p2-p7 fer 2 - connecting repositories · problemas ambientales y una significativa...

9
UUE! FUNDACI~N üE DfDiOS RURALES

Upload: others

Post on 09-Aug-2020

1 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

U U E ! FUNDACI~N üE DfDiOS RURALES

Page 2: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

S egún el informe Situación de los Bos-ques 2007, la superficie forestal de Eu-ropa en 2005 (excluida la Federación

de Rusia) abarcaba 193 millones de hectáreas,lo que representa un aumento del 7% desde1990. Sin embargo, este aumento contrasta conla disminución de la superficie forestal mundial,del 3% durante ese mismo período. Cabe decirque Europa es la única de las grandes regionesque ha registrado un incremento neto de la su-perficie forestal durante el período de 1990-2005(los informes relativos a Asia indican un aumen-to neto en los últimos cinco años, debido princi-palmente al programa de repoblación forestalmasiva en China).

El aumento neto de la superficie forestal en Eu-ropa es, en gran parte, el resultado de los incre-mentos sustanciales registrados en variospaíses en el período 2000-2005, encabezados porEspaña (aumento medio de 296.000 ha/año) e Ita-lia (106.000 ha/año), seguidos de Bulgaria, Fran-cia, Portugal y Grecia. El aumento porcentual ma-yor tuvo lugar, según los informes, en países conreducida cubierta forestal, como Islandia (3,9% deaumento anual de sus bosques) e Irlanda (1,9%).

Algo menos de la mitad del aumento neto dela superficie forestal de Europa durante los 15 úl-timos años se debe al aumento de las plantacio-nes forestales. El resto deriva de la expansión na-tural de los bosques a terrenos anteriormente des-tinados a usos agrícolas, y del establecimiento debosques “seminaturales” plantados utilizando es-pecies nativas, que en Europa no se consideranplantaciones forestales. El aumento neto de la ex-tensión de los bosques, de plantaciones forestalesy de existencias en formación son tendencias po-sitivas hacia un desarrollo forestal sostenible enla región. Todas las indicaciones señalan que lospaíses europeos han logrado estabilizar o aumen-tar sus superficies forestales, en muchos casos apartir del siglo XIX o comienzos del siglo XX.

De acuerdo con el Inventario Forestal Nacio-nal, una vez actualizados los datos con los delas comunidades autónomas en las que se ha co-menzado la tercera fase del inventario (1997-2006), la superficie forestal española asciende amás de 26 millones de ha (exactamente 26,273millones, equivalentes a un 52% del territorio na-cional, porcentaje muy superior al de la mayoríade los países europeos, con la excepción de los

Carlos Priego Gonzálezde Canales

[email protected] Ruiz Ruiz

[email protected] de Estudios

Sociales Avanzados(IESA-CSIC)

Perspectivas y demandassociales para el desarrollo de losespacios forestales

45Agricultura Familiar en España 2008

05. Priego_y_Ruiz(pags45-53):Maquetación 1 27/6/08 10:21 Página 45

Page 3: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

escandinavos y de Rusia). A diferencia de lo queocurre en Europa, buena parte de la superficieforestal española está desarbolada o cubiertaapenas por arbolado ralo, pues tan sólo el 56%(14,732 millones de ha) de esta superficie estáarbolada y se puede considerar como bosque.

Un contexto de cambios

Los profundos cambios experimentados por la so-ciedad española durante los últimos veinticincoaños exigen un nuevo planteamiento de la políti-ca forestal para la adaptación a las nuevas de-mandas y perspectivas sociales, y al contexto le-gal y socioeconómico en el que el sector forestalse desenvuelve. Estos cambios han coincidido enel tiempo con la consolidación de una nueva ac-titud de la sociedad española con respecto a losproblemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores de bien-es y servicios ecológicos, económicos y sociales.

