda respectivas. Finalmente,
las pesquerías del resto de moluscos se llevan a cabo principalmente en temporada fría, a
excepción de la almeja sifón que se extrae durante todo el año (Tabla II.3).
Figura II.2. Captura anual promedio de las principales pesquerías desarrolladas por el
proyecto (elaboración propia, a partir de los datos disponibles en los arribos 2012, 2013 y
2014 proporcionados por la Oficina Local de Pesca).
17
1447
79 79.6 57.5
1250
0
200
400
600
800
1000
1200
1400
1600
Camarón Escamamenor
Escamamayor
Tiburón Lisa Caracol
Vo
lum
en
de c
ap
tura
(to
nela
das)
Pesquerìas
16
Tabla II.3. Temporalidades totales y específicas de pesca de las diferentes pesquerías
desarrolladas por el proyecto.
Pesquería Mes
Ene. Feb. Mar. Abr. May. Jun. Jul. Ago. Sep. Oct. Nov. Dic.
Camarón
Escama mayor
Escama menor
Tiburón
Lisa
Jaiba
Caracol
Almeja catarina
Almeja sifón
Callo de hacha
Pulpo
Medusa
Temporada total Temporada específica
El camarón, debido a sus escasas semanas de pesca, presenta volúmenes de
captura muy bajos en Puerto Peñasco, en comparación con el desarrollo de esta
pesquería en las localidades homologas de San Felipe y Golfo de Santa Clara. Las
pesquerías con mayores volúmenes de captura en el proyecto, son el caracol chino negro
y la escama menor (dentro de la que destacan el chano, el lenguado, la manta y la
guitarra). La pesquería de escama mayor, no obstante no presentar volúmenes tan
considerables de captura, representa una gran importancia comercial para la localidad,
debido al alto precio en el mercado que llegan alcanzar tanto las baquetas como los
extranjeros (Figura II.2). En términos generales, la captura de moluscos diferentes al
caracol es baja, destacando por su valor en el mercado nacional el callo de hacha, y en el
mercado de exportación la almeja sifón
17
Áreas de pesca.
Por el propio rasgo itinerante de la pesca ribereña en el Norte del Golfo de California,
resulta complejo señalar con exactitud las áreas de aprovechamiento de sus diferentes
localidades pesqueras ribereñas. Sin embargo, dentro de dicho complejo deambular
espacial y temporal por estas aguas marinas y costeras, sobre todo los pescadores más
experimentados, poseen una serie de conocimientos ecológicos locales transmitidos
generacionalmente (Berkes, 1993) entre los que destacan el reconocimiento de las
condiciones ambientales, el advenimiento de las corridas de peces y el agrupamiento de
moluscos, así como la ubicación de una gran cantidad de pescaderos o “caladeros”.
Precisamente, sobre este último aspecto se fundamentan las destacadas contribuciones
académicas de Cudney-Bueno y Turk-Boyer (1998), Rodríguez Quiroz (2010) y Moreno-
Báez (2010, 2013), dentro de las cuales las dos primeras de ellas documentan las zonas
tradiciones de pesca de las localidades de San Felipe, Golfo de Santa Clara y Puerto
Peñasco, mientras que los últimos involucran a prácticamente la totalidad de las
localidades pesqueras del NGC, respectivamente.
El trabajo de Cudney-Bueno y Turk-Boyer (1998), lo empleamos para localizar los
principales caladeros empleados por los pescadores ribereños del NGC (Figura II.3). Por
su parte, los trabajos de Rodríguez Quiroz (2010) y Moreno-Báez (2010, 2013)3, debido a
que son los que han documentado información más actual sobre las zonas tradicionales
de pesca en el NGC, los utilizamos para indicar las principales áreas en donde el sector
pesquero ribereño de puerto peñasco ha llevado a cabo históricamente sus pesquerías
(Figura II.4, Figura II.5, y Figura II.6). En este sentido, resulta importante señalar que la
información plasmada sobre las representaciones gráficas, no expresan fielmente la
dinámica actual de la flota ribereña de Puerto Peñasco, ya que como se mencionó
anteriormente los datos provienen de años en donde recién se establecía el área de
refugio de la vaquita marina (DOF, 2005); con los años, los pescadores han ido
adquiriendo mayor conocimiento y conciencia de las implicaciones de dicha regulación,
aunado a que se ha incrementado considerablemente la inspección y vigilancia en la
zona. De igual manera, es oportuno mencionar que con el reciente establecimiento del
Acuerdo de suspensión temporal de artes específicas en el NGC para la protección de la
vaquita marina (DOF, 2015), se reconfigurarán nuevamente las áreas de pesca.
Así, como se puede apreciar en la Figura II.4, la pesquerías de camarón de Puerto
Peñasco, se han desarrollado tradicionalmente sobre las aguas costeras de la Bahía
Adair; el tiburón, la manta y la sierra se llevan a cabo principalmente en los caladeros El
Borrascoso y Los picachos; la pesquería de chano se desarrolla prácticamente en todo el
caladero de Los Picachos al igual que las pesquerías de corvinas, que incorporan,
además, una porción del caladero El Canal. Por su parte, en la Figura II.5 y Figura II.6, se
aprecia como las principales pesquerías de moluscos y crustáceos (pulpo, caracol,
almejas y jaiba) se desarrollan principalmente en Bahía Adair y en una pequeña porción
3 Rodríguez Quiroz (2010) recuperó la información de encuestas realizadas en 2005, mientras que
Moreno- Báez (2010, 2013) son resultado del proyecto interinstitucional “PANGAS”, mismo que condujo trabajo de campo durante 2005 y 2006 y corroboro resultados en 2007 y 2008.
18
del caladero conocido como La Pinta, en la región sur de la RBAGCyDRC colindante con
el litoral sonorense (Figura II.3).
Caladero 1: Desemboque; Caladero 2: Isla San Jorge; Caladero 3: La Salina; Caladero 4: La Pinta; Caladero 5: Las Conchas; Caladero 6: Bahía Adair; Caladero 7: El Borrascoso; Caladero 8: Los Picachos; Caladero 9: El Canal; Caladero 10: Las Islas; Caladero 11: El Machorro; Caladero 12: El Piedrón; Caladero 13: El Canalón; Caladero 14: El Coloradito; Caladero15: Puertecitos
Figura II.3. Principales caladeros identificados para la pesca ribereña en el Norte del
Golfo de California (Cudney-Bueno y Turk-Boyer, 1998)
19
Zonas ecológicas de la pesca.
Las pesquerías de camarón azul, tiburón, jaiba, pulpo, medusa bola de cañón y la escama
mayor se desarrollan generalmente en la zona demersal. La lisa se desarrolla en la
columna de agua o zona pelágica. La escama (menor) se desarrolla principalmente en la
zona demersal, y en menor medida en la zona pelágica. Finalmente, la pesquería de
caracol chino, almeja catarina, almeja sifón y callo de hacha se llevan a cabo en la zona
bentónica.
(A) Chano; (B) Manta y Tiburón; (C) Camarón azul; (D) Sierra;
(E) Corvinas (PP) Pesca total
Figura II.4. Zonas tradicionales de las principales pesquerías desarrollada por el sector
ribereño de Puerto Peñasco (tomado de Rodríguez Quiroz, 2010).
20
A B
Figura II.5. Zonas tradicionales de las pesquerías ribereñas de pulpo (A) y jaiba (B) en el Norte del Golfo de California (tomado de
Moreno Báez, 2010). La importancia relativa de las zonas se agudiza a mayor intensidad.
21
A B
Figura II.6. Zonas tradicionales de las pesquerías ribereñas de baqueta (A) y caracol (B) en el Norte del Golfo de California (tomado
de Moreno Báez, 2010). La importancia relativa de las zonas se agudiza a mayor intensidad.
22
II.1.2. Justificación. II.1.3. Ubicación física. Se considera como límite técnico del proyecto, al área total dentro de la RBAGCyDRC en donde se desarrollarán las actividades pesqueras ribereñas. Por su parte, el límite socioeconómico queda definido por las zonas en donde se realizan las operaciones precaptura y en donde se arriban los productos pesqueros. Consideramos como límite ambiental, a los rasgos oceanográficos y bio-ecológicos con los que interactuará el proyecto. Finalmente, los límites administrativos aluden a la presencia de ANP y demás regulaciones territoriales que delimitan al proyecto. Límite técnico. El presente proyecto desarrollará actividades pesqueras ribereñas sobre un área aproximada de 200,000 ha, todas ellas dentro de la Zona de Amortiguamiento de la RBAGCyDRC. Dentro de la poligonal que define el área de influencia del proyecto, los vértices señalan a los siguientes puntos de referencia: (A) Punta Gorda, (B), Límite norte oriental del Área de Refugio (C), Traslape oriental Área de Refugio y límite sur RBAGCyDRC, (D) Bahía La Cholla, (E) Salinera Bahía Adair (Figura II.7). Límite socioeconómico. La totalidad de las actividades precaptura del proyecto (reparación y mantenimiento de embarcaciones, manufactura y reparación de artes de pesca, compra de equipamiento, etc.), así como el sitio de desembarque y el puerto de arribo se encuentran dentro de la marcha urbana del municipio de Puerto Peñasco, Sonora (Figura II.7). Límite ambiental. Las actividades pesqueras del proyecto se realizarán en mayor medida sobre las aguas someras de la Costa Este, y en menor medida sobre una pequeña porción de las aguas profundas de la Zona Central del NGC. En términos generales, el NGC se caracteriza por presentar pendientes ligeras en sus zonas costeras, y una cuenca pronunciada en su región central, ambas con temperaturas extremas, gruesos sedimentos, subzonas de alta turbidez, altas tasas de evaporación, alta salinidad, grandes amplitudes mareales y oleaje exiguo. Éstas, a su vez, experimentan fuertes oscilaciones estacionales, entre los que destacan el incremento de la temperatura y la salinidad en verano, y un patrón de corriente termodinámica que se mueve en sentido contrario a las manecillas del reloj durante ésta estación. En términos bio-ecológicos, las aguas costeras y marinas del NGC se caracterizan por su gran riqueza de especies, resaltando la presencia de 18 especies de mamíferos marinos y 149 especies de peces, así como por representar áreas de reproducción, crianza y desove, hábitats específicos, y uno de los mares con mayor productividad primaria del mundo (Véase el Capítulo IV, para una descripción más detallada del SAR).
23
Límite administrativo. La totalidad de las actividades pesqueras del presente proyecto se realizarán dentro de la RBAGCyDRC, misma que se ubica en los estados de Baja California y Sonora, al noroeste de la República Mexicana y a menos de 60 km de los límites fronterizos con los Estados Unidos de América. El ANP posee una superficie total de 934,756 ha, de las cuales aproximadamente el 82.5% constituye la Zona de Amortiguamiento y el 17.5% restante corresponde a la Zona Núcleo denominada Delta del Río Colorado. Acorde con su zonificación (CONANP, 2007), el proyecto se llevará a cabo puntualmente en las siguientes cuatro subzonas (veasé en el Capítulo III, la Figura III.2):
1. Subzona de aprovechamiento sustentable de los recursos naturales Aguas Costeras. Está conformada por dos polígonos constituidos por la porción costera de las aguas de la zona de amortiguamiento desde la línea de costa y hasta la isóbata de 5 brazas o una distancia a la costa de 3 millas náuticas, con una superficie total de 69,655.81 ha, los polígonos son: el primero localizado frente a la costa del estado de Sonora entre el GSC y Punta Borrascosa y el segundo frente a las costas de Baja California correspondiente a la región norte de SFE desde el límite de la Zona Núcleo frente al Estero La Ramada y hasta el límite sur de la Reserva. En esta subzona es permitido el uso de artes de pesca selectivas, y no está permitida la pesca mediante la técnica de arrastre.
2. Subzona de aprovechamiento sustentable de los recursos naturales Aguas Marinas Alfo Golfo de California. Esta subzona tiene una superficie total de 216,059.27 ha y es el sitio con mayor actividad pesquera. La subzona es compatible con la pesca comercial en embarcaciones menores y mayores, debiendo tomarse las mejores medidas técnicas y tecnológicas que permitan reducir los impactos negativos sobre los ecosistemas y sus especies, así como el uso de los indicadores y métodos de cuantificación óptimos para definir el comportamiento de los ecosistemas con especies bajo aprovechamiento pesquero.
3. Subzona de aprovechamiento sustentable de los recursos naturales Aguas Costeras Bahía Adair. Abarca 72,630.96 ha y corresponde a una superficie marina ubicada frente a las costas del municipio de PPE, al sureste de la Reserva, el límite de esta Subzona incluye a la Zona Federal Marítimo Terrestre del municipio de PPE. La subzona es compatible con las actividades pesqueras mediante el uso de artes selectivas como trampas, boceo y otras actividades pesqueras que no impliquen la técnica de arrastre.
4. Subzona de aprovechamiento sustentable de los recursos naturales Humedales Bahía Adair. Corresponde a una superficie de 18,106.16 ha, integrada tanto por ambientes marinos como terrestres de importancia por su capacidad como sitios de alimentación y reproducción de numerosas especies marinas y aves. La subzona es compatible con actividades pesqueras mediante artes selectivas y no selectivas con bajo riesgo de captura incidental. No se permite el establecimiento de campamentos pesqueros temporales.
Por su parte, no se pretenden desarrollar ningún tipo de actividad pesquera dentro del
Área de Refugio de la vaquita marina, ni se llevarán a cabo actividades pesqueras con
24
redes de enmalle o cimbras, dentro del polígono de exclusión de dichas artes específicas en el NGC (Figura II.7).
Figura II.7. Ubicación física del proyecto.
25
II.1.4. Inversión requerida. En términos generales, la inversión requerida para el desarrollo del proyecto se comprende de los siguientes aspectos: capital requerido para el inicio de las operaciones pesqueras, los costos anuales de las operaciones pesqueras, los ingresos pesqueros anuales y el costo de instrumentación de la manifestación de impacto ambiental. Capital operativo inicial pesquero. La totalidad de los concesionarios y permisionarios incluidos en el presente proyecto, cuentan con el equipo de trabajo y las artes de pesca para realizar la actividad económica. Dicho capital inicial está constituido por las embarcaciones menores, motores, chinchorros, cimbras, trampas, hookas y otros equipos auxiliares (Tabla II.4). Tabla II.4. Capital operativo inicial pesquero del proyecto.
Concepto del equipamiento
Capital por embarcación ($)
Número de embarcaciones
Totales ($)
Motores 300,000 135 47‟250,000.00 Pangas 1,150,000 135 155‟250,000.00 Chinchorros de línea 60,000 6 36,000.00 Chinchorros escameros 70,000 25 1‟750,000.00 Chinchorros liseros 20,000 5 200,000.00 Cimbras 145,000 14 2‟030,000.00
Trampas 480,000 74 35‟520,000.00 Hookas 190,000 105 19‟950,000.00 Equipos auxiliares 120,000 4 480,000.00
Gran total 262’466,000.00
Fuente: elaborado a partir de Pérez-Valencia et al (2011).
Costo operativo anual pesquero. La actividad pesquera de ribera de Puerto Peñasco, genera gastos operativos corrientes por conceptos de combustible, aceite, carnada, mantenimiento de los equipos y las artes de pesca, así como de alimentación para los trabajadores del mar durante las faenas de pesca. En promedio, el número de viajes que lleva a cabo cada embarcación al año, en función de las condiciones del viento y las mareas para cada especie, es de 76. En cada viaje se realiza un gasto de aproximadamente $800 por concepto de combustible, $200 por concepto de aceite, un estimado de $500 para las pesquerías que requieren de carnada, $210 por concepto de alimentación, y un costo de mantenimiento anual del equipamiento de pesca estimado por los titulares de los permisos de $100,000. Tomando en cuenta las 135 embarcaciones, en la Figura II.5 se plasman los costos operativos anuales del proyecto.
26
Tabla II.5. Costos operativos pesqueros anuales del proyecto.
Concepto del gasto corriente Costo del total de las
embarcaciones
Combustible $10‟125,000.00 Aceite $2‟160,000.00 Mantenimiento del equipamiento de pesca
$6‟750,000.00
Carnada $1‟350,000.00 Alimento $2‟700,000.00
Total $23’085,000.00
Fuente: elaborado a partir de Rodríguez Quiroz (2010) para un promedio de 100 viajes de pesca anuales por embarcación.
Ingresos pesqueros anuales. Para determinar los ingresos pesqueros anuales del proyecto, se deben considerar -en primera instancia- los volúmenes totales declarados de las principales pesquerías del sector ribereño de Puerto Peñasco [camarón, escama menor, escama mayor, tiburón, lisa, caracol y otras (callo de hacha, almeja Catarina, almeja sifón, pulpo, jaiba y medusa bola de cañón)]. Es importante recalcar que las embarcaciones incorporadas al presente proyecto, representan aproximadamente el 80% del sector regularizado, por lo que consideramos esta relativa para determinar el volumen productivo del proyecto. Los precios están determinados por el valor en playa, en donde se arriban los productos que, al comercializarles, deben pagar los impuestos respectivos. Así, el ingreso pesquero final se obtiene del descuento de los impuestos al total productivo neto, como se observa en la Figura II.6. Tabla II.6. Ingresos pesqueros anuales del proyecto.
Pesquerías
Volumen total
producción (kg)
Volumen producción
80% (kg)
Precio por kg
($)
Total productivo
neto ($)
Descuento impuestos
($)
Ingreso pesquero final ($)
Camarón 17,000 13,600 280 3,808,000 525,241 3,282,758 Escama me 1,447,000 1,157,600 20 23,152,000 3,193379 19,958,620 Escama ma 79,000 63,200 70 4,424,000 610,206 3,813,793 Tiburón 79,600 63,680 25 1,592,000 219,586 1,372,413 Lisa 57,000 45,600 10 456,000 62,896 393,103 Caracol 170,000 1,000,000 7 7,000,000 965,517 6,034,482 Jaiba 681,000 Otras 60,000 48,000 66 3,168,000 436,965 2,731,034
Totales 2’989,600 2’391,680 -- 43’600,000 6’013,790 37’586,203
Fuente: elaborado a partir de los arribos 2012, 2013 y 2014
proporcionados por la Oficina Local de Pesca.
27
Costo de la manifestación de impacto ambiental. Desarrollar las actividades pesqueras dentro de la RBAGCyDRC bajo los términos de un proceso de evaluación de impacto ambiental, representa para el sector ribereño de Puerto Peñasco cobijar económicamente la asesoría técnica por concepto de la redacción de la MIA y por su seguimiento durante el periodo de 2015-2016. De igual manera, representa el cumplimiento del pago de derechos ante la DGIRA para acceder al proceso de evaluación de impacto ambiental; se está contemplando además el resguardo de una cantidad económica adicional para cubrir cualquier disposición correctiva que pueda llegar a surgir del proyecto (Tabla II.7). Tabla II.7. Costos estipulados en la instrumentación de la manifestación de impacto ambiental.
Rubro Monto
Redacción del manuscrito.
$200,000
Pago de derechos de evaluación de impacto ambiental.
$77,000
Entrega de reportes de seguimiento y cumplimiento del oficio resolutivo.
$175,000
Fondo para instrumentar posibles medidas correctivas.
$100,000
Total
$552,000
Restando al ingreso pesquero final ($37‟586,203.00) los costos operativos totales ($23‟085,000.00) y la mitad de los costos de la instrumentación de la manifestación de impacto ambiental ($276,000.00), el proyecto presenta una rentabilidad anual de ($14‟225,203.00). Además, debido a que el sector cuenta con el capital operativo inicial y mantiene importantes relaciones con mercados nacionales e internacionales, así como es una importante fuente de abasto de los mercados locales, los riesgos de inversión del proyecto son sumamente moderados. Si a los puntos expuestos con antelación, le sumamos que el proyecto representa la actividad económica principal para un aproximado de 400 familias, éste inminentemente debe ser aprobado en su dimensión económica. II.2. Información Sectorial. Los arribos históricos de la pesca ribereña en el NGC indican que en conjunto, las localidades de San Felipe, Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, en promedio han capturado anualmente 2,574 t (Tabla II.8). Dicha captura total se distribuye en un total de 71 especies, de las cuales no todas se extraen de la RBAGCyDRC.
28
Por su parte, los arribos para los últimos tres años proporcionados por la Oficina Local Pesca, indican que hoy en día exclusivamente el sector ribereño de puerto peñasco captura anualmente 1,910 t con un valor de la producción de 47 MDP, distribuidos en un total de 45 especies, de las cuales 31 corresponden a especies objetivo y 14 a especies incidentales con interés comercial. Dentro del total productivo, en conjunto las pesquerías de escama menor y caracol, representan cerca del 85% (Figura II.8). Por su parte, las pesquerías de camarón, escama menor y escama mayor, en conjunto significan el 84% del valor total de la producción (Figura II.9).
Figura II. 8. Porcentaje de la captura anual ribereña de las principales pesquerías desarrolladas por el proyecto.
Figura II.9. Porcentaje del valor total de la producción ribereña de las principales pesquerías desarrolladas por el proyecto.
0.89%
75.70%
4.16%
4.16%
3.01%
8.90% 3.14%
Camarón
Escama menor
Escama mayor
Tiburón
Lisa
Caracol
Otras
10.15%
61.75%
11.80%
4.07%
1.21%
2.53% 8.45%
Escama menor
Escama mayor
Tiburón
Lisa
Caracol
Otras
29
Tabla II.8. Captura histórica y captura promedio anual en la pesquería de las principales especies objetivo de los sectores ribereños de San Felipe, Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco.
Año Camarón Curvina Golfina
Chano Jaiba Sierra Tiburón Lenguado Mantas Guitarra Caracol Chino
Almeja catarina
Baqueta Lisa Pulpo tripa
1991 -- 1 -- -- 112 43 -- -- 5 -- -- -- 23 -- -- 1992 68 4 645 -- 60 -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- 1993 74 32 1,138 -- 131 135 -- -- 7 -- -- -- 10 -- -- 1994 125 177 1,246 -- 316 94 -- -- 3 -- -- -- -- -- -- 1995 275 561 582 -- 227 36 -- 3 6 -- -- -- 13 -- -- 1996 374 1,278 890 -- 334 74 -- 34 10 -- -- -- 20 -- -- 1997 204 2,159 689 14 453 84 -- 12 2 -- -- -- 16 -- -- 1998 165 2,802 2,890 23 482 191 77 123 128 -- -- 119 15 1 -- 1999 627 3,536 6,802 46 639 136 113 138 148 -- 2 134 27 1 6 2000 549 3,015 869 140 817 139 74 270 143 -- 329 38 25 2 14 2001 615 2,755 1031 349 587 93 53 248 153 -- 47 58 26 3 5 2002 560 4,485 556 123 341 56 46 188 243 -- -- 24 7 2 3 2003 843 2,332 870 109 522 45 36 200 213 -- 90 30 13 -- 1 2004 746 1,612 1,826 1,320 739 734 487 634 709 74 408 67 8 8 2 2005 589 1,612 1,447 1,284 1,044 715 477 607 640 163 8 57 2 18 -- 2006 848 2,405 1,717 1,004 797 800 382 270 527 258 63 33 2 10 3 2007 899 2,948 1,616 1,423 520 1,084 509 418 509 238 20 41 3 8 3 2008 744 47 130 1,387 28 853 538 295 399 228 25 42 -- 6 -- 2009 -- 30 106 1,295 7 537 155 90 120 204 -- 38 -- 3 --
Hist. 8,282 31,691 20,138 8,417 8,155 5,850 2,942 3,529 3,964 1,164 992 683 209 63 39
Prom. 460 1,668 1,119 601 429 308 245 235 209 106 110 57 13 5 5
Fuente: Pérez-Valencia et al. (2011).
Nota: dentro de los datos se encuentran inmiscuidos arribos de la flota de altura, sobre todo de camarón.
30
II.2.1. Desarrollo histórico de las principales pesquerías del proyecto y niveles de explotación que han alcanzado. Desarrollo histórico de la pesquería de camarón. El origen de la pesca ribereña de camarón azul en el AGC está muy relacionado con la “flota mediana” -de los años 30‟s- de las poblaciones locales, dirigida principalmente a las pesquerías de totoaba y camarón (Cudney-Bueno y Turk-Boyer 1998; García-Juárez, 2009). Conforme la disponibilidad extractiva de totoaba fue mermando durante la década de los 40‟s, se fue incrementando proporcionalmente el esfuerzo pesquero del camarón, hasta el grado de constituir las primeras cooperativas de barcos camaroneros entre 1936 y 1945 (McGuire y Greenberg 1993). A principios de los 60‟s, pescadores provenientes de Sinaloa recién domiciliados en Puerto Peñasco, comenzaron a remplazar los “changos de arrastre” de las embarcaciones medianas, por atarrayas empleadas en embarcaciones menores. El sector pesquero ribereño se fue consolidando hasta que a principios de la década de los 70‟s se formaron las primeras cooperativas de embarcaciones menores y a mediados de los 80´s se sustituyeron las atarrayas por el chinchorro de línea, debido a su alta eficiencia en las corrientes del AGC. Durante la década de los 80‟s la flota mediana pasó a convertirse en el sector de altura, mismo que disminuyó de 267 embarcaciones mayores a 123 durante la última década del siglo pasado, producto de los cambios estructurales del sector social de la economía en México (Valdez-Gardea, 2007). Dicha disminución del sector de altura, aunada a las dinámicas migratorias por el desarrollo fronterizo de Sonora, concatenó un incremento de embarcaciones en el sector ribereño [se registró un incremento de 400 a cerca de 700 pangas de 1995 a 2005 (SAGARPA, 2006)], y por ende un mayor esfuerzo pesquero de dicho sector sobre la especie en función. Actualmente, las instrumentaciones económicas en materia de reconversiones productivas y tecnológicas del programa PACE Vaquita, así como el establecimiento del Área de Refugio de la vaquita y la reciente suspensión temporal de artes específicas en el NGC, han disminuido considerablemente el esfuerzo pesquero del sector ribereño sobre el camarón. Nivel que ha alcanzado la explotación del camarón. En la Figura III.10, con base en los arribos de pesca, se muestra como el promedio de capturas de camarón de Puerto Peñasco para el periodo de 1999 a 2008, que si bien incluía el aprovechamiento del sector de altura y del sector ribereño, ha disminuido drásticamente en comparación con los años 2012, 2013 y 2014 (en los que se ha contado con datos sectoriales específicos). Así, el promedio de captura de camarón del sector ribereño para este último trienio, es de apenas 17 toneladas anuales. Desarrollo histórico de las principales pesquerías de escama menor. En términos generales, las especies de mayor importancia en las pesquerías de escama menor son la sierra, el chano, las mantas y la guitarra. Se puede considerar que el surgimiento de la pesquería comercial de escama menor por el sector ribereño de Puerto Peñasco, se dio a principios de la década de los 80‟s, cuando compradores del centro del país arribaron a la localidad en busca de sierra (Cudney-Bueno y Turk-Boyer, 1998).
31
Posteriormente, tras el incremento de la demanda de manta en el país por la comercialización de principios de los 80‟s de las embarcaciones mayores, a finales de los 90‟s y a raíz de la caída en la producción de bironcha, las embarcaciones menores se dedicaron formalmente a su pesca incorporando además la captura de guitarra con fines comerciales. Actualmente, en Puerto Peñasco al igual que en otras localidades y campos pesqueros del litoral sonorense, la pesquería de guitarra abastece el 40% de los mercados locales y regionales durante la temporada de cuaresma (Márquez-Farías, 2005). Por su parte, el chano comenzó a pescarse en forma comercial en 1991 (Aragón-Noriega et al. 2010), a ser hoy en día la pesquería de escama con mayor rentabilidad, debido a sus grandes capturas y a su importante comercialización en los mercados orientales, en donde se emplea principalmente para la fabricación de surimi (Román-Rodríguez, 2000). Nivel que han alcanzado la explotación de las principales especies de escama menor. En la Figura II.11, se puede observar como las capturas de manta y sierra se han mantenido relativamente estables desde el 2004 hasta la fecha; la pesquería de guitarra ha disminuido durante el trienio 2012-2014, con su nivel de captura más bajo en el 2013. Por su parte, es importante destacar el gran incremento de los volúmenes de captura de chano del último trienio con respecto al periodo anterior, alcanzando una producción histórica de más de 1,200 t en 2013.
Figura. II. 10. Volúmenes de las capturas históricas y actuales de la pesquería de camarón del sector ribereño de Puerto Peñasco.
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Figura II.11. Volúmenes de las capturas históricas y actuales de las principales especies objetivo capturadas dentro de la pesquería de escama menor del sector ribereño de Puerto Peñasco. Desarrollo histórico de las pesquerías de escama mayor. Históricamente la principal pesquería de escama mayor ha sido la captura de baqueta y en menor medida de extranjero; el desarrollo de estas pesquerías en Puerto Peñasco se remonta a la década de los 60´s cuando de 5 a 7 pangas nodrizas por embarcación mayor, realizaban largos viajes para realizar la pesquería a través de las primeras cimbras. A medida que la demanda de baqueta creció en los mercados orientales y norteamericanos durante la década de los 70‟s, se alcanzó el tope máximo de la pesquería (era común que las pangas cargaran hasta una tonelada de baqueta descabezada en un día de trabajo) (Cudney-Bueno y Turk-Boyer, 1998). A principios de los 80‟s, la producción bajó drásticamente por la focalización en la pesquería del tiburón bironcha, hasta que desde la década de los 90‟s hasta la actualidad, la pesquería ha ido recobrando fuerza año con año, aunque muy distante de los niveles históricos pico de captura (PANGAS, 2008). Nivel que han alcanzado las pesquerías de escama mayor. En la Figura III.12, con base en los arribos de pesca, se muestra el promedio de capturas históricas de baqueta en Puerto Peñasco para el periodo comprendido del 2004 al 2009, así como datos recientes para los años 2012, 2013 y 2014. Podemos observar como el promedio de captura de baqueta del último trienio (61.8 t), ha disminuido a más de la mitad con respecto al promedio de la década pasada (141 t).
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Figura II.12. Volúmenes de las capturas históricas y actuales de la pesquería de baqueta el sector ribereño de Puerto Peñasco. Desarrollo histórico de la pesquería de tiburones. La pesca comercial de tiburones se desarrolla desde la década de 1930 en Puerto Peñasco, cuando las embarcaciones medianas capturaban diferentes especies para comercializar sus hígados a los mercados asiáticos. Por su parte, la pesquería ribereña comercial de tiburones comenzó a desarrollarse a principios de los 80´s, enfocada principalmente a las capturas de tiburón tripa y tiburón bironcha. La pesquería ribereña de angelito es muy reciente en el AGC, a pesar de que históricamente había sido capturado en grandes cantidades por los barcos de arrastre camaroneros; debido a la escasez de principios de los 90´s de la pesca de orilla, se comenzó a comercializar formalmente por el sector ribereño de Puerto Peñasco en 1994 (Cudney-Bueno y Turk-Boyer, 1998).
Hasta inicio de la década de los 90‟s, las pesquerías mexicanas de tiburones se habían mantenido sin regulaciones algunas, hasta que la desaparición de importantes especies, y la reducción de las tallas y los desembarques de las principales especies comerciales, indicaron que las poblaciones costeras se encontraban al borde de la sobreexplotación. En respuesta, el Gobierno Mexicano emprendió un plan integral de acción, compuesto por las siguientes tres acciones fundamentales: 1) se estableció una moratoria en la expedición de nuevos permisos de pesca comercial de tiburón para la pesca artesanal en 1993 la cual fue ampliada a los barcos de pesca industrial de mediana y de altura en 1998; 2) se desarrolló un Plan de Acción Nacional para el Manejo y Conservación de Tiburones, Rayas y Especies Afines en México (CONAPESCA-INAPESCA 2004); y 3) se publicó la NOM–029–PESC–2006 (Castillo-Géniz et al. 1998; Pérez-Valencia et al. 2011)
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Nivel que ha alcanzado la explotación de tiburones. La captura anual promedio de tiburones en la totalidad del Golfo de California es de 12,643 t, cifra considerablemente más baja que el mayor registro histórico de captura anual alcanzado en 1979 de 16,780 t. La captura promedio de tiburones en Puerto Peñasco del periodo comprendido entre 2004 y 2009, incluyendo al sector de altura y al sector ribereño, fue del orden de 755 t anuales. Por su parte, para el último trienio, en donde se cuentan con datos específicos para la pesca de ribereña, el promedio para 2012, 2013 y 2014 fue de 85 t, incluidas todas las especies.
Figura II.13. Volúmenes de las capturas históricas y actuales de la pesquería de tiburones del sector ribereño de Puerto Peñasco.
Desarrollo histórico de la pesquería de jaiba. La pesquería de jaiba en las costas sonorenses inició en la década de 1980, principalmente por el aumento de su demanda en los mercados internacionales. Su producción inicial de las principales dos especies capturadas en esta región [jaiba verde (Callinectes. Bellicosus) y jaiba azul (C. arcuatus)], fue de 180 t en 1988 llegando a sumar más de 8,000 t anuales en los últimos años, lo que representa casi el 35% de la producción de jaiba de todo el litoral del Pacífico (Balmori-Ramírez et al. 2010). Particularmente en el NGC se captura la jaiba verde, especie de hábitos costeros con abundancia máxima durante primavera y verano (Márquez-Farías, 2001). Las artes de pesca empleadas en el NGC son sencillas y económicas, destacando entre ellas las trampas o nasas del tipo Chesapeake (Molina-Ocampo et al. 2006). Esta pesquería es de gran importancia para el sector ribereño, ya que se desarrolla cuando la producción de otras especies es baja (Cudney-Bueno y Turk-Boyer 1998). Particularmente la pesca comercial de jaiba inició en Puerto Peñasco en 1994, a casusa de la gran demanda de los
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mercados estadounidenses (Loaiza-Villanueva et al. 2009). En el 2001 se constituyeron Subcomités Regionales de Administración de la Pesquería de Jaiba (PPE, Bahía de Kino y Huatabampo), conformados por autoridades pesqueras, productores y comercializadores, con la finalidad de revertir el efecto negativo de la pesca y para tener un mejor manejo de la especie. Aunque por varios años los subcomités dejaron de sesionar, recientemente se han reactivado como resultado de la preocupación de los productores, ya que el número de pescadores dedicados a esta pesquería año con año incrementa, no solo en la región del AGC, sino en todo el litoral sonorense (Pérez-Valencia et al. 2011). Nivel que ha alcanzado la explotación de jaiba. En la Figura III.14, con base en los arribos de pesca, se muestra el promedio de capturas históricas de jaiba en Puerto Peñasco para el periodo comprendido del 2004 al 2009, así como datos recientes para los años 2012, 2013 y 2014. Podemos observar como el promedio de captura de jaiba del último trienio (635 t), ha disminuido a prácticamente la mitad con respecto al promedio de la década pasada (1220 t).
Figura II.14. Volúmenes de las capturas históricas y actuales de la pesquería de jaiba del sector ribereño de Puerto Peñasco. Desarrollo histórico de la pesquería de caracol chino negro. La pesquería comercial del caracol inició a principios de los 90´s en Puerto Peñasco. La explotación sostenida desde sus orígenes, llevó a que a principios de la década del 2000 las capturas disminuyeran considerablemente, por lo que, con base en las atribuciones
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para que los municipios administren especies sésiles, una cooperativa pesquera local administró durante tres años reservas para su repoblamiento, aumentando la densidad y el tamaño de adultos, así como particularmente la densidad de juveniles en un 300% (PANGAS, 2008). Nivel que ha alcanzado la explotación de caracol chino negro. En la Figura III.15, con base en los arribos de pesca, se muestra el promedio de capturas históricas de caracol chino negro en Puerto Peñasco para el periodo comprendido del 2004 al 2009, así como datos recientes para los años 2012, 2013 y 2014. Podemos observar como las capturas anuales de caracol desde 2004 hasta la fecha, se han mantenido bastante homogéneas.
Figura II.15. Volúmenes de las capturas históricas y actuales de la pesquería de caracol chino del sector ribereño de Puerto Peñasco. II.2.2. Captura incidental de las principales pesquerías desarrolladas por el proyecto. Existe poca literatura científica que incluya datos cuantitativos, además de las descripciones cualitativas de las especies que componen la captura incidental de las pesquerías ribereñas en el AGC. A raíz de lo anterior, entre octubre del 2010 y junio del 2011, el Centro Intercultural de Estudios de Desiertos Océanos A.C., desarrolló, como parte de su beta de investigación sobre pesquerías costeras del Alto Golfo, un programa de monitoreo abordo en embarcaciones menores de San Felipe, Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, entre las cuales se acompañaron 290 operaciones de pesca para las principales pesquerías.
El inventario total de especies capturadas incidentalmente fue de 140, con una evidente dominancia de peces, seguidos de invertebrados, moluscos, artrópodos, algas,
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poliquetos y cnidarios. La pesquería que más especies aportó a dicho inventario fue la del camarón, misma que incluyó a todos los grupos taxonómicos mencionados en las líneas anteriores (Tabla II.10). Las otras dos pesquerías con importante captura incidental, fueron la pesquería del chano y la pesquería de la sierra. La primera de ellas, estuvo compuesta por ocho especies de invertebrados, 14 especies de peces y cuatro especies de elasmobranquios, mientras que la segunda, se compuso de 15 especies de peces, dos de elasmobranquios y una de vertebrados (Tabla II.11). Finalmente, resulta imperante resaltar que en ninguna de las pesquerías desarrolladas por el proyecto presentó una proporción pesquera mayor de captura incidental respecto de la captura objetivo (Tabla II.9; Figura II.16); en el caso de las pesquerías de moluscos, dadas sus altas especificidades pesqueras, la captura incidental es nula.
Tabla. II. 9. Proporción pesquera de las principales pesquerías desarrolladas por el proyecto, obtenidas a partir de la relación captura objetivo-captura incidental dentro del total capturado por especie en una intensidad de muestreo de 290 viajes de pesca (CEDO, 2011).
Pesquería
Captura (toneladas) Proporción pesquera Total Objetivo Incidental
Camarón 29.05 16.99 12.06 1-0.74
Chano 30.93 23.42 7.51 1-0.32
Sierra 6.26 5.93 0.33 1-0.06
Tiburones, mantas y Guitarras
0.25 0.2 0.05 1-0.2
Baqueta 0.90 0.54 0.36 1-0.66
Jaiba 1.77 1.69 0.08 1-0.05
Figura II.16. Relación porcentual entre la captura objetivo y la captura incidental de las principales pesquerías.
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Camarón Chano Sierra Tiburones,mantas yguitarra
Baqueta Jaiba
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incidental
objetivo
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Tabla II. 10. Nombre común y científico de las principales especies capturadas incidentalmente en la pesquería de camarón azul desarrollada por el proyecto.
Nombre común Nombre científico Nombre común Nombre científico
Chano MIcropogonias megalop Lenguado plano Etropus spp. Chile Synodus spp. Lenguado tres ojos Ancylopsetta dendrítica Chopa Pomadasys panamensis Lenguado de un ojo Pleuronichthys ocellatus Chupalodo Porichtys notatus Lengüeta listada Symphurus fasciolaris Cornuda Sphyrna lewini Lisa Mugil spp. Corocoro Orthopristis reddingi Lisa pardete Mugil cephalus Corvina Cynoscion spp. Listones Trichiurus lepturus Corvina aleta corta Cynoscion parvipinnis Lúpon Scorpaena schorae Corvina Scianidae spp. Manta arenera Dasyatis brevis Corvina Golfina Cynoscion othonopterus Manta mariposa Gymnura marmorata Corvina pancha Ophioscion strabo Mojarra garabata Calamus Brachysomus Corvina rayada Cynoscion reticulatus mojarra Guerreidae spp. Corvina tuza Ohioscion scierus Palometa cortés Peprilus ovatus Cyclopselta Cyclopsetta spp. Palometa salema Peprilus snyderi Cynapsnticus coniceps Cynoponticus coniceps Alga parda Ceramium sp. Galera de bigelow Squilla bigelowi Alga verde Ulva dactilifera Gallo Nematistis pectoralis Bocho Clappa convexa Gavilán Rhinoptera steindachneri Camarón caqui Penaeus californiensis Guavina Ophistognatus spp. Camaron cacahuate Sicyonia penicilata Guitarra Rhinobatus steindachneri Cáncer Hepatus lineatus Jorobado antena Selene brevoortii Cangrejo Crustacea spp. Jorobado espejo Selene peruviana Cangrejo araña Lithodidae spp. Lagarto iguana Synodus scehuarae Cangrejo con picos Cancer amphioetus Lagarto picado Synodus scituliceps Cangrejo ermitaño Didenidae spp. Lengua de chabanaud Lenguado
Symphurus chabanaudi Cyclopsetta sp.
Ermitaño boxeador Petrochirus californiensis
Lenguado alabato Paralichthys aestuarius Jaiba Callinectes bellicosus Lenguado cola abanico Xystreurys liolepis Jaiba cuata Callinectes arcuatus Lenguado de california Paralichthys californicus Jaiba robusta Euphylax robustus
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Mantis marina Anémona morada
Pámpano común Pez ángel
Coral blanco Octocorales sp1. Pollera rayada Chaetodipterus zonatus Coral rojo Octocorales sp2. Ranisapo ocelado Antennarius avalonis Hidrozoario Hydrozoa spp. Ratón Albula vulpes Medusa Chrysaora spp. Raya Dasyatis spp Medusa bola de cañón Stomolophus meleagris Raya coluda Urobaris spp. Estrella de mar Astropecten armatus Raya redonda Urobatis halleri Pepino de mar Holothuroisea spp. Vieja Haemulidae spp. Estrella canastilla Astrocaneum spinosum Cabicucho Diplectrum pacificum Gusano Platyhelminthes spp. Sierra Scomberomorus spp. Gusano sp.3 Platyhelminthes sp.2 Sierra común Scomberomorus sierra Gusano sp.1 Poliquéto Anchoa agallota
Platyhelminthes sp.1 Polychaeta spp.
Sierra Golfina Suela arepita Tiburón tripa
Socmberomorus concolor
Anchovetas Engraulidae spp. Tiesos Ophicthidae spp. Bagre Sciades platypogon Almeja Donocidae spp. Baqueta Epinephelus acanthistius Almeja roñosa Chone fluftifraga Barbudo seis barbas Polydactylus approximans Almeja voladora Pecten vogdesii Bichi Oligoplites altus Caracol chino Muricanthus nigritus Boca dulce Menticirrhus nasus Caracol negro Solenosteira gatesi Bombache Larimus pacificus Caracol sp. 1 Naticidae spp. Botete liso Sphoeroides lispus Caracol almeja Gasteropoda spp. Botete diana Sphoeroides annulatus Caracol pepa Ficidae spp. Burrito corcovado Orthopristis chalceus Hueva Hueva de calamar Cabrilla arenera Paralabrax
maculatofascians Nudibanquio Nudibranchia spp.
Cajera rayada Larimus acclivis Nudibranquio sp.1 Nudibranchia sp. 1 Chancho pardo Balistes polylepis Nudibranquio sp. 2 Nudibranchia sp.2 Pulpo pigmeo mexicano Octopus digueti
Fuente: Elaborado a partir de CEDO (2011); y Pérez-Valencia et al. (2011).
40
Tabla II. 11. Nombre común y científico de las principales especies capturadas incidentalmente en las pesquerías desarrolladas por el proyecto.
Pesquería Nombre común Nombre científico Nombre común
Nombre científico
Escama menor
Camarón azul Anchoa agallota Bagre Cornuda Cornuda cruz Curvina rayada Jorobado espejo Lagarto picudo Cáncer Jaiba Jaiba cuata Estrella de mar Estrella canastilla Chile Chopa Guitarra Mojarra garabata Lenguado Manta coreana Manta diablo Merluza
Litopenaeus stylirostris Cetengraulis mysticetus Sciades platypogon Sphyrna spp. Sphyrna zygaena Cynoscion reticulatus Selene peruviana Synodus scituliceps Hepatus lineatus Callinectes bellicosus Callinectes arcuatus Astropecten armatus Astrocaneum spinosum Synodus spp. Pomadasys panamensis Rhinobatus productus Calamus brachysomus Paralichthys spp. Roja sp. Mobula sp. Merluccius productos
Machuela hebra Palometa salema Pollera rayada Ronco alargado Ronco manchado Suela arepita Tiburón mamón Tiburón tripa Palometa de cortés Pollera rayada Sierra Sierra común Sierra Golfina Tiburón cazón Tiburón mamón Tiburón tripa Caracol chino Caracol negro Nudibranquio Pargo cocano Tiburón bayo
Opistonema libertate Peprilus snyderi Chaetodipterus zonatus Haemulon elongatus Haemulon flaviguttatum Achirus mazatlanus Mustelus californicus Mustelus lunulatus Peprilus ovatus Chaetodipterus zonatus Scomberomorus spp. S. sierra S. concolor Galeorhinus galeus Mustelus californicus Mustelus lunulatus Muricanthus nigritus Solenosteira gatesi Nudibranchia spp. Plopagrus guntheri Negaprion brevirostris
Tiburones
Chano Curvina rayada Manta mariposa Sierra Sierra común
Squatina califórnica Cynoscion reticulatus Gymnora Marmorata Scomberomorus spp. S. sierra
Tiburón cornuda Guitarra Manta arenera Manta gavilán Tiburón volador
Sphyrna lewini Rhinobatus productos Dasyatis brevis Mylobatis califórnica Carcharhinus limbatus
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Jaiba
Cochito Caracol chino
Balystes polylepys Solenosteira gatesi
Caracol negro Solenosteira gatesi
Escama mayor
Angelito Baqueta ploma Chano Cochito Conejo Dorado Guitarra Lenguado Tiburón volador
Squatina califórnica Epinephelus niphobles Micropoponias megalops Balystes polylepys Caulolatilus affinis Coryphaena hippurus Rhinobatus productos Paralichthys spp. Carcharhinus limbatus
Manta mariposa Merluza Tiburón bironcha Tiburón cornuda Tiburón gato Tiburón perro Tiburón tintorera Tiburón tripa
Gymnora Marmorata Merluccius productus Rhizoprionodon longurio Heterodontus sp. Isurus Oxyrinchus Galeocerdo cuvier Mustelus lunulatus
Fuente: Elaborado a partir de Cudney-Bueno y Turk-Boyer (1998); CEDO (2011); y Pérez-Valencia et al. (2011).
