meheris la esperanza posible

Upload: fernando-gomez

Post on 14-Apr-2018

217 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    1/224

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    2/224

    La Sociedad de Ciencias Aranzadi es una asociacincientca sin nimo de lucro (declarada de utilidad

    pblica) cuyos objetivos son la investigacin cientca

    del medio natural y humano y la divulgacin de losresultados obtenidos. Fue fundada en el ao 1947 y tom

    Este libro recoge los hallazgos realizados por unequipo de investigacin, forense y laboratoriogentico de la Universidad del Pas Vasco, sobre uncaso de personas saharauis desaparecidas en FadretLeguiaa, cerca de Amgala y Mehiris, en febrero de1976. Es el resultado de una amplia investigacin

    que comenz con la realizacin de un estudio sobre laproblemtica general de las violaciones de derechoshumanos en el Shara Occidental, publicado en2012 por el instituto Hegoa de la Universidad del

    Pas Vasco, bajo el ttulo El Oasis de la Memoria:Memoria histrica y violaciones de Derechos

    Humanos en el Shara Occidental, y que ha tenidosu continuidad en la investigacin de algunos casosde personas detenidas y desaparecidas en esa poca.

    Se incluye una reconstruccin del caso en base a lostestimonios de los familiares de los desaparecidosy el testigo de los hechos. El estudio antropolgicoforense y gentico. As como las bases jurdicas delas exhumaciones y bsqueda de los desaparecidosen el Shara Occidental. Las conclusiones apuntantanto a la veracidad de los hechos como al apoyo a

    las demandas de los familiares de reconocimiento alas vctimas, justicia y reparacin. El respeto a losderechos humanos es la base de la salida polticaal conflicto del Shara, incluyendo el derecho a laverdad y el duelo de los familiares de ms de 400

    personas an desaparecidas.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    3/224

    Carlos Martn Beristain es mdico y doctor en psicolo-ga social. Trabaja desde hace 25 aos en Amrica Latinay Euskadi con vctimas de la violencia y organizacionesde derechos humanos. Fue coordinador del informeGuatemala Nunca Ms, y ha trabajado como asesor enComisiones de la Verdad de Per, Paraguay y Ecuador.

    Participa en distintos proyectos de investigacin y es do-cente en varios msteres sobre Cooperacin y Ayuda Hu-manitaria de la UPV/EHU y de la Universidad de Deusto.Ha realizado varios peritajes para la Corte Interamerica-na de Derechos Humanos y ha sido consultor de la CortePenal Internacional en varios pases de frica.

    Francisco Etxeberria Gabilondo es Mdico Especia-lista en Medicina Legal y Forense y Profesor Titular deesta materia en la Universidad del Pas Vasco. Miembrodel Instituto Vasco de Criminologa. Sus trabajos de An-tropologa y Patologa forense se han aplicado al mbitode los Derechos Humanos interviniendo en numerosasexhumaciones y anlisis de restos humanos por los que

    ha tenido distintos reconocimientos institucionales.

    Hegoa, Instituto de Estudios sobre Desarrollo y

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    4/224

    hegoa

    Septiembre 2013

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    5/224

    www.hegoa.ehu.es

    UPV/EHU. Edificio Zubiria EtxeaAvenida Lehendakari Aguirre, 8148015 BilbaoTel.: 94 601 70 91Fax: 94 601 70 [email protected]

    UPV/EHU. Centro Carlos SantamaraElhuyar Plaza, 220018 Donostia-San Sebastin

    Tel.: 943 01 74 64Fax: 94 601 70 40

    UPV/EHU. Biblioteca del Campus de lavaApartado 138Nieves Cano, 3301006 Vitoria-GasteizTel./Fax: 945 01 42 87

    www.aranzadi-zientziak.org

    Zorroagagaina, 1120014 Donostia - San SebastinTel.: 943 46 61 42Fax: 943 45 58 [email protected]

    Documento bajo licencia Creative Commons: Reconocimiento-NoComercial-SinObra Derivada 3.0 Espaa. Sepermite copiar, distribuir y comunicar pblicamente con libertad, siempre y cuando se reconozca la autora y nose use para fines comerciales. No se puede alterar, transformar o generar una obra derivada a partir de esta obra.

    Editado por:

    MEHERIS. La esperanza posible. Fosas comunes y primeros desaparecidos saharauis identificados

    Autora: Carlos Martn Beristain, Francisco Etxeberria Gabilondo,Elosa Gonzlez Hidalgo, Lourdes Herrasti Erlogorri, Luis Ros Frutos,Gabriella Citroni, Alejandro Valencia VillaIlustracin portada: Alonso Gil

    Impresin: Lankopi, S.A.Diseo y Maquetacin: Marra, S.L.

    Primera edicin: septiembre 2013Depsito Legal: BI-1177-2013ISBN: 978-84-89916-86-9

    Proyecto financiado por:

    Aieteko JauregiaAiete Pasealekua, 65-220009 Donostia-San Sebastinwww.euskalfondoa.org

    Esta publicacin es fruto del convenio suscrito conEuskal Fondoa denominado: Estrategia de Incidenciaen torno al informe El Oasis de la Memoria: Memoriahistrica y violaciones de derechos humanos en elSahara Occidental.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    6/224

    3

    ndice

    Presentacin 7

    La problemtica de la desaparicin forzada en el Shara Occidental 11

    Carlos Martn Beristain. Elosa Gonzlez HidalgoFamiliares de personas desaparecidas en los campamentosde Tinduf y el Shara Occidental 13

    Impacto en las vctimas y duelo en la desaparicin forzada 14

    El derecho a la verdad 14

    Recomendaciones del Grupo de Trabajo de Desaparicin Forzada 15de Naciones Unidas

    Exhumaciones y derecho al duelo 16

    El caso de los desaparecidos de Amgala 19Carlos Martn Beristain. Elosa Gonzlez Hidalgo

    Antecedentes 21

    Desapariciones forzadas de beduinos en Meheris-Amgala 22

    Ejecuciones extrajudiciales ante los ojos del nio 26

    Huida y xodo entre el terror 27

    Impacto traumtico de las desapariciones forzadas 28La bsqueda entre la nada 31

    Las respuestas del Estado de Marruecos: negacin, minimizacin y falsedad 32

    Actitudes ante la exhumacin e investigacin forense 38

    Proteccin del lugar de exhumacin 40

    Devolucin de los restos y realizacin de ceremonias y ritos 42

    Investigacin de los hechos y demanda de justicia 42

    Una luz de esperanza y un momento histrico 43

    Las demandas de bsqueda de los familiares de desaparecidos 45

    La investigacin sobre los desaparecidos: modelo y prctica 46

    Descripcin del proceso de exhumacin. Hallazgo y anlisis

    de las fosas comunes 49Carlos Martn Beristain. Elosa Gonzlez Hidalgo

    Antecedentes del proceso de exhumacin: encuentro de restos humanos 51Accesibilidad y seguridad 52

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    7/224

    4

    Meheris. La esperanza posible

    Detalles de la orografa del terreno 52

    Desarrollo del proceso de investigacin mdico, antropolgicoy arqueolgico forense 52

    Descripcin del trabajo realizado en las fosas 54

    Informe relativo a la exhumacin y anlisis de los restos humanos

    localizados en dos fosas comunes en Shara Occidental 55Francisco Etxeberria. Lourdes Herrasti. Luis Ros

    Resumen 57

    Antecedentes 57

    Operaciones practicadas y metodologa 58Resultados 60

    Fosa 1 de Fadret Leguiaa regin de Smara 62

    Fosa 2 de Fadret Leguiaa regin de Smara 116

    Descripcin del Individuo 1 (Fosa 2)

    Descripcin del Individuo 2 (Fosa 2)

    Identicacin 169

    Conclusiones 176Bibliografa 177

    Base jurdica para las exhumaciones en el Shara Occidental 179Gabriella Citroni. Alejandro Valencia Villa. Carlos Martn Beristain

    El mandato de la MINURSO 181

    Obligaciones del derecho internacional sobre exhumaciones en los casosde violaciones de derechos humanos 181

    El caso de las fosas de Meheris 181Obligaciones de los Estados 181

    Estndaresinternacionalessobreexhumacioneseidenticacinde restos mortales en casos de graves violacionesde los derechos humanos y obligaciones relacionadas 184

    Principios de derecho internacional humanitario 188

    - I Convenio de Ginebra para aliviar la suerte que corren los heridosy los enfermos de las fuerzas armadas en campaa, 1949

    - Convenio de Ginebra para aliviar la suerte que corren los heridos,los enfermos y los nufragos de las fuerzas armadas en el mar, 1949

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    8/224

    5

    ndice

    - Convenio de Ginebra relativo al trato debido a los prisionerosde guerra, 1949

    - Protocolo I adicional a los Convenios de Ginebra de 1949

    relativoalaproteccindelasvctimasdelosconictosarmadosinternacionales, 1977

    - Protocolo II adicional a los Convenios de Ginebra de 1949 relativoalaproteccindelasvctimasdelosconictosarmadossincarcter

    internacional, 1977

    Derecho internacional de los derechos humanos: la Convencin Internacionalpara la proteccin de todas las personas contra la desaparicin forzada 192

    Otras referencias en el marco del derecho internacionalde los derechos humanos 192

    Otros instrumentos de referencia sobre los criterios a seguir en casos deexhumaciones relacionadas con graves violaciones de los derechos humanos 193

    Conclusiones 195Carlos Martn Beristain. Francisco Etxeberria

    Anexo. Informe de Identicacin Biolgica 201

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    9/224

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    10/224

    7

    Presentacin

    Presentacin

    El siguiente documento recoge los hallazgos realizados por un equipo de investigacin,forense y laboratorio gentico de la Universidad del Pas Vasco sobre un caso de personas

    desaparecidas, ciudadanos saharauis y espaoles, en la regin de Amgala en febrero de1976. Es el resultado de una amplia investigacin que comenz con la realizacin de unestudio sobre la problemtica general de las violaciones de derechos humanos en el Sha-ra Occidental, publicado en 2012 por el Instituto Hegoa de la Universidad del Pas Vasco1,ver http://publicaciones.hegoa.ehu.es/publications/281 y que ha tenido su continuidad enla investigacin de algunos casos de personas detenidas y desaparecidas en esa poca.

    Laproblemticadelaspersonasdesaparecidasduranteelconictoarmadoylaviolencia

    contra la poblacin civil saharaui, sigue presente en las vidas de sus familias, dada la incerti-dumbre sobre su destino y la herida permanentemente abierta con la que viven. La negacina proporcionar informacin relevante y veraz sobre su destino es parte del maltrato y atenta-do a su integridad psicolgica considerndose por parte de tribunales internacionales comouna forma de tortura2. Hay que tener en cuenta que la prctica sistemtica y generalizadadedesaparicinforzadasecalicadecrimende lesa humanidad3. Desde el punto de vistajurdico la desaparicin forzada tiene el carcter de delito permanente hasta que no se inves-tiguen los hechos, se realicen en su caso exhumaciones y procesos de bsqueda efectiva, yse devuelvan los restos a los familiares para poder cumplir con sus demandas, atendiendo asus derechos, especialmente a la verdad y el duelo, adems de la justicia y reparacin. Ade-ms, la desaparicin forzada es una violacin mltiple de varios derechos humanos4 y la

    prohibicin de desapariciones forzadas y el correlativo deber de investigarlas y sancionar asus responsables han alcanzado carcter dejus cogens5.