Fenómenos recientes, tales como la progre-siva reforestación y recuperación ecológica debuena parte del territorio, la nueva orientación dela política europea en materia agraria y forestal,el significativo incremento de la superficie pro-tegida experimentado en los últimos diez años ola instauración de mecanismos de certificaciónque buscan un sello para la gestión sostenible delos montes y sus productos, entre otros, se hanunido a los tradicionales problemas del sector,como pueden ser los incendios forestales, elavance del proceso de desertificación, la falta deordenación y planes de gestión en la mayor par-te de los montes españoles, el abandono de prác-ticas selvícolas en muchos de ellos o los cambiosde usos del suelo (de secano a regadío) en bus-ca de una mayor rentabilidad, entre otros.

Esta combinación de circunstancias y loscambios que se presentan actualmente en la so-ciedad española obligan a las Administracionesregionales a afrontar un papel conciliador o me-diador entre los diferentes usos e intereses, asícomo entre los objetivos de conservación y ex-plotación sostenible de los espacios forestales.

Nuevas perspectivas y nuevas demandas

En los últimos 50 años se ha producido un verti-ginoso proceso de urbanización e industrializa-ción en España. El crecimiento del turismo enlas últimas décadas (en el año 2007 llegaron a Es-

paña 59,2 millones de turistas) ha provocado unrápido y, en muchos casos, desordenado des-arrollo urbanístico en algunas zonas, especial-mente en el litoral. Con estos datos se consideraque el turismo es el principal agente aceleradoren los procesos de transformación social que hansucedido en España a partir de la década de lossetenta, teniendo como consecuencia importan-tes procesos migratorios que han cambiado drás-ticamente la composición demográfica del terri-torio (Casado, 1999; Rodríguez y Warness, 2002).Del mismo modo, estos flujos poblacionales hanprovocado grandes cambios culturales, ocasio-nando en algunos municipios la desaparición delas tradiciones culturales de carácter local, susti-tuyéndolas por la nueva cultura turística global de-mandada por un turista más cosmopolita.

Sin embargo, y de forma paralela, la pobla-ción ha empezado a demandar un nuevo tipode turismo, más volcado hacia la naturaleza y connuevas variables que les haga aumentar su cali-dad de vida: aire limpio, tranquilidad, ocio, pai-saje… El enorme incremento de la demanda deservicios de ocio o recreativos en los espacios na-turales obedece a la presión demográfica de lasciudades, entre otras razones. La masificacióndel tráfico, la contaminación atmosférica y losgrandes desplazamientos que la población tieneque realizar hacia su lugar de trabajo son algu-nos factores que hacen que la población busqueen su tiempo libre el contacto con la naturaleza.Los parques naturales aparecen de este modocomo los lugares privilegiados de descanso y ociocapaces de aportarnos la salud psíquica nece-saria para enfrentarnos al ritmo de la ciudad.

Este incremento en el uso de la naturaleza,en todas sus vertientes, también ha traído con-sigo en las últimas décadas grandes cambios enel turismo rural. Cabe señalar, a título de ejem-plo, que en algunas provincias del interior, co-mo Córdoba, las plazas de los alojamientos ru-rales se han multiplicado por 100 en tan sólodiez años. Según la Delegación Provincial de Tu-rismo, Comercio y Deporte, en el año 1997 tansólo había en la provincia de Córdoba una casarural que contaba con quince camas. En los úl-timos días del año 2007, la cifra de estableci-mientos alcanzaba el número de 185, con unaoferta de plazas que llegaba a las 1.532 camas.

