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LA TERCERA OLA SUPERLUCHA Arquitectura de la civilización

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 0 La T$r!$ra O)a ($A)12n To3$r 4

de personas que comprenden que los problemas más urgentes del mundo no pueden resolverse ya

dentro de la estructura del orden industrial!

A$ora que surge la civilización de la tercera ola" cabe preguntarse si la industrialización rápida

implica la liberación del neocolonialismo y de la pobreza o si" en realidad" garantiza el cambio de

ambos!

#na vez que comprendamos que se libró ya una luc$a encarnizada entre quienes tratan de preservar

la industrialización y los que intentan reemplazarla" nos $allaremos en posesión de un nuevo

instrumento para cambiar el mundo!

=ara poder utilizar este instrumento nosotros debemos poder distinguir con claridad los cambios que

prolongan la vie3a civilización de aquellos que facilitan la llegada de la nueva!

Capítulo IV: Infringiendo la lucha

Toda civilización tiene un código oculto de reglas o principios que presiden todas

sus actividades y las impregnan de un repetido diseño.

Presenta tres principios:

a. Uniformización: todo el mundo sabe que las sociedades industriales crean

millones de productos idénticos y esto influye en la generación de un

género de vida, un lenguae, maquina, procesos y también escuelas.b. !specialización: cuanta m"s diversidad eliminaba la segunda ola en materia

de idioma, ocio y estilo de vida, mas diversidad se necesitaba en la esfera

de trabao.c. #incronización: la segunda ola sincronizo la vida laboral y la vida social,

separ"ndola de sus ritmos normales y supedintandolas al relo y e$igencias

de m"quina.d. %oncentración: las sociedades de la segunda ola concentraron la energia

en vez de la dispersión de fuentes energéticas de la primera ola, depósitos

altamente concentrados de combustibles fósiles.e. &a$imización: recurso de la gran escala en todos los niveles.f. %entralización: gobierno centralizado en lo pol'tico y en lo económico,

creación de bancos centrales.

Capítulo V: Los Técnicos del poder  

Las sociedades de la segunda ola estaban gobernadas por especialistas en integración" ya que esta

ola fracciono la vida y la cultura e la comunidad!

 

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Esos integradores defin%an funciones y asignaban traba3os! (ecidian quien obtenia que

recompensas" trazaban" planes" fi3aban las reglas conforme a las cuales interactuaban las

organizaciones!

Las sociedades de la segunda ola estaban gobernadas por los integradores! En la actuaidad"

mientras la tercera ola de cambio aparece" empiezan tambin a aparecer las primeras grietas en elsistema de poder!

Capítulo VI: !l !squema (culto

La segunda ola tra3o consigo una concepción mecanicista de la sociedad! DEmpapados de este

pensamiento mecanicista" imbuidos de una fe casi ciega en el poder y la eficiencia de las máquinasD"

los revolucionarios fundadores de la segunda ola tanto capitalistas como socialistas" Dinventaron

1!!!2 sociedades pol%ticas que participan de muc$as de las caracter%sticas de las primeras máquinas

industriales 1!!!2! As% como la fábrica vino a simbolizar toda la tecnosfera industrial" el /obierno

representativo 1por desnaturalizado que est2" se convirtió en el s%mbolo de status de toda nación

FavanzadaF! (e $ec$o" incluso muc$as naciones no industriales ba3o las presiones e3ercidas por

los colonizadores o a travs de la ciega imitación se apresuraron a instalar el mismo universal

equipa3e representativo<! En este sistema" el gobierno representativo era el equivalente pol%tico de la

fábrica! (e $ec$o" era una fábrica destinada a la confección de decisiones integracionales

colectivas! Como la mayor parte de las fábricas" estaba dirigida desde arriba! G" como la mayor parte

de las fábricas" se va quedando a$ora progresivamente anticuada" v%ctima de la tercera olaD 1p! 9H2!

Esto" para Toffler" es un enga+o4 el pueblo cree que está gobernando a travs de sus representantes

cuando en verdad lo que $acen las lites! D(e $ec$o le3os de debilitar el control e3ercido por las

lites directivas" la maquinaria formal de representación se convirtió en uno de los medios clave de

integración por los que se manten%an a s% mismas en el poderD 1p! 962!

