dialnet ladrogadiccioncomohuida 2941712 (1)

7
8/19/2019 Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1) http://slidepdf.com/reader/full/dialnet-ladrogadiccioncomohuida-2941712-1 1/7 La drogadicción como huída. Condicionamientos sociales de las toxicomanías osé Ortega <4; :•su En el artículo se propone un planteamiento ecológico o ecosisténzico para abordar el fenómeno de las drogas y sus posibles soluciones; planteamiento que permite recoger las aportaciones de los posicionamientos relativos al medio ambiente físico y aquellas concepciones ma s atentas al medio humano. «PROLOGOS» Hace ya bastantes años que el mundo occidental, sobre todo Europa, se preo- cupa, aunque no lo suficiente, por el deterioro paulativo y progresivo del medio ambiente, de la naturaleza física, del ecosistema geográfico y natural en el que vive el hombre y, sin embargo, por no sé qué extraña circunstancia, no parece preocuparnos el no menos palpable deterioro del medio humano, del hecho humano Proyecto Horno, 1992), de todo aquello que hace posible la relación, la convivencia, la cultura y el desarrollo positivo de lo humano. Muchos son los hechos, acontecimientos, cir- cunstancias y factores que contribuyen a esta degradación de la realidad humana, de sus contextos y de sus potencialidades de mejorar en este último tercio del siglo XX , pero está claro que uno de esos factores es el progresivo y abusivo consumo de drogas y sus consecuencias. El concepto de huida en relación con la adicción a las drogas puede considerar- se como un concepto abstracto y literario, incluso metafísico y transcendente o psi- cológico y social. En este sentido, podríamos relacionar con la adicción no sólo el concepto de huida sino también el de búsqueda. Al hablar aquí de los condicionamientos sociales de las toxicomanías, no pare- ce que tenga espacio para la metafísica o la literatura. Posiblemente, dada la tragedia humana y social que conlleva la realidad de las drogas, la utilización del discurso metafísico y estético podría ser interpretada por alguno precisamente como una huida de la realidad social y de nuestras responsabilidades. No obstante, quiero dejar constancia aquí de la virtualidad sugerente y comprensiva de los conceptos de huida y búsqueda desde una perspectiva platónica y anselmiana, como abstracciones onto- lógicas que «en última instancia», hacen inteligible el fenómeno personal y colecti- © 1995 by Aprendizaje, ISSN: 0214-7033 omunicación Lenguaje y Educación 1995, 27 97-103

Upload: salud-mental-salud-mental-pjc

Post on 08-Jul-2018

215 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

8/19/2019 Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

http://slidepdf.com/reader/full/dialnet-ladrogadiccioncomohuida-2941712-1 1/7

La drogadicción com o huída.Condicionamientos sociales de lastoxicomanías

osé Ortega

< 4 ; : • s u

En e l artículo se propone u n planteam iento ecológ ico o ecosisténz ico para abordar elfenóm eno de las drogas y sus posibles soluciones; planteam iento que perm ite recogerlas aportaciones de los po sicionam ientos relativos al m edio am biente físico yaquellas concep ciones m a s atentas al me dio hum ano.

«PROLOGOS»

Hace ya bastantes años que el mundo occidental, sobre todo Europa, se preo-cupa, aunqu e no lo suficiente, por el deterioro paulativo y progresivo del medioambiente, de la naturaleza física, del ecosistema geográfico y natural en el que vive elhombre y, sin embargo, por no sé qué ex traña circunstancia, no parece preocuparnosel no menos palpable deterioro del medio humano, del hecho humano ProyectoHorno, 1 992 ), de todo aquello que hace posible la relación, la convivencia, la culturay el desarrollo positivo de lo humano. M uchos son los hechos, acontecimientos, cir-cunstancias y factores que contribuyen a esta degradación de la realidad humana, desus contextos y de sus potencialidades de mejorar en este ú ltimo tercio del siglo XX ,pero está claro que uno de esos factores es el progresivo y abusivo consumo de drogasy sus consecuencias.

El concepto de huida en relación con la adicción a las drogas puede considerar-se como un concepto abstracto y literario, incluso metafísico y transcenden te o psi-cológico y social.

En este sentido, podríamos relacionar con la adicción no sólo el concepto dehuida sino también el debúsqueda.