Como consecuencia de esta nueva cultura so-bre el uso de los montes españoles y de los es-pacios naturales en general, ha resurgido unanueva conciencia ambiental en la población, quereconoce la fragilidad de los recursos naturales yla necesidad de conservarlos de la manera más

Desarrollo de los espacios forestales

46Agricultura Familiar en España 2008

▼El crecimiento delturismo en lasúltimas décadas(en el año 2007llegaron a España59,2 millones deturistas) haprovocado unrápido y, enmuchos casos,desordenadodesarrollourbanístico enalgunas zonas,especialmente enel litoral

05. Priego_y_Ruiz(pags45-53):Maquetación 1 27/6/08 10:21 Página 46

Page 4: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

ecológica posible. Según el Ecobarómetro de An-dalucía (EBA) (encuesta anual realizada por elIESA-CSIC), la población andaluza menciona losincendios forestales como el primero o segundoproblema ambiental más importante de Andalu-cía. Los resultados indican que existe una alta pre-ocupación entre los andaluces por este problema,y que, además, ha permanecido constante en laserie histórica de EBA realizados desde 2001.En todos esos años, los incendios forestales soncitados por una amplia mayoría de encuestados(casi la mitad, un 44,3%,) como el principal pro-blema medioambiental de Andalucía.

Por otro lado, a partir de los datos recogidosen las estadísticas de la Consejería de Medio Am-biente de la Junta de Andalucía sobre la super-ficie forestal afectada por los incendios forestalesen cada provincia, se comprueba que, durantelos años analizados, no existe una asociación cla-ra entre la preocupación de los andaluces por losincendios forestales y los daños causados por es-tos siniestros en sus respectivas provincias. Porejemplo, la mayor preocupación registrada enMálaga en 2001 no responde a un aumento dela superficie afectada en 2000 o 2001 en estaprovincia. Del mismo modo, en Almería en 2002y en Córdoba en 2003 y 2004, se observa un au-mento del porcentaje de encuestados que iden-tifican los incendios forestales con el primer pro-blema ambiental, preocupación que no se co-rresponde con que en esos años haya habido

mayor cantidad de hectáreas afectadas en esasprovincias. Esta realidad hace destacar la cre-ciente preocupación que la población tiene porlos incendios forestales, independientemente deverse o no afectada por la incidencia de sinies-tros en sus áreas de residencia. De ello cabe de-ducir que tal preocupación se debe a una tomade conciencia más general sobre las conse-cuencias que los incendios forestales puede te-ner en el ecosistema del monte: pérdida de re-cursos naturales, biodiversidad, agotamiento delsuelo y desertificación, entre otros.

Según los resultados obtenidos en el EBA2006, la población andaluza resalta que el mon-te cumple sobre todo una función ambiental: ca-si la mitad (un 49%) opina que uno de los dosbeneficios más importantes que aporta el montees la conservación de la flora y fauna; un 39,4%considera que es la conservación de suelos y laregulación del agua, y un 38,6% relaciona los be-neficios del monte con la mejora de las condi-ciones climáticas y la calidad del aire. Para un20% de encuestados, el paisaje es uno de los dosbeneficios más importantes, mientras que otrosusos sociales, como los educativos, culturales ycientíficos, son señalados por un 10,6%.

Los beneficios derivados de actividades eco-nómicas son, con diferencia, los menos citados porlos andaluces, de lo que cabe concluir la escasavaloración que dan a la dimensión económica delmonte (los porcentajes oscilan entre el 9,3% de en-

Desarrollo de los espacios forestales

47Agricultura Familiar en España 2008

Gráfico 1PERCEPCIÓN DE LOS PROBLEMAS AMBIENTALES MÁS IMPORTANTES DE ANDALUCÍA

0 10 20 30 40 50 60

Pérdida de parajes y paisajes naturales

Desaparición de especies

La contaminación del aire

La falta de agua

La contaminación de playas, mares y ríos

Los incendios forestales

La erosión de los suelos y la desertifcación

PORCENTAJES CALCULADOS SOBRE EL TOTAL DE ENCUESTADOS. LOS CASOS DE NO RESPUESTA (NS(NC) HAN SIDO EXCLUIDOS.

Fuente: EBA 2001-2005 (IESA-CSIC).