  CAPÍTULO VII: Un frenesí de naciones

El nacionalismo nace con la segunda ola4 D&e pueden considerar los levantamientos nacionalistas

provocados por la revolución industrial en los EE!##" Irancia" Alemania y el resto de Europa como

esfuerzos para elevar el nivel de integración pol%tica al nivel de integración económica" en rápido

ascenso" que acompa+ó a la segunda ola! G fueron esos esfuerzos" no la poes%a ni m%sticas

influencias" lo que condu3o a la división del mundo en unidades nacionales separadas! 1!!!2 G por

deba3o de la nación subyac%a el imperativo familiar del industrialismo4 el impulso $acia la integración

1p! 992!

CAPÍTUL !III" El impulso imperial 

La segunda ola apareció con un impulso imperialista4 Dal aumentar la fabricación masiva de

productos" las nuevas lites industriales necesitaban mercados mayores y nuevas salidas a la

inversiónD 1p! 7:2! El fantasma del desempleo empu3ó a las potencias europeas a la colonización!

Estas consideraciones económicas iban mezcladas con consideraciones estratgicas" fervor

 

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CAPÍTULO X. Coda: el orot!n

La indusrealidad llega a una crisis" que comporta una crisis de personalidad4 el $ombre de la

segunda ola pierde su identidad! G en EE!## se ven millones de personas que Dse lanzan a la

terapia de grupo" al misticismo o a 3uegos se;uales! An$elan el cambio" pero se sienten

aterrorizados por l! Ans%an abandonar sus actuales e;istencias y saltar" de alguna manera" a unanueva vida 1!!!2" convertirse en lo que no son! Nuieren cambiar de empleos" de cónyuges" de papeles

y de responsabilidadesD! G esto" dice Toffler" se da tambin entre los supuestamente satisfec$os

$ombres de negocios norteamericanos4 aduce la estad%stica de la American 0anagment Association"

que arro3a el resultado de que un J@K de directivos y empresarios son infelices en sus puestos 1p!

6:92! =ero afirma el autor" podemos descubrir al lado de este fracaso y derrumbamiento" una serie

de indicios precursores de crecimiento y de nuevas potencialidades!

CAPÍTULO XI. La nue"a síntesis

Este cap%tulo es de transición4 Toffler e;pone el análisis que $ará en los siguientes cap%tulos sobre lo

que va a pasar en el mundo4 estamos Dante una nueva Era de s%ntesisD 1pp! 6HB6H2!

CAPÍTULO XII. Las cumres dominantes

6! Las nuevas fuentes de energ%a4 DComo $emos visto antes" la base energtica de la segunda ola

se apoyaba en la premisa de no renovabilidad. proced%a de depósitos altamente concentrados y

agotables. descansaba en tecnolog%as costosas y fuertemente centralizadas. y carec%a de

diversificación" dependiendo de fuentes y mtodos relativamente escasosD 1p! 6H92! Estas fuentes se

acabarán" y $ace falta encontrar no solo nuevas fuentes que sustituyan a las antiguas" sino tambin

una nueva tecnolog%a paralela a esas fuentes!

:! E;posición de la electrónica" que lleva una tecnosfera completamente nueva" que nos moverá al

espacio y a la e;plotación de los ocanos!

H! La industria gentica" que producirá cambios en las personas" en la salud" etc!

J! )uevas dimensiones más $umanas" aunque sofisticadas" de las tecnolog%as!

Capítulo XIII. #esmasificando los medios de comunicaci!n

La información es el asunto más importante y de crecimiento más rápido del mundo! La infosfera

está cambiando la segunda a la tercera ola" transformando nuestra psiquis! En la primera ola se

recib%a la imagen de la realidad a partir de las personas y de la naturaleza! En la segunda" además"

a partir de la prensa" radio y T!?!" ayudando as% a uniformizar el comportamiento! A$ora" los medios

de comunicación" Dle3os de e;tender su influencia" se ven de pronto obligados a compartirla! Estan

siendo derrotados en muc$os frentes a la vez por lo que yo llamo los Fmedios de comunicación

desmasificadosFD 1p! 6:2!

