islam la media luna creciente

Upload: darezzoguido

Post on 07-Jul-2018

217 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    1/36

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    2/36

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    3/36

    ISLAM. LA MEDIA LUNA... CRECIENTE

    Jaume Flaquer, sj.

    1. ¿ISLAM, ADÓNDE VAS? ........................................................................................2. ¿QUÉ HACER  HOY CON LA LEY ISLÁMICA? ..........................................................3. EL ISLAM, UN MUNDO PLURAL ............................................................................4. EL GRAN CISMA: SUNNISMO Y CHIISMO ................................................................5. LA MÍSTICA DEL ISLAM COTIDIANO ......................................................................6. LA GUERRA CIVIL ÁRABE .....................................................................................7. MUCHO POR  HACER  .............................................................................................

    GLOSARIO ................................................................................................................CUESTIONES PARA LA REFLEXIÓN ............................................................................

    36

    1016202427

    3132

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    4/36

    Edita Cristianisme i Justícia - Roger de Llúria, 13 - 08010 BarcelonaTel.: 93 317 23 38 - E-mail: [email protected] - www.cristianismeijusticia.netImprime: Ediciones Rondas S.L. - Depósito Legal: B 29756-2015ISBN: 978-84-9730-369-9 - ISSN: 0214-6509 - ISSN (virtual): 2014-6574

    Impreso en papel y cartulina ecológicos - Dibujo de la portada: Roger TorresRevisión y corrección del texto: Pilar de la HerranMaquetación: Pilar Rubio Tugas - Enero 2016

    Protección de datos: La Fundación Lluís Espinal le comunica que sus datos están registrados en unchero de nombre BDGACIJ, titularidad de la Fundación Lluís Espinal. Sólo se usan para la gestióndel servicio que le ofrecemos, y para mantenerlo informado de nuestras actividades. Puede ejercitarsus derechos de acceso, recticación, cancelación y oposición dirigiéndose por escrito a c/ Roger deLlúria 13, Barcelona.

    Jaume Flaquer sj. es profesor de la Facultat de Teologia de Catalunya. Doctoren Estudios Islámicos. Responsable del Área Teológica de Cristianisme i Justí-cia. Ha publicado en esta colección: Fundamentalismo (n. 77) y Vidas itinerantes (n. 151).

    Este cuaderno cuenta con la colaboración de la Ocina d’Afers Religiososdel Ajuntament de Barcelona

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    5/36

    3

    1. ¿ISLAM, ADÓNDE VAS?

    El islam, la religión de la media Luna, está en expansión numérica yomnipresente en los medios de comunicación. Sin embargo, está en

    ebullición, en un profundo debate interior, donde algunos no tienenmás argumentos que sus armas y donde las palabras son espadas a-ladas. Este debate es una verdadera guerra civil ideológica en la quese mezclan también una innidad de componentes políticos, socialesy económicos.

    Contrariamente a lo que podamos pen-sar, el islam no está en guerra contraOccidente sino en un debate internosobre cómo deben vivir los individuos

    y las sociedades mayoritariamente mu-sulmanas en el siglo XXI. Por ello, lamayoría de víctimas del terrorismo sonmusulmanas, por más que las mino-rías religiosas en el mundo árabe estén particularmente oprimidas e incluso perseguidas. De igual manera que Eu-ropa vive en una crisis de identidad, enun replanteamiento sobre lo que es y

    lo que quiere ser, independientementede la inmigración musulmana que pide

    una visibilización pública de su reli-gión, el islam como civilización viveuna crisis ideológica, más allá de suaparente éxito de expansión numérica,

    independientemente de las sendas delmundo occidental. Sin duda, Occiden-te, con sus políticas exteriores intervie-ne y cortocircuita estos debates, comovemos con las desastrosas consecuen-cias de la guerra de Irak, pero se tratade un dilema interno. La existencia deOccidente supone una interpelaciónfrente a la cual las sociedades islámi-

    cas han de definirse. No solo se venimpelidas a responder a la interpela-

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    6/36

    4

    ción de la modernidad sino a recrearla para que no sea vivida como occiden-talización.

    En suma, la cuestión principal esqué hacer hoy con la ley islámica me-

    dieval en contextos de sociedades cadavez más plurales e interrelacionadas por la globalización. La pregunta tieneaspectos políticos, jurídicos y socialesademás de condicionamientos econó-micos. Pero, solo cuando sea respon-dida como pregunta religiosa acabarásiendo asumida pacíficamente por lamayoría de la comunidad islámica.

    Dado el peso que el componente reli-gioso tiene en estos países, es necesa-ria una relectura creyente de la propiatradición (y no solo agnóstica o crítica) para asumir una modernidad que no essimplemente la construcción de rasca-cielos o la utilización de la tecnologíamás puntera, tal como sucede en los países del Golfo.

    El debate es principalmente intra-islámico. Las fallidas primaveras ára- bes arrancaron cuando estas sociedadesdejaron de proyectar todas las culpasde su situación de subdesarrollo ala época colonial y a la injerencia deEEUU. Sin poder negar su parte deculpa, el mundo árabe se preguntó:¿Y si la situación en la que vivimos

    está causada principalmente por un problema nuestro? ¿Y si los primerosresponsables son nuestros propios di-rigentes? Las sociedades en regímenesdictatoriales suelen caer en aquellaenfermedad psicológica que consisteen proyectar hacia afuera las propiascarencias y dificultades. El islam solo podrá reformarse en la medida en que

    empiece reconociendo que tiene, él, un problema al que ha de dar solución. Por

    ello, en realidad, las infinitas declara-ciones de los dirigentes musulmanescondenando los atentados terroristasy proclamando que el «islam es paz»suenan tan vacías a oídos de los no-

    musulmanes bienintencionados, aunsiendo sinceras. Contentarse con decirque «el Estado Islámico o al-Qaeda noes islam» no es todavía ni una primera piedra de la solución.

    Decir: «el Estado Islámico

    no es islam» no es todavía

    solución.

    El filósofo Abdennour Bidar, esta- blecido en Francia, escribió reciente-mente una de las interpelaciones máscerteras que he leído últimamente:

    Querido mundo musulmán,

    Yo soy uno de tus hijos alejados quete miran desde afuera. [...] ¿Y qué eslo que veo? [...] Te veo dando a luz unmonstruo que pretende llamarse Esta-do Islámico. [...] Ante este monstruo,

     pues, tú ¿qué dices? Gritas: «¡No soyyo!», «¡No es el Islam!». No aceptasque los crímenes de este monstruo seancometidos en tu nombre. Te opones a

    que el monstruo usurpe tu identidad y,claro que tienes razón en oponerte. [...] ¡Pero esto no basta en absoluto! [...]¡Te contentas con indignarte cuandoeste momento hubiera sido una ocasiónhistórica para cuestionarte! Tú acusasen vez de aceptar tu responsabilidad.«Vosotros los occidentales y todoslos enemigos del Islam, ¡dejad de aso-

    ciarnos a este monstruo! ¡El terrorismono es el Islam, el verdadero Islam, el

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    7/36

    5

    Islam bueno que no quiere la guerrasino la Paz!» [...] ¿Será todo estoculpa del Occidente? ¿Cuánto tiempo

     precioso vas a seguir perdiendo, miquerido mundo musulmán, con esta

    acusación estúpida que tú mismo nocrees y detrás de la cual te escondes para continuar mintiéndote a ti mismo?Ya es hora de que reconozcas que, espe-cialmente desde el siglo XVIII, has sidoincapaz de responder al desafío de Occi-dente, sea porque te has refugiado deuna manera infantil y mortífera en el pa-sado con una regresión obscurantista del

    wahhabismo que continúa haciendo es-tragos por todas partes dentro de tusfronteras —un wahhabismo que tú pro-

     pagas desde los lugares santos de Ara- bia Saudita como un cáncer quesaldría de tu mismo corazón—, sea

     porque has seguido lo peor de Occi-

    dente, produciendo nacionalismos o produciendo un modernismo que esuna caricatura de la modernidad. Quie-ro hablarte sobre todo de ese desarrollotecnológico sin coherencia con el ar-

    caísmo religioso que convierte a tusriquísimas «élites» del Golfo en víctimascomplacientes con la enfermedadmundial que es el culto al dios dinero.¿Qué tienes hoy de admirable, amigomío? ¿Qué te queda que sea digno desuscitar el respeto de otros pueblosy civilizaciones de la tierra? [...]¿Quiénes son los Mandela, quiénes son

    los Gandhi, quiénes son tus Aung SanSuu Kyi? ¿En dónde están los grandes pensadores cuyos libros deberían serleídos en el mundo entero como en lostiempos en que los matemáticos y losfilósofos árabes eran referentes desde laIndia hasta España?

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    8/36

    6

    2. ¿QUÉ HACER HOY CON LA LEY ISLÁMICA?

    El principal problema que tiene hoy planteado el islam es exactamenteel mismo que contribuyó a su esplendor en la Edad Media: la ley is-

    lámica. Ésta otorgó a la civilización musulmana la estabilidad jurídicaimprescindible para todo desarrollo económico, social y cultural.

    2.1. Ley islámica: clave del éxitodel pasado y corsé del presente

    A diferencia de lo que sucedía en otrosreinos, el hecho de desarrollar una leyde carácter revelado puso freno a la ar- bitrariedad jurídica de toda autocracia.Si Dios había revelado una legislación,el califa, rey o sultán, estaban someti-dos también a ella con el solo (¡aunqueno es poco!) poder de interpretación.

    Por consiguiente, los súbditos del cali-fato, estuviesen de acuerdo o no, sabíanal menos las reglas del juego, y podíanconfiar en que el gobernante no lascambiaría a su antojo. Esta confianzatrajo la estabilidad necesaria para todo progreso económico y de ahí hacia tododesarrollo de las ciencias y las artes.