05. Priego_y_Ruiz(pags45-53):Maquetación 1 27/6/08 10:21 Página 47

Page 5: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

cuestados que citan el aporte de madera, corchoy frutos, y el 4,7% que menciona la ganadería).

El nuevo vínculo social con el monte

Si antes la población percibía la conservación delos espacios naturales como una restricción dela actividad humana, considerando el espacionatural protegido como una “reserva”, hoy estaconcepción está siendo superada. En conse-cuencia, cada vez se cuenta más con la activi-dad y la colaboración de la población local comofactor que contribuye, al menos potencialmen-te, a la conservación de los espacios naturales.

Se observa, así, un cambio en los principios deconservación de la naturaleza, en el sentido deconsiderar la presencia y la actividad de la pobla-ción en las zonas a conservar como un factor po-tencialmente positivo. Aunque es un hecho queaún existen discrepancias en torno a las activida-des desarrollados por la población local en los es-pacios naturales protegidos, no se cuestiona laconveniencia en sí de tales actividades. Lo quese discute es el modo de cómo llevarlas a cabo pa-ra que no suponga un deterioro del medio natural.

Hace décadas, en las zonas forestales, la pre-sencia de la población (que vivía de actividades di-rectamente relacionadas con el monte) determi-naba un vínculo social muy fuerte con el medio na-tural circundante. Dicho vínculo venía marcadopor una situación de dependencia dentro de unaeconomía, generalmente, de subsistencia. Esta de-pendencia generaba un equilibrio entre las co-munidades locales y los espacios naturales quehabitaban. Dicho de otro modo, la explotación delos recursos forestales por las poblaciones loca-les contribuía a la conservación y mantenimientode los montes. Las prácticas mediante las que sedesarrollaba esta explotación eran, con frecuen-cia, intensivas y poco eficientes y, por lo tanto, nosiempre positivas desde un punto de vista ecoló-gico. Pero generalmente contribuían a la regene-ración del monte, e incluían elementos de limpie-za y cuidado del mismo. Los aprovechamientostradicionales del monte suponían una silviculturaque, aunque no fuera ése su propósito, contribu-ía a la prevención de los incendios forestales. Ade-más, el contacto directo de la población local conel monte y la dependencia económica de su apro-vechamiento y explotación significaban un cono-cimiento práctico y una alta valoración del mismo;

Desarrollo de los espacios forestales

48Agricultura Familiar en España 2008

Gráfico 2BENEFICIOS ASOCIADOS AL MONTE EN ANDALUCÍA

0 10 20 30 40 50 60

Primer beneficio Segundo beneficio

NS/NC

Ganadería

Soporte de actividades turísticas

Caza y pesca

Aporte de madera, corcho, frutos, setas

Uso educativo, cultural y científico

Paisaje

Mejora condiciones climáticas y calidad del aire

Conservación de suelos y regulación del agua

Conservación de especie de flora y fauna

Fuente: EBA 2006 (IESA-CSIC).

05. Priego_y_Ruiz(pags45-53):Maquetación 1 27/6/08 10:21 Página 48

Page 6: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

es decir, un interés de la población por conservarloy unas destrezas en su mantenimiento. Además,muchas de las prácticas empleadas en el pasado,aunque no eran ecológicamente muy positivas, es-taban justificadas porque la economía de subsis-tencia que propiciaba la explotación del monte nogarantizaba con frecuencia unas condiciones devida suficientes para la población.