Al hablar aquí de los condicionamientos sociales de las toxicomanías, no pare-ce que tenga espacio para la metafísica o la literatura. Posiblemente, dada la tragedia

humana y social que c onlleva la realidad de las drogas, la utilización del discursometafísico y estético podría ser interpretada por alguno precisamente como unahuida de la realidad social y de nuestras responsabilidades. No obstante, quiero dejarconstancia aquí de la virtualidad sugerente y comprensiva de los conceptos de huiday bú squeda desde una perspectiva platónica y anselmiana, como abstracciones onto-lógicas que «en ú ltima instancia», hacen inteligible el fenómeno personal y colecti-

© 1995 by Aprendizaje, ISSN: 0214-7033

omunicación Lenguaje y Educación 1995,27 97-103

Page 2: Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

8/19/2019 Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

http://slidepdf.com/reader/full/dialnet-ladrogadiccioncomohuida-2941712-1 2/7

98 o de la droga de la misma forma que ele r o scósmico platónico hacía co mprensiblepor derivación cualquier m anifestación erótica o sex ual por desviada y negativa quefuera. Intento aquí algo más prosáico y convencio nal hablar de los con dicionamien-

tos sociales y psicológicos del consum o abusivo de las drogas aspecto por otra partemuy m anido y co ntrove rtido en relación con el cual má s que describir las diversasclasificaciones vo y a apuntar algunas con sideraciones críticas.

Estas co nsideraciones después de indicar las clasificaciones de causas y facto resmás com unes se refieren entre otras cosas al analiticismo y psicologism o excesivotodavía vigente que se separa de una consideración m ás radical e integrada de loscondicionamientos del abuso de las drogas y de la conciencia de las responsabilida-des com partidas de toda la sociedad.

Un planteamiento eco lógico o eco -sistémico del problema que recoja el para-lelismo indicado al principio en tre las concepcio nes y po sicion es relativas al medioambiente físico co n las del med io hum ano pu ede facili tar una com prensión m ásacertada del fenómeno de las drogas y sus po sibles soluciones.

«LOGOS»

Mu chas son las causas factores variables y mo tivaciones que se indican com odeterminantes inductoras o que se relacionan co n la toxico mania o el uso abusivo dedrogas. Depende de lo s autores y los cono cimientos científicos de los que parten.Biólogo s y mé dicos suelen encontrar etiolo gias fisiológicas y patológicas psicólogosy psiquiatras rasgos de personalidad motivaciones psicológicas neuroticismos etc.

Los so ciólogo s ven circunstancias y factores de cambio y crisis social implicados en elconsum o de drogas; los antropó logos co nsideran aspectos culturales; los teólogos cri-sis religiosas y mo rales de los indivíduos y las sociedades. Lo s resultados de los aná li-sis y diagnósticos de causas o factores adem ás del enfo que científico y de la teoríacientífica o ideológica en la que cada uno se situa dependen también de los m ismosinstrumento s de análisis.

La m ayoría de las investigaciones que se han hecho h asta el mo mento se hanrealizado a unnivel individu ly preferentemente a sujetos «enfermo s» e instituciona-lizados en hospitales centros de tratamiento reformatorios cárceles etc. lo que hapodido sesgar los resultados. Meno s investigaciones se hacen a unn i v e l m i c ro s o c i o ló g i c oen el que se analicen las variables relacionadas de los droga dictos con grupo s socialese instituciones y escasam ente hay investigaciones a unn i v e l m c r o so c i o ló g i c oen el quese analicen factores relativos al co ntexto eco nómico y social de los individuos que sedrogan . Por supuesto a nadie se le ha ocurrido analizar la calidad delm edio hum noen el que ese individuo dro gadicto vive.

