revista semestral volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · comentario a un fragmento del himno de la...

170
Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 Presentación La “Reforma” a la luz del giro antropocéntrico Erasmo Norberto Bautista Lucas América Latina como “el Otro” oprimido según Enrique Dussel Peter Abuul Aondoaseer El papel del filósofo en América Latina en Indología: una interpretación de la cultura Ibero-americana de José Vasconcelos Jovani Fernández Puentes El Logos joánico y la sabiduría divina en la tradición hebrea Rubén Betancourt García El movimiento de la gnosis. Comentario a un fragmento del Himno de la perla José Alberto Hernández Ibáñez Persona como una realidad relativamente absoluta. Sobre el concepto de persona en la filosofía de Xavier Zubiri José María Quesada Fox Problemas epistemológicos a enfrentar en una fundamentación filosófica de la Misión ad Gentes Jorge Luis Ortiz Rivera Estudio crítico y traducción del Opúsculo Sobre los principios de la naturaleza al Hermano Silvestre de Tomás de Aquino Luis Pascal Pellat Thomé La amistad en Aristóteles y San Agustín Gabriel Fierro Nuño Universidad Pontificia de México

Upload: others

Post on 29-Oct-2020

2 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Revista semestral Volumen 8, no.1 2018

Presentación

La “Reforma” a la luz del giro antropocéntrico

Erasmo Norberto Bautista Lucas

América Latina como “el Otro” oprimido según Enrique Dussel

Peter Abuul Aondoaseer

El papel del filósofo en América Latina en Indología: una interpretación de la cultura Ibero-americana de José Vasconcelos

Jovani Fernández Puentes

El Logos joánico y la sabiduría divina en la tradición hebrea

Rubén Betancourt García

El movimiento de la gnosis. Comentario a un fragmento del Himno de la perla

José Alberto Hernández Ibáñez

Persona como una realidad relativamente absoluta. Sobre el concepto de persona en la filosofía de Xavier Zubiri

José María Quesada Fox

Problemas epistemológicos a enfrentar en una fundamentación filosófica de la Misión ad Gentes

Jorge Luis Ortiz Rivera

Estudio crítico y traducción del Opúsculo Sobre los principios de la naturaleza al Hermano Silvestre de Tomás de Aquino

Luis Pascal Pellat Thomé

La amistad en Aristóteles y San Agustín

Gabriel Fierro Nuño

Universidad Pontificia de México

Page 2: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa
Page 3: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa
Page 4: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa
Page 5: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Presentación

En la séptima edición de la revista Inserciones, la Facultad de

Filosofía fiel a su compromiso de promover la cultura filosófica, recoge

en este número, la selección de varios artículos fruto del trabajo

académico de alumnos, profesores e invitados al comienzo del primer

semestre del Ciclo Escolar 2019-I.

En un primer momento, el Dr. Erasmo Norberto Bautista Lucas

habla de la “Reforma” luterana a la luz del giro antropocéntrico,

tomando en cuenta los movimientos reformadores espirituales de la

nueva “piedad moderna”, del movimiento europeo del humanismo y de

la concepción heliocéntrica del universo desde la visión de Nicolás

Copérnico. Con lo anterior, el Dr. Erasmo cae en la cuenta que la

historia es como el notario de lo acontecido y de lo que queda por venir,

de tal forma que la persona de Martín Lutero y la Reforma, ayudan a

construir la historia, de lo que nos gusta y lo que desagrada.

El segundo artículo del Sr. Peter Abuul Aondoaseer toma como

fuente principal la obra de Enrique Dussel y Daniel E. Guillot:

Liberación Latinoamericana y Emmanuel Levinas. La división del

artículo consta de tres partes. Primero analiza el concepto del “otro”

desde la perspectiva levinasiana y de la Filosofía Latinoamericana de

la Liberación. Posteriormente, habla sobre América Latina como

“Otro” oprimido, según Dussel; por último, desarrolla el tema de la vía

de la liberación de América Latina. Recuerda el Sr. Peter que la

Page 6: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Presentación Rubén Betancourt

4

preocupación principal que se trató de resolver a lo largo del artículo

fue sobre la noción del “otro” y ver de qué manera América Latina es

el otro oprimido según Enrique Dussel.

El Sr. Jovani Fernández Puentes, en un tercer momento, realiza

una revisión de la obra Indología: una interpretación de la cultura

Ibero-Americana con la finalidad de mostrar cuáles son las

características del filósofo y el papel que juega en Iberoamérica; busca

responder a la finalidad que tiene la presencia de los filósofos en nuestra

sociedad. Jovani Fernández, por medio de un análisis riguroso,

constata que el filósofo en Iberoamérica, es aquel capaz de concretar

una síntesis del pensamiento, en virtud de su mestizaje. Además que el

filósofo es el hombre que contempla a América descubriendo su

riqueza, su diversidad. Esta contemplación va acompañada con un tipo

de praxis filosófica, puesto que de la contemplación se debe pasar a la

distribución equitativa de las riquezas naturales.

El Dr. Rubén Betancourt, en su artículo mantiene que la

concepción del Logos joánico es una acepción que permite conectar la

connotación que recibía en el pensamiento helénico con un equivalente

que se halla en el pensamiento hebreo, especialmente en los escritos

sapienciales; de tal forma que cuando el hombre escucha al Logos

adquiere la sabiduría para confesar que todas las cosas son uno,

haciéndose capaz de descubrir en la aparente pluralidad de las cosas, al

Ser único en perpetuo movimiento. El Dr. Betancourt llega a la

conclusión que el Logos joánico se identifica indudablemente con la

persona de Jesucristo. Este Logos es el único que posee tres

características fundamentales que lo distinguen de la Sabiduría hebrea

y de las connotaciones que tiene el Logos en otras doctrinas, a saber, el

carácter personal del Logos, su preexistencia personal y real

(coexistencia con el Padre) y su encarnación. Así, el Logos de san Juan

posee una originalidad propia, a diferencia de los griegos, pues a pesar

de sus semejanzas con la Sabiduría divina, difiere en algunos aspectos

esenciales, a saber, su carácter personal, su coexistencia con Dios como

Dios mismo y su encarnación en la persona humana de Jesús.

El quinto artículo lo ocupa el tema sobre “El movimiento de la

gnosis. Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic.

Page 7: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

5

José Alberto Hernández. El autor mantiene que algunas formas del

pensamiento helenista no escapan a ciertas expresiones de carácter

esotérico, entendidas éstas como manifestaciones filosófico-religiosas

cuya producción literaria adquiere rasgos de pretendida revelación

divina y especulación hermética. Estas doctrinas se presentan como

sistemas cosmológicos o éticos, inspiradas en narrativas míticas de

dominio ambiental, es decir, nuevas versiones de los paradigmas

homéricos, platónicos, bíblicos, o semíticos en general. Así pues, para

el Lic. José Alberto, el gnosticismo, sistema de pensamiento emanado

de la encrucijada cultural entre la filosofía y la religión de la antigüedad

greco-romana, se le reconoce sensiblemente como una de las más

tóxicas manifestaciones heterodoxas del dogma cristiano, aunque en

contraparte es reconocido también como la consecuencia creativa de

una cultura en transición simbiótica. Por lo tanto, desde el punto de

vista ontológico sigue siendo una encrucijada para resolver el tema del

uno y del múltiple, pero ya que la corriente gnóstica no generó una

metafísica respetable nos quedamos con la provocación del

replanteamiento de algunos temas dogmáticos que tienen que ver con

el misterio y la comunicación divina, con la idea de la participación del

hombre en los dones sobrenaturales, con sus aspiraciones a la vida de

gloria, pero, sobre todo, con el estímulo intenso de buscar la mejor

explicación a todas estas interrogantes.

José María Quesada en su artículo sobre “La persona como una

realidad relativamente absoluta…”, constata que el concepto de

persona humana ingresa en la filosofía gracias al cristianismo. Además,

en el siglo IV los Padres Capadocios identifican la idea de persona con

la hipostasis. Después de un estudio minucioso llega a la conclusión

que los textos de los Padres de la Iglesia, mantienen que la naturaleza

de Dios debe de ser entendida como una categoría general que se les

aplica a las tres Personas Divinas no como ousía (sustancia), sino como

hipostasis. Es decir, Dios debe de concebirse como una comunión

amorosa de tres personas ontológicamente distintas, lo cual en sentido

filosófico, da cuenta cabal de la densidad ontológica del ser persona.

El artículo del Mtro. Jorge Luis Ortiz “Problemas

epistemológicos a enfrentar en una fundamentación filosófica de la

Page 8: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Presentación Rubén Betancourt

6

misión Ad gentes”, tiene como objetivo explicitar los presupuestos

epistemológicos que debieran sustentar las actividades de un Instituto

dedicado a la formación, investigación y enseñanza de aquello que

dentro de la Iglesia Católica recibe el nombre de Missio ad Gentes, es

decir, la acción de anuncio y propagación, no solo de los dogmas y ritos

propios de la fe específicamente católica, sino, considerados más en

general aún, de los valores supuestos como inspiradores del

pensamiento cristiano y los cuales son considerados como

universalmente ofertables a todos los pueblos y cultura en tanto que

válidos. Para el autor cada uno de los rubros, a saber, gnoseológicos,

críticos y epistemológicos, deberán ser profundizados en subsecuentes

consideraciones, las cuales han de tomar en cuenta la misma naturaleza

de la racionalidad propuesta en estas páginas y por ello han de surgir

producto de una acción y reflexión dialógica la cual ha de distinguir el

quehacer académico, pedagógico, educativo y formativo de un Instituto

Misionología.

El Lic. Luis Pascal Pellat realiza un “Estudio crítico y

traducción del Opúsculo sobre los Principios de la naturaleza al

hermano Silvestre de Tomás de Aquino. En el Opúsculo Sobre los

principios de la naturaleza, el Aquinate expone con claridad los

principios de la realidad sujeta al cambio desde el punto de vista de su

comprensión estática (materia, forma y privación), dinámica (causa

eficiente y final) y numéricamente múltiple o plural (según la analogía).

No disputa aquí con otros planteamientos filosóficos, pero incorpora a

la tradición las nuevas perspectivas que aporta el patrimonio

aristotélico. La importancia del escrito del Lic. Pascal Pellat estriba en

que nos proporciona el texto latino y la traducción al castellano,

contextualizando el pensamiento tomista y dando un comentario crítico

para la mejor comprensión del texto.

El último artículo de este volumen lo constituye el tema “La

amistad en Aristóteles y san Agustín”, del Dr. Gabriel Fierro Nuño,

mantiene que la amistad ha sido un tipo de relación interpersonal que,

aun en la cotidianidad y la aparente inmanencia, no ha escapado a la

reflexión filosófica a través de la historia. En esta reflexión convergen

los postulados filosóficos teóricos, por una parte, y las experiencias

Page 9: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

7

personales, por otra parte. Esta convergencia hace que el tópico de la

amistad sea considerado de muy diverso modo por dos filósofos

icónicos, uno de la antigüedad, otro de lo medieval; uno griego, el otro

latino; uno pre-cristiano, otro cristiano. Sus diversos ejes de reflexión

analítica, así como la vivencia de la amistad de su contexto, nos

posibilidad una visión sinóptica de ambos pensadores sobre un mismo

tema. La convicción que San Agustín da el brinco hermenéutico para

hablar de ese acto puro de la amistad, llevándola a la trascendencia, a

la amistad con Otro, desde la mística y la interioridad. De este modo,

las posturas aristotélicas y agustinianas no son necesariamente

excluyentes, no estamos ante una aporía, sino ante una

complementariedad. La postura de San Agustín completa y perfecciona

a la de Aristóteles.

Espero que el esfuerzo de profesores, alumnos e invitados

plasmado en este séptimo volumen de la revista Inserciones, pueda

llegar a construir puentes de diálogo con todos aquellos que buscan con

sinceridad la verdad. Agradezco de manera particular al Dr. Erasmo

Bautista que, como Decano de la Facultad de Filosofía, sigue apoyando

y promoviendo que todos los miembros de la Facultad formen su juicio

crítico por medio de la escritura.

Rubén Betancourt García

Page 10: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” a la luz del giro antropocéntrico

Erasmo Norberto Bautista Lucas1

Introducción

En este escrito se habla de la “Reforma luterana” a la luz del

giro antropocéntrico tomando en cuenta, primero, los movimientos

reformadores espirituales de la nueva “piedad moderna”, conocida

como “devotio moderna”, de interiorización que impregnó a Lutero,

entre otros muchos; segundo, también el movimiento europeo del

humanismo que marcó en la misma medida tanto a católicos como a

protestantes; y, finalmente, la concepción heliocéntrica del universo,

elaborada por Nicolás Copérnico, en la época misma de Lutero. Y esto

con la finalidad de poner de relieve, a grandes rasgos, que Martín

Lutero dio un considerable empuje esencial a la reforma y a la división

de la cristiandad occidental, pero que no fue él quien desencadenó la

reforma realmente. Ésta había sido desencadenada ya un siglo o dos

antes con la centralidad del sujeto en la fe cristiana, difundida mediante

la devotio moderna, proveniente de los países bajos y asumida por

reformadores tan dispares como Lutero e Ignacio de Loyola.