    Un equipo de investigacin y forense de la Universidad del Pas Vasco, recibi en abril delao 2013 la peticin de la Asociacin de Familiares de Presos y Desaparecidos Saharauis,

    1 En dicho informe, basado en 261 testimonios, se analiza entre otros el fenmeno de la desaparicin forzaday el impacto psicosocial que esta ha tenido en los familiares de desaparecidos, tanto los que se encuentran enlos campamentos de refugiados de Tinduf como los que se encuentran en el Shara Occidental.

    2 Este principio se encuentra consagrado en el Artculo 24, prr. 1 de la Convencin internacional parala proteccin de todas las personas de la desaparicin forzada, y ha sido reconocido repetidamente porla jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (vase, entre otros, caso GonzlezMedina y familiares v.Repblica Dominicana, sentencia del 27 de febrero de 2012, prr. 270-275); de laCorte Europea de Derechos Humanos (entre otros, casoEr y otros v. Turqua, sentencia del 31 de julio de2012, prr. 94-97); y del Comit de Derechos Humanos de Naciones Unidas (entre otros, caso Guezout yRakikv.Argelia, observaciones de 19 de julio de 2012, prr. 8.6).

    3 Artculo 7, prr. 1 f) del Estatuto de Roma. La desaparicin forzada est prohibida tambin de acuerdo con elderecho internacional humanitario consuetudinario (Norma 98).

    4 Vanse, entre otros, Comit de Derechos Humanos, Observacin General No. 31 de 29 de marzo de 2004Naturaleza de la obligacin jurdica general impuesta a los Estados partes en el Pacto, prr. 18. En el mismosentido, Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias (GTDFI),Informe anual para 1982,

    doc. E/CN.4/1983/14 de 21 de enero de 1983, prr. 131. Adems, Relator especial contra tortura, Informeinterino para 2011, doc. A/56/156 de 3 de julio de 2011, prr. 14 (vanse en general los prr. 9-16).5 Corte IDH, Caso Goibur y otros v. Paraguay, sentencia del 22 de septiembre de 2006, Ser. C No. 153, prr. 80.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    11/224

    8

    Meheris. La esperanza posible

    AFAPREDESA, para realizar una investigacin en una zona del Shara Occidental dondese sospechaba que haba restos humanos de vctimas saharauis. Los das 8, 9 y 10 de juniode ese mismo ao, un equipo profesional de la Universidad del Pas Vasco, la Fundacin

    Aranzadi y el Instituto Universitario Hegoa, acompaados por varios familiares ymiembros de AFAPREDESA visit un lugar en la zona de Fadret Leguiaa, regin deSmara, en medio del desierto, con el objeto de responder a la peticin de que un equipodelamximacualicacinprofesionalyexperiencialesayudaraaidenticaryreconocer

    un lugar donde al parecer existan fosas comunes, y en donde estaban presuntamentesepultadas algunas personas consideradas hasta la actualidad como desaparecidas.

    El presente informe muestra los resultados de dicha investigacin. En la primera parte serecogen los antecedentes y la reconstruccin del caso de ocho personas desaparecidas en elShara Occidental, en la zona de Meheris, cerca de Amgala, en febrero de 1976. En base a

    los testimonios de testigos presenciales de los hechos y familiares de las vctimas afectadas,se hace una reconstruccin de lo sucedido, de las ejecuciones y enterramientos clandestinosde las vctimas, las consecuencias y el impacto que las desapariciones produjeron en losfamiliares. En una segunda parte, se analizan las demandas de los familiares una vezrealizadalaexhumacineidenticadoslosrestosdelaspersonas,siguiendolosestndares

    cientcosinternacionalesenestetipodeinvestigaciones.

    Segn ha podido determinar la investigacin se trata en todo caso de ciudadanosespaoles, ejecutados extrajudicialmente en febrero de 1976 por una patrulla del ejrcitomarroqu. El estado de Marruecos haba reconocido en 2010 que algunas de ellas fuerondetenidas y seal que fueron llevadas a un cuartel en Smara donde fallecieron durantesu cautiverio, no proporcionando ninguna informacin ni investigacin sobre los hechos.Sin embargo, segn los datos de esta investigacin se trataba de personas civiles, pastoresbeduinos,quenoparticipabanenelconictoarmadoyquevivanenlazonadedicndose

    al pastoreo, que fueron detenidos, ejecutados y posteriormente enterrados en dos fosascomunes por dichas fuerzas en el mismo lugar.

    Se describe el proceso de las exhumaciones realizadas y los hallazgos forenses. Lametodologa empleada, el descubrimiento de los restos, las caractersticas de las fosas, y

    los procedimientos estandarizados para el anlisis osteolgico de los restos, as como latoma de muestras para el anlisis gentico, tanto de los restos como de las personas quese presuma eran familiares de los desaparecidos. Se incluyen numerosas fotografas quedan cuenta de todo el proceso.

    El siguiente apartado incluye los anlisis genticos realizados por el laboratorio delGrupo Consolidado BIOMICs de la Universidad del Pas Vasco. A travs de los mismosse ha podido determinar la identidad de todos los desaparecidos que se encontraban endichas fosas.

    Las exhumaciones se hicieron en un contexto difcil y con escasos medios, en un lugarcercano al muro construido por Marruecos y en una zona en la que existen todava

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    12/224

    9

    Presentacin

    numerosas minas antipersonales. Debido a que la zona est bajo supervisin por parte delaMINURSOdelAltoelFuego,rmadoporlaspartesen1991,losrestosfuerondejados

    debidamente protegidos y sealados en el lugar donde se encontraron, con el objeto dequeserealiceprximamenteunamisindevericacinocialquepuedaconcluirconla

    entrega de los restos a los familiares, y se instauren medidas para la proteccin de otrasfosas que se encuentran en la zona.

    Los familiares directos de este caso se encuentran en los campamentos de refugiadosde Tinduf, como otros muchos familiares. Mientras otra buena parte de ellos estn enel Shara Occidental ocupado por Marruecos. Los derechos de todas estas vctimas,en los dos contextos, deben ser protegidos por las autoridades correspondientes con lasupervisin de Naciones Unidas.

    Durante ms de 37 aos los familiares de desaparecidos saharauis han estado esperandoeste momento. La emocin contenida y el profundo sentido humanitario de esta accin,conllevan tambin responsabilidades para las autoridades de la MINURSO, el EstadoEspaol dado que se trata de ciudadanos espaoles ejecutados extrajudicialmente, lasautoridades marroques que deben facilitar el acceso y proteccin de otros lugares de entierroo fosas comunes en el territorio del Shara Occidental bajo su control o en Marruecos.El objetivo es cumplir con los derechos a la verdad, el duelo y la reparacin como partede los mecanismos de respuesta a las violaciones de derechos humanos cometidas en elcaso de los desaparecidos reconocidos en los instrumentos internacionales de derechoshumanos y la legislacin internacional del Derecho Internacional Humanitario.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    13/224

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    14/224

    La problemtica de la desaparicin forzadaen el Shara OccidentalCarlos Martn Beristain

    Elosa Gonzlez Hidalgo

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    15/224

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    16/224

    13

    La problemtica de la desaparicin forzada en el Shara Occidental

    Actualmente existen ms de 400 vctimas de desaparicin forzada saharauis. Otrasmuchas personas saharauis se encuentran tambin desaparecidas como consecuencia delos bombardeos. Sobre 207 de estas vctimas Marruecos dio una respuesta en su informedel CCDH de 2010 publicado en internet, donde en la mayor parte de los casos sealaque murieron debido a las condiciones o durante el periodo de detencin. El mismoinformereconoceotros144casosdedesaparecidossinfacilitarsuidenticacin.

    El Grupo de Trabajo de Naciones Unidas contra la Desaparicin Forzada o Involuntariallev a cabo una visita a Marruecos de la que realiz un informe en 2010 6. En dichoinforme se analiza la prctica de desaparicin forzada tal y como ha sido utilizada por lasautoridades marroques y donde se incluyen varias referencias a la naturaleza sistemticay a la situacin de impunidad relativa a las desapariciones en el Shara Occidental. Cercadel 80% de dichas desapariciones se dieron durante los primeros aos de la ocupacin

    militar del territorio, especialmente entre 1975 y 1977, constituyendo el modus operandifundamental de la represin marroqu. Aunque posteriormente los casos siguierondndose de forma ms selectiva.

    Familiares de personas desaparecidas en los campamentos de Tinduf

    y el Shara Occidental

    En el estudio cuantitativo realizado en base a los 261 testimonios para el informe ElOasis de la Memoria, el 64% de la muestra de los familiares de personas desaparecidas

    entrevistadas residen en los campamentos y son en su mayora mujeres (60%, frente al40% de hombres que declararon como familiares), mientras el 36% de los familiaresdeclarantes residen en el Shara Occidental. Muchos familiares de desaparecidosentrevistados, se encuentran en los campamentos de refugiados.

    Estos datos son importantes porque las vctimas que se encuentran en los campamentosno han tenido ningn reconocimiento de las violaciones sufridas ni siquiera acceso ala informacin o a las gestiones para la bsqueda. Tambin han estado excluidas decualquier trato con instituciones como el Comit de Arbitraje, la IER o el ConsejoConsultivo de Derechos Humanos de Marruecos ante las que las vctimas del Shara

    Occidental hicieron sus demandas de investigacin o reconocimiento y que, en ciertoscasos, otorg indemnizaciones. Las condiciones de impracticabilidad impuestas por elEstado de Marruecos, debido a su condicin de refugiados, han impedido el ejerciciode sus derechos. Los familiares residentes en los campamentos han estado mucho msaislados debido a que dichas instancias no los reconocen.

    6 Doc. A/HRC/13/31/Add.1 de 9 de febrero de 2010 (prr. 38, 45 y 53).

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    17/224

    14

    Meheris. La esperanza posible

    Impacto en las vctimas y duelo en la desaparicin forzada

    Las violaciones de derechos humanos producen prdidas humanas, materiales y sociales.En el caso del duelo existen diferencias culturales y de gnero que hay que tener en cuenta,

    como en la cultura islmica en la que los hombres tienen una actitud ms estoica mientraslas mujeres son ms expresivas. Ese impacto es descrito todava hoy en da como undolor fresco o una herida abierta. Por otra parte, no se trata de hechos que quedaron atrs,sino de violaciones de derechos humanos y consecuencias que se siguen enfrentandohoy en da. Especialmente, el impacto psicolgico en los casos de desaparicin forzadareactualiza el sentido de la prdida.

    Respecto al conjunto de las vctimas saharauis, el 92,72% de la poblacin declar habertenido un muy fuerte impacto emocional en el momento de los hechos, y casi ocho de cadadiez vctimas (78,16%) sigue afectada por las violaciones en la actualidad. Esto se dade forma algo mayor entre la poblacin que reside en los campamentos (83,61%) encomparacin con la poblacin del Shara Occidental (73,38%), y de forma relevanteen los familiares de desaparecidos, especialmente las mujeres.