    Hoy, sin embargo, es su gran li-

    mitación en un mundo que tiene otrascoordenadas. En algunos países aún

    se aplica íntegramente. En la mayoría,sin embargo, solamente es la fuentede la legislación matrimonial y la ins- piración para ciertas leyes del códi-go penal. En Marruecos, por ejemplo,la homosexualidad está penada con lacárcel pero no se condena a muerte. Elabandono del islam y el proselitismo(de una religión distinta de la islámica)están perseguidos pero ya no se mata

     por ello. De igual manera, la lapida-ción de los adúlteros no aparece ya enla legislación.

    2.2. Una ley como «camino» queconduce a la salvación

    Pero ¿qué es la ley islámica? ¡La pri-mera sorpresa es que no se puede ir a

    ninguna librería a comprarla! En ciertosentido, la ley islámica no existe sino

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    9/36

    7

    que es un concepto teórico. Tal comosubrayó el reformista pakistaní FazlurRahman, es preciso distinguir entre leyislámica ( sharía) y códigos jurídicos( fiqh). Lo que en realidad podemos

    tener entre las manos son los códigosespecialmente de los siglos IX-X  queintentaron fijar concretamente esa leydivina revelada. Pero esos códigos¡son ya una interpretación jurídica! yno la ley revelada en sí misma. De ahíque el reformismo islámico clame poruna reapertura de las puertas de la in-terpretación jurídica para volver al Co-rán y elaborar una legislación adaptadaal tiempo presente. En otras palabras:lo que puede ser inmutable es la leyrevelada pero de ninguna manera suconcreción jurídica. Para entendernos:el mandamiento «no matarás» estáen el rango de los principios pero des- pués el Estado debe determinar si hayatenuantes o excepciones, y cuáles sonlos castigos para los que lo infringen.

    Esto nos sitúa en la perspectiva deuna ley islámica concebida como unos principios que los juristas deben dis-cernir para concretar en cada tiempoy lugar. Etimológicamente, la palabra sharía significa «camino que conducea una fuente de agua». De esta mane-ra, la  sharía, más que una ley, es elconjunto de todos aquellos principios

    que debe seguir el creyente para alcan-zar las aguas del paraíso. Las fuentes principales que describen este caminose encuentran primariamente en el Co-rán y en segundo lugar en la Sunna, laTradición del Profeta Muhammad; esdecir, en todo aquel comportamientodel Enviado de Dios que ha sido consi-derado normativo para el musulmán y

    que ha sido puesto por escrito en formade hadices o pequeños relatos.

    Esta distinción entre ley islámica yconcreción jurídica es uno de los pun-tos claves de las corrientes reformistas porque libera al islam de los códigos ju-rídicos medievales incompatibles con

    no pocos Derechos Humanos.Otro de los métodos interpretativosutilizados por los reformistas es anali-zar hacia dónde apunta la intencionali-dad del texto coránico para «seguir laflecha» ascendente de lo que supondríaen nuestros días. Uno de los ideólogosde esta metodología es el tunecino Mo-hammed Talbi. Si el islam, como argu-

    mentan muchos musulmanes, dio máslibertades a la mujer de las que tenía bajo el contexto politeísta, dignificán-dola como persona, significa que hayque seguir ese camino de liberaciónal que apunta.

    2.3. Una ley denitiva que

    sintetiza, deroga y tolera elcristianismo y el judaísmo

    Los intentos de reformismo por legi-timar un islam diferente son encomia- bles pero la corriente fundamentalistatiene demasiados argumentos apa-rentemente válidos. La teología de larevelación de la mayoría sunnita demusulmanes afirma que Muhammad

    es aquel que cierra la revelación legis-lativa, y perfecciona, completa, sin-tetiza y universaliza las revelacionesanteriores. El islam cree que de igualmanera que Dios reveló el Corán aMuhammad, también reveló un Librolegislador a Noé, a Abraham, a Moisésy a Jesús. A medida que la humanidadiba progresando, Dios la iba guiando

    con legislaciones adecuadas a su esta-dio de desarrollo.

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    10/36

    8

    Cuando el islam dice que Dios harevelado a cada gran Profeta una Leyentiende que Dios le ha determinadounos contenidos de fe, unas ciertasnormas morales, una reglamentación

    sobre cómo debe ser adorado Dios, pero también un derecho civil con uncódigo familiar, otro económico, yun derecho penal. El islam consideraque el contenido de fe revelado a cada profeta es idéntico: un solo Dios únicoque se comunica al mundo por mediode ángeles y profetas, y que juzgará acada uno según sus obras en el Día del

    Juicio. El precepto de la oración y el dela limosna también están presentes entodas las revelaciones. Sin embargo, elcómo realizarlos y las concreciones detodo el derecho son, por voluntad divi-na, distintos en cada religión revelada.

    El islam desconoce el concepto deAlianza (que supone un compromisode dos partes, con derechos y deberes

    de ayuda y defensa mutua) pero noel de pacto de vasallaje, de reconoci-miento del señorío de Dios. Dios es elSeñor Único, y el hombre es su siervoo esclavo. Como la humanidad pasa por diversos estadios, requiere de di-versas legislaciones. Por ello, para unmusulmán, el judaísmo y el cristianis-mo son religiones también divinas (al

    menos en su forma originaria).Uno de los principales padres de la

    corriente reformista fue el egipcio Mu-hammad ́ Abduh. Según él, Dios revelóa Moisés la Torah con la imagen de unDios severo y con gran profusión denormas porque era lo más adecuado pa-ra el estadio de infancia de la humani-dad. Cuando ésta llegó al estadio de la

    adolescencia, Dios envió a Jesús con elEvangelio, con el subrayado del amor y

    con la supresión de la gran mayoría denormas judías. Con el paso del tiempo,la humanidad llegó a la madurez y Diosreveló una nueva religión sintética y su- peradora de las anteriores. Igual que el

    hombre maduro recupera lo mejor de suinfancia después de haberlo rechazadoen la adolescencia, el islam recuperó lanormatividad del judaísmo, haciéndo-la menos severa, e integrando el amorcristiano en forma de misericordia. Lacontraposición entre el Dios severo y elDios amoroso encuentra la síntesis enel Dios justo y misericordioso del islamsegún Muhammad ´Abduh. Sin duda,un judío podría replicar que el concep-to de rahma, entrañas (femeninas) demisericordia es plenamente judío, y uncristiano protestaría al ver reducido elmandamiento del amor a un amor ado-lescente, básicamente autocentrado; pe-ro lo que importa aquí es entender queel musulmán considera que su religiónes menos legalista e impositiva que la

     judía y que evita el laxismo cristiano.La clave legalista (no necesaria-

    mente entendida de manera peyorati-va) es fundamental para comprenderel islam actual. Los judíos deberíanhaberse convertido al cristianismo alaparecer éste, y los cristianos deberíanhaber reconocido al último Enviadoal aparecer Muhammad. Igual que en

    un Estado no tiene sentido que alguienquiera regirse por un código penal de-rogado por su última reforma, el islamno entiende que un cristiano o un judíono abracen el islam. Sin embargo, porrespeto a Moisés y a Jesús, la mismaley islámica otorga a cristianos, judíosy zoroastras un estatuto de proteccióna cambio de un impuesto, con expresa

     prohibición de imponer la conversión, pero con elementos de total someti-

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    11/36

    9

    miento y humillación. De ahí que enun Estado islámico tradicional puedahaber tolerancia religiosa pero no liber-tad religiosa. En realidad, el islam nohizo más que adoptar una legislación

    hacia las minorías religiosas similar a laque el mundo bizantino tenía hacia el judaísmo. Igual que en el caso de otrasdisposiciones legales, estas prescripcio-nes de la ley islámica no suelen apli-carse más que en algunos países. En elresto pervive «solo» una cierta inferio-ridad legal y discriminaciones tácitas.

    ¿Qué autoridad tiene

    el hombre para «inventar»

    una nueva ley adaptada al

    siglo xxi?

    Planteadas así las cosas, es com-

     prensible el poder de la tentación isla-mista que se presenta como «verdade-ro» islam original. ¿Cuál es su lógica?Si Muhammad viene a traer la últimaley definitiva, ¿qué autoridad tiene elhombre para «inventar» una nueva leyadaptada al siglo XXI? Porque, en el ca-so de que sea necesaria una nueva leyeso significaría que Muhammad no se-

    ría en realidad el último de los profetasni el Corán el Libro definitivo. Anteeste argumento, ¿cómo ganar la parti-da al fundamentalismo?

    2.4. Revelación legislativa

    cerrada pero interpretación jurídica abierta

    Si la ley de Muhammad es la definitiva,si Dios ya no va a revelar ninguna ley

    nueva y si toda novedad jurídica (bi-da´ ) está condenada, no queda más ca-mino que la interpretación jurídica. Esdecir, el Corán, aunque algunos de susversículos tienen género literario jurí-

    dico (como la mayor parte de la Sura4, sobre las mujeres), es en su mayoríaun libro de tipo sapiencial-exhortativo.Por ello, para elaborar una legislacióna partir de él es necesario un esfuerzo jurídico interpretativo (ijtihâd ). Igual-mente, los hadices o relatos sobre el profeta Muhammad requieren de esteesfuerzo que traduzca en disposiciones

    concretas los relatos de las prohibicio-nes o recomendaciones del Profeta.Porque  stricto senso, decir que algoque prohibió Muhammad debe conti-nuar prohibiéndose en otros contextoses ya una interpretación jurídica.

    Este esfuerzo jurídico se llevó a ca- bo básicamente entre los siglos IX-X pe-ro se alargó aun uno o dos más. Dio pie

    a numerosas escuelas jurídicas que to-maban el Corán y los hadices para con-cretarlos en códigos jurídicos. Cuandose dice que un país ha impuesto la leyislámica se está diciendo en realidadque ha impuesto el código jurídico dealguna de las escuelas de estos siglos,incluso la  salafí medieval, que creeque no interpreta sino que toma en to-

    tal pureza el material originario.Debido a la profusión de escuelasy a las discusiones entre ellas, el islamdecidió limitar a cuatro las escuelasoficiales. De esta manera, el islam secierra definitivamente a toda innova-ción jurídica y se condena a un «eternoretorno» de lo mismo.