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Acorde con el reporte del Programa de Monitoreo Abordo, CEDO (2011) expresa que la única especie capturada incidentalmente enlistada en la NOM-ECOL-059-2010, fue la totoaba. Sin embargo, es importante mencionar que las capturas de dicha especie ocurrieron dentro de los viajes de pesca desarrollados por la comunidad de San Felipe, en áreas conexas al litoral de Baja California sobre la porción occidental de la Zona de Amortiguamiento de la RBAGCyDRC, particularmente durante el desarrollo de las pesquerías de curvina golfina y chano. Por su parte, la literatura científica respectiva, menciona que en la pesca con chinchorros en el AGC existe ocurrencia incidental de vaquita marina, tiburón blanco y tortuga marina, mismas para las que describen a continuación sus patrones de distribución, rutas migratorias, áreas de reproducción, crianza, reclutamiento, crecimiento y protección, así como las principales medidas regulatorias que las diferentes instancias nacionales e internacionales han instrumentado para la protección de dichas especies. Totoaba (Totoaba macdonaldi). La totoaba es una especie endémica del Golfo de California o Mar de Cortés, en donde habita particularmente las aguas costeras y las desembocaduras de ríos, mismos en los que realiza
movimientos migratorios para reproducción, alimentación y crecimiento (Findley, 2007). El ciclo de vida de esta especie se estima en 19 años, sobre la base de una edad media estimada de la primera reproducción de siete años y una edad máxima de 30 años; se alimenta fundamentalmente de peces y camarones (Chao, 1995). A causa de su sobreexplotación por las comunidades pesqueras de la región durante la primera mitad del siglo XX, la totoaba fue puesta en veda temporal del periodo de 1940 a 1975, hasta que en 1976 se elevó a la categoría de veda indefinida (Tabla II. 12) (Barrera-Guevara, 1990). Desde la década de 1960 se han llevado a cabo esfuerzos por mantener y reproducir la especie en condiciones de cautiverio, hasta que en las últimas décadas la Universidad Autónoma de Baja California ha operado la introducción al medio natural de juveniles. Ambas acciones, la veda de más de 30 años y la liberación de juveniles, concatenaron que la estructura poblacional de adultos reproductores se estabilizara (Hamman y Román, 1997). Sin embargo, durante la participación de Martha Román sobre la actualización de la pesquería ilegal de totoaba en la quinta reunión del „comité internacional‟ para la recuperación de la vaquita (CIRVA-5), la investigadora indicó que existe un incremento en la pesca ilegal de la especie, debido a la creciente demanda de los mercados asiáticos por la vejiga natatoria, localmente conocida como “buche”. Así, la especie es capturada mediante redes agalleras con luz de malla grande, ancladas y dejadas sin atender por varios días (CIRVA, 2014). Vaquita Marina (Phocoena sinus). La vaquita es una especie endémica de México, la cual se distribuye exclusivamente en el norte del Golfo de California, entre los 30 º 45' N y los 114º 20' W (Gerrodette et al. 1995, 2011). El área de mayor avistamiento se compone de unos 2.500 km² aledaños a las Rocas Consag, a unos 40 kilómetros al noreste de la ciudad de San Felipe, Baja California, atravesada por la frontera sur de la RBAGCyDRC (Figura II.17) (Rojas- Bracho et al. 2008). La vaquita es una especie marina que habita aguas someras (menores de 40 m), en un medio ambiente turbio y dinámico (Vidal 1995, Rojas Bracho y Jaramillo Legorreta-2002). La especie se alimenta de una variedad de peces demersales o bentónicos, calamares y crustáceos, entre los que destacan el chano, corvineta, roncacho, corvina rayada, mojarrita, lisa, sierra, calamares y pequeños camarones
43
(Pérez-Cortez et al. 1996). Esta pequeña marsopa ha sido observada en solitario o en pequeños grupos de hasta 8-10 individuos (con un promedio de 2), dichos grupos pueden estar separados unos de otros por muchos kilómetros cuadrados. El reporte del CIRVA-5 estima una abundancia poblacional para la especie de 97 ejemplares, dentro de las cuales menos de 25 podrían ser hembras sexualmente maduras (CIRVA, 2014). En este mismo trabajo, se establece que, con base en el programa de monitorización acústica pasiva de la especie para el trienio 2011-2013, la población está disminuyendo a una tasa de 18.5% anual (Figura II.18). Desde hace años, la literatura científica plantea que los ejemplares de vaquitas son atrapadas incidentalmente en redes de pesca ribereña (Vidal, 1995; D‟Agrosa et al; 2000). El único estudio desarrollado específicamente con el objeto de cuantificar la mortalidad de la vaquita en redes, registró 11 ejemplares atrapados en los 1,113 viajes pesqueros muestreados de las localidades de San Felipe, Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco (D‟Agrosa et al; 2000). En tanto una de las especies prioritarias para la conservación en Norteamérica, se han instrumentado numerosos y variados esfuerzos por garantizar la continuidad bio-ecológica de la vaquita marina en el AGC; esfuerzos que se remontan hasta la década de los 60‟s, cuando a partir de la descripción de la marsopa se crea un refugio para las especies ubicadas entre el Delta del Rio Colorado y Bahía Ometepec, pasando por la propuesta en 1979 de crear el AGC un santuario especial para la especie, hasta la agudización de los esfuerzos institucionales mexicanos y la internacionalización de voluntades, a partir del establecimiento de la RBAGCyDRC en 1993 (Figura II.19).
Figura II.17. Trayectoria poblacional de la vaquita. Los puntos azules representan las estimaciones de la Comisión Ballenera Internacional y los puntos rojos representan las estimaciones del Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita. Las tasas de disminución fueron obtenidas de Gerrodette y Rojas Bracho (2001) antes del 2010 y de los resultados del Panel de Expertos del
CIRVA-5, usando los datos acústicos pasivos desde 2011 en adelante (CIRVA, 2014).
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Figura II.18. Zona de exclusión de la red de enmalle propuesta en la CIRVA-5 (al norte y al oeste de las líneas rojas que se intersectan en 30 º 05'42 "N, 114 ° 01'19" W), que contiene todas las detecciones visuales y acústicas confirmadas de vaquitas desde 1990 (líneas amarillas). La zona de exclusión abarca el hábitat crítico para la vaquita, caracterizado por la alta turbidez (apreciable en la imagen satelital) creada por las fuertes corrientes mareales. El polígono delimitado por las líneas azules es el Refugio de la Vaquita acordado en 2005. Se delimita además, con una línea amarilla intermitente el límite sur de la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado (CIRVA, 2014).
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Figura II.19. Relación entre la disminución poblacional de la Vaquita Marina y la instrumentación de diferentes medidas regulatorias (CIRVA, 2014).
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Tabla II. 12. Principales medidas regulatorias instrumentadas para la protección de la totoaba.
Instancia reguladora Regulación instrumentada Año
Secretaría de Pesca Se declara veda reproductiva. 1940-1975
Secretaría de Pesca Se establece zona de refugio. 1974
Secretaría de Pesca Se establece veda permanente. 1975
Convención Internacional sobre el Tráfico de Especies Silvestres
Se declara especie en peligro de extinción. 1976
Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza
Es clasificada en la Lista Roja de las especies amenazadas en peligro crítico.
1979
SEMARNAP Se declara en peligro de extinción en lo que hoy es la NOM-059-SEMARNAT-2010.
1991
Subcomité para la preservación de la totoaba y la vaquita
Se prohíbe en la zona de refugio el uso de redes de enmalle con luz de malla de 10”. .
1992
SEMARNAP Se crea la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Rio Colorado
1993
SEMARNAP Publicación del plan de manejo de la RBAGCyDRC.
1995 y 2007
SEMARNAT Se publica la NOM-EM-032-ECOL-2003 para proteger la diversidad de la RBAGCyDRC.
2003
SEMARNAT y SAGARPA Se establece el Acuerdo de suspensión temporal de artes específicas en el NGC.
2015
Tiburón blanco (Carcharodon carcharias) El tiburón blanco es una especie cosmopolita que se distribuye en la mayoría de los mares y océanos, con altas concentraciones en las aguas costeras y templadas (Compagno 2001). Su amplitud de hábitat incluye desde la línea de rompientes y la zona intermareal, hasta la alta mar (desde la superficie hasta más de 250 m de profundidad). Sin embargo, no manifiesta ocurrencia en agua dulce, pero si penetra bahías y estuarios salinos durante los flujos altos. Su distribución en la región Pacífico Oriental se extiende desde el Golfo de Alaska hasta el Golfo de California y las Islas Revillagigedo y la de Panamá de Chile (Klimley y Ainley, 1996). Particularmente, en el Golfo de California se registra esta especie en su zona central, entre la península de Baja California y Sonora (Figura II.20). La única zona del AGC en donde se han reportado capturas incidentales ha sido la localidad del Golfo de Santa Clara, Sonora, a través de redes de enmalle empleadas para la pesquería de la curvina golfina (Galván- Magaña et al. 2010). El Gobierno mexicano y diferentes instancias internacionales, han realizado importantes esfuerzos por garantizar la conservación de la especie (veasé la Tabla II. 13).
Tortugas marinas Las especies de quelonios que pueden ser capturadas incidentalmente en las pesquerías ribereñas del AGC, son la tortuga laúd (Dermochelys coriácea), tortuga verde (Chelonia mydas) y la tortuga golfina (Lepidocheliys olivácea).
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La tortuga Golfina se distribuye, presenta circuitos migratorios y sitios de anidación
en las aguas tropicales y subtropicales del mundo, exceptuando el Golfo de México (Pritchard, 1969). Anida en cerca de 60 países y realiza movimientos migratorios que incluyen las costas de más de 80 países; pueden habitar tanto las zonas oceánicas como las neríticas (Shanker et al. 2003). Como la mayoría de las tortugas marinas, la tortuga golfina presenta un ciclo de vida polifacético, que requiere una serie de localidades geográficamente separadas y múltiples hábitats (Márquez 1990). Las hembras anidan en las costas arenosas, hasta que posteriormente las crías permanecen en una fase pelágica a la deriva con las corrientes en donde alcanzan su madures sexual. (Musick y Limpus 1997). Machos y hembras en edad reproductiva migran hacia las costas y se concentran cerca de las playas de anidación (Kopitsky et al. 2000). Posterior a su fase reproductiva, los adultos emprenden grandes rutas migratorias que incluyen cientos o miles de km, generalmente dentro de la isoterma de 20° C; en el Pacífico oriental, se les suele encontrar dentro de las 1.200 millas náuticas desde la costa (Márquez , 1990).
La tortuga laúd presenta una amplia distribución mundial, ya que se le encuentra
desde las zonas tropicales hasta las zonas de los océanos sub-polares. Se pueden identificar poblaciones importantes en los océanos Atlántico, Pacífico e índico; particularmente en México se encuentra en Colima, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, en algunos sitios de Península de Yucatán, en Baja California y en algunas zonas del Golfo de California. En el AGC se pueden encontrar juveniles de menos de 145 cm y hembras durante la temporada de anidación, así como para llevar a cabo procesos alimenticios de invertebrados con cuerpo blando (Eckert 1999; Sarti-Martínez 2000). En términos generales, las poblaciones de tortugas laúd se encuentran muy disminuidas a nivel mundial; la población mexicana, a pesar de los esfuerzos de conservación de las últimas dos décadas (veasé la Tabla II.13), ha disminuido el número de nidos de más de 5,000 a un escaso centenar de éstos.
La tortuga verde tiene una distribución circunglobal, que se reproducen a lo largo
de los trópicos y, en menor medida, en las aguas subtropicales de los océanos Atlántico, Pacífico e Índico. En México anida en Baja California, de Sinaloa a Chiapas, Michoacán, Tamaulipas, Veracruz, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Las tortugas verdes son altamente migratorias y realizan movimientos complejos a través de hábitats geográficamente dispares. Su anidación se lleva a cabo en más de 80 países en todo el mundo (Hirth, 1997). Sus movimientos en el medio marino son menos conocidos pero se cree que las tortugas verdes viven en aguas costeras de más de 140 países (Groombridge y Luxmoore, 1989). Al salir de la playa de anidación, se ha planteado la hipótesis de que las crías comienzan una fase oceánica (Carr, 1987), tal vez flotando pasivamente en los principales sistemas actuales (giros) que sirven de base en en el desarrollo al mar abierto (Carr y Meylan 1980, Witham, 1991). Después de varios años en la zona oceánica, estas tortugas se reclutan en las áreas neríticas ricas en algas marinas en donde se alimentan y crecen hasta la madurez (Musick y Limpus, 1997). Al alcanzar la madurez sexual las tortugas verdes comienzan las migraciones a las zonas de alimentación, de crianza y las zonas de anidación que se llevan a cabo todos los años (Hirth 1997). Las migraciones son llevadas a cabo tanto por machos como por hembras, quienes pueden atravesar miles de kilómetros de las zonas oceánicas (Carr, 1987, Mortimer y Portier, 1989).
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Tabla II. 13. Principales medidas regulatorias instrumentadas para la protección del tiburón blanco y las tortugas marinas.
Instancia reguladora Regulación instrumentada Año
Tiburón blanco
ONU
La ley del Derecho del Mar le clasifica como especie altamente migratoria, por lo que requiere de un manejo y evaluación poblacional concertado.
1982
UICN Ingresa en la Lista Roja como especie vulnerable.
2000
SEMARNAT La NOM-059-ECOL-2001 la clasifica como especie amenazada.
2002
FAO Se crea el Plan de Acción Nacional para el Manejo y Conservación de Tiburones y Rayas y Especies Afines en México.
2004
CITES Es declarada especie en peligro de extinción. 2004
SAGARPA La NOM-029-PESC-2006 prohíbe la captura comercial de la especie.
2007
Tortugas marinas
Secretaría de Pesca Se prohíbe la explotación de huevos y la destrucción de nidos.
1927
SEDUE Se establecen como zonas de reserva y refugio los sitios de desove.
1986
SEDUE Se vedan total y permanentemente todas las especies en aguas de jurisdicción federal.
1990
SEMARNAP Se incluye en la NOM-061-PESC el uso obligado de dispositivos excluidores.
1993
SEMARNAP Se les incluye en la NOM-059-ECOL. 1994
SEMARNAP
Se establecen disposiciones para mitigar la captura incidental de tortugas marinas, eliminando el uso de redes de deriva, anzuelos circulares y profundidades mínimas de operación.
1999
SEMARNAP La Ley General de Vida Silvestre les cataloga como especies prioritarias.
2000
SAGARPA Se establece Acuerdo para operar zonas de refugio pesquero y medidas de reducción de interacciones de las especies con la pesca.
2015
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Figura II.20. Localidades (numeradas) y frecuencia de registros (círculos amarillos) de avistamientos y capturas del tiburón blanco en el Golfo de California. Figura tomada de (Galván-Magaña et al. 2010).
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II.2.3. Estatus pesquero, regulaciones instrumentadas y rendimientos máximos sostenibles de las principales especies objetivo del proyecto. En esta sección se describen, para las principales especies aprovechadas por el proyecto, los estatus que la Carta Nacional Pesquera (2012) refiere para cada pesquería, las principales medidas de regulación instrumentadas para éstas por las diferentes instancias nacionales e internacionales y, finalmente, la estimación de los rendimientos máximos sostenibles de las principales especies objetivo de la pesca ribereña en el AGC que realizó Acuacorp Hidalgo A.C. (2009), con base en los modelos pesqueros de producción-equilibrio de Schaefer (1954) y Fox (1970), utilizando la captura por unidad de esfuerzo a partir de los arribos de pesca del periodo comprendido entre 1995 y 2007 de las localidades de San Felipe, Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco. Tabla II.12. Condiciones generales de las pesquerías de escama menor.
Chano Norteño
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
El INAPESCA le menciona como una de las pesquerías con la necesidad de atención prioritaria dentro de la RBAGCyDRC.
Permisos de pesca comercial de escama general
Insuficiente para regular el esfuerzo pesquero y determinar otras medidas optimas de manejo.
Rendimiento Máximo Sostenible estimado para la pesquería
Sierras
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
En el Golfo de California la pesquería esta aprovechada al máximo sostenible.
Permisos de pesca comercial de escama general
Insuficientes para regular el esfuerzo pesquero y determinar otras medidas optimas de manejo.
Especificaciones en la Carta Nacional Pesquera
Referencia límite para evitar deterioro de la pesquería de Scomberomorus concolor dentro del área de distribución norte-centro de Sonora es de 1,400 t. Para S. sierra tomar las medidas necesarias si las capturas en Sonora bajan de 1,000 t.
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IUCN Lista Roja de Especies Se incorporaron en 2011, bajo el estatus de vulnerabilidad.
Rendimiento Máximo Sostenible estimado para la pesquería
Mantas
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
Esta pesquería se encuentra aprovechada al máximo sustentable.
Permisos de pesca comercial para escama menor
Insuficientes para regular el esfuerzo pesquero y determinar otras medidas optimas de manejo.
Específicaciones en la Carta Nacional Pesquera
Establece como punto de referencia para la captura de rayas en el Pacífico Mexicano, un máximo de 3,800 t y que en caso de disminución de las capturas en la región noroeste, el INAPESCA debería hacer análisis y tomar las medidas correctivas necesarias.
NOM-029-SAG/PESC-2014 Establece la obligatoriedad de llenar bitácoras para las embarcaciones artesanales, restricciones temporales en las áreas de crianza de rayas, especificaciones en los equipos de pesca.
Consideraciones para el proyecto
De las tres principales pesquerías de la escama menor, el chano es el que presenta un nivel de aprovechamiento mayor por parte del proyecto. El promedio de captura anual para el último trienio oscila en las 600 t, cifra considerable respecto al RMS y a su esfuerzo pesquero para el Modelo Schaefer de la pesquería, los cuales estiman 1594 t y 1,340 embarcaciones menores, respectivamente; Aragón-Noriega et al. (2010) estimaron que para la recuperación y estandarización de la pesquería en el AGC, se requieren capturas anuales de 1,057 t. Por su parte, el promedio de captura anual de manta de la pesca ribereña de Puerto Peñasco durante el último trienio oscila en las 200 t, teniendo como referencia las 3,800 t máximas permisibles para el pacífico mexicano. Finalmente, la pesquería de sierra por parte del sector es considerablemente baja. El promedio de captura anual para el último trienio fue menor de 20 t, considerando la estimación del RMS y su esfuerzo pesquero de 1,599 t y 1340 pangas, respectivamente; la captura, igualmente es sumamente baja en relación a las máximas permisibles para ambas especies en el litoral sonorense.
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Tabla II.13. Condiciones generales de la pesquería de camarón azul. Estatus en la Carta Nacional Pesquera
En la zona del alto Golfo de California la pesquería se encuentra al máximo sostenible.
NOM-002-PESC-1993 Busca ordenar el aprovechamiento de las especies de camarón en aguas de jurisdicción federal.
Adecuaciones a la Norma en 1997 y 2013
Se realizaron ajustes a las características de las redes de enmalle para la pesca ribereña, particularmente en tamaño de luz de malla y longitud; se establecen las características para la implementación de redes de arrastre ligeras.
Veda temporal 2003 CONAPESCA establece la veda temporal para todas las especies de camarón en las aguas del Océano Pacífico.
MIA sector de altura Puerto Peñasco a partir del 2003
Se realizan las operaciones en función de los términos y condicionantes de su resolutivo respectivo.
MIA de los sectores ribereños a partir del 2009
Se realizan las operaciones en función de los términos y condicionantes de su resolutivo respectivo.
PACE Vaquita y programa para la implementación de métodos alternativos de pesca
Instrumentación de reconversiones productivas, reconversiones tecnológicas por parte de CONANP en 2012, 2013 y 2014; instrumentación de un programa gradual de sustitución de redes de enmalle por parte de CONAPESCA a partir de 2014.
Rendimiento Máximo Sostenible estimado para la pesquería
Consideraciones para el proyecto
A partir de 1995 el recurso se ha venido recuperando paulatinamente, no obstante la captura incidental de barcos oscilada en la proporción pesquera 1:5 - 1:20, así como la pesca ribereña ilegal durante las fases reproductivas en las regiones al sur de Puerto Peñasco, continúan representando las principales amenazas para el recurso. Por su parte, respecto al RMS y a su esfuerzo pesquero para el Modelo Schaefer, los cuales oscilan en las 500 toneladas y más de 1,925 embarcaciones menores respectivamente, el proyecto, por las reconversiones económicas del PACE Vaquita, cuenta con menos de 15 permisos de pesca vigentes que han capturado un promedio de apenas 17 toneladas anuales de producto, durante el último trienio.
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Tabla II.14. Condiciones generales de la pesquería de tiburones. Estatus en la Carta Nacional Pesquera
La pesquería se aprovecha al máximo sostenible.
Especificaciones en la Carta Nacional Pesquera
Se establecen especificaciones para las redes de enmalle para tiburones y rayas y para palangres para especies de fondo, con embarcaciones menores.
NOM-029-SAG/PESC-2014
Establece la obligatoriedad de llenar bitácoras para las embarcaciones artesanales, restricciones temporales en las áreas de crianza de tiburones y especificaciones en los equipos de pesca.
Permisos para la pesca comercial de tiburón con redes de enmalle o cimbras
No establece especificidad de especies objetivo.
Rendimiento Máximo Sostenible estimado para la pesquería
Consideraciones para el proyecto
La pesquería se desarrolla dentro de límites razonables, si consideramos que el promedio de captura anual del sector ribereño de Puerto Peñasco fue 85 t para el último trienio, mientras que el RMS y el esfuerzo pesquero estimado por Modelo Schaefer, plantea 188 t y 1,579 embarcaciones menores para las tres comunidades, respectivamente. En este sentido, es importante mencionar que las capturas de la localidad de Puerto Peñasco representan cerca del doble que las capturas de las localidades de San Felipe y Golfo de Santa Clara.
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Tabla II.15. Condiciones generales de las pesquerías de lisa y escama mayor.
Lisa
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
Recurso aprovechado al máximo sustentable.
Especificaciones de la Carta Nacional Pesquera
Si las capturas disminuyen de 30 t en Baja California y 200 t en Sonora, INAPESCA realizará un análisis para determinar las causas y recomendar las acciones correctivas.
NOM-016-SAG/PESC-2014 Se establecen tallas mínimas para la captura de la Lisa (Mugil cephalus) y la Liseta o lebrancha (Mugil curema); se realizan especificaciones respecto la luz de malla de las redes agalleras y se establecen prohibiciones sobre ciertas técnicas de pesca.
Escama mayor
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
Actualmente no se cuenta con un estado de salud de la pesquería de baqueta o extranjero en el alto Golfo de California.
Especificaciones de la Carta Nacional Pesquera
Recomienda que el INAPESCA realice análisis para determinar las causas y recomendar acciones correctivas en caso de que las capturas de baqueta disminuyan de 200 t anuales en Baja California, Sonora y Sinaloa.
Permisos de pesca comercial para escama general con cimbra
No específica especies objetivo.
Consideraciones para el Proyecto
El promedio de captura anual de lisa para el último trienio oscila en las 50 t, aprovechamiento que es realizado por pocas embarcaciones altamente especializadas en la pesquería. Por su parte, el promedio de captura anual de baqueta para el último trienio oscila las 60 t, pesquería relativamente estable si consideramos que la localidad de Golfo de Santa Clara no desarrolla la pesquería y Puerto Peñasco es la localidad más especializada en la actividad.
Tabla II.16. Condiciones generales de las pesquerías de moluscos y crustáceos capturados mediante trampas o buceo.
Jaiba
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
Recurso aprovechado al máximo sustentable en los Estados del Golfo de California.
NOM-039-PESC-2003 Establece especificaciones para las artes de pesca, tallas mínimas de captura, límite máximo de captura por unidad de esfuerzo.
Veda administrativa 2009 Recomendada por el CRIP-Guaymas a causa de las disminuciones poblacionales en Sonora y Sinaloa.
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Caracol chino negro
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
No se cuenta con información suficiente para determinar puntos de referencia en el Golfo de California.
Reservas comunitarias 2002 Los pescadores ribereños de puerto peñasco establecen bancos exclusivos para el aprovechamiento de la localidad.
Acuerdos entre permisionarios 2009
Se limita el acceso al recurso exclusivamente para los portadores de permisos de pesca comercial.
Especificaciones de la Carta Nacional Pesquera
En 2010 el caracol chino se separa de la categoría “caracol” para el Golfo de California.
Tasa de aprovechamiento del recurso
Se establece una tasa del 25 al 30% sobre estimación total de abundancia.
Veda administrativa temporal
Los nuevos permisos comerciales establecen un periodo de veda del 1 de mayo al 31 de julio.
Callo de hacha
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
No presenta estatus particular para el Golfo de California; sin embargo, se puede aludir que las poblaciones no se encuentran tan mermadas como en el caso de diferentes puntos del litoral de Baja California Sur.
Especificaciones de la Carta Nacional Pesquera
Se establecen especificaciones en las tallas mínimas de captura para todas las especies aprovechadas.
Almeja generosa
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
En algunas zonas del Golfo de California el aprovechamiento comercial se encuentra al máximo sustentable y en otras hay potencial de crecimiento.
Especificaciones en la Carta Nacional Pesquera
Se recomienda el 1.0% anual de pesca comercial en relación a la población vulnerable a partir de una talla mínima. Se prohíbe el método de captura de baja marea, así como la captura a profundidades mayores a los 30 m.
Permisos de pesca comercial
Específicos para las especies; se emiten con base en los dictámenes del INAPESCA, en donde se establecen cuotas de captura por zona y recomendaciones de manejo pertinentes.
NOM-014-SAG/PESC-2015 Además de las especificaciones de la Carta Nacional Pesquera, se establece la debida certificación de los buzos; las actividades laborales se podrán desarrollar únicamente a la luz del día y se prohíbe el matado de almejas abordo.
Almeja catarina
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
Recurso aprovechado al máximo sustentable.
NOM-004-PESC-1993 Se establecen tallas mínimas de captura basadas en su longitud mayor, así como un periodo de veda temporal del 15 de diciembre al 31 de marzo, las cuales no aplican al proyecto ya que se establecen exclusivamente para los Estados de Baja California y Baja California Sur.
Pulpo
Estatus en la Carta Nacional Pesquería aprovechada al máximo sustentable.
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Pesquera
Especificaciones en la Carta Nacional Pesquera
Se prohíben los ganchos, fisgas, arpones y sustancias químicas como cloro, sulfato de cobre u otros.
Medusa bola de cañón
Estatus en la Carta Nacional Pesquera
Indeterminado por ser un organismo de alta variabilidad y ciclo de vida complejo.
Especificaciones en la Carta Nacional Pesquera
Mantener una captura de 750 a 1,000 kg por panga por viaje; tallas mínimas de captura basados en el diámetro de campana.
Permisos de pesca comercial
No pueden exceder los dos años de duración.
Consideraciones para el Proyecto
En concordancia con las consideraciones estipuladas en la Carta Nacional Pesquera, de los aprovechamientos de moluscos y crustáceos, la pesquería de la jaiba y del caracol chino, por altos volúmenes de aprovechamiento histórico, necesitan de particular monitoreo dentro del presente proyecto. En este sentido, resulta importante recalcar que los volumen de captura de jaiba del último trienio con respecto de las capturas del periodo comprendido entre 2004 y el 2009, han bajado a prácticamente la mitad. Las pesquerías de medusa bola de cañón y almeja generosa, al sólo contar con una cooperativa con permisos de pesca para su desarrollo y al estar bajo informando constantemente al INAPESCA el estatus de las poblaciones y ésta emitiendo dictámenes respectivos, el proyecto no presenta gravamen alguno respecto del estatus sustentable de las pesquerías. Por su parte, la pesquería de pulpo es quizá una de las menos desarrolladas por el sector ribereño de Puerto Peñasco, por lo que sólo hay que prestar particular interés en que dicha pesquería se realice con las artes de pesca acreditadas en la Carta Nacional Pesquera. Finalmente, las pesquerías de callo de hacha y almeja catarina se encuentran al máximo sustentable, por lo que es importante que en su aprovechamiento se respeten las tallas mínimas permitidas y que se establezcan medidas que busquen acotar su extracción durante agregaciones reproductivas.
II.3. Características biológicas y ecológicas de las principales especies objetivo del proyecto, e interacciones tróficas en el Golfo de California. En la Tabla II.18 se describen los principales rasgos de la biología y patrones de distribución de las principales especies objetivo del Proyecto, mismas que serán de gran utilidad para comprender el entramado trófico del sistema marino del Alto Golfo de California, analizado líneas abajo.
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Tabla II.18. Síntesis de los ciclos de vida, distribuciones y relaciones ecológicas de las principales especies objetivo del proyecto.
Ciclo de vida Distribuciones Relaciones ecológicas Camarón azul (Litopenaeus stylirostris).
- Ciclo de vida corto 18 a 24 meses (CNP 2010). - Libera hasta 400,000 nauplios (FAO 1995). - Detritívoro (Martínez- Córdoba y Peña-Messina 2005). - Nivel trófico 3.0 (Morales- Zárate et al. 2004).
- Pacífico Este: De México a Panamá. - Se encuentra desde la zona intermareal, 5 a 45 m de profundidad. - Asociado a fondos lodosos o arenosos (FAO 1995).
- Es presa de 12 grupos funcionales, los principales son jaiba, estomatópodo, Sciaenidos (Chano y curvina), Serranido (baqueta), Rhinobatidos (guitarra), mantaraya, lenguado y totoaba (Morales-Zárate et al. 2004). - Índice de sobrelapamiento de nicho trófico 0.8 a 1 con estomatópodos, mantarraya, camarón café, camarón de roca y peces planos (Morales-Zárate et al. 2004).
Chano norteño (Micropogonias megalops).
- Utiliza las aguas del delta del Río Colorado para criar las larvas (Román-Rodríguez2000). - Nivel trófico 3.34 (FishBase). - Nivel trófico 3.5 (Morales- Zárate et al. 2004).
- Pacífico Este Central: México. - Hasta 28 m (FishBase).
- Es presa de 7 grupos funcionales, donde los principales son: Lobo marina, vaquita, tiburón, totoaba (Morales-Zárate et al. 2004). - Ha sido registrado como parte de la dieta de totoaba (Román-Rodríguez 2000). - Se alimenta principalmente de sardina bocona (Cetengraulis mysticetus) (Román-Rodríguez 2000). - Se alimenta de camarones peneídos, peces pelágicos chicos, bento-pelágicos, lenguados, entre otros peces pequeños (Ainsworth et al. 2009). - Índice de sobrelapamiento de nicho trófico 0.8 a 1 con tiburones (Morales-Zárate et al. 2004).
Sierra (Scomberomorus sierra, S. concolor)
- Especies migratorias que desovan cerca de la costa, Madura sexualmente al alcanzar el 45 a 50% de su tamaño máximo, que se traduce en 3 a 4 años de vida. -Presentan generalmente dos épocas de reproducción asociados a periodos migratorios: la principal en invierno y otra en primavera. -La talla de primera madurez es de 45 cm. - Nivel trófico 4.49 (FishBase).
- Pacífico Este Central: La Jolla en el sureste de California, USA hasta las islas Galápagos y Paita, Perú (FishBase).
- Como adultos se alimenta de pelágicos menores y Cupleidos (Odontognathus and Opisthonema) (FishBase). -Se reporta que se alimenta de bentopelágicos, pelágicos chicos y cgrande (Ainsworth et al. 2009).
Jaiba verde (Callinectes bellicosus)
- Madurez sexual al año, libera hasta 1 400,000 larvas (estrategia r), período larvario de 50 a 70 días, época reproductiva de abril a septiembre (PANGAS 2009). - Nivel trófico 3.3 (Morales- Zárate et al. 2004).
- Zona costera del Océano Pacifico desde San Diego, California hasta Oaxaca, México, incluyendo el Golfo de California. - Aguas costeras de la plataforma continental hasta profundidades de 55 metros (PANGAS 2009).
- Es presa de 4 grupos funcionales, donde los principales son: Serranidos (baqueta), Rhinobatidos (guitarra) (Morales-Zárate et al. 2004)
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Ciclo de vida Distribuciones Relaciones ecológicas Tiburón bironcha (Rhizoprionodon longurio) y Tiburón tripa (Mustelus spp.)
- Bajo poder reproductivo: lento crecimiento, madurez tardía, gestación prolongada, alta longevidad, baja fecundidad, frecuencia reproductiva desconocida, mecanismo stock reclutamiento denso dependiente (Mejia- Salazar 2007). - Nivel trófico 4.1(Morales- Zárate et al. 2004).
- Sur de California hasta Perú. - Especie costera hasta plataforma continental. - Se congrega en la desembocadura de ríos y lagunas costeras (Mejia- Salazar 2007).
- Depredador tope, se alimenta de todo los otros niveles tróficos principalmente de peces (Morales-Zárate et al. 2004). - Se ha reportado en su contenido estomacal cangrejos y langostas, meibentos y macrobentos (Ainsworth et al. 2009).
Mantas (Dasyatis brevis, Gymnura marmorata)
-Bajo poder reproductivo: lento crecimiento, madurez tardía, gestación prolongada, alta longevidad, baja fecundidad, frecuencia reproductiva desconocida, mecanismo stock reclutamiento denso dependiente (Santana-Morales et al. 2004). - Nivel trófico 3.2 (Morales- Zárate et al. 2004)
- Norte de EUA, hasta Perú, incluyendo el Golfo de California, México. - Vive entre 1-70 m de Profundidad (Santana-Morales et al. 2004)
- Es presa de 7 grupos funcionales donde los principales son: Rhinobatidos (guitarra), Serranidos, estomatópodos (Morales-Zárate et al. 2004). - Se alimenta de cangrejos y langostas, bivalvos, macrobentos y meiobentos (Ainsworth et al. 2009). - Índice de sobrelapamiento de nicho trófico de 0.8 a 1 con guitarra (Morales-Zárate et al. 2004).
Guitarra (Rhinobatos productus)
- Ciclo reproductivo anual. Talla máxima (LT) para machos y hembras en la costa de Sonora es de 66 cm de y de 101 cm respectivamente (Márquez-Farías, 2007). La talla de primera madurez en el Golfo de California la alcanzan alrededor de los 53 y 57 cm LT para machos y hembras respectivamente (Márquez- Farías, 2007). Es una especie ovovivípara (Vivípara aplacentaria) (Musik y Ellis, 2005), se ha reportado que su fecundidad varía entre 1 a 10 embriones (cinco en promedio) (Márquez-Farías, 2007) y de 6 a 16 embriones (Villavicencio-Garayzar, 1993). Periodo de gestación es alrededor de 4 a 5 meses Marquéz-Farías, 2007). - Nivel trófico 3.2 (Morales- Zárate et al. 2004).
- San Francisco, California, EU hasta Mazatlán, Sinaloa incluyendo el Golfo de California, México (Santana- Morales et al. 2004).
- Es presa de 7 grupos funcionales donde los principales son: Rhinobatidos (guitarra), Serranidos, estomatópodos (Morales-Zárate et al. 2004). - Se alimenta de cangrejos, gusanos, almejas y pequeños peces durante la noche (FishBase).
Lenguado (Paralichthys aestuarius)
- Se van a aguas someras para liberar las larvas, larvas están en zonas mucho mas someras que en las de desove (Minami y Tanaka 1992) - Nivel trófico 3.1(Morales- Zárate et al. 2004).
- Pacífico Este central: Baja California, México y el Golfo de California. - Zona costera hasta 44 m profundidad (FishBase).
- Es presa de 11 grupos funcionales, donde los principales son: Totoaba, Rhinobatidos (guitarra), lenguados (Morales-Zárate et al. 2004). - Se alimenta de camarones peneídos, organismos bento-pelágicos y pelágicos chicos (Ainsworth et al. 2009) - Índice de sobrelapamiento de nicho trófico 0.8 a1 (Morales-Zárate et al. 2004).
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Ciclo de vida Distribuciones Relaciones ecológicas Lisas (Mugil cephalus, M. curema)
-Especie costera, frecuente en estuarios y ríos, usualmente en escuela sobre la arena o fango. - Madura sexualmente a los 3 o 4 años de edad, las hembras liberan entre 0.8 y 2.6 millones de huevos. - Nivel trófico 2.13 (FishBase).
- Distribución subtropical - Marino, agua dulce, salobre, bento-pelágico, rango de profundidad 0 - 120 m (FishBase).
- Se alimenta de zooplancton, larvas, detritus y organismos bentónicos como juveniles de peces (FishBase).
Caracol chino negro (Hexaplex nigritus)
- Agregaciones reproductivas finales de primavera y principios de verano (Mayo a Agosto), edad de madurez sexual 2 a 3 años, tiempo de incubación de 18 a 31 días, larvas producidas en un año ~500,000 a 1,500,000 (PANGAS 2009). - Nivel trófico 3.55 (FishBase).
- Endémico Golfo de California, aunque se ha registrado su presencia desde la Jolla California EU hasta el Golfo de Tehuantepec, Oaxaca. - Habita desde la zona intermareal hasta 60 m profundidad (PANGAS 2009).
- Se alimentan principalmente de crustáceos, teleósteos, bivalvos y poliquétos (Santana- Morales et al. 2004). carnívoro voraz, principalmente de otros moluscos como almejas Glycimeris gigantea, Chione spp., Megapitaria squalida y mejillones modiolux capax, Arca pacifica (Observaciones personales, Arizona Sonora Desert Museum 2009, Brusca 2002).
Pulpo (Octupus bimaculatus)
-Los pulpos se acercan a la costa para su reproducción. - En Puerto Peñasco, la reproducción es de febrero a Mayo, fertilización interna, depósito de huevos en rocas y liberación de paralarvas al plancton (PANGAS 2009). - Nivel trófico 2.9 (Morales- Zárate et al. 2004).
- Santa Bárbara, California, E.U.A. hasta Punta Eugenia, B.C., y El Golfo de California, México. - Hábitats rocosos de la zona intermareal hasta 50 m de profundidad (PANGAS 2009).
- Es alimento de 9 grupos funcionales, los principales son ballena dentada, vaquita, Myctophidos (Morales-Zárate et al. 2004). - Índice de sobrelapamiento de nicho trófico de 0.8 a 1 con peces pelágicos (Morales-Zárate et al. 2004).
Almeja Catarina (Argopecten circularis)
- Habita lagunas costeras en fondos arenosos, fangosos y pastos marinos, se reproduce durante todo el año, presentando picos máximos en marzo y agosto (Massó-Rojas 1996). - Acoplamiento a años fríos y los agregaciones de langostilla Pleuroncodes planipes (Maeda- Martínez et al. 1993). - Nivel trófico 2.5 junto con invertebrados bentónicos (Morales-Zárate et al. 2004).
- Pacífico Este central: Isla de Cedros, B.C., Golfo de California, hasta Paita en Perú. - Zona intermareal hasta 35 m de profundidad (Massó-Rojas 1996).
- Es alimento de 18 grupos funcionales, los principales son estomatópodos, mantas, peces planos y camarón de roca (Morales- Zárate et al. 2004).
Baqueta (Epinephelus acanthistus)
- Presenta madurez sexual a los 64 cm, aproximadamente a los 7 años de edad, tiene fecundación externa, con larvas de vida libre que tardan de 20 a 50 días. Pico reproductivo en julio. - Nivel trófico 3.96 (FishBase).
- Pacifico Este: Sureste de California en EUA, hasta sur de Perú. - Marino demersal 46 -90m profundidad (FishBase).
-Es alimento de 4 grupos funcionales y es depredador de 15, se alimenta de invertebrados y crusteceos, complementando su dieta con peces como morenas y congrios y el alimento menos frecuente en su dieta son los moluscos (Gómez et al.1999).
Fuente: Tomada de Pérez-Valencia et al. (2011).
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II.3.1. Interacciones tróficas e interdependencia ecológica de las principales especies involucradas en el proyecto. Existen diversas relaciones ecológicas entre los organismos que componen un ambiente dado que pueden servir de base para establecer modelos ecosistemicos cuyos resultados puedan ser empleados para generar esquemas de aprovechamiento de los recursos naturales sostenibles respecto de los flujos de materia y energía (manejo basado en el ecosistema). En los ambientes marinos, quizá la relación ecológica que presenta mayores facultades en el sentido anteriormente señalado, son las relaciones depredador-presa. Las relaciones depredador-presa juegan un papel muy importante en el mantenimiento del equilibrio entre las abundancias e incluso las distribuciones de las especies, permitiendo con ello modelados ecosistemicos de resolución trófica, a partir de la definición de los grupos funcionales que componen el entramado o la red alimentaria. Para el Alto Golfo de California se identificaron cuatro modelos ecosistémicos (Morales-Zarate et al. 2004, Lozano 2006, Lercari y Arreguín-Sánchez 2009, Ainsworth et al. 2011) de entre los cuales se seleccionó el Modelo de Ecosistema Atlantis socializado por Ainsworth et al. (2009; 2010) el cual sigue el flujo de nutrientes a través de las relaciones tróficas de los principales grupos biológicos del sistema. Como se muestra en la Tabla II.19, a partir de un metanálisis de la literatura científica y del análisis estomacal de 209 ejemplares de especies capturadas con la totalidad de las artes de pesca incluidas en el proyecto, se definieron 12 grupos funcionales de depredadores y 51 de presas. En la Figura II.21 se muestran las contribuciones de los grupos funcionales de presas a la dieta de los grupos funcionales de depredadores identificados. Tabla II.19. Grupos funcionales de depredadores y su relación con los grupos funcionales de presas (elaborado a partir de Ainsworth et al. 2009)
Grupo funcional de depredadores
Número de especies comprendidas en el grupo
Número de grupos funcionales de presas
Tiburones pelágicos grandes
13 26
Peces arrecífales chicos 106 33 Pelágicos grandes 37 23 Tiburones migratorios chicos
4 10
Peces demersales chicos 130 43 Rayas 23 24 Peces arrecífales grandes 58 37 Peces herbívoros 14 12 Lenguados 33 9 Curvinas y berrugatas 29 40 Macarela 5 20 Extranjero 2 21
Prosiguiendo con el Modelo, a través de un análisis de comparación de la similitud de las dietas se identificaron dos grandes grupos alimenticios generales: pelágico y demersal (Figura II.22). El grupo pelágico consiste de macarela, extranjero, lenguados y especies pelágicas grandes; todos consumen pelágicos pequeños, merluza, camarón
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azul, cangrejos y langosta. El grupo demersal incluye peces grandes de arrecife, rayas, tiburones, tiburones pequeños migratorios, peces demersales pequeños, peces herbívoros y peces de arrecife pequeños; se alimentan generalmente de camarón azul, equinodermos herbívoros, cangrejos, langostas, macrobentos carnívoro, meiobentos, bivalvos, invertebrados sésiles y pastos marinos.
Figura II. 21. Grandes grupos alimenticios definidos para el Alto Golfo de California a partir del análisis de similitud del contenido estomacal (tomado de Ainsworth et al. 2009)
Finalmente, se generó una red trófica para el AGC que presenta un panorama completo de las diversas interacciones entre los depredadores y sus presas (Figura II.23). La posición vertical de cada caja dentro del gráfico está en función del nivel trófico determinado para cada grupo funcional acorde con los valores de la literatura. En la parte inferior se presentan los niveles tróficos cercanos a la base de la cadena trófica (correspondientes a los productores), los consumidores primarios y secundarios ocupan el tercer y cuarto nivel trófico; mientras que el último nivel está integrado por los depredadores tope.
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Figura II. 22. Red trófica representada para el Alto Golfo de California (tomado de Ainsworth et al. 2009). Cada caja está escalada a su tamaño proporcional de biomasa.
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Figura II. 23. Contribuciones de los grupos funcionales de presas a las dietas de los grupos funcionales de depredadores identificados en el Alto Golfo de California (Tomado de Ainsworth et al. 2010).
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Figura II. 23 (continuación). Contribuciones de los grupos funcionales de presas a las dietas de los grupos funcionales de depredadores identificados en el Alto Golfo de California (Tomado de Ainsworth et al. 2010).
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Figura II. 23 (continuación). Contribuciones de los grupos funcionales de presas a las dietas de los grupos funcionales de depredadores identificados en el Alto Golfo de California (Tomado de Ainsworth et al. 2010).
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Figura II. 23 (continuación). Contribuciones de los grupos funcionales de presas a las dietas de los grupos funcionales de
depredadores identificados en el Alto Golfo de California (Tomado de Ainsworth et al. 2010).
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II.4. Programa de trabajo del proyecto y elementos del mismo que pueden generar efectos potenciales sobre el medio ambiental y socioeconómico.
El programa de trabajo de cualquier manifestación de impacto ambiental referente a
proyectos sectoriales de tipo productivos y/o extractivos debe estar definido por sus ciclos
laborales. El programa de trabajo del presente proyecto se somete a aprobación ante la
Secretaría por un periodo que comprende dos ciclos anuales de pesca, contados a partir
de la dictaminación de la DGIRA. Considerando el periodo de sometimiento a evaluación
del manuscrito y la temporalidad en el proceso de revisión y dictámen, es probable que el
ciclo anual de pesca inicie precisamente en el transcurso del mes de agosto, que es
cuando las embarcaciones facultadas con los permisos de pesca respectivos, se
disponen a la captura de tiburones, rayas y caracol dentro de la Zona de Amortiguamiento
de la RBAGCyDRC.
El ciclo anual de pesca del Sector promovente incluye tanto al conjunto de
actividades preparatorias y previas a la actividad, como propiamente todas aquellas
operaciones que tienen lugar en las embarcaciones o en el área de desembarque.
Durante el componente de preparación para las actividades pesqueras, se llevan a cabo
el aseguramiento de la tripulación, el cumplimiento de trámites administrativos y el
denominado avituallamiento, referente a la adquisición de los insumos y la reparación de
las artes y los equipos de pesca. Por su parte, las operaciones pesqueras ribereñas
desarrolladas por el Sector se realizan de manera diaria, en lo que se conoce como una
faena de pesca, misma que incluye la ubicación de pescaderos, los lances de las artes de
pesca o en su defecto la sumersión de los buzos, el relevamiento, el manejo de la captura
y por último el retorno a puerto. En la Tabla II.20, se muestra el cronograma prototípico de
un ciclo anual de pesca desarrollado por el proyecto.