    En el refugio, con el paso del tiempo y el bloqueo de sus expectativas de retorno y derealizacin del referndum, el contexto de provisionalidad mantenida durante dcadas espsicolgicamente muy difcil de enfrentar. Bloquea los intentos de rehacer sus vidas y suproyecto colectivo que se encuentra en manos de una negociacin poltica estancada haceaos por Marruecos y de iniciativas de Naciones Unidas paralizadas. El anlisis de los

    testimonios recogidos seala que la prctica totalidad de las vctimas (95,40%) sufri unempeoramiento grave de sus condiciones de vida y vio truncado su proyecto vital (89,66%)como consecuencia de las violaciones de derechos humanos sufridas. Ambas consecuenciastienenunaprofundaimplicacinfamiliar.Adems,dosdecadadiezvctimasrerieronque

    haba ms de un caso de desaparicin forzada en la familia.

    En general, los familiares de personas desaparecidas mostraron mayor impacto delestigmayelaislamientosocial,quetambinfuereferidodemaneramssignicativapor

    lasmujeres.Losfamiliaresdepersonasdesaparecidasreerendeformamssignicativa

    las consecuencias de separacin y el abandono como consecuencia del impacto de la

    prdida de sus familiares y del duelo.

    El derecho a la verdad

    La bsqueda de la verdad es un ingrediente bsico en los procesos de reconstruccindeltejidosocialdespusdeconictosarmados.Laexperienciainternacionalmuestrala

    importancia de la investigacin y declaracin pblica de la verdad para que un pas puedamirar hacia delante. En tanto que para las vctimas de graves violaciones de derechoshumanos, la verdad es la base que permite tener un espacio social de reconocimiento.

    Sin embargo, en el caso del Shara Occidental la verdad de lo sucedido an no ha sidoreconocida por el rgimen marroqu a las vctimas de graves violaciones de derechos

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    18/224

    15

    La problemtica de la desaparicin forzada en el Shara Occidental

    humanos de acuerdo con unos mnimos estndares internacionales, que constituyan unabase para el restablecimiento de los derechos y la convivencia. Quienes han perdido a susfamiliares necesitan saber qu pas con ellos, y dnde estn sus cuerpos. En caso contrariose les obliga a un duro proceso de duelo y a quedar excluidos de nuevos proyectos personalesy colectivos. Esta demanda es generalizada entre los familiares de los desaparecidos, tantoen el Shara Occidental como en los campamentos de refugiados de Argelia.

    Los familiares de desaparecidos saharauis exigen conocer los detalles sobre los hechos:qu sucedi, quines fueron los responsables, dnde quedaron los cuerpos y cul fue eldestinonaldesusfamiliares.Estademandasiguevivaydueleenlaexperienciadelos

    familiares de desaparecidos, en la que el tiempo no ha supuesto ninguna mejora de susituacin. Asimismo, desde un punto de vista jurdico, hasta que no se establezcan concertidumbre la suerte y el paradero de la persona desaparecida, el delito se sigue cometiendo

    y tiene naturaleza permanente, con la consecuente imposibilidad de prescripcin de laaccin penal, entre otras7. Por ello, los Estados tienen una obligacin internacional decontinuar con la investigacin de una desaparicin forzada hasta establecer la suerte dela persona desaparecida8.

    Recomendaciones del Grupo de Trabajo de Desaparicin Forzada

    de Naciones Unidas

    Tras haber llevado a cabo su visita a Marruecos en 2009, el GTDFI declar expresamente

    quenoessucientereferirlaexistenciadefosascomunes,sinoqueelEstadotienelaobligacindeexhumarloscuerposeidenticarlosdeacuerdoconlosestndaresinterna -cionales, incluso la toma de muestras de ADN9. El GTDFI recomend a Marruecos quese sirva de mdicos forenses independientes10.

    7 Sobre la naturaleza permanente del delito de desaparicin forzada de personas, vanse entre otros: Comentariogeneral del GTDFI de 2010 (en ingls: www.ohchr.org/Documents/Issues/Disappearances/GCEDCC.pdf);Art. 17 de la Declaracin sobre la proteccin de todas las personas contra las desapariciones forzadas(1992); y Art. 8 de la Convencin internacional para la proteccin de todas las personas contra lasdesapariciones forzadas (2007).

    8 Vase Art. 24, prr. 6, de la Convencin internacional para la proteccin de todas las personas contra lasdesapariciones forzadas (2007).

    9 Con respecto a los estndaresy lasobligaciones internacionales en materiade exhumacin, identicacin

    y restitucin de restos mortales, vanse, entre otros, el informe de marzo de 2010 sobre la marcha de lostrabajos del Comit Asesor del Consejo de Derechos Humanos sobre las mejores prcticas en relacin con lacuestin de las personas desaparecidas (A/HRC/14/42 de 22 de marzo de 2010); Comit Asesor del Consejode Derechos Humanos ha publicado su informe sobre mejores prcticas relacionadas con la cuestin de laspersonas desaparecidas (doc. A/HRC/AC/6/2 de 22 de diciembre de 2010); y Art. 24, prr. 3 de la Convencininternacional para la proteccin de todas las personas contra las desapariciones forzadas, que establece quecada Estado adoptar todas las medidas apropiadas para la bsqueda, localizacin y liberacin de las personasdesaparecidas y, en caso de fallecimiento, para la bsqueda, el respeto y la restitucin de sus restos.

    10

    El GTDFI ha reiterado dichas recomendaciones en su reciente informe de seguimiento a las recomenda-ciones formuladas en el informe relativo a la visita a Marruecos (doc. A/HRC/45/Add.3 de 1 de marzo de2013, prr. 26 y 29).

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    19/224

    16

    Meheris. La esperanza posible

    Asimismo, en su comentario general sobre el derecho a la verdad en relacin con lasdesapariciones forzadas, el GDTFI ha aclarado que: el derecho a conocer la verdad sobrela suerte y el paradero incluye, en el caso de que la persona desaparecida haya fallecido,el derecho de la familia a que se le restituyan los restos mortales de sus seres queridos,y a disponer de dichos restos de acuerdo con su tradicin, religin o cultura. Los restosdelaspersonasdebenhabersidoidenticadosdemaneraclaraeindisputable,inclusive

    por medio de anlisis de ADN. El Estado, o cualquier otra autoridad, no deberanemprenderelprocesodeidenticacindelosrestos,ynodeberadisponerdedichos

    restos, sin la plena participacin de la familia y sin haber informado de manera completaal pblico general con respecto a dichas medidas. Los Estados deben tomar las medidasnecesariasparautilizarlaexperticiaforenseylosmtodoscientcosde identicacin

    aprovechando lo ms posible los recursos disponibles, inclusive a travs de la asistenciay de la cooperacin internacionales11.

    Los estndares internacionales muestran que los Estados tienen como parte del deber degaranta, la obligacin de investigar de manera seria, profesional y con todos los mediosa su alcance las violaciones de derechos humanos, obligacin que se extiende no sloal Estado de Marruecos que tiene la obligacin principal sino tambin al propio Estadoespaol del que numerosos saharauis desaparecidos eran legalmente ciudadanos12.

    Exhumaciones y derecho al duelo

    Frentealasdemandasdeinvestigacin,identicacindelosrestosodeldestinodesusfamiliares y devolucin a las familias, las autoridades marroques a travs de la IERpromovieron desde 2005-2006 la idea de que las personas desaparecidas estaban muertasy que los familiares deban aceptarlo, sin que el Estado tuviera que proveer ningunaprueba,losdatosolosresultadosdesuinvestigacin,lugaresdeentierro,oidenticacin

    y devolucin de los restos. Dichas acciones supusieron para los familiares un nuevoimpacto traumtico ya que deban matar simblicamente a su familiar y aceptar loshechos sin tener ninguna informacin, explicacin o prueba por parte del Estado que hasido responsable de las desapariciones forzadas. Numerosos familiares relataron en elmarco de esta investigacin, experiencias de presin por parte de las autoridades para queaceptaran la muerte a cambio de obtener indemnizaciones econmicas por la prdida desus seres queridos.

    En el caso del Shara Occidental y ms ampliamente en Marruecos se necesita no slouna investigacin efectiva sobre la suerte y el paradero de las personas desaparecidas y

    11 GTDFI (2010),Informe sobre... op. cit, prrs. 41-44 y 106.12 El Art. 15 de la Convencin internacional para la proteccin de todas las personas contra las desapariciones

    forzadas establece que los Estados cooperarn entre s y se prestarn todo el auxilio posible para asistir a las

    vctimas de las desapariciones forzadas, as como en la bsqueda, localizacin y liberacin de las personasdesaparecidasy,encasodefallecimiento,enlaexhumacin,laidenticacindelaspersonasdesaparecidasy la restitucin de sus restos.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    20/224

    17

    La problemtica de la desaparicin forzada en el Shara Occidental

    laentregadelosrestosalosfamiliares,sinollevaracabomodicacioneslegalescomo

    las que se han dado en pases como Argentina, Chile o Per. En estos casos se otorga unestatuto legal de ausencia por desaparicin forzada cuando el Estado ha hecho todos losesfuerzosporidenticaralosdesaparecidos,yellonohasidohastaelmomentoposible.

    En dichos procedimientos, el Estado asume la responsabilidad de la ausencia y estadeclaracin da lugar a las reparaciones correspondientes, sin que los familiares tenganque aceptar la muerte en trminos legales para acceder a restitucin o reparaciones.

    Elderechoalduelosereerealaobligacindefacilitarlainformacindisponiblesobre

    sus familiares desaparecidos, los procesos de identicacin necesarios, as como, el

    acceso a los restos de sus seres queridos y facilitar los ritos funerarios que sean adecuadosen su cultura. Para asegurar que estos procesos de exhumacin y devolucin ayuden a losprocesos de duelo se necesita:

    a) Que las vctimas cuenten con informacin adecuada de los procedimientosrealizados, los lugares excavados o la presuncin de vctimas.

    b) Establecer una va de comunicacin accesible y culturalmente adaptada, para quelas familias puedan tomar decisiones informadas.

    c) Tener en cuenta su participacin en los procesos facilitando su acceso si es posible,proporcionandoinformacinyrecogiendolaschasante-mortem.

    d) Recoger sus expectativas y proporcionar el apoyo emocional y colectivo necesario

    durante la realizacin de las exhumaciones y posteriormente.f) En caso de problemas de seguridad o poca accesibilidad de los familiares, realizar

    actividades de recogida de informacin, grabacin de la diligencia, etc. quepermitan un seguimiento posterior por parte de los familiares de las exhumacionespracticadas.

    g) Proporcionar un contacto posterior con los familiares que puedan estar afectadospor la exhumacin realizando las acciones de informacin, bsqueda de pruebaso apoyo emocional necesario, as como las gestiones que se pueden realizar parallevaracabolaidenticacin.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    21/224

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    22/224

    El caso de los desaparecidos de AmgalaCarlos Martn Beristain

    Elosa Gonzlez Hidalgo

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    23/224

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    24/224

    21

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    Antecedentes

    Desdenalesde1975enquesediolaocupacinmilitardelSharaOccidentalporparte

    del ejrcito marroqu, una buena parte de la poblacin saharaui haba comenzado suxodo hacia lugares considerados ms seguros, como un intento de proteccin frentea las amenazas, detenciones y desapariciones forzadas que se empezaron a dar desdelosprimerosdasdelamisma.Adems,tambinanalesde1975,seempezaronadar

    algunos bombardeos de poblacin civil saharaui por parte de la aviacin marroqu ypillaje de las propiedades de la poblacin beduina, tales como sus jaimas, camellos ycabras como parte de la estrategia de guerra.

