salve, iulia: ubi est marcus? marcus in horto est
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Salve, Iulia: Ubi est Marcus?
Marcus in horto est
La domus o vivienda unifamiliar
Eran habitaciones que se abrían a la calle y constituían tiendas que el amo de la casa arrendaba a un tendero o en las que vendía los productos de sus propias tierras.
Por lo general, a la entrada había un mostrador de albañilería que servía para exponer la mercancía.
En la parte más interior estaba la trastienda, que podía servir incluso de vivienda para el tendero y su familia.
En estas tiendas podían venderse desde pan a paños, vino, herramientas, etc.
Algunos relieves nos muestran cómo debían ser éstas en las diversas ciudades del Imperio.
Paños
Herrería Molinos de pan
Termopolium,bar
Panadería
Algunos relieves y pinturas nos muestran cómo debían ser las tabernae en las diversas
ciudades del Imperio
La venta en las calles de Roma
En la casa romana no se entraba por una puerta situada inmediatamente junto a la calle.
La puerta estaba situada en la mitad de un corredor que desde el exterior conducía al atrio y en el cual se distinguían dos partes:
1) el vestibulum, con la puerta que daba a la calle, casi siempre de doble hoja;
2) y las fauces, que daban directamente al atrio.
La antigua casa itálica sólo tenía una habitación, con dos aberturas: la puerta de entrada, por donde entraba también la luz y el aire, y la del centro del techo, por donde salía el humo del hogar.
Esta última se llamaba atrium, tal vez debido a que con la salida del humo la estancia se ennegrecía, pues ater en latín es ‘negro’.
El atrio
La llamada “casa de Rómulo”
Con el tiempo, a medida que se constituyó la casa romana, el atrio formaba parte de la estancia central, en torno a la cual se disponían el resto de las habitaciones.
Era un gran espacio vacío que tenía una apertura en el techo, llamado impluvium.
En el pavimento, en correspondencia con el impluvium, estaba abierta una pila rectangular o compluvium, destinada a recibir el agua de la lluvia que entraba por la abertura que tenía encima.
Las habitaciones que surgían alrededor del atrio no tenían ventanas, sino que su salida era interior hacia esta habitación central.
Si había ventanas en ellas, eran muy elevadas, por motivos de seguridad.
El atrio
Debajo del impluvium Había un depósito de agua
con un pozo que servía para disponer de agua.
Uno de los atrios más representativos por la imagen del
fauno que aparece en él es éste de Pompeya.
En el atrium se hallaba el lararium, lugar donde se rendía culto diario a los dioses domésticos o Lares.
Los lararia podían ser meros nichos en la pared, decorados más o menos profusamente, y coronados por un frontón, o bien verdaderos templetes de madera con un armario inferior, donde se recogían los elementos necesarios para el culto.
Diariamente aquí el pater familias realizaba las ofrendas a los dioses protectores del hogar, los Lares.
El Larario representaba dos adolescentes realizando una
libación con una copa en forma de ritón, así como, también, el Genius de la
familia en forma de serpiente o, en épocas
posteriores, como un varón togado.
Se trata de la habitación más grande de la casa, abierta totalmente al atrio pero separada de éste por unas puertas o simples cortinas.
En un principio se utilizaba como habitación de los padres, conteniendo el lecho conyugal.
Más tarde se convirtió en una sala de recepción, donde el señor de la casa o dominus trabajaba o recibía a los clientes.
Tablinios de Pompeya
La cocina se instalaba en un recinto pequeño. Ollas y cacerolas se colocaban
sobre trípodes de hierro. Había un pequeño hogar y sobre él una ventana
para la salida del humo. La mediocridad de las cocinas hace suponer que no habían
grandes lujos en ésta, ya que aquí trabajaban los esclavos domésticos.
Los retretes eran unas simples letrinas situadas junto a la cocina y situados en el trayecto de las aguas sucias.
En las grandes mansiones también había baños o balnea, si bien eran pequeños y compuesto, a veces, de un tepidarium y un caldarium, esto es, con dos pilas, una para el agua tibia y la segunda caliente.
Se trata del comedor. Los romanos adoptaron la costumbre griega de comer recostados, por lo que esta habitación hubo de adaptarse a la presencia de los lechos.
En cada lecho cogían tres comensales y cada invitado tenía que llevar su propia servilleta.
Los divanes estaban dispuestos en tres de los lados con una área abierta central donde se colocaba la comida, que era servida por los esclavos.
El triclinium era la habitación de la casa mejor adornada, con frescos en las paredes.
Triclinio de verano al aire libre
Escenas del
triclinio
Mosaico del triclinio en Herculano
Triclinio de Pompeya: pintura
de amorcillos
El triclinium de la Villa de Livia en Prima Porta
Mosaico del triclinio de la casa del Fauno, en Pompeya:
Alejandro Magno
Los cubicula se abrían al atrio y estaban constituidos por un pequeño lecho y poco más,
pero había otro tipo de mobiliario...