II.4.1. Volúmenes de captura objetivo e incidental esperados por pesquería durante
el desarrollo del proyecto.
Los avances en investigación respecto a la eficiencia pesquera en el Alto Golfo de
California se han centrado en la flota de altura, particularmente en definir la proporción de
captura camarón/fauna de acompañamiento. Los resultados en este sentido, refieren
proporciones variantes que van desde 1:2 hasta 1:10 (Chapa, 1976; Rosales, 1976). De
dichas proporciones, se estiman 150,000 toneladas anuales de fauna incidental, entre las
cuales el 12% corresponden a 83 especies de crustáceo, el 8% pertenece a 31 especies
de moluscos y cerca del 80% restante corresponden a 187 especies de diferentes grupos
funcionales de peces (Hendrickx, 1985; Van Der Heiden, 1985; INAPESCA, 2000).
No existe literatura científica referente a las proporciones históricas de las capturas incidentales de las pesquerías ribereñas en el Alto Golfo de California. Sin embargo, con el objeto de brindar una aproximación a la eficiencia pesquera esperada por el proyecto, tomaremos como punto de referencia el reciente estudio elaborado por CEDO para caracterizar la captura incidental de las pesquerías ribereñas realizadas en el AGC con
68
observadores a bordo de las embarcaciones menores, así como los oficios de arribo para los últimos tres años proporcionados por la oficina local de pesca. Es importante recalcar el carácter especulativo de dicho ejercicio, ya que como se describe en el apartado II.2.2. del presente manuscrito, el Programa de Monitoreo a Bordo referido incluye datos de manera conjunta para las localidades de San Felipe, El Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco (por lo que no se cumple con el principio de independencia de las subpoblaciones) además de no significar un ejercicio de muestreo estadísticamente representativo. En esta misma tónica, los datos de captura proporcionados por la oficina de pesca tomados como absolutos para establecer volúmenes esperados de captura incidental, en muchos de los casos se encuentran sobreestimados por la incorporación de capturas realizadas por el sector de altura. Tomando en consideración las pautas aludidas con antelación, se especula una eficiencia pesquera del proyecto del orden de 1:0.16, en donde a las 2,125 toneladas anuales esperadas de captura total le corresponderían 340 toneladas de captura incidental. Dicha captura incidental se comprendería de alrededor de 140 diferentes especies, dentro de las cuales la pesquería del camarón azul captura 61 especies y el chano 26; entre ambas pesquerías, aportan el 86% del volumen total de captura incidental. En la Tabla II.20 se dilucida la proporción entre captura objetivo y captura incidental, a partir de las capturas anuales totales esperadas para las principales pesquerías desarrolladas por el proyecto. Tabla II.20. Relación de volúmenes de captura objetivo y captura incidental esperadas por el proyecto.
Pesquería Eficiencia pesquera
Captura total esperada
Captura objetivo
esperada
Captura incidental esperada
Camarón azul 1:0.74 17 t 12.58 t 4.42 t Chano 1:0.32 681.5 t 463.42 t 218.08 t Sierra 1:0.06 15.3 t 14.38 t .91 t Tiburones 1:0.2 85 t 68 t 17 t Manta 1:0.2 247.6 t 198.08 t 49.52 t Guitarra 1:0.2 151.8 t 121.44 t 30.36 t Baqueta 1:0.66 61.8 t 21.01 t 40.78 t Jaiba 1:0.05 635 t 603.25 t 31.75 t Caracol 1:0 170 t 170 t 170 t Otras4 1:0 60 t 60 t 60 t
Totales 1:0.16 2,125 t 1785 t 340 t
II.4.2. Residuos a generar.
La actividad pesquera ribereña del presente Proyecto, genera diferentes tipos de residuos
acorde con las lógicas de sus principales fases representadas en la Tabla II.22. Dentro de
la fase de mantenimiento de las embarcaciones menores, realizadas generalmente en
talleres mecánicos o en las propias casas de los operadores pesqueros, se generan
4 Se consideran los estimados de Callo de Hacha, Pulpo, Almeja Catarina, Almeja sifón, y Medusa
Bola de Cañón; pesquerías con nula captura incidental.
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residuos peligrosos como son los aceites de motor y lubricantes quemados. Durante la
reparación de las embarcaciones, se generan residuos de manejo especial tales como las
partes estructurales de las embarcaciones (fibra de vidrio) o las propias partes mecánicas.
Por su parte, durante las fases de la identificación de los pescaderos y el retorno a
puerto, cuando los operadores pesqueros por el transito náutico disponen de tiempo para
la ingesta de alimentos, se generan residuos sólidos urbanos (principalmente inorgánicos)
producto de las envolturas de los productos alimenticios consumidos. Finalmente, durante
la fase de manejo de la captura a bordo y en el desembarque, se generan residuos
orgánicos por los propios subproductos pesqueros; entre las estimaciones que se han
documentado para los rendimientos pesqueros, se sugiere que de la captura total de
camarón se genera aproximadamente un 30% de residuos, 85% para el caracol rosa y
negro; 60% para la jaiba y un promedio de entre 30 y 40% para las diferentes especies
comerciales de pescado.
II.4.3. Recomendaciones generales para alcanzar la sustentabilidad ambiental.
Acorde con los elementos del Proyecto susceptibles de generar impactos ambientales
negativos que afecten la integridad del Sistema Ambiental Regional, la sustentabilidad
ambiental del mismo puede lograrse a través de los siguientes tres ejes rectores: (i) cabal
cumplimiento con las disposiciones regulatorias en materia náutica, pesquera y ambiental;
(ii) disminución de las capturas incidentales y de organismos fuera de talla comercial y en
estadios reproductivos y; (iii) atención a la generación e incorrecta disposición final de
residuos sólidos urbanos, residuos de manejo especial y residuos peligrosos.
Con respecto al cumplimiento de las regulaciones jurídico aplicables, se deberá
garantizar que cada una de las embarcaciones incorporadas al Proyecto se encuentren
debidamente matriculadas y cuenten con los certificados y dispositivos de seguridad
náutica, que sean poseedores de permisos de pesca vigentes y que sus ejercicios de
pesca respectivos se desarrollen exclusivamente para aquellas pesquerías acreditadas,
con las artes, equipos y técnicas estipuladas. Respecto de las regulaciones ambientales,
el ejercicio pesquero de las embarcaciones deberá respetar las vedas oficiales, las
poligonales de suspensión temporal de artes de pesca especificas o de exclusión total de
actividades pesqueras en pro de garantizar la protección de la vaquita marina, someterse
al procedimiento de evaluación de impacto ambiental y acatar fielmente las disposiciones
que emanen en la materia, así como garantizar la calidad del hábitat y la continuidad
evolutiva de las especies protegidas enlistadas en la NOM-059-SEMARNAT-2010.
Por su parte, las principales recomendaciones institucionales que se han generado
en busca de reducir la captura incidental de la pesca ribereña estriban en la
protocolización de artes de pesca alternativos a las redes de enmalle o agalleras, tales
como los coordinados por WWF e INAPESCA a través del proyecto “Evaluación de artes y
métodos de pesca alternativos para las pesquerías artesanales de camarón y escama del
Alto Golfo de California”, que incluyen poner a prueba varios diseños experimentales
como, redes suriperas y red RS-INP para la captura de camarón, trampas para camarón,
trampas para peces, palangres de fondo, dispositivos agregadores de peces. Hasta la
70
fecha están disponibles los resultados de las pruebas con suriperas y la red RSINP, los
cuales se resumen a continuación. La red RS-INP es de túnel corto que posee una
segunda relinga inferior tipo “escalera“, dispositivos excluidores de peces y tortugas
marinas, gradiente en el tamaño de malla a lo largo del cuerpo de la red, puertas de
arrastre hidrodinámicas y paneles de la malla sin nudos construidos con fibras de
polietileno de alta tenacidad (Figura II. 24).
(1) Dispositivo excluidor de tortugas, diseño super shooter; (2) Dispositivo reductor de bycatch; (3) Incorporación de una segunda relinga inferior tipo “escalera”; (4) Paneles de la malla sin nudos construidos con fibras de polietileno de alta tenacidad; (5) Alargamiento del gradiente en el luz de la malla a lo largo del cuerpo de la red: alas=”, cuerpo y copo”; (6) Adaptación de puertas de arrastre de acero de diseño hidrodinámico.
Figura II.24. Representación gráfica de una red de arrastre prototipo RS-INP-MEX de 50‟ de relinga superior. Tomado de INAPESCA-WWF (2010).
De acuerdo con los reportes de INAPESCA-WWF (2010) la red prototipo demostró reducir en 50% el volumen de captura incidental en la pesca de camarón y ahorrar hasta 30% del consumo de combustibles en experimentos efectuados con pescadores ribereños de Sinaloa y Baja California Sur. Generalmente obtiene capturas de camarón más limpias (menos captura incidental) y en el caso del Alto Golfo de California elimina el riesgo de captura incidental de especies amenazadas. Con información generada en diciembre de 2008, basada en 118 viajes de pesca experimental en las inmediaciones del SFE y GSC, se efectuaron 296 lances de pesca (134 con chichorro y 162 con el prototipo), con una proporción de lances abortados < 20%, se encontró que los chinchorros (aretes de pesca tradicionales) obtuvieron 900 Kg de camarón entero, mientras que el prototipo capturó únicamente 100 Kg. Los resultados presentados, en base a la opinión técnica del INAPESCA no se consideran determinantes ni estadísticamente significativos, por lo que se sugiere ampliar los muestreos.
Por su parte, la “atarraya suripera” es una red activa o movible durante su operación que constas de una falda semicónica con plomos en su parte más ancha, los cuales rozan el fondo. La parte más angosta de la falda contiene embudos y bolsos, en los cuales queda atrapado el camarón al trepar por la falda. La red se opera
71
aprovechando las corrientes de agua y/o viento (Figura II.25). Los bajos niveles de rendimiento de la “atarraya suripera” comparados con los de los chinchorros de línea la descalifican como una opción viable para satisfacer los volúmenes de producción requeridos por esos mercados especializados.
Figura II.25. Representación gráfica de una “red suripera”. Tomado de INAPESCA-WWF (2010).
Finalmente, en lo concerniente a la atención de la generación y disposición de la
diferente tipología de residuos del Proyecto, deberá instrumentarse un programa de
manejo de los mismos, en donde se involucren de acuerdo a sus atribuciones los tres
órdenes de gobierno, en concordancia con lo dispuesto por la Ley General para la
Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR). Dicho programa, en atención a
las directrices recomendadas para operar programas integrales de manejo de residuos,
deberá comprender una etapa de planeación estratégica, la identificación y evaluación de
las opciones de la prevención, disminución, valoración y disposición final de los residuos
acorde a su clasificación y naturaleza, la operación del plan de acción y finalmente la
evaluación enfocada a mejoras.
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Tabla II. 21. Cronograma de actividades de un ciclo anual de pesca desarrollado por el proyecto.
Componente Etapa Fases Mes
Ene.
Feb.
Mar.
Abr.
May.
Jun.
Jul.
Ago.
Sep.
Oct.
Nov.
Dic.
Preparación
para el desarrollo de
las actividades pesqueras
Preparación
Aseguramiento tripulación
Trámites5 administrativos
Avituallamiento Adquisición de
insumos y reparaciones
Actividades pesqueras6
Operación
X
Inicia la temporada de camarón.
Inicia la temporada de tiburones y mantas, así como de caracol para los permisos comerciales 2015.
Inicia la temporada de jaiba.
Inicia la temporada de lisa.
X Inicio tentativo del ciclo anual de pesca para el proyecto.
5 Gestiones referentes a permisos de pesca comercial ante CONAPESCA; matriculaciones y certificados de seguridad ante SCT; y manifestación
de impacto ambiental ante SEMARNAT. 6 En el apartado II.1.1 del presente Capítulo, se presentan las temporalidades totales y específicas para el desarrollo de cada pesquería llevada a
cabo por el proyecto.
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Figura II.22. Árbol de componentes, etapas y fases del proyecto identificadas inicialmente que pueden ocasionar impactos
potenciales sobre el medio ambiental y socioeconómico.
Componente Etapa Fase Impactos potenciales
Preparación para el desarrollo de las actividades pesqueras
Preparación
Aseguramiento de tripulación
Generación de empleos (captura)
Trámites administrativos
Cumplimiento de la normatividad portuaria, pesquera y ambiental
Gobernanza
Avituallamiento
Adquisición de insumos y reparaciones de artes y equipos de pesca
Dinamismo comercial local y regional
Contratación de mano de obra calificada (pre captura)
Generación de residuos sólidos urbanos y peligrosos
Actividades pesqueras
Operación
Ubicación de caladeros
Ahuyentamiento de fauna marina (principalmente aves y mamíferos marinos)
Arrojo de residuos sólidos al mar
Eficiencia pesquera
Lance del arte de pesca
Sobrepesca
Captura de tallas menores a las legales
Captura de ejemplares enhuevados
Captura durante agregaciones reproductivas
Captura incidental de especies protegidas
Relevamiento Generación de artes de pesca fantasmas
Manejo de la captura
Agrupación de especies con valor comercial
Retorno al mar de la pesca de descarte
Liberación de capturas incidentales de especies protegidas
Retorno a puerto Generación de residuos orgánicos y sólidos urbanos
Generación de empleo (post captura)
Generación de ingresos
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III. VINCULACIÓN CON LOS INSTRUMENTOS DE PLANEACIÓN Y ORDENAMIENTOS
JURÍDICOS APLICABLES.
El proyecto “Manifestación de Impacto Ambiental para la Pesca Ribereña Sustentable de
Puerto Peñasco en la Porción Oriental de la Zona de Amortiguamiento de la Reserva Alto
Golfo de California y Delta del Rio Colorado” se vincula y manifiesta congruencia
operativa con los siguientes instrumentos de planeación y ordenamientos jurídicos
vigentes.
III.1. Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA), y
sus Reglamentos en materia de Evaluación de Impacto Ambiental (RLGEEPAMEIA)
y en materia de Áreas Naturales Protegidas (RLGEEPAMANP).
Publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 28 de enero de 1998 y con su
última reforma publicada DOF 09-01-2015, el proyecto atiende las disposiciones de la
LGEEPA respecto al Capítulo V Instrumentos de la Política Ambiental, Sección VI
Evaluación del Impacto Ambiental, específicamente en su Artículo 28.- en donde se
establecen como obras o actividades que requieren someterse a un proceso de
evaluación de impacto ambiental ante la Secretaría, los siguientes rubros que encuentran
correspondencia con el presente: a) Obras y actividades en áreas naturales protegidas de
competencia de la Federación; y b) Obras y actividades en humedales, manglares,
lagunas, ríos, lagos y esteros conectados con el mar, así como en sus litorales o zonas
federales. Por su parte, el proyecto se somete a las atribuciones otorgadas a la Secretaría
en el Artículo 34, Artículo 35, Artículo 35 BIS, así como a las especificaciones emitidas por
ésta en el Artículo 35 BIS 1, igualmente de la Sección VI, Capítulo V, de la ley en función.
Vinculado a la mención anterior, el proyecto atiende a las disposiciones del
RLGEEPAMEIA -cuyo texto vigente publicado en el DOF el 30 de mayo del 2000 -, en su
Capítulo II De las obras o actividades que requieren autorización en materia de impacto
ambiental y de las excepciones, específicamente en su Artículo 5.- en donde las
siguientes actividades expresas en el presente se señalan como requisitas a autorización
de la Secretaría en materia de impacto ambiental: a) Cualquier actividad que tenga fines u
objetivos comerciales, con excepción de las actividades pesqueras que no se encuentran
previstas en la fracción XII del artículo 28 de la Ley y que de acuerdo con la Ley de Pesca
y su reglamento no requieren de la presentación de una manifestación de impacto
ambiental, así como de las de navegación, autoconsumo o subsistencia de las
comunidades asentadas en estos ecosistemas; y b) Cualquier tipo de obra o instalación
dentro de las áreas naturales protegidas de competencia de la Federación; dentro de las
cuales, las actividades sometidas a excepción, no son afines al proyecto.
De igual manera, el proyecto presenta congruencia con las disposiciones del
RLGEEPAMANP publicado en el DOF el 30 de noviembre del 2000 y cuya última reforma
publicada DOF 21-05-2014, en su Título IV Del establecimiento de Áreas Naturales
Protegidas, Capítulo II De las declaratorias para el establecimiento de Áreas Naturales
Protegidas, específicamente en su Artículo 49.- en el que se establecen las directrices
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para realizar subdivisiones territoriales en porciones tipológicas de las ANP, dentro de las
que se identifican las siguientes zonas y subzonas:
1. Las zonas núcleo, que tendrán como principal objetivo la preservación de los ecosistemas a mediano y largo plazo, y que podrán estar conformadas por las siguientes subzonas:
a. De protección: Aquellas superficies dentro del área natural protegida, que
han sufrido muy poca alteración, así como ecosistemas relevantes o frágiles y fenómenos naturales, que requieren de un cuidado especial para asegurar su conservación a largo plazo, y
b. De uso restringido: Aquellas superficies en buen estado de conservación donde se busca mantener las condiciones actuales de los ecosistemas, e incluso mejorarlas en los sitios que así se requieran, y en las que se podrán realizar excepcionalmente actividades de aprovechamiento que no modifiquen los ecosistemas y que se encuentren sujetas a estrictas medidas de control.
2. Las zonas de amortiguamiento, tendrán como función principal orientar a que las actividades de aprovechamiento, que ahí se lleven a cabo, se conduzcan hacia el desarrollo sustentable, creando al mismo tiempo las condiciones necesarias para lograr la conservación de los ecosistemas de ésta a largo plazo, y podrán estar conformadas básicamente por las siguientes subzonas:
a. De uso tradicional: Aquellas superficies en donde los recursos naturales han sido aprovechados de manera tradicional y continua, sin ocasionar alteraciones significativas en el ecosistema. Están relacionadas particularmente con la satisfacción de las necesidades socioeconómicas y culturales de los habitantes del área protegida;
b. De aprovechamiento sustentable de los recursos naturales: Aquellas
superficies en las que los recursos naturales pueden ser aprovechados, y que, por motivos de uso y conservación de sus ecosistemas a largo plazo, es necesario que todas las actividades productivas se efectúen bajo esquemas de aprovechamiento sustentable;
c. De aprovechamiento sustentable de agroecosistemas: Aquellas superficies
con usos agrícolas y pecuarios actuales;
d. De aprovechamiento especial: Aquellas superficies generalmente de extensión reducida, con presencia de recursos naturales que son esenciales para el desarrollo social, y que deben ser explotadas sin deteriorar el ecosistema, modificar el paisaje de forma sustancial, ni causar impactos ambientales irreversibles en los elementos naturales que conforman;
e. De uso público: Aquellas superficies que presentan atractivos naturales
para la realización de actividades de recreación y esparcimiento, en donde
76
es posible mantener concentraciones de visitantes, en los límites que se determinen con base en la capacidad de carga de los ecosistemas;
f. De asentamientos humanos: En aquellas superficies donde se ha llevado a
cabo una modificación sustancial o desaparición de los ecosistemas originales, debido al desarrollo de asentamientos humanos, previos a la declaratoria del área protegida, y
g. De recuperación: Aquellas superficies en las que los recursos naturales
han resultado severamente alterados o modificados, y que serán objeto de programas de recuperación y rehabilitación.
En este sentido, y en concordancia con los lineamientos establecidos en el
Programas de Conservación y Manejo de la RBAGCyDRC, el proyecto se desarrollará
exclusivamente en una Subzona de Aprovechamiento Sustentable de los Recursos
Naturales de la RBAGCyDRC, al margen de su Zona Núcleo y de la Subzona de
Preservación Área de Conservación Vaquita Marina (Véanse el inciso III.5. del presente
capítulo, para mayor detalle).
En el mismo orden de ideas, el proyecto manifiesta correspondencia con el
RLGEEPAMANP, Título VI De los Usos, Aprovechamientos y Autorizaciones, Capítulo I
De los usos y aprovechamientos permitidos y de las prohibiciones, específicamente en su
Artículo 81.- en el que se establece que los tipos de aprovechamiento que podrán llevarse
a cabo dentro de las ANP sólo podrán realizarse para el beneficio de los pobladores que
ahí habiten, y acorde a las siguientes atenciones:
1. Autoconsumo, o
2. Desarrollo de actividades y proyectos de manejo y aprovechamiento sustentable de la vida silvestre, así como agrícolas, ganaderos, agroforestales, pesqueros, acuícolas o mineros siempre y cuando:
a. No se introduzcan especies silvestres exóticas diferentes a las ya
existentes o transgénicas;
b. Se mantenga la cobertura vegetal, estructura y composición de la masa forestal y la biodiversidad;
c. No se afecte significativamente el equilibrio hidrológico del área o
ecosistemas de relevancia para el área protegida o que constituyan el hábitat de las especies nativas;
d. No se afecten zonas de reproducción o especies en veda o en riesgo;
e. Tratándose de aprovechamientos forestales, pesqueros y mineros, cuenten con la autorización respectiva y la manifestación de impacto ambiental autorizada, en los términos de las disposiciones legales y reglamentarias aplicables;
77
f. Los aprovechamientos pesqueros no impliquen la captura incidental de especies consideradas en riesgo por las disposiciones legales y reglamentarias aplicables, ni el volumen de captura incidental sea mayor que el volumen de la especie objeto de aprovechamiento, salvo que la Secretaría, conjuntamente con la de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, establezcan tasas, proporciones, límites de cambio aceptables o capacidades de carga, así como las condiciones, para un volumen superior de captura incidental en relación con la especie objetivo, mediante acuerdo que deberá publicarse en el DOF cada tres años. En su defecto, el último acuerdo publicado mantendrá su vigencia.
g. No se realice la extracción de corales y materiales pétreos de los
ecosistemas costeros, y
h. Tratándose de obras y trabajos de exploración y de explotación de recursos mineros dentro de las áreas naturales protegidas, y en cumplimiento por lo dispuesto en el artículo 20, segundo párrafo de la Ley Minera, cuenten con la autorización expedida por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, de conformidad con el artículo 94 del presente Reglamento.
Así, los desarrolladores de la actividad pesquera del presente proyecto son
pobladores usuarios de la RBAGCyDRC, dentro sus labores no se introducen especies
exóticas o transgénicas, buscan no afectar el equilibrio hidrológico del ecosistema costero
y marino, los niveles de biodiversidad con énfasis particular en las especies bajo alguna
categoría de protección o en veda, así como se pretende garantizar que la captura
incidental de las artes de pesca con baja selectividad, no ascienda al 10% respecto de la
o las pesquerías objetivo (Véase el Capítulo XX, para mayor detalle).
III.2. Ley General de Vida Silvestre.
Publicada en el Diario Oficial de la Federación el 3 de julio de 2000 y con su última
reforma publicada DOF 26-01-2015, el proyecto prestará especial atención a lo estipulado
en su Título VI Conservación de la Vida Silvestre, Capítulo I Especies y Poblaciones en
Riesgo y Prioritarias para la Conservación, con énfasis particular en lo señalado en el
Artículo 60 Bis.- en donde se establece que ningún ejemplar de mamífero marino -
cualquiera que sea la especie- podrá ser sujeto de aprovechamiento extractivo, ya sea de
subsistencia o comercial, con excepción de la captura que tenga por objeto la
investigación científica y la educación superior de instituciones acreditadas; así como con
el Artículo 60 Bis 1.- en el que se establece que ningún ejemplar de tortuga marina -
cualquiera que sea la especie- podrá ser sujeto de aprovechamiento extractivo, ya sea de
subsistencia o comercial, incluyendo sus partes y derivados.
En este sentido, particularmente en atención al mamífero marino prioritario para la
conservación en la RBAGCyDRC: la vaquita marina, se cumplirá cabalmente con los
lineamientos estipulados en el programa de protección de la especie y en el acuerdo de
78
suspensión temporal de artes específicas en el Norte del Golfo de California para la
conservación de dicha marsopa (véanse los apartados III.8., y III.9., del presente
Capítulo). Por su parte, se evitarán las capturas incidentales de las diferencias especies
de quelonios, así como de la totoaba, prohibiendo el anclaje y la desatención de redes
agalleras con malla de luz grande, en la zona de desarrollo del proyecto.
En el mismo orden de ideas, el proyecto atiende nuevamente al Título VI de la Ley,
en este caso en su Capítulo III Áreas de Refugio para Proteger Especies Acuáticas,
particularmente en los Artículos 65, 66 y 67, 68 y 69, en los que se faculta a la Secretaría
para el establecimiento de dichas instrumentaciones y se describen las directrices
operacionales de éstas. Así, el proyecto cumplirá cabalmente con las disposiciones
establecidas en el acuerdo de establecimiento del área de refugio de la vaquita marina
(para mayor detalle, revisar el apartado III.7. del Capítulo presente).
III.3. Carta Nacional Pesquera.
La Carta Nacional Pesquera es la presentación escrita y cartográfica que incluye el
resumen de la información diagnóstica y evaluativa de la actividad pesquera y acuícola,
así como de los indicadores sobre disponibilidad y conservación de sus recursos
estratégicos, en aguas de jurisdicción federal. Su contenido es de carácter informativo
para los sectores productivos y debe de ser vinculante en la toma de decisiones de la
autoridad pesquera en la adopción e implementación de instrumentos y medidas para el
control del esfuerzo pesquero, así como en la resolución de solicitudes de concesiones y
permisos para la realización de actividades. En las fichas por especie o grupos
taxonómicos, se contienen los nombres comunes y científicos, los indicadores de la
pesquería, los lineamientos, estrategias y medidas de manejo, el esfuerzo pesquero
permisible, el comportamiento de la pesquería, la ubicación geográfica de las áreas de
pesca en las vertientes del país, así como una descripción y diseño de los distintos
sistemas que se emplean en la captura de dichos recursos pesqueros.
El proyecto contempla las consideraciones establecidas en las fichas de las
siguientes especies:
a. Camarón: se garantiza la no pesca ilícita, y no se incrementa el esfuerzo
pesquero, buscando contribuir a la recuperación de los stocks
camaroneros.
b. Escama: no se incrementan los esfuerzos pesqueros ni las zonas de
pesca, y se está a espera del cambio administrativo que promueva el
manejo de la pesquería por grupos de especies, así como de los estudios
técnicos que promuevan acciones de aprovechamiento estratégicas,
acorde con la biología y la ecología de las especies.
c. Mantas: no se incrementa el esfuerzo pesquero ni las zonas de pesca, y se
está a espera de los estudios técnicos que promuevan acciones de
aprovechamiento estratégicas, acorde con la biología y la ecología de las
especies.
79
d. Tiburones: no se incrementa el esfuerzo pesquero ni las zonas de pesca, y
se ésta atento a las medidas necesarias en caso de la disminución de su
captura.
e. Jaibas: no se incrementa el esfuerzo pesquero ni las zonas de pesca, se
respetan las capturas por unidad de esfuerzo, y se está en espera de la
valoración sobre la veda de la especie durante su fase reproductiva, así
como la protección en áreas de reproducción y crianza.
f. Pulpo: no se incrementa el esfuerzo pesquero ni las zonas de pesca, y se
está atento a las vedas susceptibles a reglamentar.
g. Caracol chino negro: no se incrementa el esfuerzo pesquero ni las zonas
de pesca, se respeta la administración por cuotas y se atienden las
evaluaciones bianuales de sus stocks.
III.4. Programa de Ordenamiento Ecológico Marino del Golfo de California
(POEMGC).
Publicado en Diario Oficial de la Federación el 15 diciembre del 2006, el POEMGC le
resulta aplicable al proyecto, ya que las actividades pesqueras ribereñas de éste se
pretenden desarrollar en la unidad de gestión ambiental costera UGC-6, dentro de la
región Este de la Zona de Amortiguamiento de la RBAGCyDRC.
La UGC-6 “Reserva del Alto Golfo”, limita con el litoral de los estados de Baja
California y Sonora, en una superficie comprendida de 5,429 km2 (Figura III.1). Dada su
ubicación dentro de dos ANP (la RBAGCyDRC y el APFFIGC), la unidad de gestión
representa un área de alta productividad primaria, con la presencia de importantes bahías
y lagunas costeras, mismas que contribuyen a que la zona sea área de distribución de
especies prioritarias para la conservación, entre las que destacan: la totoaba, varias
especies de tiburones y tortugas marinas, así como la vaquita marina (esta unidad
traslapa con el 71% del área establecida para su refugio). A su vez, la unidad presenta
alta aptitud para la pesca industrial y ribereña, con un nivel de presión general intermedio,
lo que se traduce en la necesidad de importantes interacciones Conservación-Pesca.
Así, se establece como lineamiento ecológico que las actividades productivas que
se lleven a cabo en esta unidad de gestión ambiental deberán desarrollarse de acuerdo
con las acciones generales de sustentabilidad, con especial énfasis en un enfoque de
prevención que permita mantener el actual nivel medio de presión marina. En este
sentido, el proyecto garantiza que las actividades pesqueras ribereñas se desarrollen de
acuerdo a los siguientes esquemas de sustentabilidad:
a. Se ajusten a los instrumentos de protección de stocks (vedas), implementados por
la SAGARPA.
b. Sus artes y equipos de pesca se ajusten a las consideraciones normativas,
dispuestas por la SAGARPA y la SEMARNAT.
80
c. Se respeten cabalmente las áreas de exclusión y suspensión temporal de pesca
con artes específicas, para la protección de la vaquita marina, establecidas por la
SEMARNAT y la SAGARPA.
d. Se asuman compromisos en materia de adopción de innovaciones tecnológicas,
propuestas por el INP.
Por su parte, en atención a la necesidad de lógicas preventivas en el desarrollo de las
actividades extractivas en la UGC-6, el proyecto busca comulgar con el Enfoque
Precautorio establecido en el numeral 8 del POEMGC, dentro del cual se estipula que
tanto la SAGARPA como la SEMARNAT deberán evaluar de manera detallada y articular
acciones para garantizar, los siguientes aspectos: 1) que los daños al ambiente no
sobrepasen los límites permisibles; 2) que se mitiguen o se limiten las agraviantes
ambientales; y 3) que se propicien las condiciones que aseguren la evolución, viabilidad y
continuidad de ecosistemas, hábitats y poblaciones en sus entornos naturales. Sin lugar a
dudas, el cumplimiento de las leyes en materia ecológica y pesquera, de las normas
oficiales mexicanas, de los acuerdos, así como el sometimiento al presente
procedimiento de evaluación de impacto ambiental, representan bastas acciones para
supeditarse a dicho enfoque precautorio.
Figura III.1. Localización de la Unidad de Gestión Ambiental UGC-6
81
III.5. Programa de Conservación y Manejo (PCM) Reserva de La Biosfera Alto Golfo
de California y Delta del Río Colorado.
Publicado el primero de julio de 2007, el PCM manifiesta como objetivo central la
conservación para el uso y aprovechamiento sostenible, presente y futuro, de la
diversidad e integralidad de la flora y fauna silvestre y acuática en los ecosistemas
naturales de la RBAGCyDRC. En relación al proyecto, destacan los siguientes objetivos
específicos del PCM:
1. Conservar la diversidad biológica y los ecosistemas del Desierto Sonorense, el
Alto Golfo de California y el Delta del Río Colorado.
2. Identificar, conservar, proteger y restaurar áreas críticas para especies endémicas,
en peligro de extinción, raras, amenazadas o sujetas a protección especial.
3. Asegurar la protección de sitios de desove y reclutamiento de especies de
importancia ecológica y comercial de la Reserva.
4. Conservar y proteger la diversidad genética de las especies para permitir la
continuidad de los procesos evolutivos.
5. Regular las actividades productivas para hacerlas compatibles con los objetivos de
conservación y protección de los recursos naturales y la biodiversidad.
6. Promover actividades económicas y administrativas que eleven la calidad de vida
de las comunidades residentes1, dentro de un marco ambiental sustentable.
Respecto a su Sección 7 Ordenamiento ecológico y zonificación, el proyecto no llevará
a cabo ninguna actividad dentro de la Zona Núcleo de la RBAGCyDRC, y en su Zona de
Amortiguamiento desarrollará actividad pesquera de ribera únicamente en la Subzona de
Aprovechamiento Sustentable de los Recursos Naturales Aguas Costeras, Subzona de
Aprovechamiento Sustentable de los Recursos Naturales Aguas Marinas Alto Golfo de
California, Subzona de Aprovechamiento de los Recursos Naturales Aguas Costeras de
Bahía Adair y Subzona de Aprovechamiento de los Recursos Naturales Humedales de
Bahía Adair, conforme a los lineamientos estipulados en su ordenamiento (Figura III.2 y
Tabla III.1).
1 Subrayado propio.
82
Tabla III.1. Actividades relacionadas con la pesca ribereña, permitidas y prohibidas en las Subzonas de manejo de la Reserva de la
Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado, dentro las cuales tiene injerencia el proyecto.
Subzonas de Manejo
Actividades pesqueras
Ca
ptu
ra m
anu
al d
e
mo
luscos
Pe
sca c
on a
lta
se
lectivid
ad
mu
ltie
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Pe
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to
Subzona de Aprovechamiento Sustentable de los Recursos Naturales Aguas Marinas Alto Gofo de California
per per per per per per
Subzona de Aprovechamiento Sustentable de los Recursos Naturales Aguas Costeras
per per per pro per per
Subzona de Aprovechamiento Sustentable de los Recursos Naturales Humedales Bahía Adair
per per per pro per per
Subzona de Aprovechamiento Sustentable de los Recursos Naturales Aguas Costeras Bahía Adair
per per pro pro per per
Leyenda: Per=permitida Pro=prohibida Fuente: Elaborado a partir de CONANP (2007).
83
Figura III.1. Zonificación de la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado (CONANP, 2007).
84
Por su parte, en relación a la Sección 8 Reglas Administrativas, el proyecto atiende a
las siguientes directrices operacionales del PCM:
Regla 9. Se requiere autorización por parte de SEMARNAT para la realización
de actividades pesqueras que puedas causar daños a los ecosistemas.
Regla 43. Para el desarrollo de actividades de aprovechamiento, se deberá
contar con las autorizaciones correspondientes, sujetarse a los términos de las
demás normativas ambientales aplicables y estar inscrito en el padrón de
usuarios de la Reserva.
Regla 44. Desarrollar las actividades de aprovechamiento en congruencia con
los términos y condicionantes de la subzonificación establecida.
Regla 45. El desarrollo de las actividades pesqueras con embarcaciones
menores no deberá implicar la captura incidental de especies consideradas en
riesgo.
Regla 69. Se prohíbe la pesca mediante el empleo de cal, dragas, arpones,
succionadores, venenos naturales o sintéticos, así como dispositivos
explosivos o eléctricos. Se prohíbe alterar sitios de reproducción, alimentación,
anidación o refugio de la vida silvestre. Se prohíbe arrojar, verter o descargar
desechos orgánicos, residuos sólidos o líquidos en los cuerpos de agua.
III.6. Normas Oficiales Mexicanas.
NOM-059-SEMARNAT-2010.
Publicada en el Diario Oficial de la Federación el 30 de diciembre de 2010, esta NOM
establece la protección ambiental-especies nativas de México de flora y fauna silvestres
Categorías de riesgo y especificaciones para su Inclusión, exclusión o cambio- Lista de
especies en riesgo. Dentro de la RBAGCyDRC existen 44 especies enlistadas en la NOM:
siete en peligro de extinción, cinco amenazadas y 32 especies bajo protección especial.
Particularmente para el proyecto resultan de particular interés, la vaquita marina y la
totoaba por ser endémicas del Golfo de California; la tortuga prieta del pacífico (Chelonia
mydas), la tortuga golfina (Lepidochelys olivácea) y la tortuga laúd (Dermochelys
coriácea), por representar a tres de las siete especies de reptiles marinos existentes a
nivel mundial; así como el delfín común de rostro corto (Delphinus desphis), delfín común
de rostro largo (Delphinus capensis), delfín de Risso (Grampus griseus), delfín de dientes
rugosos (Steno bredanensis), delfín nariz de botella o tonina (Tursiops truncatus) y el lobo
marino (Zalophus californianus), por representar el grupo de los mamíferos marinos.
85
NOM-016-PESC-1994.
Tiene como objeto establecer los términos y condiciones para el aprovechamiento de la
lisa (Mugil cephalus) y la liseta (Mugil curema) en aguas de jurisdicción federal. El
proyecto, en atención a los lineamientos de la Norma, no capturará ejemplares de lisa
menores a los 30 cm de longitud total y menores de 28 cm para la liseta. La luz de malla
que se emplearán en estas pesquerías dirigidas, será de 80 mm (3 ½ pulgadas) como
mínimo para la captura de lisa, y de 71mm (2 ¾ pulgadas) como mínimo para la captura
de liseta. Por su parte, los concesionarios, permisionarios y pescadores presentarán ante
la Secretaría un reporte mensual sobre los resultados de sus operaciones de captura.
NOM-039-PESC-2003.
Tiene como objeto establecer especificaciones para la pesca responsable de la jaiba
verde o jaibón (Callinectes bellicosus), la jaiba azul (C. arcuatus) y la jaiba negra o gigante
(C. toxotes), en las aguas de jurisdicción federal del litoral del Océano Pacífico, incluido el
Golfo de California. En este sentido y acorde con los lineamientos estipulados en la
Norma, el proyecto empleará trampas con estructura rígida con dimensiones máximas de
60 cm de largo y ancho, por 40 cm de altura para el litoral del Océano Pacifico (las
trampas llevarán al menos dos aberturas de escape próximos al piso o secciones de la
trampa). Por su parte, en atención a la Norma en esta pesquería dirigida no se utilizarán
redes de enmalle, fisgas y atarrayas, ni carnadas de origen animal ajenas al AGC, así
como tampoco se capturarán de hembras ovígeras ni ejemplares menores de 115 mm, 95
mm y 120 mm, de jaiba verde, jaiba azul y jaiba negra, respectivamente. El tiempo
máximo de permanencia de las trampas será de 24 hrs para cambiar la carnada, y se
emplearán un máximo de 80 trampas por embarcación, respetando las 43,600 trampas de
esfuerzo para el estado de Sonora. Los concesionarios, permisionarios y los pescadores
devolverán al agua los organismos que no cumplan las especificaciones mencionadas,
retirarán la totalidad de las trampas al término de la temporada, y registrarán en bitácoras
las circunstancias de la pesca, las cuales entregarán mensualmente a las oficinas
federales.
NOM-002-SAG/PESC-2013.
Publicada en el Diario Oficial de la Federación el 11 de julio de 2013, tiene por objeto
ordenar el aprovechamiento de las especies de camarón en aguas de jurisdicción federal.
En atención al apartado 4.1. el proyecto únicamente aprovechará camarón azul
(Litopenaeus stylirostris) en las Bahías y en la Zona Marina del Golfo de California,
mediante embarcaciones menores con motor fuera de borda no excedentes de 85.76
kilowatts de potencial nominal (equivalentes a 115 caballos de fuerza), en concordancia
con el apartado 4.2.1. Las artes de pesca empleadas, en atención al apartado 4.2.2.3 y al
86
sexto transitorio2, serán redes conocidas como "chinchorros de línea" construidas de nylon
monofilamento con hilo de diámetro mínimo de 0.27 milímetros, luz de malla mínimo de
63.50 milímetros (2 ½ pulgadas), y una longitud máxima de 200 metros, con
un encabalgado de entre el 50 y 70%, operadas por dos pescadores y con un máximo de
una red por embarcación menor. Dichas redes no se emplearan a una distancia menor de
2 kilómetros a ambos lados de las bocas que comunican al mar con bahías, lagunas
costeras, esteros y ríos, medidos desde cada una de las orillas de las bocas y hasta
una profundidad de 9.14 metros (5 brazas). En atención al apartado 4.5.1. de la Norma,
se evitará la extracción de larvas y postlarvas de camarón azul durante esta pesquería
dirigida.
NOM-029-SAG/PESC-2014.
Publicada en el Diario Oficial de la Federación el 11 de febrero de 2015, la Norma trata
sobre las especificaciones de aprovechamiento para la pesca responsable de tiburones y
rayas. En atención al apartado 4.2.2. el proyecto no realizará aprovechamiento dirigido ni
incidental de tiburón ballena (Rhincodon typus), tiburón peregrino (Cetorhinus maximus),
tiburón blanco (Carcharodon carcharias), pez sierra (Pristis perotteti, P. pectinata y P.
microdon) ni mantarrayas gigantes (Manta birostris, Mobula japanica, M. thurstoni, M.
munkiana, M. hypostomata y Mobula tarapacana). Acorde con los apartados 4.2.3. y 4.3.2.
se respetarán los periodos y zonas de veda, así como el esfuerzo pesquero que la
SAGARPA emita de correspondencia con la Carta Nacional Pesquera y con la NOM-009-
PESC-1993. No se realizará la pesca de tiburones ni de rayas, en las aguas marinas
localizadas frente a la desembocadura de ríos y lagunas costeras, en un área delimitada
por un semicírculo que tenga como diámetro una distancia que comprenda la boca del
cuerpo de agua y la línea litoral adyacente hasta 2.5 kilómetros a cada lado de los
extremos de la boca. d) En una franja marina de cinco kilómetros de ancho frente a las
principales playas de anidación de tortuga marina, durante las temporadas en que
desovan, de acuerdo con el apartado 4.3.4. Por su parte, conforme a lo estipulado en el
apartado 4.3.10. y 4.3.11. los permisionarios o concesionarios de las embarcaciones
menores se abstendrán a retener y trasportar vivos o muertos, enteros o partes de
tortugas y mamíferos marinos que eventualmente lleguen a ser capturados
incidentalmente; la flotilla de la embarcación se compromete a registrar la pesca incidental
y llevar un control estadístico mensual de las capturas por especie que entregará al titular
del permiso para que este, a más tardar el último día hábil de cada mes calendario, remita
2 En el que se establece que el “chinchorro de línea” podrá seguirse utilizando en las áreas marinas de la Zona
de Amortiguamiento de la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado, durante los
próximos tres años a partir de la entrada en vigor de la presente modificación de Norma, plazo en el que el
Gobierno Federal a través de las Dependencias involucradas, establecerá los mecanismos para procurar una
sustitución gradual del chinchorro y establecerá los mecanismos de compensación correspondientes. La
sustitución gradual será en un porcentaje de 30% anual durante los primeros dos años y 40% en el tercer año,
a cuyo término quedará sustituido el uso de este arte de pesca.
87
a la Oficina Federal de la Secretaría, correspondiente. Por su parte, de correspondencia
con lo establecido en los apartado 4.4.1., 4.4.2., 4.4.2.1., 4.4.2.2. 4.4.2.3. y 4.4.3. las
pesquerías se llevarán a cabo con embarcaciones menores de 10.5 metros de eslora,
con motor fuera de borda con una potencia nominal máxima de 115 caballos de fuerza, y
un motor adicional de repuesto con una potencia máxima de 75 caballos de fuerza;
mediante cimbras y redes de enmalle como artes de pesca, con las siguientes
especificaciones:
a) Cimbras: de fondo por embarcación en la zona marina, no mayores de 500
anzuelos, con un anzuelo por reinal y reinales con una longitud de hasta 5 metros,
con una sección de “alambrada” mínima de 20 centímetros y un anzuelo recto con
un tamaño mínimo igual o superior a 64 milímetros de largo por 22 milímetros de
abertura o circular o semicircular con un tamaño mínimo igual o superior de 45
milímetros de largo por 18 milímetros de abertura.
b) Redes de enmalle: una sola red de enmalle de fondo por embarcación en la zona
marina, con un máximo de 750 m de longitud por 50 mallas de altura máxima,
confeccionada de hilo de poliamida multifilamento de un máximo de 2.4 milímetros
de diámetro o de poliamida monofilamento de 2.1 milímetros de diámetro máximo,
con tamaño de malla mínimo de 152.4 milímetros (6 pulgadas).
NOM-014-SAG/PESC-2015.
Tiene por objeto establecer las especificaciones para regular el aprovechamiento de la
almeja generosa (panopea generosa y panopea globosa) en aguas de jurisdicción federal
del litoral del Océano Pacífico y Golfo de California. El proyecto, en atención a los
lineamientos de la Norma, llevará a cabo esta pesquería dirigida mediante el empleo de
una embarcación menor, equipada con un motor fuera de borda con potencia nominal de
hasta 85.76 kilowatts (equivalentes a 115 caballos de fuerza), un compresor de aire para
buceo semiautónomo ("hooka"), un Sistema de posicionamiento Satelital (GPS) y una
motobomba para el envío de agua a presión para la remoción del sustrato para selección
y extracción manual de los organismos (el cual se empleará minimizando la afectación al
lecho marino). En la extracción solamente intervendrán tres pescadores por embarcación:
el buzo, el "cabo de vida" y el "bombero o motorista"; el buzo estará debidamente
registrado en el padrón de buzos certificados avalado por las autoridades en materia de
competencia laboral. Por su parte, las actividades de pesca se realizarán únicamente
durante horario con luz del día, y todos los ejemplares de almeja generosa que sean
capturados, se desembarcarán enteros. Durante el desarrollo de la pesquería no se
llevara a cabo el “matado” de almejas a bordo, no se dejarán almejas extraídas en el
lecho marino, no se realizarán capturas fuera de las áreas y bancos autorizados, no se
realizará aprovechamiento a profundidades mayores a los 30 metros y no se llevará a
cabo aprovechamiento dentro de la Zona Núcleo de la RBAGCyDRC , ni dentro de la
Zona de Refugio de la vaquita marina. Finalmente, los concesionarios, permisionarios y
buzos registrarán las circunstancias de la pesca por jornada o día, en una bitácora
88
especial, a la oficina local de pesca, así como los arribos correspondientes dentro de las
72 horas siguientes al término de cada viaje.
III.7. Acuerdo mediante el cual se establece el Área de Refugio para la Protección de
la vaquita.