    La mayor parte de los familiares de personas desaparecidas entrevistadas para lainvestigacin de este caso, vivan en la zona de Amgala o cerca de ella en esa poca.

    Algunos con sus familiares directos, otros con la familia extensa, como parte de lastradiciones y el modo de organizacin y apoyo familiar entre la poblacin beduina. Lasdescripciones de los familiares sealan una vida tranquila en el desierto, basada en elnomadismo, y con relaciones de apoyo y reciprocidad entre las familias o vecinos.

    Vivamos anteriormente, en mi infancia, en la zona de Amgala, en una situacinde quietud. Tenamos mucho ganado, vivamos pastoreando en toda la zona, habaun buen entendimiento entre el resto de los campamentos que haba en la zona.Me acuerdo mucho de esa poca como un tiempo feliz, donde jugaba con el restode los nios, bamos a la escuela cornica, estbamos muy felices y en absolutatranquilidad. Mohamed-Fadel Abdalahe Ramdan.

    En aquellos momentos, ramos una familia beduina, vivamos en condiciones denmadas pero estbamos muy contentos con nuestra forma de vivir hasta quelleg la Marcha Verde, la invasin del ejrcito de las tropas marroqu que habandetenido a mi padre. Mahyub Mohamed-Mulud Mohamed Lamin Maimun

    Entre las personas incluidas en este caso se encontraban tambin dos trabajadores de laempresa Cubiertas y Tejados, y un funcionario pensionado que trabajaba en servicios

    de limpieza de Amgala anteriormente. Se trata en todo caso de poblacin civil que sededicaba a tareas de pastoreo en esa poca.

    En la poca en que mi padre desapareci yo tena entre 10 y 11 aos. Aunque yoviva con mi abuela materna, mi padre vena a visitarme de vez en cuando, no eranmuy frecuentes las visitas por el pastoreo. A partir de 1974 comenc a convivircon mi padre porque l comenz a trabajar en Cubiertas y Tejados, y ademsporque con la ltima mujer con quien estaba mi padre, tena la casa cerca de misabuelos. El xodo se hizo de una forma desorganizada, en ese momento mi padrey los trabajadores de la compaa estaban ah, as que tuvieron que llevar a lafamilia a la zona de Amgala. En este momento yo viaje con mi padre para esa zonadonde despus llegaron las tropas marroques. Lehbib Salama Mohamed-Ali.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    25/224

    22

    Meheris. La esperanza posible

    Salma Mohamed, mi padre, era una persona retirada y cobraba una pequeapensin, y siempre estaba en su casa... era un pensionario de limpieza dentro dela ciudad y, como era persona mayor, no pas mucho tiempo trabajando para quesea pensionista. Fatimetu Salma Mohamed Sidahmed.

    Desapariciones forzadas de beduinos en Meheris-Amgala

    l estaba con su hijo, mi hermano Mohamed Salma. Estaba conduciendo a loscamellos cuando vio como una fuerza se acerc al lugar donde estaban deteniendoy llevando, y se escap del lugar. Toda la informacin de la que disponemos es deno saber nada desde que fueron secuestrados. Todo indica que no salieron siquieradel lugar, de la zona de Amgala, esos son todos los indicios que ha habido. EbteilaSalma Mohamed Sidahmed.

    Durante el mes de febrero de 1976 se produjo un operativo militar de gran escala por partedel ejrcito marroqu en la zona de Amgala, en el Shara Occidental. Al menos cincotestigos de los hechos sealan que se dieron en la segunda semana de febrero, y el testigoprincipalreerequeloshechosocurrieronel12y13defebrero.Enesosdas,cientos

    de militares y decenas de vehculos con ametralladoras y armamento pesado ocuparonla zona. Segn los testimonios de testigos y vctimas de los hechos, se llevaron a cabonumerosas detenciones especialmente de beduinos que vivan en la zona.

    En aquellos momentos era la salida del colonialismo espaol del Shara y laentrada de la invasin de las tropas, la llamada Marcha Verde. Vivamos juntosy, producto de esa invasin, mi padre tuvo que ir a Smara para poder salvar a losms pequeos de la familia. Qued yo y mi hermano junto a mi to llamado CheijaAhmed. En aquellas condiciones y en un proceso de xodo, mi hermano tuvo queir junto con Salma Daf a traer el agua para el camino. Ellos tuvieron que ir a unazona no muy lejana de donde estaba yo, tuve que quedarme con mi to y tambincon Hamada, el hijo de Salma Daf. Yahdih Salma Ahmed.

    Como en otras regiones del Shara Occidental, la poblacin beduina saharaui fue

    considerada como enemigo interno, como posible apoyo del Frente Polisario, y sufrinumerosas capturas y desapariciones, ejecuciones extrajudiciales y persecucin en eldesierto. Por otra parte, el ganado, como camellos, cabras y ovejas, fue objeto de pillaje ola gran mayora fue acabada como consecuencia de acciones militares destinadas a evitarel posible aprovisionamiento del Frente Polisario y la posibilidad de vivir en el desierto.

    Durante esos das de febrero, numerosos beduinos se encontraban en el lugar de pastoreoy cerca de algunas fuentes de agua en Amgala. Sin embargo, ya la situacin de tensin y elmiedo se haban instaurado en la zona. Numerosas familias haban emprendido el xodo.

    Era capataz en El Aain, en la empresa Cubiertas y Tejados. Ha trabajado enmuchas empresas. En la Marcha Verde, enterr toda la documentacin. En el

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    26/224

    23

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    momento de la desaparicin ramos beduinos dedicados al pastoreo. l se fuea darles de beber a los camellos a un pozo en Amgala, y es en ese momento queentr el ejrcito marroqu en la regin. Jueila Mustafa Yumani.

    Yo llegu antes que el resto de la familia, Sidi se qued con su hermano Yahdih,les dej en esa zona de Amgala porque era una zona de paso en que se movan,estaban desplazndose de un lugar a otro y estaban seguros en esa zona. No semovieron mucho, dado que en esa poca era una de las zonas ms verdes delterritorio. Yo mismo me encontraba ya en Rabuni en esos momentos, ya haballegado aqu. Mohamed Salem Ahmed Hama.

    Segn varios de los familiares entrevistados para esta investigacin, algunos de estoshombres o nios que se encuentran desaparecidos desde entonces, se dirigieron hacia el

    pozo de Amgala cercano, para dar agua a sus animales. En las inmediaciones de dichopozo, varios de ellos fueron detenidos por fuerzas militares marroques.

    Sucedi cuando tena 16 aos. En poca de exilio hemos salido todos de Amgala.En el viaje, de repente tuvimos sed por la escasez de agua. Entonces mi padretena que regresar con mi hermano y mi ta (Embarca Daf Sidi Salem, hermanaadoptada de Salma) con sus camellos para que traigan agua. A los pocos daslos camellos volvieron sin ellos. Entonces ah es cuando nos enteramos de queAmgala ha sido invadida por las fuerzas armadas marroques que venan desdeSmara. Jaiduma Salma Daf.

    Algunos de los que fueron detenidos sobrevivieron a los hechos, como Aba Ali Said Daf oYahdih Salma que era nios de 13 y 9 aos respectivamente. La ta del primero, Embarcalinay el hermano de este ltimo, Sidi Salec Salma, se encuentran desaparecidos desde entonces.

    Estaba con mi hermano Sidi Salec y mi padre, ste fue a ver a otros hermanosms pequeos y nos dej con nuestro to que se llama Cheija Ahmed Hamma. Enaquellos momentos las tropas se dividieron y comenzaron a arrasar de una maneraviolenta contra la gente civil. Ese da, yo me qued con las cabras y mi hermanoSidi-Salec llev a los camellos, por la noche, a buscar agua. Fui capturado junto

    con otro nio de nombre Hamada Salma Daf a la maana siguiente. A mi to no lodetuvieron porque se escondi. Cuando llegaron las tropas marroques, vinieronunos coches y nos iban a disparar. Por suerte el comandante de las tropas noestaba muy lejos, y ha dicho a los soldados que no nos mataran. Nos comenzarona interrogar... Yahdih Salma.

    Lazona identicadapor este testigo fue Budreiga, cercadeAmgala. Elmismolugar

    donde el otro testigo, Aba Ali Said Daf, seala que sucedieron los hechos. Segncoinciden varios testimonios de testigos presenciales, otros adultos y nios fueron asmismo detenidos, debido a que se encontraban realizando las mismas tareas con losanimales y eran vecinos, como Salma Daf Sidi Salec y Bachir Salma Daf (hijo). Lamismainformacinfueconrmadavariosaosdespusdeloshechosalosfamiliares

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    27/224

    24

    Meheris. La esperanza posible

    de Sidahmed Segri Yumani, sealando los nombres de las personas que estaban con l yfueron desaparecidos como Salama Mohamed-Ali, Salma Daf y Sidi-Salec. Todos ellospertenecen a este grupo de detenidos desaparecidos.

    Lehbib Salama Mohamed-Ali, que era un nio de 11 aos en ese tiempo, acompa a supadre Salama Mohamed-Ali Sidahmed Elkarcha, despus desaparecido, y vio en el pozoa otra de las personas tambin desaparecidas desde entonces, Abdalahe Ramdan.

    Tenamos familia en Guelta y en Amgala, pero no volvi a ninguna de las doscasas. Adems dijo que no iba a demorar, que solo iba por agua, por esa razn nosdimos cuenta de que haba desaparecido. Nadie nos cont, lo dedujimos por lo queestaba pasando alrededor. Cuando estuvimos en el pozo encontramos a AbdalaheRamdan que yo conoca por mi padre. Adems, el camello que se llevaron volvi

    solo cerca de Amgala.Despus de encontrarme con Aba-Ali, ste me cont cmofue la historia, y tiempo despus, otros que pertenecan al Polisario me contaronque varias personas haban sido detenidas. Lehbib Salama Mohamed-Ali.

    Varios de los familiares de los desaparecidos tuvieron informacin en esos das de lo quehaba sucedido a travs de testigos presenciales, en este caso el hijo de Abdalahe Ramdanuno de los desaparecidos.

    En esa poca yo tena 14 aos y hemos sido informados a travs de un muchachoque presenci cmo secuestraron todo un grupo, en el que se encontraba mi padre

    y otro seor que se llamaba Mohamed Mulud Mohamed Lamin. Es as como nosenteramos. Mohamed Fadel Abdalahe Ramdan.

    Mi hermano Sidi-Salec iba con Salma Daf y su hijo Bachir Salma Daf. Iban adar de beber a los camellos y traer para la familia. Cerca de donde estbamos,escuchamos ruidos de coches, camiones, disparos por la noche. Al da siguiente,la misma tropa que haba detenido a mi hermano nos encontr a nosotros y nosdetuvieron. Nos prepararon para matarnos con un fusil, pero el comandante delejrcito detuvo el fusilamiento. Como los marroques hablaban otro dialectonosotros no entendamos lo que nos decan, pero sospechbamos que nos decan

    que levantramos las manos. El comandante o coronel comenz a preguntarnosqu hacamos all, dnde estaban los del Polisario, dnde estaban los contrariosal rey, etc. Haba un marroqu que traduca porque saba hasan. Yo tena nueveaos y Hamada Daf era menor. Lo que nos salv fue el traductor, porque l decaque nosotros ramos hijos de los camellos, que ramos pastores y nmadas. Yahdih Salma.