    Hoy, el reformismo del mundo sun-

    nita, clama por volver a abrir la puertade la interpretación jurídica.

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    12/36

    10

    3. EL ISLAM, UN MUNDO PLURAL

     Aunque las interpretaciones literalista y descontextualizadora siemprehan existido, el fundamentalismo islámico actual tiene rasgos moder -

    nos. Se fundamenta, es cierto, en autores medievales como Ibn Hanbalo Ibn Taymiyya que, rechazando lo que llaman especulaciones de larazón, deenden volver al Corán sin elucubrar, tomándolo tal cual.

    3.1. El salasmo fundamentalista

    Pero el salafismo moderno aparece ante

    la constatación de la deplorable situa-ción de subyugación de los países islá-micos a las potencias occidentales y a latoma de consciencia de la distancia en-tre el islam actual y el de los orígenes.

    «Salaf » significa ancestro o ante- pasado en árabe. Los fundamentalistasmusulmanes son aquellos que inter- pretan negativamente la evolución del

    islam, consideran que se ha apartadoilícitamente de los orígenes, y que es preciso volver a la religión de la comu-nidad contemporánea de Muhammad.Se trata de una corriente neurótica-obsesiva porque pretende copiar cadadetalle del comportamiento del Profe-ta, hasta lo mínimo incluso en las co-sas más prosaicas. Las estadísticas de

    opinión entre la comunidad musulma-na sobre temas como la poligamia, la

    lapidación etc., sitúan a un 10-15% demusulmanes de España o Francia como

    cercanos a esta corriente. Y es que, a priori, ¿cómo negar que es loable que-rer asemejarse a la primera comunidadde creyentes?

    Salafismo no es sinónimo de terro-rismo aunque puedan en él surgir indi-viduos que den este paso. La mayoríade los salafís son simplemente pietistasultraconservadores que predican la ne-

    cesidad de mantenerse alejados de to-da occidentalización. Una buena partede ellos son apolíticos en la medidaen que sitúan su prioridad en la isla-mización estricta de los musulmanesdesviados, laxos o pecadores. De igualmanera, condenan sin reservas el islamtradicional (progresivamente alejadodel origen) y el islam  sufí   o místico

     por sus influencias, que ven como ani-mistas o cristianas. En definitiva, el is-

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    13/36

    11

    lam mayoritario es su primer enemigo precisamente por ser un islam pietistay por condenar la democracia. Se de-sinteresan por la política y renuncian aentrar en el juego electoral en los casos

    que sería posible hacerlo.En algunos casos, el salafismo seconvierte en «salafismo político» en lamedida en que pasa a buscar el poderincluso por vías «ilícitas» como la de-mocracia, para suprimirla, por supues-to. Es el caso del partido salafí que se presentó a las elecciones egipcias des- pués de la caída de Mubarak.

    Finalmente existe la corriente delsalafismo yihadista, aquella que decideintervenir en lo político con aquel sen-timiento de urgencia que legitima laviolencia para conseguir sus objetivos.

    El principal exportador de ideolo-gía salafí es Arabia Saudí. Por temora que se vuelva en su contra, defiendelos salafismos apolíticos aunque los

     produce como hijos no deseados, co-mo al-Qaeda de Bin Laden.

    3.2. El tradicionalismo

    Para entender el islam actual tambiénhay que hablar de las posturas tradicio-nalistas. No es que exista propiamenteuna corriente estructurada que se auto-

    denomine así, sino que es un conceptonecesario para entender el surgimientotanto del salafismo como del reformis-mo. En toda religión (¡y en toda cul-tura!) encontramos posturas tradicio-nalistas que buscan la supervivenciaen el tiempo de ritos y costumbres quese consideran como definidores de suidentidad. La reacción tanto salafí co-

    mo reformista consiste precisamenteen denunciar al tradicionalismo como

    tergiversador paulatino de la pureza delos orígenes. Algunas tradiciones, pro-hibiciones o licitudes que se reclamancomo importantes o incluso esencialesal islam, se descubren como produc-

    to de la historia. Salafís y reformistasquieren ambos, aunque con resultadosdistintos, devolver la pureza al islam.Los primeros denuncian cualquier in-novación y los segundos la pérdida deracionalidad en la fe de los fieles. És-tos critican las supersticiones del pue- blo sencillo y las influencias animistasy paganas en el islam de ciertos países.

    En algunas ocasiones, mujeres re-formistas (e incluso salafís) dicen de-fender a la mujer al denunciar el olvidode ciertas compensaciones que para lamujer tenía la estricta ley islámica.

    3.3. El reformismo

    La corriente reformista (islâh) surge

     principalmente en Egipto, a finales delsiglo XX. Nace a raíz de la constataciónde que el islam ha perdido el dominiodel mundo y ha pasado a ser colonizado por Occidente. La respuesta de Muham-mad ´Abduh fue: el islam ha perdidola ciencia y la razón, y Occidente, alasumirla y desarrollarla a partir de lamodernidad, se hace heredera y supe-radora del islam. Según se cuenta, es-te autor, a su regreso de una estanciaen Francia declaró: «En Occidente hevisto el islam sin encontrar a musulma-nes; en nuestra casa veo a musulmanes pero no encuentro el islam». Este islameuropeo sin musulmanes era la cienciay la razón. ´Abduh contribuyó a difun-dir aquella interpretación de la historiasegún la cual la muerte de Averroes

    (m. 1198) y la quema previa de suslibros por el Califa andalusí significa-

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    14/36

    12

     ban simbólicamente la sentencia deldeclive musulmán; y la influencia deeste autor en la Universidad de Paríssuponía el comienzo del desarrollo deOccidente. Este retorno a la ciencia y

    a la razón se ha concretado durante lossiglos XX-XXI más bien en una acogidaincondicional de la técnica combina-da con una cultura con mentalidad del pasado. La esquizofrenia de los paísesdel Golfo es flagrante.

    La otra concreción de esta corrien-te de retorno a la ciencia son todos losestudios contemporáneos apologéticos

    que diseccionan minuciosamente ca-da versículo del Corán buscando pro-fecías de descubrimientos científicosmodernos: la invención de la bombilla,el descubrimiento de que la Tierra estáachatada por los polos, del  Big Bang ,etc. La literatura es hoy muy amplia.

    Probablemente, la corriente mássignificativa del reformismo sea la co-fradía de los Hermanos Musulmanesfundada también en Egipto por Has-san al-Banna, aunque en la prácticaésta sea mucho más conservadora queel espíritu que guió a M.´Abduh. Éstedenominó su proyecto inspirado en la Reforma protestante. Igual que Luteroquería volver a la  sola Scriptura  re-chazando todo aquello de la Tradiciónde la Iglesia que no quedaba explícita-

    mente fundamentado en la Biblia, de lamisma manera M.´Abduh quería man-tener exclusivamente el Corán comoLibro normativo. Hemos visto cómolas fuentes de la Ley islámica son el Li- bro sagrado y la Sunna. Pues bien, esteautor reformista lanzó la duda hacia to-do este corpus textual de hadices consi-derándolo dudoso. De hecho, sabemos

    que esta literatura que narra la histo-ria de los primeros tiempos del islam

    fue escrita en el siglo IX, reclamandosu autenticidad a partir de una cadena«sana» de transmisores de los relatos.Ante el alud de miles y miles de relatosy frases atribuidas al Profeta, y ante la

    sospecha de que no pocos eran creados por personajes que querían añadir au-toridad a sus opiniones, el islam, desdemuy pronto, elaboró una «ciencia delos hadices» para analizar su conteni-do. Además, verificaba la integridadde vida de la cadena de transmisoresque presuntamente habían transmitidooralmente el relato desde el testimonioocular hasta el momento de ser pues-to por escrito. El islam canonizó sieterecopilaciones de hadices considerán-dolos auténticos. Muhammad ´Abduhlanzó también la sospecha sobre estasrecopilaciones. Sin embargo, pocosautores musulmanes reformistas le si-guieron en una sospecha tan genera-lizada. La utilización de métodos decrítica moderna sobre este corpus detextos está todavía por hacer. Fijémo-nos en las consecuencias concretas que para la ley islámica podría tener. Dadoque una gran parte de la normativa notiene apoyo coránico sino solamentedel corpus de hadices, lanzar la dudasobre éstos significa poner en duda unagran parte de la ley islámica.

    El reformismo clama

    por una reapertura de

    la interpretación jurídica.

    El reformismo clama por una re-apertura de la interpretación jurídica

    creadora de nuevas leyes para el mun-do de hoy, basándose en la distinción

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    15/36

    13

    entre la  sharía (Ley islámica) como principios revelados y el fiqh (códigos jurídicos) como creación interpretativahumana. Esta distinción es su gran ba-za para su lucha contra el salafismo. Si

    éste parece convencer a muchos mu-sulmanes por su «aparente» verdad, elreformismo puede decir: «una cosa esque Dios haya revelado una Ley defi-nitiva e inmutable y otra que las con-creciones jurídicas ( fiqh) elaboradas por un esfuerzo interpretativo humanolo sean».

    Pongamos un ejemplo: En el caso

    de adulterio, la ley islámica clásicadetermina la lapidación para el hom- bre y la mujer que tienen relacionesextra-maritales, y la flagelación si noestán casados (un joven, un divorcia-do, un viudo, etc.). Para castigar conuna sentencia tan extrema se precisade cuatro testimonios oculares, algoextremadamente difícil de conseguir.

    Desgraciadamente la tradición ha aca- bado en algunos países lapidando casiexclusivamente a la mujer, considerán-dola incluso culpable cuando es viola-da después de haberse quedado a solasen algún lugar alejado. Un salafí puedereaccionar en este caso exigiendo laigualdad que el derecho impone, la la- pidación de ambos.

    El reformista, en cambio, analizalos siguientes elementos: La lapida-ción no aparece en el Corán, Muham-mad ordenó lapidar tanto a hombrescomo a mujeres, pero no lo hizo segúnlos hadices en más de cinco ocasiones.Además, en varias de ellas no hizo másque aplicar a los adúlteros judíos la pena impuesta por su propia ley judía.