En el centro de la fe cristiana no está ahora el gran orden

cosmológico de Dios, sino el hombre con sus innumerables necesidades

1 Decano de la Facultad de Filosofía, UPM. Profesor Estable extraordinario

Page 11: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

9

y vitales interrogantes. Y en este gran giro hacia el hombre como punto

central de la creación participan no solo los movimientos religiosos,

sino también seculares tales como el humanismo y las corrientes de la

mística de aquellos años. Estos movimientos y corrientes no siempre se

alinearon, posteriormente, a la división confesional, pero se revelan

ciertamente como marcas de la época moderna. Es esta concentración

en el sujeto, característica del pensamiento europeo, la que está en

discusión, también hoy, con motivo de la conmemoración de los

quinientos años de la reforma luterana. No la división de la Iglesia, sino

el puesto central del hombre en el mundo y ante éste constituye el

núcleo central de la reforma. Luego la reforma concierne en la misma

medida tanto a católicos como a protestantes, pero asimismo a los

humanistas y a la sociedad secular en general.2

1. Factores del tránsito de la Edad Media a la Edad Moderna3

Entre el siglo XV y el XVI se sucede una serie de hechos

históricos que indican que un mundo se está agotando, el medieval, y

otro está naciendo, el moderno: en 1453 la caída de Constantinopla

pone fin a una continuidad histórica milenaria, la de la dignidad

imperial romana. Este acontecimiento trajo consecuencias importantes

que incidirán en la nueva configuración del mundo occidental.

Numerosos teólogos, filósofos, literatos y filólogos bizantinos

abandonan su patria y se trasladan a Italia, asentándose en Florencia

particularmente, fortaleciendo así un movimiento de regreso a las

fuentes clásicas de la cultura, que se denominará Renacimiento, una de

cuyas expresiones es el humanismo. Además de esto, el cierre de la ruta

comercial hacia Oriente, causado por la caída de Bizancio, es un

elemento importante que explica en parte los adelantos técnicos

verificados durante la segunda mitad del siglo XV en lo concerniente a

2 Cf. Lucian HÖLSCHER, «Reformation und säkulare Gesellschaft», en

Stimmen der Zeit 235 Alemania (2017), 660-661. 3 Mariano FAZIO - Daniel GAMARRA, Historia de la filosofía III. Filosofía

moderna. Palabra. Madrid 2001, 7-43. Ezequiel DE OLASO (editor), Del

Renacimiento a la ilustración I. Enciclopedia iberoamericana de filosofía.

Ed. Trotta, Madrid 1994.

Page 12: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

10

las ciencias y técnicas de la navegación, adelantos que permitieron

realizar distintos intentos para encontrar nuevas rutas que llevaron hasta

la China y la India; algunos de estos intentos terminaron con el

descubrimiento de América y por ende con el ensanchamiento de la

visión europea del mundo en 1492.

Poco antes de que Magallanes iniciase su travesía de

circunvalación del mundo y Hernán Cortés estuviese a las puertas de

México, en 1517 un fraile agustino, Martín Lutero, comienza su

predicación desde Wittenberg. El fin de la unidad de la cristiandad

medieval, causada por las discordias religiosas entre católicos,

luteranos, calvinistas, anglicanos, producirá efectos tan revolucionarios

como los de la entrada en escena occidental del nuevo continente

americano. Renacimiento, descubrimiento de América y Reforma

luterana pusieron a circular un gran número de ideas nuevas, que

encontraron un aliado fundamental en un avance tecnológico de esa

época, a saber, la invención de la imprenta, a mediados del siglo XV,

por obra de Johannes Guttenberg.

Los siglos XV y XVI son una especie de bisagra entre dos

estructuras históricas: la de la edad media [siglos XI-mitad del siglo

XV] y la de la edad moderna [siglos XVII-XVIII]. Es una época

caracterizada por procesos de cambio, donde se evidencian novedades

modernas, pero a la vez perduran continuidades medievales.

Como en la historia universal también en la historia de la

filosofía pueden distinguirse tres grandes períodos: Antigüedad,

Medioevo, Modernidad. En la historia de las ideas semejante

periodización es, ciertamente, más problemática aun que en la historia

política, porque las corrientes filosóficas difícilmente pueden

retrotraerse a acontecimientos exactamente fechables. Esto se revela

claramente en el tránsito de la edad media a la época moderna.4 Hay,

ciertamente, un talante específicamente moderno del pensamiento

filosófico que, sin embargo, solo con Descartes en el siglo XVII

4 Víctor SANZ SANCRUZ, Historia de la filosofía moderna, EUNSA. Pamplona

2005, 17-37.

Page 13: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

11

adquiere su expresión claramente perceptible. Antes de esto hay un

largo período de transición cuyos problemas se retrotraen claramente

hasta la edad media, ocasionan cambios radicales y provocan una

búsqueda nueva, intensa y multifacética de nuevos caminos, y

encuentran su condensación metódico-sistemática en el racionalismo y

en el empirismo.

Por este motivo debemos recurrir a las corrientes y

movimientos intelectuales de la época que caracterizan la transición de

la edad media a la edad moderna y que constituyen por ello el trasfondo

del despliegue de la filosofía moderna. Y son sobre todo el

nominalismo, el humanismo y la reforma.

2. Guillermo de Ockham y el nominalismo terminista5

Mientras el franciscano Guillermo de Ockham concluye sus

estudios de teología en la universidad de Oxford y da sus primeras

clases acerca del libro de las Sentencias de Pedro Lombardo, Giotto

proyecta en la ciudad de Florencia el ciclo de frescos de la Iglesia de

Santa Croce y Dante redacta en el exilio su Divina Comedia. Una

contemporaneidad fortuita, ciertamente, pero en la obra de estos tres

contemporáneos se reflejan los rasgos de una misma época, que no sin

motivo es denominada por muchos historiadores como la Crisis del

siglo XIV.6

Aunque la Divina Comedia de Dante, comparable a una

catedral espiritual, expresa una vez más la idea del orden medieval de

5 Joseph MARÉCHAL, El punto de partida de la metafísica. Lecciones sobre el

desarrollo histórico y teórico del problema del conocimiento. I: Desde la

antigüedad hasta el fin de la Edad Media: la crítica antigua del conocimiento.

Biblioteca hispánica de filosofía. Ed. Gredos. Madrid 1957. [Título original:

Le point de départ de la Metaphysique, troisième édition. Bruxelles 1944;

Joseph MARÉCHAL, Précis d´histoire de la philosophie moderne. Tome

Premier: De la renaissance a Kant. Ed. Desclée de Brouwer. Paris 1951, 3-55. 6 Cf. Wilhelm VON OCKHAM, Texte zur Theorie der Erkenntnis und der

Wissenschaft. Lateinisch/Deutsch. Herausgegeben, übersetzt und kommentiert

von Ruedi Imbach. Philipp Reclam jun. Stuttgart 2008 Vorwort, 5.

Page 14: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

12

forma casi consumada, un rasgo de esa obra remite ya más allá de la

edad media presagiando una nueva época en la que el hombre ocupa el

centro de las preocupaciones. Por ejemplo, la interpretación de la figura

de Odiseo en el canto XXVI del infierno confirma semejante evasión o

fuga del mundo medieval. El a tantas duras pruebas sometido Odiseo

se presenta en Dante no como el héroe de la guerra que busca el hogar,

encarna, por el contrario, la figura del atrevido aventurero, que,

aguijoneado por una insaciable curiosidad, busca en el océano inmenso

una nueva tierra, pero termina naufragando. Ni el amor al hijo ni al

anciano padre ni la añoranza por la fiel Penélope logra frenar en él el

afán de conocer el mundo y el hombre. Llegados a los confines del

mundo, que le está prohibido al hombre transgredir, Odiseo se dirige a

sus compañeros arengándolos, a pesar de la prohibición celestial, a

avanzar hacia lo desconocido: “¡Oh hermanos!”… “que por cien mil

peligros habéis llegado a occidente, de esta pequeña, de esta tan

pequeña vigilia de nuestro sentido remanente no queráis negaros la

experiencia, siguiendo al Sol, hacia el mundo sin gente. Considerad

vuestra simiente: hechos no fuisteis para vivir como brutos, sino para

perseguir virtud y conocimiento.

La desintegración y disolución interna tanto de la cosmovisión

y como del orden social, propios de la edad media tiene su expresión

en el nominalismo de la baja edad media en la que entra en crisis el

pensamiento escolástico. Una tirantez problemática, latente en toda la

escolástica de la edad media, emerge abiertamente y causa, a final de

cuentas, una ruptura. Se trata de la tensa tirantez entre platonismo y

aristotelismo.

De un lado está un platonismo que defiende la inmediatez del

conocimiento intuitivo-intelectivo: inmediatez, es decir, sin mediación

alguna de la percepción sensible el entendimiento aprehende la esencia

universal de las cosas, y experimente, también de manera inmediata, es

decir, sin la mediación del mundo de la experiencia, la realidad

metafísica de Dios. Del otro lado está un aristotelismo, opuesto al

platonismo, que ata el conocimiento intelectivo a la experiencia

sensible. Aprehendemos la esencia de las cosas solo de modo mediato,

es decir, mediante la abstracción a partir de los fenómenos sensibles, y

Page 15: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

13

alcanzamos la trascendencia solo por la mediación de la experiencia y

del pensamiento lógico-conceptual.7

En la tirantez de este contraste se sitúa todo el pensamiento

medieval. La alta edad media era de orientación predominantemente

platónico-neoplatónica, sobre todo por la influencia predominante de la

filosofía de San Agustín con acentos todavía más agudos,

específicamente neoplatónicos gracias a la mediación del Seudo

Dionisio Areopagita, Escoto Eriúgena y Anselmo de Canterbury hasta

la primera escolástica, situada expresamente en la tradición agustiniana

bajo la clara influencia del pensamiento cristiano-neoplatónico.

La alta escolástica del siglo XIII, sobre todo Tomás de Aquino,

señalando el camino, opta, en cambio, por Aristóteles, contra la

inmediatez de la intuición a favor de la mediación a través de la

abstracción, es decir: por un pensamiento abstractivo y discursivo,

atado a la experiencia, pero considerado no empiristamente, sino que

asume en sí mismo el elemento intuitivo. Intelligere significa para

Tomás de Aquino intus-legere ingreso intelectual, escudriñamiento

espiritual de los contenidos de la experiencia de tal modo que en ellos

resplandezca la esencia intelectualmente perceptible, aprehensible.

Pero en la baja escolástica, precisamente en la corriente del

nominalismo, que despega con Guillermo de Ockham en el siglo XIV

y se agudiza en el periodo sucesivo, el pensamiento se ata de tal modo

a la simple experiencia que amenaza con perecer en ella. La

universalidad del concepto se disuelve en la particularidad del

fenómeno correspondiente. No hay auténtico universal alguno en el que

se aprehenda la esencia común de una pluralidad de cosas singulares.

Para una pluralidad de fenómenos particulares y singulares hay sólo

nombres comunes. De esta manera el pensamiento conceptual queda

7 Wilhelm VON OCKHAM, Texte zu Theologie und Ethik. Lateinisch/Deutsch.

Ausgewält, übersetzt und herausgegeben von Volker Leppin und Sigfrid

Müller. Philipp Reclam jun. Stuttgart 2000; Texte zur Theorie der Erkenntnis

und der Wissenschaft. Lateinisch/Deutsch. Herausgegeben, übersetzt und

kommentiert von Ruedi Imbach. Philipp Reclam jun. Stuttgart 2008.

Page 16: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

14

devaluado y cuestionado su valor. Si en la inmanencia del mundo de la

experiencia el pensamiento ya no alcanza la esencia de las cosas,

entonces, con mayor razón, tampoco abre acceso alguno a la

transcendencia. El pensamiento humano, que es conceptual-discursivo,

queda restringido al ámbito de la experiencia intramundana.

Así las cosas, por un lado el pensamiento queda referido a la

experiencia. Del más allá, el pensamiento se vuelve al más acá, de la

transcendencia se concentra en la inmanencia. Se centra en el

conocimiento del mundo, de la naturaleza. Con este giro inicia la nueva

ciencia de la naturaleza, que, ahora exacta en el sentido moderno, se

fundamenta nuevamente y comienza su progreso moderno y su victoria.