Esta dualidad entre explotación y conservaciónha propiciado la existencia de conflictos en el me-dio forestal, fundamentalmente protagonizados porquienes se dedican a las tareas agrícolas. La ideadel monte como espacio salvaje preservado decualquier tipo de aprovechamiento y explotacióncon fines económicos es percibida como una ame-naza, en la que pueden verse reminiscencias delpasado, si bien algo más atenuadas que antaño.De hecho, todavía en España, en las poblacionescercanas a los espacios forestales aparece esta vi-sión negativa del monte, sostenida fundamental-mente por los agricultores, que lo perciben comoun espacio descuidado y amenazante que, comotal, debe ser combatido o, al menos, limitado. Aho-ra bien, en la situación actual, el conflicto en las lo-calidades cercanas a masas forestales no se ma-nifiesta entre quienes viven del monte y quienes vi-ven de la agricultura, sino entre los agricultores ylos gestores de los espacios naturales protegidos,a los que acusan de impregnar de planteamien-tos ecologistas radicales la preservación de talesespacios con medidas de prohibición o de limita-ción drástica de la actividad productiva.

Nuevas oportunidades para el desarrollo ruralforestal

Las prácticas sobre las que se apoyaba la con-servación del monte en el pasado han desapare-cido en gran medida. Más que una visión nos-

tálgica o idílica del pasado, los expertos se de-cantan por favorecer la sustitución de las basesen las que se apoyaba el mantenimiento del mon-te por otras nuevas. En parte porque aquella si-tuación no se considera tan “ideal” con los cri-terios ecológicos de hoy, ya que también incluíaprácticas y usos con consecuencias negativas pa-ra el medio ambiente; pero en parte también por-que aquella situación se considera prácticamen-te irrecuperable en las condiciones actuales.

Bien es cierto que los nuevos planteamien-tos sobre el uso del monte podrían recuperaralgunas prácticas tradicionales, pero lo cierto esque sería prácticamente imposible en la actuali-dad basar en ellas exclusivamente el cuidado delos espacios forestales. En cualquier caso, sesostiene la necesidad de contar con la poblaciónautóctona, con su actividad, su valoración y suaprecio por el monte como un factor fundamen-tal para su conservación. Incluso, muchas opi-niones de expertos consideran que la participa-ción de la población es un factor muy importan-te, de manera que lograr un nuevo vínculo entrela población y el monte sería de vital importan-cia. Este nuevo vínculo social con el monte seperfila por los expertos en torno a tres cuestio-nes o dimensiones fundamentales: la diversifi-cación y aumento de los usos sostenibles delmonte, la educación ambiental de la poblacióny la gestión de los espacios naturales de formaparticipada y dialogada con la población local.

La diversificación y aumento de los usossostenibles del monte

Es necesario cambiar la idea de conservación dela naturaleza, que ignoraba y/o evitaba la pre-sencia de la población y que concebía funda-mentalmente los espacios naturales como reser-

Desarrollo de los espacios forestales

49Agricultura Familiar en España 2008

05. Priego_y_Ruiz(pags45-53):Maquetación 1 27/6/08 10:21 Página 49

Page 7: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

va biológica, por otra nueva concepción en la queel uso del monte por la población se incluye co-mo un factor fundamental para su conservación.Este cambio de perspectiva en el análisis de losproblemas del monte ha sido señalado, entreotros, por Pérez Vilariño (1998), en relación conla incidencia y gravedad de los incendios fores-tales. Según señala este autor, “esta nueva ópti-ca asume que la creciente gravedad de los in-cendios forestales está directamente relaciona-da con los profundos cambios económicos ysociales asociados a los procesos de urbaniza-ción y desertización de grandes espacios rura-les, así como a la aparición de crecientes y confrecuencia conflictivas demandas relacionadascon las diversas funciones del bosque. Los in-cendios forestales aparecen en este nuevo mar-co como una expresión de una cierta desorga-nización y tensión social, de un relativo abando-no y de una escasa rentabilidad o utilidad”.

