critica a hicks

11
Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=155217794006 Redalyc Sistema de Información Científica Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Tobón, Alexander La crítica de Hicks al Tratado del Dinero de Keynes Lecturas de Economía, núm. 61, julio-diciembre, 2004, pp. 121-130 Universidad de Antioquia Medellín, Colombia ¿Cómo citar? Número completo Más información del artículo Página de la revista Lecturas de Economía ISSN (Versión impresa): 0120-2596 [email protected] Universidad de Antioquia Colombia www.redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

Upload: marceloverbeke

Post on 18-Dec-2015

3 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

economia

TRANSCRIPT

  • Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=155217794006

    RedalycSistema de Informacin Cientfica

    Red de Revistas Cientficas de Amrica Latina, el Caribe, Espaa y Portugal

    Tobn, Alexander

    La crtica de Hicks al Tratado del Dinero de KeynesLecturas de Economa, nm. 61, julio-diciembre, 2004, pp. 121-130

    Universidad de AntioquiaMedelln, Colombia

    Cmo citar? Nmero completo Ms informacin del artculo Pgina de la revista

    Lecturas de EconomaISSN (Versin impresa): [email protected] de AntioquiaColombia

    www.redalyc.orgProyecto acadmico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

  • La crtica de Hicksal Tratado del Dinero

    de Keynes

    Lecturas de Economa Lect. Econ. No. 61. Medelln, julio-diciembre 2004, pp. 121-130

    Alexander Tobn

  • La crtica de Hicks al Tratado del Dinero de Keynes

    Alexander Tobn

    Lecturas de Economa, 61 (julio-diciembre 2004), pp. 121-130.

    Resumen: El objetivo de este artculo es mostrar que la crtica que hace Hicks alTratado del Dinero de Keynes es incorrecta. Para ello, presentamos el modelo de Keynes,mostrando que la igualdad entre la inversin y el ahorro es una condicin de equilibriomonetario y no una identidad. Este resultado no puede ser obtenido en el anlisis de Hicks.

    Palabras clave: Keynes, Hicks, precios, beneficios, ahorro, inversin. ClasificacinJEL: B22, E12, E22, E31

    Abstract: This article shows that the criticism made by Hicks to the Treaty on theCurrency of Keynes is not correct. Thus, we present the model of Keynes to show that theequality between investment and saving is a monetary equilibrium condition and not anidentity. This result cannot be obtained in the analysis of Hicks.

    Key words: Keynes, Hicks, price, profits, saving, investment. JEL: B22, E12, E22,E31

    Rsum: Cet article montre que la critique faite par Hicks au Trait sur la Monnaiede Keynes n'est pas correcte. Alors, on prsente le modle de Keynes pour montrer quel'galit entre l'investissement et l'pargne est une condition d'quilibre montaire etpas une identit. Ce rsultat ne peut pas tre obtenu dans l'analyse de Hicks.

    Mots cl: Keynes, Hicks, prix, profits, pargne, investissement.

  • Lecturas de Economa, 61 (julio), pp. 121-130. Universidad de Antioquia -Lecturas de Economa, 2004.

    La crtica de Hicksal Tratado del Dinero de Keynes

    Alexander Tobn*

    -Introduccin. -I. El modelo de Keynes (1930). -II. La crtica de Hicks (1967).-Conclusin. -Bibliografa.

    Primera versin recibida en enero de 2005; versin final aceptada en febrero de 2005 (eds.)

    Introduccin

    La Teora General de Keynes (1936) es una de las obras ms importantes enteora econmica del siglo XX. Sin embargo, su aparicin hizo que el Tratado delDinero (1930) cayera en el olvido. En ste, Keynes reivindica explcitamente suafiliacin al pensamiento de Knut Wicksell (1898). Ms precisamente, defiende laidea segn la cual la igualdad entre la inversin y el ahorro no es una identidad sinouna condicin de equilibrio monetario. Esta idea ser luego abandonada en la TeoraGeneral.