Las conclusiones de todas estas investigaciones y análisis en general han sidopoco claras y nada concluyentes constatándo se saturaciones e interconexiones de lasdiversas variables. Po dríamo s echar la culpa de estos resultados al número todav íapequeño de investigaciones o a la falta de precisión o finura de los análisis pero yocreo que se debe más al mismo enfoque y planteamiento de los análisis del problemay a su discordancia con la realidad. Adem ás de los sesgos de oficio ideológicos y

metodológicos a los que nos hemos referido anteriormente.En efecto en general esas investigaciones se han dirigido alnálisis individu lde los drog dictosen los que han encontrado fundamentalmente características psico-lógicas o psiquiátricas y com o no podía ser meno s han encontrado lo que buscaban.Po drían haber estudiado el grupo o los grupos sociales la com unidad el medioambiental y el medio h umano en el que viven esos indivíduo s. Incluso cuando losanálisis se han hecho co n el fín de implementar planes programas o p royectos pre-ventivos o secundarios com unitarios los estudios han sido individuales o sumativos.Pero lógicamente los estudios de análisis o diagnóstico previos deben participar dela lógica com unitaria. E ntre el diagnóstico y la intervención debe existir coherencia.

Page 3: Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

8/19/2019 Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

http://slidepdf.com/reader/full/dialnet-ladrogadiccioncomohuida-2941712-1 3/7

99No se puede hacer un análisis individual o de individuos y luego implementar unprograma com unitario en base a esos datos, aunque se hayan acumu lado o yuxta-puesto. Lo colectivo es diferente de la suma de los individuos que lo componen.

Los planteamientos y diseños de las canas, factores o condiciones de la toxico-manía deben ser integradores, interrelacionales, comunitarios, que eviten perder lavisión unitaria e integrada del conjunto, su progresión y conexión. Planteamientosestructurales, sistémicos, ecológicos hace tiempo que se habla de «ecología del deli-to» Jiménez Burillo y Aragonés,1986) antropológicos y cualitativos, se conformaríanmejor a la realidad del fenóm eno de los procesos complejos de la drogadicción. Loque, por supuesto, no debe impedir estudios individuales psicológicos o psicopatoló-gicos como complementarios. Los planteamientos estrictamente analíticos al«desintegrar» y aislar los factores etiológicos de la drogadicción, nos despistan de lagenética de las causas y dispersan y difuminan las responsabilidades a compartir porparte del colectivo social y a su vez nos alejan de la realidad ecológica, sistémica,conexionada y dinámica de los procesos sociales.

Debe quedar claro que hablando de las causas de la toxicomanía ninguna delas que se citan pueden predecirla de manera inevitable Repetto y cols., 1985) , estoes, no podemos tener una posición determinista en el sentido de que un factor aisla-do o varios factores concatenados o sucesivos puedan conducirnecesariamentea consu-mir abusivamente drogas, ya que a unos individuos pueden llevar a la drogadiccióny a otros a buscar satisfacciones no relacionadas con las drogas La dependencia de lasdrogas, 1981) . En efecto, no se ha logrado aislar una causa como determinante exclu-sivo de la toxicomania. En este sentido es frecuente, más que hablar decausas hablarde factores, condicionamientos o m otivaciones. Nos m ovemos, en general, en elterreno de las hipótesis interpretativas, sin contrastación empírica, en base a posicio-nes fundamentalmente ideológicas, más o menos verosímiles y razonables.

Incluso para conductistas, neoconductistas y algunos cognitivistas, las investi-gaciones sobre las causas son innecesarias para solucionar el problema de la toxico-mania. En este sentido, p.ej., el M odelo H.B.M . de B ecker y Marshal 19 74) y deStrickland 1978)., parte de la tesis de que «los hechos sociales tienen menos impor-tancia para el comportamiento que la manera en que se perciben» González y Pérezde V illar, 199 3), por lo que es necesario modificar las percepciones, pero no estudiarlos hechos ni sus causas. O tros modelos de tratamiento preventivo de las toxicoma-nias como el P.R .E.C .E.D .D. Predisposing, Reinforcing, Enab ling Causes for Edu-cational Diagnosis and Evaluation, Green, 1980), por el cóntrario, dan gran impor-

tancia al estudio de los factores que predisponen, refuerz an o facilitan el abuso de lasdrogas Gonz ález y Pérez de Villar, 19 93,), factores que deben ser diagnosticadosantes de la intervención.

Personalmente entiendo que el estudio de los factores que tienen parte en elorigen de la toxicoman ía orienta las soluciones del problema y que pa ra prevenir,controlar y disminuir esta lacra deberemos localizar los factores originantes y sumayor o menor influencia Repetto y cols., 1985).