Publicado en el Diario Oficial de la Federación el 8 de septiembre de 2005 por la
SEMARNAT, en atención a las recomendaciones emitidas por el Comité Internacional
para la Conservación de la Vaquita (CIRVA), y cuyo objetivo la contribución a la
conservación del hábitat y el desarrollo de la especie, el proyecto atiende a la delimitación
geográfica de dicha área de refugio, misma que presenta la siguiente extensión y
ubicación: comprende una porción occidental del Alto Golfo de California, frente a las
costas del Estado de Baja California, con una superficie de 1,263.85 km2 delimitados por
los vértices con las siguientes coordenadas (Figura III.3):
A su vez, el área de refugio arriba señalado se subdivide en las siguientes dos
zonas:
1. Polígono a: La porción del área de refugio que se ubica dentro del
polígono de la RBAGCyDRC, la cual tiene una superficie de 897.09 km2 y
está delimitado por los vértices en las siguientes coordenadas:
89
2. Polígono b: La porción que se encuentra fuera de la RBAGCyDRC, la cual
tiene una superficie de 366.76 km2 con los vértices en las siguientes
coordenadas:
Figura III.3. Localización del Área de Refugio de la Vaquita Marina.
90
III.8. Programa de Protección de la Vaquita (PPV) dentro del Área de Refugio
ubicada en la porción occidental del Alto Golfo de California.
Publicado en el Diario Oficial de la Federación el 29 de diciembre de 2005 por la
SEMARNAT, el PPV tiene como objetivo establecer las bases y lineamientos generales y
específicos de conservación, así como promover las medidas y mecanismos para regular
las actividades productivas y la realización de obras que se pretendan desarrollar dentro
del área de refugio de la Vaquita; el proyecto atenderá íntegramente todos los apartados
del PPV, ya que no se llevará a cabo ningún tipo de actividad pesquera dentro del área
total establecida para la protección de la especie.
IIII.9. Acuerdo por el que se suspende temporalmente la pesca comercial mediante
el uso de redes de enmalle, cimbras y/o palangres operadas con embarcaciones
menores, en el Norte del Golfo de California.
Publicado en el Diario Oficial de la Federación el 10 de abril de 2015 de manera conjunta
por la SEMARNAT y la SAGARPA, y en atención a las recomendaciones emitidas en el
Reporte de la 5ta reunión del CIRVA, el Acuerdo establece la suspensión temporal de la
pesca comercial de embarcaciones menores mediante la implementación de redes de
enmalle, cimbras y/o palangres en la zona de distribución de la vaquita marina (Figura
III.4), producto de la considerable disminución poblacional de la especie en los últimos
años; el proyecto atenderá integralmente las disposiciones establecidas en el Acuerdo, ya
que en la zona en donde el proyecto traslapa con la regulación establecida, únicamente
se desarrollarán las actividades pesqueras que emplean el buceo y las trampas, como
artes de pesca.
Coordenadas de vértice de la zona de suspensión del aprovechamiento pesquero
mediante redes de enmalle, cimbras y/o palangres en el Noroeste del Golfo de California:
Puntos Longitud Latitud
A -114.0228 31.4933
B -114.022 30.095
C -114.6 30.095
D -114.8203 31.5875
E -114.5322 31.7033
91
Figura III.4. Localización de la zona de suspensión del aprovechamiento pesquero
mediante redes de enmalle, cimbras y/o palangres en el Noroeste del Golfo de California.
III.10. Plan de Acción de América del Norte para la Conservación.
Instrumento de corte voluntario publicado en 2008 por la Comisión de Cooperación
Ambiental de América del Norte (CCA); dicho plan señala como una de las principales
causas de la mortalidad de la vaquita marina, la incidentalidad en las redes de enmalle
dentro de las actividades pesqueras de ribera. En este sentido, el Plan sugiere el
desarrollo de artes y prácticas de pesca alternativos y considera apremiante retirar todo
tipo de redes de enmalle y agalleras del área de refugio de la especie. Como se ha venido
mencionando, el proyecto no desarrollará actividad pesquera alguna dentro del área de
refugio, ajusta sus artes de pesca a los lineamientos establecidos por la normatividad
nacional vigente, y expresa entera disposición a la adopción de las alternativas
tecnológicas que vaya promoviendo la autoridad nacional sectorial.
92
IV. DESCRIPCIÓN DEL SISTEMA AMBIENTAL REGIONAL Y SEÑALAMIENTO DE
TENDENCIAS DEL DESARROLLO Y DETERIORO DE LA REGIÓN.
IV.1. Delimitación y justificación del sistema ambiental regional.
Si bien existen diversas subdivisiones para regionalizar el Golfo de California, la mayoría
de ellas han concordado en que la zona que hoy comprende la RBAGCyDRC presenta
características oceanográficas, biológicas y ecológicas únicas y diferencias, mismas que
le justifican como unidad geográfica discreta: generalmente denominada Norte del Golfo
de California (Roden, 1964; Lavín y Marinone, 2003; SEMARNAT, 2006; CONANP, 2007).
No obstante, recientes investigaciones oceanográficas desarrolladas de manera conjunta
por el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE),
el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (CIBNOR), así como por el Centro
Interdisciplinario de Ciencias Marinas del Instituto Politécnico Nacional (CICIMAR-IPN),
han encontrado que, sometiendo los principales parámetros biofísicos1 a análisis de
similitud ambiental para identificar clúster, así como a análisis estadísticos para corroborar
diferencias significativas entre grupos, el Norte del Golfo de California es susceptible a la
siguiente subregionalización: a) Subregión Este, correspondiente a la zona costera
continental aledaña al Estado de Sonora; b) Subregión Centro; zona oceánica
correspondiente a la Cuenca Wagner; y c) Subregión Oeste, correspondiente a la zona
costera peninsular aledaña al estado de Baja California (Rodríguez Pérez, 2013).
En relación a lo anterior, y debido a que el presente proyecto no desarrollará
actividades pesqueras en la totalidad del Norte del Golfo de California, el Sistema
Ambiental Regional (SAR) queda definido como la Porción Oriental del Norte del Golfo de
California, comprendiendo la Zona de Amortiguamiento de la RBAGCyDRC en su límite
Este con la Bahía Adair, en su límite Oeste con la perimetral del área de refugio de la
vaquita marina, en su límite Norte con el pescadero conocido como “El Tornillal” y en su
límite sur con la propia delimitación perimetral de la Reserva. A su vez, el SAR presenta
las siguientes dos subunidades espaciales de homogeneidad ambiental relativa: 1)
Subsistema Costero, incluye la porción del litoral sonorense con aguas menores a los 30
metros de profundidad; y 2) Subsistema Marino, incluye la porción del área de cuenca con
aguas superiores a los 30 metros de profundidad (Figura IV.1).
Por su parte, la caracterización del SAR se desarrolla a partir de los siguientes
componentes y parámetros: a) Medio Abiótico, se describen y analizan el clima,
profundidad, sustrato, mareas y corrientes, turbidez, temperatura, nutrientes, y salinidad,
de manera general para el SAR como parte del Norte del Golfo de California y de manera
diferenciada para el Subsistema Costero y para el Subsistema Marino; b) Medio Biótico,
se describen y analizan de manera generalizada para el SAR, a los siguientes grupos
taxonómicos y sus interacciones ecológicas: plancton, flora marina, invertebrados,
1Producto de muestreos a través de estaciones oceanográficas durante el 2010, éstos fueron temperatura
(°C), salinidad (ups), turbidez (mg/L), granulometría (%), O2 (Disuelto) (mL/L), Clorofila “a” (μg/L) y profundidad (m).
93
moluscos, ictiofauna, mamíferos marinos, y quelonios; y c) Medio Socioeconómico, se
describen y analizan elementos relacionados con la historia, la población y la economía
de la localidad de Puerto Peñasco, Sonora, con especial énfasis en los datos sectoriales
de la pesca ribereña.
Figura IV.1. Delimitación del Sistema Ambiental Regional “Porción Oriental del Norte del
Golfo de California”.
94
IV.2. Análisis retrospectivo de la Calidad Ambiental del SAR.
En tanto región marina somera, en general, la calidad ambiental del Norte del Golfo de
California es altamente correlacional al funcionamiento ecológico deltaico del Rìo
Colorado. Puntualmente, en el área estuarina del Rìo Colorado es reconocido que su
diferencia de salinidad y profundidad respecto de la zona marina del NGC proporcionan
protección a una gran cantidad de grupos taxonómicos, el aporte de nutrientes por el río
aumenta la disponibilidad de alimento y, mediante cambios en la estructura fitoplactònica
incrementa la productividad orgánica primaria (Galindo Bect, Hernández Ayón y Huerta
Díaz, 2011).
Sin embargo, la interrelación hídrica superficial del Rìo Colorado con el Norte del
Golfo de California se ha modificado radicalmente por la desviación de sus flujos para
usos domésticos y agrícolas en el suroeste de los Estados Unidos de América y el
Noroeste de México. Particularmente la construcción de la Presa Hoover, Glenn Canyon y
Morelos ha limitado el ingreso de agua dulce superficial al estuario del Rìo Colorado, lo
que sólo ha ocurrido en los años con precipitación pluvial alta y deshielos anormales en
su cuenca superior (Cupul, 1994; Galindo et al. 2000; Carriquiry Beltrán et al. 2011). De
tal manera, el volumen de agua dulce que ingresaba al estuario era de ~ 20 700 x 106 m3
año-1, hasta antes de la construcción de las presas, después solo ha habido flujos
ocasionales que dependen de los excedentes de los 1 850 x 106 m3 año-1 establecidos
como cuota anual en un tratado de límites y aguas firmado con Estados Unidos (ver
Figura IV.2).
En relación a lo planteado líneas arriba, Cupul (1994) analizó altas
concentraciones de nutrientes en el Delta del Rìo Colorado, durante la condición estuarina
emergida temporalmente en 1993, cuando tuvo lugar un exceso de agua dulce gracias al
tratado internacional. Los valores medidos de nitratos fueron de ~ 25 µM, a salinididades
cercanas a cero al norte de la Isla Montague, de ~ 12 µM a salinidades de 20, frente al El
Golfo de Santa Clara, pero cercanos a 1 µM, a salinidades oceánicas de 35 hacia el Alto
Golfo. En contraste, los valores de nutrientes reportados por Hernández et al. (1993)
durante uno de los lapsos sin aporte alguno de agua del río en 1989-1990, fueron de
hasta ~ 45 µM de nitratos, ~ 20 km al norte de la Isla Montague, pero cercanos a ~ 1 µM
frente a El Golfo de Santa Clara. Resultados recientes en la misma área muestran que,
con la construcción de un tapón en el cauce del Río Hardy, se obstruyó el poco flujo de
agua remanente que proporcionaba nutrientes al delta, de tal forma que los valores
actuales son de ~ 15 µM, donde antes eran de ~ 45 µM de nitratos, llegando a
presentarse frente al El Golfo de Santa Clara valores de hasta 0.15 µM (Galindo Bect,
Hernández Ayón y Huerta Díaz, 2011).
Por su parte, Millán et al. (1994) al estudiar la productividad orgánica primaria sin
aportes de agua del río de agosto de 1989 a junio de 1990, registraron diferencias
importantes frente a El Golfo de Santa Clara, con valores decrecientes de 14 mgCm-eh-1
en agosto de 1989 a 6.4 mg C m-3 h-1 en febrero de 1990; de 3.2 mg C m-3 h-1 en abril de
1990 y 0.5 mg C m-3 h-1 en junio de 1990.
95
Dentro de la misma tónica de dilucidar la importancia del aporte de agua del Rìo
Colorado en la determinación de las condiciones biofísicas del Norte del Golfo de
California, Farfán y Álvarez (1992) estudiaron la biomasa de zooplancton en 1973 cuando
no había aporte del rio y, acorde con los resultados, la mayor parte del año los valores
fueron inferiores a 2 y 40 mg m-3, cifra muy por debajo de los que deberían existir en un
estuario, mismos que deberían superar los 1 200 mg m-3 (Ordoñez y Órnelas, 2003).
Figura IV.2. Flujo histórico anual del Río Colorado en la Frontera México-Estados Unidos
(Galindo Bect, Hernández Ayón y Huerta Díaz, 2011).
Otro de los factores que han sido aludidos en detrimento de la calidad ambiental
del Norte del Alto Golfo de California es la contaminación toxicológica por elementos
biológicos, así como por agentes químicos. No obstante el documentado vertimiento de
hidrocarburos clorados y la sobre carga orgánica generados por los residuos agrícolas del
Valle Imperial, así como los reportes de presencia de Mercurio y otros metales pesados,
la United States Food and Drug Administration (FDA) y la National Academy of Science
(NAS), han determinado que los niveles del clorado se encuentran incluso por debajo de
los límites tolerados para el consumo humano, y que la presencia de Mercurio, Hierro,
Plomo, Cobre, Cadmio y Zinc son propios de las dinámicas hidrotectónicas del Golfo de
California (Rojas-Bracho y Taylor, 1999).
96
Respecto a los atributos biológicos del Norte del Golfo de California, algunas
poblaciones de invertebrados, peces y mamíferos marinos han sido disminuidas
históricamente por las actividades extractivas de las comunidades pesqueras locales.
Dentro de las poblaciones de invertebrados, principalmente especies de los géneros
Chione y Prothotaca de las planicies intermareales, por el sobre-aprovechamiento
comercial han pasado a ser organismos difíciles de encontrar, cuando solían distribuirse
más de 50 organismos por m2 hasta finales de la década de 1980 (CONANP, 2007). Se
ha documentado que la merma poblacional de las poblaciones de bivalvos, junto con la
disminución de aporte de nutrientes del Rìo Colorado, ha afectado de forma directa a
poblaciones de crustáceos que representan importantes recursos pesqueros como las
especies de camarones de las familias Penaeidae y Scycionidae (ej. el camarón azul,
Litopenaeus stylirostris; el camarón café, Farfantepenaeus californiensis; el blanco, F.
vannamei; el camarón roca o japonés, Sicyonia spp.), así como cangrejos o jaibas de la
familia Portunidae (Callinectes arcuatus, C. bellicosus) (Galindo-Bect, 2000).
El pez históricamente más afectado en el Norte del Golfo de California ha sido la
totoaba (Totoaba macdonaldi), misma que tras su aprovechamiento por las entonces
recién erigidas comunidades pesqueras de Puerto Peñasco, El Golfo de Santa Clara y
San Felipe, pasó a ser sujeta a veda temporal de 1940 a 1975 y posteriormente a veda
indefinida a partir de 1975. Después de años experimentales para reproducir y mantener
la especie en cautiverio y luego de la liberación de ejemplares por parte de la Universidad
Autónoma de Baja California y del Instituto de Acuacultura del Estado de Sonora, se
estimó que la población se encontraba recuperándose y estable en términos de tallas
(Cisneros et al. 1997) hasta la reciente pesca ilícita, sobre todo en las comunidades de El
Golfo de Santa Clara y San Felipe, para su clandestina comercialización en los mercados
asiáticos (CIRVA, 2015).
Finalmente, en el Norte del Golfo de California han sido documentadas
afectaciones por actividades pesqueras a poblaciones de quelonios y mamíferos marinos,
destacando la mortalidad incidental de la vaquita marina en redes fijas, dormidas o
pasivas, así como la captura incidental de la tortuga prieta o verde (Chelonia mydas
agassizi), la tortuga siete filos o laúd (Dermochelys coriacea) y la tortuga golfina
(Lepidochelys olivacea), en redes de enmalle y agalleras de la pesca ribereña, así como
en los sistemas de arrastre de la pesca de altura.
97
IV.3. Medio abiótico.
Clima. El clima del SAR es mayormente continental por ser un mar somero con gran
influencia terrestre (Desierto Sonorense) y a su vez disminuye la influencia del Océano
Pacífico. En términos generales el Norte del Golfo de California presenta condiciones anti-
estuarinas por la falta de aporte del Rio Colorado (Álvarez Borrego y Galindo Bect, 1974)
provocadas por tasas de evaporaciones altas (0.9 m/año), así como por un aporte errático
de agua dulce y precipitación baja (media anual de 68 mm) (Miranda Reyes et al., 1990).
La región puede estar sujeta a eventos climáticos extremos, como tormentas tropicales,
huracanes o marejadas que, aunque eventos aislados y raros, son las únicas ocasiones
en que sucinta un aporte de agua dulce al sistema.
En el SAR los vientos del NW en el período invernal manifiestan una velocidad
promedio de 5 m.s-1, y los del SE en verano, una velocidad promedio de 3 m.s-3
(Carriquiry y Sánchez, 1999). Estos vientos inducen una circulación superficial y a gran
escala se observan como giros superficiales ciclónicos (en el periodo de junio a
noviembre) y anticiclónicos (en el periodo de noviembre a mayo) (Marirone, 2003).
Durante los periodos intensos, para el Norte del Golfo de California, los giros cubren por
entero la columna de agua, influyendo con ello en la disminución de nutrientes y en
cambios significativos de sus variables físicas (Carrillo el al., 2002).
Batimetría. En términos generales el SAR se caracteriza por ser una zona somera, en lo
concerniente al Sistema Costero, se encuentran profundidades máximas de 30 m. Para el
caso del Sistema Marino, se encuentran profundidades mayores de 120 m (ver Figura X)
(Carriquiry et al., 2001). Algunas de las barras de mareas entre 10 y 30 km de longitud
alcanzan entre los 8 y los 10 m de altura por encima del fondo marino (Álvarez et al.,
2009). Cerca de las costas de Sonora, los cambios de profundidad se hacen abruptos
evidenciando la presencia de un canal (Thompson, 1968); los canales y bajos presentes
en esta región tienen una dirección noreste-sureste (Álvarez Borrego et al., 1974).
El fondo marino de la zona norte del Golfo de California está constituido por
sedimentos de grano fino, en los que destaca la presencia de limos y arcillas, origen
derivado de los depósitos lagunares y deltaicos, transportados por las escorrentías del Rio
Colorado. En la parte central, frente a la Costa de Sonora, los fondos de caracterizan por
el predominio de arenas. En algunas zonas de poca profundidad, cercanas a la línea de la
costa, se localizan sustratos rocosos, denominados coquinas (arena y concha de
moluscos cementados con calcita), como en el caso de Punta Pelicano. Estas
formaciones rocosas litorales están constituidas por arena y concha, principalmente de
moluscos, cementadas con calcita.
Estudios realizados por Álvarez et al. (2009), mencionan que los sondeos
detectados durante entre 1994 y 1998 expresan que el relieve del fondo se caracteriza por
angostas barras de mareales de hasta 50 km de largo, con depresiones intercaladas.
Estas estructuras sedimentarias lineales están orientadas de NW-SE, cruzando la
98
plataforma somera hasta el borde de la Cuenca Wagner. Estos mismos autores refieren
que las partes someras de las barras mareales próximas a la desembocadura del Rio
Colorado son activas, mientras que las partes en aguas más profundas se consideran o
bien moribundas o enterradas.
Figura IV.2. Batimetría del Norte del Golfo de California (Rodríguez Pérez, 2013).
Edafología y Sedimentología. Antes de su represamiento el Rio Colorado suministraba a
la zona norte del Golfo de California 20/109 m3/año de agua dulce y 180x106 tons/año de
sedimentos; pero al desviar su cauce, la fuente de sedimentos terrígenos se redujo
drásticamente (Álvarez y Jones, 2002). Los sedimentos del fondo son sustratos suaves,
mezclas de limo y arcilla, encontrando el tamaño de partícula más gruesa en las áreas
someras frente a la antigua desembocadura del Rio Colorado y en la costa este.
Particularmente, en el SAR se encuentran un tipo de composición arena-limo-arcillosa
(Thompson, 1968). Los fondos centrales de la Zona Costera son mayormente arenosos
con manchas rocosas, especialmente en las partes someras, cercas a la línea de la costa.
Estas formaciones rocosas litorales son llamadas coquinas, constituyendo un corredor de
arrecife rocoso que termina en la Isla San Jorge (Pérez Valencia, 2011).
99
Figura IV.3. Provincias sedimentarias en el Golfo de California (Carriquiry et al., 2001).
Mareas y corrientes. En la zona norte del Golfo de California los ciclos de mareas son
diurnas y semi-diurnas, con grandes variaciones en el nivel del mar (Gutiérrez y González,
1989; Thompson, 1969). Las mareas vivas tienen un rango máximo de 7 a 8 m y generan
corrientes superficiales máximas de 0.7 a 0.8 m s -1 (Álvarez y Jones, 2002) que llegan a
incrementarse hasta los 12 m en la boca del Rio Colorado (Cupul, 1994). Estos amplios
intervalos en los niveles de las mareas originan corrientes que producen un fenómeno de
homogenización vertical de la columna de agua de hasta 500 m (Gaxiola Castro et al.,
1978), mayor en invierno que en verano (Ramírez Manguilar, 2000). Lo anterior, excepto
en los eventos cortos de estratificación cerca del fondo y en la superficie debido a
corrientes de gravedad y calentamiento solar, respectivamente (Lavín et al., 1998).
Asimismo, se generan dos momentos de influencia de marea, uno de homogenización y
otro de estratificación (ver Figura IV.4). Durante la homogenización se observa un giro
anticiclónico y la corriente costera en el lado continental con una velocidad de 0.01-0.05
m/s-1. En el momento de estratificación la generación de corriente residual es mucho más
compleja, la mezcla vertical puede reorganizar el campo de densidad y la presión
resultante genera gradientes que inducen corrientes residuales, algunas de las cuales
pueden llegar a ser geotróficas (Lavín y Marinone, 2003). La re-suspensión crea un
ambiente de alta turbidez con concentraciones de sedimento de hasta 60 a 80 mg/L-1
sobre el fondo durante las corrientes de marea más intensas. Las concentraciones
mayores se encuentran cerca de la cabeza del norte de Golfo de California y decrecen
hacia el sureste, en la Zona Marítima, de aguas más profundas (Álvarez y Jones, 2004).
100
Adicionalmente, debido a las altas tasas de evaporación y el incremento de
salinidad en las capas superficiales, provoca hundimiento de estas capas induciendo
corrientes de gravedad de aproximadamente 10 cm/s-1 (Carriqiury et al., 2001; Marinone,
2003)
Figura IV.4. Momentos de marea residual para la capa superficial (0-10m) (Lavín y
Marinone, 2003).
En el norte del golfo se presentan corrientes intensas (de hasta 10 cm/s-1) a lo
largo de las isóbatas sobre los bordes de las cuencas Wagner y Delfín y a lo largo de la
costa este, frente a las bahías de Adair y San Jorge. La intensidad y dirección de las
corrientes superficiales también muestran una variación estacional, mediciones directas
actuales revelan un giro ciclónico (~0.35 m/s-1) en toda la cuenca, que dura de junio a
septiembre, y un giro anticiclónico (~0.35 m/s-1), de noviembre a abril (Pérez Valencia,
2011) (ver Figura IV.5). El verano está caracterizado por numerosas plumas y eddies
(especialmente anticiclónicos), algunos viajan de costa a costa, incrementando el material
de material suspendido. En invierno muestran una gran variación interanual, desarrollando
también plumas y eddies (especialmente ciclónicas), muy heterogéneas y opuestas al
verano (López Calderón et al., 2008).
101
Figura IV.5. Patrón de circulación estacional en el Norte del Golfo de California (Palacios
Hernández et al., 2006).
Turbidez. Como es conocido, la mayoría de los cuerpos costeros tienen una alta energía
cinética, la cual mantiene en suspensión sedimentos terrígenos dando como resultado
una alta turbidez. Dicha turbidez, genera una menor penetración de la luz en la columna
de agua, que limita la productividad primaria. Los sedimentos en suspensión varían
geográfica y estacionalmente, la mayor turbidez se encuentra en los alrededores de la Isla
Montague en la boca del Rio Colorado, hasta las aguas menos turbias en Golfo de Santa
Clara y de Bahía San Jorge (Lavin y Marirone, 2003). Estacionalmente, los estudios
registran valores más altos de turbidez durante el de marzo con un promedio de 14.6
mg/L, a diferencia de los encontrados para mes de junio 12.p mg/L. C. El patrón general
observado registra una mayor concentración hacia la zona noreste y disminuye hacia la
región sureste (Figura IV.6.), para ambas estaciones.
102
Figura IV.6. Gradiente promedio de turbidez en la columna de agua durante junio (A) y
marzo (B) en el Norte del Golfo de California (Rodríguez Pérez, 2013).
Temperatura. En el norte del Golfo de California existe un amplio rango de variabilidad de
la temperatura superficial del mar, con valores mínimos registrado en diciembre desde los
8.25°C, y máximos de 32.8°C registrados en agosto. La temperatura muestra un gradiente
espacial hacia el Sur, caracterizada como la Zona Costera del SAR; su magnitud local es
variable (Espinoza Tenorio, 2004). La mayor parte del año la dirección del gradiente no
cambia, excepto al finalizar el verano, cuando los valores son homogéneos o cambian de
dirección (Álvarez Borrego, 2004). El gradiente superficial de temperatura sufre
inversiones a principios de primavera y otoño, debido al ciclo anual de irradiación solar y
de temperaturas atmosféricas (Soto Mardones et al., 1999). Espacialmente, la
temperatura superficial también presenta estratificación horizontal, en la estación de
103
verano se presentan las temperaturas más altas en las zonas costeras, disminuyendo
hacia la zona marina de SAR, mientras que la estación primaveral muestra temperaturas
templadas osciladas entre los 15 y los 18°C (ver Figura IV.7).
Figura IV.7. Gradiente de temperatura para las estaciones de verano y primavera en el
Norte del Golfo de California (Rodríguez Pérez, 2013).
Un factor importante con respecto a la temperatura es el efecto del cambio
climático o Fenómeno del Niño (Braumgarther y Christenses, 1985). Diversos autores
durante 1994 y 1995 observaron condiciones anómalas en la hidrografía y la circulación
104
(Palacios Hernández et al., 2006). Dicha anomalía consistió en una rápida intrusión de
agua caliente (0.5°C) en la capa subsuperficial, lo que redujo la estratificación y
eventualmente revirtió la circulación anticiclónica típica de invierno. Se propone que las
condiciones anómalas observadas, se deben a una combinación de fuerzas externas y
locales: formación de una masa de agua en el norte del Golfo de California y el
hundimiento de una masa de agua costera, con la llegada de una anomalía baroclínica de
origen externo que provoca la edvección de calor, la reducción de estratificación y cambio
en el patrón de circulación anticiclónica y ciclónica. Las consecuencias de dicho fenómeno
no han sido documentadas (Pérez Valencia et al., 2011)
Nutrientes. En términos generales las zonas costeras norte del Golfo de California son
regiones ricas en nutrientes. Particularmente, las aguas costeras de la Bahía Adair
presenta una alta concentración de nutrientes por el abasto del Estero Cerro Prieto, el
Estero las lisas y la turbidez de Punta Borrascosa. Cupul Magaña (1994) menciona que
los grandes cantidades de nutrientes en la parte norte del Golfo de California dependen
principalmente del acoplamiento entre los procesos de resuspensión de sedimentos del
fondo, la mezcla de agua intersticial de la columna de agua, el aporte de nutrientes por la
marisma, los ciclos de marea, los procesos de erosión del delta y los procesos de
remineralización. Asimismo, dichos autores señalan que la fuerte dinámica del delta
constituye una fuente de exportación de sedimentos y nutrientes al área contigua. Las
concentraciones superficiales de nitritos y nitratos en el Norte del Golfo de California, en
general muestran una tendencia a aumentar desde la entrada del golfo hacia el interior.
Álvarez Borrego y Gaxiona Castro (1988) registraron medidas de nutrientes en dos
épocas del año: invierno, del 1-10 de diciembre de 1981 (fosfato 0.95-1.40 µM; nitratos
4.7-7.3 µM; silicatos 12.9-17.9µM) y verano, del 17 al 28 de junio de 1982 (fosfato 1.16-
3.17µM; nitratos 0.9-15.2 µM; silicatos 5.4-22.5 µM). Por otro lado, Lavín et al (1995)
identificaron masas de agua en la zona superior a los 120 m. Dichos autores observaron
una concentración de nutrientes (fosfato 1.5-2.0 µM; nitritos 12-16 µM; silicatos 25-32
µM), identificando las masas de agua de Golfo de California de invierno, y en las capas
más profundas se identifico alta concentración de nutrientes.
En el norte del golfo de california, la cantidad de materia orgánica particulada
removida de los fondos y de origen continental es muy conspicua, debido a las fuertes
variaciones en el rango de mareas y las corrientes generadas por la dinámica oceánica
(Álvarez Borrego, 2012). Las grandes concentraciones de nutrientes ocasionan que la
productividad sea constante casi todo el año. Actualmente la parte alta del norte del golfo
está caracterizada por su alta productividad con niveles máximos de nitratos (41 µM),
nitritos (15 µM), fosfatos (2.6 µM) y silicatos (68 µM). El balance de masas indica que el
sistema actúa como red exportadora de sedimentos resuspendidos con altas tasas por día
(7 ton/dia-1) por ciclo de marea. Esta conducta indica que el sistema en etapa destructiva
por falta del flujo de agua dulce y sedimentos por parte de Rio Colorado (Carriquiry et al.,
2010).
105
Salinidad. El norte del Golfo de California se caracteriza por tener altas tasas de
salinidad. La salinidad en esta zona está determinada por la radiación y la humedad
(Simpson et al., 1994) y disminuye con la profundidad (Álvarez Borrego y Schwartzloze,
1979). Esto prevalece durante la gran parte del año, pero en invierno se produce un
movimiento de convección2 con un componente de advección hacia el sur. Este
movimiento de convección influencia fuertemente la distribución de las diversas
propiedades físicas y químicas del agua del norte de golfo (Álvarez Borrego y
Schwartzloze, 1979), lo que representa un mecanismo de fertilización para la zona.
En el agua de la Delta del Rio Colorado, durante el pleamar se evapora
parcialmente, originando la formación de costras de sal, que en mareas subsecuentes
disuelve y regresa al mar durante el reflujo. La salinidad mínima, según estudios
realizados por Álvarez Borrego et al. (1975) es de 32.28 registrada en octubre y la
máxima de 41 en julio. Estudios recientes (Rodríguez Pérez, 2013) muestran resultados
similares, presentándose en junio muestras de salinidad con gradientes mayores a los 37
y en comparación con el mes de marzo, donde se presentan muestras menores a los 35.
La salinidad presenta un gradiente, con valores que aumentan hacia el noreste del Golfo
de California, con un aumento significativo en las zonas costeras (ver Figura IV.8).
2 El agua superficial más fría y salina se hunde y es acarreada cerca del fondo.
106
Figura IV.8. Salinidad para las estaciones de verano y primavera en el Norte del Golfo de
California (Rodríguez Pérez, 2013).
Hasta los años 30 cuando el Rio Colorado vertía suficientes cantidades de agua
dulce (~20 x 109 m3 yr-1) y sedimentos (180 x 106 ton yr-1) a la parte norte del Golfo de
California (Thompson, 1968; Gleik, 2003), mostrando el rio una condición estuarina hasta
entonces. Posteriormente las descargas del rio fueron interrumpidas por „actividad
humana‟, como lo mencionan Carbajal et al. (1997) y Lavín y Sánchez (1999),
evidenciando un casi ausencia de flujo de agua dulce por parte del rio, durante los últimas
décadas (Turner y Kapiscak, 1980; Carbajal et al., 1997; Gleik, 2003) (ver Figura IV.9).
107
Figura IV.9. Flujo de agua dulce debajo de todas las represas y desvíos del Rio Colorado,
desde el 1905 al 2001 (Gleik, 2003).
Las altas tasas de evaporación durante todo el año (1m/año-1) y el enfriamiento de
las aguas superficiales de invierno producen fenómenos de inversión estuarina,
provocando hundimiento de las aguas más densas al fondo (Quirriquiry et al., 2001; Lavín
y Marinone, 2003), las cuales posteriormente se desplazan hacia el sur, llenando las
partes profundas de las cuencas Wagner, Delfín y Salsipuedes (Álvarez Borrego y
Schwartzloze, 1979). Estas corrientes son moduladas por el forzamiento de mareas,
debido a este fenómeno se produce una ligera estratificación de la salinidad durante las
mareas muertas (Lavín et al., 1998).
IV.4. Medio biótico
Productividad primaria. Se ha considerado al Norte del Golfo de California como una de
las zonas más productivas del mundo. Esta zona presenta una alta productividad primaria
(Álvarez Borrego y Lara Lara, 1991) en comparación con otros mares semi-cerrados
(Lavín et al., 1995). Es así, debido a la alta disponibilidad de nutrientes en la zona
eutrófica originada por la circulación termohalina (Bray y Robles, 1991), mezcla vertical
(Álvarez Borrego y Lara Lara, 1991) y surgencias costeras principalmente en invierno y
primavera (Álvarez Borrego et al., 1978). Milán Núñez et al. (1999) concluyen que la
distribución espacial y temporal del fitoplancton, la clorofila y la temperatura están
108
fuertemente influenciados por la corriente de marea; presentándose una tendencia a
aumentar durante las mareas vivías y los meses fríos, con valores de 76 mgC m-3 h-1.
Asimismo, dichos autores reportan que el área Este del norte de california presenta
menores valores de productividad, en comparación con la parte Oeste del golfo. Estudios
recientes (Rodríguez Pérez, 2013) en muestreos realizados en marzo, refieren mayores
concentraciones de clorofila 1.85 µg/L, en contraste con la estación cálida, durante el mes
de junio, donde el promedio fue de 0.40 µg/L (ver Figura IV.10). Se ha clasificado al norte
del Golfo de California como zona eutrófica (˃1.0 mg/m-3) de acuerdo a la distribución
promedio de clorofila, mientras que la boca del golfo se considera oligotrófica (˂0.2 mg/m-
3) y la parte central mesotrófica (0.2-1.0 mg/m-3) (Espinosa Carreón y Valdez Holguín,
2007) (ver Figura IV.11).
Figura IV.10. Concentración promedio de clorofila en la columna de agua durante junio y
marzo, en el Norte del Golfo de California (Rodríguez Pérez, 2013).
109
Figura IV.11. Concentración promedio de clorofila en la parte norte del Golfo de California
(Espinosa Carreón y Valdez Holguín, 2007).
En estudios realizados por Luch Cota (2004), se identificó que existe variación
estacional en la productividad primaria en zona norte del Golfo de California. En promedio,
la producción de 1996 y 2002 fue de 3 gCm-2 dia-1 y en verano fue de 1 gCm-3 dia-1 (ver
Figura IV.12). Asimismo, se observa una relativa estabilidad en el sistema (ver Figura
IV.12), presentando lo picos de productividad durante las mismas temporadas, al igual
que la temperatura, muestra una estabilidad a través de los años (Figura IV.13.)
Figura IV.12. Producción primaria del Golfo de California; en verano (S), otoño (A) e
invierno (W) (Luch Cota, 2004).
110
Figura IV.13. Series de tiempo: clorofila y temperatura superficial del mar3.
Plancton. El norte del Golfo de California se caracteriza por presentar uno de los niveles
de biomasa planctónica más elevados a nivel mundial (Álvarez Borrego, 1992). La
biomasa planctónica en la zona, se puede subdividir fitoplancton y zooplancton,
incluyéndose en esta última el ictioplancton. Dentro del zooplancton destaca el grupo de
los crustáceos, entre los que se encuentra una presencia dominante de las familias
Copepoda, Euphausiacea y Amphipoda, mientras que Cladocera y Mysidacea son
relativamente más conspicuos en la zona somera nerítica (Brinton et al., 1986). En la
parte norte del golfo las concentraciones de zooplancton son mayores en invierno
(25ml/m3), los copépodas es el grupo dominante (Cumming, 1977). Por su parte, el
ictioplancton, Green Ruiz e Hinojosa Corona (1997) observaron una elevada biomasa
zooplancton, y la concentración de huevos y larvas de peces en la parte Sur de Golfo de
California, Zona Marina del SAR. Aceves Medina et al. (2004) observaron que durante
otoño y primavera, y tiempos de transición en el norte del Golfo de California, se divide en
tres regiones: una región norteña, donde las especies templadas y subárticas desovan de
otoño a primavera, una región sureña dominada por especies tropicales y subtropicales a
3 Serie de tiempo de 10 años. Cada color representa las tres aéreas para al Norte del Golfo de California:
verde (Sur), azul (oeste) y rojo (Este). Fuente: Aqua/MODIS; http://oceancolor.gsfc.nasa.gov.
111
lo largo del año, y una región central donde se dan ensamblajes de especies tropicales y
templadas (Figura IV.14). Adicionalmente, Sánchez Velazco et al. (2009) analizaron los
efectos de los cambios estacionales en las condiciones oceanográficas y la composición
de especies, señalan que en la fase temprana del giro ciclónico, cuando la temperatura la
y estratificación se incrementan, la corriente costera empiezan, dominando en el Norte del
Golfo de California especies demersales (Gobulus crecentalis, Lytrypnus dallí) y
mesopelágicas (Benthosema panamense), mientras que en la fase madura del giro, la
abundancia de larvas se incrementa y las especies características del sistema corriente
Este, como la Opisthonema libértate y Engraulix Mordax desplazan a las especies
demersales y empiezan a ser dominantes. En la fase temprana anticiclónica, la dirección
de la corriente costera va en reversa y la temperatura y abundancia de larvas decrece,
larvas de E. mordax y B. panamense continúan dominando el Norte del Golfo de
California. En la fase madura anticiclónica, las larvas de E. mordax dominan la corriente y
el giro con mayor abundancia.
Figura IV.14. Distribución estacional de las larvas de peces en el Norte del Golfo de
California (Aceves Medina et al., 2004).
112
En estudios recientes (Rodríguez Pérez, 2013) se encontró que durante los meses
de marzo ocurren las mayores concentraciones de zooplancton, principalmente en zonas
marinas, orientadas hacia el Sur. En el caso de los valores promedio medidos en junio, no
se encuentra ningún patrón evidente (Figura IV.15).
Figura IV.15. Biomasa zooplanctónica en el Norte del Golfo de California, durante los
meses de junio (A) y marzo (B) (Rodríguez Pérez, 2013).
Respecto a las contribuciones del fitoplancton a la biomasa planctónica, el
nanofitoplancton es el más abundante en las aguas marinas, mientras que el
microfitoplancton es el que más aporta a las aguas someras de las zonas costeras (Lara
Lara y Bazán Guzmán, 2005), contribuyéndole notablemente a la clorofila a y a la
productividad primaria de estas regiones (consultar Figura IV.10). Tanto para el
113
fitoplancton como para el zooplancton, los valores más enriquecidos se encontraron en
marzo que durante las obtenidas en la temporada cálida (Rodríguez Pérez, 2013) (ver
Figura IV. 16 y Figura IV.17).
Figura IV.16. Isomapas de de ð13 C de fitoplancton y zooplancton durante junio (2010) y
marzo (2011) (Rodríguez Pérez, 2013).
Figura IV.17. Isomapas de ð13N de fitoplancton y zooplancton durante junio (2010) y
marzo (2011) (Rodríguez Pérez, 2013).
114
Flora Marina. Con base en las delimitaciones consideradas para definir el SAR,
podemos subdividir a la flora marina, en la vegetación propiamente marina, vegetación
halófita, y en la vegetación acuática y semiacuática. Los primeros dos tipos de flora, se
consideran los más representativos para nuestra región. La vegetación marina, es una
vegetación característica de los ambientes rocosas costeros. Se reconocen alrededor de
358 especies en la región del Norte del Golfo California, aunque se desconoce el número
de especies dentro de los límites de la RAGCyDRC, es de suponer que el número es
significativo dado que existen algunas zonas rocosas dentro de ésta, por ejemplo, Bahía
la Cholla, Punta Borrascosa en Sonora y Punta Machorro en Baja California (CONANP,
2007). Precisamente en estas zonas rocosas intermareal se encuentran importantes
comunidades de macroalgas tipo tapete. Pacheco Ruiz et al. (2008) estiman la existencia
de 328 especies para la parte Norte del Golfo. Una de las características de este tipo de
algas, es el tamaño relativamente pequeño de las frondas (Norris, 2010) y la gran
diversidad de especies (430 reportadas). Asimismo, se encuentran las algas café
Sargassum (Fucales) y Padina (Dictiotales) componen la mayor parte de la biomasa del
tejido fresco algal. También se encuentran especies del grupo de las algas verdes y rojas
(Clorofyta y Rodofyta, respectivamente). El ambiente de tipo macroalgal provee poca
heterogeneidad y parece limitar la diversidad macrobiótica; los ambientes disturbados
estacionalmente favorecen el crecimiento de especies oportunistas, predominantemente
de estructura simple, como el caso de la Ulva y la Colpomenia (Little y Little, 1981). En
diversos sitios, sobre todo en los que respecta a humedales costeros aparecen pastos
marinos donde domina la Spartina Foliosa.
La vegetación halófita es conocida como „saladares‟. Está conformado por una
asociación de arbustos halófitos de poca altura, con tallos u hojas suculentas, hierbas y
algunos zacates perennes. Este tipo flora se localiza en las áreas pequeñas a lo largo de
la costa del Norte del Golfo de California y en diversas zonas del Delta del Rio Colorado.
Este tipo de vegetación crece en las partes bajas de cuencas cerradas, en zonas áridas y
semiáridas, así como en áreas de marismas. La topografía características es de playones
o pequeñas dunas de poca altitud sobre el nivel del mar y los suelos son arenosos con
altos contenidos de sales (CONANP, 2007). La vegetación de dunas costeras es muy
variable de un lugar a otro, reviste importancia por su función de estabilización del litoral,
pues brinda protección contra procesos erosivos. Las especies halófitas principales son
Frankenia palmeri (saladito), Suaeda estereoa y S. puestopenascoa (sosa), Allenrolfea
occidentalis (hierba del burro), Sesuvium verricosum (hielito), Distichlis palmeri (zacate
salado) y Sporobolus airoides (zacatón alcalino).
Ictiofauna. La fauna de peces del Golfo de California es representativa de las regiones
zoogeográficas del Pacífico Oriental y del Océano Tropical (Briggs, 1974). Se presentan
especies con afinidad cosmopolita y circumtropical, además de las exclusivas para esta
región (Brusca, 1980). Está compuesta por 586 especies conocidas (Thompson et al.,
2000), de las cuales 111 han sido registradas en el Norte del Golfo de California (Hasting
y Findley, 2007). Con base a lo zoogeográfico, la ictiofauna posee 73% de especies con
115
afinidad tropical (panámica), el resto de especies son de afinidad norteña templadas. De
éstas 17% son especies endémicas (Walker, 1960).
En las aguas someras Golfo de California se encuentran tres especies endémicas:
el chupalodo chico (Gillichtys seta), el gobio (llypnus luculentos) y el gruñon o pejerrey del
delta (Colpichthys hubbsi). De éstos, los dos primeros habitan en fondos fangosos y
arenosos. Otras especies como el Chupapiedras de Sonora (Tomicodon humeralis) y el
Trambollo de Sonora (Malacoetenus gigas) tienen su centro de distribución en esta
región, pero no son endémicas del Golfo de California (Walker, 1960; Thompson et al.,
2000). A pesar que la ictiofauna se compone de peces que son común en la parte
occidental de la Península de Baja California, once de las especies se restringen a la
parte norte del golfo, estas son: tiburón peregrino (Cetorhinus maximus), tiburón leopardo
(Triakis semifasciata), raya de california (Raja inornata), gavilán (Myliobatis califórnica),
lenguado (Xystreurys liolepis), sargo (Aniostremusdavidsoni),), curvina blanca (Cynoscion
nobilis), curvina golfina (Cynoscionothonopterus), chano norteño
(Micropogoniasmegalops), pez escorpión (Scorpaenaguttata) y pescada (Stereolepis
gigas) (Walker, 1960).
La totoaba marina (Totoaba macdonaldi) es identificada como miembro de la
ictiofauna marina; alcanza la mayor talla entre los miembros de la familia Sciaenidae. Esta
especie guarda especial interés debido a que soportó un intensa pesquería comercial y
deportiva, provocando un decline en su población en los años sesenta (Flanagan y
Hendrickson 1976, Cisneros et al., 1995). Es una especie endémica del Golfo de
California, incorporada a la norma NOM-ECOL-059-2010 bajo el estatus de especies en
riesgo y bajo la categoría de en Peligro de Extinción. Su captura, se vedó de manera
indefinida desde 1975.
Figura IV.18. Ubicación de los sitios de muestreos de totoaba en el Norte del Golfo de
California (Román y Hammann, 1997).
116
Por su parte, el pez cachorrito es único pez dulceacuícola sobreviviente en el norte
del Golfo de California, dentro de la RAGCyDRC. Dentro de la Reserva, el habitad
principal del pez cachorrito se localiza en la Ciénaga Santa Clara y la Ciénaga el Doctor.
A principios del siglo XX sobrevivían ocho especies nativas de este tipo, pero esto
cambio, debido a la modificación del régimen hidrológico y las condiciones originales del
delta. El resto de la ictiofauna dulceacuícola está representado por 13 especies exóticas y
tres invasoras marinas (Elopsaffinis, Mugilcephalusy Gillichthysmirabilis) (Varela Romero
et al., 1998).
Mamíferos marinos. Dentro de los limites que confiere a la RAGCyDRC, se tienen
registrado al menos 18 especies de mamíferos marinos (Wells et al., 1981; Vidal et al.,
1993). Todas las especies se encuentran incluidas en la NOM-059-SEMARNAT-2010,
bajo el estatus de especies en riesgo, con especificaciones para su inclusión, exclusión o
cambio. La lista de especies en riesgo se presenta en la Tabla IV.1, que aparece a
continuación.
Tabla IV.1. Listado de mamíferos marinos en riesgo en la RAGCyDRC.