Por otro, el pensamiento que por motivos religiosos mantiene la

transcendencia, no tiene acceso racional a la misma, sino que queda

supeditado a otros caminos. De aquí provienen, desde el punto de vista

teológico, las líneas del desarrollo del concepto de fe del

protestantismo, de la Reforma. La fe se convierte en un salto irracional

de confianza ciega, que no puede fundamentarse ni justificarse

mediante el conocimiento racional. En el ámbito filosófico esto se

manifiesta en la pretensión de recurrir a una intuición trans-conceptual

y trans-racional de la razón, al margen del pensamiento conceptual y

racional del entendimiento. Lo cual quiere decir entonces que el

nominalismo suscita su extremo contrario: el retorno del pensamiento

platónico-neoplatónico que se dirige expresamente contra la escolástica

decadente y se ampara en la tradición de la teología neoplatónico-

mística. Esto se constata claramente de modo particular en el gran

Nicolás de Cusa. Esta misma tendencia subyace más tarde no solo a los

movimientos místico-teosóficos sino también a las ideas innatas en la

filosofía de R. Descartes, a la distinción entre razón y corazón según

Pascal, y al ontologismo de Nicolás de Malebranche. Y repercute

profundamente en el pensamiento moderno.

Page 17: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

15

3. El espíritu del Renacimiento: Humanismo8, Nueva

ciencia de la naturaleza.

Con el término Renacimiento se designa una serie de procesos

culturales que tuvieron lugar en los siglos XV y XVI, pero cuyos

primeros atisbos se pueden encontrar ya en el siglo XIV. Quizá el

elemento principal del espíritu renacentista sea el de la vuelta a los

clásicos: el retorno a la antigüedad clásica y su renovación. La

mentalidad del renacimiento con su recuperación y actualización del

patrimonio de la antigüedad clásica grecorromana en el humanismo y

con la emergencia de la nueva ciencia de la naturaleza.

El renacimiento expresa una transformación de toda la vida

espiritual y cultural de la Europa de aquel tiempo: se derrumba

definitivamente la concepción medieval del mundo; lo nuevo irrumpe

con violencia revolucionaria, pero sin que tenga clara expresión. Esta

época, sobre todo la de los siglos XVI y XVII, se caracteriza,

considerada desde el punto de vista negativo, por su radical

distanciamiento respecto de la edad media. Se desprecia todo el

patrimonio material, espiritual y cultural de la edad media, también su

ciencia, filosofía y religión. Se pretende suprimir toda relación con el

pasado para abrirse a tiempos nuevos. Al distanciamiento respecto de

lo medieval se suma, considerado este tiempo desde el punto de vista

positivo, una atención apasionada a nuevo, a las novedades en curso. Y

8 Mariano FAZIO, Historia de las ideas contemporáneas. Una lectura del

proceso de secularización. Ed. RIALP. Madrid 2012, 26-45; Gerhard B.

WINKLER, Factores determinantes de la filosofía occidental moderna: del

Humanismo del Renacimiento mediterráneo a la Edad de la Razón y de la

secularización (1492-1789), en Filosofía cristiana en el pensamiento católico

de los siglos XIX y XX. Tomo I: Nuevos enfoques en el siglo XIX. Editada

por E.merich Coreth, Walter M. Neidl entre otros. Ed. Encuentro. Madrid

1993, 46-59. [Título original en alemán: Christliche Philosophie im

katholischen Denken des 19. und 20. Jahrhundert. I: Neue Ansätze im 19.

Jahrhundert. Ed. Styria-Verlag. Graz 1987].

Page 18: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

16

efectivamente, por esta época se abren dimensiones completamente

nuevas de magnitud todavía insospechable.

A raíz de los descubrimientos geográficos, de nuevas tierra y

de nuevos pueblos, se ensancha la concepción geográfica del universo,

y con esto se abren entonces nuevas posibilidades de intercambio

comercial y de relaciones políticas. En virtud de los inventos científicos

logrados mediante los experimentos y el uso de los métodos

matemáticos en las ciencias naturales se ponen los fundamentos del

desarrollo tecnológico y científico de la edad moderna. Y de este modo

se produce un cambio radical de la entera concepcion astronómica del

universo con el “giro copernicano”.9 Consecuencias de todo esto:

expulsado de la hasta el momento albergadora atmósfera de un mundo

a su alcance, cuyo centro fuera hasta ahora nuestra tierra, el hombre se

siente como lanzado a un universo de inconmensurable magnitud, en el

que pierde su ubicación, sus seguridades, el rumbo, toda orientación; se

autopercibe completamente desubicado y desorientado.

Por un lado, como una especie de vértigo, se apodera del

hombre el pensamiento acerca de la inmensidad, casi de la divinidad

de este mundo. Por el otro, el hombre, que ha perdido su clara y precisa

ubicación en el universo e igualmente su evidente y familiar albergue

en la fe común de la Iglesia, una a causa de la reforma luterana, busca

obtener, en ese entonces, solamente a partir de sí mismo, en la auto-

conciencia y auto-certeza del sujeto pensante, un terreno firme y un

seguro punto de partida para el conocimiento filosófico. De este modo

se disponen ya los planteamientos de la filosofía moderna. Sin

embargo, pasará todavía mucho tiempo, hasta que estas ideas se

formulen filosóficamente.

El renacimiento es una época de gestación y de búsqueda; es

un tiempo de audacia conquistadora, de vitalidad exhuberante, de

autoconfianza pionera, que casi desconoce barreras y obstáculos; son

años de inestabilidad de las doctrinas y de las formas de vida, de

9 Cf. Alberto ELENA, Nicolás Copérnico, Thomas Digges, Galileo Galilei:

Opúsculos sobre el movimiento de la tierra. Ed. Alianza, Madrid 1983.

Page 19: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

17

grandes contrastes entre conquistadores, soñadores, místicos y santos,

de investigación que sienta las bases de la era de las ciencias y de la

técnica; son tiempos propicios también para la especulación audaz,

frecuentemente imaginativa, fantasiosa y mística, para el heroísmo

ascético y misionero en el que el ímpetu creativo repercute en el terreno

de lo religioso. De la plenitud plurifacética de la vida espiritual del

renacimiento se describen y caracterizan brevemente tres dimensiones

que son filosóficamente importantes para el tiempo sucesivo: el

humanismo, la emergencia de la nueva ciencia de la naturaleza, la

reforma luterana.10

3.1 Humanismo

Con lo precedente se conecta un segundo elemento en la vida

espiritual de aquella época: el humanismo, fundado ya en el siglo XIV

por Francesco Petrarca (1304-374] y su amigo Giovanni Boccaccio

[1313-1365], desencadena el resurgimiento de la antigüedad clásica y

su renovación. Se redescubre de modo nuevo el valor y la belleza del

arte griego, romano, de la literatura, filosofía y religión; en dicha

cultura se cree encontrar la expresión pura de lo auténticamente

humano esperando obtener por su medio una renovación espiritual y

cultural de la propia época.

Nacido en Italia, desde aquí el humanismo comienza a

difundirse por el resto de Europa; considerado desde el punto de vista

filosófico, el humanismo representa la primera etapa del renacimiento

en su fase de preparación entre el 1350 y el 1450. Esto brota de un

antiguo rasgo fundamental de la historia espiritual del mundo

occidental. En cada época de crisis, de cambios radicales en lo

espiritual y cultural, en un tiempo en el que todo se cuestiona y se

buscan nuevos caminos, tiene lugar un retorno a los orígenes en la

antigüedad clásica, que se trata de recuperar, de renovar tornándola

fecunda para la propia época. Por este motivo, se puede hablar de un

10 Cf. Joseph MARECHAL, Precis d’histoire de la philosophie moderne. Tome

Premier: De la renaissance a Kant. Ed. Descleé de Brouwer. Paris 1951, 1-

55.

Page 20: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

18

humanismo ya en los primeros siglos del cristianismo durante los cuales

los padres de la Iglesia asumen la herencia espiritual de la filosofía

griega para elaborar una concepción cristiana de corte filosófico-

teológico del mundo y del hombre.

Un movimiento humanista similar se realiza al comienzo de la

imagen del mundo y del hombre, cristiana occidental de la edad media

durante el renacimiento carolingio. Y en su síntesis de antigüedad y

cristianismo, toda la edad media es consciente de sus orígenes

históricos. Así entendida, la edad media estuvo ligada a la tradición y

supo de la superioridad espiritual y cultural de la antigüedad, tratando

de interpretar sus logros también cristianamente en el horizonte de

comprensión a partir del mundo de la fe. Solo a la luz de este nexo con

la antigüedad se explica la revolución espiritual que inicia con la

difusión de la obras de Aristóteles alrededor del año 1200 y que

conduce a una reorientación en el campo del pensamiento filosófico y

teológico de aquellos años. Pero estos humanismos no logran la misma

intensidad, ni conducen a un giro profundo y general del sentimiento

de la vida y de la comprensión del mundo como sí lo logra aquel

movimiento que en sentido estricto históricamente hablando, se

denomina “Humanismo”, a saber, el resurgimiento o renacimiento de

la antigüedad en el tránsito de la edad media a la edad moderna. Sus

raíces históricas se remontan hasta el siglo XIV; recibe nuevos

impulsos tanto a través del contacto entre la iglesia de occidente y de la

iglesia de oriente en el concilio unionista de Ferrara y Florencia (1438)

como mediante la caída de Bizancio en el año 1453, cuya consecuencia

fue la emigración de muchos eruditos y gente culta griega hacia

occidente, sobre todo hacia Italia llevando consigo sus conocimientos

y también valiosas obras antiguas de los clásicos.

Destaca especialmente Jorge Temisto Pletón [1389-1464] que

vivía en Italia ya desde los tiempos del Concilio de Ferrara, y que

introdujo a la filosofía platónico-neoplatónica en la Academia de los

Medici en la ciudad de Florencia convirtiéndose en su principal

renovador. Junto a él se encuentra también Basilio Bessarión [1403-

1472], convertido a la iglesia latina, residió en Roma habiendo sido

Page 21: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

19

nombrado cardenal y ahí, como Pletón en Florencia, trabajo por la

renovación de un platonismo cristiano.

Motivado por Pletón, Marsilio Ficino [1433-1499] se dio a la

traducción del griego al latín de la obras de Platón, de Plotino y de

Porfirio; además de esto publicó una obra titulada “Theologia

platónica” [1474], dedicada a Lorenzo de Medici. Al mismo círculo

florentino perteneció Juan Pico de la Mirándola [1463-1494]

preocupado por una reconciliación de la filosofía platónica con la

filosofía aristotélica, como lo manifiesta su obra “De concordia Platonis

et Aristotelis”, y por una religión universal filosófica greco cristiana

basada particularmente sobre bases platónicas. Aquí resuena ya la idea

de una religión de la razón pura que reaparecerá con mayor fuerza en

la ilustración del siglo XVIII.

El primer alemán, familiarizado con el espíritu del humanismo

italiano y que lo introduce en su patria, es el cardenal Nicolás de Cusa

[1401-1464] quien, además de una actividad política y eclesiástica al

servicio de los esfuerzos unionistas entre oriente y occidente y de la

reforma de la iglesia, desarrolla en numerosos escritos un sistema

profundamente especulativo de corte filosófico-teológico, deudor de

la tradición mística del neoplatonismo.

Según Cusa, Dios es la “coincidentia oppositorum”, la original

“coimplicatio” de todo ser que experimenta su “explicatio” en el mundo

de las cosas finitas. El ser, existente de modo “absoluto” en Dios, se

“contrahe” en la finitud. Hay aquí atisbos que apuntan hacia el futuro.

Especialmente la idea de la unidad de los contrastes repercutirá gracias

a la mediación de la obra de Giordano Bruno y de Jakob Böhme en el

idealismo alemán, y será desarrollado especulativamente sobre todo por

Hegel. Más tarde será sobre todo Juan Reuchlin [1455-1522] que

llevara a Alemana el patrimonio platónico-humanista, pero combinado

con elementos místico-cabalísticos, a diferencia de lo que sucediera con

los humanistas italianos.

Estas expresiones del humanismo muestran constantemente

una renovación del pensamiento platónico-neoplatónico, más o menos

contrario a Aristóteles, o por lo menos a la escolástica aristotélica. A la

Page 22: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

20

vez tiene lugar una revitalización del pensamiento aristotélico,

especialmente por Pedro Pomponazzi [1462-1524] que, contra la

interpretación de la baja escolástica de su época se propone revalorizar

al auténtico Aristóteles recurriendo para ello a la interpretación de

Aristóteles hecha por Alejandro de Afrodisias y Averroes, niega la

inmortalidad del alma y, en el ámbito del humanismo

sorprendentemente, sostiene la doctrina de la doble verdad a favor de

la cual ya habían tomado partido los averroístas de los siglos trece y

catorce. En Alemania será Felipe Melanchthon [1497-1565], gran

erudito del humanismo, quien introduzca la filosofía aristotélica en la

teología protestante convirtiéndose así en el fundador de una

escolástica protestante.