    Otros familiares conrmaron la misma versin de los hechos y sealan que tenan

    conocimiento de la detencin de varios de los desaparecidos proporcionada por los testigos.

    Mi marido se llama Sidahmed Segri Yumani y fue secuestrado junto con ungrupo de personas. El ganado fue masacrado. Fue en el momento que las fuerzas

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    28/224

    25

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    marroques atacaron la zona. Otras vctimas fueron Salma Daf Sidi Salec y su hijo,junto con Salma Mohamed Sidahmed, Salama, Mohamed Ali Karcha, AbdalaheRamdan y Mulud Uld Maimun. Eso sucedi como una o dos semanas antes delbombardeo a Um Dreiga. Un nio que se llama Aba Ali nos inform que habansido detenido este grupo de hombres. Jueila Mustafa Yumani.

    Era en la regin de Amgala. La mayora de ellos eran civiles, no llevabanarmamento. Eran pastores en busca de comida y agua para el ganado. Cuandoesa gente fue capturada por el ejrcito marroqu, nadie supo nada, solo haba untestigo, un nio de 14 aos que se llama Aba-Ali. Seis de esas personas fueronliberadas, entre ellas este chico, junto con Said Daf Sidi-Salec, Ahmed Baba, AliHamadi Sidi-Ahmed Sidi-Alem, Bachir Ali Hamadi. Las personas que an siguendesaparecidas de ese grupo son: Salma Daf Sidi Salec, Bachir Salma Daf, Sidi

    Salec, Sidahmed Segri Yumani, Salma Mohamed Sidahmed, Salama Mohamed-AliSidahmed, Embarca Daf Sidi Salec, Mulud Mohamed Lamin y Abdalahe Ramdan.Cuando bajaron por el ro Budreiga, haba un pozo donde haba gente dandoagua al ganado, ah capturaron a ms personas como Cheija Ahmed Hamma,Hamada Salma de seis aos, Yahdih Salma Ahmed y Mohamed Ali, pero despusfueron liberados. Gabula Salma Daf.

    La mayor parte de los familiares unen en esa misma captura a las mismas 8-9 personas,todas ellas desaparecidas. La informacin proporcionada proviene de testigos presencia-

    les, desde el momento inmediatamente posterior a los hechos y de versiones contrastadas,posteriormente con otras fuentes que llevaron a los familiares a considerar el grupo deestos desaparecidos de forma conjunta. Sin embargo, nunca fueron comprobadas hastaahora. El caso de las personas desaparecidas de Amgala en febrero de 1976 se caracterizapor: tener el mismo modus operandi, darse en el mismo lugar y por las mismas fuerzasmilitares marroques, ser todos ellos beduinos dedicados al pastoreo en la regin, estarjuntos en el momento de los hechos y contar con testimonios directos de sus capturas.

    Tambin dicen que estaban con l Salma Mohamed Sidahmed, Salma Daf, SalamaEl Karcha, Mohamed Mulud Mohamed Lamin y Aba Ali Said Daf. Hasta hoy dano se ha sabido nada cierto sobre su paradero, no s si est vivo o muerto. EbteilaAbdalahe Ramdan.

    El operativo militar moviliz numerosas tropas y vehculos en una zona en la quesolamente haba en ese momento poblacin civil y grupos de beduinos que vivan en lazona. No hay ningn dato que indique combates ese da, ni presencia de fuerzas militaresdel Frente Polisario hasta das despus.

    Haba ms de 100 vehculos. Todos eran coches y camiones, pero no habatanques. Ametralladoras, fusiles, y bazokas. En ese momento estaba yo sentado allado de la ametralladora y me j. Aba Ali Said Daf.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    29/224

    26

    Meheris. La esperanza posible

    Ejecuciones extrajudiciales ante los ojos del nio

    En la tarde del 12 de febrero, varios de estos beduinos fueron detenidos por fuerzas mi-litares marroques. Segn Aba Ali Said Daf, que en ese momento contaba con 13 aos,

    l fue detenido junto con dos hombres adultos que eran vecinos y conocidos suyos,Mohamed Mulud Mohamed Lamin y Mohamed Abdalahe Ramdan. Posteriormente,ambos hombres fueron ejecutados delante de sus ojos, uno tras de otro, despus depedirleslaidenticacinydepreguntarlesporelFrentePolisario.Segnsutestimonio,

    elocialalmandodelapatrullamilitarvolviallugardondehabanquedadotendidos

    disparndoles en la cabeza.

    En ese momento, como le dije, hacia las 8 de la tarde, vino uno en un coche Jeep.Llam a Mohamed Mulud primero, le pregunt: Dnde estn los Polisario? Fue

    esa la primera pregunta que le hizo la segunda pregunta que le hizo: Dametu carn de identidad. Mohamed Mulud neg tener conocimiento del Polisario.Acto seguido le dispar directamente, en pleno el corazn. Luego llama a Abda-llahi Ramdan y le hizo la misma pregunta que a Mulud, disparndole de la mismamanera. El hombre que les dispar tena pistola pero cogi un fusil para hacerlo.Aba Ali Said Daf.

    LadetencindelnioBaschirSalmaDaffueconrmadatambinporeltestimoniode

    Aba Ali Said Daf, y cmo fue llevado por varios soldados.

    Me llevaron con una cantidad de personas, junto a una cantidad de coches ycamiones. Me llevaron hasta la mitad de la concentracin y las personas queme detuvieron fueron a por otras personas. Me iban llamando, los soldados mellamaron diciendo vente, vente, vente y he visto personas en el camin. Despusde media hora, o una hora trajeron a Bachir Salma Daf. A Bachir tambin leempezaron a llamar vente, vente, vente, y el soldado ms cercano fue hacia l.Luego ya no lo he vuelto a ver. Aba Ali Said Daf.

    El testigo se salv despus de un intento de ejecucin fallido, logrando escapar unosmetros y protegindose con un soldado, que lo llev a un camin militar donde pas la

    noche atado e inmovilizado. Aba Ali Said Daf seal en su testimonio que posteriormenteescuch cerca de 17 disparos, y la voz de un hombre mayor pidiendo que no lo mataran.

    Yo me qued en el camin, me haba puesto una manta encima para que novieran donde estaba. Alrededor de las nueve, nueve y media o las diez, escuchun ruido que se iba acercando en la parte norte del camin, y pude distinguir elhabla hasania. Estuve mordiendo la manta para hacer un agujero y poder verlo que pasaba. He visto que haba cantidad de gente, era oscuro y todo lo quepuedo asegurar era que haba un soldado marroqu. Despus de la muerte de laspersonas les han echado un poco de tierra encima. He escuchado muchos ruidos.Entre los gritos pude distinguir la voz de una persona mayor que deca... por favordjennos en paz. Y un poco ms tarde escuch 17 disparos. Aba Ali Said Daf.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    30/224

    27

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    Dentro de esas personas estaba mi padre. A partir de ah he escuchado a personasdiciendo que le han escuchado suplicando e implorando a Dios para que los deja-ra en paz, y ah fue la ejecucin. Fatimetu Salma Mohamed Sidahmed

    Nos cont que ha escuchado a Salma Daf pidiendo clemencia, pidiendo auxilio yque por favor los dejaran en paz, que no eran militares ni pertenecan a ningntipo de clula poltica, que slo eran gente de paz y que por favor no los mataran.Yahdih Salma Ahmed.

    Segn Aba Ali Said Daf, su padre tambin fue detenido junto con otro saharaui conocidocomo Ahmed Baba, que despus fue liberado. Sin embargo, cuando fue llevado delantede su padre dijo no reconocerlo debido al estado de terror en el que se encontraba.

    He visto a mi padre y lo reconoc. Pero de repente me entr un escalofro y he

    dicho que no lo conozco. Lo llevaron a El Aain, lo torturaron, lo encarcelaron, ydespus de 5 das lo soltaron. Aba Ali Said Daf.

    Huida y xodo entre el terror

    Como consecuencia de los hechos, los familiares de las personas desaparecidas, empren-dieron el xodo primero hacia otras zonas del Shara Occidental, y a Tinduf (400 km)despus, ya en Argelia. La huida se hizo en condiciones extremadamente negativas, y enel grupo de estas familias se dieron varias muertes de nios en ese camino.

    Cuando salimos, estuvimos caminando de Amgala a Argau durante dos noches ydos das. En el da nos escondamos y en la noche caminbamos. Yo tena un hijode un ao, no haba nada que comer, los aviones sobrevolaban y ah muri mi hijoMohamed Nai. No tenamos ropa, ni comida, ni medicamentos, andbamos a pie.

    Algunos tenan el privilegio de andar en burro. Haba que ir de noche porque de dasobrevolaban los aviones militares. Tambin hubo ataques de las fuerzas maurita-nas. ramos la familia Lamin Abdi y Lebat Segri. El hijo de esta ltima desapare-ci. En total ramos cerca de 24 personas entre las dos familias. Nuestros ganadosfueron masacrados. Despus de 5 das llegamos a Rguewa. Jueila Mustafa Yumani

    En otros casos, pocos das despus de conocerse las desapariciones, los familiares em-prendieron la huida en la que sufrieron adems otras violaciones graves de derechos hu-manos como bombardeos contra la poblacin civil.

    En aquellos momentos viva en el Guelta con mis abuelos maternos, nos llegaroncomentarios de la gente que tena mucho miedo de la ocupacin marroqu, estagente deca que mi padre haba desaparecido y nos decan que deberamos huirantes de que las tropas marroques llegaran. No recuerdo el momento en que fuebombardeada la zona de Guelta, pero por la maana bombardean Um Dreiga yalrededor de las 2 3 de la tarde Guelta. En esos momentos yo tena cerca de 10aos, es por eso que no recuerdo la fecha exacta, pero creo era tiempo de la esta

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    31/224

    28

    Meheris. La esperanza posible

    del cordero. Nosotros llegamos a los campamentos en junio de 1976, con misabuelos y mis dos hermanos pequeos. Ebteila Abdalahe Ramdan.

    Como seala Salka Mohamed, hija de uno de los desaparecidos que fueron ejecutados porel ejrcito segn el testigo, el dolor provocado por la situacin hizo que la nica salidaposible fuera la huida. Todava los recuerdos de esa situacin, aadida al dolor de la des-aparicin forzada, son dolorosos para los familiares.

    Siempre cuando converso este tipo de asuntos, me pongo mal psicolgicamente,es por ello que siempre trato de esquivar este tipo de conversaciones. Por msque me lo quieran contar no quiero saber nada. En aquellos momentos sufrimosmucho, hemos tratado de afrontar la situacin cada uno de la manera que pudo.En esos momentos, la nica solucin era el xodo. Salka Mohamed Mulud.

    Impacto traumtico de las desapariciones forzadas

    El primer impacto producido por las desapariciones en sus familiares fue de shock eincredulidad. El dolor de los hechos es mayor por el sentimiento de injusticia y delsinsentido de una explicacin que ayudase a entender por qu unos hombres y niosbeduinos fueron detenidos y desaparecidos.