 

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Esto" seg'n Toffler" se e;tiende a'n a la industria militar! &e está desmasificando la fabricación! Esto

tendrá repercusión en las profesiones! El procesador de palabras está revolucionando el traba3o"

yendo $acia la eliminación de la mecanograf%a! Con ello" el traba3o de oficina" va necesitando menos

personal! DLas dos revoluciones del sector administrativo y del fabril dan lugar a un modo de

producción enteramente nuevo para la sociedad" un paso gigantesco para la especie $umana! Este

paso lleva consigo implicaciones indescriptiblemente comple3as! Afectará no sólo a cosas tales como

el nivel de empleo y la estructura de la industria" sino tambin a la distribución de poder pol%tico y

económico" a las dimensiones de nuestras unidades de traba3o" a la distribución internacional del

traba3o" al papel de las mu3eres en la econom%a" a la naturaleza de traba3o y al divorcio entre

productor y consumidor4 alterará incluso un $ec$o aparentemente tan simple como el FdóndeF del

traba3oD 1p! 67J2!

Capítulo XVI. El 'o$ar electr!nico

Todos estos cambios modificarán los $ogares! Al desaparecer la masificación" y como consecuencia

de la nueva tecnolog%a" se volverá a la industria en el $ogar" que fue donde comenzó" y con ello"Dtodas las instituciones que conocemos" desde la familia $asta la escuela y la corporación"

quedar%an transformadasD 1p! 67B2! DTodo un grupo de fuerzas sociales y económicas están

convergiendo para cambiar el lugar del traba3oD 1p! 672! D(e $ec$o" una cantidad no medida pero

apreciable de traba3o está siendo ya realizado en sus propias casas por personas tales como

vendedores y vendedoras que traba3an por telfono o mediante visitas y sólo ocasionalmente se

pasan por la oficina. por arquitectos y dise+adores. por un floreciente grupo de consultores

especializados de muc$as industrias. por gran n'mero de traba3adores de servicios $umanos" como

terapeutas o psicólogos. por profesores de m'sica y de idioma. por traficantes en ob3etos de arte"

conse3eros de inversión" agentes de seguros" abogados e investigadores acadmicos. y por muc$as

otras categor%as de empleados tcnicos y profesionalesD 1p! 6782!

DA medida que avanza la tercera ola a travs de la sociedad" encontramos cada vez más compa+%as

que" en palabras de un investigador" pueden ser descritas como nada más que Fpersonas api+adas

en torno a un computadorF! =óngase al computador en las casas de las personas" y ya no

necesitarán api+arse! El traba3o administrativo de la tercera ola" como el traba3o fabril" no requerirá

que el cien por cien de la fuerza del traba3o est concentrada en el tallerD! -nfluirá en esto el elevado

costo de los desplazamientos diarios a los lugares de traba3o! Este nuevo D$ogar electrónicoD tendrá

beneficiosos resultados4 a$orro de gasolina" de tiempo en desplazamientos" disminución de la

contaminación ambiental" mayor estabilidad en la vida familiar" desarrollo del privatismo" una

sociedad centrada en el $ogar" con una mayor estabilidad en la comunidad!

Capítulo XVII. (amilias del futuro

En este cap%tulo" el autor da su visión de lo que deber%a ser la familia" para que funcione! =iensa que

la familia tradicional lo que l llama la familia de la segunda ola" o familia nuclear" fue algo que

esa ola DidealizóD" $izo dominante y e;tendió por todo el mundo 1cfr! p! :6@2! =ero la tercera ola

requiere un nuevo tipo de familia!

 

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1Llegar a tiempo no significa a$ora lo que antes2! DEl resultado es menos presión para que se llegue

Fa tiempoF y la difusión entre los 3óvenes de actitudes más despreocupadas con relación al tiempo! La

puntualidad" como la moralidad" se torna situacionalD 1p! :BJ2!

La tercera ola ataca la uniformización" caracter%stica básica de la vida industrial! Al disminuir la

producción en serie" se desmasifica el consumo" el mercado" el tráfico comercial4 Dlos consumidoresempiezan a realizar sus elecciones no sólo porque un producto cumple una espec%fica función

material o psicológica" sino tambin por la forma en que se adec'a a la configuración" más amplia"

de los productos y servicios que ellos e;igen! Estas configuraciones acusadamente individualizadas

son transitorias" como lo son los estilos de vida que contribuyen a definir! El consumo" como la

producción" se torna configuracional! La producción postuniformizada trae consigo el consumo

postuniformizadoD 1p! :BB2! Los precios" la pol%tica" la mentalidad de las masas se desuniformizan4

asistimos al Dsurgimiento de una Fmente postuniformizadaF y de un Fp'blico postuniformizadoFD 1p!