Es indicativo de lo multifacético y contrastante de aquella

época que junto a lo anterior no solo hay anti-aristotélicos radicales

como Petrus Ramus [1515-1572] que declaran como mentira todo lo

dicho por Aristóteles y atacan violentamente la influencia de

Aristóteles, sino que resurgen también muchas otras doctrinas y

corrientes escolares de la antigüedad. Lorenzo Valla [1407-1457], por

ejemplo, desarrolla una ética epicúrea que, según él, es compatible con

la fe cristiana. Justus Lipsius [1547-1606] es un estoico declarado que

escribe, entre otras obras más, una “introducción a la filosofía estoica”.

Pedro Gassendi [1592-1655] recurre en la fundamentación filosófica de

la nueva ciencia de la naturaleza al atomismo de Demócrito.

Al círculo de los humanistas florentinos [Florencia] pertenece

igualmente Nicolás Machiavelli [1469-1527] cuya doctrina social y del

Estado abre derroteros completamente nuevos. Libre de ideales

religiosos y morales, sobre todo de todo tipo de formación cristiana

característica de los primeros humanistas, es él un pagano declarado y

político pragmático sin escrúpulos. Teóricamente considera él el ideal

del Estado en una República. Pero los hombres, tal como son en

realidad, con sus instintos y sus pasiones, exigen, según él, una

autoridad fuerte que sepa manejar al Estado como a una máquina.

De esto trata en su famosa obra “El Príncipe” [1513], dedicada

a Lorenzo de Medici, sentando las bases jurídicas y sociopolíticas de la

autoridad absolutista del renacimiento. Fue una obra de considerable

Page 23: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

21

influencia. Se expresa en esta obra por primera vez esa nueva visión y

valoración del hombre, de su individualidad y de su autonomía

ilimitada, que determinan de ahora en adelante la acción práctica y

política. Esta concepción, efectiva primeramente en la forma

absolutista de la autoridad, provocará la reacción contraria, desde el

momento en que entre a círculos más amplios y los ciudadanos

reclamen para sí la misma autonomía atribuida hasta el momento

solamente a los príncipes, cosa que sucederá en la revolución francesa.

De este modo las ideas de Machiavelli entran de lleno en el desarrollo

político de la edad moderna.

El humanismo de la edad moderna se propone también superar

la inerte y fosilizada escolástica decadente de la baja edad media.

Quiere revalorizar y desarrollar lo integral, concreto y vitalmente

humanum. Con este objetivo promueve el renacimiento de la

antigüedad, el retorno a la cultura antigua y la actualización de la

literatura grecolatina. En sus orígenes este humanismo nada tiene en

absoluto de movimiento naturalista o anticristiano, como lo sería, sin

embargo, posteriormente.

Al contrario, son los humanistas precisamente quienes se

oponen a las tendencias naturalistas y materialistas del averroísmo que

con las doctrinas de Aristóteles ingresaba de lleno en la Europa de

aquellos años, evocando la autoridad de los pensadores y de los poetas

de la antigüedad clásica como testigos de la unidad de la verdad

humana y cristiana. Son los humanistas igualmente quienes se levantan

en contra de la doctrina de la doble verdad difundida por los averroístas

latinos, sosteniendo decididamente que la verdad es esencialmente una,

convicción testimoniada por los pensadores de la antigüedad tanto

griega como latina así como por la Sagrada Escritura y los Padres de la

Iglesia. Con nuevo aprecio se vuelve aquí al mundo espiritual y cultural

de la antigüedad grecorromana. La formación clásica adquiere

rápidamente la preponderancia ante la fe cristiana de tal manera que el

movimiento humanista recae en muchas de sus figuras en el paganismo

antiguo.

La antigüedad clásica revive con su cultura y arte, su literatura

y filosofía, con sus logros sobresalientes en todos los ámbitos

Page 24: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

22

espirituales y culturales. Pero la cultura antigua es una cultura pagana,

precristiana. Ahí se cree descubrir los logros de lo naturalmente

humano distinguiéndolo respecto de la cultura de la edad media

definida cristiana y sobrenaturalmente. Aquí se manifiesta, pues, el

hombre con sus propias capacidades y potencialidades originarias, el

hombre en su mundo. Con el redescubrimiento de la antigüedad se

inaugura, de este modo, aquello que con Jacob Burckhardt puede

designarse como “Descubrimiento del mundo y del hombre”.

Mientras que en la edad media toda la cultura tenía una

impronta predominante sacra, y cada uno de los ámbitos vitales,

culturales asimismo el arte y la ciencia, estaban integrados en el

uniforme y cristiano orden universal estando a su servicio, con el

humanismo en cambio se descubre al hombre en su propio valor

natural, y los ámbitos intramundanos del ser y del valor en su propia

autonomía se presentan de modo nuevo ante la mirada. Debido a esto

se pone en marcha un movimiento el pensamiento que se desplaza de

la trascendencia a la inmanencia, del más allá hacia el más acá. Y con

esto se conecta, a pesar de la diversidad del origen histórico, el

humanismo con el nominalismo; ambos confluyen en la misma

dirección de un giro hacia el mundo. A pesar todo esto, existió a la vez

a través de los siglos un humanismo cristiano – Nicolás de Cusa y

Tomás Moro – cuya preocupación fue siempre la renovación y la

profundización de la formación auténticamente humana y cristiana, y

que se convirtió, por en cierto en su momento, en protagonista y

portador principal de los movimientos de una reforma dentro de la

iglesia de aquella época, un objetivo que, sin embargo,

desafortunadamente solo logró alcanzarse demasiado tarde y

únicamente en parte.

3.2 Nueva ciencia de la naturaleza

Además del retorno a los clásicos en el humanismo, otro

insólito suceso de amplias consecuencias en la época del renacimiento

y determinante en la historia de la filosofía moderna es el surgimiento

de las nuevas ciencias de la naturaleza. Sus orígenes se remontan

históricamente a siglos antes. Ya en el giro de la alta edad media al

pensamiento aristotélico abandonando el pensamiento platónico-

Page 25: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

23

agustiniano acusa una fuerte acentuación del elemento empírico. El

interés por las ciencias naturales despierta a mediados del siglo XII con

Roberto Grosseteste y alcanza su mejor expresión en las obras de

Alberto Magno pero sobre todo de Roger Bacon en el siglo XIII.

Una aguda y radical acentuación del elemento empírico y

naturalista se encuentra también en el averroísmo árabe, un elemento

fortalecido también por el nominalismo de la baja escolástica. Cuanto

más se pierde de vista la importancia de la transcendencia metafísica

tanto más la investigación científica centra su atención a la inmanencia

escudriñando a fondo el mundo de la experiencia inmediata. El

nominalismo fue corriente especialmente fuerte en Inglaterra, y el rasgo

empirista caracterizó por su parte a la universidad de París en su época.

Aunque el empuje en la investigación de las ciencias naturales

proviene del ámbito del pensamiento escolástico, gradualmente se abre,

sin embargo, una grieta siempre más profunda, entre los representantes

de la escolástica y los representantes del nuevo pensamiento de las

ciencias naturales. De un lado, los escolásticos mantienen férreamente

la concepción aristotélica de la naturaleza, sin abrirse a los nuevos

conocimientos científicos. Del otro, los científicos, investigadores de la

naturaleza, se despojan de lo anticuado y obsoleto hasta al punto de

excluir radicalmente todo lo demás. Así, la desafortunada grieta se hace

siempre más profunda, esa grieta entre conocimiento proveniente de las

ciencias naturales y filosofía escolástica, y a consecuencia de esto

también, además, entre el espíritu de la edad moderna y el pensamiento

cristiano heredado. Este contraste no se da todavía, ciertamente, en

quienes fundaran el pensamiento de las ciencias naturales de la edad

moderna.

Al genio extraordinario de Leonardo de Vinci [1452-1519] se

debe la primera elaboración y aplicación del método inductivo en la

investigación científica; fue él quien acentuó la importancia de las

matemáticas y del método experimental en sus investigaciones

científicas, sentado las bases de la mecánica y de las demás esferas de

la física clásica. Al nombre de Nicolás Copérnico [1473-1543] está

vinculado el cambio radical de la concepción astronómica del universo.

En su obra “De revolutionibus orbium cealestium” editada en el año

Page 26: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

24

1543 expone su nueva explicación del sistema astronómico; la tierra no

es el centro del universo; la tierra gira alrededor del sol; es un planeta

más. Se trata de una obra pionera en la historia de la astronomía; una

obra escrita a instancias de sus aminos y dedicada al Papa Pio III. En

esta obra Copérnico expuso su doctrina de manera sobria, objetiva, en

términos incluso de simple “hipótesis astronómica”. Sin embargo, fue

interpretada rápidamente por muchos polémicamente contra la doctrina

cristiana en términos de infinitud y divinidad del universo.

Las consecuencias de esta obra fueron importantes no solo en

el campo de las ciencias sino también desde el punto de vista

psicológico; en efecto, para el hombre de aquella época, a raíz de esta

nueva concepción del universo, la tierra era expulsada del centro del

universo siendo lanzada a los espacios infinitos, y, con esto el hombre

mismo se percataba con mayor agudeza de su propia pequeñez, de su

insignificancia e inestabilidad.

Los conocimientos de Nicolás Copérnico son profundizados

ulteriormente por Juan Kepler [1571-1630]; en él encuentran campo

favorable hasta el grado de emplear la teoría copernicana en la

elaboración de una explicación geométrica del universo. Como genio

matemático sobresaliente, Kepler corrige a Copérnico estableciendo la

forma elíptica de las orbitas planetarias, incursionando en la óptica, en

la acústica y en otros ámbitos de la física y de la astronomía. Transporta

el método matemático a las ciencias de la naturaleza: “Ubi materia ibi

geometría”. Kepler sin embargo no sostiene una concepción meramente

mecanicista de los acontecimientos naturales como lo harán más tarde

el racionalismo y el positivismo.

Igualmente importante es Galileo Galilei [1564-1642] que

descubre la ley de la gravedad y de la caída de los cuerpos, etc.

Debemos considerar el alcance del cambio espiritual concerniente a la

comprensión del mundo. El método experimental y matemático de las

ciencias naturales no solamente abrió el camino para una percepción

exacta de los acontecimientos físicos. Dio la posibilidad también para

entender el universo de un modo completamente distinto. Hasta ese

momento los cuerpos del firmamento habían sido explicado a la luz de

la doctrina aristotélica como una realidad diferente a la tierra y

Page 27: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

25

esencialmente superior a ella; la tierra estaba formada por los cuatro

elementos fundamentales, a saber, tierra, agua, aire y fuego; las

estrellas, constituidas por una especie de materia celestial denominada

“quinta esencia”, se encontraban ordenadas en esferas celestes estables

alrededor de la tierra.

Sin embargo, a partir de las concepciones astronómicas de la

edad moderna los descubrimientos científicos llevan a un conocimiento

de que también los cuerpos celestes están sometidos y obedecen, por

ende, a las mismas leyes que rigen a la tierra; y, que ésta, a su vez, es

igualmente un cuerpo más entre los innumerables cuerpos esparcidos

en el corazón del inmenso universo, inteligible y explicable mediante

las leyes de la matemática y de la física. Este conocimiento pionero fue

posible gracias al pensamiento meramente matemático y cuantitativo

de la época moderna, y que sustituye a la observación metafísica y

cualitativa de la realidad, expuesta en su momento por Aristóteles desde

el punto de vista de las formas esenciales, mediante un acotamiento a

la ley de la causalidad meramente física y por la investigación

empírico-deductiva distinta del pensamiento racional-deductivo,

excluyendo toda interpretación teleológica de los acontecimientos

intramundanos.

Este giro radical de la investigación de las ciencias naturales

condujo, finalmente, a una nueva orientación del trabajo intelectual y

científico, a una nueva comprensión de la vida y de la actividad

humana. Surge pronto la preocupación por superar espiritualmente esta

situación; y esta tarea por superar los retos de estos cambios será

realizada por el racionalismo y el empirismo. El uso de las modernas

ciencias de la naturaleza repercute entonces profundamente en el

pensamiento filosófico de la edad moderna.

La creación de la nueva ciencia de la naturaleza es una de las

mayores empresas del renacimiento y la de consecuencias sumamente

amplias; se elabora una concepción nueva del conocimiento; esta nueva

concepción de la ciencia plegada al respectivo método de observación

y experimento se convertirán en uno de los impulsos centrales del

mundo moderno, en uno de sus rasgos más sobresalientes y singulares;

ejercerán de aquí adelante sobre el filosofar, obligándolo a tomar en

Page 28: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

26

cuenta los problemas que le propone e inspirándole mucho de su actitud

metódica, sentará las bases para una técnica de eficacia considerable

que modificará el aspecto de la existencia humana y favorecerá

igualmente un modo nuevo de mirar el mundo. Nombres relevantes en

este campo son los astrónomos y físicos Nicolás Copérnico (1473-

1543), Tycho Brahe (146-1601), Juan Kepler (1571-1630), Galileo

Galilei (1564-1642), Isaac Newton, física moderna (1643-1727),

William Harvey, demostración de la circulación de la sangre, (1628-),

Peter Henlein, inventor del reloj de bolsillo.11

4. La “Reforma” [1517-2017]12

Esto desencadena un fenómeno ulterior en la vida espiritual que

tuvo como consecuencia una enorme conmoción del mundo occidental

por la ruptura de su unidad religiosa: la reforma. Ésta tiene, como es

sabido, una larga y trágica prehistoria, que se remonta hasta la tardía

edad media. La lucha entre imperio y pontificado en el conflicto de las

investiduras, el exilio de los papas en Aviñón, el cisma de occidente,

graves anomalías y corrupción en la vida eclesial y, sumado a todo ello,

como consecuencia del humanismo y del renacimiento, la invasión de

la mentalidad mundana en los ambientes eclesiásticos. Estas cosas eran,

hacía ya mucho tiempo, señales de alarma, de las que surgía

tempestuosamente la demanda de una reforma de la iglesia “en cabeza

y miembros”. Sobre este trasfondo descansa la insurrección religiosa

desencadenada, finalmente, por Martin Lutero (1483-1546).