Nombre científico Nombre común
1 Baleanopteraacutorostrata Ballena minke 2 Baleanopteramusculus Ballena azul 3 Baleanopteraphysalus Ballena de aleta 4 Delphinuscapensis Delfín común de rostro largo 5 Eschrichtiusrobustus Ballena gris 6 Globicephalamacrorhynchus Ballena piloto 7 Grampusgriseus Delfín de Risso 8 Kogiabreviceps Cachalote pigmeo 9 Megapteranovaeangliae Ballena jorobada 10 Mesoplodonsp. Ballena enana de pico 11 Orcinus orca Orca 12 Phocoena sinus Vaquita, Vaquita marina o
Marsopa del Golfo de California 13 Physetercatodon Ballena de esperma o cachalote 14 Stenobredanensis Delfín de dientes rugosos 15 Tursiopstruncatus Delfín nariz de botella o tonina 16 Zalophuscalifornianus Lobo marino 17 Ziphiuscavirostris Zífido de Cuvier
Por su parte, la distribución de la Vaquita marina (Phocoena sinus) está restringida
al norte del Golfo de California (Brownell 1986, Vidal 1990), coincidiendo en gran medida
con los limites que confieren al Polígono de la RAGCyDRC, y fuera de ella, hacia el
suroeste y en un área aledaña a la Roca Consag, todas ellas incluidas en el refugio de
117
protección para esta especie establecido en septiembre de 2005 (DOF, 2005a). La
vaquita marina es el mamífero marino en mayor peligro de extinción en el mundo (Norris y
McFarland 1958, Turveyet al. 2007). Está clasificada dentro de las categorías críticas de
las especies amenazadas por la Unión Internacional para la Conservación de la
Naturaleza (IUCN). En 1996 la IUCN la consideró como especie Críticamente amenazada
(Rojas Bracho et al., 2008). Su distribución es exclusivamente en el Alto Golfo de
California y parte del Golfo Norte. En 1997, Jaramillo et al. (1999), estimaron el tamaño
poblacional en 567 vaquitas (IC de 95% entre 177 y 1,073 individuos). De acuerdo con
estos autores, el tamaño promedio de grupo es de dos individuos. Solo existe un trabajo
publicado sobre la historia natural de la vaquita (Hohn et al., 1996), donde, aunque la
muestra disponible fue pequeña, se resalta la ausencia de individuos entre los 3-6 años
de edad (distribución de edades bimodal) con 62% de los individuos entre los 0-2 años,
31% entre los 11-16 años y unos cuantos ejemplares entre 7-10 años. El individuo más
viejo fue una hembra de 21 años. Todos los individuos menores de tres años fueron
sexualmente inmaduros, mientras que todos los mayores de seis fueron sexualmente
maduros. Los nacimientos se registraron a finales de febrero, principios de abril y los
autores mencionan que al parecer la producción de crías es bianual. Dos trabajos sobre la
dieta de la vaquita (Findley et al., 1995; Pérez Cortés, 1996), concluyen que la vaquita es
generalista consumiendo una variedad de peces bentónicos demersales y calamar por lo
que se trata de una especie no selectiva. La más reciente estimación de la abundancia de
vaquitas fue llevada a cabo en Octubre-Noviembre del 2008, mediante dos métodos: el
acústico y el censo en transectos, el resultado fue de solo 245 vaquitas (Gerrodette et al.
2011).
Quelonios. Aunque existen registros de tortugas marinas desde las aguas del Alto Golfo
hasta el cauce principal en la desembocadura del río Colorado, estas especies han
disminuido considerablemente según informes de los pobladores. Las especies que
potencialmente se distribuyen en la Reserva son la tortuga perica (Carettacaretta), la
prieta o verde (Cheloniamydasagassizi), la siete filos o laúd (Dermochelyscoriacea) y la
tortuga golfina (Lepidochelysolivacea) (Brusca et al. 2005), todas incluidas en el Programa
Nacional de Protección, Conservación, Investigación y Manejo de Tortugas Marinas
(PREP 2000). Algunos registros recientes han documentado actividad reproductiva de
tortuga golfina en la zona de Puerto Peñasco, cerca de la Reserva (Honan y Turk 2001).
Invertebrados. La gran diversidad de hábitats en la Reserva concentra a especies y
subespecies marinas en las áreas intermareales y submareales. En la zona que
comprende el Polígono de la RAGCyDRC,se han reportado más de 236 especies de
macrocrustaceos, incluyendo especies bentónicas, nectónicas y planctónicas (Brusca
2007). De los macro invertebrados que habitan el norte del Golfo de California, son los
moluscos y los crustáceos, los organismos de taxa dominantes, y los más estudiados.
118
Moluscos. En el NGC, se encuentran 1000 especies de moluscos: 38
poliplacóforos, 656 gasterópodos, 285 bivalvos, 15 escafópodos y 6 cefalópodos (Brusca
et al. 1995). La mayor riqueza de especies de grupos de moluscos se observa en las
costas rocosas, las costas arenosas y lodosas, en estos últimos se presentan un número
menor de especies, aunque existen algunas poblaciones de especies de la infauna
notablemente abundantes, ejemplos de ellas son los cangrejos violinistas (Uca spp.) y los
camarones (Neotrypea sp.). Los moluscos mas abundantes pertenecen a la clase
Gasteropoda (caracoles y lapas), representada por al menos 35 especies de 20 familias,
entre las que destacan: Turritellidae, Naticidae, Crepidulidae, Nassariidae, Olividae. La
clase Pelecipoda (almeja y ostiones), está representada por al menos 61 especies de 26
familias, entre las que destacan: Arcidae, Lucinidae, Cardiidae, Verenidae, Tellinidae,
Semelidae. Otros moluscos incluyen a la clase Cefalópoda (calamares y pulpos)
representada por seis especies de dos familias (Beckvar et al., 1987).
Los restos de conchas han servido para reconstruir el posible ambiente antes del
cierre del flujo de agua dulce del Río Colorado, y la abundancia del bivalvo
Muliniacoloradoensis (Rodríguez et al. 2001). La densidad de fauna observada
actualmente por Ávila-Serrano (2006) fue de 3 a 7 ind m-2 mucho menor a la reportada
antes de la construcción de las presas, lo que afecto el hábitat del Delta principalmente
por la disminución del bivalvo máctrido Mulinia coloradoensis. De hecho, Kowalewski et al.
(2000) estimó mediante un estudio de tanatocenosis que la densidad de moluscos cuando
estaba el flujo natural del río de aproximadamente 50/m2.
Crustáceos. El subphyllum Crustacea està representada en todos los ambientes
del Golfo, sean bentónicos, planctónicos o nectónicos. El grupo más característico de
crustáceos en el Norte del Golfo de California son los Decápodos. Por su riqueza de
familias y especies, destacan los anomuros y braquiuros. Los anomuros incluyen a los
cangrejos ermitaños y porcelánidos. Para el Norte del Golfo de California, se conocen 69
especies de anomuros (ambiente rocoso como hábitat principal) y 88 de braquiuros con
notable diversidad de especies endémicas de la familia Pinnotheridae (cangrejos
chícharo), de las que se tiene un registro de 23 especies. Otros decápodos importantes
son los camarones peneidos (2 familias), carideos (6 familias) y talasinoideos (9 especies
conocidas) (Pérez Farfante 1985, Witcksten 1983). Las langostas están representadas por
al menos dos especies (2 familias); mientras que de los estomatópodos se conocen
cuatro especies agrupados en una familia (Hendrickx y Salgado Barragán 1991; Campos
et al.,1998).
Aves. El grupo de las aves (playeras, acuáticas, marino-costeras y terrestres) está
representado con más de 315 especies terrestres y acuáticas (residentes y migratorias)
de la parte norte del Golfo de California. La Isla Montague representa el área principal de
concentración de aves playeras y marinas. En los concheros de la isla Montague y en El
Faro, la golondrina marina elegante y la golondrina marina real anidan juntas. El Faro y el
estero El Chayo son las zonas donde se concentran las colonias nidantes de varias
especies, entre éstas: el perro de agua, la garza ceniza, la garza nívea, la gaviota, la
119
golondrina de mar y el gorrión sabanero. La Isla Pelícano es utilizada para el descanso y
alimentación por cientos de pelícanos cafés, el ave más abundante del delta (Mellink y
Palacios 1993). Adicionalmente en las zonas costeras del Norte del Golfo, existen
colonias de anidación del gallito marino (Sternaantillarum) (Mellink et al., 1996). Algunas
especies relevantes por su estatus de protección son: el águila pescadora
(Pandionhaliaetus), águila calva (Haliaeetusleucocephalus), halcón peregrino (Falco
peregrinus), pelícano blanco (Pelecanuserythrorhynchos), pelícano pardo (P.
occidentalis), gaviota (Larusdelawarensis), golondrina de mar menor (Sternaantillarum),
cormorán (Phalacrocoraxauritus), pato (Anascrecca), ganso canadiense
(Brantacanadensis), gallareta (Fulica americana), palmoteador de Yuma o rascón picudo
de Arizona (Ralluslongirostris yumanensis) y ralito negro
(Laterallusjamaicensiscoturniculus) (Mellink y Palacios 1993; Abarca et al., 1993; Ruiz-
Campos y Rodríguez 1997; Piest y Campoy 1999). Cabe destacar la importancia de la
Ciénega de Santa Clara como sitio de animación de verano de aves migratorias, lo que
compensa la pérdida del flujo de agua dulce del Delta del Río Colorado (Glenn et al.,
2001).
IV.5. Medio socioeconómico.
Puerto Peñasco
Historia y Población. Puerto Peñasco es una ciudad del Estado de Sonora,
ubicado en la región Noreste del Estado; uno de los centros de población más jóvenes.
Inicio su formación a mediados de los años veinte, como una villa de pescadores: a partir
de esas fechas, pescadores de diversas partes del estado (Guaymas, Bahia Kino, Puerto
Libertad, Puerto Lobos entre otros), empezaron a llegar durante las temporadas de pesca,
asentándose y viviendo en forma improvista en carpas y cuevas que encontraban entre
los riscos de cerros sobre dunas arenosas. A finales de ésta década, el lugar era conocido
como „Punta de Piedra‟ o „Punta Peñasco‟ debido al gran macizo de origen volcánico que
se introduce en las aguas de Mar de Cortés. En esta época, las principales pesquerías
fueron de totoaba y tiburón, en donde se aprovechaba el buche o vejiga natatoria y el
hígado, respectivamente, para comercializarlas en los mercados norteamericanos y
asiáticos.
A principios de los años treinta, tras el asentamiento de los primeros pobladores,
se creó la primera delegación de policía, dependiente de una comisaria aledaña, en
Sonoyta (actualmente Plutarco Elías Calles). Durante la década de los cuarenta, „Punta
Peñasco‟ contaba con 181 habitantes, dedicados a las actividades pesqueras y la
construcción del ferrocarril Sonora-Baja California. A la par del ferrocarril, se construía el
primer muelle de madera, bajo el periodo administrativo presidencial del General Lázaro
Cárdenas: Ambos acontecimientos le otorgaron la soberanía nacional al territorio,
120
declarado como Comisaria Municipal el 4 de Diciembre de 1941; erigido como Municipio
el 9 de julio de 1952.
Población y Territorio. El municipio de Puerto Peñasco cuenta con una superficie
de 9,774.45 kilómetros cuadrados, los cuales representan el 5.27% del territorio del
estado de Sonora. El municipio está conformado por 39 áreas de agrupación territorial
periurbanas, además de su mancha urbana. De acuerdo con datos de INEGI (2012), el
municipio cuenta con una población total de 57,342 habitantes, de los cuales 29,460 son
hombres y 27,882 mujeres (ver Tabla IV.2). La estructura poblacional presenta una mayor
concentración para los grupos de edad mayor a 18 años.
Tabla IV.2. Censo poblacional del Municipio de Puerto Peñasco (INEGI, 2012).
Población total
Mujeres Hombre Edad mediana
Relación hombre-mujer c/
57,342
27,882
29,460
25
105. 66
c/ Expresa el número de varones por cada 100 mujeres.
Figura IV.19. Grupos de edad en el municipio de Puerto Peñasco (Pérez Valencia et al.,
2011).
0 10,000 20,000 30,000 40,000
0-2.
3-5.
6-11.
12-14.
15-17.
˃18.
Habitantes
Gru
po
s d
e e
dad
121
Por su parte, la Figura IV.20 expresa el comportamiento del crecimiento de la
población por década, entre 1980 y 2010, manifestándose un mayor crecimiento durante
el año 2005. El estudio de crecimiento demográfico expresó una Tasa de Crecimiento
Media Anual (TCMA) de 3.6% (ver Tabla IV.3).
Figura IV.20. Crecimiento dinámico de población en el Municipio de Puerto Peñasco.
Periodo 1980-2010.
Tabla IV.3. Dinámica poblacional del Municipio de Puerto Peñasco.
Año Población TCA* (%) TCMA
1980-2010
1980 19,541 -----
3.62% 1990 26,625 3.1% 1995 27,169 0.4% 2000 31,466 3.0% 2005 44,647 7.2% 2010 56,756 4,9%
*TCA: Tasa de Crecimiento Anual
Para la localidad, la migración, entendida como un desplazamiento de población
que tiene lugar desde un lugar de origen hacia otro destino, y que implica un cambio de
residencia habitual; refiere al número de personas que no son residentes de la localidad,
no incluidas aquellas personas que emigraron del territorio. En Puerto Peñasco, según
0
10,000
20,000
30,000
40,000
50,000
60,000
1970 1980 1990 2000 2010 2020
Hab
itan
tes
122
datos de INEGI, para el periodo del 2005-2010, toma valores de 62 y 64% (como se cito
en Pérez Valencia et al., 2011).
Con base en los datos de educación y escolaridad (INEGI, 2012), se puede
observar que el porcentaje de individuos que no posee ningún tipo de escolaridad en
general es bajo. El municipio ha venido mantenido estable su porción de población
mayores de 15 años sin escolaridad, con un porcentaje promedio de 3.96% para el
periodo 2000-2010 (INEGI, 2005 y 2010) (ver Tabla IV.4). Por su parte, la población
analfabeta del municipio representa el 3.3% de la población total (ver Tabla IV.5). La edad
promedio de escolaridad en la población muestra un incremento, a la fecha actual es de
9.04 años (ver Tabla IV.6).
Tabla IV.4. Población sin escolaridad en el Municipio de Puerto Peñasco (Pérez Valencia
et al., 2011; INEGI, 2012).
Población mayor a 15 años Sin escolaridad
Porción de la Población Total
2000 2005 2010 2000 2005 2010
1176
1119 1454 3.7% 3.6% 4.6%
Tabla IV.5. Población analfabeta en el Municipio de Puerto Peñasco (Pérez Valencia et
al., 2011; INEGI, 2012).
Población analfabeta Porción de la Población Total
2000 2005 2010 2000 2005 2010
601
933 1025 1.9% 3.0% 3.3%
Tabla IV.6. Grado promedio de escolaridad en Puerto Peñasco (Pérez Valencia et al.,
2011; INEGI, 2012).
Grado promedio de escolaridad
2000 2005 2010
8.0% 8.52% 9.04%
123
En lo que refiere a la derechohabiencia, el estudio reflejó que para Puerto
Peñasco, el acceso a seguridad social se incrementó un 28%, entre el año 2000 al 2010
(Pérez Valencia, 2011) (ver Tabla IV.7). Sin embargo, cmo es posible observar, fue
durante el periodo 2000-2005 cuando se presentó el incremento más significativo del
periodo con un aumento de 25%. Para los siguientes cinco años 2005-2010, sólo aumentó
3%.
Tabla IV.7. Población con derechohabiencia en Puerto Peñasco (Pérez Valencia et al.,
2011; INEGI, 2012).
Derechohabientes
2000 2005 2010
40%
65% 68%
En relación a los Servicios Públicos de la localidad, el Plan Municipal de Puerto
Peñasco, para el periodo 2012-2015, establece que el municipio cuenta con el servicio de
agua potable beneficiando al 89% de los habitantes; para servicios de alcantarillado, se
cuenta con una cobertura de 49.95% y el 80% para servicios de energía eléctrica,
respectivamente.
Tabla IV.8. Servicios Públicos en Puerto Peñasco (Plan de Desarrollo Municipal, 2012).
Servicios Públicos
Agua Potable Alcantarillado Energía Eléctrica
89%
49.95% 80%
Por su parte, en relación con los indicadores de marginación, Puerto Peñasco
presenta un grado de marginación bajo (Pérez Valencia et al., 2013) (ver Tabla IV.9).
Tabla IV.9. Indicadores de marginación en Puerto Peñasco (Pérez Valencia et al., 2013;
INEGI, 2012).
Indicadores de Marginación
Hacinamiento Índice de marginación Categoría de marginación
30.71
-1.47 Muy bajo
124
Economía y población. La población económicamente activa de la localidad fue
de 36,596 personas, según datos de INEG (2010). Lo anterior, representa un 60% de la
población total del Municipio (Figura IV.21). Según el estudio realizado (Pérez Valencia et
al., 2013), esta variable en comparación con el año 2000 se triplicó (Ver Tabla IV.10), lo
cual se atribuye a la considerable incorporación de la población al auge del sector terciario
en la zona, de años recientes.
Figura IV.21. Actividad Económica en Puerto Peñasco4.
Los sectores de actividad económica en la localidad, se dividen en Actividad
Primaria, que refiere a las actividades de agricultura, ganadería, pesca y silvicultura.
Actividad Secundaria, refiere a la actividad que transforma un bien en otro, como la
manufactura, pero también se incluyen actividades de extracción de minerales y petróleo,
la construcción, electricidad y agua. Finalmente, la Actividad Terciaria engloba las
actividades comerciales y los servicios. En Puerto Peñasco los sectores económicos se
diversifican de la siguiente manera (ver Figura IV.22), siendo el sector terciario la actividad
económica que presenta un porcentaje más significativo.
4 PEA: Población Económicamente Activa
PNEA: Población No Económicamente Activa
64% PEA
36% PNEA
125
Figura IV.22. Sectores de Actividad económica en Puerto Peñasco.
La población de la localidad ocupada en sector primario en Puerto Peñasco, como
se observa en la figura anterior, representa un 5% de la población. Según estudios
realizados (Pérez Valencia et al., 2011; ACUACORP, 2009) este sector presentó un
decrecimiento en actividad, de17%, desde 1990 al 2010. Es de importancia a aclarar que
para la localidad, el sector primario refiere principalmente a actividades relacionada con la
pesca. La agricultura en la localidad tiene un papel por demás incipiente. Por sus
características, la actividad que predomina es la pesca comercial. La pesca comercial, se
desarrolla en dos formas: artesanal o de ribera, e industrial o de altura. La pesca de altura
se realiza en embarcaciones mayores (barcos), para la producción de especies utilizan el
método de arrastre, la tripulación la conforman un grupo amplio de pescadores, sus
faenas de pesca las realizan por periodos prolongados de tiempo. Por su parte, la pesca
artesanal se realiza por embarcaciones menores (pangas), con dos o tres tripulantes,
generalmente realizan faenas de pesca diaria.
Sector Ribereño de Puerto Peñasco
Orígenes y surgimientos. Posterior al decline de la pesca de totoaba y tiburón, la
pesca de camarón también fue importante para el desarrollo de las pesquerías. En
primera instancia, estimuló la formación de organizaciones pesqueras y el concepto de
cooperativismo, como un esfuerzo nacional de esa época para incrementar la producción
de la especie. Además de haber provocado el aumento y la industrialización de la flota
mayor (pesca de arrastre), también marco la pauta para el auge y crecimiento del sector
pesquero artesanal (Cudney y Turk, 1998). Durante la década de los ochenta y noventa,
las capturas de camarón sufrieron una disminución consistente; barcos camaroneros
75%
18%
5%
Sector Terciario
Sector Secundario
Sector Primario
126
redujeron su producción de captura alrededor de 50% (Hoyos, 1991). La producción de
esta pesquería se redujo al grado del colapso financiero. Consecuencia de ello, el banco
tomó posesión de los barcos, las cooperativas comenzaron a cerrar y las personas
tuvieron que buscar nuevos trabajos. En Puerto Peñasco, la flota activa se redujo de 220
embarcaciones a poco menos de 100. La pesca de ribera se dio a partir de la quiebra de
cooperativas camaroneras que trabajaban con embarcaciones mayores, quienes, para
asegurar su permanencia, adquirieron embarcaciones menores que les generaba menor
costo. Esta crisis de la pesca, además de las obvias consecuencias económicas en esta
comunidad y el resto de las comunidades afectadas, provocó una diversificación del
esfuerzo pesquero de la pesca artesanal. Especies no aprovechadas con anterioridad se
volvieron especies importantes y alternativas al camarón.
En la actualidad, la pesca de ribera es un actor importante para la comunidad:
genera autonomía y seguridad alimentaria, pues abastece la diversidad de productos
marinos comestibles; genera dinamismo económico de mercados locales relacionados
con la actividad diaria; genera empleos y autoempleos; sostiene la economía de más de
400 hogares vinculados a los tripulantes y concesionario de la matricula o dueño de la
panga, además de los hogares vinculados a otras actividades vinculadas a esta práctica.
Población, Economía y Producción. Según el estudio justificativo de la
RAGCyDRC el municipio de Puerto Peñasco cuenta con un flota de ribera de 300
embarcaciones (SEMARNAT, 2007). Se estima que existe una cantidad incluso superior
de embarcaciones menores que operan al margen de la ley. La forma de organización de
los pescadores de ribera se diversifica en Sociedades Cooperativas y Permisionarios. En
Puerto Peñasco, la forma de organización en Cooperativas es la que se da mayormente.
Por su parte, los permisionarios como dueños directos de embarcaciones, tienen a su
cargo concesiones que les permite pescar distintas especies. En la Tabla IV.10 se
presentan la caracterización del Sector Ribereño, participante de esta MIA-R.
Tabla IV.10. Esquema de organización del Sector Ribereño de Puerto Peñasco.
Población total Embarcaciones Permisos
Cooperativas
17
101
216
Permisionarios
16
31
45
De acuerdo con las embarcaciones registradas para esta manifestación, Los
pescadores de ribera llevan a cabo 11 pesquerías, en la Tabla IV.11 se presenta la
diversificación de los permisos de las pesquerías y el número de permisos que posee
127
cada una de estas. Como es posible observar, las pesquerías de Escama y Jaiba son las
presentan una mayor cantidad de permisos.
Tabla IV.11. Número de permisos por pesquerías del Sector Ribereño de Puerto
Peñasco.
Pesquerías del Sector Ribereño
Camarón Escama Tiburón Lisa Callo Caracol Jaiba Almeja
Catarina Bola de cañón
Almeja generosa
Pulpo
7
44
14
4
12
27
67
27
2
5
34
La estructura de ingresos derivada de la pesca de ribera, considera a través de los
arribos registrados durante los años 2012, 2013, y 2014. A continuación se presentan el
desglose de la producción de las principales pesquerías, el valor de producción, y el
aporte que realizan a la economía local. Los datos reflejan una mayor producción en la
pesquería de Escama, particularmente la menor. En la región, las especies de esta
pesquería, configura la base principal de la economía pesquera.
Tabla IV.12. Producción pesquera y valor económico anual de las pesquerías del Sector
Ribereño de Puerto Peñasco5.
Pesquerías Volumen de captura
(kg)
Precio por Kg en playa
Ingreso neto de la producción
Camarón
17,000 280.00 4‟760,000
Escama menor
1‟447,000 20.00 28‟940,000
Escama mayor
79,000 70.00 5‟530,000
Tiburones
79,600 25.00 1‟990,000
Lisa
57,500 10.00 575,000
Caracol
170,000 7.00 1‟190,000
Jaiba
681,000 9.00 6‟129,000
Otras especies 30,000 60.00 1‟800,000
Total 50’914,000
5 Elaborado a partir del promedio de los arribos de los años 2012, 2013 y 2014, proporcionados por la oficina
de pesca de Puerto Peñasco, Sonora.
128
IV.6. Diagnóstico Ambiental.
Los documentos rectores que aportan elementos significativos para generar un
diagnóstico ambiental del Norte del Golfo de California son el Programa de Conservación
y Manejo de la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Rìo Colorado, el
Programa de Ordenamiento Ecológico Marino del Golfo de California y la Carta Nacional
Pesquera. En este sentido, a continuación se analiza la información más destacada de
dichos documentos, emitiendo una diagnosis de las tendencias de desarrollo y detrimento
de la calidad del Sistema Ambiental Regional.
Acorde al Programa de Conservación y Manejo de la Reserva y, como se ha
venido dilucidando en apartados anteriores del presente manuscrito, quizá la principal
problemática que susceptibiliza la integralidad ecológica del Alto Golfo de California es la
reducción significativa del flujo de agua dulce hacia el cauce principal del Río Colorado y
la zona deltaica, trayendo consigo profundas implicaciones en materia de conservación.
Sobre todo desde 2001-2006, la falta de flujo en el río ha ocasionado la pérdida gradual
del cauce en su parte deltaica; se prevé que a mediano plazo, los cambios que se
generen (superficie de inundación, extensa y poco profunda, en lo que fue el cauce)
cambiará todos los procesos biológicos que actualmente ocurren. Actualmente la totalidad
de su flujo es retenido y utilizado antes de alcanzar su desembocadura. Las
consecuencias son la desecación del delta, el encogimiento de los humedales y la
disminución de los nutrientes que llegan al mar, reduciendo así el desarrollo larval de
macroinvertebrados, el desove de especies como la curvina golfina o la totoaba, la
fragmentación del hábitat de poblaciones residentes de delfines nariz de botella y de la
propia vaquita marina, así como el desove de diferentes especies de peces y camarones,
por tanto poniendo en riesgo las pesquerías del golfo y el desarrollo económico, social y
cultural de las comunidades usuarias del ANP (Morrison et al., 1996; Galindo y Cols.
2000; Flessa et al. 2001).
Así mismo, en el Programa de Conservación y Manejo de la Reserva y en una
ficha técnica para la evaluación del sitio prioritario Alto Golfo de California elaborada por la
CONABIO, TNC, CONANP y Pronatura, se describe que en el Norte del Golfo de
California se realizan descargas de aguas agrícolas residuales y algunos derrames de
combustibles de las embarcaciones (mayores y menores); además existe una disposición
inadecuada de los residuos sólidos y en algunos casos las poblaciones costeras carecen
de drenaje, todo ello implica la contaminación de los ecosistemas en la zona. Aunado al
punto anterior, las granjas camaroneras y áreas urbanas han incrementado la
contaminación orgánica en aguas costeras por sus descargas de aguas de retorno
(CONANP, 2007).
Por su parte, tanto el Programa de Conservación y Manejo de la Reserva como la
Carta Nacional Pesquera aluden problemáticas focalizadas en la sobreexplotación
pesquera, la falta de ordenamiento pesquero, así como la aun incipiente inspección y
vigilancia de las malas prácticas pesqueras. Por ejemplo, Nava (1995) documentó como
en el Norte del Golfo de California se presenta pérdida de la diversidad y la productividad,
así como cambios en la estructura y estabilidad de las comunidades béntico-demersales y
129
stocks de poblaciones de importancia comercial (i.e. cabrillas, lenguado, baqueta,
moluscos, chano, entre otras) por la acción directa de las redes de arrastre camaronero,
artes y métodos de pesca de baja selectividad. En relación a la pesca ribereña, las
principales problemáticas asociadas son la falta de atención a las temporadas de vedas,
el aumento continuo de la presión pesquera de parte de embarcaciones menores no
regularizadas, así como la gran intensidad de pesca que presentan sobre algunas
especies de moluscos, crustáceos y bivalvos de reciente interés comercial.
En el mismo orden de ideas, el Programa de Ordenamiento Ecológico Marino del
Golfo de California, atribuye al Norte del Golfo de California una alta aptitud para la pesca
industrial y ribereña, con un nivel de presión general intermedio, a la que le traduce en la
necesidad de importantes interacciones Conservación-Pesca. Para ello, establece como
lineamiento ecológico que las actividades productivas que se lleven a cabo en esta unidad
de gestión ambiental se desarrollen de acuerdo con las siguientes acciones generales de
sustentabilidad, con especial énfasis en un enfoque de prevención que permita mantener
el actual nivel medio de presión marina:
a) Se ajusten a los instrumentos de protección de stocks (vedas).
b) Las artes y equipos de pesca se ajusten a las consideraciones normativas.
c) Respeten cabalmente las áreas de exclusión y suspensión temporal de pesca con
artes específicas, para la protección de la vaquita marina.
d) Asuman compromisos en materia de adopción de innovaciones tecnológicas.
Para concluir, todos los documentos arriba aludidos concuerdan ante el hecho de que
son necesarios focalizar e incrementar esfuerzos para asegurar la protección de la vaquita
marina, la totoaba, las tortugas marinas y el resto de las 17 especies de mamíferos
marinos con distribución dentro del Norte del Golfo de California. Para ello, las principales
medidas que buscan garantizar dicha encomienda son las poligonales de restricción total
de la pesca de altura y menor, así como poligonales de suspensión temporal del uso de
redes de enmalle, cimbras y/o palangres para la pesca ribereña; los programas
intersecretariales de inspección y vigilancia marina y terrestre tendientes a vigilar las
restricciones de dichas poligonales y a evitar la captura ilegal de especímenes juveniles y
adultos de totoaba, en las ilícitas “redes totoaberas”; así como la normativa que
condiciona a las embarcaciones industriales a contar con excluidores de captura de
tortugas y mamíferos marinos dentro de las redes de arrastre.
130
V. IDENTIFICACIÓN, DESCRIPCIÓN Y EVALUACIÓN DE LOS IMPACTOS
AMBIENTALES.
La mayoría de las aportaciones teóricas y prácticas sobre las evaluaciones de impacto
ambiental que actualmente son difundidas y empleadas alrededor del mundo, se
desarrollaron durante la década de 1970. Desde entonces y hasta la fecha, numerosos
métodos se han modificado mientras que otros han surgido, ello concatenando una
necesidad de agruparles o clasificarles acorde a lógicas o a los enfoques metodológicos a
los que éstos se prescriben. En este sentido, una de las primeras clasificaciones fue la
desarrollada por Wagner y Bromley (1974) diferenciando, grosso modo, entre listas de
chequeo, técnicas gráficas, matrices, diagramas y métodos ad hoc. Por su parte, Canter y
Sadler (1997) influidos por el trabajo pionero de Wagner y Bromley incrementaron la
clasificación a un listado de 22 técnicas instrumentales diferenciales, continuando con la
tradición de la unicidad metodológica.
Actualmente es bien reconocido que el empleo de ningún tipo de método por sí
sólo, puede satisfacer la complejidad de interacciones que generan las diferentes
actividades desarrolladas por los proyectos que se someten a evaluación de impacto
ambiental, sobre los también diversos aspectos ambientales de sus entornos inmediatos;
por lo tanto, el tema clave de estos días se encuentra en la adecuada selección del
conjunto de instrumentos, y de las aproximaciones para su triangulación estratégica, con
el objeto de satisfacer las necesidades y optimizar los alcances específicos de cada
proyecto.
Otra de las grandes discusiones en torno a los procesos de evaluación de impacto
ambiental, tiene que ver con el grado de participación en la elaboración de los estudios de
los diferentes actores que, de una u otra manera, influyen o son influenciados por el
desarrollo de los proyectos. En este sentido, Lohani et al. (1997) les identifica, de manera
general, en los siguientes dos grandes enfoques: 1) Expertos, sostiene que los
consultores apoyados por grupos de científicos son los que deben desarrollar y revisar en
su totalidad los estudios, permitiendo con ello el desarrollo de modelados cuantitativos y la
generación de rigurosos pronósticos ambientales; y 2) Participativo, plantea la necesidad
de colaboración vinculante de los grupos potencialmente afectados o interesados
(promoventes, ONG‟s y dependencias gubernamentales), a lo largo del proceso de
elaboración y revisión del estudio. De esta manera, mientras que el enfoque de expertos
en la mayoría de los casos de proyectos sometidos a evaluación por los sectores sociales
de la economía, resultan en procedimientos técnicamente inaccesibles y económicamente
costosos, el enfoque participativo además de subsanar las dificultades anteriores,
representa un nicho de oportunidades para incorporar los puntos de vista sociales y
culturales y, sobre todo, para practicar ejercicios horizontales de toma de decisiones,
propiciar la comunicación interna sobre los principales impactos ambientales y sus medias
correctivas, así como garantizar la continuidad al largo plazo y la mejora continua de este
importante instrumento de política ambiental.
131
V.1. Justificación de las metodologías y los criterios para la identificación, caracterización y evaluación de Impactos Ambientales. Tomando en consideración lo señalado en los párrafos anteriores, así como la experiencia del Sector de haber sometido, en ocasiones anteriores, sus actividades a procesos de evaluación de impacto ambiental, se optó por llevar a cabo la identificación, caracterización y evaluación de los impactos ambientales a través de un esquema metodológico participativo, plural instrumentalmente y regido bajo una lógica de aprendizaje reflexivo (Figura V.1). El enfoque participativo incluyó la cooperación de los principales representantes del Sector, así como de las autoridades locales en materia pesquera, náutica y ambiental. La participación del sector representó una pieza angular para buscar desarrollar un proyecto realmente apegado a sus compromisos y alcances reales, así como para la re-identificación de los impactos ambientales y la generación de ideas para encausar medidas correctivas plausibles. Por su parte, la participación de las autoridades locales, además de brindarle importantes pautas normativas al proyecto, contribuyó a que el grupo de consultores balanceara los aportes del Sector, a través de la denominada „triangulación participativa‟ (Russel, 2011). En este sentido, el enfoque de aprendizaje reflexivo plasmado en el diseño metodológico del proyecto, se incorporó de las perspectivas teórica-prácticas de Interdisciplinariedad y Sistemas Complejos (García, 2011; Leff, 2011). Particularmente, se empleó un modelado metodológico procesual de tipo „sistema suave de manejo enfocado al cambio‟ (Checkland, 2001), a través del cual se partió de la MIA-R 2011-2012 para ir generando retroalimentación mediante la incorporación participativa y sistemática de los actores estratégicos. Finalmente, la lógica procesual y retroalimentaría, contribuye a garantizar la continuidad al largo plazo del proyecto, así como la mejora continua del mismo.
Por su parte, se conjugaron diversos instrumentos para cada etapa del diseño metodológico, algunos de ellos característicos propiamente de los estudios de impacto ambiental, mientras que otros representan técnicas de investigación filiales a las ciencias sociales. Así, se optó por desarrollar un pluralismo instrumental, con el objeto de complementar las ventajas y acotar las desventajas de cada instrumento por sí solo, así como buscando alcanzar un mayor reforzamiento, contraste y validación de la identificación, caracterización y evaluación de los impactos ambientales (Denzin y Lincoln, 2005). De manera tal, los instrumentos empleados fueron los seis siguientes (veasé ANEXO 2):
1. Análisis heurístico. Se empleó como una técnica metodológica de las ciencias sociales para el grupo de consultores y como una forma habitual y empírica de conocimiento para los representantes del Sector, estableciendo una dialéctica cuyo objetivo final la reflexión crítica encaminada a la identificación de innovaciones positivas para el sistema determinado, en este caso par la MIA-R 2011-2012 (Moustakas, 1990). Para instrumentarle, se utilizaron como medios de recolección de la información los grupos focales y la cartografía participativa.
2. Lista de chequeo enfocada a decisiones. Representa una de las metodologías más empleadas en la elaboración de estudios de impacto ambiental, ya que contienen una serie de puntos, asuntos de impacto o cuestiones que el usuario atenderá o contestará, sirviendo como una base sistemática o un recordatorio útil
132
sobre todo para la fase de identificación de impactos. En el caso particular del proyecto, las decisiones se enfocaron a una fase de análisis sobre la modificación, el descarte o la incorporación de actividades de las diferentes etapas del proyecto que pudiesen generar impactos potenciales al interactuar con los factores ambientales del SAR, con respecto a la MIA-R 2011-2012.
3. Matriz de interacciones. De manera general, las matrices identifican interacciones (impactos) al incorporar una lista de actividades del proyecto con una lista de los componentes ambientales que podrían ser afectados por dichas actividades. Las matrices de interacciones representan las versiones más simples de estas herramientas, ya que sólo determinan la posibilidad de existencia o inexistencia de un impacto y su sentido (positivo o negativo), por lo que generalmente son empleadas en la fase de caracterización de los impactos ambientales.
4. Matriz numérica de interacciones. Las matrices numéricas permiten evaluar la
significancia de los impactos y la eficiencia de las medidas de correctivas, ya que se basa en el uso de indicadores de impactos medidos en escala ordinal. A partir de estos indicadores y usando ecuaciones lineales y exponenciales, se desarrollan índices. Este tipo de matrices permite evaluar de manera ordenada interacciones y hace más efectivo el análisis porque permite manejar una gran variedad de condiciones y tipos de datos. Para el caso particular del proyecto, generamos una matriz numérica de interacciones ad hoc (basada en la MIA-R 2011-2012, veasé Pérez-Valencia et al. 2011), a través de la cual clasificamos a los impactos con base en su nivel de significancia (Bojórquez-Tapia et al. 1998).
5. Dictámen profesional. Representa un método ampliamente usado dentro del proceso de evaluación de impacto ambiental, dentro del cual generalmente se solicita a profesionales altamente relacionados con los tópicos, ya sea de una manera práctica o teórica, emitir opiniones que incidirán de manera relevante ya sea en la identificación, caracterización, evaluación de los impactos, o bien directamente sobre las medidas correctivas. Para el caso particular del proyecto, dicho método fue empleado con las autoridades locales, fundamentalmente para retroalimentar, a través del dictámen emitido en talleres, los procesos de identificación, caracterización y evaluación de los impactos ambientales.
6. Evaluación ambiental estratégica (EAE). La EAE se refiere a una gama de enfoques analíticos y participativos que buscan integrar las consideraciones ambientales en los planes, políticas y programas, y evaluar las interconexiones con las consideraciones económicas y sociales. La EAE puede describirse entonces, como una familia de enfoques que utiliza una variedad de herramientas, en lugar de un único enfoque, fijo y que prescribe; se aplica en las más tempranas etapas del proceso de toma de decisiones, tanto para ayudar a formular políticas, planes y programas, como para evaluar la potencial efectividad y sostenibilidad de los mismos. De tal manera, su principal aporte estriba en proporcionar aspectos ambientales clave para apoyar una toma de decisiones más consciente e identificar nuevas oportunidades, ya que insta a un examen sistemático y completo de las opciones de desarrollo.
133
1a. Aprendizaje reflexivo
Objetivo: Razonar sobre las experiencias adquiridas en los procesos anteriores. Instrumentos: Análisis heurísticos a través de
grupos focales y cartografía participativa.
Participantes: Representantes del sector
pesquero ribereño y Grupo de consultores.
MIA-R 2011- 2012 1b. Identificación de los impactos
Objetivo: re-identificar los impactos ambientales de
procesos anteriores. Instrumentos: Lista de chequeo enfocada a
decisiones. Participantes: Representantes del sector pesquero ribereño y Grupo de consultores.
Objetivo: Relacionar las actividades
con los factores ambientales para determinar, a través de su cualificación y cuantificación, aquellos de mayor significancia. Instrumentos: Matrices Ad Hoc, de
interacción y numéricas.
Participantes: Grupo de consultores.
3a. Retroalimentación de Impactos
Objetivo: Enriquecer la
identificación, caracterización y evaluación de los impactos. Instrumentos: Dictámen
profesional Participantes: Autoridades
locales y Grupo de consultores.
MIA-R 2016 - 2018
ETAPA 1. IDENTIFICACIÓN
ETAPA 2. CARATERIZACIÓN y
EVALUACIÓN ETAPA 3. PLAN DE MANEJO AMBIENTAL
3b. Medidas correctivas
Objetivo: Estipular medidas
correctivas factibles para los principales impactos. Instrumentos: Evaluación ambiental estratégica. Participantes: Autoridades
locales, Grupo de consultores, Representantes del Sector Pesquero Ribereño.
Figura. V.1. Representación gráfica del esquema metodológico con pluralidad instrumental y enfoque participativo desarrollado por el Proyecto.
134
V.2. Identificación de Impactos Ambientales. Los efectos generales de las pesquerías sobre los sistemas marinos han sido considerablemente analizados y documentados. A nivel internacional por ejemplo, se pueden citar por su relevancia los trabajos de Dayton et al. (1995), Greenstreet & Hall (1996), Hutchings & Barrowman (1996), Myers (1996), Goñi (1998), Jennings et al. (1999), Agardy (2000), Chuenpagdee et al. (2003), Kaiser et al. (2003), Gislason (2003), Morgan & Chuenpagdee (2003), Fuller et al. (2008); mientras que entre los trabajos a escala regional destacan los de Román-Rodríguez (2000), López-Martínez et al. (2007), Prescott & Cudney-Bueno (2008), Bizzarro et al. (2009), Smith et al. (2009), Galván-Magaña et al. (2010) y Paredes et al. (2010).
De manera prácticamente consensada en los trabajos mencionados con
antelación, se identifican las siguientes tres grandes afectaciones de las pesquerías sobre los ambientes marinos: 1) La afectación a las especies objetivo, llegando a cambiar su abundancia, potencial reproductivo, composición genética y modificando sus parámetros poblacionales (longitud máxima, tasa de crecimiento, edad y talla promedio de maduración, estructura por edad y tallas, proporción entre machos y hembras, etc.); 2) La afectación a las especies capturadas incidentalmente, tiene los mismos efectos pero diferente magnitud que sobre las especies objetivo (dependiendo de los volúmenes de captura y su consistencia) lo cual se refleja en cambios en la estructura de la comunidad faunística y de los patrones de las biodiversidades α, β y µ; y finalmente 3) La afectación a nivel ecosistema, principalmente sobre la disponibilidad y calidad de hábitats, así como sobre procesos ecológicos como los patrones de flujo de materia y energía (alteración de las redes o relaciones tróficas), los anteriores pilares de la integralidad estructural y funcional ecosistémica.
En consideración de lo anterior, y de los ejercicios metodológicos llevados a cabo
en la MIA-R 2011-2014 para la identificación de impactos ambientales, se desarrolló un taller con los representantes del Sector Pesquero Ribereño de Puerto Peñasco, con el objeto de re-identificar, de manera participativa, tanto las actividades potencialmente generadoras de impactos como los principales factores ambientales a ser afectados, a través de una lista de chequeo enfocada a decidir y justificar su permanencia, modificación, descarte o la incorporación de nuevas actividades y factores con respecto al ejercicio desarrollado en la MIA previa (Anexo 3; Tabla V.1 y Tabla V.2). Ello resultó fundamental, ya que se lograron incorporar, desde el proceso de identificación de impactos ambientales, algunos avances reales que el Sector ha venido desarrollando en los últimos años en materia correctiva y, por otro lado, se llevó a cabo un proceso de adaptación de la identificación de impactos enfocado únicamente al desarrollo de las pesquerías ribereñas de Puerto Peñasco en la porción oriental de la Zona de Amortiguamiento de la RBAGCyDRC, tomando en cuenta la ubicación del Proyecto y la influencia que éste ejerce sobre el SAR definido (Figura V.3; Tabla V.4; Tabla V.5; Tabla V.6 y Tabla V.7).
Como resultado final se identificaron un total de 34 actividades en las cuatro fases
del proyecto que potencialmente pueden generar impactos al ambiente (Tabla V.6). Por su parte, se identificaron 53 componentes ambientales, abióticos, bióticos y socioeconómicos, que pueden ser potencialmente afectados por las actividades previamente identificadas (Tabla V.7). Resulta imperante señalar que, las actividades y los componentes ambientales identificados en este apartado, generan una cadena causal lógica [(a) Actividad de la faena de pesca-(b) Tipo de afectación por factor ambiental-(c)
135
Medida correctiva], que nos permitirá desarrollar matrices de interacción en el apartado de caracterización de los impactos ambientales, calcular índices de significancia en el apartado de evaluación de los impactos ambientales y, finalmente, implementar medidas correctivas en el Capítulo VI.
Figura V.2. Número de actividades potencialmente generadoras de impactos y factores ambientales potencialmente afectados, descartadas e incorporadas con respecto de la MIA-R 2011-2012.
32
25
15
28
0
5
10
15
20
25
30
35
Modificados odescartados
Incorporados
Actividades
Factores ambientales
136
Tabla V.2. Factores ambientales potencialmente afectados por las actividades del proyecto, identificados en la MIA-R 2011-2012 (Pérez-Valencia et al. 2011).
137
Tabla V.1. Actividades durante las cuatro fases del proyecto que pueden ocasionar afectaciones al medio ambiente, identificadas en la MIA-R 2011-2012 (Pérez-Valencia et al. 2011).
138
Tabla V.3. Decisiones respecto a las actividades modificadas o descartadas de la Tabla V.1.
Actividades modificadas o descartadas
Nombre de la actividad Decisión
Desarrollar esquemas de autorregulación que impongan sanciones a los particulares que incumplan con las condicionantes en materia de impacto ambiental.
Los representantes del Sector consideraron de mayor pertenencia que dichas sanciones sean impuestas y aplicadas por las autoridades competentes, ya que los mecanismos de autorregulación pueden generar conflictos internos.
Avituallamiento previo a la temporada de cada una de las pesquerías.
El grupo de consultores consideró pertinente el desglose de las actividades llevadas a cabo como parte del avituallamiento, con el objeto de recalcar la importancia que el sector representa para la comunidad en su etapa de precaptura.
Revisión del arte de pesca. Los representantes del Sector consideraron que esta actividad no genera impacto potencial alguno.
Se pesca mucho volumen de curvina golfina. Captura de curvina golfina durante agregaciones reproductivas.
Esta pesquería no es desarrollada por el Sector.
Captura camarón enhuevado durante las últimas semanas de la temporada.
Los representantes del Sector y el grupo de consultores estuvieron de acuerdo en que esta actividad es realizada por la pesca ilegal, principalmente en la zona conocida como “El Desemboque”; los permisos de pesca comercial que operaran en el proyecto, respetan cabalmente la temporada de veda.
Captura de chanos enhuevados. Captura de sierras con tallas medianas y enhuevadas durante diciembre. Captura de hembras de jaiba enhuevadas. Captura de guitarra enhuevada. Captura de caracoles durante agregaciones reproductivas.
El grupo de consultores decidió agruparles en dos actividades genéricas según aplique a las especies objetivo: 1) Captura de ejemplares enhuevados; y 2) Captura durante agregaciones reproductivas.
Posiblemente se pesca mucho volumen de chano. Posiblemente se pesca mucho volumen de sierra. Posiblemente se pesca mucho volumen de jaiba. Se pesca mucho volumen de elasmobranquios. Posiblemente se pesca mucho volumen de escama con chinchorro. Posiblemente se pesca mucho volumen de escama con cimbra. Se pesca mucho volumen de moluscos con hooka.
El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron agruparles en una sola actividad: Altos volúmenes de captura de las especies objetivo.
139
Captura de chano con tallas medianas con red con luz de malla de 4”. Captura de jaiba con talla menor a la legal. Captura de guitarra chica.
El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron agruparles en una sola actividad: Captura de tallas menores a las legales.
Captura incidental de vaquita marina. Captura incidental de totoaba. Captura incidental de tortugas marinas. Captura incidental de tiburón blanco.