    Por tanto, el reformista concluye, da-da la escasez de casos y la dificultad

    de encontrar cuatro testimonios, quela pena de lapidación está formulada por Dios para denunciar su gravedady no para que sea aplicada. Algunosreformistas (Mohammed Diakho, por

    ejemplo) van más allá, y analizan elhecho extraño de que la lapidaciónno aparezca en el Corán y sin embar-go Muhammad haya ordenado lapidaren varias ocasiones. Concluyen que es probable que el Profeta haya aplicadola ley judía hasta el momento en el queel versículo coránico le es revelado. Deesta manera, la lapidación habría que-

    dado abrogada por el Corán y debería prohibirse en el islam... instituyéndosela flagelación.

    3.4. El reformismo modernista

    El número de musulmanes implicadosactivamente en la corriente reformistao aquellos que están convencidos de

    que es necesaria una reforma del is-lam es inmenso. En India y Pakistánson especialmente activos, además deEgipto, Túnez...

    Todavía existe otra corriente de pensamiento que busca la reforma delislam pero desde otro punto focal: lamodernidad, la democracia y los De-rechos Humanos. Por eso, podemos

    denominar a esta corriente «modernis-mo» islámico.El punto focal del reformismo es

    la fidelidad a la revelación. Por ello, elreformismo se mantiene perfectamen-te dentro de la «ortodoxia». Quiere re-formar, además, con el objetivo de sermás fiel al origen, y conseguir así un«renacimiento», «despertar» o nuevo

    «florecimiento» del islam en el mundo.De ahí el nombre del partido tunecino

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    16/36

    14

    cercano a los Hermanos Musulmanes: Ennahda (=renacimiento).

    En cambio, el punto focal del re-formismo modernista es la necesidadde vivir la religión bajo el imperativo

    de los Derechos Humanos. En muchos puntos, los dos reformismos coinciden pero en otros el modernismo es criti-cado por los primeros de «forzar» lostextos antiguos para hacerlos compati- bles con el mundo moderno occidental.Dentro de este islam encontramos unverdadero movimiento feminista e in-cluso un reconocimiento sin fisuras de

    la homosexualidad. En su argumenta-ción salen a la luz reinterpretaciones dela creación, como el hecho de que Diosno creó primero al varón y extrajo de éla la mujer, sino que Dios creó la unidadhumana en el mundo, como reflejo desu Unidad, y la disoció en varón y mu- jer. Asimismo, el pecado del pueblo deLot es denunciado no como pecado de

    sodomía sino de violación del huésped.Lógicamente, el modernismo ha deir más allá de la interpretación basadaen «la intención del autor». Necesitade una hermenéutica que conciba la in-terpretación como «fusión de horizon-tes» del autor del texto y del lector, dis-tanciados por siglos de historia que seencuentran proyectándose mutuamen-

    te, el uno hacia el otro. El egipcio exi-liado Nasr Hamid Abu Zayd asegurabaexpresamente la necesidad de adoptaresta hermenéutica de Gadamer.

    En esta corriente desaparece la pro-hibición de la innovación (bida´ ) jurí-dica mantenida aún por el reformismo puesto que opinan que si el islam llegóa crear un imperio fue precisamente

     por su capacidad de innovar y adoptarlo mejor del mundo bizantino y persa.

    3.5. El susmo: el espírituvivicador 

    Aunque situado en otro plano, es pre-ciso no olvidarnos de otra corrientedel islam, el sufismo. A veces llamado

    «mística del islam», el sufismo es unaespiritualidad esotérica que nace en elcruce de caminos entre el mundo islá-mico, persa, cristiano y helénico neo- platónico. La cábala judía compartegran parte de sus coordenadas.

    El sufismo quiere ser

    «el corazón del islam».

    El sufismo quiere ser «el corazóndel islam». Igual que un cuerpo mue-re sin corazón, el sufismo pretende darvida y espíritu al islam superficial, ri-tualista y literalista. El sufismo supone

     ponerse bajo la tutela de un maestroespiritual ( sheij) poseedor del conoci-miento de lo oculto para que le guíe ensu camino de ascensión espiritual.

    Estrictamente, los musulmanes que pertenecen a una cofradía, en esta re-lación de maestro-discípulo, son rela-tivamente pocos. Pero el número de personas que simpatizan con esta es-

     piritualidad supone una importanteminoría, que llega a ser mayoritaria en países del África subsahariana comoSenegal. Arabia Saudí, y en general to-do el salafismo, les persiguen tachán-doles de herejes. El reformismo, por su parte, les mira con cierto recelo por laheterodoxia de algunas de sus posturasy por la necesaria purificación de algu-

    nas de sus prácticas rituales, como lautilización de drogas en algunos gru-

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    17/36

    15

     pos de extremo-Oriente para llegar aléxtasis. Ciertos países, como Marrue-cos, potencian el sufismo moderado,reformado y apolítico como programade lucha contra el salafismo.

    Más allá de los excesos que estosgrupos puedan haber desarrollado enla historia, la literatura mística sufí esun verdadero patrimonio espiritual dela humanidad, por su belleza estética,su profundidad y la paz que produce enel alma. Aquí, la profesión de fe «nohay otro dios fuera de Dios» se con-vierte en «no hay Otro fuera de Dios».

    La pasión por la unidad del islam esllevada aquí a sus últimas consecuen-cias. Toda afirmación de la existenciade algo fuera de Dios, toda considera-ción de que algo tiene entidad fuera deDios implica un cierto grado de «aso-ciacionismo» o politeísmo. Más queun panteísmo el sufismo es un pan-en-teísmo: todo está en Dios. Para el sufí,el Dios invisible y oculto se despliega,aparece y se «teofaniza» en las criatu-ras. El mundo es el aparecer de Dios, pero solo puede aparecer velándose,cubriéndose. Como la luz del sol quesolo puede ser vista a través de gruesosvelos, la infinita claridad de Dios so-lo puede ser vista a través de los velos

    que son los cuerpos de las criaturas.El mito platónico de la caverna siguesiendo plenamente válido en el sufis-mo. Podemos comprender el porquéde los recelos de muchos musulmaneshacia el sufismo: ¿hacer del Hombre la

    manifestación de Dios no contradice latrascendencia de Dios?

    A pesar de todo ello, el sufismose reclama enteramente islámico. Ibn´Arabi (m. 1240) aclaraba que él no

    era encarnacionista y que la criatura semantiene siempre en el rango de siervoo esclavo (´abd ) y Dios no deja nuncade ser el Señor ( Rabb). Para el sufis-mo, la criatura manifiesta a Dios por-que se «reviste» de sus atributos. Peroel vestido nunca afecta a la esencia. Enrealidad, no es solo que Dios «aparez-ca» humanizado sino que el hombre

    «aparece» divinizado, revestido de susatributos divinos. Sin ese vestido, elhombre (como tampoco el fantasmasin la sábana) no aparecería, porque elhombre, en sí mismo, es pura nada. So-lo es algo en tanto que es Dios.

    El camino del místico es un cami-no de ascensión espiritual siguiendolos pasos del viaje nocturno del Pro-

    feta. Es un viaje que es tanto gnóstico(aumento de conocimiento profundo)como transformante. El sufí va con-virtiéndose poco a poco en lo que yaes, dejando aflorar hacia el exterior suesencia oculta. Si toda creatura es unaparecer de alguna cualidad divina, eldiscípulo va descubriendo con ayudadel maestro cuál es la esencia de su

    alma, y descubriéndola, va dejando deestar solo en lo profundo para hacer-se visible en las actitudes y obras deldiscípulo. Aquel cuya esencia es ElMisericordioso acaba irradiando todoél misericordia.

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    18/36

    16

    4. EL GRAN CISMA: SUNNISMO Y CHIISMO

    Toda esta presentación de las corrientes del islam sunnita nos aleja dela idea de una religión monolítica, supercial, ritualista y estática desde

    el Medioevo. La profundidad de las discusiones es algo insospechadopara muchos occidentales.

    4.1. El conicto por el líderpolítico-religioso

    Sin embargo, nos queda aún por pre-sentar la contraposición entre el mun-do sunnita y el chiita. El islam, como elcristianismo, tiene además de corrien-

    tes de pensamiento y espiritualidades,divisiones doctrinales suficientementeimportantes como para escindirlo enconfesiones distintas. Tres confesiones principales definen el mundo islámico:el sunnismo, el chiismo y el jariyis-mo (o ibadismo). Según la tradición,la disputa que fracturó la comunidadcomenzó nada más morir Muhammad

    (m. 632) por discrepancias sobre el quedebía liderar la comunidad y estalló

    tras el asesinato del cuarto Califa. Los jariyitas sostenían que el Califa debíaser uno de los más santos y virtuososde la comunidad, mientras que el chiis-mo defendía que debía pertenecer a lafamilia del Profeta. Alí reclamaba para

    sí esta dignidad por ser su primo, porhaberse casado con su hija y porque,según el chiismo, Muhammad le habíadesignado sucesor. El sunnismo, encambio, defendía la manera tradicionalárabe pre-islámica para nombrar al lí-der de la comunidad consistente en unintento de consenso entre los líderes delas tribus. En realidad la historia de es-

    te período está todavía por revisar demanera crítica.

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    19/36

     persa. Por tanto, el chiismo podría seren realidad el resultado de la incultura-ción del islam en una región con cul-tura milenaria y con dos importantesreligiones: el zoroastrismo y el mani-

    queísmo.

    El chiismo

    es la inculturación

    del islam en Persia.

    De hecho, el chiismo primitivo tie-ne muchos de los elementos que hemosmencionado a propósito del sufismo.Concibe toda la realidad de manera bi- polar, con una dimensión oculta y unaaparente, una invisible y otra visible,esotérica y exotérica, profunda y su- perficial, interior y exterior, espiritualy material..., es decir, una sola realidad

    con dos dimensiones, como una mone-da con dos caras, una mirando hacia loceleste y la otra hacia lo terrestre.