El movimiento de la Reforma estaba sustentado por una

preocupación auténticamente cristiana y religiosa de retornar al

Evangelio puro a raíz de las desfiguraciones y distorsiones de lo

cristiano, aunque en el decurso ulterior semejante anhelo se vinculó,

desafortunadamente, con toda clase de intereses políticos. Desde el

punto de vista objetivo, a través de la Reforma la comprensión de lo

11 Cf. E. CORETH / H. SCHÖNDORF. La filosofía de los siglos XVII y XVIII,

Herder, Mexico 1987, 13-15. 12 Mariano FAZIO, Historia de las ideas contemporáneas. Una lectura del

proceso de secularización. Ed. RIALP. Madrid 2012, 45-55.

Page 29: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

27

cristiano se traslada de la tradición a la pura Palabra de la Escritura, de

la Iglesia visible a la justificación y bienaventuranza del individuo, del

magisterio eclesial a la fe y la comprensión de la fe del individuo

orientada solo por la Escritura, y por ende, de la doctrina de la fe dada

previamente de modo objetivo hacia la conciencia cristiana de la fe y

de la gracia, subjetivamente concebidas, del creyente singular. Aquí se

anuncia ya en lo religioso el giro hacia el sujeto, que destacará en el

pensamiento filosófico con mayor claridad y agudeza.

Desde el punto de vista de la historia de las ideas es, sin

embargo, el hecho de que la reforma del siglo XVI conduce a la ruptura

de la unidad espiritual y cultural del mundo occidental. Por esta razón,

dice Mariano Fazio que la reforma es un “hecho creador de época”13.

Se pierde el patrimonio común en la fe una de la Iglesia una.

Difícilmente podemos ponderar hoy la conmoción y la confusión

producidas por semejante acontecimiento. La vida del hombre

medieval, el tejido social y los acontecimientos de naturaleza social y

política estaban sólidamente arraigados como algo obvio e

incuestionable en el espacio de la fe común que permeaba

decisivamente todos los ámbitos vitales. Esta comunión se pierde a raíz

de la ruptura de la unidad religiosa y eclesial. De este modo el hombre

pierde, por consiguiente, también aquella incuestionable atmósfera

albergadora en la fe de la iglesia una; queda remitido a la propia

decisión, a la propia conciencia y, con ello, también a su propio

pensamiento crítico.

En estas circunstancias, aunque no en el inmediatamente en el

sentido de las tendencias reformadoras, se plantea con nueva

radicalidad la pregunta filosófica por la verdad. Volcado sobre sí

mismo y abandonado a sus propias fuerzas, el hombre pregunta, pero

ahora independientemente de la fe, de la iglesia y de la teología, por su

ubicación en el universo. Y plantea semejante pregunta ahora de modo

13 Mariano FAZIO, Historia de las ideas contemporáneas. Una lectura del

proceso de secularización. Ed. Rialp. Madrid 2012, 24.

Page 30: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

28

completamente diferente ha como lo hiciera el hombre de la edad

media: en cuanto sujeto autónomo ante el foro de la razón pura.

5. Martín Lutero [1483-1546]14

La conmemoración de los acontecimientos vinculada al

nombre de Martín Lutero [1483-1546] se designa brevemente como

Reforma. De ninguna otra persona de la baja edad media y del

renacimiento se ha escrito tanto como de Martín Lutero. Y sin embargo,

la imagen del reformador es, hoy como ayer, muy controvertida. Tanto

entre cristianos católicos romanos como entre cristianos evangélicos

hay cantidad de mitos, clichés y prejuicios en la percepción de la

persona de Lutero y en la valoración de su obra.

Mientras que muchos católicos vinculan al nombre de Lutero

ante todo la escisión de la iglesia occidental, muchos cristianos

luteranos en cambio ven en él a un héroe audaz de la fe y padre fundador

de su iglesia. Una gran oportunidad que ofrece la conmemoración de la

reforma en el año en curso estriba en el hecho de que brinda la ocasión

de acercarse a Lutero de modo nuevo y de comprenderle mejor en sus

14 Rainer SÖRGEL, Das Gottesbild als Chance zur Einheit. Versuch einer

ökumenischen Verständigung zwischen Martin Luther und Eugen Biser, en

Stimmen der Zeit 139 (2014), 612- 620; Wilhelm Ribhegge, Erasmus von

Rotterdam und Martin Luther. Anmerkungen zu einer spannungsreichen

Beziehung, en Stimmen der Zeit 139 (2014), 679; Werner Lóser, 2017 rückt

näher, en Stimmen der Zeit 141 (2016), 1-2; Bernward Schmidt, Reformation,

Revolution, Freiheit. Zu einem “missing link” in der Reformationsdeutung, en

Stimmen der Zeit 141 (2016), 3-14; Jens-Martin Kruse, “Lasst uns tilgen die

parteiischen Namen und uns Christen heissen”. Martin Luther heute begegnen

in ökumenischer Perspektive, en Stimmen der Zeit 141 (2016), 291-305;

Andreas R. Batlogg, 2017/1517: So viel Luther war nie, en Stimmen der

Zeit 142 (2017), 1-2; Christian M. Rutishauser, 500 Jahre Reformation, 50

Jahre Reformkonzil – und das Judentum, en Stimmen der Zeit 142 (2017), 3-

16; Jean-Blaise Fellay, Der Maler Raffael und der Reformator Luther. Eine

Gegenüberstellung, en Stimmen der Zeit 142 (2017), 17-29. Christoph

Böttingheimer, Wer legt die Schrift authentisch aus? Martin Luther im Streit

mit dem kirchlichen Lehramt, en Stimmen der Zeit 142 (2017), 219- 230.

Page 31: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

29

preocupaciones teológicas. Lutero no fue el monje solitario ni el erudito

de los libros. Estuvo rodeado de amigos y conocidos, a los cuales se

sumaba el círculo de la aristocracia emergente de formación científica

y humanista. La reforma tuvo su origen en la universidad, sentencia

Schilling.15

Viendo a Lutero y considerando el comienzo de la reforma hace

quinientos años no se trata, obviamente, de narrar otra historia, sino de

narrarla de otro modo, a saber, como una historia que actualmente ya

no nos separa, sino que nos congrega. Entre las tareas que aquí se

plantean se encuentra aquella de exponer razonablemente lo que Lutero

tiene que decir hoy a los cristianos tanto evangélicos como católicos y

de cuáles de sus preocupaciones teológicas surgen empujes para la fe,

la teología, la filosofía y la iglesia en la actualidad. En el marco

académico de este momento pongo de relieve este aspecto: Martín

Lutero como el que llama a una renovación espiritual en una época,

como la nuestra, del decrecimiento del ánimo.

5.1. Itinerario intelectual

Martín Lutero nació en Eisleben, Turingia, el 10 de noviembre

de 1483. En 1505 ingresó al convento agustino de Erfurt. Fue ordenado

presbítero en 1507. En el año 1510 viajó a Roma acompañando al

superior provincial de la orden. Dotado de aguda inteligencia y de

fuerte carácter. En 1511, un año después de su viaje a Roma, ocupó la

cátedra de Sagrada Escritura, de su mentor Juan de Staupitz, en la recién

fundada universidad de Wittenberg. En su vida personal tuvo como

preocupación central su salvación eterna. Sintiéndose incapaz de

realizar las obras meritorias para alcanzar la salvación, y considerando

en consecuencia imposible que el hombre pueda realizar acciones

válidas en vistas a su salvación, llega a la elaboración de su doctrina

sobre la justificación, que es el principio sustancial del luteranismo

teológico.

15 Cf. Heinz SCHILLING, Martin LUTHER. Rebell in einer Zeit des Umbruchs.

München 2013, 15.

Page 32: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

30

Lutero inició su reforma en el año 1517, cuando hizo públicas

95 tesis sobre las indulgencias de la iglesia romana. Tres años después,

en 1520, dará a conocer algunas de sus ideas a través de sus escritos.

En la obrita titulada “Sobre la libertad del cristiano” Lutero desarrolla

su concepción acerca de la justificación por la sola fe y las

consecuencias sobre la visión y organización de la Iglesia. Este escrito

ha de ser completado por otros dos, y tales son: “A la nobleza cristiana

de la nación alemana” y “La cautividad de Babilonia de la Iglesia”,

para entender el influjo que las ideas de Lutero tuvieron en los orígenes

del espíritu de la modernidad. De interés para la filosofía en el campo

de la educación el documento “A los consejeros de todas las ciudades

alemanas sobre el deber de fundar y sostener escuelas”, redactado

entre 1521 y 1522, en ámbito de la hermenéutica actual vale la pena

recordar la obra “Carta sobre el arte de traducir”, del año 1530.

5.2 Las raíces nominalistas del pensamiento de Martín

Lutero

La teología de Martín Lutero es fuente de inspiración para la

reflexión teológica desde el siglo XVI. Poca atención se presta en esto,

sin embargo, a sus raíces filosóficas, sobre todo nominalistas, de

considerable importancia para la comprensión de su pensamiento

teológico. Éste está influenciado por el nominalismo enseñado en

aquellos tiempos en algunas universidades. En la universidad de Erfurt,

Martín Lutero conoció tanto la filosofía de Aristóteles y los intentos de

los tomistas por conciliar a los filósofos griegos con la doctrina

cristiana como también el nominalismo, denominado con mayor

precisión “terminismo”, que, en la forma de Ockhamismo, enseñaban

sus célebres maestros Jodokus Trutfetter, fallecido en 1519, y

Bartolomé Arnoldi de Unsingen, fallecido en 1532, particularmente en

el ámbito de la teoría del conocimiento y de la teología. Esto repercute

en el protestantismo hasta ahora.

Poniendo atención en la compresión de “reformatio” según

Lutero, hay que destacar en primer lugar que Lutero no se consideró a

sí mismo ni como el fundador de una forma nueva del cristianismo ni

tampoco tuvo la pretensión de ser él mismo el reformador de la iglesia

Page 33: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

31

o de llevar a cabo la reforma de la iglesia. A diferencia de algunos

movimientos reformadores de la baja edad media Lutero no contaba

con un programa preciso y determinado cuyo propósito hubiese sido la

realización de determinadas exigencias externas. En la primera de las

95 tesis está claro que Lutero estaba convencido de la necesidad

profunda y vitalmente importante de la conversión y renovación en la

fe y en la iglesia. La tesis dice: puesto que Jesucristo, nuestro Señor y

maestro, dice, “hagan penitencia” (Mt 4,17), quiere que toda la vida del

cristiano sea penitencia”.

Lutero fue consciente que en cualquier época la iglesia necesita

de reforma. Pero esta reforma, según él, no era asunto de una persona

solamente, ni del papa ni tampoco de los cardenales. La reforma era

asunto de Dios solamente, él único que conoce los tiempos en los que

ha de realizarse dicha reforma. De acuerdo a estos auspicios, Lutero

hizo una serie de propuestas de reforma con la finalidad de remediar

algunos de las muchas anomalías y situaciones penosas de su época.

Pero no quiso con ello fundar una nueva iglesia, quiso la renovación de

la iglesia de Jesucristo según el espíritu del Evangelio.

Además Lutero no era de la opinión de que determinados

cambios en cuanto tales producirían la reforma de la iglesia. A pesar de

que la comprensión de la reforma expresada por Lutero no logró

imponerse como tal, hoy, sin embargo, utilizamos el concepto para

designar una época. Antes de las tesis sobre las indulgencias, Lutero

era prácticamente un desconocido.