Por otra parte, el estudio y análisis de los factores influyentes en el abuso de lasdrogas nos lleva a p rimar la prevención frente a la terapiaex post facto.El escaso éxitode los tratamientos conductistas o de caja negra, nos conduce a primar los program asy proyectos comunitarios y educativos.

No obstante, debemos ser conscientes de las limitaciones de los análisis de losfactores que originan el consumo de drogas, además de lo ya apuntado, ya que pue-den variar en función de las personas, del tipo de droga o del mismo contexto social.«D iferentes personas pueden utilizar distintas drogas por el mism o mo tivo, o lamisma droga por diferentes motivos; una misma persona puede alternar diversosmotivos para consumir una droga determinada» Repetto y cols., 198 5). Los factoresque favorecen el comienzo del consumo de una droga pueden ser distintos de los quepromueve n su pe rsistencia. No h ay teorias etiológicas universales, ni salidas paratodo lugar o tiempo Vega Fuente, 1985 ).

Page 4: Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

8/19/2019 Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

http://slidepdf.com/reader/full/dialnet-ladrogadiccioncomohuida-2941712-1 4/7

looDicho lo cu al, y seguro de qu e los estudios de factores causales conllevarán

alguna otra limitación que en este mom ento olvido , sigo pensand o en la necesidadde presentar estudios, investigaciones y teorias que vayan poco a poco aco tando y

aclarando la etiología de la drogadicción. Es por lo que quiero fo rmular ahora unm o d e l o i n te g r ad oen espiral)d e l o s f a c t o r e sque intervienen o pueden intervenir en eseproceso dinámico y co nexionado que co nduce al uso abusivo de las drogas. Esteviene a ser la proyección a la drogadicción del modelo que com encé a desarrollar en1977 en relación con el fenómeno de la delincuencia juvenil Ortega Esteban, 1978)y que recoge aspectos del «m odelo globalizador de las toxicom anías» de la Organi-zación Mundial de la Salud, O.M .S., No men clature and Classification of drug andalcohol related problems: a W HO M emo randum, Bull WHO , 59, 225-242) cita-do en V albuena Briones, 1993) y de o tros modelos también com plejos y globales,como el modelo de «causación circular acumulativa» Vega Fuente,1985).

A m i entender, podem os decir plausiblemente, que se dant re s n i v e l e sinterrela-cionales e interdependientes, acumulativos y com plementarios y, en general, sucesi-vos, que, con todas las limitaciones que hemo s indicado anteriormente, pueden co n-ducir al uso y abuso de las drogas:

1 Un nivel defactoresque podemos llamarp r o f u n d o s o re m o t o s—o también

lejanos, radicales, y, en cierto sentido, históricos e, incluso, estructurales— son aque-llos de orden socio-económico, so cio-estructural, socio-políticos, antropológicos,culturales e ideológicos, ambientales y ecológicos.

Pod ríamos co ncretarlos en una inadecuada distribución de la renta nacional,de la cultura y la educación, estructuras basadas en el lucro de los menos, una organ i-zación autoritaria y opresiva de la sociedad y de la vida cotidiana, medio am biente

físico ym e d i o h u m a n o d e t e ri o ra d o spresión de las costumbres y m odelos so ciales esta-blecidos, deficiencias de los sistemas sanitarios, condiciones laborales, factores béli-cos, valores transmitidos por los sistemas educativos, etc. Factores que podríam osampliar y diseccionar.

F a c t o re s in t e r m e d i o s o p r ó x i m o s o c e r c a n o s .Estos factores vendrían, en granparte, emanado s como pro ductos más o meno s específicos a medio y largo plazo, delos factores del p rimer nivel. Así, podríamos en unciar los siguientes: desigualdadessocioeconómicas en una determinada comunidad, crisis socio-económicas, zonadepauperada de una ciudad, paro o jubilación de los p adres, dificil acceso a la culturay a la educación, desintegración fam ilar, bajo nivel de autono mía y autoritarismo ,

problemas de convivencia familar, coacciones y malos ejemplos de los padres, rigidezmental en la familia y en la escuela, presión grupal,d e g r ad a c ió n d e l m e d i oambientecercano, físico yliumano, deshum anización de las realidades humanas, desintegra-ción de los valo res culturales, carencia de infraestructuras cercanas de tipo cultural,educativo o sanitario, experiencias traum áticas infantiles, trastorno s previos de lapersonalidad, características personales previas, discriminación racial, racismo o dis-criminación regiona l, falta de opo rtunidades sociales, laborales o intelectuales,ausencia de seguridad en e l trabajo, pobreza, falta de consideración social, etc.