    Segn Keynes el equilibrio de una economa en su conjunto est determinadopor la igualdad entre la inversin (el valor de la demanda global) y el ahorro (el valorde la oferta global). Pero las decisiones econmicas que permiten determinar estasvariables son diferentes. As, un agente que dispone de una cantidad de dineroadicional, se encuentra frente a dos preguntas diferentes: invertir en la produccinde una cantidad adicional de bienes invertir en el mercado financiero. De un lado,se trata de la decisin de atesorar de invertir y, de otro lado, se trata de la decisinde comprar ttulos (acciones) conservar depsitos de ahorro. La primera decisintiene que ver con el ingreso (las variables flujo) y la segunda tiene que ver con lariqueza (las variables stock).

    * Alexander Tobn Arias: estudiante de Doctorado en Economa. Polo de Historia del AnlisisEconmico, PHARE. Universidad de Paris X Nanterre. Btiment K-131, 200 Avenue de laRpublique, 92001, Nanterre Cedex, Francia. Direccin electrnica: [email protected] las sugerencias y correcciones de Eduardo Bolaos, Jos Flix Catao y GonzaloBetancur.

  • 124

    Tobn: La crtica de Hicks al Tratado del dinero de Keynes

    En 1967, John Hicks comenta el Tratado en su Critical Essays in MonetaryTheory. En este texto, Hicks critica a Keynes argumentando que sus ecuaciones nocontienen el gasto que los agentes hacen de sus beneficios extraordinarios. As,propone un modelo macroeconmico que pretende ser ms general que aquelpropuesto por Keynes. El objetivo del presente artculo es mostrar que la crtica deHicks no respeta la idea fundamental de Keynes segn la cual la igualdad entre lainversin y el ahorro es una condicin de equilibrio y no una identidad. Masprecisamente, mientras Hicks pretende introducir el gasto de los beneficiosextraordinarios, lo que se demuestra es que estos beneficios son siempre nulos, quees precisamente lo que Keynes desmiente.

    Para llevar a cabo este objetivo, hemos dividido este artculo en dos secciones.La primera seccin presenta, de manera sinttica, el modelo bisectorial deKeynes.El nfasis est en la determinacin de los precios de los bienes y en la determinacinde los beneficios extraordinarios. La segunda seccin, presenta la crtica de Hicksy sus problemas. Este autor determina el precio y los beneficios extraordinarios delsector de bienes de consumo, pero olvida determinar explcitamente las mismasvariables para el sector de bienes decapital. Al final se presenta la conclusin.

    I. El modelo de Keynes (1930)

    Keynes presenta en el capitulo 10 de su Tratado el modelo terico de base, masconocido como las Ecuaciones Fundamentales. Se trata de un modelo compuestopor dos empresarios: uno de ellos produce un bien de consumo y el otro produce unbien de capital. Los beneficios normales de cada empresario estn incluidos comoun costo, puesto que los beneficios son considerados como la remuneracin delfactor de produccin capital. Estos beneficios son los que permiten obtener la mismaescala de produccin (Keynes, 1930, p. 124). El inters de Keynes esta dirigido a ladeterminacin de los precios y a la determinacin de los beneficios extraordinarios,es decir, aquellos que sobrepasan el monto de los beneficios normales.1 Suponga-mos que 1Q representa los beneficios extraordinarios del productor de bienes deconsumo, 2Q los beneficios extraordinarios del productor de bienes de capital,Q elmonto global de los beneficios extraordinarios, 'I el costo de produccin de losnuevos bienes de capital, I la inversin y S el ahorro. Los beneficios extraordina-rios son determinados por las siguientes diferencias:

    SIQ = '1 (1)

    1 Keynes llama a los beneficios extraordinarios windfalls profits.

  • Lecturas de Economa Lect. Econ. No. 61. Medelln, julio-diciembre 2004

    125

    '2 IIQ = (2)

    Entonces:

    21 QQQ +=

    SIQ = (3)Si

    SI >'

    , el productor de bienes de consumo percibe beneficios extraordina-rios. De la misma forma, si 'II > , el productor de bienes de capital percibebeneficios extraordinarios. A nivel global, la economa obtiene beneficios extraor-dinarios si

    SI >

    . Si por el contrario

    SI =

    , los productores solo perciben elbeneficio normal y la economa se encuentra en equilibrio monetario en el sentidodado por Wicksell (1898). La igualdad entre la inversin y el ahorro es entonces unacondicin de equilibrio y no una identidad. Las decisiones de inversin y de ahorroestn sujetas a la voluntad (anticipaciones) de los empresarios (Keynes, 1930, p.137), por lo tanto, estas decisiones pueden o no coincidir.

    Los precios de los bienes son determinados por las Ecuaciones Fundamentales.Supongamos que

    1pes el precio de los bienes de consumo, 2p el precio de los nuevos

    bienes de capital, 1X la cantidad de bienes de consumo, 2X la cantidad de bienes decapital, X la cantidad total producida de ambos bienes y,E el ingreso global. Desdeluego, 21 XXX += . Esto quiere decir, finalmente, que solo existe en la economaun nico bien que es consumido e invertido. De hecho, Keynes no escribe estaltima expresin. El considera que X se mide a precios constantes. Sin embargo,sto no es correcto pues aceptar esta medida implica conocer los precios relativos,es decir, implica suponer resuelto el problema de la determinacin de los precios.

    Los precios monetarios se determinan por las siguientes ecuaciones:

    1

    1 XSEp = (4)

    2

    2 XIp = (5)

    El precio de los bienes de consumo esta determinado por el cociente entre elgasto monetarios consagrado a la compra de bienes de consumo (neto del ahorro)y la oferta de estos puesta en el mercado. En el mismo sentido, el precio de los

  • 126

    Tobn: La crtica de Hicks al Tratado del dinero de Keynes

    nuevos bienes de capital est determinado por el cociente entre la inversin (netade la depreciacin) y la cantidad de bienes de capital puestos en el mercado. El nivelgeneral de los precios P es entonces determinado en esta misma lgica:

    XISE

    XXpXpP +=+= 2211 (6)

    Reemplazando (3) en (6), obtenemos:

    XQEP += (6)

    La expresin (4) es una versin primitiva de la primera ecuacin fundamental(Keynes, 1930, p. 133), y la expresin (6) constituye directamente la segundaecuacin fundamental (Keynes, 1930, p. 134). En la expresin (4), podemos precisarque EsS 1= . Donde s1 es la propensin a ahorrar de los ingresos. La expresin(5), tal como la hemos escrito, aparece explcitamente en el Tratado (Keynes, 1930,p. 134), pero es problemtica. Primero que todo, anlogamente a la primeraecuacin fundamental, ella debera constituir una versin primitiva de unatercera ecuacin fundamental. Sin embargo, Keynes no propone esta ltimaecuacin. Fue Hayek (1931, p. 283) el primero en escribirla y luego Shenoy (1932)es quien realiza su deduccin matemtica.

    Debido a la ausencia de una tercera ecuacin fundamental, Keynes no secompromete con la determinacin de los precios de los bienes de capital. El pretendeas mostrar el vnculo que une estos precios y la determinacin de los precios de losbienes de inversin (ttulos o acciones). Desde luego, ello ha dado origen a unaconfusin importante entre estos dos tipos de precios. La confusin es reconocidaampliamente por Robertson (1931, pp. 399-400), Williams (1931, p. 567), Hayek(1932, p. 36, n. 11) y Kahn (1978, p. 549). En la seccin siguiente veremos como Hickssucumbe a esta confusin. Esto es irnico pues Hicks busca precisamente clarificarlos conceptos del Tratado que el mismo considera oscuros.