    La dimensión oculta de la realidades inaccesible a la mayoría de la gente.Se requiere una iluminación especialdel intelecto, un don concedido a unaélite espiritual, que permite atravesarla superficialidad de la realidad para

    llegar a lo más profundo. En el sufismoeste «gnóstico» es el santo, que en mu-chos casos coincide con el guía espiri-tual de la cofradía. Éste conoce el almadel discípulo mejor que el discípulomismo. En el caso del chiismo, el querecibe este don es llamado Imán (¡ano confundir con el simple guía de laoración del islam sunnita!). La ilumi-

    nación la recibe de una Luz divina queva siendo transmitida de generación en

    En cualquier caso, la historiografíamusulmana sitúa la fractura a partir delasesinato de Uthman (m. 656), el ter-cer califa. Alí fue acusado por Aisha,viuda de Muhammad, y por el gober-

    nador de Siria, Muawiya, de este asesi-nato. Aunque consiguió ser nombradocuarto califa, al no ser reconocido poréstos y estallar la guerra, se retiró pa-cíficamente a su ciudad. Esto hizo queél y su hijo Hasan fuesen asesinados(m. 661) por algunos partidarios suyosque le exigían la confrontación totalcon Muawiya. Ésta acabó producién-

    dose en la batalla de Kerbala (m. 680)donde morirá Husein, el segundo hijo,y cuyo recuerdo aún hoy se celebra demanera sangrienta en la fiesta principaldel chiismo. A partir de este momento,los partidarios de Alí, los chiitas, ten-drán que vivir en la ocultación.

    4.2. El esoterismo místico chiitaprimitivo

    El recuerdo de esta confrontación y la persecución del chiismo por parte delos califas omeyas de Damasco toda-vía alimentan las tensiones de hoy. Sinembargo, se hace difícil pensar que és-tas hayan sido causadas solamente por pretensiones de poder sin trasfondo

    ideológico, cultural o religioso. Si nosfijamos en la zona de influencia chiitaveremos que coincide con las zonas dedominio del antiguo imperio persa. Essintomático y sorprendente que, ade-más, Irán haya conservado la lengua persa a pesar de haber sido islamizadatan pronto. Además, el chiismo recla-mó su autoridad en Persia mediante un

    relato que aseguraba el matrimonio delhijo de Alí con la hija del último rey

    17

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    20/36

    carácter clerical y que este estamentotiene la potestad de crear jurispruden-cia, puesto que también recibe las visi-taciones del ángel Gabriel.

    4.3. Un Estado chiita, ¿traición alos orígenes?

    Así como el islam sunnita está atrave-sado por corrientes de pensamiento di-ferentes, tal como hemos visto, tambiénel chiismo vive debates intensos en suinterior. El más importante está ligadoa la forma política del chiismo que se

    vive en Irán. Ésta, además de la marca propia dejada por la Revolución de Jo-meini, tiene su origen en 1501 cuandola dinastía safavida estableció el chiis-mo duodecimano como religión oficialde Irán. De esta manera, supuso un fre-no oriental al poder Otomano que yadominaba gran parte del Mediterráneo.Muchos chiitas, sin embargo, interpre-

    taron esta identificación de lo religiosoy lo político como una traición a sus propios orígenes. La comunidad chiitatuvo que vivir los primeros siglos uti-lizando la taqiyya o disimulación, sin poder manifestar su adhesión a estaconfesión. Viviendo en la ocultaciónse identificó a sí misma como el almadel islam (¡el sufismo dirá de sí mismo

    que es el corazón del islam!) frente almundo sunnita que vivía en la superfi-cialidad, en el sentido de visibilidad yen el sentido superficialidad literalista.El chiismo, además, decretó la prohi- bición para sus miembros de ejercercargos políticos porque eso significabavivir en lo visible y porque significabacolaborar con el perseguidor. Lógica-

    mente, al finalizar las persecuciones,esta prohibición carecía ya de sentido

    generación, a modo de tradición, deImán en Imán desde el Adán de Luz,que es imagen visible del Dios invisi- ble. A este Adán, el judaísmo le llamaAdán celeste, el sufismo Realidad de

    Muhammad, y el arrianismo cristianolo identificaba con el Logos.Si todo tiene dos dimensiones, tam-

     bién la revelación coránica y toda re-velación. Para el chiismo, cuando Diosrevela a Moisés el texto de la Torah,también revela a un Imam (que iden-tifican con Aaron) el sentido oculto dela Ley. Cuando Dios revela a Jesús el

    Evangelio, revela a Juan Bautista o aSan Pedro (según las tradiciones chii-tas) el contenido esotérico de este li- bro. Finalmente el Corán es entregadoa Muhammad y Alí recibe su sentido.

    Uno de los muchos grupos surgidosen el seno del chiismo llevó esta filoso-fía a sus últimas consecuencias: Si Alírecibe lo oculto y Muhammad el texto,

    y si lo oculto es la esencia y la literali-dad la apariencia, significa que Alí essuperior a Muhammad. Incluso, por la presencia de la Luz divina en el ser hu-mano, llegó a hablarse de inhabitaciónde Dios en esta élite espiritual. ¡Pode-mos comprender por qué este chiismofue condenado por el sunnismo!

    En cualquier caso, Alí transmitió su

    Luz a sus hijos, inaugurando una cade-na de transmisión hasta siete (para loschiitas septimanes ismailíes) e inclu-so doce generaciones (para los chiitasduodecimanes). El último Imán desa- pareció en vida, no dejó descendencia,y debe reaparecer al final de la historia junto a Jesús como una figura mesiáni-ca. Es el llamado Mahdi.

    Lo más determinante de esta teo-logía es que confiere al chiismo un

    18

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    21/36

    ha seguido una formación y, en algunoscasos, ha acabado la carrera universi-taria de Derecho islámico. Pero no esuna persona «sagrada» ni tiene ninguna participación especial de la divinidad.

    Simplemente ejerce una función. Elimán sunnita puede serlo durante untiempo y después cambiar de trabajo.

    Los países islámicos tienen todosun Ministerio de asuntos religiososque, además de regular la práctica reli-giosa, contrata imanes como funciona-rios para atender a las mezquitas públi-cas. Progresivamente, y para evitar la

     propagación del radicalismo islámico,muchos países (como Marruecos) hanseguido una política de cierre de mez-quitas privadas. En Turquía, cualquier particular puede financiar la construc-ción de una mezquita privada pero losimanes deben salir de la Facultad pú- blica de teología islámica.

    El islam sunnita representa cerca

    del 85-90% de musulmanes del mun-do. El ibadismo solamente es signifi-cativo en Omán. El resto, son chiitas.El chiismo mayoritario es el de Irán,Irak y Líbano (Hezbolá) pero hay ungran número de grupos escindidos deltronco principal: ismailíes del AghaKhan, zaydíes del Yemen, alauíes deSiria, alevíes de Turquía y drusos del

    Líbano. Estos dos últimos compartenya pocos elementos esenciales con elresto de musulmanes.

     pero la estricta identificación con unRégimen como el de Irán actual es vi-vido como infidelidad a sus raíces poralgunos.

    El chiismo prohibió

    asumir cargos políticos.

    Por otra parte, a pesar del conserva-durismo de gran parte de la sociedad,la unión del clericalismo con lo políti-co está generando en muchos jóvenesuna aversión a la religión comparadacon la que se vivió en España duranteel franquismo.

    4.4. Clericalismo chiita frente al

    secularismo sunnita

     No tiene sentido preguntarse si el chiis-

    mo es más abierto y tolerante que elsunnismo, como tampoco puede obte-nerse respuesta si la pregunta se lanzahacia el binomio catolicismo-protestan-tismo. Pero, aunque simplificando, eslícito decir que el chiismo es más cató-lico y el sunnismo más protestante. Esteúltimo tiene líderes religiosos pero noclérigos. El imán sunnita, el que dirige

    las oraciones en una mezquita, es sim- plemente una persona que conoce me- jor los fundamentos del islam porque

    19

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    22/36

    Desgraciadamente el grito de Allâh-u Akbar  ha sido pervertido porsu utilización como grito de guerra. Loutilizan las masas encolerizadas cuan-do se sienten ofendidas, lo utilizan losyihadistas, y lo utilizaron en el pasado para derribar los muros de Constan-tinopla. La utilización del nombre deDios en vano para cometer un atenta-

    do debería ser considerado mucho másofensivo que unas simples caricaturas.Un atentado enarbolando el Corán de- bería ser recibido como una blasfemiamucho mayor que la de un loco pastoramericano quemando un Corán, por-que si hay alguien que reduce la ima-gen de Dios a su propia ideología es elterrorista.

    A este Dios trascendente se le atri- buyen todas las perfecciones que la

    20

    5. LA MÍSTICA DEL ISLAM COTIDIANO

     A pesar de las divisiones, todos los musulmanes comparten unos pila-res básicos en los que pueden reconocerse.

    5.1. «Hacia el Uno convergentodas las miradas»

    El primero de ellos es la profesión defe en la unicidad de Dios y en el carác-ter de Muhammad como último profe-ta legislador. La exclamación « Allâh-u Akbar » tan repetida determina un mo-noteísmo alejado de todo antropomor-fismo. No debería traducirse simple-

    mente como «Dios es el más grande»(que se diría: «Allâh-u al-Akbar») sinocomo «Dios es (siempre) más grande.Se trata exactamente del «Deus sempermaior» de la tradición latina. Dios estásiempre por encima de cualquier ima-gen que podamos hacernos de Él. Porello, el islam prohíbe las imágenes deDios, aunque no llega al extremo ico-

    noclasta del budismo originario de pro-hibir incluso sus imágenes mentales.

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    23/36

     precisamente por esta experiencia decomunión universal todavía en tiem- pos de separación de razas en EEUU.Malcom X confirma esta razón de suconversión al ver en la Meca todas las

    razas reunidas.