:B2! Esto" sin embargo" no está sucediendo sin luc$a" pues $ay mentalidades que siguen aferradas

al mundo de la segunda ola4 Dno es e;tra+o que los padres esencialmente ligados todav%a al

código de la Era -ndustrial se encuentren en conflicto con" los $i3os que" conscientes de lairrelevancia de las vie3as reglas" se $allan inseguros" si no completamente ignorantes" de las

nuevasD 1p! :J2!

Capítulo XX. El resur$imiento del prosumidor 

El autor produce estad%sticas que muestran cambios interesantes4 en Estados #nidos $ace 6@ a+os

se vend%a un H@K de $erramientas a aficionados" mientras el 8@K se vend%an a carpinteros y otros

profesionales. $oy" como consecuencia de la filosof%a del D$ágalo usted mismoD" la proporción es

e;actamente la inversa! G es que el precio de muc$os servicios se está disparando" y a medida que

estos precios aumentan Dpodemos esperar que la gente vaya $aciendo por s% misma cada vez más

traba3osD 1p! :8:2! DAl final dice Toffler el consumidor" no simplemente suministrando las

especificaciones" sino tambin oprimiendo el botón que pone en marc$a todo este proceso" se

convertirá en parte tan importante del proceso de producción como lo era el obrero de la cadena de

monta3e en el mundo que a$ora agonizaD 1p! :8H2! El estilo de vida del prosumidor será" en

consecuencia" distinto! G aunque a'n es muy pronto para predecir estos cambios" Toffler piensa que

ellos transformarán nuestros valores y nuestro sistema económico 1cfr! p! :892!

Capítulo XXI. El torellino mental 

Toffler testimonia en este cap%tulo la situación de caos y desconcierto mental en que están cayendo

muc$as personas ante los cambios de la tercera ola! En efecto" está apareciendo una nueva culturaque contiene una nueva imagen de la )aturaleza" en la que Dnuestro propio planeta parece muc$o

más peque+o y más vulnerableD 1p! :972! #na nueva imagen de la evolución4 Dlos pensadores de la

segunda ola conceb%an la especie $umana como la culminación de un largo proceso evolutivo. los

pensadores de la tercera ola deben a$ora enfrentarse con el $ec$o de que estamos a punto de

convertirnos en dise+adores de la evoluciónD 1p! :7624 el concepto de evolución está en trance de ser

reconceptualizado! #na nueva imagen del progreso4 se abandona el ingenuo optimismo sobre el

 

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ofrece una nueva estrategia tecnológica para la guerra contra la pobreza4 DCabe empezar a imaginar

una estrategia de transformación basada en el desarrollo de industrias rurales" centradas en la aldea

y de peque+o capital" y ciertas tecnolog%as seleccionadas" con una econom%a seccionada en zonas

para proteger o promover a las dosD 1p! HH92! Estamos yendo" seg'n los analistas" $acia una nueva

s%ntesis4 D/and$i" en suma" con satlitesD 1p! HH92!

Capítulo XXIV. Coda: la $ran confluencia

Antes de llegar a la 'ltima parte de la obra" Toffler $ace en este cap%tulo un resumen de lo dic$o en

páginas anteriores" poniendo nfasis en que lo que $a venido propiciando la civilización de la tercera

ola no es una utop%a! Tampoco una Dantiutop%aD 1la que propon%an /eorge OrMell y Aldous >u;ley en

679J y #n 0undo Ieliz" respectivamente2!

El autor divisa Dla aparición de lo que podr%a denominarse una Fpractop%aF" ni el me3or ni el peor de

todos los mundos posibles" sino un mundo que es práctico y" a la vez" preferible al que ten%amosD! A

diferencia de las utop%as" la practop%a no es estática ni se $alla petrificada en una irreal perfección4

Duna practop%a no está libre de enfermedades" sordidez pol%tica y malos modalesD 1p! HB62! D#na

practop%a ofrece una alternativa positiva" incluso revolucionaria" pero se encuentra dentro de lo que

es real%sticamente posible de alcanzarD 1id2! =ero esto implica una remodelación personal y de las

instituciones

Capítulo XXV. La nue"a psicosfera

&e ve que por todo el mundo $ay algo que no funciona4 $ay tensiones" violencia" drogas" etc! >ay

b'squeda de paz y estabilidad! Ilorecen los Dbu$oneros religiososD que ofrecen solución a la

paranoia y a la desintegración ps%quica generalizada! #no de estos males que $ay en el ambiente es

la plaga de la soledad! La tercera ola deberá restaurar la comunidad" y uno de los instrumentos conque cuenta para ello son las comunicaciones!