    Una de las cosas que me ha dolido muchsimo, y me ha dejado una herida que to-

    dava no se ha cicatrizado, es la total inocencia de mi padre. No era una personamilitar, ni perteneca a ningn tipo de clulas polticas, sino era una persona civilque haca su vida diaria como la hacan los dems. Mahyub Mohamed-MuludMohamed Lamin Maimun.

    El impacto brutal en todos los familiares es descrito por algunos de ellos haciendo refe-rencia a sus propias experiencias y a familiares que resultaron especialmente afectadospor los hechos y la prdida.

    En aquellos momentos yo no estaba preparada para escuchar ese tipo de noticias,

    tuve un shock. Lo nico que recuerdo de esos momentos, es que mi padre desaparecijunto con otras personas. Mis hermanos tambin fueron muy afectados, uno de ellosan sigue muy afectado. ramos siete hermanos en total, la ms pequea tena unao. Mi madre Umjair Hamdi tambin estuvo muy afectada. Salka Mohamed Mulud.

    El dolor y la rabia por lo sucedido afectaron a todos los familiares. En algunos casosgenerando un rechazo y malestar ante cualquier detalle que recordara en algo los hechos,como en este caso, sin poder controlar sus propias reacciones.

    Durante muchos aos estuve enferma psicolgicamente. Era muy nerviosa, cadavez que alguien mencionaba Marruecos comenzaba a escupir, no me controlaba.Jueila Mustafa Yumani

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    32/224

    29

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    Las consecuencias psicolgicas en muchos de ellos perduraron durante muchos aos. Lasdescripciones del dolor y el sufrimiento, pero tambin de la prdida de la razn o reaccio-nes de desconexin con la realidad, se dieron en varios familiares que han permanecidocon secuelas psicolgicas graves hasta la actualidad.

    Se me subi la tensin, a veces dorma de noche y me pona a gritar asustada, erauna nia... Mi madre padeci todo esto por los hechos que han pasado, estabaembarazada. [Llora] Mi madre sufri un trastorno mental, se volvi loca, tuvimosque hacer el papel de madre con ella, porque sala corriendo por ah y tenamosque ir detrs de ella, tambin sufri hepatitis, y as hasta su muerte... mi madreestaba trastornada y tena seis hijas. Jaiduma Salma Daf.

    El hermano mayor era como el responsable, junto a mi padre, de todos los que-

    haceres de la familia. De ah el ataque psquico que an hoy sigue sufriendo.Mahyub Mohamed-Mulud Mohamed Lamin Maimun.

    Otros nios murieron debido al impacto en las condiciones de vida y el terror de la huida.

    Yo estaba enferma, perd la razn y la mujer que estaba conmigo tambin. Al nioque muri le transmit el miedo, yo tena mucho miedo. Mi hijo lloraba todo eltiempo. Lo nico que poda hacer era arroparlo con mi cuerpo. Por el caminohacamos trincheras y ah los meta todos juntos, yo me pona encima para dar-les calor. Los privilegiados, que no ramos nosotros, tenan algo para hacer t,

    una tetera o algunos vasos. Algunos hacamos una especie de tienda con nuestrapropia melfa para protegernos, y ponamos a todos los nios en esa trinchera quehemos construido. Eran 7 nios, uno de los que estaba en la trinchera muri alllegar aqu. Mohamed Nai. Jueila Mustafa Yumani.

    Desde entonces los familiares entrevistados, muchos de ellos hijos e hijas de los desa-parecidos, sufrieron el impacto del terror y una ruptura en la continuidad de sus vidas,junto con el impacto posterior de crecer sin la presencia de sus padres o hermanos, en uncontexto de miedo y sinsentido.

    A partir de aquel entonces, cuando supimos de la desaparicin de mi padre, he vistoque se me ha cambiado la vida totalmente. Las condiciones, y ese tipo de alegra conla cual tomaba la vida, se me ha vuelto al revs y entonces empec a vivir el sufri-miento, empec a vivir en condiciones psquicas muy adversas. La vida ya se me hacambiado totalmente. Una de las cosas que me ha hecho sufrir muchsimo no es sloel total genocidio y discriminacin hacia los animales y los daos materiales, sinola desaparicin forzada del ser querido que era totalmente inocente, que lo nicoque saba era hacer el t o dar clases del Corn a los nios para que aprendan lareligin. Mahyub Mohamed-Mulud Mohamed Lamin Maimun.

    El manejo de la prdida en las familias supuso un doble rol y una sobrecarga afectiva ysocial en las mujeres madres, que tenan que enfrentar su propio impacto y mantener el

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    33/224

    30

    Meheris. La esperanza posible

    apoyo a sus hijos para su desarrollo y educacin en condiciones de extrema precariedad.La desaparicin forzada oblig a estos nios y nias a un duro proceso de crecimiento en elque les faltaba su padre, en medio de la pobreza extrema. Una prdida traumtica, de la quees muy difcil siquiera hablar o tener un recuerdo positivo. La ausencia de estas memoriasde sus padres o hermanos ha tenido un impacto muy negativo especialmente en la infancia.

    Fue muy duro para mi ver a mi madre que sufra mucho para hacernos crecer yeducarnos, sobre todo cuando ves que no es el caso de todos los saharauis. ra-mos como hurfanos, nos decan tu padre va a venir, pero nunca viene y enton-ces eso ha hecho que estuviramos en una situacin anormal permanente, y eso sque me ha afectado. Me deca: me estn mintiendo, mi padre nunca va a venir.Solo tengo una foto. Cuando comenzaron a bombardear, mi madre se deshizo detodos los documentos por miedo a que fuesen utilizados como prueba contra mi

    padre. Dafa Sidahmed Yumani.

    Las consecuencias en la propia familia, del dolor e impacto emocional y social, conlleva-ron en los adultos nuevos impactos en sus roles

    Gracias a Dios siempre hemos sentido de la mejor manera slo que antes tena-mos hombres que pueden hacer todas las tareas. Cuando desaparecieron, me heencargado yo de hacer la tarea de mujer y hombre. Tena por aquellos aos niosmuy pequeos, y ah s que se me empez a hacer la vida difcil. Fatimetu SalmaMohamed Sidahmed.

    El impacto especialmente en las mujeres madres, conllev las consecuencias afectivaspero tambin comprometi las posibilidades de casarse de nuevo, dado que la pareja seencontraba desaparecida. Las formas tradicionales de manejar la separacin o la prdidade seres queridos y las normas religiosas, se quiebran o cuestionan en este contexto dedesapariciones forzadas, donde la ausencia de informacin por parte de los perpetradorescondena a la mujer en este caso a no poder volver a tener una vida de pareja si quierereconstruir su vida.

    Segn nuestra religin cuando el esposo est desaparecido y no se sabe el parade-

    ro, la mujer no se puede divorciar. Lehbib Salama Mohamed-Ali.

    Y tambin supone una fractura en el sentido de continuidad de la vida en la siguientegeneracin. Esos dolores y sufrimientos han acompaado a los familiares hasta hoy enda, en un contexto de falta de reconocimiento de los hechos por parte del Reino de Ma-rruecos, invisibilizacin de los propios familiares en el refugio, y desprecio por su dolora travs de la negacin y el olvido.

    Las consecuencias son terribles en varios aspectos. En el aspecto que l eranuestro hijo mayor, que nos ayudaba mucho en las tareas de la vida, pero tambinque esperbamos que hiciera su propia vida, que se convirtiera en un hombre,que fundara su propia familia y nos arrebataron de esa posibilidad de esa alegra.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    34/224

    31

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    Hemos estado tristes de no conocer su paradero y de no saber nada de l, porlo que slo volvemos a Dios, que Dios nos ayude a seguir adelante frente a unaterrible situacin como esta. Mohamed Salem Ahmed Hama.

    Como seala una de las hijas de Salama Mohamed, resumiendo el sentir de todos los fami-liares: me he sentido muy mal, lo nico que he querido siempre es saber algo de mi padre.

    La bsqueda entre la nada

    Las posibilidades de realizar la bsqueda de los desaparecidos fueron durante ms de tresdcadassinoinexistentes,totalmentelimitadasysinningunarespuestaocialporparte

    del estado de Marruecos que ayudara a salir de la confusin o la incertidumbre. Las nicas

    fuentes de informacin veraces en este tiempo vinieron de los propios saharauis, la mayorparte de las veces, de otras personas detenidas o que estuvieron desaparecidas en centrosclandestinos de detencin durante aos. Los familiares trataron de buscar informacionesen las crceles y con sobrevivientes, incluso marroques, que pudieran proporcionar algndato de su presencia o pudieran descartar que se encontrara en tal o cual destino.

    Tengo la certeza de que fue asesinado, que no muri en la crcel. En todas las cr-celes marroques han estado saharauis, todos nos conocemos y si sabemos algo dealguien lo comunicamos. En el caso de mi padre nunca se supo nada por ese lado .Siempre hemos preguntado a prisioneros, a marroques, a prisioneros que fueron

    liberados y nadie nos ha dicho nada. Lehbib Salama Mohamed-Ali.

    Durante dcadas los familiares emprendieron la bsqueda de informacin entrevistndo-se o pidiendo referencias a cuanta persona pudiera tener informacin.

    Desde aquel entonces nunca perdimos la esperanza, porque segn nuestros anli-sis era un nio muy pequeo, solo tena 14 aos, y a lo mejor dentro de las tropashay alguna persona con sentimientos que lo pudiera salvar. Siempre hemos estadopreguntando a todas las personas que llegan de las zonas ocupadas, incluso a losprisioneros que estuvieron en crceles dentro de Marruecos y en el Shara. Pero

    nunca hemos sabido nada [llora]. Yahdih Salma Ahmed.

    A pesar de no poder contar con mecanismos para llevar a cabo una bsqueda efectiva, losfamiliares han permanecido hasta la actualidad en la bsqueda de su ser querido. Las con-diciones de bloqueo, frustracin o falta de reconocimiento han supuesto nuevos impactosen los familiares que siguen con sus demandas de verdad, reconocimiento y justicia, conla esperanza de poder hallar respuestas a sus preguntas casi 38 aos despus.

    Por supuesto que sigo buscando a mi esposo, no pierdo la esperanza de obteneruna respuesta, cada vez pienso que, aunque haya fallecido, deseo saber dndeest. Si se supiera que se ha muerto, que nos devuelvan sus restos mortales parasepultarlo en condiciones dignas. Pero que sepamos quienes son los responsables,

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    35/224

    32

    Meheris. La esperanza posible

    qu le paso, por qu le paso eso a l y a otros muchos, y si ha muerto queremossaber dnde est. Si est vivo que nos lo devuelvan. l era un ciudadano civil. Yque los responsables sean juzgados por ese crimen. Jueila Mustafa Yumani.

    En diferentes momentos, como la liberacin de los detenidos desaparecidos que se en-contraban en las crceles clandestinas en 1991, o posteriormente en momentos comoel censo llevado a cabo por la MINURSO para la realizacin del referndum siemprepostergado, la situacin de los desaparecidos se convirti en un problema ms pblico alque distintas autoridades se tuvieron que enfrentar. A pesar de ello, ninguna informacinrelevante se dio en ese tiempo por parte de Marruecos, que sigui negando la prctica dela desaparicin forzada durante de dos dcadas, ni tampoco por parte de la MINURSO ensus investigaciones para realizar el censo. El siguiente episodio corresponde a una de esasgestiones respecto a uno de los desaparecidos de este caso, realizada en abril de 1998.