La conservación del monte requiere, desdeeste punto de vista, el mantenimiento y la recu-peración de los usos tradicionales. Pero estosusos tradicionales no serían en la actualidad su-ficientes, por lo que el uso del monte que seplantea no puede basarse exclusivamente en surecuperación. El objetivo es complementar losusos productivos tradicionales con nuevos usos,fundamentalmente lúdicos o de disfrute. Para suconservación, el monte debe seguir siendo pro-ductivo, si bien en una medida necesariamentemenor que en el pasado; pero además debe sercada vez más un espacio lúdico y de ocio. No setrataría, por tanto, de un aumento del uso del

monte por intensificación de los aprovecha-mientos, sino por diversificación de los mismos,propiciando y potenciando los más beneficiososdesde un punto de vista medioambiental. Ade-más, el mayor uso lúdico del monte no sólo ge-neraría mayores vínculos económicos, sino tam-bién mayores vínculos afectivos y un mayor co-nocimiento y valoración del mismo por lapoblación. Este tipo de uso se plantea, por tan-to, en una doble dimensión: de explotación “sos-tenible” de un recurso natural y de acercamien-to de las personas a la naturaleza.

Asimismo, los aprovechamientos del mon-te no pueden basarse en la explotación inten-siva de los recursos forestales, sino que tienenque incorporar criterios ecológicos de conser-vación del medio natural. En opinión de mu-chos expertos, estos nuevos requisitos ecoló-gicos de las explotaciones forestales vendríana complicar la viabilidad económica de los mis-mos. Ahora bien, también se abren nuevas po-sibilidades para estos criterios de explotaciónsostenible. Por ejemplo, se señala la produc-ción ecológica como un modo de acceder amercados de productos de calidad (de cre-ciente demanda).

En cualquier caso, la dudosa rentabilidadeconómica de los espacios forestales lleva a mu-chos expertos a plantear la necesidad de sub-vencionar las actividades productivas en el mon-te, como un modo de hacerlas viables. El be-neficio ecológico y social de estas actividadesjustificaría una política de subvenciones quepermitiera su mantenimiento mejorando la com-petitividad de los productos en el mercado. Ade-más, se plantea la conveniencia de compensara los propietarios de explotaciones forestales porlas limitaciones a la actividad que supone la con-servación del medio ambiente. Esta compen-sación contribuiría al mantenimiento de las ac-tividades productivas, promocionaría la intro-ducción y extensión de prácticas productivasrespetuosas con el medio ambiente y mejoraríala actitud de los propietarios forestales hacia laconservación de la naturaleza.

La educación ambiental de la población

El aprecio o valoración del monte por la pobla-ción requiere, en buena medida, de un mayorconocimiento y comprensión de este espacionatural. La educación medioambiental se per-fila así como un mecanismo para conseguircomportamientos respetuosos con los espacios

Desarrollo de los espacios forestales

50Agricultura Familiar en España 2008

05. Priego_y_Ruiz(pags45-53):Maquetación 1 27/6/08 10:21 Página 50

Page 8: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

naturales, tanto en su interacción cotidiana conellos de la población local como de la poblaciónurbana cuando los visitan. Esta necesidad deuna mayor educación ambiental de la poblaciónes tanto más urgente en un contexto de reduc-ción de los usos productivos del monte, ya queel menor uso reduce a su vez el contacto de lapoblación con los espacios naturales. En la ac-tualidad, la relación de la población con el mon-te es más esporádica e indirecta (o mediada)que en el pasado, por lo que la educación am-biental sería un mecanismo imprescindible pa-ra compensar las carencias que se producen encuanto al conocimiento y valoración del espacionatural por la población.

Así, en muchos estudios se considera que,si bien la educación ambiental de la poblaciónes mayor en la actualidad que en el pasado, almenos en lo que se refiere al nivel de conoci-miento general sobre el medio ambiente, larealidad es que este mayor nivel de educacióntiene su contrapunto en un menor conocimien-to y contacto directo con los espacios natura-les. El diagnóstico se puede resumir diciendoque ha aumentado la conciencia ambiental, pe-ro también la distancia práctica respecto de losespacios naturales.