Junto a estos factores próximosc o m u n e so g e n e r a l e sestarian m ás específicamen-te, o comof a c t o re s p ró x i m o s m á s e s p e c íf i c o sla pertenencia a una familia con dro gode-pendientes, oferta y disponibilidad de drogas, biogénesis o anteceden tes de droga-dicción en los padres exposición a la droga durante la gestación, falta de una adecua-da información en relación con las drogas influencias de los «mass media»publicidad, propaganda, actitudes sociales ante la salud, las drogas y los co nsumido-res de drogas, etc.

Finalmente y com o «subproducto» de lo s anteriores factores tendríamos los:3 F a c t o re s i n m e d i a to sque po dríamo s llamar individuales, también «exterio-

res» o «superficiales», que, en realidad, en sí mismo s, son m ás síntomas, indicadoresy efectos que causas, pero que en un diagnóstico clínico o psicológico se presentancomo factores determinantes y exclusivos de la drogadicción.

Page 5: Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

8/19/2019 Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

http://slidepdf.com/reader/full/dialnet-ladrogadiccioncomohuida-2941712-1 5/7

O

3.1 Factores inm ediatos com unes:Se trata de factores psicológicos com o baja inte-ligencia, neuroticismo, desequilibrios psicoafectivos, inestabilidad emocional, inse-guridad, falta de atención, fracaso escolar, sentimientos de culpabilidad, baja autoes-tima, falta de intem alización de las normas sociales, falta de preparación para la tomade d ecisiones razonables, intolerancia a la frustración, carencias afectivas, ansiedad,depresión, inadaptación soc ial, agresividad, etc.

Ha sta aquí, los factores considerados en tres niveles interrelacionados conexio-nados; entend idos en una cierta sucesión, pero que si bien no dudam os que puedencond ucir o contribuir al consum o abusivo de dro gas, porque en la historia vital delos toxicóm anos así aparecen, también som os conscientes de que pueden con ducir aotro tipo de m anifestaciones o salidas, mas o men os disfuncionales com o una enfer-me dad psíquica grave, una con ducta delictiva o ¿por qué no ? una postura de críticadura y de de nuncia po lítica y social de su propia situación y de la cum unidad e n laque vive, de aquí que debam os avanzar en la búsqueda de factores más específicos y

cercanos a la conducta concreta d e la toxicomanía. Creo que puede ser útil heurísti-camente denom inar a losfactores inm ediatosreferidos,factores inm ediatos com unes o generalesy tratar de discernir unosfactores inm ediatos específicoso más espec íficos o directa-mente relacionados con la toxicomanía.

Ya he indicado a nteriormente que he hecho aquí una aplicación o inferenciadel mo delo explicativo causal referente a la delincuencia juvenil, aplicándolo tam -bién a la toxicoma nía, y la verdad hay algun as razones pa ra hacerlo así, ya que, segúnalgunas investigaciones, observaciones y experiencias Garrido Genovés, 1987),parece b astante claro que una pa rte im portante de los que, antes de la apariciónextendida de las drogas, eran simplem ente delincuentes juveniles, hoy día, con simi-lares características y genesis causal, adem ás se drogan. Los jóvenes delincuentes dehoy día, en principio, no serían ni mejores ni peores que los de e ntonces: la droga ysus consecuencias haría sus actuales conductas m ás criminógenas y peligrosas y, porotra parte, con m ayores y nuevas d ificultades de reinserción social. Cuando en 1975yo dirigiera el Reform atorio de D elincuentes Juven iles Difíciles de E spaña, sito enSalamanca, aparte de un caso d e alcoholismo , no teníamos m ás drogadictos. Hoy latoxicomanía es el mayor p roblema de los centros de tratamiento de jóvenes delin-cuentes. Da la impresión de que la drog adicción pudiera suplir o ser sucedáneo paralos delincuen tes juveniles de la mera con ducta delictiva, «continuac ión de su con-ducta antisocial previa» Valbuena Briones, 1993). También pudiera decirse que ladrogadicción se aña de o viene después de la conducta d elictiva o, incluso, que la