Otra de las causas de la crisis actual es la prdida de estructura y la falta de significado! Esto e;plica

seg'n Toffler la proliferación de sectas" cultos" etc!4 los cultos ofrecen la estructura" e;igiendo y

creando la tan ansiada disciplina! La tercera ola tendrá que ofrecer solución a esta necesidad" una

solución cuerda y democrática" no la que ofrecen estos cultos" en veces totalmente irracionales y

despersonalizadores! Toffler concluye este cap%tulo diciendo4 Destá $aciendo su aparición una nueva

psicosfera" que alterará fundamentalmente nuestro carácterD!

Capítulo XXVI. La personalidad del futuro

Con el cap%tulo ,,? el anterior" Toffler empieza la cuarta y 'ltima parte de su libro" la que l

llama Conclusión! En este ofrece los rasgos de lo que tendrá que ser el $ombre nuevo" creado por la

tercera ola! O más bien" de lo que tendrá que ser el carácter social nuevo4 aquellas caracter%sticas

que más probablemente $abrán de ser estimadas por la civilización del ma+ana! En primer lugar" la

educación cambiará4 D>abrá más aprendiza3e fuera de la escuela que dentro de ella! =ese a las

presiones de los sindicatos" los a+os de ense+anza obligatoria se irán reduciendo en vez de

 

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aumentar! En lugar de practicarse una r%gida separación por edades" se entremezclarán 3óvenes y

vie3os! La educación se entrete3erá e interpenetrará más con el traba3o" y se dispersará más a lo

largo de la vida! G el traba3o mismo ya se trate de producción para el mercado o de prosumo para

el propio $ogar comenzará probablemente a edad más temprana que en la 'ltima o dos 'ltimas

generaciones! =or estas razones" la civilización de la tercera ola puede muy bien favorecer rasgos

completamente diferentes entre los 3óvenes 1!!!2" menos reactividad $acia los iguales" menos

orientación $acia el consumo y menos $edonismoD! Tambin la empresa de la tercera ola necesitará

más personas Dmenos preprogramadasD y más capaces de iniciativa propia!

En segundo lugar" una nueva tica aparece en la tercera ola"la tica del prosumidor" que vuelve a

$acer respetable el traba3o manual" despus de H@@ a+os de menosprecio!Los medios de

comunicación están moldeando esa nueva personalidad4 la desmasificación actual de esos medios

ofrece diversos estilos de vida y de modelos con los que compararse! Además" presentan

fragmentos y destellos de comportamiento" para que $aya un Dyo configuradorD que se encargue de

completarlos a su gusto4 eso e;plica la desesperada b'squeda de identidad de tantas personas! As%"

los medios de comunicación actuales Dnos convierten en productores o" me3or dic$o" enprosumidores de nuestro propio con3unto de imágenesD 1p! H9@2! Esta revolución de las

comunicaciones nos da a cada uno una imagen más comple3a de nosotros mismos" nos diferencia

más4 Dacelera el proceso mismo por el que FprobamosF diferentes imágenes del yo y" de $ec$o"

aceleran nuestro movimiento a travs de imágenes sucesivas! )os $ace posible proyectar

electrónicamente nuestra imagen al mundo! G nadie sabe con e;actitud cuál será el efecto de todo

esto en nuestras personalidades! =ues en ninguna civilización $emos tenido 3amás $erramientas tan

poderosas! =oseemos cada vez más la tecnolog%a de la concienciaD!

Capítulo XXVII. El mausoleo político

La invención de nuevas $erramientas pol%ticas viene e;igida por la tercera ola! Las instituciones

pol%ticas de la segunda están funcionando mal4 $ay en todas partes un vac%o de poder. y se nota en

todos los sitios la creciente demanda de una Dautoridad más fuerteD! Este clamor seg'n el autor

se basa en tres concepciones erróneas! La primera" es el mito de la eficiencia autoritaria! La

segunda falacia es la de suponer que un estilo de gobierno que resultó en el pasado" $aya de

resultar tambin en el futuro! La 3efatura que requiere la tercera ola no es del mismo tipo de las

 3efaturas del pasado! G" por 'ltimo" la tercera falacia es la de que se necesita de Dalg'n mes%as

pol%tico para salvarnos del desastreD! G es que la crisis que nos atenaza no es sino la crisis terminal

del /obierno representativo!