    II. La crtica de Hicks (1967)

    Segn Hicks, el objetivo de su texto es ayudar a la comprensin de laterminologa del Tratado del Dinero. El considera que los conceptos utilizados porKeynes no son familiares y corresponden al modelo terico que explica el procesode expansin monetaria, presentado por Hume doscientos aos antes (Hicks, 1967,

  • Lecturas de Economa Lect. Econ. No. 61. Medelln, julio-diciembre 2004

    127

    pp. 191-192). El Tratado aparece como carente de originalidad en su concepcingeneral. A pesar de ello, Hicks termina dando a este obra mucha ms importanciay construye un modelo en el cual pretende mostrar los resultados de Keynes comoun caso particular de su propio modelo.

    Hicks acepta, como punto de partida, las ecuaciones de precios (4), (5) y (6). Sinembargo, en estas ecuaciones, la posibilidad de consumir los beneficios extraordi-narios no es considerada. Hicks cree que es necesario introducir esta posibilidad(Hicks, 1967, pp.196-197). As, introduce en el sector de bienes de consumo lapropensin a consumir de los beneficios extraordinarios globales, notado como 2s .En este caso, la expresin (4) puede ser escrita como sigue:

    1

    21

    )1(X

    QsSEp += (4)

    Esto significa que el precio de los bienes de consumo no solo est determinadopor el propio gasto de consumo realizado en este mercado )( SE , sino tambinpor el gasto en la proporcin

    )1( 2s

    del beneficio extraordinario global. Ahora, ladefinicin del beneficio extraordinario global la ecuacin (3) debe tambin sermodificada. Esta nueva definicin se obtiene reemplazando la ecuacin (4) y (5) enla expresin (6):

    2211 XpXpPXQE +==+IQsSEQE ++=+ )1( 2

    SIQs =2

    Por lo tanto,

    2sSIQ = (3)

    En este caso, el beneficio extraordinario global de Keynes es aumentado en laproporcin s2. Hicks reconoce el vnculo existente entre sta definicin y el famosoMultiplicador de Kahn de la Teora General de Keynes. Ahora, reemplazando (3) en(6) obtenemos:

    XsSIE

    XQEP

    2

    +=

    +=

    (6)

  • 128

    Tobn: La crtica de Hicks al Tratado del dinero de Keynes

    Segn Hicks, sta expresin constituye una forma corregida de la segundaecuacin fundamental de Keynes. En otras palabras, sta es la ecuacin fundamen-tal general. El resultado de Keynes, la ecuacin (6) se obtiene en el casoparticular de s2 =1, es decir, cuando el beneficio extraordinario global no esconsumido.

    Sin embargo, Hicks introduce la propensin a consumir del beneficio extraor-dinario global solo en el sector de bienes de consumo. El sector de bienes de capitalqueda intacto. Ninguna explicacin es dada al respecto. El es victima de la confusinque existe en Keynes, entre el precio de los bienes de capital y el precio de los bienesde inversin (los ttulos). Esto se confirma cuando Hicks (p. 198) explica que losprecios de los bienes de capital se determinan travs de la teora del mercado deactivos financieros. En este caso, el habla de la determinacin del precio de losbienes de inversin y no del precio de los bienes de capital. Esta es la mismaexplicacin que ofrece Keynes en su Tratado y que es retomada en la Teora Generalcomo el principio de la preferencia por la liquidez.

    Anlogamente al procedimiento adoptado para el sector de bienes de consumo,si introducimos la propensin a consumir de los beneficios extraordinarios globalesen el sector de bienes de capital, el modelo generalde Hicks contradice el objetivocentral de Keynes. La ecuacin (5) se escribe como sigue:

    QsXIp 2

    22 +=

    (5)

    Ahora, cual es la definicion del beneficio extraordinario global? Para saberlo,es necesario reemplazar las ecuaciones (4) y (5) en la expresion (6). Asi obtenemos:

    Esto significa que, en realidad, no hay beneficios extraordinarios en laeconomia ya que se tiene 0== SIQ . La igualdad entre la inversion y ahorroaparece como una identidad siempre verificada y no como una condicion deequilibrio, que es lo que precisamente Keynes busca demostrar. Asi, el modelo deHicks muestra una economia siempre en equilibrio monetario global, mientras que

    2211 XpXpPXQE +==+ QsIQsSEQE 22 )1( +++=+

    SIQQ = IS

  • Lecturas de Economa Lect. Econ. No. 61. Medelln, julio-diciembre 2004

    129

    el objetivo de Keynes consiste en contemplar el desequilibrio a traves de laexistencia de beneficios extraordinarios (o perdidas). El modelo de Hicks escontradictorio pues el pretende introducir la posibilidadde que los agentes consu-man una parte del beneficio extraordinario global y lo que se demuestra es que estosbeneficios son siempre nulos.

    Conclusin

    La macroeconoma moderna, construida sobre las enseanzas de la TeoraGeneral, adopta el principio segn el cual la igualdad entre la inversin y el ahorroes una identidad. Hemos visto que el Tratado del Dinero rechaza categricamenteesta idea. Es as como el inters de Keynes se dirige hacia el anlisis deldesequilibrio monetario. Hicks desconoce sta importante contribucin de Keynes.Su crtica no solo es estril sino contradictoria con sus propios objetivos. Lainvalidacin del anlisis de Hicks concierne tambin a los economistas querechazaron la fuerza de ciertas ideas del Tratado. Entre ellos se destacan Robertson(1931), Hayek (1931, 1932) y especialmente Kahn (1931). En el mismo sentido, elapoyo que Marcuzzo (2002) da a Kahn contra Keynes, utilizando el anlisis de Hicks,resulta tambin invalidado. Finalmente, la crtica de Hicks no hace ms quefortalecer la originalidad del pensamiento de Keynes.

    Bibliografa

    HAYEK, Friedrich August, 1931, Reflections on the Pure Theory of Money of Mr. J. M. Keynes,Economica, No. 33, agosto, pp. 270-295.

    ____________, 1932, Reflections on the Pure Theory of Money of Mr. J. M. Keynes (continued),Economica, No. 35, febrero, pp.22-44.

    HICKS, John, 1967, Critical Essays in Monetary Theory, Oxford University Press, Oxford.KAHN, Richard, 1931, Letters to J. M. Keynes, The Collected Writing of John Maynard

    Keynes, Vol. XIII, The General Theory and After, Part 1 Preparation, MacMillan, 1971,pp. 203-207, 212-213, 218-219.

    ____________,1978, Some Aspects of the Development of Keyness Thought, Journal ofEconomics Literature, Vol. 16, No. 2, junio, pp. 545-559.

    KEYNES, John Maynard, 1936, Teora general de la ocupacin, el inters y el dinero, Fondo deCultura Econmica, Bogot, 2000.

    ____________, 1930, Tratado del dinero, Ediciones Aosta, Madrid, 1996.MARCUZZO, Maria Cristina, 2002, The Collaboration between J. M. Keynes and R. F. from

    the Treatise to the General Theory, History of Political Economy, Vol 34, No. 2, pp. 421-447.

    ROBERTSON, Dennis, 1931, Mr. Keynes Theory of Money, The Economic Journal, Vol. 41, No.163, septiembre, pp.395-411.

  • 130

    Tobn: La crtica de Hicks al Tratado del dinero de Keynes

    SHENOY, B. R, 1932, An Equation for the Price-Level of New Investment Goods, TheQuarterly Journal of Economics, Vol. 47, No. 1, noviembre, pp.138-149.

    WICKSELL, Knut, 1898, Interest and Prices, Londres, Macmillan, 1936.WILLIAMS, John H., 1931, The Monetary Doctrines of J. M. Keynes, The Quarterly Journal

    of Economics, Vol. 45, No. 4, agosto, pp547-587.