    5.2. Como monjes en la vidacotidiana

    El segundo pilar del islam es la oración( salat ) cinco veces al día. Se trata deuna oración ritual, no de una simplemeditación. Tiene sus estrictas condi-

    ciones de validez como cualquier sa-cramento cristiano. Por ello, cuando ungrupo organiza una «oración interreli-giosa», los musulmanes nunca lo tra-ducen al árabe como «salat». Lo máshabitual es que digan «liqâ’» (encuen-tro) aunque lo más correcto sería utili-zar «dhikr» (invocación o recuerdo deDios) o «ta´ammul» (meditación).

    La ciudad musulmana

    parece un inmenso

    monasterio.

    El hecho de rezar al alba, a medio-

    día, a media tarde, en la puesta del soly de noche, ofrece al musulmán la ex- periencia de una vida completamenteentregada a Dios. El Dios Uno unificatambién todo el día sin distinguir lo profano de lo sagrado, igual que unifi-ca la esfera social sin distinguir lo po-lítico de lo religioso. La vida políticaes también vida religiosa y por ello la

    ley islámica afecta también a esta di-mensión. Cuando una sociedad vive

    21

    filosofía griega pudo imaginar descar-tando toda limitación. El Dios musul-mán podría ser distante y ausente, y sinembargo es un Dios «que todo lo ve» yun Dios que está «más cerca del hom-

     bre que su vena yugular». Es un Diosque bien podrían aplicársele aquellosdos calificativos de la mística de sanAgustín: « Intimior intimo meo et supe-rior summo meo», «más íntimo que mi propia intimidad, y superior a mi pro- pia altura». Dios sobrepasa a la criatu-ra por encima y por dentro pero nuncaestá al mismo nivel. El islam denuncia

     precisamente el «Dios-con-nosotros»cristiano. Por ello, solamente el sufis-mo ha desarrollado místicas unitivas yesponsales con Dios.

    Eso no significa que el islam no pueda vivirse con mística. Al contra-rio. Más allá de la imagen juridicis-ta, el islam desarrolla una mística delofrecimiento y la entrega absoluta a

    Dios. Sin duda, cualquier «absoluto»ha de ser discernido para no caer en to-talitarismos, pero el islam es capaz degenerar enormes generosidades en loscreyentes. Es la pasión por el Uno, yésta consigue aunar a la comunidad. Larepresentación de la oración del vier-nes, con todos los creyentes mirandohacia un mismo punto focal e inclinán-

    dose a la vez genera un sentimiento decomunión único. De la misma manera,el encuentro de tres millones de mu-sulmanes en la celebración anual dela peregrinación a la Meca, es, aunquesea solamente desde un punto de vistaantropológico, una experiencia de unafuerza sin igual. Aunque el racismo ha-ya existido también en el mundo árabe,

    el movimiento norteamericano de con-versos africanos,  Nation islam, surgió

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    24/36

    sobre los beneficios económicos delmusulmán durante el año.

    5.4. El ayuno de todo para

    llenarse del CoránEl cuarto pilar es el ayuno ( sawm) delmes de Ramadán, un ayuno total decomida y agua desde la salida del solhasta el ocaso. A pesar de haberse ins- pirado en el estricto ayuno cuaresmaloriental, teológica y antropológica-mente equivale a la Navidad cristia-na. La tradición sitúa en este mes el

    descenso del Corán. El creyente debeayunar de todo lo que no es Él parallenarse de su Palabra. Los compañe-ros del Profeta decían que parecía unCorán viviente. El ayuno para recibirel Corán del cielo es el equivalenteal gesto de diversos profetas del An-tiguo Testamento que deben comerseel Libro. Cristianamente, esto significa

    cristificarse acogiendo el descenso dela Palabra, Jesús.

    El Ramadán equivale a

    la Navidad cristiana.

    La fiesta familiar de la Navidad,la decoración de las calles iluminadasy el espíritu de generosidad se vivenigualmente durante este mes. Los es-crúpulos, sin embargo, llevan a mu-chos musulmanes a considerar que lamínima introducción de líquido en elcuerpo, como un colirio para los ojoso un enjuague bucal, rompe el ayuno.

    La vida social cambia los horariosdurante este mes, y cuando es posible,

    enteramente este ritmo de oración, laciudad parece un inmenso monasterio.

    La oración dura unos 5 minutos,así que en la mayoría de los casos noes problema compaginarlo con la vida

    laboral. No es obligatorio ir a la mez-quita más que el viernes a mediodía.En esta oración, el imán debe haceruna larga predicación en la que no fal-tan menciones a acontecimientos acae-cidos durante la semana. La mujer noestá obligada a ir, pero si va debe si-tuarse detrás: los fieles varones, dicen,no consiguen concentrarse si tienen

    delante una mujer postrada...

    5.3. Limosna como justicia

    El tercer pilar es la limosna ( zakat ). Elislam es una religión para este mundo. No ordena cosas imposibles o exclu-sivas para una minoría de selectos. El precepto de la limosna es asumible pa-

    ra toda persona con algo de capacidadeconómica. El  zakat   literalmente sig-nifica «purificación». El fiel es purifi-cado por medio de la limosna que seentrega, normalmente a las mezquitas,al final de Ramadán. En España vie-nen a ser cinco euros por cápita. Sedestina a la propagación del islam y alas necesidades de los pobres. Aquí, la

    limosna no es simple caridad, ni algoque dependa del estado de generosidaddel creyente. Es obligatorio porque esde justicia. El musulmán va siendoeducado en la generosidad y en la de-sidolatrización del dinero, por más quelos países del Golfo parezcan contra-decirlo.

    Además, el islam tradicional tenía

    estructurada una recaudación de im- puestos a partir de un tanto por ciento

    22

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    25/36

    la gente intenta dormir durante la ma-ñana y trabajar por la noche. Su prác-tica se hace mucho más complicadaen países no musulmanes, en especialcuando este noveno mes lunar cae en

    el verano de nuestro calendario solar.

    5.5. Peregrinación al centro delmundo

    Finalmente, el quinto pilar que de- be cumplir todo musulmán, chiitas ymujeres incluidos, es el precepto de la peregrinación a la Meca una vez en

    la vida si se posee salud y dinero. Du-rante unos días, el peregrino realizadiversos rituales relacionados con lavida de Abraham, de su esclava Agar,y de su hijo Ismael. Los más importan-tes son las siete vueltas al edificio de laKaaba, la lapidación de unas columnasque simbolizan el demonio, y el sacri-ficio de un cordero en conmemoración

    de aquel que substituyó al sacrificiodel hijo de Abraham. Al mismo tiem- po, los musulmanes que se han queda-

    23

    do en sus casas, celebran la Fiesta delSacrificio degollando también un ani-mal.

    Arabia Saudí tiene que repartircupos para cada país debido a la im-

     posibilidad de acoger a todos los quelo desean. Por ello, ha iniciado unasobras faraónicas para ampliar por diezla capacidad de la Gran mezquita de laMeca. La Kaaba es un edificio cúbicocubierto por una tela negra venerado,según la tradición, ya antes del islam.Se dice que Muhammad mandó des-truir las divinidades que estaban en su

    interior. Actualmente el interior estávacío, con una decoración marmoleadade discutible gusto.

    Para el musulmán se trata del cen-tro del mundo. Las vueltas alrededorde ese pequeño edificio dibujan unmovimiento similar al giro de los as-tros y, sobre todo, al de los ángeles al-rededor del Trono del Misericordioso.

    La representación terrestre de un mo-vimiento cósmico y celeste produceuna emoción profunda.

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    26/36

    24

    6. LA GUERRA CIVIL ÁRABE

    Con esta presentación ya estamos en disposición para entender algomás del drama de Próximo Oriente. Las primaveras árabes no solo

    han dado paso a un invierno árabe sino más bien a un inerno.

    6.1. Siria: un drama, muchos

    actores

    Las causas de la situación actual sonmúltiples: ideológicas, religiosas, eco-nómicas, políticas... Sin duda la in-vasión de Irak fue el desencadenante principal del caos que viven actual-

    mente Siria e Irak, pero éste solo hasido posible por darse en un contextode fundamentalismo religioso, de sec-tarismo político y de corrupción gene-ralizada.

    Fijémonos que en el surgimientodel Estado Islámico han intervenido elsectarismo chiita del gobierno iraquísurgido tras la invasión americana y el

    contagio de la primavera árabe en Siria.Francia y Turquía creyeron que Bacher

    al-Assad caería rápidamente, como lohizo Ben Alí de Túnez, Mubarak deEgipto, Alí Abdullah Saleh del Ye-men, y Ghadafi en Libia. El presidentede Libia escogió la resistencia frente ala fácil caída de Ben Alí, Mubarak yAlí Abdullah. La comunidad interna-cional (países árabes incluidos) teníademasiadas cuentas pendientes conGhadafi como para dejar de intervenir.Si Sadam Hussein hubiese continuadoen el poder también le habría afectado.Cayeron todos los presidentes y sobre-vivieron todos los reyes.

    Turquía hizo permeable su frontera para el paso de islamistas, armas y pe-

    tróleo. Inicialmente apoyaron a los re- beldes moderados, el Ejército de Siria

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    27/36

    Libre, pero pronto este ejército se veríasuperado por la entrada en escena deotros dos: los diversos grupos armadosligados a al-Qaeda y a Hermanos Mu-sulmanes y más recientemente, el Es-

    tado Islámico. El aguante del régimen,la desastrosa situación de la Libia post-Ghadafi, y el poder creciente de al-Qaeda antes de escindirse el Estado Is-lámico, frenaron la decisión de EEUUy de Francia de lanzar un ataque paraderrocar a Bacher al-Assad después dela utilización de armas químicas.

    Bacher al-Assad se presenta

    como el mal menor.