El grupo de consultores decidió agruparles en una sola categoría: Captura incidental de especies protegidas.
Uso de motores de dos tiempos. Los representantes del Sector atestiguaron que dichos motores ya no son empleados.
Captura de jaiba en esteros. Los representantes del Sector y el grupo de consultores decidieron ampliar la actividad a: Captura en Zonas Estuarinas, ya que en estos ambientes además de jaibas, se capturan moluscos, mantas, curvinas de orilla y lisas.
Captura exclusiva de jaibas hembras. Los representantes del Sector aludieron que la captura por sexo, a causa del tipo de arte de pesca empleado en dicha pesquería, se lleva a cabo de manera aleatoria.
Uso de red sin bollas. Los representantes del Sector comentaron que esta actividad es desarrollada por la pesca ilegal, principalmente para la captura de caracol durante la temporada de frío, cuando este se desagrega.
Captura de caracoles chinos. Debido a que el posible impacto a generar en la captura de caracoles chinos es su sobrecaptura, el grupo de consultores le considera implícito en la actividad: Altos volúmenes de captura de las especies objetivo.
Captura incidental. El grupo de consultores decidió subdividirle en dos actividades: 1) Altos volúmenes de especies de acompañamiento con valor comercial; y 2) Altos volúmenes de especies de acompañamiento sin valor comercial.
Pescar por error sobre zonas rocosas. Los representes del Sector aclararon que se desarrollan actividades pesqueras sobre zonas rocosas de manera dirigida, no por error.
Dejar redes, trampas o cimbras atoradas en el fondo (artes de pesca fantasmas).
Los representantes del Sector aludieron que esta actividad ha dejado de ocurrir ya que las artes de pesca sin atención rápidamente son robadas por embarcaciones ilegales de la propia comunidad o de otras comunidades; además el grupo de consultores atestiguó que se ha generado reflexión sobre la actividad, en los programas de concientización y educación previos.
Limpiar el arte de pesca (seleccionar las especies con valor comercial).
El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron desglosarle en las siguientes tres actividades: 1) Selección de especies objetivo; 2) Selección de especies de acompañamiento con valor comercial; y 3) Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial.
Regresar al mar la captura incidental. El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron desglosarle en las siguientes dos actividades: 1) Liberación de especies protegidas; y 2) Regreso al mar de la pesca de descarte.
140
Tabla V.4. Decisiones respecto a las actividades incorporadas a la Tabla V.1.
Actividades incorporadas
Nombre de la actividad Decisión
Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca. Compra de refacciones, combustibles y alimentos.
Los representantes del Sector y el grupo de consultores decidieron incorpórala, ya que representan una importante fuente de generación de ingresos y empleos indirectos durante la fase de precaptura.
Contratación y capacitación de personal. Los representantes del Sector y el grupo de consultores decidieron incorpórala, ya que se generan empleos para la fase de captura, con un importante componente de adiestramiento.
Constitución legal organizativa. El grupo de consultores decidió incorporarle, ya que contribuye al establecimiento de límites en el acceso a los recursos naturales y al desarrollo organizacional del Sector
Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental.
El grupo de consultores decidió incorporarle, ya que contribuyen a que la actividad se desarrolle bajo lógicas de seguridad laboral, de ordenamiento pesquero y de sustentabilidad ambiental.
Pesca ilegal Corrupción
Se decidió incorporar la pesca ilegal ya que es la principal fuente de la sobrepesca, generación de trampas fantasmas, captura de especies protegidas y generación de residuos; la corrupción, por su parte, es el principal incentivo al desarrollo de actividades pesqueras ilícitas.
Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
Los representantes del Sector decidieron incorporarle, ya que le han realizado de manera sistemática durante los últimos años, logrando observar sus contribuciones a la eficiencia pesquera.
Altos volúmenes de captura de las especies objetivo.
El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron incorporarle, a partir de la agrupación de las actividades: Posiblemente se pesca mucho volumen de chano; Posiblemente se pesca mucho volumen de sierra; Posiblemente se pesca mucho volumen de jaiba; Se pesca mucho volumen de elasmobranquios; Posiblemente se pesca mucho volumen de escama con chinchorro; Posiblemente se pesca mucho volumen de escama con cimbra.
Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial. Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial.
El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron desagregar en éstas actividades, a la captura incidental.
Captura incidental de especies protegidas. El grupo de consultores decidió incorporar esta actividad, que incorpora la captura incidental de totoaba, vaquita marina, tortugas marinas y tiburón blanco.
Captura de ejemplares enhuevados. Captura durante agregaciones reproductivas.
El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron incorporar estas dos actividades, que incluyen la Captura de chanos enhuevados; Captura de sierras con tallas medianas y enhuevadas durante diciembre; Captura de hembras de jaiba
141
enhuevadas; Captura de guitarra enhuevada; y Captura de caracoles durante agregaciones reproductivas.
Captura de tallas menores a las legales. El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron incorporar esta actividad, que incluye la Captura de chano con tallas medianas con red con luz de malla de 4”; Captura de jaiba con talla menor a la legal; Captura de guitarra chica.
Captura en zonas estuarinas. El grupo de consultores decidió robustecer esta actividad al desarrollo de otras pesquerías, además de la jaiba.
Recarga de combustible. El grupo de consultores decidió agregar esta actividad, ya que existe la posibilidad de verter residuos peligrosos al mar.
Selección de especies objetivo. Selección de especies de acompañamiento con valor comercial. Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial.
El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron incluirle, desagregando la actividad: Limpiar el arte de pesca (seleccionar las especies con valor comercial).
Liberación de especies protegidas. Regreso al mar de pesca de descarte.
El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron incluirles, desagregando la actividad: Regresar al mar la captura incidental.
Llenado de bitácora. Los representantes del Sector decidieron incorporar esta actividad, ya que desde hace años la han venido realizando de manera sistemática, percibiendo sus contribuciones al conocimiento de la eficiencia pesquera, principalmente.
Arribo de productos pesqueros. El grupo de consultores y los representantes del Sector decidieron incorporar esta actividad, ya que representa una fuente de ingresos y de generación de empleos indirectos durante la etapa de poscaptura.
Disposición de la captura sin talla comercial. El grupo de consultores decidió incorporar esta actividad, ya que se pueden generar residuos orgánicos.
Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado).
El grupo de consultores decidió incorporar esta actividad, ya que es una fuente importante de ingresos y de generación de empleos indirectos durante la etapa de poscapura, además de que se pueden generar residuos orgánicos.
142
Tabla V.6. Decisiones respecto a las actividades incorporadas de la Tabla V.2.
Factores incorporados
Nombre de la actividad Decisión
Biomasa de camarón. Biomasa de peces pelágicos. Biomasa de peces demersales. Biomasa de tiburones. Biomasa de lisa. Biomasa de caracol. Biomasa de callo de hacha. Biomasa de pulpo. Biomasa de almeja catarina. Biomasa de almeja sifón. Biomasa de medusa.
Se generó un factor independiente para cada una de las pesquerías, en donde la Biomasa de Escama con chinchorros se modificó por Biomasa de peces pelágicos, y la Biomasa de Escama con cimbra se modificó por Biomasa de peces demersales.
Biomasa desovante de peces pelágicos.
Biomasa desovante de peces demersales.
Biomasa desovante de tiburones. Biomasa desovante de lisa.
Biomasa desovante de caracol.
Biomasa desovante de callo de hacha.
Biomasa desovante de pulpo.
Biomasa desovante de almeja catarina.
Biomasa desovante de almeja sifón.
Biomasa desovante de medusa.
Se generó un factor independiente de biomasa desovante para cada una de las pesquerías.
Empleos directos. Empleos indirectos.
Se desagregaron del factor: Empleo.
Dinamismo económico local y regional. Se decidió incorporar este factor, ya que los ingresos del Sector permean en el desdoblamiento de las economías en sus escalas más próximas: local y regional.
Acceso a los recursos naturales. Se modificó a partir del factor: Derechos de acceso a pesca para habitantes de las comunidades pesqueras del alto Golfo de California.
Seguridad y soberanía alimentaria. Se decidió incorporar este factor, ya que los recursos pesqueros presentan un alto nivel de autoabasto, además de representar la principal fuente alimenticia local.
Bienestar social. Se decidió incorporar este factor, ya que a través de los ingresos, la generación de empleos, la soberanía alimentaria y la identidad cultural que genera el desarrollo de la actividad pesquera, se contribuye a la mejora de la calidad de vida.
143
Gobernanza. Se decidió incorporar este factor, ya que permite contrarrestar la pesca ilegal y la corrupción, así como disminuir los conflictos sociales y la aplicación de ejercicios políticos coercitivos.
Tabla V.5. Decisiones respecto a las actividades modificadas o descartadas de la Tabla V.2.
Factores ambientales modificados o descartados
Nombre del factor Decisión
Biomasa de curvina golfina. Biomasa desovante de curvina golfina.
El proyecto no desarrolla la pesquería de Curvina Golfina.
Biomasa de chano. Biomasa de sierra. Biomasa de escama capturada con red.
Se incorporaron al factor: Biomasa de peces pelágicos.
Biomasa desovante de chano. Biomasa desovante de sierra.
Se incorporar al factor: Biomasa desovarte de peces pelágicos.
Biomasa de especies de escama capturadas con cimbra.
Se modificó por el factor: Biomasa de peces demersales.
Biomasa de moluscos capturados con hooka. Se desagregó en los factores: Biomasa de caracol; Biomasa de callo de hacha; Biomasa de pulpo; Biomasa de almeja catarina; Biomasa de almeja sifón; Biomasa de medusa.
Biomasa desovante de moluscos capturados con hooka.
Se desagregó en los factores: Biomasa desovante de caracol; Biomasa desovante de callo de hacha; Biomasa desovante de pulpo; Biomasa desovante de almeja catarina; Biomasa desovante de almeja sifón; y Biomasa desovante de medusa.
Biomasa de elasmobranquios. Se modificó por el factor: Biomasa de tiburones.
Biomasa desovante de elasmobranquios. Se modificó por el factor: Biomasa desovante de tiburones.
Proporción de sexos en jaiba. Se eliminó el factor, ya que su captura es aleatoria.
Empleo. Se desagrego en los factores: Empleo director y Empleo indirecto.
Derechos de acceso a pesca para habitantes de
las comunidades pesqueras del alto Golfo de
California.
Se modificó por el factor: Acceso a los recursos naturales.
144
Tabla V.7. Actividades durante las fases del proyecto que pueden ocasionar impactos en los componentes abióticos, bióticos y socioeconómicos.
Actividades por fase del proyecto Actividades conexas a la pesca Operación del arte de pesca Recuperación del arte de pesca Retorno a puerto
1. Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca.
2. Compra de refacciones, combustibles y alimentos.
3. Contratación y capacitación de personal.
4. Constitución legal organizativa.
5. Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental.
6. Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
7. Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental
8. Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
9. Pesca ilegal 10. Corrupción
11. Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca.
12. Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
13. Lance del arte de pesca. 14. Altos volúmenes de captura de
especies objetivo. 15. Altos volúmenes de captura de
especies de acompañamiento con valor comercial.
16. Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial.
17. Captura incidental de especies protegidas.
18. Captura de ejemplares enhuevados. 19. Captura durante agregaciones
reproductivas. 20. Captura de tallas menores a las
legales. 21. Captura en zonas estuarinas. 22. Recarga de combustible. 23. Tirar basura al mar durante la
pesca.
24. Levantar el arte de pesca. 25. Selección de especies
objetivo. 26. Selección de especies de
acompañamiento con valor comercial.
27. Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial.
28. Liberación de especies protegidas.
29. Regreso al mar de pesca de descarte.
30. Llenado de bitácora.
31. Arribo de productos pesqueros.
32. Disposición de la captura sin talla comercial.
33. Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado).
34. Venta y distribución.
145
Tabla V.8. Factores ambientales potencialmente afectados por las actividades del proyecto.
Factores ambientales por componente Abiótico Biótico Socioeconómico
1. Temperatura del mar. 2. Corrientes. 3. Salinidad. 4. Turbidez. 5. Nutrientes. 6. Calidad del agua. 7. Hábitat (sustrato).
8. Productividad primaria. 9. Productividad secundaria. 10. Biomasa de camarón. 11. Biomasa desovante de camarón. 12. Biomasa de peces pelágicos. 13. Biomasa desovante de peces pelágicos. 14. Biomasa de peces demersales. 15. Biomasa desovante de peces demersales. 16. Biomasa de tiburones. 17. Biomasa desovante de tiburones. 18. Biomasa de lisa. 19. Biomasa desovante de lisa. 20. Biomasa de jaibas. 21. Biomasa desovante de jaibas. 22. Biomasa de caracol. 23. Biomasa desovante de caracol. 24. Biomasa de callo de hacha. 25. Biomasa desovante de callo de hacha. 26. Biomasa de pulpo. 27. Biomasa desovante de pulpo. 28. Biomasa de almeja catarina. 29. Biomasa desovante de almeja catarina. 30. Biomasa de almeja sifón. 31. Biomasa desovante de almeja sifón. 32. Biomasa de medusa. 33. Biomasa desovante de medusa. 34. Tamaño poblacional de vaquita marina. 35. Tamaño poblacional de totoaba. 36. Tamaño poblacional de tortugas marina. 37. Tamaño poblacional de tiburón blanco. 38. Composición de la comunidad faunística. 39. Biodiversidad. 40. Red trófica.
41. Empleos directos. 42. Empleos indirectos. 43. Ingresos netos. 44. Dinamismo económico local y regional. 45. Acceso a los recursos naturales. 46. Ordenamiento pesquero. 47. Seguridad y soberanía alimentaria. 48. Bienestar social. 49. Identidad cultural. 50. Empoderamiento. 51. Gobernanza.
146
V.3. Caracterización de los impactos. Debido a que tanto las actividades del proyecto como los factores ambientales fueron identificados tomando en cuenta sus rasgos de concretud, relevancia y localización, fue posible desarrollar una caracterización cualitativa de los impactos potenciales que surgen de la superposición de cada una de las actividades del proyecto a cada uno de los factores ambientales. Para ello se desarrolló una Matriz de Interacción Ad Hoc, en donde las actividades fueron acomodadas en el “Eje Y” y los componentes en el “Eje X”; las interacciones entre Ejes fueron marcadas en las celdas respectivas, con el signo “+” para los impactos de sentido positivo, con el signo “-” para los impactos de sentido negativo y, finalmente, con el signo “0” para los traslapes que no generan impactos potenciales. Lo anterior para cada uno de los componentes, como se puede apreciar en la Tabla V.9, Tabla V.10 y Tabla V.11. Para el Proyecto en su conjunto, se identificaron un total de 525 impactos potenciales, de los cuales 277 fueron positivos y 248 negativos. Con respecto a los impactos potenciales positivos, siete interactúan con los componentes abióticos, 175 con los componentes bióticos y 95 con los componentes socioeconómicos; de los impactos potenciales negativos, dos interactúan con los componentes abióticos, 227 con los componentes abióticos y 19 con los componentes socioeconómicos (Figura V.3). Por su parte, durante la fase de actividades conexas a la pesca pueden ocurrir un total de 206 impactos, de los cuales 135 adquieren un sentido positivo y 71 negativos; durante la operación del arte de pesca pueden ocurrir un total de 259 impactos, de los cuales 82 son positivos y 177 negativos; durante la recuperación del arte de pesca pueden ocurrir un total de 33 impactos, todos ellos positivos; y durante el retorno a puerto pueden ocurrir un total de 27 impactos potenciales, todos ellos positivos (Figura V.4). Finalmente, la actividad que más impactos potenciales positivos puede llegar a generar, es el mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental con 37, y las actividades que más impactos potenciales negativos pueden llegar a generar son la pesca ilegal y verter combustible al mar, con 36 interacciones cada una (Figura V.5).
147
Figura V.3. Número y naturaleza de los impactos potenciales identificados por
componente ambiental a través de una matriz de interacción.
Figura V.4. Número y naturaleza de los impactos potenciales identificados por fase del
proyecto a través de una matriz de interacción.
7
175
95
2
227
19
0
50
100
150
200
250
Abióticos Bióticos Socioeconómicos
Nú
mero
de im
pacto
s
Factores ambientales
Positivos (277)
Negativos (248)
135
82
33 27
71
177
0 0 0
20
40
60
80
100
120
140
160
180
200
Actividadesconexas a la
pesca
Operación delarte de pesca
Recuperacióndel arte de
pesca
Retorno apuerto
Nú
mero
de im
pacto
s
Etapas del proyecto
Positivos (277)
Negativos (248)
148
1)Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca; 2) Compra de refacciones, combustibles y alimentos; 3) Contratación y capacitación de personal; 4)
Constitución legal organizativa; 5) Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental; 6) Participación en la identificación de
afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones; 7) Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas
en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental; 8) Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis
en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental; 9) Pesca ilegal; 10) Corrupción; 11) Ubicación del recurso pesquero y/o la
zona de pesca; 12) Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas; 13) Lance del arte de pesca;14)
Altos volúmenes de captura de especies objetivo; 15) Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial; 16) Altos volúmenes de
captura de especies de acompañamiento sin valor comercial; 17) Captura incidental de especies protegidas; 18) Captura de ejemplares enhuevados; 19) Captura
durante agregaciones reproductivas; 20) Captura de tallas menores a las legales; 21) Captura en zonas Estuarinas; 22) Verter combustible al mar; 23) Tirar
basura al mar durante la pesca; 28) Liberación de especies protegidas; 29) Regreso al mar de pesca de descarte; 30) Llenado de bitácora; 31) Arribo de
productos pesqueros; 32) Disposición de la captura sin talla comercial; 33) Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado); 34) Venta y distribución.
Figura V.5. Número y naturaleza de los impactos identificados por cada actividad del proyecto a través de una matriz de interacción.
0
5
10
15
20
25
30
35
40
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 28 29 30 31 32 33 34
Nú
mero
de i
mp
acto
s
Actividades
Positivos (277)
Negativos (248)
149
Tabla V.9. Matriz de interacción entre factores abióticos y las actividades del proyecto.
Actividades según fase del proyecto Factores abióticos 1.Temperatura del mar
2.Corrientes 3.Salinidad 4.Turbidez 5.Nutrientes 6.Calidad del agua 7.Hábitat (sustrato)
Actividades conexas a la pesca 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca. 0 0 0 0 0 + 0 2.Compra de refacciones, combustibles y alimentos. 0 0 0 0 0 0 0 3.Contratación y capacitación de personal. 0 0 0 0 0 0 0 4.Constitución legal organizativa. 0 0 0 0 0 0 0 5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental.
0 0 0 0 0 0 0
6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
0 0 0 0 0 + +
7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
0 0 0 0 0 + +
8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
0 0 0 0 0 0 0
9. Pesca ilegal 0 0 0 0 0 0 0 10. Corrupción 0 0 0 0 0 0 0
Operación del arte de pesca 11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
0 0 0 0 + 0 0
13.Empleo del arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo. 0 0 0 0 0 0 0 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial.
0 0 0 0 0 0 0
16.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial.
0 0 0 0 0 0 0
17.Captura incidental de especies protegidas. 0 0 0 0 0 0 0 18.Captura de ejemplares enhuevados. 0 0 0 0 0 0 0 19.Captura durante agregaciones reproductivas. 0 0 0 0 0 0 0 20.Captura de tallas menores a las legales. 0 0 0 0 0 0 0 21.Captura en zonas estuarinas. 0 0 0 0 0 0 0 22.Verter combustible al mar. 0 0 0 0 0 - 0 23.Tirar basura al mar durante la pesca. 0 0 0 0 0 - 0
Recuperación del arte de pesca 24.Levantar el arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 25.Selección de especies objetivo. 0 0 0 0 0 0 0 26.Selección de especies de acompañamiento con valor comercial.
0 0 0 0 0 0 0
27.Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial.
0 0 0 0 0 0 0
28.Liberación de especies protegidas. 0 0 0 0 0 0 0 29.Regreso al mar de pesca de descarte. 0 0 0 0 + 0 0 30.Llenado de bitácora. 0 0 0 0 0 0 0
Retorno a puerto 31.Arribo de productos pesqueros. 0 0 0 0 0 0 0 32.Disposición de la captura sin talla comercial. 0 0 0 0 0 0 0 33.Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado).
0 0 0 0 0 0 0 34.Venta y distribución. 0 0 0 0 0 0 0
150
Tabla V.9. Matriz de interacción entre factores abióticos y las actividades del proyecto.
Actividades según fase del proyecto Factores bióticos 8.Productividad primaria
9.Productividad secundaria
10.Biomasa de camarón
11.Biomasa desovante de camarón
12.Biomasa de peces pelágicos
13.Biomasa desovante de peces pelágicos
14.Biomasa de peces demersales
15.Biomasa
desovante
de peces
demersales
Actividades conexas a la pesca 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 2.Compra de refacciones, combustibles y alimentos. 0 0 0 0 0 0 0 0 3.Contratación y capacitación de personal. 0 0 0 0 0 0 0 0 4.Constitución legal organizativa. 0 0 0 0 0 0 0 0 5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental. 0 0 + + + + + + 6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
0 0 0 0 0 0 0 0
7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
0 0 + + + + + + 8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
0 0 + + + + + +
9.Pesca ilegal 0 0 - - - - - - 10. Corrupción 0 0 - - - - - -
Operación del arte de pesca 11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca. 0 0 + + + + + + 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
+ 0 + + + + + + 13.Empleo del arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo. 0 0 - - - - - - 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 0 0 0 - - - - 16.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 - 0 0 - - - - 17.Captura incidental de especies protegidas. 0 0 0 0 0 0 0 0 18.Captura de ejemplares enhuevados. 0 0 - - - - - - 19.Captura durante agregaciones reproductivas. 0 0 0 0 0 0 0 0 20.Captura de tallas menores a las legales. 0 0 0 0 - 0 0 0 21.Captura en zonas estuarinas. 0 - - - - - 0 0 22.Verter combustible al mar. - - - - - - - - 23.Tirar basura al mar durante la pesca. 0 0 0 0 - - - -
Recuperación del arte de pesca 24.Levantar el arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 25.Selección de especies objetivo. 0 0 0 0 0 0 0 0 26.Selección de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0
151
27.Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 28.Liberación de especies protegidas. 0 0 0 0 0 0 0 0 29.Regreso al mar de pesca de descarte. + + 0 0 0 0 0 0 30.Llenado de bitácora. 0 0 0 0 0 0 0 0
Retorno a puerto 31.Arribo de productos pesqueros. 0 0 0 0 0 0 0 0 32.Disposición de la captura sin talla comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 33.Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado). 0 0 0 0 0 0 0 0 34.Venta y distribución. 0 0 0 0 0 0 0 0
Actividades según fase del proyecto Factores bióticos 16.Biomasa de tiburones
17.Biomasa desovante de tiburones
18.Biomasa de lisa
19.Biomasa desovante de lisa
20.Biomasa de jaibas
21.Biomasa desovante de jaibas
22.Biomasa de caracol
23.Biomasa
desovante de
caracol
Actividades conexas a la pesca 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 2.Compra de refacciones, combustibles y alimentos. 0 0 0 0 0 0 0 0 3.Contratación y capacitación de personal. 0 0 0 0 0 0 0 0 4.Constitución legal organizativa. 0 0 0 0 0 0 0 0 5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental.
+ + + + + + + + 6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
0 0 0 0 0 0 0 0 7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
+ + + + + + + + 8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
+ + + + + + + +
9. Pesca ilegal - - - - - - - - 10.Corrupción - - - - - - - -
Operación del arte de pesca 11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca. + + + + + + + + 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
+ + + + + + + + 13.Empleo del arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo. - - - - - - - - 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial.
0 0 0 0 0 0 0 0 16.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial.
0 0 0 0 0 0 0 0 17.Captura incidental de especies protegidas. 0 0 0 0 0 0 0 0 18.Captura de ejemplares enhuevados. - - - - - - 0 0 19.Captura durante agregaciones reproductivas. 0 0 0 0 0 0 - - 20.Captura de tallas menores a las legales. 0 0 - 0 - 0 - 0
152
21.Captura en zonas estuarinas. 0 0 - - - - - - 22.Verter combustible al mar. - - - - - - - - 23.Tirar basura al mar durante la pesca. - - - - 0 0 0 0
Recuperación del arte de pesca 24.Levantar el arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 25.Selección de especies objetivo. 0 0 0 0 0 0 0 0 26.Selección de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0
27.Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0
28.Liberación de especies protegidas. 0 0 0 0 0 0 0 0 29.Regreso al mar de pesca de descarte. 0 0 + + + + + + 30.Llenado de bitácora. 0 0 0 0 0 0 0 0
Retorno a puerto 31.Arribo de productos pesqueros. 0 0 0 0 0 0 0 0 32.Disposición de la captura sin talla comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 33.Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado). 0 0 0 0 0 0 0 0 34.Venta y distribución. 0 0 0 0 0 0 0 0
Actividades según fase del proyecto Factores bióticos 24.Biomasa de callo de hacha
25.Biomasa
desovante
de callo de
hacha
26.Biomasa de pulpo
27.Biomasa desovante de pulpo
28.Biomasa de almeja catarina
29.Biomasa desovante de almeja catarina
30.Biomasa de almeja sifón
31.Biomasa
desovante de
almeja sifón
Actividades conexas a la pesca 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 2.Compra de refacciones, combustibles y alimentos. 0 0 0 0 0 0 0 0 3.Contratación y capacitación de personal. 0 0 0 0 0 0 0 0 4.Constitución legal organizativa. 0 0 0 0 0 0 0 0 5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental. + + + + + + + +
6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
0 0 0 0 0 0 0 0
7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
+ + + + + + + +
8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
+ + + + + + + +
9.Pesca ilegal - - - - - - - - 10.Corrupción - - - - - - - -
153
Operación del arte de pesca 11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca. + + + + + + + + 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
+ + + + + + + +
13.Empleo del arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo. - - - - - - - - 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0
16.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0
17.Captura incidental de especies protegidas. 0 0 0 0 0 0 0 0 18.Captura de ejemplares enhuevados. - - 0 0 - - - - 19.Captura durante agregaciones reproductivas. 0 0 - - 0 0 0 0 20.Captura de tallas menores a las legales. - 0 0 0 - 0 - 0 21.Captura en zonas estuarinas. - - - - - - - - 22.Verter combustible al mar. - - - - - - - - 23.Tirar basura al mar durante la pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0
Recuperación del arte de pesca 24.Levantar el arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 25.Selección de especies objetivo. 0 0 0 0 0 0 0 0 26.Selección de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0
27.Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0
28.Liberación de especies protegidas. 0 0 0 0 0 0 0 0 29.Regreso al mar de pesca de descarte. 0 0 0 0 0 0 0 0 30.Llenado de bitácora. 0 0 0 0 0 0 0 0
Retorno a puerto 31.Arribo de productos pesqueros. 0 0 0 0 0 0 0 0 32.Disposición de la captura sin talla comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 33.Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado). 0 0 0 0 0 0 0 0 34.Venta y distribución. 0 0 0 0 0 0 0 0
154
Actividades según fase del proyecto Factores bióticos 32.Biomasa de medusa
33.Biomas
a
desovante
de medusa
34.Tamaño poblacional de vaquita marina
35.Tamaño poblacional de totoaba
36.Tamaño poblacional de tortugas marina
37.Tamaño poblacional de tiburón blanco
38.Composición de la comunidad faunística
39.Biodiversidad 40.Red
trófica
Actividades conexas a la pesca 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 2.Compra de refacciones, combustibles y alimentos. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 3.Contratación y capacitación de personal. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 4.Constitución legal organizativa. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental.
+ + + + + + + + +
6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
0 0 0 0 0 0 0 0 0
7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
+ + + + + + + + +
8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
+ + + + + + + + +
9. Pesca ilegal - - - - - - - - - 10. Corrupción - - - - - - - - -
Operación del arte de pesca 11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca. + + + + + + 0 0 0 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
+ + + + + + + + +
13.Empleo del arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo. - - 0 0 0 0 - - - 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial.
0 0 0 0 0 0 - - -
16.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial.
0 0 0 0 0 0 - - -
17.Captura incidental de especies protegidas. 0 0 - - - - - - - 18.Captura de ejemplares enhuevados. - 0 0 0 0 0 - - - 19.Captura durante agregaciones reproductivas. 0 0 0 0 0 0 - - - 20.Captura de tallas menores a las legales. - 0 0 0 0 0 - - - 21.Captura en zonas estuarinas. - - 0 - - 0 - - - 22.Verter combustible al mar. - - - - - - - - - 23.Tirar basura al mar durante la pesca. - - - - - - - - -
Recuperación del arte de pesca 24.Levantar el arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 25.Selección de especies objetivo. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 26.Selección de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 0
27.Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 0
155
28.Liberación de especies protegidas. 0 0 + + + + + + + 29.Regreso al mar de pesca de descarte. 0 0 0 0 0 0 + + + 30.Llenado de bitácora. 0 0 + + + + 0 0 0
Retorno a puerto 31.Arribo de productos pesqueros. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 32.Disposición de la captura sin talla comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 0 33.Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado). 0 0 0 0 0 0 0 0 0 34.Venta y distribución. 0 0 0 0 0 0 0 0 0
156
Tabla V.10. Matriz de interacción entre factores socioeconómicos y las actividades del proyecto.
Actividades según fase del proyecto Factores socioeconómicos 41.Empleos directos
42.Empleos
indirectos
43.Ingresos netos
44.Dinamismo económico local y regional
45.Acceso a los recursos naturales
46.Ordenamiento pesquero
47.Seguridad y soberanía alimentaria.
48.Bienestar
social
Actividades conexas a la pesca 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca. 0 + + + 0 0 0 + 2.Compra de refacciones, combustibles y alimentos. 0 + + + 0 0 0 + 3.Contratación y capacitación de personal. + 0 + + + 0 + + 4.Constitución legal organizativa. 0 0 0 0 + + 0 0 5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental. 0 0 0 0 + + 0 0 6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
0 0 0 0 0 0 0 0 7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
0 0 0 0 + + 0 0
8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
0 0 0 0 + + 0 0
9. Pesca ilegal 0 0 0 0 - - 0 0 10. Corrupción 0 0 0 0 - - 0 0
Operación del arte de pesca 11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
0 0 0 0 0 + 0 0 13.Empleo del arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0 14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo. 0 + + + 0 + + + 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 + + + 0 + + + 16.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 17.Captura incidental de especies protegidas. 0 0 0 0 - 0 0 0 18.Captura de ejemplares enhuevados. 0 0 0 0 - 0 0 0 19.Captura durante agregaciones reproductivas. 0 0 0 0 - 0 0 0 20.Captura de tallas menores a las legales. 0 0 0 0 - 0 0 0 21.Captura en zonas estuarinas. 0 0 + 0 - - + 0 22.Verter combustible al mar. 0 0 0 0 - 0 - 0 23.Tirar basura al mar durante la pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0
Recuperación del arte de pesca 24.Levantar el arte de pesca. 0 0 0 0 0 0 0 0
157
25.Selección de especies objetivo. 0 0 0 0 0 0 0 0 26.Selección de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 27.Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0 0 0 0 0 0 28.Liberación de especies protegidas. 0 0 0 0 + + 0 0 29.Regreso al mar de pesca de descarte. 0 0 0 0 0 0 0 0 30.Llenado de bitácora. 0 0 0 0 + + 0 0
Retorno a puerto 31.Arribo de productos pesqueros. 0 + + + 0 + + + 32.Disposición de la captura sin talla comercial. 0 + 0 0 0 0 0 + 33.Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado). 0 + + + 0 0 + + 34.Venta y distribución. 0 + + + 0 0 + +
Actividades según fase del proyecto Factores socioeconómicos 49.Identidad cultural 50.Empoderamiento 51.Gobernanza
Actividades conexas a la pesca 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca. + 0 0 2.Compra de refacciones, combustibles y alimentos. 0 0 0 3.Contratación y capacitación de personal. + + 0 4.Constitución legal organizativa. + + + 5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental. 0 + + 6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones. 0 + + 7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental . 0 + + 8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
0 + + 9. Pesca ilegal - - - 10. Corrupción 0 - -
Operación del arte de pesca 11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca. + 0 0 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas. 0 0 0 13.Empleo del arte de pesca. 0 0 0 14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo. + + 0 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial. + + 0
16.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0
17.Captura incidental de especies protegidas. - - 0 18.Captura de ejemplares enhuevados. 0 0 0 19.Captura durante agregaciones reproductivas. 0 0 0 20.Captura de tallas menores a las legales. 0 0 0
158
21..Captura en zonas estuarinas. + 0 0 22.Verter combustible al mar. 0 0 0 23.Tirar basura al mar durante la pesca. 0 0 0
Recuperación del arte de pesca 24.Levantar el arte de pesca. 0 0 0 25.Selección de especies objetivo. 0 0 0 26.Selección de especies de acompañamiento con valor comercial. 0 0 0
27.Selección de especies de acompañamiento sin valor comercial. 0 0 0
28.Liberación de especies protegidas. + + + 29.Regreso al mar de pesca de descarte. + 0 0 30.Llenado de bitácora. 0 + +
Retorno a puerto 31.Arribo de productos pesqueros. + + + 32.Disposición de la captura sin talla comercial. + 0 0 33.Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado). + + 0 34.Venta y distribución. + + +
159
V.4. Evaluación de los impactos.
Los impactos ambientales previamente identificados y caracterizados de manera participativa, fueron evaluados cuantitativamente por el grupo de consultores (Figura V.1), siguiendo la metodología propuesta por Bojórquez-Tapia et al. (1998), la cual emplea matrices numéricas o matemáticas para determinar la significancia de las posibles afectaciones y, por lo tanto, es considerado un esquema evaluativo riguroso que contribuye a reforzar el criterio de los evaluadores en la toma de decisiones complejas.
Así, para evaluar el comportamiento y la magnitud de cada afectación posible se calcularon cuatro índices, los dos iniciales llamados índice Básico e índice Complementario, mismos que a su vez se utilizaron para calcular el índice de Intensidad y el índice de Significancia (sus cálculos se pueden apreciar de la Tabla V.14 a la Tabla V. 19).
Las fórmulas para calcular los dos primeros índices fueron las siguientes:
Índice Básico MEDij = 1/9 * (Mij + Eij + Dij)
Índice Complementario SACij = 1/9 * (Sij + Aij + Cij)
Donde,
Mij = Magnitud; Eij = Extensión; Dij = Duración; Aij = Acumulación; Sij = Sinergia; Cij = Controversia; Tij = Mitigación (Tabla V.11);
Y el número “9” del 1/9 provine de multiplicar 3*3, porque 3 es el mayor valor que alcanza la escala ordinal y el otro 3 indica el número de criterios utilizados para calcular cada uno de los índices.
Por su parte, las fórmulas para calcular los otros dos índices fueron las siguientes:
Índice de Intensidad Iij = (MEDij) (1-SACij)
Índice de Significancia Gij = Iij * [1-1/9(Tij)]
Tomando en cuenta el valor obtenido de significancia se clasifica a cada uno de afectaciones identificadas, tanto positivos como negativos, de acuerdo a la Tabla V.12.
Desarrollado el proceder metodológico descrito con antelación, se obtuvo como resultado que el proyecto puede llegar a generar 24 impactos positivos con Muy Alto o Alto nivel de significancia, mientras que los posibles impactos negativos con niveles de Significancia Muy Alto o Alto son un total de 21. El proyecto no genera impactos positivos Moderados o Bajos, y genera únicamente un impacto negativo Moderado (Tabla V.13).
160
Tabla V.11. Valores en escala ordinal de cada uno de los criterios considerados para caracterizar y evaluar las afectaciones de las actividades del proyecto sobre los factores ambientales.
Escala ordinal.
0 1 2 3
Magnitud.(M)
. Cuando el % ponderado* está entre140% y no existen límites de afectación publicados; 1-40%ponderado y la afectación está debajo del límite publicado.
Moderada. Cuando el % ponderado*
está entre1-40% y la afectación está sobre el límite publicado;41-70% ponderado y no existen límites publicados; 41-70%ponderado y está debajo del límite publicado.
Alta. Cuando el % ponderado* está
entre41-70% y la afectación está sobre límites publicados; 71-100%ponderado y no existen límites publicados; 71100% ponderado y está debajo del límite publicado; 71-100%ponderado y está sobre límites publicados.
Extensión.(E) -
Puntual. Ocurre dentro del área de influencia del estudio.
Local. Ocurre dentro del área de
influencia del estudio y se extiende al Sistema Ambiental Regional.
Regional. Si sus efectos exceden los límites del sistema ambiental regional.
Duración.(D) -
Corta. Si ocurre durante1-4 meses.
Media. Si ocurre durante 5-8 meses. Larga. Si ocurre durante 9-12 meses.
Sinergia.(S) -
Ligera. Cuando el efecto directo
es producido a nivel de población o factor abiótico.
Moderada. Cuando el efecto directo
es producido a nivel comunidad faunística.
Fuerte. Cuando el efecto directo es
producido a nivel de procesos ecológicos.
Acumulación.(A)
Nula. Cuando no se
presentan efectos aditivos entre impactos.
Poca. Cuando el % ponderado**
de afectaciones sobre el mismo factor está entre1-40 %.
Media. Cuando el % ponderado** de
afectaciones sobre el mismo factor está entre41-70 %.
Alta. Cuando el % ponderado** de
afectaciones sobre el mismo factor está entre71-100 %.
Controversia.(C)
No existe. Cuando el
impacto está regulado por la normatividad ambiental y la sociedad civil local y regional no manifiesta preocupación por la acción o el recurso.
Mínima. Cuando el impacto no
está regulado por la normatividad ambiental y la sociedad civil local no manifiesta aceptación o preocupación por la acción o el recurso.
Moderada. Cuando el impacto está
regulado por la normatividad ambiental y la sociedad civil regional si manifiesta su aceptación o preocupación por la acción o el recurso.
Alta. Cuando el impacto no está
regulado por la normatividad ambiental y la sociedad civil local y regional si manifiesta aceptación o preocupación por la acción y el recurso.
Mitigación.(T)
Nula. No hay medidas de mitigación.
Baja. Si hay medida de mitigación
pero no hay evaluación de su efectividad.
Media. Si hay medida de mitigación y
si hay evaluación de su efectividad pero esta última todavía es insuficiente.
Alta. Si hay medida de mitigación y la
evaluación de su efectividad es satisfactoria.
Nota: *En el criterio “magnitud” el porcentaje ponderado es número de factores que una actividad afecta, entre número máximo de factores a fectados por una
misma actividad, por 100 %. **En el criterio “acumulación” el porcentaje ponderado es número de veces que el factor es afectado por diferentes actividades, entre el número de afectaciones del factor más afectado por diferentes actividades, por 100 %.
161
Tabla V.12. Categorías de clasificación de impacto de acuerdo al índice de Significancia.
Intervalo del valor del impacto Categoría de significancia
0 – 0.25 Bajo
0.26 -0.50 Moderado
0.51 – 0.75 Alto
0.76 – 1.00 Muy Alto
Tabla V.13. Número de impactos por valor de significancia, por naturaleza y por componente ambiental.
Naturaleza de los impactos
Nivel del impacto con base en el valor del
índice de significancia
Componente
Abiótico Biótico Socioeconómico
Positivos
Muy alto 3 6 8
Alto 2 2 3
Moderado 0 0 0
Bajo 0 0 0
Negativos
Muy alto 0 4 2
Alto 2 8 5
Moderado 0 0 1
Bajo 0 0 0
162
Tabla V.14. Criterios e índices para determinar la significancia de las interacciones positivas entre los factores abióticos y las actividades del proyecto.
Interacciones Positivas
Actividades Según Fase del Proyecto
Criterios de Caracterización de Efectos Índices de Evaluación de Efectos
Abióticos Mij Eij Dij Sij Aij Cij Tij MEDij SACij Iij Gij
Actividades conexas a la pesca
6, 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca.
2 1 1 1 0 1 0.444444444 0.222222222 0.532206609 0.532206609
6,7,
6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
3 1 1 2 1 1 0.555555556 0.444444444 0.72140964 0.72140964
6,7,
7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
3 2 3 3 1 2 0.888888889 0.666666667 0.961499714 0.961499714
Operación del arte de pesca
5, 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
2 2 3 2 0 2 0.777777778 0.444444444 0.869689414 0.869689414
5, 29.Regreso al mar de pesca de descarte. 2 2 3 2 0 2 0.777777778 0.444444444 0.869689414 0.869689414
Retorno a puerto
163
Tabla V.15. Criterios e índices para determinar la significancia de las interacciones positivas entre los factores bióticos y las actividades del proyecto.
Interacciones Positivas
Actividades Según Fase del Proyecto
Criterios de Caracterización de
Efectos Índices de Evaluación de Efectos
Bióticos Mij Ei
j Dij
Si
j Aij Cij Tij MEDij SACij Iij Gij
Actividades conexas a la pesca
10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,36,37,38,39,40,
5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental. 3 3 3 3 3 2 1 0.888888889 1 1
10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,36,37,38,39,40,
7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
3 1 3 3 3 2 0.777777778 0.888888889 0.972462441 0.972462441
10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,36,37,38,39,40,
8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
3 2 3 3 3 2 0.888888889 0.888888889 0.986998259 0.986998259
Operación del arte de pesca
10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,36,37,
11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca. 3 1 3 2 3 0 0.777777778 0.555555556 0.894316713 0.894316713
8,10,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,36,37,38,39,40,
12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
3 2 3 2 3 2 0.888888889 0.777777778 0.974165562 0.974165562
Recuperación del arte de pesca
34,35,36,37,38,39,40, 28.Liberación de especies protegidas. 1 3 1 2 0 2 0.555555556 0.444444444 0.72140964 0.72140964
8,9,18,19,20,21,22,23,38,39,40, 29.Regreso al mar de pesca de descarte. 1 2 3 2 1 2 0.666666667 0.555555556 0.835097567 0.835097567
34,35,36,37 30.Llenado de bitácora. 1 1 3 1 1 0 0.555555556 0.222222222 0.633074351 0.633074351
Retorno a puerto
164
Tabla V.16. Criterios e índices para determinar la significancia de las interacciones positivas entre los factores socioeconómicos y las actividades del proyecto.
Interacciones Positivas
Actividades Según Fase del Proyecto
Criterios de Caracterización de Efectos Índices de Evaluación de Efectos
Socioeconómico Mij Eij Dij Sij Aij Cij Tij MEDij SACij Iij Gij
Actividades conexas a la pesca
42,43,44,48,49, 1.Reparación de embarcaciones y/o artes de pesca.
2 1 2 2 1 0 0.555555556 0.333333333 0.675800222 0.675800222
42,43,44,48, 2.Compra de refacciones, combustibles y alimentos.
2 1 3 2 1 0 0.666666667 0.333333333 0.763142828 0.763142828
41,43,44,45,47,48, 49, 50 3.Contratación y capacitación de personal.
3 2 1 2 2 3 0.666666667 0.777777778 0.913836729 0.913836729
45,46,49,50,51 4.Constitución legal organizativa. 2 1 1 1 1 0 0.444444444 0.222222222 0.532206609 0.532206609
45,46,50,51, 5.Cumplimiento de trámites administrativos en materia náutica, pesquera y ambiental.
2 3 3 3 1 2 0.888888889 0.666666667 0.961499714 0.961499714
50,51,
6.Participación en la identificación de afectaciones al ambiente y en la toma de decisiones sobre propuestas de mitigaciones.
1 1 1 1 1 2 0.333333333 0.444444444 0.543166074 0.543166074
45,46,50,51,
7.Mejoramiento del cumplimiento de medidas de mitigación contempladas en autorizaciones previas en materia de impacto ambiental.
2 1 3 2 1 2 0.666666667 0.555555556 0.835097567 0.835097567
45,46,50,51,
8.Gestionar ante las autoridades competentes para que la vigilancia sea más eficiente y con énfasis en identificar la pesca sin permiso y sin autorización en materia de impacto ambiental.
2 2 3 3 1 2 0.777777778 0.666666667 0.919641392 0.919641392
Operación del arte de pesca
49, 11.Ubicación del recurso pesquero y/o la zona de pesca.
1 1 3 1 1 1 0.555555556 0.333333333 0.675800222 0.675800222
46, 12.Lances de prueba, revisión de la captura y regreso al mar de pesca de descarte y de las especies protegidas.
1 1 3 1 1 2 0.555555556 0.444444444 0.72140964 0.72140964
42,43,44,46,47,48,49,50 14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo.
3 3 3 3 2 3 1 0.888888889 1 1
42,43,44,46,47,48,49,50 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial.
3 2 3 3 2 3 0.888888889 0.888888889 0.986998259 0.986998259
43,47,49, 21..Captura en zonas estuarinas. 1 2 3 2 1 3 0.666666667 0.666666667 0.873580465 0.873580465
Recuperación del arte de pesca
165
45,46,49,50,51, 28.Liberación de especies protegidas. 2 3 1 2 2 2 0.666666667 0.666666667 0.873580465 0.873580465
49, 29.Regreso al mar de pesca de descarte.
1 1 1 1 1 2 0.333333333 0.444444444 0.543166074 0.543166074
45,46,50,51, 30.Llenado de bitácora. 2 1 3 1 1 0 0.666666667 0.222222222 0.72952492 0.72952492
Retorno a puerto
42,43,44,46,47,48,49,50,51
31.Arribo de productos pesqueros. 3 3 3 3 2 2 1 0.777777778 1 1
42,48,49, 32.Disposición de la captura sin talla comercial.
1 1 3 1 1 1 0.555555556 0.333333333 0.675800222 0.675800222
42,43,44,47,48,49,50 33.Procesamiento de la captura con talla comercial (eviscerado).