    Cuando perdimos casi la esperanza de encontrarlo, llego la identicacin de la

    MINURSO de las personas saharauis para el posible intento que se va a realizar.Uno de los integrantes de la MINURSO me empez a hacer preguntas dicindomeque si tengo otro hermano. Y preguntndome si yo soy el desaparecido. Me ha pre-guntado por su identidad y me ha dicho yo s que vosotros conocis mejor que yovuestras identidades. Le dije, si t hablas en este caso de lo que es la identidad,mi hermano, Sidi Salec, fue desaparecido desde 1976, y despus no hemos sabidonada, y lo que nos interesa es saber su paradero. l me ha prometido que va apreguntar por el caso en cuanto llegue a Marruecos. Pero por desgracia desde

    esto no ha ocurrido nada. Fue en abril de 1998. Yahdih Salma.

    Ninguna institucin gubernamental marroqu se puso en contacto con los familiares di-rectamente en el refugio. En ningn caso se entreg informacin directa sobre el destinode sus familiares.

    Ninguna institucin gubernamental se ha puesto en contacto con nosotros, soloAFAPREDESA que se enter va Internet, como todo el mundo. Lehbib SalamaMohamed-Ali.

    Las respuestas del Estado de Marruecos: negacin, minimizacin

    y falsedad

    Tena documentos espaoles, ella no saba que haba toda esa documentacin yprefera que no se los quedasen los marroques, porque siempre que venan cons-caban la documentacin. Entonces ella lo escondi en un lugar y luego se olviddnde. Dafa Sidahmed Yumani.

    La respuesta del rgimen de Marruecos durante las primeras dos dcadas despus delos hechos fue la sistemtica negacin de los mismos. La inexistencia de informacionesocialessecomplementconla negacin delasdesapariciones forzadas, tanto frente

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    36/224

    33

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    a las demandas de informacin de familiares como de organizaciones de derechoshumanos internacionales sobre los desaparecidos. Las versiones dadas en algunos casosa organismos de Naciones Unidas, como el Grupo de Trabajo de Desaparicin Forzada,fueron que los desaparecidos estaban en los campamentos o en Mauritania, negando laresponsabilidad del Estado en las mismas13.

    El caso de los beduinos desaparecidos de Amgala denunciado a travs de la Asociacin deFamiliares de Presos y Desaparecidos (AFAPREDESA) que realiz los primeros listadosy demandas a organizaciones internacionales.

    Entre 2004 y 2006 en Marruecos funcion la Instancia de Equidad y Reconciliacin(IER), que tena a su cargo la investigacin de los casos de desaparicin forzada, ejecu-ciones extrajudiciales y exilio entre otras violaciones cometidas por agentes del Estadodesde 1959. Ninguno de los casos de los beduinos de Amgala fue investigado de formaefectiva por dicha instancia. No se realiz ningn contacto con los familiares que se en-cuentranenloscampamentosderefugiadospordichainstitucin.Ensuinformenalno

    se incluye ninguna referencia al caso.

    Respuesta de la IER en el caso de Sidi Salec

    El 25 de noviembre de 2003, Mustafa El Idrissi, con DNI SH 16899, familiar de varios de losdesaparecidos de Amgala, se dirigi al Presidente de la Instancia de Equidad y Reconcilia-cin en la sede del Consejo Consultivo en Rabat, para solicitar la gestin de la indemnizacin

    material y moral a miembros de su familia, en concreto de tres de las vctimas:- Sidi Salec uld Salma uld Ahmed (sobrino).

    - Bachir uld Salma uld Daf uld Sidi Salec (sobrino).

    - Salma uld Daf uld Sidi Salec (primo).

    En dicha carta se seala que los desaparecidos fueron secuestrados por las Fuerzas ArmadasReales marroques el mes de febrero de 1976, y se pide tener informacin sobre si estn vivoso muertos. Posteriormente, un ao y un mes ms tarde, el 13 de diciembre de 2004, MustafaEl Idrissi volvi a dirigirse por escrito al presidente de la IER en los mismos trminos, cen-

    trndose en el caso de su sobrino Sidi Salec. Igualmente informaba que la fecha de los hechosera febrero de 1976 y, adems de la supuesta muerte en torturas durante su desaparicin,inclua la prdida de 10 camellos y 50 ovejas en los mismos hechos.

    Un ao y dos meses despus de la primera carta, la IER se dirigi por escrito al Sr. Idrissi encarta IER/DD.34209/04 enviada con fecha 17/01/2005 por el presidente de la IER, referida alexpediente 11781. Le informa que ha sido abierto dicho expediente, solicitndole que se personeun mes ms tarde en la casa de la juventud, El Qods, El Aain, con los documentos que se detallan a continuacin, o en su caso enviarlos a la Instancia directamente. Dichos documentos eran:

    13 VerEl Oasis de la Memoria. Violaciones de derechos humanos y memoria histrica en el Shara Occidental.Hegoa, Universidad del Pas Vasco, 2012..

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    37/224

    34

    Meheris. La esperanza posible

    1. Copia del carn de identidad nacional.

    2. Copia de acta de nacimiento.

    3. Atestacin de la vida individual.

    4. Artculos de prensa relacionados con el asunto.

    5. Copia o copias de sentencias emitidas.

    6. Copia o copias de registros de detencin.

    7. Certicadosmdicossobreenfermedadesrelacionadasconlaviolacin.

    8. Documentos sobre el resto de daos consecuencia de la violacin.

    Los familiares de dichas vctimas se encontraban en los campamentos de refugiados. El Sr.

    Idrissi envi a sus familiares la demanda de documentacin pedida por la IER para el caso,pero los familiares no pudieron responder a esa exigencia. Sidi Salec no tena documenta-cin, era un nio, ni podan presentar ninguno de los documentos alegados. Por otra parte,al encontrarse en calidad de refugiados, no podan hacer ninguna de las gestiones necesariasante la IER. Las condiciones de la demanda eran impracticables para los familiares directosde Sidi Salec as como para cualquier otro familiar que se encuentre en el exilio.

    A travs de su to nos lleg la informacin de si queramos la indemnizacin ten-dramos que ir all y eso no lo hemos aceptado, porque nosotros formamos partede la Repblica Saharaui y solamente a travs de la Repblica Saharaui vamos acoger nuestros derechos o aquellos que nos ayuden para obtenerlos. Nadie o nada

    puede reparar la prdida de un ser querido, como es un hijo, un hermano o una es-posa. Pero en el caso concreto lo que nosotros necesitamos con urgencia es nuestroderecho a la verdad que se conozca lo que realmente pas y que se haga justicia. Yesta justicia debe ser en base a nuestra condicin de saharauis, de ciudadanos de la

    Repblica Saharaui y no como sujetos de otro pas y mucho menos de un pas queocupa y que ha violado nuestros derechos. Mohamed Salem Ahmed Hama.

    En diciembre de 2010, y despus de las recomendaciones realizadas al Estado de Marruecospor el Grupo de Trabajo de Desaparicin Forzada y las demandas de AFAPREDESA

    y organizaciones de derechos humanos internacionales como Amnista Internacional,Marruecos public en internet, a travs del Consejo Consultivo de DDHH que dabaseguimiento a la IER, un listado de 207 saharauis desaparecidos que daba por muertos.En dicho listado se ofrece de forma parcial, y totalmente limitada, alguna informacinsobre fecha de detencin, edad de la vctima y lugar de fallecimiento. Solo proporcionaesas tres referencias de 17 de los casos saharauis, siendo las otras referencias parcialescon alguno de esos datos14. No reconoce ninguna circunstancia de los hechos, causa demuerte o responsables de la misma, atribuyendo todas ellas a las circunstancias o la

    14

    Solo aparece en 98 casos la fecha de nacimiento, en 88 casos la fecha de fallecimiento y en 147 casos la fechadedetencin,peronicamenteen17casoscoincidenlastresfechas;esdecir,solosesealaocialmentelaedad de fallecimiento de 17 personas de un total de 207 personas fallecidas, es decir en el 8% de los casos.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    38/224

    35

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    difcil situacin, o al sufrimiento extremo. Ninguna relacin personal o directa seestableci con los familiares saharauis para darles informacin sobre dicho listado o lasinformaciones disponibles en los archivos del Estado.

    De los ocho casos recogidos en este informe, este listado del Consejo Consultivo de De-rechos Humanos (CCDH) publicado en internet proporciona datos sobre cuatro de ellos.Del resto no da ninguna informacin, a pesar de que fueron detenidos el mismo da ylugar.

    En los ltimos aos, se tena algn listado de personas desaparecidas, pero nuncaestaba incluido mi padre Sidahmed Segri. Sidi Mohamed Sidahmed Segri.

    De los cuatro que incluye datos, seala que:

    Salma Daf Sidi Salec, aparece bajo el nombre de Salma uld Daf uld Sidi Salec. Na-cido en 1925 en Saguia el Hamra, Smara, arrestado por el ejrcito real en junio de1976 en Smara, fue conducido a una de sus bases donde falleci.

    Bachir Salma Daf, nio de 14 aos e hijo de Salma Daf Sidi Salec. Se encuentra bajoel nombre de Bachir Salma Daf uld Sidi Salec . Seala exactamente lo mismo que enel caso de su padre anterior, que fue arrestado en junio de 1976 y conducido haciauna de las bases militares de Smara donde falleci.

    Salama Mohamed-Ali Sidahmed. Bajo el nombre Salama uld Mohamed Ali uld Sidi

    Ahmed El Karchafue detenido en julio de 1976, fallecido durante el secuestro sinfecha exacta.

    Abdalahe Ramdan bajo el nombre Mohamed Abdellah uld Ramdan uld Mohamed La-min uld Saiba.Nacido en 1925 en Smara, arrestado el 22/02/1976 en Amgala por elejrcito, fue conducido hacia la base militar de Smara donde falleci, sin fecha exacta.

    El anlisis de las respuestas de estos cuatro casos muestra la falta de veracidad de lasinformaciones proporcionadas por el Consejo Consultivo de Derechos Humanos comoseguimiento de la IER:

    1. Sobre los casos y la accin. Todos los testigos entrevistados sealan, de formacontrastada, que las ocho personas fueron detenidas el mismo da 12-13 de febrero de1976.LasfechasproporcionadasporMarruecossondiferentesynoseunicanenuna

    nica tal como se demuestra que ocurrieron los hechos. En un caso se seala que fuedetenido el 22 de febrero, pero para esa fecha ya se haban producido los bombardeos deGuelta, Amgala y Um Dreiga, lo cual muestra que no pudieron darse estas detencionesdado que fueton anteriores a dichos bombardeos, segn la informacin testimonial.Por otra parte, en el resto de los tres casos, se seala el mes de junio y julio de 1976,es decir 4 5 meses despus de los hechos. La nica informacin coincidente es queSalma Daf y su hijo Bachir Salma Daf fueron detenidos el mismo da, pero no en juniosino en febrero.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    39/224

    36

    Meheris. La esperanza posible

    Estoy en contra de ese informe, que demanda a Marruecos una informacin msdetallada con todo lo que les pas en la crcel, como murieron, por qu los lle-varon, las fechas, los culpables. Y esa fuerza se sabe, porque sabemos quin hasido la fuerza que los secuestr y seguramente habr uno o dos vivos que puedencontar lo que les hicieron, si los han tirado de un avin que lo digan, si los hantorturado que lo digan,... y por qu lo han hecho. Si esa fuerza ha cambiado porotra fuerza, la fuerza nueva tiene todos los detalles de lo que ha hecho con los des-aparecidos la fuerza anterior, todo eso lo sabe Marruecos. Demando nuevamenteporque esa fuerza conocida, sigue en pie y seguro hay gente responsable viva quepuede contar todo lo que se ha hecho. Jaiduma Salma Daf.