Además de los lechos para dormir, existían otros muebles, como mesas, asientos con brazos y sin brazos, con respaldo o sin él... Completaba el mobiliario los armarios y cajas de caudales, las luces o lucernas que pendían de las paredes o bien se asentaban sobre un trípode. También podía haber estufas o braseros.
No se nos han conservado muchos ejemplares debido a que normalmente eran de materiales perecederos, pero, como siempre, Pompeya nos ha legado algunos de ellos.
En el interior de las habitaciones era normal que hubiera pinturas con frescos de diferentes motivos.
Si bien las pinturas romanas han sufrido graves daños en su conservación, Pompeya nos ha dejado un buen ejemplo de lo que pudo haber sido.
Sabemos que había varios estilos de pintura pompeyana, cuatro en total.
Villa de los Misterios,Pompeya
Pintura mural
Casa de Augusto Palatino, Roma
Pompeya:Caccia Antica y Casa de los
Vetii
Pintura mural
En el suelo de las habitaciones había mosaicos.
Según las épocas podían ser sólo en blanco y negro o con una gran variedad cromática.
Las piezas de mármol, pasta vítrea u otro material que forman los mosaicos se denominan “teselas”.
Se nos han conservado numerosos mosaicos en todo el ámbito del imperio romano, con temática y calidad diferente.
Mosaico de las palomas,
Nápoles
Medusasobre motivosgeométricos,
Córdoba
Mosaicos
Detrás del tablinium y del triclinium se abría el peristylo, espacio abierto con un gran jardín en el centro.
Se trataba de un patio porticado para el esparcimiento y paseo, con flores, estatuas, bancos para sentarse, fuentes, etc.
Peristilo pompeyano
Peristilo de una domus en Coimbra, Portugal
Peristilo de Venus,Pompeya
La insula era el otro tipo de construcción urbana, destinada a recibir a muchas familias, y constituían lo que hoy denominaríamos “casas baratas” o, mejor, casa de vecinos, con pequeños apartamentos para familias enteras.
Se habitaban en régimen de alquiler y así se llamaban porque ocupaba toda una manzana de la calle.
Las mejores conservadas se han descubierto en la localidad de Ostia y nos dan una idea de las casas que habitaría también la clase popular en Roma, donde la falta de espacio era cada vez mayor.
Tenía muchas ventanas abiertas a la calle y las familias que habitaban aquí vivían en malas condiciones.
Eran muy frecuentes los incendios en este tipo de apartamentos.
La insula
“Nosotros, en cambio, habitamos en una ciudad (Roma) apoyada en su mayor parte sobre endebles pilastras; de este modo el administrador se opone a los derrumbamientos y cuando ha tapado la abertura de un viejo edificio, manda a los inquilinos que duerman tranquilos; y mientras tanto la casa amenaza ruina. Hay que irse a vivir donde no existan incendios o sobresaltos nocturnos… Si se prolonga el miedo desde el piso bajo, arderá el último, aquél que está protegido por las tejas… Búscate fuera de Roma una muy buena casa, por la que ahora te cuesta vivir aquí en un simple agujero.”
Juvenal, Sátiras, III.
La villa urbana estaba destinada a hospedar a los dueños de la finca con fines vacacionales, y por lo tanto, se construía en un lugar desde el cual se gozaba ampliamente de las vistas a la campiña o al mar.
Eran construcciones de lujo, que no tenían, como la granja, objeto práctico ni función necesaria, y reflejaba los gustos de sus propietarios y demostraba la riqueza de quien la había edificado.
Normalmente tenía todas las comodidades de las casa de la ciudad, incluida la calefacción en invierno.
Aunque la villa no estuviera situada en una gran hacienda, siempre estaba rodeada de algún terreno con huerto o jardín.
La villa rústica estaba dedicada fundamentalmente a la explotación agropecuaria y por lo tanto tenía dependencias y edificios particulares.
A menudo tenía una zona principal reservada al dueño de la finca para el caso de que quisiera pasar alguna temporada en el campo, y allí disponía de grandes comodidades.
Poseía, como es lógico, otra serie de dependencias características como era la casa del vilicus o encargado de la explotación, casas para los esclavos (e incluso una prisión para los rebeldes), diferentes edificios para el ganado y los aperos de labranza, graneros, lagares, abrevaderos, etc.
• En la localidad de Boscoreale se descubrió
una villa de este tipo.• En esta villa romana se
conserva la parte destinada a la vivienda, ricamente decorada con
sus termas, y la parte rústica destinada sobre
todo a la viticultura. También se halló un
famoso tesoro de objetos de plata.
Boscoreale
Boscoreale
Villa de Adriano en Tívoli
Villa Romana del Casale,Piazza Amerina,
Sicilia
Visita virtual a: www.ancientvine.com/domus8.HTML
http://recursos.cnice.mec.es/latingriego/Palladium/cclasica/esc336ca11.php
http://legioviiii.ief.st/t346/villa-romana-de-almenara-puras/
Página interactiva:http://www.enciclopedia-aragonesa.com/monograficos/historia/epoca_romana/multimedia/domus/default.asp.
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