#na razón por la cual las actuales estructuras pol%ticas están anticuadas es que el entramado de las

naciones es $oy más interdependiente que antes! Además" Dsi $ay una cosa que $ubiramos debido

aprender en las 'ltimas dcadas" es que todos los problemas sociales y pol%ticos estn entrete3idos"

que la energ%a" por e3emplo" afecta a la econom%a" la cual" a su vez" afecta a la salud" la que a su

vez" afecta a la educación" el traba3o" la vida familiar y otras mil cosas! El intento de tratar por

separado problemas n%tidamente definidos" aisladamente unos de otros fruto de la mentalidad

industrial" no $ace sino crear confusión y desastre! &in embargo" la estructura organizativa del

 

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/obierno refle3a con e;actitud este enfoque de la realidad propia de la segunda olaD! =or otro lado

otra razón que aporta el autor" es la aceleración en las comunicaciones" que $ace que las decisiones

se tengan que tomar muy rápidamente. y otro fenómeno que incide en esta obsolescencia" es lo que

Toffler llama Del colapso del consensoD" que se da como consecuencia de la desmasificación de la

vida pol%tica4 ya no $ay mayor%as pol%ticas! =or todo esto" $ay que inventar nuevas instituciones

pol%ticas!

CA=-T#LO ,,?---4 La (emocracia (el &iglo ,,-La construcción de una nueva civilización sobre los restos de la antigua implica el dise+o de nuevas

estructuras pol%ticas más adecuadas en muc$as naciones a la vez! &e trata de un proceso doloroso"

pero necesario" de dimensiones impresionantes y cuya conclusión e;igirá" sin duda" dcadas!

Todas estas entidades tendrán que ser modificadas de manera sustancial" no porque sean

intr%nsecamente malas" ni incluso porque se $allen controladas por ste o aquel grupo o clase" sino

porque resulta cada vez más inviables e inadecuadas para las necesidades de un mundo

radicalmente cambiado!

=ara crear gobiernos viables y llevar a cabo la que muy bien puede ser la tarea pol%tica más

importante de nuestra poca tendremos que eliminar los estereotipos acumulados en la era de la

segunda ola!

Cada vez es más anticuado el imperio de la mayor%a! )o son las mayor%as sino las minor%as las que

cuentan" como $emos visto" de3amos atrás a$ora la poca industrial para convertirnos rápidamente

en una sociedad desmasificada! En lugar de una sociedad muy estratificada" en la que unos cuantos

bloques importantes se al%en para constituir una mayor%a" tenemos una sociedad configurativa"

donde miles de minor%as" muc$as de las cuales son temporales" se arremolinan y forman pautas

nuevas y transitorias" convergiendo rara vez en un consenso sobre temas importantes! El avance de

la civilización de la tercera ola debilita as% la legitimidad misma de muc$os de los actuales gobiernos!

El creciente activismo de las minor%as no resulta de un s'bito acceso de ego%smo. es" entre otras

cosas" refle3o de las necesidades de un nuevo sistema de producción que e;ige" para su propia

e;istencia" una sociedad muc$o más variada" abigarrada" abierta y diversa que ninguna de cuentas

$ayamos conocido 3amás!

=odemos oponer resistencia al avance $acia la diversidad" o por el contrario" reconocer la diversidad

y modificar en consecuencia esas instituciones! La primera estrategia sólo puede ser llevada a la

práctica por medios totalitarios y su resultado es un estancamiento económico y cultural. la segundaconduce a la evolución social y a una democracia del siglo ,,- basado sobre la minor%a! (iversidad

origina automáticamente un aumento de las tensiones y nuevos conflictos en una sociedad! (e

$ec$o" es posible que ocurra en realidad lo contrario!

El conflicto en la sociedad no sólo es necesario sino tambin" dentro de ciertos l%mites" deseables!

Resulta más provec$oso negociar" cooperar y formar relaciones simbióticas! &upuestas unas

disposiciones sociales adecuadas" la diversidad puede originar una civilización segura y estable!