Conclusión

La historia es como el notario de lo acontecido y de lo que

queda por venir. Entre estos dos extremos están ubicadas la persona y

la obra de Martín Lutero; es él una figura histórica entendiendo que lo

histórico es lo que tiene mucha vida detrás y sigue su andadura al

futuro, aunque por él y su obra, “la Reforma” se sufran no pocos

quebrantos en el presente; así vamos construyendo la historia, la que

nos gusta y la que nos desagrada. Para aprender y para seguir. Teniendo

en cuenta los errores cometidos y no tropezar con la misma piedra;

recogiendo lo ejemplar y positivo y tratando de transmitirlo mejorado

Page 34: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La “Reforma” y el giro antropocéntico Erasmo Bautista

32

a la generación siguiente, claramente conscientes de lo que tenemos a

la mano y de lo que deseamos. Luego quien no reacciona al cambio que

trae consigo la historia, corre riesgos graves; hay que ejercitar el

espíritu de reforma, diario, y esto reclama discernimiento, pues lo

decisivo no es cómo se encuentra uno, sino hacia dónde, es decir, en

qué dirección se mueve uno movido por la esperanza, que es la vida de

la vida por cuanto que no se trata de aguantar estoicamente a que pase

lo adverso, sino de responsabilizarse en la construcción de un mundo a

la altura de la dignidad y del destino del ser humano.

Page 35: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

América Latina como “el Otro” oprimido según Enrique Dussel

Peter Abuul Aondoaseer 1

Introducción

Tal es la preocupación, la filosofía que anima al hombre

occidental en su movimiento de mezclado, porque éste es

precisamente la razón de su infrahumanidad, de su

rebajamiento. En Asia y África este rebajamiento se castiga

con el aislamiento, aislamiento que en Latinoamérica es casi

total, pues si el asiático y el africano son menos hombres por

no asemejarse al accidental, el latinoamericano es algo peor,

el que siendo hombre, por su origen europeo u occidental, se

ha rebajado a subhombre2.

La noción de la alteridad está en el centro de la filosofía de

Emmanuel Levinas, forma parte de los problemas fundamentales de la

filosofía contemporánea y, sobre todo, de la Filosofía Latinoamericana

de la Liberación. Desde Parménides la ontología europea ha tratado de

rechazar el no ser, lo que existe es el ser y no cualquier ser, sino el ser

1 Alumno de tercer año de Bachillerato canónico en Filosofía, UPM. 2 Leopoldo ZEA, La filosofía Americana como filosofía sin más, siglo

veintiuno editores XXI, México 1989, 16.

Page 36: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

América Latina, el “Otro” oprimido Peter Abuul Aondoaseer

34

europeo. Todo lo que no hace parte de este ser, no tiene derecho de

existir, por lo tanto, hay que forzarlo a entrar en la totalidad del ser. Ser

hombre es ser europeo. ¿A poco la humanidad se limita al hombre

europeo?

Por no asemejarse al occidental, los africanos, los asiáticos y

los indios fueron considerados menos hombres que hay que dominar,

manipular y oprimir. Tanto su cultura como sus valores fueron

criticados y condenados por una voluntad de poder europea que no

admite la alteridad del otro, sino lo reduce en la totalidad. Así, el otro

pierde su identidad y se confunde en la totalidad europea.

Ahora bien, mirando la realidad de nuestro continente

latinoamericano que está hundido en la totalidad europea por su

mestizaje, un continente negado de sus valores culturales y de su

identidad, manipulado, dominado y oprimido por la voluntad de poder

europea, se cree importante analizar el concepto del otro desde la

perspectiva levinasiana y la Filosofía Latinoamericana de la Liberación

para ver de qué manera América Latina puede liberarse de esta

situación.

La investigación se lleva como tema, América Latina como “el

Otro” oprimido en Liberación Latinoamericana y Emmanuel Levinas

de Enrique Dussel y Daniel E. Guillot. No obstante, para poder llevar a

cabo este trabajo, resulta importante plantear unas preguntas: ¿quién es

el Otro? ¿De qué manera América Latina es “un Otro” oprimido según

Dussel? ¿Cuál puede ser la vía adecuada para la liberación de este

continente? He aquí, las preguntas que se tratarán de responder a lo

largo de este trabajo de investigación.

Además, la investigación será de tipo puramente documental,

puesto que se servirá de las obras de los autores que han escrito sobre

el tema. Pero la fuente principal de la investigación se centra en la obra

de Enrique Dussel y Daniel E. Guillot: Liberación Latinoamericana y

Emmanuel Levinas. Esta obra se divide en dos partes, la primera parte

está escrita por Dussel y la segunda por Guillot. Entonces, de acuerdo

con el tema de la investigación, el trabajo se centra sólo en la primera

parte de la obra.

Page 37: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

35

El trabajo está dividido en tres partes y cada una de ellas sigue

una metodología que nos ayudará a entrar en profundidad con la

investigación. En el primer apartado, se tratará de analizar el concepto

del “otro” desde la perspectiva levinasiana y de la Filosofía

Latinoamericana de la Liberación. Allí, se sigue el método doxográfico

para poder comprender la doctrina de los autores involucrados. El

segundo apartado trata sobre América Latina como “Otro” oprimido,

según Dussel. En este apartado se usa el método analítico. Por último,

el tercer apartado se basa sobre la vía de la liberación de América

Latina. Allí se servirá del método analítico-sintético que permitirá

analizar sintéticamente las propuestas de los filósofos latinoamericanos

de cara a la liberación de este continente.

1. La totalidad europea y “el Otro” desde la perspectiva

levinasiana

El concepto del «otro» tiene una gran importancia en la

filosofía contemporánea y sobre todo en el pensamiento levinasiano, ya

que a través de él, Levinas pone en cuestión la ontología europea que

pretende reducir el «otro» al «mismo», y propone un pensamiento

original, basado en la alteridad del «otro». Para Levinas, la filosofía que

no toma en cuenta la alteridad del «otro», sino la reduce a un «todo»,

es una filosofía de la dominación, por eso, el filósofo de la alteridad

decía:

La filosofía del poder, la ontología, como filosofía primera

que no cuestiona el Mismo, es una filosofía de la injusticia,

la ontología […] que subordina la relación con el Otro a la

relación con el ser general […] permanece en la obediencia

de lo anónimo y lleva, fatalmente, a otra potencia, a la

dominación imperialista, a la tiranía. […] Es un movimiento

en el Mismo antes que la obligación frente al Otro3.

3 Emmanuel LEVINAS, Totalidad e Infinito: Ensayo sobre la exterioridad,

Sígueme, Salamanca 2006, 70-71.

Page 38: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

América Latina, el “Otro” oprimido Peter Abuul Aondoaseer

36

Así, Levinas hizo una crítica a la filosofía europea (la filosofía

de la totalidad) que desde Parménides ha rechazado la existencia del

no ser, es decir, del «otro», para poder afirmar el ser, el «uno»; una

filosofía que se puede caracterizar por el sacrificio de la individualidad

en provecho de lo general, de lo otro en provecho del Uno4. Pues, por

su carácter totalitario, la filosofía occidental niega la transcendencia del

«otro», sobre el pretexto de querer situarlo y entenderlo a partir del

«mismo». Así, el «otro» se transforma en «un alter ego»5, negando

rotundamente su alteridad y su peculiaridad. Ahora bien, si el otro es

un alter ego según la ontología europea, ¿quién es el otro para Levinas?

La noción del «otro» constituye el eje del pensamiento

levinasiano, ya que el hombre, para Levinas, toma plenamente

conciencia de su identidad, como un ser responsable a partir del «otro».

La humanidad misma del hombre se realiza a partir de su relación con

el «otro». Por eso, Levinas considera el «otro» como el punto de partida

de la filosofía; ya no será cuestión de cogito ego sum, sino existo porque

el «otro» existe6. Es su presencia que me hace lo que soy, sin él, mi

existencia carecería de sentido. No obstante, si el filósofo judío

considera el «otro» como un elemento fundamental para la realización

del hombre, no lo asemeja a éste, sino lo concibe como una alteridad

total, por eso decía: «Lo absolutamente Otro, es el Otro»7. Así, el otro

(autrui) vuelve a un no yo, un desconocido, ajeno e insólito, puesto que

su realidad misma escapa a mi aprehensión8. Así que, para Levinas, el

«otro» no puede ser un alter ego, dado que es un ser distinto al yo, que

no se puede proyectar en la consciencia, como afirma Daniel Guillot en

su introducción de Totalidad e Infinito:

El Otro no es un yo calculable por analogía. […] El

Otro no es un yo situado en la otra orilla, sino que se

presenta siempre a distinto nivel. Es, por una parte, el

4 Daniel GUILLOT, Introducción en E. LEVINAS, Totalidad e Infinito, 39. 5 Cf. E. LEVINAS, Totalidad e Infinito, 67. 6 Ésta es la manera en que se saludan entre la gente de la etnia Tiv en Nigeria. 7 E. LEVINAS, Totalidad e Infinito, 63. 8 Ídem.

Page 39: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

37

huérfano, la viuda y el extranjero indefenso y

necesitado ante el cual soy rico, o es el Altísimo ante

quien me siento indigno. Mejor dicho, es las dos cosas

al mismo tiempo. Nunca hay similitud en la posición.

La relación no parte de sujeto hacia el Otro, decidida

desde mi libertad, sino que siempre viene inicialmente

hacia mí9.

Así, Levinas asemeja el «otro», por una parte, a un pobre,

inmigrante y extranjero que la sociedad rechaza; y por otra, a un rey

influente con quien la sociedad se inclina, debido a su papel en la

realización del mundo. No obstante, no se puede separar las dos

naturalezas en que se manifiesta el «otro», ya que las dos van siempre

juntas. El otro se presenta siempre como un necesitado y como un

altísimo al mismo tiempo, puesto que lleva en su «rostro» estas dos

formas. Pues, el «rostro» (le visage) es, para Levinas, la manera por

excelencia con que se presenta el «otro»10. El rostro es la identidad de

la persona y la forma en que se revela el «otro». Por eso, el filósofo

judío lo asemeja al término expresión del «otro»,11 pues es la manera

en que el «otro» comunica su presencia en el mundo.

Además, la epifanía del rostro es para el filósofo de Lituania,

lo que condiciona las relaciones entre los seres humanos, dado que, a

través de su rostro, el otro me llama a establecer una relación con él.

Por eso, Levinas decía: « la presentación del rostro me pone en relación

con el ser»12, ya que la vulnerabilidad y la miseria en que se revela el

rostro interpelan al yo a ser responsable de él13. Sin embargo, la

realidad de nuestra sociedad de hoy nos obliga a preguntarnos si

realmente somos capaces de dejarnos interpelar por la miseria de los

demás. ¿Qué actitud tiene la sociedad hacia los pobres, extranjeros e

inmigrantes? Muchas veces son considerados como personas

9 D. GUILLOT, Introducción en E. LEVINAS, Totalidad e Infinito, 37. 10 Cf. E. LEVINAS, Totalidad e Infinito, 74. 11 Ibid. 75. 12 Cf. E. LEVINAS, Totalidad e Infinito, 225. 13 Ibid. 213.

Page 40: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

América Latina, el “Otro” oprimido Peter Abuul Aondoaseer

38

peligrosas, donde se evitan toda relación, e incluso sus derechos en

tanto ser humano son violados. Así que, en vez de ayudarlos a salir de

su situación, se aprovechan de ellos. La fragilidad del «otro» se vuelve

en un motivo de opresión y de dominio, puesto que, su presencia

incomoda y amenaza la sociedad, como decía Levinas: « ante el Otro

el yo pierde su poder»14. Así pues, por ser distinto, el otro se vuelve un

enemigo que hay que dominar, aniquilar, explotar, oprimir y

marginalizar. Ya no hay lugar para la peculiaridad o alteridad, sino

todos los hombres deben ser iguales con respecto a la idea del hombre

que tiene los europeos. Así, el «otro» pierde su transcendencia y su

identidad, ya que, para poder salvarse el «otro» está obligado a

sacrificar su otredad y su individualidad.

2. América Latina como “el Otro” oprimido

Levinas habla siempre del otro como lo

absolutamente otro. Tiende entonces a la equivocidad. Por

otra parte, nunca ha pensado que el otro pudiera ser un indio,

un africano, un asiático. El otro para nosotros es América

Latina con respecto a la totalidad europea […]15

E. Dussel aterriza la filosofía de la alteridad de Levinas en un

pueblo bien preciso, ya no será cuestión de un otro anónimo, sino un

«otro» contextualizado y que tiene un nombre. El «otro» es para Dussel

el latinoamericano, el indio, con respecto a la totalidad europea, pero

no cualquier otro, sino un otro oprimido. Pero ¿en qué consiste esta

opresión? ¿Por qué América Latina es el «otro» oprimido para Dussel?

Desde el siglo XVI hasta el siglo xx, América latina

es un continente ontológicamente oprimido por una

“voluntad de poder” ejercida en la totalidad europea.

“voluntad de poder” es una potencia que no solamente

critica los valores establecidos, sino que propone los nuevos;

14 E. LEVINAS, Totalidad e Infinito, 213. 15 Id., Método para una filosofía de la liberación, Ediciones Sígueme,

Salamanca 1974, 176.

Page 41: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

39

propone los nuevos valores desde una parte dominante de la

bipolaridad en la totalidad. América Latina tuvo entonces

como ideal, ser europea16.