Por otro lado, la educación ambiental no seentendería como un proceso de ilustración ge-neral de la población, sino más bien como unmodo de potenciar las actitudes positivas de lamisma hacia el medio ambiente. En este senti-do, no se trataría exclusivamente de un proce-so vertical o de irradiación de conocimientos de

arriba hacia abajo, sino más bien de un proce-so horizontal o bidireccional de diálogo con laspoblaciones locales, propiciando la reflexiónconjunta de los problemas que aquejan a losespacios naturales y teniendo en cuenta sus co-nocimientos y sus necesidades. En esta con-cepción, la participación de la población localen la gestión de los espacios naturales seríatambién, en cierto sentido, un mecanismo defeed back que permitiría aumentar su educa-ción ambiental.

La gestión participada y dialogada de losespacios naturales

Una tercera cuestión que está contribuyendo a ge-nerar nuevos vínculos de la población con los es-pacios naturales, y en particular con el monte, esun cambio en el modo de gestión de los mismos.En este sentido, se señala que la conservación delos espacios naturales se planteaba en el pasado almargen, si no abiertamente en contra, de la po-blación que residía en su entorno. Este modelo degestión, basado fundamentalmente en criterios eco-lógicos y que ignoraba las cuestiones sociales, ge-neraba incomprensión y rechazo entre la poblacióncontra los espacios protegidos. Tal percepción es-taría a su vez relacionada con un cierto rechazo eincomprensión de los planteamientos ecologistas,en la medida en que se consideraban como unaamenaza o limitación respecto a las posibilidadesde aprovechar el espacio natural.

Se señala que este modelo de gestión que ex-cluye a la población autóctona y limita sus posi-bilidades de actuación en el medio natural, hacomenzado a ser superado y sustituido por otrobasado en mecanismos de participación. Este in-cipiente modelo de gestión, que incluye la par-ticipación de la población, puede contribuir a unmejor entendimiento entre los técnicos de me-dio ambiente y la población local y a una mayorvinculación de ésta con las medidas de protec-ción de los espacios naturales. En este sentido,cabe destacar el enfoque participativo (desdedentro) adoptado para la elaboración del II Plande Desarrollo Sostenible de Doñana, que con-trastaría con el modo en que se elaboró el I Plan(desde fuera y con una perspectiva de experto).La participación de la población en la gestión delos espacios protegidos se considera así comoun factor que puede contribuir decisivamente aconseguir una mayor colaboración de la pobla-ción en su conservación y una mayor vinculaciónsocial con el monte.

Desarrollo de los espacios forestales

52Agricultura Familiar en España 2008

05. Priego_y_Ruiz(pags45-53):Maquetación 1 27/6/08 10:21 Página 52

Page 9: p2-p7 FER 2 - COnnecting REpositories · problemas ambientales y una significativa diver-sificación de la demanda sobre los espacios fo-restales en su condición de generadores

Otro aspecto importante para potenciar lavinculación de la población con los espaciosnaturales consiste en contar con la poblaciónautóctona para los trabajos que se realicen ensus territorios. Para la población rural, la par-ticipación en el mantenimiento del espacio na-tural por parte de quienes viven en él, tienemuchas ventajas: de un lado, porque son quie-nes mejor conocen el territorio y pueden apor-tar conocimiento y experiencia a su labor; deotro lado, porque se propicia un contacto conel propio medio natural, pudiendo contribuir aaumentar la valoración del monte entre la po-blación, y finalmente, porque se generan lazoseconómicos entre el medio natural y la pobla-ción, ayudando a visualizar los beneficios desu conservación.