    El régimen se ha esforzado en pre-sentarse como defensor de las minoríasdel país y como mal menor frente a la barbarie del Estado Islámico. Quizás

     por ello, Bacher al-Asad concentró al principio su lucha contra los rebeldesmoderados. Sabía que el crecimientodel islamismo le daría, paradójicamen-te, más opciones de seguir en el poder.Si desapareciese el miedo a que el is-lamismo radical se apoderase de Siria,Occidente junto con los países del Gol-fo provocarían la caída del régimen. A

    su vez, el Estado Islámico ha sido tam- bién especialmente virulento contra elEjército de Siria Libre y no se ha pro- puesto lanzar un ataque frontal para laconquista de Damasco. ¿Será por la di-ficultad de asegurar la victoria? ¿Será porque ante el triunfo del «mal mayor»sabe que Occidente se vería obligadoa intervenir? ¿O será más bien porque

    hay oscuros lazos entre estos dos opo-nentes?

    25

    Pensemos que el Estado Islámiconació en Irak a partir de los serviciossecretos y ejército de Sadam Hussein.El gobierno depuesto pertenecía al par-tido Baas, el mismo al que pertenece

    Bacher al-Assad. Así pues, es proba- ble que inicialmente hubiese más re-lación entre estos dos oponentes quela que nos pensamos. La cuestión es:si el Estado Islámico ha nacido de laingente masa de militares e ideólogosrechazados después de la invasión deIrak, ¿por qué han desarrollado un is-lamismo tan violento y cruel, sabiendoque el partido Baas, de influencia so-cialista, era más bien laico?

    Algunos importantes pensadoresoccidentales partidarios de priorizarla caída de Bacher al-Assad por con-siderarlo la pieza clave del problemaconsideran que el islamismo radicaldel Estado Islámico es pura fachaday propaganda de reclutamiento. Cier-tamente, cuando antes de caer, SadamHussein multiplicaba sus apelacionesreligiosas (como Bush), su discursosonaba a hueco. Pero, no puede des-cartarse la progresiva islamización deuna parte del ejército acompañadade una necesidad de lograr una mayorlegitimidad. Y, sea como sea, una pro- paganda basada en el terror islamistano puede hacer más que llamar a gente

    que viva convencida su extremismoreligioso.

    Lo cierto es que actualmente en Si-ria hay siete ejércitos luchando todoscontra todos, en una especie de partidade parchís donde se suceden alianzascontra natura para derrotar a un terce-ro. Los cinco principales son: el guber-namental, el Ejército de Siria Libre,

    al-Qaeda (Frente al-Nusra), Estado Is-lámico y el ejército kurdo.

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    28/36

    los islamistas con el cierre de muchasmezquitas privadas. Pero atentadoscontra el turismo podrían truncar esteconsolidado negocio.

    Túnez es un país que está aguan-

    tando admirablemente los graves pro- blemas por los que pasa. Su tamaño pequeño, su tradición secular, su ma-yor grado de formación que Egiptole ha hecho evitar sus errores. El par-tido islamista moderado, cercano alos Hermanos Musulmanes, fue másinteligente y supo renunciar al po-der, posibilitando que no se frustrase

    la transición después del asesinato devarios políticos. Pero con los últimosatentados, el turismo (pieza clave en sueconomía) ha desaparecido. Además,tiene grupos terroristas afincados enzonas permeables con las fronteras deArgelia y Libia (algunos de ellos veni-dos de la guerra de Mali) y ¡ha enviadomiles de yihadistas a luchar con el Es-

    tado Islámico! Su retorno es extrema-damente peligroso.

    Si continuamos el mapa por Áfri-ca vemos que el pesimismo no decae.Somalia es otro país fallido con untemible grupo terrorista, al-Shabab,además de los piratas del mar. Nige-ria no es mucho mejor. Su desgobiernoha permitido a Boko Haram («El libro —Occidental— está prohibido») de-sarrollarse y afiliarse últimamente alEstado Islámico.

    Por suerte, la estabilidad reina enSenegal a pesar de una pobreza que produce una emigración masiva. Suislam sufí-animista tolerante marca lacultura del país.

    6.2. ¿De qué país nos vendrá laesperanza?

    El panorama del resto de los países dela Liga Árabe es también desolador.Libia es un Estado fallido. Existen dos

    gobiernos y el que reconoce la comu-nidad internacional no está en la capi-tal. Además, el Estado islámico y otrosgrupos terroristas dominan otras zonasdel país.

    Egipto, con el presidente al-Sisi, vi-ve en una situación de mayor represión política que durante la época de Muba-rak. Paradójicamente es sostenido eco-nómicamente por Arabia Saudí. Lalucha de Egipto contra los HermanosMusulmanes (apoyados por Qatar) esde vital interés para Arabia Saudí por-que cuestionan su régimen político. Enel Sinaí de Egipto también está presen-te una delegación del Estado Islámico.

    Yemen sigue en guerra civil entrelos partidarios sunnitas del presidentey una importante minoría de chiitasdel país. Éstos, aunque forman par-te del zaydismo (una de las primerasescisiones del chiismo) son apoyados por Irán. Arabia Saudí, por su parte,ha empezado a apoyar militarmente algobierno.

    Argelia se mantiene tranquila, auncuando en su territorio se han dado en-frentamientos entre el Estado Islámicoy al-Qaeda. Sin duda, el país no quierevolver a la guerra civil de mitad de losnoventa.

    Marruecos logró atajar las protestasde la primavera árabe adelantándose aalgunas reformas. Le queda mucho tre-cho aún. Ha sabido mantener a raya a

    26

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    29/36

    el Estado Islámico) y en el norte loskurdos. Después de la guerra del Golfono se quiso partir el país para no entre-gar Bagdad a Irán, que todavía estabaen el «eje del mal». Hoy, el problemaes que el pueblo kurdo es uno de losmayores pueblos sin Estado. Están enIrak, Siria, Turquía e Irán. Ninguno deestos países quiere un kurdistán iraquílibre para que no lo exijan el resto,especialmente Turquía. Su pasividadfrente al Estado Islámico se basaba precisamente en la lucha de éste contra

    los kurdos sirios e iraquíes.Arabia Saudí, Qatar y Turquía rece-

    lan de una gran zona de dominio chiita,desde Irán hasta el mediterráneo liba-nés pasando por Irak y Siria. No solono se fían, sino que los países del Gol-fo tienen importantes minorías chiitasque pueden reclamar sus derechos:Arabia Saudí un 10%, pero sobre todo

    es peligroso en Bahrein donde llega aun 70% con una monarquía sunnita.

    27

    7. MUCHO POR HACER 

     Ante esta situación, ¿qué soluciones podemos plantear —o soñar—para el futuro?

    7. 1. Una conferenciainternacional de paz urgente

    El conflicto de Siria va a quedar estan-

    cado probablemente durante muchotiempo. ¡La guerra civil del Líbano yaduró una quincena de años! Quizás poresa dolorosa experiencia está aguan-tando relativamente bien la difícil si-tuación, a pesar de continuar teniendomás de medio millón de refugiados palestinos y haberle sumado millón ymedio de sirios.

    Sin una conferencia de paz entretodos los países implicados es muydifícil que se pueda encontrar una so-lución. Primero hay que constatar quelas fronteras elaboradas entre Francia eInglaterra después de la primera Gue-rra Mundial tienen graves deficiencias.Irak está exactamente ahora partido enlas tres partes que deberían haber deli-

    neado las fronteras: centro-sur chiitas,centro sunnismo (dominado ahora por

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    30/36

    manes, conseguir que Europa les con-sidere un peligro y restrinja su libertadreligiosa, para obligarles a posicionar-se a favor de Europa o a favor del is-lam. Esto les forzaría a emigrar hacia

    el Estado Islámico. Necesitamos po-líticos inteligentes y ciudadanos sen-satos para no seguir el juego de estasfalsas dicotomías.

    Los derechos de los musulmaneshan de ser aplicados y no solamentereconocidos en papel mojado. Pero, por su parte, podemos prever que a lacomunidad musulmana se le exigirá no

    solamente la condena inequívoca delos atentados terroristas (que ya vienehaciendo por más que la prensa se haga poco eco) sino una implicación activaen la lucha contra esta lacra: tanto a ni-vel ideológico como en la cooperaciónactiva con los servicios de inteligencia.

    El rechazo al Estado Islámico por parte de los musulmanes no debe-

    ría dudarse en Europa. Hay miles deejemplos aunque no lleguen a Europa.En abril de 2015 se celebró en AbuDabi un segundo Fórum por la Paz enlas Sociedades Musulmanas, con la presencia de 350 líderes musulmanesmundiales con el objetivo de refutarla ideología del Estado Islámico. Pre-viamente, en diciembre de 2014, ya se

    habían reunido en el Cairo hasta 600líderes musulmanes y cristianos pa-ra condenar la violencia yihadista. Y, poco después del asesinato de un pilo-to jordano quemado vivo, la máximaautoridad religiosa de Egipto declaróque «el Corán ordena que quienes ha-yan perpetrado este acto cobarde, queva contra la palabra de Dios, merecen

    ser matados, o crucificados, o que lessean amputados brazos y piernas». La

    Los que más enconadamente estánluchando contra el Estado Islámico sonlas brigadas chiitas de Irán, además delgrupo político militar chiita del Líba-no, Hezbollah. ¡Pero no son mucho

    más tolerantes! Turquía finalmenteha aceptado coordinarse con una coa-lición para bombardear al Estado Is-lámico. En ésta participan ya ArabiaSaudí, Bahrein, Jordania y EmiratosÁrabes Unidos. La búsqueda de otrosactores ha llevado a EEUU a acercarsea Irán.

    La intervención militar

    no resolverá el problema

    a largo plazo.

    Si, como decíamos, una de las cau-sas del conflicto fueron las revueltasde los pueblos árabes contra la pobre-za, la corrupción y la dictadura, la so-la intervención militar no resolverá el problema a largo plazo. En Irak y en elLíbano se están incoando nuevas pro-testas. Yemen sigue siendo considera-do como una cleptocracia, o gobiernode ladrones...

    7.2. Los deberes de Europa

    Europa vive una oleada de inmigraciónsin precedentes. Van apareciendo nue-vos conflictos mundiales sin que se so-lucionen los que están ya abiertos. Por justicia y humanidad no puede dejar deresponder.