A través de esta cita, Dussel sitúa la causa de la opresión de

América Latina en la voluntad de poder de los europeos, puesto que

desde el primer encuentro de los europeos con el indígena, la intensión

era de dominarlo17. Ellos, al ver al indio se preguntaron si éste también

era el hombre18. Así que, por hecho de ser distinto a la idea que los

europeos tenían del hombre, la humanidad y la capacidad intelectiva

de los hombres originarios de estas tierras fueron puestas en duda. Ser

hombre es ser como el europeo. De allí empieza la opresión ontológica.

Si los indios no son inteligentes, entonces no tiene una cultura; así, hay

que criticar y condenar todos los valores establecidos para proponer

los nuevos. Ser hombre es tener la misma religión como los europeos,

así, hay que destruir todos sus dioses e imponer el cristianismo. Los

indios no tienen un sistema político ni son capaces de gobernar,

entonces, hay que gobernarlos. Así «América fue oprimida cultural,

política, económica [sexual] y religiosamente»19.

Ahora bien, negar la alteridad de una persona es negar su

individualidad y su peculiaridad como afirma Zea: «como no

aceptamos que existan hombres más hombres que otros. Un hombre es

igual a otro, insistimos por su peculiaridad, su individualidad»20 cada

persona tiene ciertas peculiaridades que la hacen distinta a otra, por

ende, será injusto reducir el hombre a una idea fija que uno tiene en la

mente. Por eso, Levinas criticaba la ontología europea como una

16 E. DUSSEL, Daniel E. GUILLOT, Liberación latinoamericana y Emmanuel

LEVINAS, Editorial Bonum, Buenos Aires 1975, 37. 17 E. DUSSEL, D. E. GUILLOT, Liberación latinoamericana y Emmanuel

Levinas, 38. 18 Ídem. 19 E. DUSSEL, D. E. GUILLOT, Liberación latinoamericana y Emmanuel

Levinas, 38. 20 L. ZEA, «Filosofar a la altura del hombre, Discrepar para comprender», en

Cuadernos Americanos vol.12 n.4 México (1993) 382.

Page 42: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

América Latina, el “Otro” oprimido Peter Abuul Aondoaseer

40

filosofía de la injusticia y de la dominación21. Pues, por no entrar en el

dinamismo ontológico europeo, los indios fueron dominados,

esclavizado, oprimidos y marginados. Frente a esta situación, ellos

tuvieron como ideal ser europeos, es decir, confundirse en la totalidad

europeo, lo que implica la pérdida de identidad y de sus valores

culturales. No obstante, ¿es posible afirmar la opresión del continente

latinoamericano en la actualidad? ¿De qué manera América Latina es

el «otro» oprimido en el tiempo presente?

La pregunta de saber si América Latina sigue siendo oprimida

en la actualidad, no tiene otra respuesta más que sí, por eso afirma

Dussel: «esta situación de ser “voluntad oprimida”, bajo la “voluntad

de poder” de la totalidad se sigue cumpliendo hoy»22. La opresión del

latinoamericano en la actualidad no se limita solamente con los

europeos, sino también los estadounidenses. Por su alteridad y su

diferencia, los latinoamericanos son discriminados y por eso, la

mayoría es rechazada el acceso en Estados Unidos. Los malos son los

inmigrantes latinoamericanos, entonces, hay que deportarlos y

construir un muro. Pues, ellos no pueden vivir con los hombres

superiores (superhombre) y autosuficientes.

En esta misma perspectiva, Dussel piensa que esta situación de

discriminación y de dominación no se limita en el continente

latinoamericano, sino se extiende hasta el Mundo árabe, el África

negra, la India, el Sudeste asiático y la China23. No obstante, el caso de

América Latina es peculiar, según el filósofo argentino, por eso afirma:

Mientras que los otros cuatro grupos […] tienen la

ventaja de poder relacionarse con las tres potencias

desarrolladas. Un árabe puede dirigirse a los EE. UU, a los

Europeos, o a los Rusos. Tienen cierta libertad de

21 E. LEVINAS, Totalidad e Infinito, 4. 22 E. DUSSEL, D. E. GUILLOT, Liberación latinoamericana y Emmanuel

Levinas, 38. 23 E. DUSSEL, D. E. GUILLOT, Liberación latinoamericana y Emmanuel

Levinas, 39.

Page 43: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

41

movimiento. Nosotros tenemos, en cambio, un destino muy

particularizado y que describe ya nuestra posición en la

historia universal24.

Ahora bien, Dussel parece tener una visión pesimista sobre el

destino de la América Latina. ¿Éste quiere decir que ya no hay

esperanza para nosotros? ¿Cómo se puede superar esta condición de

opresión, esta situación de dependencia y de dominio? ¿Cuál puede ser

la vía adecuada a seguir para la liberación de nuestro continente?

3. La vía de la liberación: el abandono de la totalidad

europea, la estima de sí y la solidaridad

¿Qué significa en realidad liberación? Significa que

el oprimido llegue a ser otro en un orden nuevo. Por lo tanto,

la liberación no se cumple dentro de la totalidad, como

retorno a la unidad, sino muy por el contrario: es el proceso

por la construcción de un nuevo ámbito, de una patria nueva.

De tal manera que no hay siguiera necesidad de matar al

opresor, porque el oprimido será de la conversión de aquél25.

A través de esta cita, el filósofo latinoamericano demuestra

claramente lo que implica la liberación. Liberarse no significa no

depender de nadie, ni matar al opresor, sino asumir su alteridad, no

quedarse en la totalidad, descubrir su novedad y ponerse a construirla.

Ya no es cuestión de confundirse en la totalidad europea, sino asumir

su identidad y su realidad como un ser culturalmente distinto. Por lo

tanto, valorizar lo que somos y la cultura de nuestros padres. Pero

¿cómo sería posible abandonar la totalidad en que nos identificamos,

aunque oprimidos?

Dussel reconoce esta dificultad, por eso decía: «Mientras el

oprimido acepta la opresión todo está en el orden. Pero cuando el que

24 Ídem. 25 E. DUSSEL, Introducción a una Filosofía de la Liberación Latinoamericana,

Editorial Extemporáneos, México 1977, 69.

Page 44: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

América Latina, el “Otro” oprimido Peter Abuul Aondoaseer

42

está injustamente tratado dice: «un momento, yo soy “Otro” […] ese es

al que hay que matar»26. El latinoamericano ha aceptado el sistema

opresor de los europeos por mucho tiempo, ahora es el momento de

salir del sistema para poder liberarse de la esclavitud de la voluntad de

poder y buscar su verdadera identidad. No obstante, la liberación

implica una determinación, u voluntad y convicción en las capacidades

que uno tiene. No hay que menospreciarse, sino verse capaz de ser

mejor que los europeos. De allí viene la estima de sí. Hay que aceptar

ser nuevo y distinto, como decía Leopoldo Zea:

Negación del pasado y, con el pasado, negación de

la cultura heredada de la Colonia, para ser otro distinto de

lo que se ha sido. A la emancipación política de las

metrópolis iberas ha de seguir la emancipación mental. Esto

es, el deshacerse de todo pasado, de los hábitos y costumbres

que alejaron a los latinoamericanos de la verdadera

humanidad, de la verdadera cultura, que les hicieron caer en

la infrahumanidad27.

La emancipación mental que propone Zea presenta una

condición sine que non para cualquier otro campo de la liberación que

se puede imaginar. Liberarse mentalmente implica valorizar lo suyo,

creer en sus capacidades, amar a su cultura y construir su identidad.

Éste es lo que significa ser hombre libre. Ya no será cuestión de

creernos europeos y despreciar a los indígenas, sino despojarnos de los

falsos hábitos y costumbres que hemos adquiridos de los europeos para

poder vestirnos de los valores de nuestros abuelos. Mestizo o indígena,

somos todos latinoamericanos, tenemos la misma realidad. No debe de

tener ni la diferencia ni la discriminación entre nosotros, sino la

aceptación y la valorización de todos. Es lo que Dussel llama el nuevo

proyecto de la liberación, que consiste en no matar al opresor, sino

enseñarlo como se debe vivir para poder llevarlo a la conversión.

26 E. DUSSEL, D. E. GUILLOT, Liberación latinoamericana y Emmanuel

Levinas, 43. 27 L. ZEA, La filosofía Americana como filosofía sin más, 17.

Page 45: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

43

Nosotros, los países oprimidos, no es imposible que

indiquemos un nuevo proyecto al propio opresor […]. Desde

ya este proyecto no incluye la muerte de los opresores, sino

que admite su conversión, porque al volver al sí mismo más

auténtico, pueden reintegrarse sin necesidad de

desaparecer28.

El proyecto de la no-violencia que propone Dussel es el de la

interpelación, en el cual el oprimido interpela al opresor a través de sus

valores. Interpelar al opresor implica mostrar que nadie es más hombre

que otro, valorizar nuestra cultura y no ceder a su manipulación. No

obstante, para poder llevar a cabo este proyecto, es menester tener la

solidaridad entre los países latinoamericanos, como señala Zea:

Ya no relaciones salvacionistas ni redentoristas de

unos hombres que deciden la salvación de otro […] Menos

aún la relación amo-esclavo, señor-siervo, colonizador-

colonizado […]. Será relación solidaria que no implica

subordinación de ninguna especie, que niega el que

determinados hombres o pueblos decidan sobre la barbarie

y la capacidad para la civilización de otros, o bien de la

aptitud para la libertad, la democracia y la justicia social de

otros hombres o pueblos29.

La solidaridad es para Zea un instrumento fundamental para

luchar contra la opresión, la dominación y la manipulación. Si los

países latinoamericanos se ponen solidarios entre ellos, los problemas

económicos serán vencidos. La solidaridad tiene un poder capaz de

destruir todas las opresiones que hemos sufrido desde la llegada de

Colón en estas tierras hasta hoy. Con este valor, se puede sobrepasar

los problemas de desempleos, de las injusticias, y de la corrupción. Así,

28 E. DUSSEL, D. E. GUILLOT, Liberación latinoamericana y Emmanuel

Levinas, 42. 29 L. ZEA, Discurso desde la marginación y la barbarie, Anthropos, Barcelona

1990, 251-252.

Page 46: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

América Latina, el “Otro” oprimido Peter Abuul Aondoaseer

44

nadie atravesará robar los bienes de nuestras patrias. Pues, todo el

mundo se encontrará obligado de respetar nuestra alteridad y nuestros

valores culturales.

Conclusión

Habiendo llagado a término este trabajo, resulta importante

recordar la preocupación principal que se trató de resolver sobre la

noción del “otro”. El objetivo mayor era de ver de qué manera América

Latina es el otro oprimido según Enrique Dussel. No obstante, para

poder realizar ésta reflexión, se han planteado tres preguntas que han

servido como hilo conductor de la investigación. Así, el trabajo fue

dividido en tres apartados, cada uno de ellos tratando de responder a

una pregunta precisa.

De cara a la primera pregunta que se basa sobre la totalidad

europea y la noción del “otro” desde la perspectiva levinasiana, se ha

visto que la filosofía europea ha despreciado el lugar del otro en la

historia de la misma, afirmando el yo como punto de partida de todo

quehacer filosófico. Levinas critica esta postura de egocentrismo, ya

que para él, “otro” es fundamental para la realización del yo y no se

puede negar, menospreciar ni reducir su alteridad en la totalidad del yo.

La segunda pregunta de la investigación se fundamenta sobre

América Latina como el “otro” oprimido según la concepción de

Dussel. Con respecto a esta pregunta, se ha encontrado que, para

Dussel, el “otro” del que habla Levinas es precisamente el

latinoamericano, el indio dominado y oprimido por la voluntad de

poder de los europeos, sobre que no permite la alteridad y la

peculiaridad del otro, sino lo reduce en el todo para poder manipularlo.

Por lo que concierne la tercera pregunta, tiene que ver con la

vía a seguir para la liberación del continente latinoamericano. Se ha

llegado a la conclusión que es menester abandonar la totalidad europea

y aceptar ser distinto, puesto que la liberación es imposible en un

sistema opresor e injusto. Además, hay que valorizar nuestra cultura,

ser orgulloso de nuestra identidad y tener estima de sí, confiar en

nuestras capacidades sabiendo que podemos sobrevivir sin los europeos

y también los estadounidenses. No obstante, la solidaridad es la única

Page 47: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

45

cosa que puede fortalecer nuestras convicciones. Tener una relación

solidaria entre los países latinoamericanos es lo que puede llevarnos a

borrar toda nuestra historia de dependencia y de opresión para poder

construir un continente nuevo y libre.