toxicomanía en cierta m edida lleva a conductas delictivas, sobre todo p or la necesi-dad de conseguir cada ve z m ayores dosis de drogas. No ob stante, parece conven ien-te, tanto desde el punto de vista conceptual com o desde la perspectiva de la interven-ción, separar la toxicomanía de la delincuencia, ya que estam os ante fenóm enos dife-rentes con características propias Valbuena Briones, 1993).

3.2 a c t o re s i n m e d i a to s e s p e c í f i c o sPued e pensarse que al lado de los factores etiológicos indicados sería nece saria

la existencia en el sujeto o en el entorno so cial inm ediato del drogad icto algo másespecífico que lo llevara al consumo c oncreto de drogas. Se habla de la existencia deuna «actitud personal que induce al consum o o al abuso de estos productos» VegaFuente, 1985). Pero yo creo que, siguiendo la lógica inteyna d e esta clasificación,podem os indicar unos factores inmed iatos específicos que expliquen la determina-ción concreta de los sujetos hacia las drogas y no hacia otras salidas. «La curiosidadpor cono cer los efectos y sensaciones subjetivas que producen las drogas», el deseo deadquirir rápidamente estados de relajación y sopor o búsqueda de placer o bienestarpor m edios farmacológicos, deseo de escapar y huir de los conflictos y problemas,fácil disponibilidad p ara adq uirir drogas, actitudes po sitivas hacia las droga s y susconsum idores, información incorrecta sobre las drogas y sus riesgos, consum o habi-tual de alcohol, analgésicos o estimu lantes en la familia, tener un herma no m ayordrogad icto en la fam ilia, cercanía a lugares de produc ción de opio u otras drogas,

Page 6: Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

8/19/2019 Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

http://slidepdf.com/reader/full/dialnet-ladrogadiccioncomohuida-2941712-1 6/7

2

tener amigos que se drogan o ser m iembro de una pa ndilla en la que se toman dro-gas búsqued a de nuevas experiencias exc itantes entre otras motivac iones.

Todos los factores condicionamientos y motivaciones considerados en los tresniveles hay que verlos integrados en un proceso dinámico interrelacional y sistémi-co en espiral que nos pone en evidencia la com plejidad del fenóm eno de la droga-dicción las implicaciones socioeconóm icas y socio-políticas ambientales y huma-nas en las que se hace patente las responsabilidades com partidas de todo el cuerposocial y nos hace ver la necesidad de la participación comunitaria en la solución delproblema.

De todos modos he presentado un modelo que precisaría de may or precisiónen su descripción y sobre todo una adecuada contrastación empírica en base a mode-los de análisis e investigación coherentes con el propio modelo y realidad sistémicadel fenómen o de la toxicom ania. Los modelos analíticos de mera yu xtaposición dedatos no son suficientes y posiblemente distorsionan más que informan sobre la rea-

lidad interrelacional y global del problema.

« PI LOGOS»

Para terminar quiero volver a algunas ideas menc ionadas al inicio de estetexto.

Entre los factores implicados en el fenómeno de la drogadicción hemos hechoreferencia al deterioro y degradación del med io hum ano del medio «amb iente»hum ano haciendo un paralelismo entre el med io amb iente físico o geográfico y larealidad humana el medio humano siguiendo la perspectiva del citado «proyectoHom o». Viendo en efecto que «nuestra condición humana está también sometida auna explotación abusiva e irracional» que están sucediendo hech os y actuacionesque están degradando el medio hum ano y en los que la «construcción del hombre»está siendo cercenada directa e indirectamente por esos hechos e intervenciones.Todo ello en el convencimiento de que debe haber coherencia entre el medioambiente físico y el med io «ambiente» hum ano de la misma forma p.ej. que debehaber relación entre el medio am biente físico y la educac ión para la salud.