    2. Sobre las detenciones y traslado. Si bien los testimonios de testigos aseguran que dichaspersonasfuerondetenidasporelejrcitomarroqu,entresdeelloslainformacinocial

    asegura que fueron conducidos a bases militares (dos de ellos a Smara) donde fallecieron,mientrasenelotrocasosesealaquefallecidurantesusecuestrosinmayorespeci-cacin.Laprcticadelasexhumacionesrealizadashaconrmadolosdatosaportados

    por el testigo presencial Aba Ali Said Daf en todos sus extremos. Las personas no fueronconducidas a ninguna base militar, sino que fueron ejecutadas en el mismo lugar dondefueron detenidas. De los otros cuatro casos, no se reconoce la detencin.

    3. Sobre el lugar y circunstancias de los hechos, fecha o causa del fallecimiento. Enlos cuatro casos incluidos en el listado del CCDH, se seala que no se conoce la fechaexactaenquemurieron,nosereerelacausadelamuerte,ynoseproporcionaningu -

    na informacin sobre los responsables mientras se encontraban bajo control militar. Sinembargo, tanto por la informacin testimonial proporcionada por los testigos, comoporelanlisisforensedelasevidenciaseidentidadesconrmadasdelosrestosquese

    encuentran en las fosas, se demuestra que las personas murieron probablemente a lavez, que fueron ejecutadas extrajudicialmente con empleo de armas de fuego tipo fusilcuando se encontraban detenidas e indefensas, que murieron el mismo da de febrerode1976,quefueronenterradasdeformasupercialendosfosasconseisydoscuerpos

    respectivamente, y cubiertas con apenas 30-40 centmetros de arena y piedras.

    Entonces yo desmiento la fecha de junio que aparece en las listas de la IER de

    la muerte y desaparicin de mis familiares, ellos han desaparecido en febrero de1976. Las causas ya las dije y despus de una semana vinieron unos coches y nostrajeron hasta Rabuni, el 10 de marzo del 1976, yo era una nia, iba con mi madrey los nios.Jaiduma Salma Daf.

    4. Ausencia de investigacin y negacin de la verdad. La informacin proporcionadapor el listado del Consejo Consultivo de Derechos Humanos muestra que Marruecossolo proporcion una respuesta escueta, en los casos en que los familiares habanpresentado alguna demanda en el Shara Occidental ocupado por Marruecos. La IER oel Consejo Consultivo de Derechos Humanos no han presentado ninguna informacina las demandas y listados proporcionados por AFAPREDESA y otras organizacionesdurante aos. Por otra parte, en su respuesta en los cuatro casos sealados, las

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    40/224

    37

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    autoridades de Marruecos reconocieron su identidad, lo que coincide tambin con lainformacinproporcionadaporel testigodequeseidenticaronvariosconsucarn

    de identidad espaol (DNI) ante las fuerzas militares. Adems, la documentacinde algunos de ellos aparece en las fosas encontradas. La versin que oculta la fechade muerte, la causa de la misma, o seala que fueron trasladados a un centro militardondefallecieronhaquedadototalmentedesmentida.Laspersonasidenticadasfueron

    detenidas, interrogadas en algunos casos, ejecutadas extrajudicialmente por personalmilitar, y enterradas de forma precaria en dos fosas.

    Uno de los resultados de todas las investigaciones y las preguntas que hemoshecho, y siempre se las hemos dirigido principalmente AFAPREDESA, que es laAsociacin de Familiares de Presos y Desaparecidos, lo lamentable es que losmarroques o la IER no reconoce a mi padre dentro de los desaparecidos. Mahyub

    Mohamed-Mulud Mohamed Lamin Maimun.

    5. Ausencia de buena fe y victimizacin secundaria. La falsedad de estas informacio-nes proporcionadas no puede atribuirse a un error casual de un caso, responden a unpatrn de respuesta similar en todos los casos analizados, que es por otra parte idnticoa las inconsistencias o falsedades referidas ya en otros casos investigados15. Por otraparte, las autoridades marroques contaron con los medios y la posibilidad de inves-tigar, y proporcionaron informaciones que han resultado falsas para los familiares depersonas desaparecidas que necesitan una respuesta veraz para salir de la incertidumbrey elduelo. En otros cuatro casos no han proporcionado ninguna informacin sobre estaspersonas que fueron desaparecidas y ejecutadas en las mismas circunstancias, tiempo ylugar. En uno de esos casos, el de Sidi Salec, exigieron documentacin y la presentacinde los familiares en El Aain o ante instancias marroques para responder al caso, loque resultaba impracticable. En el caso de Abdalahe Ramdan respondieron primeramenteque el desaparecido se encontraba vivo en Mauritania (1999) y despus que haba sidotrasladado a Smara (2010). Todo ello ha aumentado el dolor y sufrimiento vivido porlos familiares de los desaparecidos de este caso aadiendo, a las consecuencias de ladesaparicin, estas nuevas formas de victimizacin secundaria y negacin de la verdadque constituyen violaciones al derecho a la integridad psicolgica de los familiares.

    Posteriormente viene otra respuesta contraria a lo que haba dicho anteriormenteMarruecos, diciendo que nuestro padre haba sido secuestrado en Amgala y quehaba sido llevado a un cuartel militar en Smara donde habra fallecido durantesu detencin. Todo esto no nos convenci, porque no reejaba todos los elemen-tos de respuesta y que no haba pruebas materiales de cmo ha fallecido nuestropadre. No hemos podido ver ninguna prueba de que haya fallecido nuestro padre.No nos han devuelto el cuerpo, pero si reconocen que lo ha hecho por qu no lohacen...? Mohamed Fadel Abdalahe Ramdan.

    15 Ver El Oasis de la Memoria: Memoria histrica y violaciones de Derechos Humanos en el Shara Occidental,captulo 7, pg. 270, caso Mohamed Ayach.

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    41/224

    38

    Meheris. La esperanza posible

    Actitudes ante la exhumacin e investigacin forense

    La actitud de los familiares ante todo el proceso de investigacin fue ejemplar. Uno odos miembros de cada una de las familias, junto con representantes de AFAPREDESA,

    realizaron el viaje con el equipo de investigacin y forense hasta la zona cercana deMeheris, a 400 kilmetros de los campamentos de Tinduf.

    Debido a las condiciones de peligro y visibilidad del lugar, esperaron pacientemente eldesarrollo de los trabajos en los tres das que se desarrollaron. Se realizaron reunionesdiarias con los familiares para la explicacin y coordinacin del proceso con ellos.El primer da se realiz una reunin explicativa del tipo de exhumacin que se iba arealizar, las implicaciones prcticas de lugar, tiempo y discrecin para su realizacin,dado que la zona se encuentra cerca del muro vigilado por personal militar de Marruecos

    y que es adems una zona donde existen numerosas minas antipersonales. Las fosas seencontraban, segn los testimonios previamente recogidos, dentro de la zona de exclusinenlaquenopuedehaberpersonalocialsaharaui,aspectodesconocidoinicialmentepor

    el equipo de investigacin. Por lo tanto, la accin se tuvo que desarrollar con apoyo depersonas beduinas de la zona para llegar al lugar y asegurar el trasporte del equipo.

    Los familiares sealaron en todo momento su acuerdo con este proceso y la formaen cmo se iba a desarrollar. Los distintos das que dur la exhumacin se realizaronreuniones con los familiares para explicar el desarrollo de la misma, recoger sus posiblespreocupaciones o percepciones, y proporcionar informacin y seguridad sobre todo el

    proceso,incluyendolatomademuestrasyrecogidadeobjetospersonalesconelsucientetiempo y cuidado, a pesar de las difciles condiciones en que se tuvo que trabajar.

    Los familiares tuvieron en todo momento una actitud de cautela y esperanza. Denecesaria contencin emocional esperando el resultado de la investigacin, pero tambinde valoracin positiva del proceso y del esfuerzo por conocer la verdad.

    Hay muchos rumores, todo lo que yo tengo en conocimiento es que ha sidodetenido en ese lugar que ya he citado, y que ha habido otros grupos que han

    sido llevados a Smara y a El Aain. Los sobrevivientes dicen que no los han visto,nadie sabe nada, los marroques reconocen que lo han matado pero no dan todala informacin, pretenden que ha sido secuestrado en otro lugar, cuando no escierto. Todo lo que sabemos es que ha sido secuestrado en la zona de Amgala, ydesapareci desde ah hasta que se descubri esta fosa comn y se espera que losresultados de identicacin puedan hacer ver que ese es realmente mi hijo para

    que esta cuestin se cierre. Mohamed Salem Ahmed Hama.

    Las exhumaciones confrontan a los familiares con sentimientos ambivalentes, como laalegradepodertenerporndetallesdeloquepasconsusfamiliaresolacertezade

    que se encuentran all, para poder as restituir posteriormente los restos y hacer sus ritos yceremonias. La certeza de la muerte es tambin superar la incertidumbre y poder empezar

  • 7/29/2019 Meheris La Esperanza Posible

    42/224

    39

    El caso de los desaparecidos de Amgala

    un proceso de duelo durante tantos aos postergado. Por otra parte, supone tambin unamayor conciencia de la prdida.

    Como si lo encontrara vivo. Me gustara saber que es uno de los que est en lafosa, as sentira un descanso de saber que l est ah, y para hacerle los ritualesreligiosos, as me quedar satisfecha y contenta de que estn ah los restos demi padre. Pero, por otra parte, sent remordimiento y tristeza de la forma en quelo asesinaron, l no llevaba armamento. He perdido a mi padre a los 10 aos,eso duele y queda en el recuerdo. Tengo dos sentimientos encontrados. EbteilaAbdallahi Ramdan.

    Los procesos de bsqueda y exhumaciones suponen tambin volver al escenario de lapesadilla que vivieron las vctimas. Imaginar su situacin y recordar algunos de los

    momentos vividos con ellos cuando estaban con vida. La efervescencia emocionalnecesita espacios de expresin y actitudes de escucha y apoyo, que en este caso fueronproporcionados tambin por el propio grupo de familiares, las entrevistas realizadas y ladinmica colectiva mantenida a lo largo de todo el proceso.

    Ayer estuve todo el da llorando, me acord mucho de mi padre, que cuidabade nosotros, es algo muy emocionante para nosotros. Lo primero que pedirasera que estuviera en un lugar donde pudiramos hacer nuestro duelo,enterrarlo, y poder visitarlo a menudo en un lugar donde no tenemos ningntipo de impedimento. Y tambin queremos derecho a la justicia, queremos que

    se juzgue a los responsables, que nos devuelvan todas sus pertenencias, todo loque le han conscado, y comprendo que no le van a devolver la vida que se la

    han conscado tambin, pero que paguen lo adecuado por ello. Ebteila SalmaMohamed Sidahmed.

    A pesar de tener limitaciones para estar presentes en todo el proceso, un grupo defamiliaresseper