Conclusiones

En este trabajo se analizan los cambios experi-mentados en las demandas sociales respecto aluso y conservación del monte y en los modos degestión por parte de los responsables técnicosy políticos de su preservación. Utilizando datosdel Ecobarómetro de Andalucía se muestra lacreciente valoración del monte y los espaciosnaturales en general en lo que se refiere a sucontribución a la sostenibilidad del medio am-biente (bidiversidad…), y la escasa valoraciónque recibe todo lo relacionado con el aprove-chamiento y explotación económica de los re-cursos. Esto explica, de algún modo, la diso-ciación entre los intereses conservacionistas (re-presentado por las demandas de la poblaciónurbana y los gestores de los espacios naturalesprotegidos) y los intereses más variados de lapoblación local que reside en el entorno de esos

espacios (más interesada por el mantenimientode usos tradicionales basados en el aprovecha-miento económico del monte). La realidadmuestra que sin la participación de la poblaciónlocal no es posible un desarrollo sostenible delos espacios naturales, de tal modo que un in-cremento de las prohibiciones al uso agrícola,ganadero o forestal de los espacios naturalesconduce al abandono del monte, con los ries-gos que conlleva en la incidencia de los incen-dios forestales.

Apostamos por un nuevo vínculo social delmonte, basado en tres pilares: la diversificacióny el aumento de sus usos desde una perspecti-va amplia (y no sólo ecológica) de la sostenibili-dad; un cambio en la educación ambiental de lapoblación (basada más en el aprendizaje de bue-nas prácticas en el uso del monte que en la acu-mulación de conocimiento general), y unaapuesta por la participación social en la gestiónde los espacios naturales. ■

Desarrollo de los espacios forestales

53Agricultura Familiar en España 2008

▼ Referencias bibliográficas

AA.VV. (2004), Adecuación del Plan Forestal Andaluz: Periodo2003-2007, Dirección General de Planificación, Consejería deMedioAmbiente,Sevilla.

CASADO DÍAZ, M. A. (1999), “Socio-demographic impacts ofresidentialtourism:AcasestudyofTorrevieja”,TheInternationalJournal of Tourism Research, nº 1,pp.223-237.

INSTITUTO DE ESTUDIOS SOCIALES AVANZADOS (IESA-CSIC)(2006), Ecobarómetro de Andalucía, IESA-CSIC (Informe E-0608),Córdoba.

INSTITUTO DE ESTUDIOS SOCIALES AVANZADOS (IESA-CSIC)(2007), Percepción Social de los Incendios Forestales enAndalucía 2006-2007, Monografía, IESA-CSIC, Córdoba.http://www.iesa.csic.es/es/proyectos/biodiversidad.php

INVENTARIOFORESTALNACIONAL(3ªfasedelinventario(1997-2006)).http://www.mma.es/portal/secciones/biodiversidad/in-ventarios/ifn/

JIMÉNEZ-SÁNCHEZ,M.yE.MOYANO(2005),Losandalucesyel

medio ambiente, Consejería de Medio Ambiente de la Junta deAndalucía, Sevilla.

PLAN DE DESARROLLO SOSTENIBLE DE DOÑANA I (2006), In-forme I Foro de Participación Ciudadana, Matalascañas, 31 demarzoy1deabril. http://www.pds.donana.es/documentos_pu-blicos.php

PLAN DE DESARROLLO SOSTENIBLE DE DOÑANA II (2007).http://www.pds.donana.es/documentos_publicos.php

PÉREZ VILARIÑO, J. (1998). “Construcción social del monte ydesarrollo corporativo del sector forestal”, Agricultura y Socie-dad, nº 85,Madrid,MAPYA.

RODRÍGUEZ, V. y T. WARNES (2002), “Los residentes europeosmayores en España: repercusiones socioeconómicas y territo-riales”,Elcampodelascienciasy lasartes,nº139,pp.123-148.

ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA AGRI-CULTURAYLAALIMENTACIÓN(FAO)(2007),SituacióndelosBosques 2007, Subdirección de Políticas y Apoyo en Materiade Publicación Electrónica, Dirección de Comunicación, FAO,Roma.

05. Priego_y_Ruiz(pags45-53):Maquetación 1 27/6/08 10:21 Página 53