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La solución a estos problemas no estriba en sofocar la discrepancia o acusar de ego%smo a las

minor%as! La respuesta radica en medidas imaginativas y nuevas para acomodar y legitimar la

diversidad" en nuevas instituciones sensibles a las necesidades en rápida mudanza de minor%as que

cambian y se multiplican!

Es posible que alg'n d%a los futuros $istoriadores consideren la votación y la b'squeda de mayor%acomo un arcaico ritual practicado en una poca de comunicaciones primitivas!

=recisamos" en suma" modernizar todo el sistema para fortalecer el papel de las diversas minor%as"

permitindoles" no obstante" formar mayor%as! Los sistemas de retroinformación del pasado industrial

resultan demasiado toscos para una sociedad desmasificada de la tercera ola! =or eso" tendremos

que utilizar de una forma radicalmente nueva las votaciones y las encuestas! El paso de la

dependencia de unos representantes a representarnos nosotros mismos!

QA quin representa realmente un representante sin un acuerdo entre los votantes )uestros

representantes elegidos saben cada vez menos acerca de las innumerables medidas sobre las que

deben decidir y se ven obligados a confiar cada vez más en el criterio de otros! El representante ya

no siquiera se representa a s% mismo!

Como las anticuadas y romas $erramientas pol%ticas de $oy" ning'n legislador es siquiera capaz de

seguir la pista a los numerosos grup'sculos que nominalmente representa" y muc$o menos negociar

efectivamente en beneficio de sus intereses! La quiebra de la negociación" el atasco en las

adopciones de medidas y la parálisis cada vez más grave de las instituciones representativas

determinan" a largo plazo" la posibilidad de que muc$as de las decisiones que a$ora toman unos

cuantos seudo representantes tengan que retornar gradualmente a propio electorado! &i las leyes

que elaboran son cada vez más a3enas o insensibles a nuestras necesidades" tendremos que

$acerlas nosotras! =ero para ello necesitaremos tambin nuevas instituciones y nuevas tecnolog%as!

Cabe tambin superar la otra ob3eción! Las antiguas limitaciones en el campo de las comunicaciones

ya no se interponen en el camino de las ampliaciones de la democracia directa! Avances

espectaculares en la tecnolog%a de las comunicaciones brindan" por primera vez" un e;traordinario

con3unto de posibilidades a la participación directa de los ciudadanos en toma de decisiones

pol%ticas!

&u actuación limitaba a votar s% o no! =odr%a en el futuro participar en el debate" formular sus

opiniones" incluso" presionando el botón" indicar a la presidencia cuándo deb%a pasar al punto

siguiente del orden del d%a!

0ediante ordenadores avanzados" satlites" telfonos" cable" tcnica de sondeo y otros

instrumentos" por no mencionar -nternet y otras redes de comunicación" una ciudadan%a instruida

puede" por primera vez en la $istoria" empezar a adoptar muc$as de sus propias decisiones

pol%ticas!

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Q=or qu no facultar directamente a los electores para forzar a un cuerpo legislativo a crear

comisiones sobre temas que el p'blico no los legisladores considere importantes

E;isten medios potentes para liberalizar y democratizar un sistema que se $alla pró;imo a

desmoronarse y en el que pocos" si es que $ay alguno" se siente adecuadamente representados!

)o podemos ya resolver nuestros problemas con las ideolog%as" los modelos o las estructuras

residuales del pasado de la segunda ola!

=or peligrosa e incluso grotesca que pueda parecer a algunos la democracia semidirecta es un

principio moderado que puede ayudarnos a crear instituciones nuevas y viables para el futuro!

Ciertos problemas no pueden ser resueltos en el ámbito local! Otros no pueden resolverse en el

ámbito nacional! Algunos requieren acciones simultáneas en varios ámbitos!

=ara remediar el actual atasco en la toma de decisiones" consecuencia de la sobrecarga

institucional" tenemos que repartirlas y reasignarlas" ampliando" la participación y variando el lugar

de su adopción seg'n e;i3an los problemas!

(emasiadas decisiones contin'an a'n concentradas y la arquitectura institucional resulta

sumamente comple3a en el ámbito nacional! )o se trata de descentralización frente a centralización

en un sentido absoluto! Lo que interesa es la reasignación racional del proceso de toma de

decisiones en un sistema que $a $ec$o e;cesivo $incapi en la centralización" $asta el punto de que

las corrientes de información a$ogan y paralizan a los que deben decidir!