3 1 3 2 2 1 0.777777778 0.555555556 0.894316713 0.894316713
42,43,44,47,48,49,50,51 34.Venta y distribución. 3 3 3 3 2 3 1 0.888888889 1 1
1)Temperatura del mar; 2) Corrientes; 3) Salinidad; 4) Turbidez; 5) Nutrientes; 6) Calidad del agua; 7) Hábitat (sustrato); 8) Productividad primaria; 9) Productividad secundaria; 10) Biomasa de camarón; 11) Biomasa desovante de camarón; 12) Biomasa de peces pelágicos; 13) Biomasa desovante de peces pelágicos; 14) Biomasa de peces demersales; 15) Biomasa desovante de peces demersales; 16) Biomasa de tiburones; 17) Biomasa desovante de tiburones; 18) Biomasa de lisa; 19) Biomasa desovante de lisa; 20) Biomasa de jaibas; 21) Biomasa desovante de jaibas; 22) Biomasa de caracol; 23) Biomasa desovante de caracol; 24) Biomasa de callo de hacha; 25) Biomasa desovante de callo de hacha; 26) Biomasa de pulpo; 27) Biomasa desovante de pulpo; 28) Biomasa de almeja catarina; 29) Biomasa desovante de almeja catarina; 30) Biomasa de almeja sifón; 31) Biomasa desovante de almeja sifón; 32) Biomasa de medusa; 33) Biomasa desovante de medusa; 34) Tamaño poblacional de vaquita marina; 35) Tamaño poblacional de totoaba; 36) Tamaño poblacional de tortugas marina; 37) Tamaño poblacional de tiburón blanco; 38) Composición de la comunidad faunística; 39) Biodiversidad; 40) Red trófica; 41) Empleos directos; 42) Empleos indirectos; 43) Ingresos netos; 44) Dinamismo económico local y regional; 45) Acceso a los recursos naturales; 46) Ordenamiento pesquero: 47) Seguridad y soberanía alimentaria; 48) Bienestar social; 49) Identidad cultural; 50) Empoderamiento; 51) Gobernanza.
166
Tabla V.17. Criterios e índices para determinar la significancia de las interacciones negativas entre los factores abióticos y las actividades del proyecto.
Interacciones Negativas
Actividades según fase del proyecto
Criterios de Caracterización de Efectos Índices de Evaluación de Efectos
Abióticos Mij Eij Dij Sij Aij Cij Tij MEDij SACij Iij Gij
Actividades conexas a la pesca
Operación del arte de pesca
6, 22.Verter combustible al mar. 3 1 1 1 1 2 2 0.555555556 0.444444444 0.72140964 0.56109638
6, 23.Tirar basura al mar durante la pesca. 3 1 1 1 1 2 2 0.555555556 0.444444444 0.72140964 0.561096387
Recuperación del arte de pesca
Retorno a puerto
Tabla V.19. Criterios e índices para determinar la significancia de las interacciones negativas entre los factores socioeconómicos y las actividades del proyecto.
Interacciones Negativas
Actividades según fase del proyecto
Criterios de Caracterización de Efectos Índices de Evaluación de Efectos
Socioeconómico Mij Eij Dij Sij Aij Cij Tij MEDij SACij Iij Gij
Actividades conexas a la pesca
45,46,49,50,51, 9. Pesca ilegal 3 2 3 3 1 1 0 0.888888889 0.555555556 0.948998543 0.948998543
45,46,50,51, 10. Corrupción 3 2 3 3 1 1 0 0.888888889 0.555555556 0.948998543 0.948998543
Operación del arte de pesca
45,49,50 17.Captura incidental de especies protegidas.
2 2 1 3 1 2 2 0.555555556 0.666666667 0.822070691 0.639388316
45, 18.Captura de ejemplares enhuevados. 1 2 1 2 1 2 2 0.444444444 0.555555556 0.697387946 0.542412847
45, 19.Captura durante agregaciones reproductivas.
1 2 1 2 1 2 2 0.444444444 0.555555556 0.697387946 0.542412847
45, 20.Captura de tallas menores a las legales. 1 2 1 1 1 2 3 0.444444444 0.444444444 0.637298719 0.424865813
45,46, 21.Captura en zonas estuarinas. 2 2 2 3 1 3 2 0.666666667 0.777777778 0.913836729 0.7107619
45,47, 22.Verter combustible al mar. 2 2 1 3 1 2 3 0.555555556 0.666666667 0.822070691 0.548047128
Recuperación del arte de pesca
Retorno a puerto
167
Tabla V.18. Criterios e índices para determinar la significancia de las interacciones negativas entre los factores bióticos y las actividades del proyecto.
Interacciones Negativas
Actividades según fase del proyecto
Criterios de Caracterización de Efectos
Índices de Evaluación de Efectos
Bióticos Mij Eij Dij Sij Aij Cij Tij MEDij SACij Iij Gij
Actividades conexas a la pesca
10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,36,37,38,39,40,
9. Pesca ilegal 3 2 3 2 3 2 0 0.888888889 0.777777778 0.974165562 0.974165562
10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,36,37,38,39,40,
10. Corrupción 3 2 3 2 3 3 0 0.888888889 0.888888889 0.986998259 0.986998259
Operación del arte de pesca
10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,38,39,40,
14.Altos volúmenes de captura de especies objetivo. 3 2 2 2 3 2 2 0.777777778 0.777777778 0.945683199 0.735531377
12,13,14,15,38,39,40, 15.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial. 3 2 2 2 2 1 2 0.777777778 0.555555556 0.894316713 0.695579666
9,12,13,14,15,38,39,40, 16.Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial. 2 2 2 1 2 0 2 0.666666667 0.333333333 0.763142828 0.593555533
34,35,36,37,38,39,40, 17.Captura incidental de especies protegidas. 3 3 1 3 2 2 2 0.777777778 0.777777778 0.945683199 0.735531377
10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21 ,24,25,28,29,30,31,32,38,39,40
18.Captura de ejemplares enhuevados. 3 3 1 3 3 2 2 0.777777778 0.888888889 0.972462441 0.756359676
22,23,26,27,38,39,40 19.Captura durante agregaciones reproductivas. 3 3 1 3 2 2 2 0.777777778 0.777777778 0.945683199 0.735531377
12,18,20,22,24,28,30,32,38,39,40, 20.Captura de tallas menores a las legales. 2 2 1 1 2 2 3 0.555555556 0.555555556 0.770097216 0.513398144
9,10,11,12,13,18, 21.Captura en zonas estuarinas. 3 2 3 3 3 3 2 0.888888889 1 1 0.777777778
8,9,10,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,36,37,38,39,40,
22.Verter combustible al mar. 3 2 1 3 3 2 3 0.666666667 0.888888889 0.955948078 0.637298719
12,13,14,15,16,17,18,19,32,33,34,35,36,37,38,39,40,
23.Tirar basura al mar durante la pesca. 1 1 1 2 3 2 3 0.333333333 0.777777778 0.783381037 0.522254025
Recuperación del arte de pesca
Retorno a puerto
168
VI. ESTRATEGIAS PARA LA PREVENCIÓN Y MITIGACIÓN DE IMPACTOS
AMBIENTALES.
Los impactos previamente identificados, caracterizados y evaluados fueron dados a
conocer y retroalimentados de manera conjunta por las autoridades locales, el grupo de
consultores y los propios representantes del Sector, a través de su dictámen profesional
(veasé la Figura V.1). De manera tal, existió consenso en estipular finalmente que el
proyecto genera 21 impactos ambientales negativos con índices de significancia altos o
muy altos. Así, con el objeto de generar una agrupación lógica de dichos impactos, se
establecieron cinco líneas estratégicas de acción partiendo tanto de la propia naturaleza
de los impactos, como de lo análogas que podrían llegar a resultar sus medidas
correctivas respectivas (Tabla VI.1).
Tabla VI.1. Árbol de agrupación de las líneas estratégicas de acción a partir de los
impactos significativos por componente ambiental.
Línea estratégica Impactos significativos Componente
ambiental
Custodia de los recursos Pesqueros
Pesca ilegal Corrupción
Biótico Socioeconómico
Desarrollo de pesquerías
Altos volúmenes de captura de especies objetivo. Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial. Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial. Captura incidental de especies protegidas. Captura de ejemplares enhuevados. Captura durante agregaciones reproductivas. Captura de tallas menores a las legales.
Biótico
Pesca en Esteros
Captura en zonas estuarinas. Biótico Socioeconómico
Manejo de residuos Verter combustible al mar. Tirar basura al mar durante la pesca.
Abiótico Biótico Socioeconómico
Importancia de recursos biológicos estratégicos
Captura incidental de especies protegidas. Captura de ejemplares enhuevados. Captura durante agregaciones reproductivas.
Socioeconómico
169
Una vez definidas las líneas estratégicas de acción, se prosiguió a agrupar todas
las medidas de mitigación planteadas en la MIA-R 2011-2012 en alguna de dichas líneas,
con excepción de las medidas de mitigación que buscaban contrarrestar la pesquería de
la Curvina Golfina y la generación de artes de pesca fantasma1. Así, agrupadas las
medidas correctivas por línea de acción estratégica, se generó una lluvia de ideas
argumentativa entre los representantes del sector, las autoridades locales y el grupo de
consultores, con el objeto tanto de surgir nuevas medidas correctivas, como de reforzar y
complementar las ya existentes o en su defecto descartarles (preliminarmente) a partir de
su previa reflexión crítica y suficiencia explanaría. Al finalizar el ejercicio, se contaba con
un total de 42 medidas correctivas tentativas, de las cuales 23 se habían establecido
previamente en la MIA-R 2011-2012 y las otras 19 fueron surgidas como parte de las
reuniones-talleres.
Se llevaron a cabo audio grabaciones y relatorías de cada una de las reuniones-
talleres, a partir de las cuales se generaron análisis de contenidos con la finalidad de
surgir categorías analíticas discretas que permitieran al grupo de consultores, llevar a
cabo una evaluación estratégica de las 42 medidas correctivas tentativas, buscando
dictaminar su pertinencia de una manera objetiva. Para ello, se tomaron como marcos de
referencia criterios de Evaluaciones Ambientales Estratégicas (EIA) y de Evaluaciones de
Impacto Social (EIS), para generar un indicador de factibilidad ad hoc sobre las medidas
correctivas tentativas (Partidario, 1999; Mans y Dalkmann, 2001; Bravo et al. 2006;
Franks, 2011). El indicador de factibilidad se compuso de los siguientes criterios: a)
Viabilidad técnico-económica, en donde se consideró el costo de instrumentación, la
posibilidad de contar con fuentes de financiamiento, la capacidad real de implementación
del sector, así como la potencial coadyuvancia institucional, todos ellos evaluados en una
escala numérica dicotómica discreta de 0 o 3; b) Suficiencia respecto de los impactos,
evaluados en escala numérica intervalar de 1, 2 o 3 indicando capacidades correctivas
bajas, intermedias o altas, respectivamente; c) Seguimiento y control, evaluados en
escala numérica intervalar de 1,2 o 3 indicando la posibilidad baja, intermedia o alta de
monitorearles y generarles mejoras; y d) Tipo de medida, evaluadas en escala numérica
intervalar conjugada, en donde las medidas preventivas son seguidas en importancia de
las medidas de disminución, mitigación y compensanción, y las medidas voluntarias son
seguidas de las medidas de seguimiento de la MIA-R 2011-2012 y de las estipuladas en
disposiciones normativas, respectivamente. De tal manera, el indicador de factibilidad
queda definido por la sumatoria total de cada uno de los criterios y agrupado en alguno de
los cuartiles que le dictaminan como no factible, poco factible, factible o muy factible
(Tabla VI.2).
1Por una parte dicha pesquería no se desarrolla en Puerto Peñasco y, por otro lado, se consideró
en la fase de identificación de impactos que ya no se generan las artes de pesca fantasma, debido a que actualmente ya no se dejan redes ni trampas desatendidas por la usurpación de éstas a manos de la pesca ilegal o de los pescadores de otras comunidades.
170
Tabla VI.2. Evaluación estratégica a partir de un indicador de factibilidad de las medidas correctivas previas (en molde de letra
normal) y surgidas (en letra cursiva) agrupadas por líneas estratégicas.
Medidas correctivas por línea estratégica.
Viabilidad técnica -
económica
Suficiencia respecto a
los impactos
Seguimiento
y control
Tipo de medida
Indicador de Factibilidad
(0/3) Costo (0/3) Financiamiento (0/3) Capacidad real del sector (0/3) Coadyuvancia institucional
(2) Baja (4) Intermedia (6) Alta
(2) Bajo (4) Intermedio (6) Alto
(1) Compensación (2) Mitigación (3) Disminución (4) Prevención
(1)Disposición legal (2) Seguimiento (3) Voluntaria
No factible (6-13) Poco factible (14-19) Factible (20-25) Muy factible (26-31)
1. Custodia de los recursos pesqueros.
Solicitar formalmente a las autoridades, inspección y vigilancia particularmente para las pesquerías de mayor importancia, especies protegidas y ambientes críticos.
3 0 3 3 4 4 4 2 26
Llevar a cabo faenas de recorridos para la inspección y vigilancia comunitaria.
3 3 3 3 4 6 4 3 29 Emitir denuncias ciudadanas sobre ilícitos ambientales y pesqueros, así como sobre el mal ejercicio de servidores públicos.
3 0 3 3 4 4 4 3 27
2. Desarrollo de pesquerías. Hacer un lance de prueba de media hora y un fardo, y si capturan juveniles y/o mucha captura incidental moverse a otro sitio.
3 0 0 3 4 4 3 2 19
Implementar un esquema espacio-temporal de reducción del esfuerzo pesquero y no pesca en caladeros.
3 0 0 3 6 2 3 2 19
Programa de monitoreo biológico a bordo. 0 3 0 3 4 4 3 2 19
Usar artes de pesca autorizados y respetar otras regulaciones pesqueras contempladas en los instrumentos de manejo pesquero.
3 0 3 3 4 4 2 1 20
171
Medidas correctivas por línea estratégica.
Viabilidad técnica -
económica
Suficiencia respecto a
los impactos
Seguimiento
y control
Tipo de medida
Indicador de Factibilidad
(0/3) Costo (0/3) Financiamiento (0/3) Capacidad del sector (0/3) Coadyuvancia institucional
(2) Baja (4) Intermedia (6) Alta
(2) Bajo (4) Intermedio (6) Alto
(1) Compensación (2) Mitigación (3) Disminución (4) Prevención
(1)Disposición legal (2) Seguimiento (3) Voluntaria
No factible (6-13) Poco factible (14-19) Factible (20-25) Muy factible (26-31)
Respetar el refugio de la Vaquita Marina dentro de la Reserva.
3 0 3 3 6 4 4 1 24 Respetar el refugio de la Vaquita Marina fuera de la Reserva.
3 0 3 3 6 4 4 2 25 Cambiar a artes de pesca más selectivos, dictaminados por INAPESCA con la participación del sector ribereño como técnica y económicamente viable para la captura de camarón azul y que eliminen la captura incidental de vaquita marina.
0 3 3 3 6 6 4 2 27
Implementar programa de repoblamiento de Totoaba.
0 0 0 3 6 4 1 2 16
Utilizar red de luz de malla de 3" con 150 mallas de caída, calibre 0.47mm. y 600 metros de longitud ya relingada (pesquería de Sierra).
3 0 3 3 4 4 3 2 22
Reducir el tiempo que la red está a la deriva a máximo una hora y media (pesquería de sierra).
3 0 0 3 4 4 3 2 19
Ajustar los volúmenes de captura a los límites definidos por la autoridad.
3 0 3 3 6 6 3 1 25 Suspensión temporal de la captura de jaiba de enero a junio.
3 0 3 3 6 4 4 2 25 Capturar solo hasta las 12 brazas la jaiba para evitar la captura incidental.
3 0 0 3 4 2 3 2 17
Regresar al mar los caracoles pequeños durante el bolseo y la limpieza de la panga.
3 0 3 3 6 2 2 2 21
Regresar a las jaibas enhuevadas en los sitios en donde se saquen las trampas.
3 0 3 3 6 2 2 2 21
172
Medidas correctivas por línea estratégica.
Viabilidad técnica -
económica
Suficiencia respecto a
los impactos
Seguimiento
y control
Tipo de medida
Indicador de Factibilidad
(0/3) Costo (0/3) Financiamiento (0/3) Capacidad real del sector (0/3) Coadyuvancia institucional
(2) Baja (4) Intermedia (6) Alta
(2) Bajo (4) Intermedio (6) Alto
(1) Compensación (2) Mitigación (3) Disminución (4) Prevención
(1)Disposición legal (2) Seguimiento (3) Voluntaria
No factible (6-13) Poco factible (14-19) Factible (20-25) Muy factible (26-31)
Suspender la captura en todas las áreas durante mayo para que los caracoles liberen las crías.
3 0 3 3 4 4 4 2 23 Levantar y limpiar rápido el chinchorro para regresar a la brevedad posible a la captura incidental y favorecer su supervivencia.
3 0 3 3 4 4 2 2 21
No usar el chinchorro dormido o sin boyas (tiburones, mantas y guitarra).
3 0 3 3 4 4 2 2 21 Desarrollar como buena práctica pesquera que durante el primer lance realizado en cada pescadero, se revisen las redes a la hora y media y en caso de presentarse en la ‘protocaptura’ una proporción en volumen mayor de especímenes juveniles, en fase reproductiva y/o captura incidental, regresarle al mar y desplazarse a otro pescadero.
3 0 3 3 4 4 3 3 23
Coadyuvar al desarrollo de programas de monitoreo biológico-pesqueros cuando el INAPESCA requiera evaluar estados poblacionales o dictaminar estatus pesqueros.
0 3 3 3 4 4 4 1 22
Desarrollar un subprograma de registro y monitoreo pesquero comunitario.
3 3 3 3 4 4 4 3 27 Respetar el polígono de suspensión temporal de artes de pesca específicas (redes de enmalle, cimbras y/o palangres) en el Norte del Golfo de California.
3 0 3 3 6 6 4 1 26
173
Medidas correctivas por línea estratégica.
Viabilidad técnica -
económica
Suficiencia respecto a
los impactos
Seguimiento
y control
Tipo de medida
Indicador de Factibilidad
(0/3) Costo (0/3) Financiamiento (0/3) Capacidad del sector (0/3) Coadyuvancia institucional
(2) Baja (4) Intermedia (6) Alta
(2) Bajo (4) Intermedio (6) Alto
(1) Compensación (2) Mitigación (3) Disminución (4) Prevención
(1)Disposición legal (2) Seguimiento (3) Voluntaria
No factible (6-13) Poco factible (14-19) Factible (20-25) Muy factible (26-31)
Establecer mecanismos de colaboración con las universidades y los centros de investigación que se encuentran desarrollando programas de repoblamiento de totoaba.
0 3 3 3 4 4 1 3 21
A través de la concertación de un plan de trabajo con Pronatura Noroeste, desarrollar un esquema para lareconversión tecnológica de las redes de enmalle empleadas en la captura de camarón azul, por artes de pesca más específicos que atiendan a las especificaciones emitidas por el INAPESCA.
0 3 3 3 6 6 4 3 28
Implementar un programa piloto de repoblamiento de almeja sifón.
0 3 3 3 4 4 1 3 21 Reducir el tiempo que las redes estén a la deriva a un máximo de 2 horas y media.
3 0 3 3 4 2 3 3 21
3. Pesca en esteros. Establecer un refugio pesquero para la jaiba entre La Choya y la boca del Estero Morúa (desde la orilla hasta las 5 brazas).
3 0 0 3 6 2 3 2 19
Evitar la pesca de jaiba dentro de esteros. 3 0 0 3 6 2 3 2 19 Implementar un esquema espacio-temporal de reducción del esfuerzo pesquero en esteros (La Choya, Cerro Prieto, La Salina, Las Lisas).
3 0 3 3 6 4 3 3 25
Fomentar el establecimiento de zonas de refugio pesquero en los ambientes estuarinos.
3 3 3 3 6 4 3 3 28
174
Medidas correctivas por línea estratégica.
Viabilidad técnica -
económica
Suficiencia respecto a
los impactos
Seguimiento
y control
Tipo de medida
Indicador de Factibilidad
(0/3) Costo (0/3) Financiamiento (0/3) Capacidad del sector (0/3) Coadyuvancia institucional
(2) Baja (4) Intermedia (6) Alta
(2) Bajo (4) Intermedio (6) Alto
(1) Compensación (2) Mitigación (3) Disminución (4) Prevención
(1)Disposición legal (2) Seguimiento (3) Voluntaria
No factible (6-13) Poco factible (14-19) Factible (20-25) Muy factible (26-31)
Desarrollar un subprograma de educación ambiental enfocado a contenidos temáticos sobre estructura y función, servicios ecosistémicos y efectos de la marinización de los ambientes estuarinos.
0 3 3 3 4 4 4 3 24
4. Manejo de residuos. Llevar a tierra toda la basura y desechos tóxicos para colocarlos en los depósitos designados.
3 0 3 3 6 4 2 2 23 Tirar las vísceras al relleno sanitario en un máximo de 3 horas después de haber eviscerado el pescado.
3 0 3 3 6 2 2 2 21
Colocar un contenedor permanente de basura por embarcación, para el depósito temporal de los residuos sólidos durante las faenas de pesca.
3 0 3 3 6 4 2 3 24
Colocar contenedores de residuos sólidos y señalización correspondiente en el área de arribo, y garantizar su disposición final en el relleno sanitario municipal.
0 3 3 3 6 4 2 3 24
Garantizar la adecuada recolección, transporte y disposición final en centros autorizados de acopio, de los residuos peligrosos.
3 0 3 3 6 4 2 3 24
175
Medidas correctivas por línea estratégica.
Viabilidad técnica -
económica
Suficiencia respecto a
los impactos
Seguimiento
y control
Tipo de medida
Indicador de Factibilidad
(0/3) Costo (0/3) Financiamiento (0/3) Capacidad del sector (0/3) Coadyuvancia institucional
(2) Baja (4) Intermedia (6) Alta
(2) Bajo (4) Intermedio (6) Alto
(1) Compensación (2) Mitigación (3) Disminución (4) Prevención
(1)Disposición legal (2) Seguimiento (3) Voluntaria
No factible (6-13) Poco factible (14-19) Factible (20-25) Muy factible (26-31)
Implementar un esquema comunitario de registro de residuos.
3 0 3 3 4 4 3 3 23 Desarrollar un subprograma de educación ambiental, enfocado a contenidos temáticos sobre tipología de residuos, estrategias de prevención y minimización, así como sobre diferentes esquemas de reutilización, valoración y disposición final.
0 3 3 3 4 6 4 3 26
5. Importancia de recursos biológicos estratégicos.
Desarrollar un programa de concientización para la conservación, enfocado a contenidos temáticos sobre la biología y ecología de la reproducción de especies de interés pesquero, áreas naturales protegidas, ecosistemas vulnerables, especies prioritarias, fragmentación de hábitats, endemismos y límites de distribución de especies.
0 3 3 3 4 6 4 3 26
176
VI.1. Plan de manejo ambiental
Después de la evaluación estratégica realizada por el grupo de consultores de las 42 medidas
correctivas preliminares, 32 fueron catalogadas por el indicador construido como factibles o muy
factibles a instrumentar. Así, las medidas correctivas instrumentadas para cada línea de acción
estratégica esbozan programas de trabajo, buscando atender de manera integral y sistemática
a los impactos ambientales más significativos. En las Tablas VI.3 a VI.7 se plantean los
objetivos, impactos contrarrestados, descripción general y recursos necesarios para operar los
siguientes cinco programas, que en su conjunto componen el Plan de Manejo Ambiental (PMA)
del proyecto: 1) Programa de Inspección y Vigilancia Participativa, 2) Programa de Pesca
Responsable, 3) Programa de Pesquerías Estuarinas Adaptativas, 4) Programa de Prevención y
Gestión Integral de Residuos y 5) Programa de Concientización para la Conservación.
Un elemento importante a considerar durante la esquematización del PMA fue el alto
grado de eficiencia esperada, cimentada sobre una base de análisis cuidadoso de la viabilidad
técnica de instrumentar cada una de las medidas correctivas estipuladas. Se pretende someter
cada programa a un proceso de evaluación de la efectividad, a partir de dictámenes anuales de
cumplimiento por parte de la Secretaría, así como de dictámenes anuales de conformidad por
parte del propio Sector. Dichos dictámenes al final de cada ciclo anual de pesca, nos permitirán
conocer la eficiencia de los programas para contrarrestar los impactos ambientales significativos
a lo largo del tiempo, lo que a su vez establecerá la pauta para instrumentarle mejoras
continuas al PMA. Así, pues, el fin último de la evaluación de la efectividad del PMA estriba en
la búsqueda de reducción del criterio “controversia” y el aumento del criterio “mitigación” en la
evaluación de los impactos de la próxima MIA, lo que pretende garantizar su aprobación por un
periodo de cinco ciclos anuales de pesca.
De manera tal, la operación del Programa de Inspección y Vigilancia Participativa busca
acotar la evaluación de la pesca ilegal a un impacto con significancia moderada o en su defecto
alta, y garantizar una evaluación de la corrupción como impacto ambiental bajo en la próxima
MIA. Por su parte, a través del no desarrollo de actividades pesqueras en el refugio de la
vaquita marina y en la zona de exclusión temporal de artes de pescas específicas, así como de
la reconversión tecnológica de los chinchorros de línea prevalentes, se espera disminuir la
significancia de la captura incidental de especies protegidas a moderada. De igual manera, las
buenas prácticas pesqueras a instrumentar en el Programa de Pesca Responsable, buscan
aminorar los índices de significancia de la capturas de ejemplares enhuevados, durante
agregaciones reproductivas y de tallas menores a las legales a impactos moderados, mientras
que las buenas prácticas en conjunción con los subprogramas de registros y monitoreos
biológicos y pesqueros, pretenden acotar los altos volúmenes de captura a significancias
moderadas o altas en la zonas marinas y costeras.
Por su parte, el Programa de Pesquerías Estuarinas Adaptativas, a través de la
implementación de un esquema de reducción del esfuerzo pesquero en esteros, el
177
establecimiento de zonas de refugio pesquero rotativas por especies, así como de la ejecución
de un subprograma de educación ambiental con contenidos temáticos alusivos a la degradación
de sistemas estuarinos, pretende garantizar que los factores ambientales afectados por el
impacto de las altas capturas en éstos ecosistemas, sea disminuido a moderado.
El Programa de Prevención y Gestión Integral de Residuos, a través de la conjunción de
elementos de capacitación, educativos y gestores buscará disminuir a baja la significancia de
los impactos referentes al vertido de combustible y el arrojo de basura al mar, durante las
faenas de pesca. Para ello, se dotará de la infraestructura y la señalización requerida a la zona
de embarque-arribo, se instalarán depósitos temporales de residuos en las propias
embarcaciones, se contratarán servicios especializados que garanticen la recolección,
transporte y disposición final de los diferentes tipos de residuos generados por el proyecto y,
finalmente, se promoverá un enfoque precautorio entre los miembros del Sector.
Por otro lado, el Programa de Concientización para la Conservación se ha incorporado al
PMA con el objeto de generar entre los miembros del sector el conocimiento y la valoración
hacia los principales atributos ambientales del SAR y los recursos pesqueros estratégicos,
buscando con ello disminuir las altas significancias de la captura incidental de especies
protegidas y de la captura no adecuada de especímenes durante estadios específicos de su
ciclo de vida, en el componente socioeconómico del proyecto.
178
Tabla VI.3. Ficha técnica de la línea estratégica Custodia de los Recursos Pesqueros.
Nombre del programa
INSPECCIÓN Y VIGILANCIA PARTICIPATIVA
Objetivo
Delimitar el acceso y aprovechamiento de los recursos pesqueros para los posesionarios de permisos de pesca comercial incorporados al proyecto, y contribuir a la salvaguarda de los principales atributos ambientales del área de influencia.
Impactos ambientales Medidas correctivas Temporalidad de la
instrumentación
Pesca ilegal.
Corrupción.
M.1. Solicitar formalmente a las autoridades,
inspección y vigilancia particularmente para las
pesquerías de mayor importancia, especies
protegidas y ambientes críticos.
Permanente
M.2. Llevar a cabo faenas de recorridos para la
inspección y vigilancia comunitaria.
Semanal
M.3. Emitir denuncias ciudadanasen contra de los ilícitos ambientales y pesqueros, así como en contra del mal ejercicio de servidores públicos.
Mensual
Descripción general
El programa se operará a través de la coadyuvancia con PROFEPA, CONAPESCA y SCT, del Comité Regional de Inspección y Vigilancia Comunitaria de Puerto Peñasco, con actual constitución legal e incorporación al Programa de Comités de Vigilancia Ambiental Participativa (CVAP) de la Procuraduría (ver ANEXO 3).
Recursos necesarios
Se pretende someter a fuentes de financiamiento para capacitación, equipamiento y gastos operativos ante el Programa de Procuración de Justicia Ambiental de la PROFEPA y ante el Programa de Inspección y Vigilancia Pesquera de CONAPESCA.
179
Tabla VI.4. Ficha técnica de la línea estratégica Desarrollo de Pesquerías.
Nombre del programa
PESCA RESPONSABLE
Objetivo
Favorecer un ejercicio pesquero sustentado en las buenas prácticas, a través de la ejecución de esquemas de capacitación, regulación normativa, monitoreo, e innovación técnico-tecnológica.
Impactos ambientales Medidas correctivas Temporalidad de la
instrumentación
Altos volúmenes de captura de especies objetivo. Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento con valor comercial. Altos volúmenes de captura de especies de acompañamiento sin valor comercial. Captura incidental de especies protegidas. Captura de ejemplares enhuevados. Captura durante agregaciones reproductivas.
M.4. Desarrollar un subprograma de registro y monitoreo pesquero comunitario (ANEXO 4).
Mensual
M.5. Coadyuvar al desarrollo de subprogramas de monitoreo biológico-pesqueros cuando el INAPESCA requiera evaluar estados poblacionales o dictaminar estatus pesqueros (ANEXO 4).
Puntual
M.6. No desarrollar ningún tipo de actividad pesquera dentro del Refugio de la vaquita marina.
Permanente
M.7. Respetar el polígono de suspensión temporal de artes de pesca específicas en el Norte del Golfo de California.
Bianual
M.8. Emplear únicamente artes de pesca autorizadas y respetar cabalmente sus especificaciones y métodos de empleo.
Permanente
M.9. Ajustar los volúmenes de captura a los límites definidos por la autoridad, en las pesquerías aplicables.
Puntual
M.10. Desarrollar como buena práctica pesquera que durante el primer lance realizado en cada pescadero, se revisen las redes a la hora y media y en caso de presentarse en la „protocaptura‟ una proporción en volumen mayor de especímenes juveniles, en fase reproductiva y/o captura incidental, regresarle al mar y desplazarse a otro pescadero.
Permanente
M.11. Levantar y limpiar rápido el chinchorro para regresar a la brevedad posible a la captura incidental y favorecer su supervivencia.
Permanente
180
Captura de tallas menores a las legales.
M.12. No realizar lances de pesca sobre bochinches de aves, o ante la presencia de mamíferos marinos.
Permanente
M.13.Reducir el tiempo que las redes estén a la deriva a un máximo de 2 horas y media.
Permanente
M.14. No usar chinchorros dormidos o sin boyas. Permanente
M.15. Regresar a las jaibas enhuevadas o de tallas menores a las legales a los sitios en donde se sacaron las trampas.
Permanente
M.16. Regresar al mar los caracoles con tallas menores a las legales durante el bolseo y la limpieza de la panga.
Permanente
M.17. Homologar la veda temporal emitida en los permisos de caracol 2015, del 31 de mayo al 31 de julio, a todos los permisos de caracol.
Puntual
m.18. Suspensión voluntaria de la captura de jaiba de enero a abril.
Anual
M.19. A través de la concertación de un plan de trabajo con Pronatura Noroeste, desarrollar un esquema para la reconversión tecnológica de las redes de enmalle empleadas en la captura de camarón azul, por artes de pesca más específicos que atiendan a las especificaciones emitidas por el INAPESCA.
Puntual
M.20. Establecer mecanismos de colaboración con las universidades y los centros de investigación que se encuentran desarrollando programas de repoblamiento de totoaba.
Puntual
M.21. Implementar un programa piloto de repoblamiento de almeja sifón.
Permanente
Descripción general El Programa pretende generar un espacio participativo, reflexivo y adaptativo, en donde de manera conjunta instancias gubernamentales, instituciones académicas, el grupo de consultores y los miembros del sector ribereño, propongan y pongan en práctica esquemas tendientes a mejorar el desarrollo de las pesquerías.
Recursos necesarios Se concertarán esquemas de trabajo con el Centro Regional de Investigación Pesquera (CRIP) Unidad Guaymas, para el desarrollo de los monitoreos biológico-pesqueros; con CONAPESCA para la validación de la bitácora de pesca, y la coadyuvancia en materia de capacitación sobre monitoreo pesquero; con el Instituto de Acuacultura del Estado de Sonora (IAES) y con la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) para participar en los programas de repoblamiento de totoaba.
181
Tabla VI.5. Ficha técnica de la línea estratégica Pesca en Esteros.
Nombre del programa
PESQUERÍAS ESTUARINAS ADAPTATIVAS
Objetivo Desarrollar esquemas pesqueros de manejo adaptativo en los sistemas estuarinos, a partir de la yuxtaposición de componentes educativos y un enfoque de aprovechamiento basado en el ecosistema.
Impactos ambientales Medidas correctivas Temporalidad de la
instrumentación
Captura en zonas estuarinas.
M.22. Implementar un esquema espacio-temporal de reducción del esfuerzo pesquero en esteros (La Choya, Cerro Prieto, La Salina, Las Lisas).
Permanente
M.23. Fomentar el establecimiento de zonas de refugio pesquero en los ambientes estuarinos.
Puntual
M.24. Desarrollar un subprograma de educación ambiental enfocado a contenidos temáticos sobre estructura y función, servicios ecosistémicos y efectos de la marinización de los ambientes estuarinos.
Anual
Descripción general Partiendo de sensibilizar la vocación ecológica y los servicios ambientales que brindan los sistemas estuarinos para la disponibilidad de recursos pesqueros, y tomando como base los primeros informes de los monitoreos comunitarios, se instrumentarán esquemas de manejo adaptativo tendientes a garantizar la estructura y función de los estuarios a sus dimensiones espacio-temporales.
Recursos necesarios Se esperan concertar programas de trabajo con la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado, así como con CONAPESCA con el objeto de obtener recursos económicos y acompañamiento para desarrollar el programa de ordenamiento pesquero de los sistemas estuarinos. El subprograma de educación ambiental será cubierto por el Sector.
182
Tabla VI.6. Ficha técnica de la línea estratégica Manejo de Residuos.
Nombre del programa
PREVENCIÓN Y GESTIÓN INTEGRAL DE RESIDUOS
Objetivo Operar un programa integral de manejo de los residuos que incluya tanto componentes de capacitación como directrices prácticas en materia de generación, valoración y disposición de los mismos.
Impactos ambientales Medidas correctivas Temporalidad de la
instrumentación
Verter combustible al mar. Tirar basura al mar durante la pesca.
M.25. Colocar un contenedor permanente de basura por embarcación, para el depósito temporal de los residuos sólidos durante las faenas de pesca. Permanente
M.26. Colocar contenedores temporales de residuos y señalización correspondiente en el área de arribo.
Permanente
M.27. Garantizar la adecuada recolección, transporte y disposición final de los residuos sólidos en el relleno sanitario municipal, y de los residuos peligrosos en los centros autorizados de acopio.
Permanente
M.28. Disponer las refacciones de motores y embarcaciones o partes remplazadas, en un centro de acopio autorizado para su reciclaje.
Permanente
M.29. Disponer las vísceras en el relleno sanitario en un máximo de 3 horas después de haber eviscerado el pescado.
Permanente
M.30. Implementar un esquema comunitario de monitoreo de residuos. Mensual
M.31. Desarrollar un subprograma de educación ambiental, enfocado a contenidos temáticos sobre tipología de residuos, estrategias de prevención y minimización, así como sobre diferentes esquemas de reutilización, valoración y disposición final.
Anual
Descripción general Tomando como referencia los avances en materia de manejo integral de residuos del sector pesquero de altura de Puerto Peñasco, se instrumentará un programa de manejo con enfoque precautorio, sistemático y documentado en concordancia con lo dispuesto en la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos.
Recursos necesarios Se concertarán contratos comerciales con las empresas correspondientes, así como mecanismos de participación con la administración pública municipal. La totalidad de los gastos operativos de las medidas propuestas en este programa, serán costeados por el Sector (ANEXO 5).
183
Tabla VI.7. Ficha técnica de la línea estratégica Importancia de Recursos Biológicos Estratégicos.
Nombre del programa
CONCIENTIZACIÓN PARA LA CONSERVACIÓN
Objetivo Impulsar una cultura de la conservación en el Sector Ribereño hacia los principales atributos biológicos del Sistema Ambiental Regional, a través de la educación, concientización y la promoción comunitaria.
Impactos ambientales Medidas correctivas Temporalidad de la
instrumentación
Captura incidental de especies protegidas. Captura de ejemplares enhuevados. Captura durante agregaciones reproductivas.
M.32. Desarrollar un programa de concientización para la conservación, enfocado a contenidos temáticos sobre la biología y ecología de la reproducción de especies de interés pesquero, áreas naturales protegidas, ecosistemas vulnerables, fragmentación de hábitats y especies prioritarias.
Anual
Descripción general El programa de educación ambiental no formal para adultos, se instrumentará a partir de las siguientes etapas recomendadas para el desarrollo de tales programas: (i) diagnóstico de necesidades; (ii) congruencia con las políticas y capacidades organizativas; (iii) definición del alcance y estructura del programa; (iv) evaluación y gestión de capacidades logísticas; (v) difusión y permanencia de los logros significativos y (vi) evaluación práctica y empleo de los resultados.
Recursos necesarios Se pretende someter a apoyo ante el Programa de Conservación para el Desarrollo Sostenible (PROCODES) de la CONANP, en la modalidad de cursos de capacitación.
184
1. Planificación
2. Retroalimentación
3. Implementación
4. Observancia 5. Evaluación
6. Socialización
7. Adaptación
VI.2. Programa de monitoreo.
Con el objeto de garantizar el cumplimiento de las medidas correctivas estipuladas en el
PMA, así como de proponer nuevas medidas para impactos emergentes o no previstos, o
en caso de que las medidas planteadas resulten inadecuadas operativamente o
insuficientes contrarrestando los impactos ambientales, el proyecto ha desarrollado un
Programa de Monitoreo (PM) con estándares abiertos de mejora continua. A continuación
se describen brevemente cada una de las siete etapas que componen elciclo del PM y se
presenta una representación gráfica de su modelación conceptual (ver Figura VI.1),
mismo que se circunscribe en corpus a la Teoría del Cambio Social (Keystone, 2008;
PNUD, 2010) y en praxis a los Planes de Acción y Monitoreo del tipo causal “resultados-
refinamiento”(Bolton, 2004):
Figura VI.1. Modelo conceptual del Programa de Manejo del Proyecto, indicando los
estándares abiertos para las etapas 2 y 7.
185
1. Planificación:partiendo de un análisis situacional del Sector y del SAR, se
establecieron metas para cada una de las medidas correctivas que componen el
PMA (entendidas éstas como objetivos).
2. Retroalimentación:el sometimiento a evaluación ante la DGIRA del manifiesto,
permitirá incorporar las recomendaciones pertinentes al PM antes de su
implementación, así como realizar las adecuaciones necesarias en materia de
observancia y evaluación.
3. Implementación: esta etapa corresponde al desarrollo operativo de las metas
establecidas, para lo cual se consideraron los requerimientos económicos y de
recursos humanos (incluyendo la coadyuvancia de los sectores público y privado).
4. Observancia:se desarrollaron mecanismos e instrumentos sistemáticos y
estratégicos que permitirán mantener las condiciones operativas del proyecto
dentro de las lógicas planteadas, así como manifestar su evidencia.
5. Evaluación:se entregará a la DGIRA un reporte parcial (anual) y un reporte final
(bianual) en donde se resolverán los grados de cumplimiento de las metas
establecidas, partiendo de la integración y análisis de los mecanismos de control e
instrumentos de seguimiento.
6. Socialización:los dictámenes de la DGIRA respectivos al reporte parcial y final del
proyecto, se presentarán ante los principales actores locales para su
retroalimentación y aprendizaje reflexivo.
7. Adaptación:a partir tanto de los dictámenes oficiales como de la retroalimentación
participativa de los mismos, se llevarán a cabo las adecuaciones que resulten
pertinentes para la etapa de planificación, partiendo de un enfoque de mejora
continua del proyecto.
Así, para operacionalizar el modelo teórico del Programa de Monitoreo se
desarrollaron estrategias de control y seguimiento para uno de los programas que
comprenden el Plan de Manejo Ambiental.Como se refirió con antelación, las medidas
correctivas fueron consideradas objetivos, generándose para para cada una de ellas
metas plausibles operacionalmente y concretas temporalmente. Por su parte, se
establecieron para cada meta, mecanismos de control e instrumentos de seguimiento
graduales y sistemáticos que funjan como acervos de evidencia y consecuentemente
como los propios medios de evaluación (véase de la Tabla VI.8 a la Tabla VI.12).
186
Tabla VI.8. Estrategia de control y seguimiento del Programa de Inspección y Vigilancia Participativa.
PROGRAMA DE INSPECCION Y VIGILANCIA PARTICIPATIVA
Medida de mitigación
Meta Mecanismos de Control Instrumentos de Seguimiento
Capital Humano involucrado
M.1 Durante los primeros seis meses del Proyecto se involucrarán a las autoridades locales en materia náutica, pesquera y ambiental en la inspección y vigilancia del cumplimiento del oficio resolutivo.
Entrega de oficios a las autoridades solicitando el cumplimiento de dichas operaciones de manera sistemática.
Encuestas a los miembros del sector para corroborar las acciones de inspección y vigilancia de dichas autoridades.
PROFEPA, CONAPESCA, SCT,
grupo de Consultores y miembros del sector.
M.2
Después del primer cuatrimestre del Proyecto, realizar un recorrido semanal de inspección y vigilancia comunitaria.
Implementar itinerarios mensuales de inspección y vigilancia comunitaria.
Evidencia fotográfica e informes de los recorridos.
Comité de inspección y vigilancia comunitaria; Grupo de Consultores.
M.3 Expedir al menos una denuncia anónima mensualmente en las dependencias respectivas.
Realizar reuniones mensuales con el sector para discernir las posibles denuncias a emitir.
Oficios de denuncia. Miembros del Sector; Grupo de consultores
Tabla VI.12. Estrategia de control y seguimiento del Programa de Concientización para la Conservación.
PROGRAMA DE CONCIENTIZACIÓN PARA LA CONSERVACIÓN
Medida de mitigación
Meta Mecanismos de Control Instrumentos de Seguimiento
Capital Humano involucrado
M.32 Lograr una participación activa de al menos el 80% del sector, durante el desarrollo del subprograma.
Listas de asistencias. Minutas de participación.
Evaluación final e informe del Subprograma.
Grupo de consultores, Asesores técnicos,
187
Tabla VI.9. Estrategia de control y seguimiento del Programa de Pesca Responsable.
PROGRAMA DE PESCA RESPONSABLE
Medida de mitigación
Meta Mecanismos de Control Instrumentos de Seguimiento
Capital Humano involucrado
M.4 Que la totalidad de los participantes en el proyecto hagan entrega mensualmente de las bitácoras pesqueras elaboradas por cada faena de pesca.
Realizar reuniones mensuales con el sector para llevar a cabo la entrega de las bitácoras y la retroalimentación respectiva.
Formato de entrega recepción de bitácoras.
Grupo de Consultores; Miembros del Sector.
M.5 Atender a la totalidad de las solicitudes, en un periodo no mayor a un mes después de su recepción.
Recepción puntual de solicitudes.
Oficios de atención a las solicitudes recibidas.
Promovente; Responsable Técnico del
Proyecto.
M.6 Nula presencia de embarcaciones dentro del área de refugio, durante el desarrollo del proyecto.
Sistemas de navegación náutica y geoposicionadores satelitales.
Denuncias oficiales y rutas de tráfico
PROFEPA SCT
M.7 Nula presencia de embarcaciones desarrollando actividades pesqueras con redes de enmalle, cimbra y o palangres.
Sistemas de navegación náutica y geopocisionadores satelitales.
Denuncias oficiales y rutas de tráfico
PROFEPA CONAPESCA
SCT
M.8 Desde el inicio del proyecto, la totalidad de las embarcaciones participantes emplearán artes de pesca que respondan a las especificaciones legales.
Muestreos aleatorios de verificación en la zona de embarque.
Notificación, avisos y actas internas; Actas
administrativas
Grupo de consultores, Sector pesqueros
CONAPESCA.
M.9 A la conclusión del primer ciclo anual de pesca, más de la mitad de las pesquerías correspondientes ajustarán sus volúmenes de captura, buscando la totalidad al finalizar el segundo ciclo.
Monitoreo pesquero Bitácoras pesqueras y avisos de arribo.
CONAPESCA, Grupo de consultores y Sector
pesquero.
M.10 Se espera lograr una disminución progresiva en las capturas de ejemplares con tallas menores a las legales y en fases reproductivas.
Monitoreo pesquero y monitoreo sistemático postcaptura en la zona de desembarque.
Bitácora pesquera e informes de monitoreo postcapturas.
Grupo de consultores y Sector pesquero.
188
M.11 Se espera lograr una disminución progresiva en los volúmenes de capturas de especies incidentales sin valor comercial y nula en especies protegidas.
Monitoreo pesquero y monitoreo sistemático postcaptura en la zona de desembarque.
Bitácora pesquera e informes de monitoreo postcapturas.
Grupo de consultores, Sector pesquero y
PROFEPA.
M.12 Durante el desarrollo del proyecto, la totalidad de los participantes realizará esta buena práctica pesquera.
Inspección y vigilancia oficial y recorridos comunitarios.
Actas administrativas y oficio de denuncia anónima.
PROFEPA y comité de inspección y vigilancia
comunitaria.
M.13 Generar un complimiento progresivo de esta buena práctica pesquera.
Inspección y vigilancia oficial. Actas administrativas y denuncias
CONAPESCA y PROFEPA.
M.14 Durante todo el desarrollo del proyecto, la totalidad de las embarcaciones dispondrán de las boyas, antes de cada faena de pesca.
Inspección y vigilancia oficial y muestreos aleatorios en la zona de desembarque.
Notificaciones, avisos y actas internas; Actas administrativas.
CONAPESCA, PROFEPA y Grupo de Consultores.
M.15 Durante todo el desarrollo del proyecto, la totalidad de las embarcaciones posesionaria de estos permisos, no realizarán capturas de ejemplares con tallas menores a las legales o enhuevados.