Tenem os hoy día en Occidente demasiadas ideologías realidades hechosacciones y «empresas» contaminantes del medio humano desde guerras cruentascorrupciones económ icas y políticas marginac iones racismos torturas etc . realida-

des todas que están deshumanizando el hecho hum ano. No nos debe extrañar quealgunos de nuestros conciudadanos quieran huir y ev adirse de este medio y se sien-tan asfixiados por la ex cesiva contaminación de la condición humana actual. Tam -bién el medio humano puede agotarse y hacerse inhabitable haciéndonos desapare-cer como auténticos hombres. Si progresara en exclusiva nuestra preocupación por laecología física pudiera darse la paradoja difícil de imaginar de que llegáramos asubsistir com o entes biológicos en un m edio humano totalmente degradado.

El m edio «ambiente» hum ano tiene que ver con el respeto a los derechoshumanos con la solidaridad la hospitalidad el respeto a la diferencia con la frater-nidad y filantropía con la búsqueda de la justicia para todos con la defensa del diá-logo y la paz entre otras muc has cosas más. De la cantidad y calidad de implementa-

ción en las relaciones de los hombres de todos estos aspectos depende la ca ntidad ycalidad del medio humano.

Esperemos que la degradación del medio humano sirva cada vez m enos comofactor determinante de la drogadicción como huida.

Page 7: Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

8/19/2019 Dialnet LaDrogadiccionComoHuida 2941712 (1)

http://slidepdf.com/reader/full/dialnet-ladrogadiccioncomohuida-2941712-1 7/7

3

Referencias

GARRIDO GENOVÉS,V. 1987).Delincuencia juvenil , orígenes, prevención y tratam iento.Madrid: Alhambra.GONZÁLEZ,G y PÉREZ DE VILLAR,G. 1993).Prevención de d rogodependenc ia en la escuela.Madrid: Pablo

Montesino, 11.JIMÉNEZ BURILLO,F. yARAGONÉS,1986).Introducción a la psicología am biental .Madrid: Alianza Edito-

rial.L a dependencia de las drogas.Madrid: Dirección G eneral de Salud Pública, 1981), 17.Proyecto Hom o,1992). Madrid: Fundación Infancia y A prendizaje.ORTEGA ESTEBAN, J. 1978).Delincuencia, reformatorio y educación liberadora.Madrid: Zero-zyx.REP ETID y Cols. 1985).Tox icología de la drogadicción.Madrid: Díaz de Santos, 95.VALBUENA BR IONES,A. 1993).Tox icomanías y A lcoholism o.Barcelona: Ma sson-Salvat, 2. ed., 49-51.VEGA FUENTE,A. 1985).L as drogas ¿Un p roblema educ ativo?.Madrid: Cincel, 52.

La drogadicción como huida. Condicionamientossociales de las toxicomanías

Jos é Orteg aCL E, 1995, 27, pp. 97-103

Resumen: En este artículo se presenta una propuesta ecológica, sistémica y dinámica de comprensión de los condicionamientos sociales de las toxicomanías, estableciendo un paralelismentre el medio ambiente físico y el medio amb iente humano. Se sigue dando im portancia estudio crítico de los factores influyentes en el ab uso de las drogas para la prev ención, la intvención y asunción de responsabilidades por parte del colectivo social.

Datos sobre el autor: José Ortega Esteban es Catedrático de Pedagogía Social en la Univerdad de Salamanca y D ecano de la Facultad de Ciencias Sociales de la misma Universidad.

Dirección: Facultad de Ciencias Sociales. Campus Miguel de Unamuno. 37007 Salamanca.

PERM ISOS PARA CITAR O R EPRO DU CIR EN O TRAS FUEN TES: Se pueden cilibremente hasta 500 palabras. Para reproducir una porción de texto mayor, figuras o ilutraciones, se deberá pedir permiso por escrito a la revista, especificando el uso al que se dtina el texto. En todos los casos, se deberá citar el copyright deCL E .En el caso de artícu-los o textos que hayan sido a su vez rep roducidos enC L E los interesados deberán dirigirset nto los detent dores del copyright origin l como CL E, en el caso de qu e se quierahacer uso de la traducción FOTOCOPIAS: Para todo lo relacionado con el uso mediantefotocopia del material de esta revista, deberán dirigirse a: CE DR O, C/ José Marañón, 10, lzda. Tel. 594 15 75. Fax 445 35 67