    Por otra parte, los atentados terro-

    ristas en nuestro suelo tienen como ob- jetivo la estigmatización de los musul-

    28

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    31/36

    El reformismo deberá proseguiren su tarea de purificar el islam deelementos retrógrados. Deberá idearcaminos teológicos para legitimar re-ligiosamente la aplicación de los De-

    rechos Humanos que aún genera reti-cencias en los países musulmanes. Enmuchos casos, la tradición ha agrava-do las disposiciones de una Ley queno desentonaba en su tiempo. Bastaa veces con darse cuenta de que una buena parte de las compensacionesque recibía la mujer en el contexto dela sociedad patriarcal islámica primera

    simplemente ha quedado olvidada. Unejemplo de ello es que la desigualdadentre lo que percibía de la herencia unhermano y su hermana se veía com- pensado por el hecho de que al varónle correspondían todos los gastos de sufamilia. La mujer no estaba obligadaa participar en ellos, ni siquiera parasus propios gastos. El dinero que po-

    día conservar la mujer era su «seguro»de viudedad o de divorcio. Lo que notiene sentido hoy es mantener la desi-gualdad en la herencia haciendo que lamujer colabore en los gastos familiarescon su trabajo, o lo que es peor, consi-derar lícito que un hombre tenga variasmujeres poniéndolas a todas a trabajar para mantener a sus hijos.

    De igual manera, el versículo co-ránico que permite la poligamia estáenmarcado en un contexto olvidado,el de asegurar que ningún huérfanose quede sin un padre que le proteja:«Si teméis no ser equitativos con loshuérfanos, casaos con las mujeres queos gusten, dos, tres o cuatro» (Corán4,3). Y por si fuera poco, el mismo

    versículo continúa diciendo: «pero siteméis no obrar con justicia equitativa,

    condena no podía ser más tajante peroes legítimo preguntarse si la violenciade este tipo de denuncia no perpetúa laviolencia de la sociedad.

    Es importante apelar a estudios de

    opinión para probar que estos encuen-tros representan el sentir de la calle. Enoctubre 2014, Fikra Forum publicó enWhashington Institute un estudio so- bre la valoración del Estado Islámicoen tres países árabes. Solo un 5% delos Saudíes lo apoyan (2% gran apo-yo + 3% bastante apoyo). En Egiptola aceptación bajaba a un 3%, y en Lí-

     bano un 0%. A pesar de esta extrema-damente baja aceptación, en númerosabsolutos, alcanza a varios millones de personas que son un peligro potencial para la seguridad.

    Sin embargo, este mismo estudiomuestra el importante apoyo que exis-te hacia grupos islamistas más modera-dos. En Arabia Saudí, el 52% apoyana Hamas, el grupo que controla el go- bierno de Gaza, y el 31% a los Herma-nos Musulmanes. En Egipto, un 33%apoya a Hamas y un 35% a los Herma-nos musulmanes. Por lo que concierneal Líbano, el 92% de los chiitas apoyaa Hezbollah. El 39% de los cristianosle da su aprobación; cifra que baja al

    8% entre los sunnitas del país.

    7.3. Profundizar en la reforma del

    islam

    Tiene poco sentido que Arabia Saudícombata militarmente a aquellos cuyaideología engendra cíclicamente. Porello, es imprescindible que se incida

    también en las causas religiosas delconflicto.

    29

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    32/36

    definitiva. Otros hablan de la impor-tancia de un grupo judeo-mesiánico delengua siríaca en sus inicios como ver-dadero fundador de un «proto-islam»que no se transformará en el islam que

    conocemos hasta mucho más tarde.Otros destacan la contribución de lascomunidades árabes cristianas del estedel Jordán, otros de fuentes maniqueasy otros subrayan las influencias de co-munidades árabes relacionadas con elmundo persa, en la parte oriental de la península arábica.

    Estamos solamente en un estadio

    de estudios en grado de hipótesis y nodefinitivos, algunos con teorías extre-mas que ponen en duda absolutamentetoda la historia presentada hasta ahora.Otros son mucho más matizados. Al-gunos buscan denigrar al islam y otrosson de gran rigor académico.

     No se trata de hacer ninguna apo-logética anti-islámica sino de progre-

    sar en un conocimiento que desmontelas bases de los salafismos, de quienescreen conocer al dedillo cada gesto delProfeta, de quienes han olvidado la dis-tancia (a veces insuperable) que nossepara de los orígenes. La humildad in-telectual no puede hacer más que trans-formar la certeza intransigente del fun-damentalista en la entrega confiada del

    creyente a un Dios que nos sobrepasa.Si se lleva a cabo esta tarea, el pa-norama futuro del islam puede ser com- pletamente diferente, aunque con lamisma pasión por la Unicidad de Dios.Si el cristianismo sobrevivió a la críticahistórica y exegética también lo hará elislam pero renaciendo de manera nuevay purificada.

    entonces con una sola». La tradición(masculina) ha interpretado estas lí-neas otorgando al hombre el derechoa la poligamia y aconsejándole simple-mente el tratamiento equitativo de sus

    esposas. ¿Por qué no se ha interpretadoel versículo otorgando el derecho bajola condición del cumplimiento estric-to del deber? Como éste hay muchosotros ejemplos.

    7.4. Asignatura pendiente:refundar la historia

    Sin embargo, hay una asignatura pen-diente que ni siquiera el reformismo hainiciado todavía: el estudio riguroso delos inicios del islam así como la histo-ria de la composición del Corán, uti-lizando todos los métodos modernosde que disponemos a partir del sigloXIX: análisis exegético, filológico, re-tórico, etc. Comprendo perfectamente

    los miedos a abrir la puerta a esa tarea porque hasta principios del siglo XIX elcatolicismo no lo asumió como tarea propia. Los libros de la tradición sobrela vida de Muhammad y los explica-tivos (los tafsîr ) del Corán son infini-tos pero todos parecen apoyarse en lasmismas fuentes canonizadas tres siglosdespués de la muerte del Profeta. Es

     preciso hacer crítica de las fuentes.Actualmente en Europa ya hay un buen puñado de investigadores (algu-nos de tradición musulmana) que estu-dian estas cuestiones. Muchos señalanque la «colecta» de versículos corá-nicos podría haberse alargado muchotiempo, y que el Corán del tercer Cali-fa (Uzmán) no habría sido aún la forma

    30

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    33/36

    lidad del islam con los Derechos Hu-manos.

    Salafismo.  Corriente sunnita anti-tradicionalista que aboga por imitar has-ta los últimos detalles la vida de la prime-ra generación de musulmanes.

    Salafismo político. Exige imponer elsalafismo en las estructuras del Estado.

    Salafismo yihadista. Busca imponerel salafismo mediante la lucha armada.

    Sufismo. Corriente mística del islamcon estrechos vínculos con la Cábala ju-día y con la filosofía neo-platónica. Pre-sentes en la mayoría de países sunnitas,se estructuran en cofradías alrededor deun líder espiritual. Perseguidos por el is-

    lam del Golfo.Sunna. Tradición de la vida de Mu-

    hamad y de la primera comunidad mu-sulmana consignados en los relatosllamados «hadices» (semejantes a los

    logia de Jesús) con carácter normativo.Es el equivalente normativo a la Ley Oral

     judía plasmada en la Mishná.

    Sunnismo.  Confesión islámica ma-

    yoritaria que representan el 85-90% detodos los musulmanes.

     Yihad.  Literalmente «esfuerzo» o

    «lucha», sea contra el enemigo interior

    del creyente, las pasiones, sea contra elenemigo exterior de la comunidad.

    Wahabismo.  Corriente islámica ri-gorista del Golfo cercana al salafismo,

    vinculada a la escuela de interpretaciónsunnita medieval hanbalita.

    GLOSARIO

    Ayatolá. Máxima autoridad religiosadel chiismo actual.

    Chiismo. Confesión islámica con es-tructura clerical desarrollada en Persiapor los partidarios de Alí. Representa al

    10% de todos los musulmanes.

    Hadices. Relatos breves sobre lavida y las determinaciones tomadas por

    Muhammad atribuidos a contemporá-neos del Profeta, transmitidos oralmentehasta su puesta por escrito dos o tres si-glos más tarde.

    Ibadismo. Tercera de las confesio-nes islámicas escindida de los primerospartidarios de Alí. En Omán.

    Hermanos Musulmanes.  Asocia-

    ción islamista nacida en Egipto que bus-ca islamizar la sociedad sin llegar al ex-tremo literalista del salafismo.

    Imán. Guía de la oración islámica.

    Islam. Nombre de la religión musul-mana. Significa «sometimiento volunta-rio» o «entrega».

    Islamismo. Corriente política del is-

    lam.Mufti. Jurista con autoridad para pro-

    nunciar fatuas, consejos jurídicos.

    Mulá. Sabio de la ley islámica.

    Reformismo.  Corriente que buscareformar la tradición islámica purificán-dola de las «innovaciones» de la historia

    y de las culturas.

    Reformismo modernista. Corrien-te de opinión que busca la compatibi-

    31

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    34/36

    CUESTIONES PARA LA REFLEXIÓN

     1. Dene las corrientes del islam sunnita: salasmo, tradicionalismo, re-formismo, modernismo, susmo, e intenta comprender las diferencias a

    partir de los debates en el seno del cristianismo. Piensa también en losdebates en el interior del chiismo.

     2. Discute las diversas causas políticas, económicas, geoestratégicas y re-ligiosas del desarrollo de los grupos islamistas actuales. ¿Qué parte de

    responsabilidad tiene Occidente y cuál el mundo islámico?

     3. ¿Cuál debería ser la política europea con los refugiados e inmigrantes?

     4. Lee «Perlas sufís, la mística musulmana», Papel CJ, n.158. ¿Cómo ex-plicas la gran diversidad del islam, que ha producido también toda esta

    riqueza?

     5. ¿Cómo mirar con esperanza los retos que todo este tema nos plantea?

    32

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    35/36

  • 8/18/2019 Islam La Media Luna Creciente

    36/36