)ecesitamos repartir la carga de la adopción de decisiones y desplazar $acia aba3o un parte

importante de sta!

La razón es que cualquier estructura pol%tica incluso con bater%as de ordenadores sólo puedemane3ar un volumen determinado de información" sólo es capaz de adoptar cierta cantidad y calidad

de decisiones" y la implosión de medida $a empu3ado ya a los gobiernos más allá de este punto

ruptura!

=resenciamos una asombrosa proliferación de sistemas de televisión por cable" casetes"

ordenadores y organizaciones privadas de correo electrónico" todos los cuales empu3an en la misma

dirección descentralizadora!

Todo esto e;ige algo más que meros cambios cosmticos en las instituciones pol%ticas e;istentes!

-mplica grandes batallas por el control de los presupuestos" los impuestos" la tierra" la energ%a y otrosrecursos!

En las sociedades preindustriales" donde la división del traba3o era rudimentaria y el cambio escaso"

resultaba m%nimo el n'mero de decisiones pol%ticas o administrativas necesarias para que las cosas

funcionaran!

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#na diminuta elite feudal o monárquica semi educada y no especializada" pod%a dirigir más o menos

todo" sin ayuda procedente de aba3o!

Lo que a$ora llamamos democracia surgió sólo cuando la carga de decisiones rebasó s'bitamente la

capacidad de la vie3a elite para mane3arla la segunda ola" que tra3o consigo una e;pansión de tráfico

comercial" una mayor división del traba3o y el salto a un nivel por completo nuevo de comple3idad enla sociedad causó su tiempo la misma clase de implosión de medidas que provoca a$ora la tercera

ola!

Como consecuencia" pronto se vio superada la capacidad de toma de decisiones de los antiguos

grupos dirigentes y fue preciso reclutar nuevas elites y subelites que se enfrentasen con esa carga!

=ara tal fin $ubo que crear instituciones pol%ticas nuevas y revolucionarias!

Iue este proceso invisible" pero ine;orable" el que atra3o poco a poco a la clase media $acia la

esfera pol%tica! Iue esta creciente necesidad de tomar de decisiones la que condu3o a un progresivo

aumento de la participación y creó más $uecos que tuvieron que ser ocupados por los de aba3o! #na

carga pesada tendrá en definitiva que ser compartida mediante una participación democrática más

amplia!

La necesidad de nuevas instituciones pol%ticas encuentra su e;acto paralelismo en nuestra

necesidad de nuevas instituciones familiares" educativas y empresariales! Está %ntimamente

conectada con nuestra b'squeda de una nueva base energtica" nuevas tecnolog%as y nuevas

industrias!

#nas generaciones nacen para crear una civilización" otras para mantenerla!

>oy" en todas las esferas de la vida social" en nuestra familia" nuestra iglesia" en nuestros sistemas

energticos y nuestras comunicaciones" nos enfrentamos con la necesidad de crear nuevas formasde la tercera ola" y millones de personas de muc$os pa%ses inician ya la tarea! &in embargo" en

ninguna parte es la obsolencia tan manifiesta o peligrosa como en nuestra vida pol%tica!

Resulta tan aterradora la perspectiva de un cambio pol%tico profundo con sus riesgos concomitantes"

que el statu quo" por surrealista y opresivo que sea" parece de pronto el me3or de los mundos

posibles!

La creación de nuevas estructuras pol%ticas para una civilización de la tercera ola no surgirá del

paro;ismo de una sola convulsión" sino como consecuencia de mil innovaciones y colisiones en

muc$os niveles" en muc$os lugares y durante un per%odo de dcadas!

Esto no e;cluye la posibilidad de violencia en el tránsito $acia el ma+ana! El paso de la civilización

de la primera ola a la de la segunda fue un largo y sangriento drama de guerra" revoluciones"

$ambre" ;odo" golpes de estado y calamidades! Lo que a$ora está en 3uego es muc$o más" con

menos tiempo" aceleración más rápida y peligros a'n mayores" depende de la fle;ibilidad e

inteligencia!

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 0 La T$r!$ra O)a ($A)12n To3$r 50 La T$r!$ra O)a ($A)12n To3$r 4

+I+LIO),A(ÍA

Alvin Toffler" La Tercera Ola 1679@2

Editorial =laza S *anes" arcelona Espa+a 6778