Inspección y vigilancia oficial y Monitoreo sistemático postcaptura.
Actas administrativas, Bitácoras de pesca e informes de los monitoreo postcaptura
CONAPESCA; PROFEPA, Grupo de Consultores y Sector
pesquero.
M16 Durante todo el desarrollo del proyecto, la totalidad de las embarcaciones posesionaria de estos permisos, no realizarán capturas de caracoles en tallas menores a las legales.
Inspección y vigilancia oficial y Monitoreo sistemático postcaptura.
Actas administrativas, Bitácoras de pesca e informes de los monitoreo postcaptura
CONAPESCA; PROFEPA, Grupo de Consultores y Sector
pesquero.
M.17 Antes del primer cuatrimestre de desarrollo del proyecto, todos los permisos homologarán la veda temporal.
Solicitud de adecuación de permiso a CONAPESCA.
Oficio de solicitud y permisos de pesca.
CONAPESCA y Sector Pesquero
M.18 Durante el periodo de veda voluntaria la totalidad de las embarcaciones posesionarias de estos permisos, no realizaran capturas.
Recorridos de inspección y vigilancia comunitaria.
Informes de los recorridos. Comité de inspección y vigilancia comunitaria y
sector pesquero.
M.19 Al finalizar el primer ciclo anual de pesca, al menos la mitad de los permisos se habrán incorporado al
Solicitud de incorporación a los programas.
Oficios de solicitud-respuesta y evidencias físicas de las artes de
Pronatura Noroeste, Sector pesquero y Grupo
de consultores.
189
esquema de reconversión tecnológica, buscando la totalidad al finalizar el segundo ciclo.
pesca.
M.20 Durante todo el desarrollo del proyecto, participar de manera proactiva con las instituciones correspondientes.
Asistencia a foros, reuniones y acompañamiento de visitas solicitadas.
Oficios, minutas de reuniones y reconocimientos.
Instituto de Acuacultura del Estado de Sonora,
UABC, Grupo de consultores y Sector
pesquero.
M.21 Al finalizar el primer ciclo de pesca se iniciará las operaciones exploratorias.
El desarrollo del subprograma de repoblamiento.
Subrograma de repoblamiento
SCPP Mar y Tierra del Golfo de Cortez y
Asesores Técnicos y Grupo de Consultores.
Tabla VI.10. Estrategia de control y seguimiento del Programa de Pesquerías Estuarinas Adaptativas.
PROGRAMA DE PESQUERIAS ESTUARINAS ADAPTATIVAS
Medida de mitigación
Meta Mecanismos de Control Instrumentos de Seguimiento
Capital Humano involucrado
M.22 Antes de la conclusión del primer ciclo anual de pesca, en dos de los esteros referidos se reducirá el esfuerzo pesquero, buscando la totalidad al finalizar el segundo ciclo.
Desarrollo de un esquema de ordenamiento ecosistémico comunitario. Recorridos de inspección y vigilancia comunitaria
Subprograma de Ordenamiento. Informes de recorridos.
Grupo de Consultores, Miembros del sector y
Comité de Inspección y Vigilancia Comunitaria.
M.23 Antes de la conclusión del primer ciclo anual de pesca, se establecerá un refugio pesquero. Se espera establecer otro refugio durante el segundo ciclo.
Desarrollo de un esquema de ordenamiento ecosistémico comunitario. Recorridos de inspección y vigilancia comunitaria
Subprograma de Ordenamiento. Informes de recorridos.
Grupo de Consultores, Miembros del sector y
Comité de Inspección y Vigilancia Comunitaria.
M.24 Lograr una participación activa de al menos el 80% del sector, durante el desarrollo del subrograma.
Listas de asistencias. Minutas de participación.
Evaluación final e informe del Subprograma.
Grupo de consultores, Asesores técnicos,
190
Tabla VI.11. Estrategia de control y seguimiento del Programa de Prevención y Gestión Integral de Residuos.
PROGRAMA DE PREVENCION Y GESTION INTEGRAL DE RESIDUOS
Medida de mitigación
Meta Mecanismos de Control Instrumentos de Seguimiento
Capital Humano involucrado
M.25 Durante el primer cuatrimestre del primer ciclo anual de pesca, la totalidad de las embarcaciones participantes del proyecto, instalaran el contenedor.
Concertación de contrato con taller de reparación náutica para realizar las instalaciones y la emisión de oficios de cumplimiento.
Contrato de concertación, oficios de cumplimiento.
Grupo de consultores, Taller náutico y Sector
pesquero.
M.26 Durante el primer cuatrimestre del primer ciclo anual de pesca, se colocará la infraestructura y la señalización pertinente en el área.
Concertación de contrato con empresa de manejo de residuos y el desarrollo de la instalación.
Contrato de concertación y evidencia fotográfica.
Empresa de Recolección de Residuos.
Sector Pesquero. Grupo de consultores.
M.27 Antes de la conclusión del primer semestre, los residuos generados por la totalidad de las embarcaciones se dispondrán en los destinos estipulados.
Desarrollo de un esquema de entrega y recepción para embarcaciones Manifiestos de entrega, transporte y recepción ante los centros de disposición final.
Oficios de entrega- recepción. Oficios de manifiesto.
Empresa de Recolección de Residuos.
Centro de disposición final.
Sector Pesquero. Grupo de consultores.
M.28 Asegurar que la totalidad de las embarcaciones hagan entrega de las refacciones y partes de embarcaciones desechadas, a la planta correspondiente.
Desarrollo de un esquema de entrega y recepción para embarcaciones
Oficios de entrega-recepción.
Planta de reciclaje. Sector pesquero.
Grupo de consultores.
M.29 Durante el primer ciclo anual de pesca, asegurar la disposición final de los residuos orgánicos en el relleno sanitario.
Desarrollar un esquema de entrega y recepción para embarcaciones.
Oficios de entrega recepción
Subdirección Municipal de Ecología. OOMISLIM.
Sector Pesquero. Grupo de consultores.
M.30 Antes de la conclusión de primer cuatrimestre del ciclo anual de pesca, se contará con un subprograma de monitoreo, para dar inicio a su instrumentación.
Desarrollo de un esquema de monitoreo.
Informes progresivos del subprograma.
Grupo de Consultores
M.31 Lograr una participación activa de al menos el 80% del sector, durante el desarrollo del subprograma.
Listas de asistencias. Minutas de participación.
Evaluación final e informe del Subprograma.
Grupo de consultores, Asesores técnicos,
191
VII. PRONÓSTICOS AMBIENTALES REGIONALES Y EVALUACIÓN DE
ALTERNATIVAS.
Debido a la enorme complejidad socioambiental de un espacio geográfico tan importante como el Alto Golfo de California y el Delta del Río Colorado, establecer un pronóstico ambiental regional representa particular dificultad; partimos de una síntesis del diagnóstico del SAR desarrollado en el capítulo IV de esta MIA, para tomándole como punto de partida, proseguir con la descripción y el análisis de escenarios sin proyecto, con proyecto y considerando las medidas de mitigación, así como para establecer pronósticos ambientales y evaluar las alternativas correspondientes.
VII.1 Diagnóstico del escenario.
La región geográfica que ocupa el Alto Golfo de California y el Delta del Río Colorado ha sido ampliamente reconocida por su riqueza ambiental, histórica y cultural y también por las notables transformaciones generadas por las actividades antropogénicas que en ella se sucintan (ACUACORP de Hidalgo, 2009).
Así, por ejemplo, la transformación del Delta del Río Colorado se puede rastrear desde el siglo XVIII con la colonización y el auge agrícola en las ricas planicies de la región fronteriza del Suroeste de los Estados Unidos y del Noroeste de México, hasta los grandes impactos ambientales originados tras las construcción de la presa Hoover y de la presa Glen Canyon, en 1935 y 1962 respectivamente. En este sentido, resulta importante recalcar que durante los 17 años que duró el llenado del vaso de la segunda presa, el Alto Golfo de California y el Delta del Río Colorado no recibieron aportes de agua dulce ni acarreos de sedimentos, concatenando lo anterior considerables fragmentaciones y degradaciones de hábitats de especies sombrillas, así como una merma general en la calidad ambiental y en los servicios ecosistemicos de esta gran región geográfica.
Por su parte, al Alto Golfo de California y al Delta del Río Colorado le preceden historias pesqueras comerciales de más de un siglo. La riqueza pesquera de la región ha permitido el sostenimiento ya de cinco generaciones de familias pescadoras en distintos parajes de los litorales costeros de los Estados de Sonora y Baja California. Así, en el Alto Golfo los recursos pesqueros han sido aprovechados por tres grandes grupos de usuarios marcadamente diferenciados entre sí. El sector industrial o de la flota mayor, emergido propiamente en la década de los 70’s producto de la evolución de las embarcaciones medianas de madera que se dedicaron primordialmente al aprovechamiento de diferentes especies de tiburones, totoaba y camarones, expresando afectaciones significativas a los dos primeros grupos de especies. Los barcos industriales actuales, a través de su sistema pesquero de arrastre aprovechan diferentes especies de camarones y pescados, trayendo consigo afectaciones a los fondos marinos, mortalidad de juveniles de totoaba y una eficiencia pesquera que representa alta proporción de captura incidental o captura de ejemplares en fases reproductivas de su ciclo de vida o con tallas menores a las aceptadas comercialmente.
El segundo grupo de usuarios pesqueros del Alto Golfo de California, está representado por el sector ribereño o de la flota menor, misma que emplea chinchorros de diferentes mallas de luz, cimbras y el buceo, para el aprovechamiento de una pluralidad de pesquerías monoespecíficas y multiespecíficas. Las principales afectaciones de estas actividades desarrolladas por cerca de 50 años, han sido la alta captura incidental de los
192
chinchorros de línea (entre la cual la literatura especializada indica la incidencia de la Vaquita Marina), una posible sobreexplotación de especies sésiles originada sobre todo por el alto esfuerzo pesquero que representa el sector desorganizado e informal, así como las posibles presiones que dichas pesquerías pueden estar representando en la marinización de los ambientes estuarinos. El tercer y último grupo de usuarios pesqueros del Alto Golfo, lo representa el sector turístico, a través de la prestación de servicios para el desarrollo de actividades de pesca deportiva o recreativa, a bordo generalmente de embarcaciones medianas. Dicho sector tiene realizando actividades en el Alto Golfo de California, desde los años 30’s, sin embargo sus impactos sobre el ambiente se han mantenido considerablemente someros (Cudney-Bueno, Turk-Boyer, 1998).
Otras de las alteraciones antropogénicas que han representado considerables implicaciones dentro del Alto Golfo de California y el Delta del Río Colorado han sido la contaminación ambiental y las dinámicas demográficas. La primera de ellas, encuentra su origen en las descargas de aguas agrícolas altamente acreedoras de fertilizantes y plaguicidas químicos, las descargas de aguas residuales impregnados de solventes industriales y materia orgánica, la disposición inadecuada de residuos sólidos urbanos, las aguas crudas de retorno emitidas al mar por las granjas camaroneras, así como la prevalencia de las propias descargas de combustibles quemados por parte de algunas embarcaciones mayores y menores. En términos generales, las implicaciones ambientales de estas fuentes de contaminación recaen sobre la integralidad estructural y funcional de los ecosistemas. Por su parte, en relación a las dinámicas demográficas, resulta importante destacar la expansión residencial y turística de las franjas costeras, urbanizaciones y actividades turísticas masivas que exceden las capacidades de cargas de las zonas, que demandan la construcción de gran infraestructura y provisión de servicios públicos y privados, y que sobre todo aumentan la presión sobre los recursos naturales y modifican la calidad ambiental de la región.
Precisamente en reconocimiento de las presiones antropogénicas de su momento, así como del reconocimiento de su gran riqueza biótica y de su importancia ecosistémica, los primeros esfuerzos por conservar el Alto Golfo de California y el Delta del Río Colorado datan de 1955, logrando concretarse institucionalmente en 1993 con su establecimiento como Reserva de la Biosfera bajo la salvaguarda y administración del Gobierno Federal. A partir de esa fecha y hasta nuestros días, la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado ha sido el centro de numerosos esfuerzos adicionales para proteger sus recursos, entre los cuales destacan, por su envergadura internacional, la responsabilidad ambiental de México ante el mundo respecto a la conservación de la Vaquita Marina, y la reciente restauración de los ambientes deltaicos resultantes de la confluencia ecológica entre el Río Colorado y el Alto Golfo, producto de los avances en materia de una geopolítica binacional entre México y los Estados Unidos.
Aunada a la Vaquita Marina en tanto principal atributo de conservación y especie bandera, la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California presenta las siguientes características descritas a continuación, mismas que hacen que sus ecosistemas representen una de las regiones biogeográficas más ricas del mundo1:
1 Caracterización tomada del Programa de Conservación y Manejo de la Reserva de la Biosfera
Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado (CONANP, 2007).
193
a) Biodiversidad: las subzonas costeras, marinas y estuarinas se caracteriza por su riqueza de especies, dentro de la cual figuran al menos 18 especies de mamíferos marinos, 315 especies de aves y 149 especies de peces, incluidas varias especies endémicas. En la región se ha registrado la presencia de más de 50 especies en peligro de extinción o bajo protección especial, como la totoaba, la vaquita marina, las tortugas marinas, los delfines, las ballenas, así como aves residentes y migratorias.
b) Productividad pesquera: el Alto Golfo es reconocido como una de las más fructíferas regiones en términos de producción pesquera, especialmente de camarón azul, curvina golfina, lisa, lenguado, chano norteño, y algunas especies de moluscos y crustáceos como el caracol chino negro y las jaibas.
c) Área de importancia binacional: la vecindad con los Estados Unidos y las particularidades ambientales de esa enorme región hace que se genere una particular ecología de bordes, dentro de la cual se comparten numerosas especies comunes a ambos países. Asimismo, son asuntos de geopolítica binacional y de interés prioritario para la agenda ambiental de México: el volumen y la calidad del agua proveniente del Río Colorado, la esporádica descarga de aguas excedentes, la problemática generada por esa falta de flujo y las necesidades de conservación del humedal de la Ciénaga de Santa Clara.
d) Área de reproducción, crianza, desove y reclutamiento: numerosas áreas de la Reserva son espacios ecológicos de anidación, maduración, reproducción, crianza y reclutamiento de una gran cantidad de especies, dentro de las que destacanpor sus estatus de protección: los mamíferos marinos, la totoaba y la vaquita marina.
e) Unicidad de hábitat: este espacio abarca hábitats remanentes del antiguo delta del Río Colorado, la ciénaga de Santa Clara e importantes afloramientos de agua dulce en las franjas costeras-desérticas. Estos afloramientos constituyen microhábitats únicos y los pozos son sitios de descanso para aves migratorias que reúnen características no encontradas en ningún otro lugar.En el ambiente costero se encuentran de manera limitada las formaciones de playa rocosa intermareal o “coquinas”, localizadas en Punta Borrascosa, Punta Pelícano y en Punta Machorro; se trata de pequeñas rocas emergentes que generan un hábitat único de elevada diversidad de especies, especialmente de invertebrados y de peces marinos pelágicos.
VII.2. Análisis del escenario sin proyecto, con proyecto sin medidas correctivas y
con proyecto y la aplicación de las medidas correctivas estipuladas.
Con el objeto de dimensionar de manera esquemática y objetiva la calidad ambiental del
escenario, se desarrolló un análisis basado en los criterios que establece la Comisión
Nacional para el Conocimiento de la Biodiversidad (Conabio) para la evaluación y
valoración de los estados ambientales que le permitan definir áreas prioritarias para la
conservación.
194
La valoración de la calidad ambiental de regiones ecológicas se obtiene a partir de
la sumatoria aritmética de los valores significados para cada uno de los siguientes
criterios:
CA = Σ (Cvb+Car+Coc)
Dónde: CA = Calidad Ambiental Cvb = Criterio de valor biológico. Car = Criterio de amenaza o riesgo. Coc = Criterio de oportunidades de conservación.
Así, a cada Criterio le corresponden una serie de subcriterios con un valor óptimo
preestablecido y un valor real evaluativo; la sumatoria total del Criterio de valor biológico
es de 31 unidades, de 0 unidades para el Criterio de amenaza o riesgo y de 9 para el
Criterio de oportunidades de conservación, lo que representa una sumatoria máxima de la
Calidad Ambiental de 40 unidades. Tomando como base una distribución por cuartiles, un
escenario que manifieste una calidad ambiental entre un rango de 76-100% (31-40
unidades) significaría una región altamente conservada, mientras que un escenario con
una calidad ambiental entre 51-75% (21-30 unidades) describe una región conservada. En
contraparte, un escenario que manifieste una calidad ambiental entre un rango de 26-50%
(11-20 unidades) representa una región degradada, mientras que un escenario con una
calidad ambiental entre 1-25% (1-10) representa una región altamente degrada.
En la Tabla VII.1 se lleva a cabo la valoración de la calidad ambiental del
escenario sin proyecto, en su estado basal o estado “cero”. No obstante las presiones
antropogénicas descritas líneas arriba, gracias a características como su
enormeplasticidad ecosistémica, notable resiliencia ambiental, capacidades de novedad
ecológica y, sobre todo, a los esfuerzos de preservación del Gobierno Federal a través de
establecimiento y administración como Reserva de la Biosfera, el Alto Golfo de California
y el Delta del Río Colorado manifiesta considerables rasgos de preservación. Ubicándole
dentro de los cuartiles de calidad ambiental, por su valoración de 31 unidades, el Alto
Golfo de California y el Delta del Río Colorado representa una región que alcanza a
evaluarse como altamente conservada (Figura VII.1).
Por su parte, en la Tabla VII.2 se muestra la valoración de la calidad ambiental
del escenario con proyecto y sin la aplicación de las medidas correctivas estipuladas en el
Capítulo VI. Como se puede apreciar, la no aplicación de las medidas correctivas
conllevaría muy posiblemente a una calidad ambiental degrada de la región, connotada
por una valoración de 17 unidades (Figura VII.1). El Alto Golfo de California y Delta del
195
Río Colorado se vería afectado en su Criterio de valor biológico, fundamentalmente en su
integralidad funcional y en la prevalencia de endemismos. Las principales amenazas de la
región serian la presión sobre especies clave y las prácticas de manejo inadecuadas;
dentro del Criterio de oportunidades de conservación, mermaría fundamentalmente la
importancia de los servicios ambientales de la región.
Finalmente, en la Tabla VII.3 se expresa la valoración de la calidad ambiental del
escenario con proyecto y con la aplicación de las medidas correctivas estipuladas en el
Capítulo VI. Tal y como se observa, la única afectación diferencial sobre el Criterio de
valor biológico que representaría la ejecución del proyecto en relación al estado basal, es
la inherente disminución de la riqueza de especies (considerando que se trata de una
actividad extractiva). Respecto al Criterio de amenazas, se disminuye considerablemente
la presión sobre especies clave y se ejerce cierto control sobre las prácticas de manejo
inadecuadas. El Criterio de oportunidades de conservación se mantiene en un valor
íntegro, de tal manera, la Calidad Ambiental del escenario, dada su puntuación de 29
unidades, presenta una valoración como región conservada.
Figura VII.1. Valoración proporcional de la calidad ambiental de cada escenario en
relación al valor de referencia.
40
31
17
29
0
5
10
15
20
25
30
35
40
45
Prístino Estado basal Sin medidasde mitigación
Con medidasde mitigación
Va
lora
ció
n
Calidad ambiental
196
Tabla VII.1. Valoración de la calidad ambiental del escenario ecológico del Alto Golfo de
California y Delta del Río Colorado sin proyecto (en su estado basal o “cero”).
Criterios para valorar la calidad ambiental del escenario ecológico
Observaciones
CRITERIOS DE VALOR BIOLÓGICO(a)
Subcriterios Valor óptimo
Valor real
Extensión de la Región 3 3 Cerca de 1,000,000 de ha
Integralidad funcional de la Región 4 3 Presiones antropogénicas
Función como corredor biológico 3 3 Importantes flujos migratorios
Diversidad de ecosistemas 3 3 Marino, costero, estuarino, dunas
Presencia de fenómenos naturales 3 3 Enorme productividad primaria
Presencia de endemismos 3 3 Vaquita marina, totoaba
Riqueza específica 3 3 Grupos taxonómicos importantes
Centro de origen y diversidad natural 3 3 Considerable historia evolutiva
Centros de domesticación 3 1 Insipiente
Concentración de especies en riesgo 3 3 Cerca de 40 especies
Valor Total 31 28 De los más altos registros
CRITERIOS DE AMENAZA O RIESGO(b)
Pérdida de superficie original 0 -1 Específicamente en la zona deltaica
Cambios en las densidades de poblaciones humanas
0 -1 Particularmente en el Golfo de Santa Clara
Presión sobre especies clave 0 -2 Totoaba y Vaquita
Prácticas de manejo inadecuadas 0 -2 Actividades pesqueras ilícitas
Valor Total 0 - 6 Rango intermedio
CRITERIOS DE OPORTUNIDADES DE CONSERVACIÓN(c)
Importancia de los servicios ambientales 3 3 Provisión y regulación
Proporción del área bajo manejo 3 3 Reserva de la Biosfera
Presencia de grupos organizados 3 3 S.C. y A.C.
Valor Total 9 9 Ponderación elevada
CALIDAD AMBIENTAL(d)
28 + -6 + 9 = 31
Acotaciones
(a) Para establecer un valor comparativo se considera el valor de referencia más alto ya que debe presumirse que mientras mejor conservado se encuentra un espacio geográfico, sus registros son más altos.
(b) En estos casos se toma como referencia el valor del criterio más bajo, toda vez que la situación ideal implicaría que el área no enfrente ninguno de los factores de amenaza o riesgo.
(c) Para establecer un valor comparativo se considera el valor de referencia más alto ya que debe presumirse que mientras mejor conservado se encuentra un espacio geográfico, sus registros son más altos.
(d) Se consideran regiones prístinas aquellas cuya valoración de calidad ambiental alcanza las 40 unidades.
197
Tabla VII.2. Valoración de la calidad ambiental del escenario ecológico con proyecto y sin
aplicar las medidas correctivas estipuladas.
Criterios para valorar la calidad ambiental del escenario ecológico
Observaciones
CRITERIOS DE VALOR BIOLÓGICO(a)
Subcriterios Valor óptimo
Valor real
Extensión de la Región 3 3 No se modifica
Integralidad funcional de la Región 4 2 Se afecta estructuralmente
Función como corredor biológico 3 2 Irrupciones migratorias
Diversidad de ecosistemas 3 3 No se altera al corto plazo
Presencia de fenómenos naturales 3 2 Disminuye su alta productividad
Presencia de endemismos 3 2 Afecta a la totoaba y a la vaquita
Riqueza específica 3 2 Afecta diversidades α y β
Centro de origen y diversidad natural 3 3 No se altera al corto plazo
Centros de domesticación 3 1 Incipientes
Concentración de especies en riesgo 3 2 Afecta a la totoaba, a quelonios y a mamíferos marinos
Valor Total 31 22 Valoración intermedia
CRITERIOS DE AMENAZA O RIESGO(b)
Pérdida de superficie original 0 -1 No aumenta en el corto plazo
Cambios en las densidades de poblaciones humanas
0 -3 Aumenta para ejercer mayor presión a los recursos pesqueros
Presión sobre especies clave 0 -3 Se elevan considerablemente
Prácticas de manejo inadecuadas 0 -4 Incrementa la pesca ilícita
Valor Total 0 -11 Rango elevado
CRITERIOS DE OPORTUNIDADES DE CONSERVACIÓN (c)
Importancia de los servicios ambientales 3 2 Afecta la provisión y regulación
Proporción del área bajo manejo 3 2 Disminuyen las regulaciones
Presencia de grupos organizados 3 2 No existiría la figura jurídica de los promoventes
Valor Total 9 6 Ponderación intermedia
CALIDAD AMBIENTAL (d)
22 + -11 + 6 = 17
Acotaciones (a) Para establecer un valor comparativo se considera el valor de referencia más alto ya que debe
presumirse que mientras mejor conservado se encuentra un espacio geográfico, sus registros son más altos.
(b) En estos casos se toma como referencia el valor del criterio más bajo, toda vez que la situación ideal implicaría que el área no enfrente ninguno de los factores de amenaza o riesgo.
(c) Para establecer un valor comparativo se considera el valor de referencia más alto ya que debe presumirse que mientras mejor conservado se encuentra un espacio geográfico, sus registros son más altos.
(d) Se consideran regiones prístinas aquellas cuya valoración de calidad ambiental alcanza las 40 unidades.
198
Tabla VII.3. Valoración de la calidad ambiental del escenario ecológico con proyecto y
aplicando las medidas correctivas estipuladas.
Criterios para valorar la calidad ambiental del escenario ecológico
Observaciones
CRITERIOS DE VALOR BIOLÓGICO(a)
Subcriterios Valor óptimo
Valor real
Extensión de la Región 3 3 No se modifica
Integralidad funcional de la Región 4 3 Esfuerzo pesquero
Función como corredor biológico 3 3 Se preservan rutas migratorias
Diversidad de ecosistemas 3 3 No se modifican al corto plazo
Presencia de fenómenos naturales 3 3 Se mantiene una alta productividad
Presencia de endemismos 3 3 Conservación vaquita
Riqueza específica 3 2 Disminuye en algunas especies bentónicas, pelágicas y demersales
Centro de origen y diversidad natural 3 3 No se altera al corto plazo
Centros de domesticación 3 1 Incipientes
Concentración de especies en riesgo 3 3 Atención especial a quelonios y mamíferos marinos
Valor Total 31 27 Prevalece un valor alto
CRITERIOS DE AMENAZA O RIESGO(b)
Pérdida de superficie original 0 -1 En la zona deltaica
Cambios en las densidades de poblaciones humanas
0 -1 Se mantienen los niveles poblacionales
Presión sobre especies clave 0 -2 Pesquerías con alto valor comercial
Prácticas de manejo inadecuadas 0 -3 Disminuyen someramente las actividades ilícitas
Valor Total 0 -7 Disminuye a rango intermedio
CRITERIOS DE OPORTUNIDADES DE CONSERVACIÓN (c)
Importancia de los servicios ambientales 3 3 Provisión y regulación
Proporción del área bajo manejo 3 3 Inspección y vigilancia participativa
Presencia de grupos organizados 3 3 Certidumbre legal promoventes
Valor Total 9 9 Se mantiene ponderación elevada
CALIDAD AMBIENTAL (d)
27 + -7 + 9 = 29
Acotaciones (a) Para establecer un valor comparativo se considera el valor de referencia más alto ya que debe
presumirse que mientras mejor conservado se encuentra un espacio geográfico, sus registros son más altos.
(b) En estos casos se toma como referencia el valor del criterio más bajo, toda vez que la situación ideal implicaría que el área no enfrente ninguno de los factores de amenaza o riesgo.
(c) Para establecer un valor comparativo se considera el valor de referencia más alto ya que debe presumirse que mientras mejor conservado se encuentra un espacio geográfico, sus registros son más altos.
(d) Se consideran regiones prístinas aquellas cuya valoración de calidad ambiental alcanza las 40 unidades.
199
VII.3. Pronósticos ambientales y evaluación de alternativas.
Una vez evaluada la calidad ambiental del escenario con la prescripción del proyecto y la
instrumentación de las medidas correctivas estipuladas, se pueden establecer pronósticos
ambientales para las siguientes dinámicas fundamentales de la región, así como la
evaluación de las alternativas correspondientes:
Pronóstico ambiental de la distribución y abundancia de especies objetivo y de la
estructura de la comunidad faunística. La regeneración de las principales especies
objetivo de la pesca ribereña continuará viéndose favorecida por el propio consumo de
energía y biomasa que dichas especies realizan a través de la alimentación,
estructurando así una compleja red trófica. Como es ampliamente conocido, la
productividad primaria es la base de las redes tróficas en los ambientes marinos; el Alto
Golfo de California es una de las regiones con más altos valores de productividad en el
mundo, incrementando considerablemente su producción durante la estación invernal y al
final de la estación primaveral, lapsos altamente correspondientes con las vedas de las
principales pesquerías desarrolladas por el proyecto.
Los procesos oceanográficos que garantizarán la continuidad de las altas tasas de
productividad en el Alto Golfo de California, son principalmente los cuatro siguientes: 1) la
circulación termohalina, que ocurre cuando las temperaturas estacionales altas producen
fuertes tasas de evaporación y un aumento en la salinidad, formándose gradientes
verticales que producen corrientes que acarrean nutrientes a la superficie; 2) la
homogenización vertical de la columna de agua producida por las fuertes corrientes de
marea; 3) las surgencias costeras que resuspenden sedimentos; y 4) la corriente oceánica
subtropical sub-superficial que aporta nutrientes desde afuera del Alto Golfo (Álvarez-
Borrego et al. 1978; Bray y Robles, 1991; Álvarez-Borrego y Lara-Lara, 1991; Carriquiry et
al. 2010).
Respecto a la estructura de la comunidad faunística, tomando como marco de
referencia el modelo ecosistémico elaborado por Ainsworth et al. (2011) para el Alto Golfo
de California, se puede establecer que las pesquerías ribereñas desarrolladas por el
proyecto, representan un aprovechamiento que se distribuye proporcionalmente entre los
diferentes grupos funcionales presentes en la región, atribuible a la captura de especies
con agrupaciones afines en patrones alimenticios y en la ocupación de nichos ecológicos.
Así, a partir de las relaciones ecológicas de depredación y comensalismo, se mantendrían
los niveles tróficos estables, tras el aprovechamiento racional y sostenible de especies
generalistas, pelágicas pequeñas y grandes, demersales pequeñas y grandes, así como
de especies bentónicas.
Evaluación de alternativas. Sin lugar a dudas, la principal alternativa para garantizar
estados adecuados en la abundancia y distribución de las especies objetivo, y las
relaciones ecológicas de éstas en el entramado biótico, se encuentra en el
establecimiento de un ordenamiento pesquero con su respectiva determinación de
200
esfuerzos pesqueros óptimos, particularmente para el Alto Golfo de California. En la
materia, se cuenta ya con un Programa de Ordenamiento Ecológico Marino del Golfo de
California, en el cual se establece una Unidad de Gestión Ambiental Costera (UGAC)
particular para la Reserva Alto Golfo. Dentro de la UGAC se establecen pautas generales
de manejo. Asimismo, la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río
Colorado establece en su Programa de Conservación y Manejo, un ordenamiento interior
para las subzonas inmersas en la Zona de Amortiguamiento, en donde se puntualizan sus
actividades permitidas, actividades prohibidas y actividades incompatibles.
De igual manera, se cuenta con la Carta Nacional Pesquera y con las Normas
Oficiales Mexicanas como los principales instrumentos regulatorios para esta dinámica.
En la Carta Nacional Pesquera se presenta información diagnóstica y evaluativa
vinculante de las actividades pesqueras, así como se establecen indicadores sobre la
disponibilidad y conservación de los recursos estratégicos. Actualmente, se cuenta con
fichas para las siguientes especies o grupos taxonómicos cuyas especificaciones de
distribución y pautas de manejo comprenden al proyecto: camarón, almeja sifón, escama,
mantas, tiburones, jaibas, pulpo y caracol chino negro.
Por su parte, las Normas Oficiales Mexicanas vinculantes a las pesquerías del
proyecto, establecen los términos y condiciones para el aprovechamiento de la lisa,
diferentes especies de jaiba, camarón azul, diferentes especies de tiburones y rayas y la
almeja sifón, particularmente en la definición de sus tallas mínimas de captura,
especificaciones de las artes, embarcaciones y métodos de pesca, temporadas de veda,
así como sobre la disposición de los realizadores de la actividad para llevar observadores
a bordo cuando lo dictamine la autoridad competente.
Así, como se aprecia en los capítulos anteriores, el manuscrito del presente
proyecto contempla el cabal cumplimiento de los instrumentos de la política ambiental y
pesquera que le resulten vinculantes. Sin embargo, resulta fundamental contar con
mecanismos concertados de inspección y vigilancia institucional y de control, seguimiento
y concientización hacia el interior del Sector promovente, para garantizar en la práctica
que el proyecto se desarrolle en cumplimiento de las vedas temporales, con las artes y
mediante los métodos de pesca permitidos, así como a través del ejercicio de buenas
prácticas pesqueras como son: el regreso rápidamente al mar las capturas incidentales,
de tallas menores y durante fases reproductivas.
Resulta importante mencionar que, como una iniciativa voluntaria del Proyecto y
con el objeto de garantizar la integralidad de las áreas de reproducción y crianza, se
operarán esquemas espacio-temporales de reducción del esfuerzo pesquero y áreas de
refugio pesquero en los sistemas estuarinos. Lo anterior en reconocimiento de la enorme
vocación ecológica de estas áreas como hábitats preferentes y complementarios de una
pluralidad de especies, lo que de manera directa e indirecta contribuirá a la distribución y
abundancia de las especies objetivo y a la estructura de la comunidad faunística en
general.
201
Pronóstico ambiental de las especies en estatus.Si bien existe literatura científica sobre
las especies que componen la captura incidental de las pesquerías ribereñas en el Alto
Golfo de California, éstas se limitan a simples menciones, existiendo un vacío de
muestreos representativos y sistemáticos que proporcionen una base de datos
cuantitativos acompañada de análisis fiables. El trabajo que más se acerca a la mención
anterior, es el Programa de Monitoreo Abordo (PMA) realizado por el Centro Intercultural
de Estudios de Desiertos y Océanos A.C. (CEDO). El PMA se desarrolló acompañando
290 operaciones de pesca entre octubre del 2010 y junio de 2011, en las localidades de
San Felipe, Baja California y El Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora. Un
importante componente del PMA estribó en centrar particular observancia referente a la
captura de especies bajo alguna categoría de protección en la NOM-059-SEMARNAT-
2010; dentro de la totalidad de las operaciones pesqueras observadas, la única especie
capturada incidentalmente bajo algún estatus de protección fueron los 14 ejemplares de
totoaba, que acompañaron a la pesquería de camarón azul en la localidad de San Felipe y
de curvina golfina en El Golfo de Santa Clara. Ninguna especie de mamífero marino fue
capturada al igual que ninguna especie de tortuga marina.
Las capturas incidentales de totoabas en las pesquerías de camarón en San
Felipe y curvina golfina en El Golfo de Santa Clara, corresponden ampliamente con los
estudios más recientes que aluden que actualmente la distribución geográfica de la
especie se ha confinado hacia la porción más al Norte del Alto Golfo de California y hacia
la porción occidental correspondiente a los litorales de Baja California. De manera tal, ya
que el presente proyecto se desarrollará sobre la porción oriental de la Zona de
Amortiguamiento de la RBAGCyDRC, se puede establecer como pronóstico ambiental
una probabilidad muy baja de capturas incidentales de totoaba durante el desarrollo de las
pesquerías incorporadas al proyecto. Sin embargo, es importante mencionar que dentro
de los sectores pesqueros ribereños informales de las localidades usuarias de la
RBAGCyDRC, incluidos los de Puerto Peñasco, se encuentran pescadores que participan
en las redes de tráfico ilegal de la especie, los cuales, además, suelen realizar capturas
intencionales de tortugas marinas para abastecer los mercados negros locales.
De igual manera, dada la delimitación del proyecto a la porción oriental de la Zona
de Amortiguamiento de la RBAGCyDRC, y tomando como punto de referencia las
observaciones del PMA, se puede establecer como pronostico una probabilidad muy baja
de captura incidental de vaquitas marinas ya que tal como se establece en el reporte de la
quinta reunión del CIRVA, las detecciones indican que la especie se distribuye desde el
vértice Este en “Punta Borrascosa” haca el Norte del Alto Golfo, y al Sur hasta “Isla el
Muerto”, entre las coordenadas 30º05’42”N y 114º01’19”W.
Evaluación de alternativas. Con el objeto de garantizar la captura cero de ejemplares de
vaquitas marinas, además de respetar cabalmente su refugio dentro y fuera de la reserva,
y de no realizar actividad pesquera alguna dentro del polígono de suspensión temporal de
redes de enmalle, cimbras y/o palangres en el Norte del Golfo de California, el proyecto
propone, además, antes de la conclusión del primer ciclo anual de pesca llevar a cabo la
202
reconversión tecnológica de los pocos permisos que prevalecen de chinchorros de línea
empleados para la pesquería del camarón azul, por redes del tipo RS-INP en atención al
proyecto de investigación denominado “Evaluación de artes y métodos de pesca
alternativos para las pesquerías artesanales de camarón y escama del Alto Golfo de
California” desarrollado de manera conjunta por WWF e INAPESCA.
Acorde con los reportes del INAPESCA y WWF (2010) la red prototipo reduce
cerca de un 50% el volumen de captura incidental en la pesca de camarón y ahorra hasta
el 30% del consumo de combustible, según las investigaciones efectuadas con
pescadores ribereños de Baja California Sur y Sinaloa. Además de obtener mayor
eficiencia pesquera en la captura de camarón azul (menor captura incidental), en el caso
del Alto Golfo de California, dado su diseño con dispositivos excluidores de peces y
tortugas marinas, elimina el riesgo de captura incidental de especies amenazadas, entre
ellas la vaquita marina y la totoaba.
Por su parte, se tienen contemplado establecer mecanismos de colaboración con
el Instituto de Acuacultura del Estado de Sonora para evaluar la factibilidad y en su caso,
emprender acciones de rehabilitación y repoblamiento de alevines de totoaba en la
porción oriental de la Zona de Amortiguamiento de la RBAGCyDRC, tal y como se
realizaron escasos meses atrás en las aguas marinas del Golfo de California
comprendidas entre la Isla del Tiburón y Bahía de Kino, Sonora. Para ello, se pondrán a
disposición el equipamiento y el capital humano del proyecto, así como un laboratorio
local de producción y experimentación acuícola.
Pronóstico ambiental de la contaminación por residuos.La experiencia de participación del
Sector Ribereño de Puerto Peñasco en la MIA-R 2011-2012, trajo consigo un gran
aprendizaje y reflexión en torno a la generación de residuos como parte de las actividades
cotidianas de pesca. Actualmente la totalidad de las embarcaciones incorporadas al
proyecto emplean motores fuera de borda ecológicos, los cuales reducen
considerablemente el nivel de ruido producido y la contaminación emanada por los gases
de escape, presentando además una mayor eficiencia en el consumo de combustible.
De igual manera, prácticamente se ha abolido la generación de artes de pesca
fantasma, debido al fomento de buenas prácticas pesqueras como no dejar desatendidos
chinchorros o trampas, o no emplearles durante mareas demasiado vivas; lo anterior,
aunado a que se comenzaron a suscitar casos de usurpación de artes de pesca a manos
de la pesca ilícita. Por su parte, los talleres de manejo de residuos generaron una cultura
entre los pescadores de no arrojar los residuos del lonche al mar. Sin embargo, una de las
prácticas que aún no se logra contrarrestar del todo, es el eviscerado de pescado y el
manejo de captura de organismos sésiles a bordo.
Así, la principal problemática en torno al manejo de los residuos por parte del
proyecto, habiendo avanzado en la disminución de su generación, así como en su
almacenamiento temporal, y al no contar con un esquema sistemático de recolección de
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los residuos en la zona de embarque y arribo, es el garantizar la disposición final de los
residuos sólidos y orgánicos en el relleno sanitario municipal, y de los residuos peligrosos
en centros de acopio y reciclaje debidamente acreditados por la Secretaría.
Evaluación de alternativas.Tomando como punto de referencia los compromisos en
materia de manejo de residuos adquiridos por el Sector Pesquero de Altura de Puerto
Peñasco en sus manifestaciones de impacto ambiental2, y empleando mecanismos de
concertación con empresas locales que cuentan con experiencias brindando sus servicios
a la actividad haliéutica, el proyecto pretende operar un programa de manejo integral de
los residuos, lo más afín posible a las pautas estipuladas en la Ley General para la
Prevención y Gestión Integral de Residuos (LGPGIR).
Se establecerán en el área de embarque y arribo la infraestructura y la
señalización necesaria para el depósito de los residuos sólidos urbanos generados
durante las faenas de pesca, así como los residuos peligrosos generados durante el
avituallamiento y mantenimiento de los motores empleados por las embarcaciones. Se
operará un sistema diario de recolección de los residuos del recinto portuario para su
almacenamiento temporal, y se establecerá un programa periódico de disposición final de
los residuos sólidos en el relleno sanitario, y de los residuos peligrosos en centros de
acopio certificados. Por su parte, los motores, transmisiones y pedacerías de
embarcaciones deshabilitadas, serán dispuestas en una recicladora local.
Se continuará generando una cultura informativa y práctica en el manejo de los
residuos hacia el interior del Sector, a través de la instrumentación de un subprograma de
concientización en donde se abordaran contenidos temáticos sobre tipología de residuos,
estrategias de prevención y minimización, así como sobre diferentes esquemas de
reutilización, valoración y disposición final. De igual manera, se pretende desarrollar un
esquema participativo (entre el grupo de asesores, las empresas locales que prestarán el
servicio y los propios miembros del sector) de monitoreo de la generación y disposición de
los residuos, que permita operar bajo un enfoque preventivo.
Se continuará promoviendo la buena práctica de llevar los residuos orgánicos
producto del eviscerado y el desconche de moluscos al relleno sanitario a más tardar tres
horas después de su procesamiento, y erradicar con ello el manejo de la captura a bordo.
En este sentido, se evaluarán alternativas de generación de valor agregado a dichos
subproductos pesqueros e igualmente se vislumbrarán posibilidades con la administración
pública municipal para buscar la producción de biogás como parte de los lineamientos
planteados en el Proyecto de Actualización de la NOM-083-SEMARNAT-2003.
2 Del año 2005 a la fecha, se han evitado el arrojo al mar de 895,000 toneladas de residuos sólidos
urbanos (entre plástico, cartón, nilón, metales, vidrios, fibras, maderas, telas, etc.) así como el vertimiento de 250,000 toneladas de gasolina, lubricantes y aceites quemados
204
Pronóstico ambiental de la pesca ilegal. No obstante la inexistencia de datos oficiales, se
estima que actualmente en la comunidad de Puerto Peñasco existen más de 200
embarcaciones menores fuera del presente proyecto que operan al margen de la ley, esto
es, que no cuentan con permiso de pesca alguno y que por tanto se encuentran
imposibilitados de someter ante la Secretaria un procedimiento de Evaluación de Impacto
Ambiental. En este sentido, la propia contravención y falta de apego a un marco
regulatorio pesquero y ambiental, definido y evaluado, ocasiona que en la naturaleza de
estas prácticas pesqueras se lleven a cabo capturas indiscriminadas de especies, con
altas tasas de proporciones incidentales, de tallas no comerciales, en estadios
reproductivos y de especies protegidas por la NOM-059-SEMARNAT-2010, lo cual
conflictùa a las asociaciones ribereñas que operan en la regularidad jurídica y fiscal, así
como en la licites náutica, pesquera y ambiental.
En los años precedentes al 2015, en los cuales el sector pesquero ribereño
regularizado de Puerto Peñasco se sometió al proceso de evaluación de impacto
ambiental, la inspección, vigilancia y los procedimientos administrativos de la PROFEPA
respecto de los ilícitos ambientales, se manifestaron poco concurrentes y estratégicos;
razón por la cual, no se han logrado disminuir las practicas pesqueras al margen de la ley
en el Norte del Golfo de California. Sin embargo, el programa de inspección y vigilancia
interinstitucional precedido por la SEMARNAT, PROFEPA, CONAPESCA, SEMAR y SCT
como parte del Acuerdo por el que suspende temporalmente la pesca comercial con artes
de pesca especificas en el Norte del Golfo de California, han logrado intensificar
notablemente dichas acciones, logrando prontos y focalizados resultados, lo cual permite
pronosticar el advenimiento de mejores resultados respecto de la evaluación y el
seguimiento del cumplimiento en materia de impacto ambiental de la pesca ribereña.
Evaluación de alternativas.
Existen, dentro de la literatura pesquera, una serie de acciones estratégicas que buscan
desde diferentes enfoques contrarrestar la pesca irregular e ilícita en México. Una de las
más sugeridas es la creación de derechos de propiedad sobre los recursos pesqueros, lo
cual consiste en incorporar a la legislación, de manera robusta, el manejo pesquero
basado en la creación de derechos de propiedad, incluyendo el uso generalizado de
concesiones de larga duración sobre áreas definidas o instrumentar el manejo compartido
por cuotas. El uso generalizado de concesiones de larga duración resulta viable
principalmente para especies sésiles, mientras que en el manejo compartido por cuotas
se han documentado casos exitosos en especies migratorias de patrones altamente
regulares; en el caso de la legislación aplicable para el Proyecto, la principal
instrumentación para el manejo de las pesquerías son los sistemas de vedas oficiales
temporales, para los cuales se fomentarán su conocimiento y cumplimiento en el
Programa de Pesca Responsable.
Así mismo, se sugiere a las dependencias arriba mencionadas involucradas en los
programas interinstitucionales de inspección y vigilancia: (i) incrementar el uso de las
herramientas tecnológicas como los aviones no-tripulados y los radares para mantener
dichos programas sólidos; (ii) adecuar los esquemas de penas y sanciones existentes
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para que cumplan con los principios de proporcionalidad y disuasión; (iii) el
esclarecimiento de atribuciones y el establecimiento de mecanismos efectivos de
coordinación entre dichas instituciones, tanto en el agua como fuera de ella; (iv) fomentar
la participación pública en la generación y adecuación de instrumentos y esquemas
regulatorios; (v) mejorar la información proporcionada a los sectores pesqueros
regularizados, de manera solida, consistente y transparente; y finalmente (vi) incentivar y
acotar las brechas entre los sectores pesqueros regularizados y toda la cadena formal de
suministro, para generar diferentes esquemas de certificaciones de productos y consumos
responsables.
Por su parte, como parte del Presente Proyecto, a través de su Programa de
Inspección y Vigilancia Participativa y empleando el constituido Comité Regional afiliado a
al Programa de Vigilancia Ambiental de la PROFEPA, se buscarà, a través de los
recorridos y las denuncias anónimas, delimitar el acceso y aprovechamiento de los
recursos pesqueros para los posesionarios de permisos de pesca comercial incorporados
exclusivamente al Proyecto, y contribuir así a la salvaguarda de los principales atributos
ambientales del Norte del Golfo de California.