Page 48: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

El papel del filósofo en América Latina en Indología: una interpretación de la cultura Ibero-americana de José Vasconcelos

Jovani Fernández Puentes 1

Introducción

El siguiente trabajo pretende ser una revisión de la obra

Indología: una interpretación de la cultura Ibero-Americana con la

finalidad de mostrar cuáles son las características del filósofo y el papel

que juega en Iberoamérica. Se considera que, aun cuando el tema de la

obra no alude directamente al objetivo de este trabajo, se encuentran

claramente una serie de notas distintivas que permiten hacer una

caracterización del filósofo iberoamericano.

Parte de la elaboración filosófica que en nuestra tierra se ha ido

elaborando consiste en la búsqueda de la identidad de nuestros pueblos,

búsqueda que también se comparte con la vocación del filósofo y su

papel en el contexto iberoamericano. Es en este sentido, que este breve

trabajo busca responder a la pregunta ¿cuál es el papel del filósofo en

1 Alumno de tercer año de Bachillerato canónico en Filosofía, UPM.

Page 49: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

47

América Latina? Es decir, se busca responder a la finalidad que tiene la

presencia de los filósofos en nuestra sociedad.

Mediante la exploración de los conceptos que aquí se exponen,

se irá descubriendo que el papel del filósofo en cualquier sociedad tiene

un papel importantísimo. José Vasconcelos le muestra al filósofo

iberoamericano que su papel consiste en manifestar la síntesis que surge

del mestizaje de razas y pensamiento. Y el modo en que éste puede

exhibir que es posible pasar de la necesidad a cultivar el alma.

Esto se logrará mediante un análisis, primeramente del

contexto de la obra Indología, posteriormente del catálogo de capítulos

buscando rastrear lo concerniente a la figura del filósofo. Y finalmente,

se concluirá con la exposición del periodo de los filósofos que

corresponde a la última parte de dicha obra.

1. José Vasconcelos y el contexto de la obra Indología: una

interpretación de la cultura ibero-americana

José Vasconcelos nació un 27 de febrero de 1882 en la ciudad

de Oaxaca y murió un 30 de junio de 1959 en la Ciudad de México.

Miguel Romero Griego, en su colaboración en la obra El pensamiento

filosófico latinoamericano del Caribe y latino (1300-2000): historia,

corrientes, temas y filósofos, considera a Vasconcelos uno de los

filósofos mexicanos más fecundos e importantes en la historia, la

cultura y la educación de México. Romero Griego afirma que tuvo una

participación y producción teórica y práctica que representa uno de los

claros ejemplos de la mutua colaboración entre filosofía, cultura y

educación. De modo que dicha actividad filosófica logra encumbrarse

hasta mostrar qué caracteriza al filósofo latinoamericano. Participó en

la Revolución Mexicana promovida por Francisco I. Madero en contra

de Porfirio Díaz. Después de algunos años de exilio, fue nombrado

rector de la Universidad Nacional Autónoma de México del 9 de junio

Page 50: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Interpretación de la cultura Iberoamericana Jovani Fernández Puentes

48

1920 al 12 de octubre de 1921. Fue ministro de Educación entre 1921

y 19242.

Un episodio sumamente importante en la vida de Vasconcelos,

y que compete directamente a este trabajo, es la fundación del Ateneo

de la Juventud (28 de octubre de 1909), considerado el primer grupo de

pensadores que trató de luchar contra la xenofilia. Esta agrupación tenía

como objetivo revalorar la cultura propia, mexicana e Iberoamericana,

así como el humanismo, perspectiva filosófica contraria al positivismo

y el pragmatismo. El Ateneo, asegura Romero Griego, critica y rechaza

abiertamente el positivismo y la dictadura de Porfirio Díaz,

considerándosele así la primera agrupación cultural mexicana

independiente del siglo XX en México3.

Jorge Silva Martínez, en la obra antes mencionada, alude a los

filósofos conocidos como fundadores o patriarcas, entre los cuales están

Alejandro Deústua, Raimundo Farías Brito, Vaz Ferreira, Enrique

Molina, Antonio Caso, y, desde luego, José Vasconcelos. Todos ellos

concentrados entre 1910 – 1930, éstos, según Silva Martínez, buscan

superar los límites del positivismo. Y es en este sentido en que podemos

ubicar la obra Indología: una interpretación de la cultura Ibero-

Americana, que aparece en 1926, José Vasconcelos acuña la palabra

Indología con el cual expresa el conjunto de reflexiones que presenta

de la vida contemporánea, los orígenes y el futuro de la especie humana

que es conceptualizada por Vasconcelos como raza iberoamericana.

Esta obra está dividida en dos secciones; la primera parte es un

vasto prólogo autobiográfico, donde el autor narra sus viajes por

Europa, cómo fue invitado por la Universidad de Puerto Rico, y su

estadía en la isla en 1926. La segunda parte consta de siete capítulos

2 Cf. El pensamiento filosófico latinoamericano del Caribe y latino (1300-

2000): historia, corrientes, temas y filósofos, eds. Enrique Dussel- Eduardo

Mendieta-Carmen Bohórquez, Siglo XXI, México 2011, 832. 3 Cf. El pensamiento filosófico latinoamericano del Caribe y latino (1300-

2000): historia, corrientes, temas y filósofos, eds. Enrique Dussel- Eduardo

Mendieta-Carmen Bohórquez, Siglo XXI, México 2011, 833.

Page 51: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

49

que corresponden a las siete conferencias que impartió en diferentes

teatros de la isla, estas son: «El asunto», «La tierra», «El hombre», «El

pensamiento iberoamericano», «La educación pública», «El conflicto»

y «El ideal». En cada capítulo se rescata algún elemento de la cultura

de Iberoamérica y se desarrolla la tesis sobre el ser humano, sobre su

evolución, y sobre el destino de América4. En opinión de Guillermo

Hurtado Indología es una obra más comprensible, digerible y

convincente en comparación a La Raza cósmica5.

La raza cósmica, antecedente inmediato a Indología, se publicó

en 1925 tras la partida de Vasconcelos de la Secretaria de Educación

Pública, en julio de 1924. Es una obra dividida en dos partes; en su

segunda parte cuenta con un diario de viaje cuando Vasconcelos estuvo

en Sudamérica en 1922, la primera parte es, como lo nombra Claude

Fell en su obra José Vasconcelos: los Años del Águila, un ensayo-

introducción, donde manifiesta el programa espiritual destinado a

consolidar la cohesión de Iberoamérica. Se trata de un escrito, según

Fell, vehemente y lírico, que oscila entre el manifiesto y el conjuro.

Toda la obra gira alrededor de la noción confusa de raza que en mente

de Vasconcelos, asegura Fell, se trata de amalgamar los conceptos de

cultura, civilización, pueblo, costumbre, lengua. Todos estos

asimilados desde un sentido prospectivo6.

En 1921 Vasconcelos propone una nueva ley de los tres

estados; material o guerrero, intelectual o político, estético o espiritual.

Con esta propuesta, en oposición a los tres estados de Comte, el

Maestro de la Juventud infiere que la humanidad irá ascendiendo de ser

un individuo de lo contingente y lo necesario hasta ser un agente de lo

estético, que construya un mundo desinteresado. En La raza cósmica

define el gusto como el misterio que es razón secreta de toda estética;

en el análisis de la evolución de la humanidad, afirma Vasconcelos, que

4 Cf. Guillermo HURTADO, La Revolución creadora: Antonio Caso y José

Vasconcelos en la Revolución mexicana, UNAM, México 2016, 328. 5 Cf. Ídem. 6 Cf. Claude FELL, José Vasconcelos: los años del águila. UNAM. México

1989, 639.

Page 52: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Interpretación de la cultura Iberoamericana Jovani Fernández Puentes

50

el hombre va escapando de la necesidad para consagrarse al sentimiento

y la imaginación. No es otra cosa que el estado estético donde el gusto

deja de estar oprimido y puede ejercerse7.

Indología también sigue este esquema antipositivista,

proponiendo una serie de elementos que rescatan lo estético y la cultura

iberoamericana. En el siguiente apartado se pretende ir rastreando en

los primeros seis capítulos de esta obra la serie de elementos y

características que Vasconcelos infiere sobre el filósofo, y su papel en

Nuestra América. La novedad presente en esta obra, es que en el

séptimo capítulo «el ideal» desarrolla su tesis en contra de los tres

estados positivistas pero ahora con cinco periodos que representan los

periodos de la humanidad, donde el periodo filosófico será el que

corresponda al tipo de hombre que logra la liberación política y la

elevación espiritual y moral, tema que corresponde al cuarto apartado.

2. Revisión de la obra

Indología es una obra proyectiva, es decir, está escrita para

analizar el destino de la raza iberoamericana. Sin embargo, este

objetivo se lleva a cabo a través de una visión del pasado, el presente,

y el futuro de Iberoamérica sosteniendo, como afirma Hurtado, de

manera razonable una idea del mestizaje inspirada en un humanismo

universalista.

Como se ha mencionado, en cada capítulo se rescata algún

elemento de la cultura iberoamericana. Con el fin de lograr el objetivo

de este trabajo solo se hará mención de aquellos capítulos donde se

rescata alguna nota o actitud del filósofo en nuestra América. De

manera que se logre un inventario de características para el filosofar

iberoamericano desde el pensamiento de José Vasconcelos.

Se podría considerar que el primer capítulo es el del método, se

titula «El asunto». Vasconcelos afirma que esta obra no es una

narración de sucesos y aspectos de un pueblo, sino más bien es

7 Cf. Claude FELL, José Vasconcelos: los años del águila. UNAM. México

1989, 652.

Page 53: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

51

representar los rasgos formativos de una raza naciente. Asegura que

para cumplir con la misión de esta obra, se necesita de la geología,

arqueología, geografía, literatura e historia. Según la apreciación de

Vasconcelos, la labor del filósofo siempre resulta una aventura, ya que

se trata de un ámbito multidisciplinar, en dado caso la actividad del

filósofo es reducir a cause todos esos contenidos8.

Se puede afirmar que Vasconcelos considera que el filósofo

tiene dos tareas, a saber, abstraer y sintetizar. La abstracción se

considera que es la capacidad de hacer representaciones esquemáticas

de una realidad múltiple, a lo que Vasconcelos considera que lo único

que se logra con este método es destruir y empequeñecer la realidad.

En cambio la síntesis anima, ya que se trata de un modo de hacer

filosofía que va en aumento, suscita semejanzas, se afirma la

individualidad, pero también se ensancha el conjunto de la realidad. De

modo que la misión del filósofo es incorporar cada una de las cosas

particulares al todo9.

En el segundo capítulo «La tierra», se establece una descripción

donde se rescatan elementos arquitectónicos y de la biodiversidad de

Iberoamérica, concluyendo con una sección sobre la explotación de los

recursos. Vasconcelos, al final del capítulo, rescata en dos vertientes la

importancia de la contemplación. La primera consiste en contemplar a

América como el continente de la abundancia y la dicha fraternal, pero

convertido en el objeto de la explotación. En este sentido, el trabajo del

filósofo consiste en trabajar para resolver unidos el problema de la

repartición de los recursos naturales, solo así se puede llegar a la

segunda vertiente. Esta consiste en contemplar a la naturaleza como

aliada por medio de la cual descubrimos el misterio del mundo y

contemplamos en esta la exaltación de nuestra personalidad10.

8 Cf. José VASCONCELOS, Indología: una interpretación de la cultura Ibero-

Americana, Agencia mundial de librería, Barcelona 1926, 1-2. 9 Cf. José VASCONCELOS, Indología: una interpretación de la cultura Ibero-

Americana, Agencia mundial de librería, Barcelona 1926, 4-6. 10 Cf. Ibíd., 63.

Page 54: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Interpretación de la cultura Iberoamericana Jovani Fernández Puentes

52

En el tercer capítulo titulado «El hombre», se plantea el

problema del mestizaje donde las mezclas estarán determinadas por el

gusto, ya que el gusto es un criterio que abarca la totalidad, puesto que

cuando existe el gusto por alguien, no solo agrada el físico sino también

el carácter y los valores. En cuanto al tema que aquí concierne, es

importante rescatar la afirmación de que solo el hombre puede ser «el

elemento de transformación, de todas las uniformidades, de todos los

procesos»11. Vasconcelos, de este modo, plantea la importancia de

estudiar al hombre iberoamericano del pasado y del presente para tener

la capacidad de imaginar el hombre del futuro. En este sentido, el

filósofo es el principal agente que pone en marcha este estudio.

Lo que Vasconcelos proyecta con lo que se sabe en el presente

del hombre iberoamericano es que la mezcla armoniosa del que es

poseedor tendrá un resultado no del superhombre nietzschiano, sino del

Totinem, a saber, «el hombre todo, el hombre síntesis, el prototipo y

tipo final de la especie»12.

«El pensamiento iberoamericano» es el título del último

capítulo que en este apartado se revisará, que corresponde al IV capítulo

de la obra. La primera consideración que se requiere rescatar de este

capítulo, es cómo Vasconcelos defiende la existencia de la filosofía en

Iberoamérica, puesto que, según el autor, la filosofía no se limita a una

cultura sino a la universalidad de culturas. Considera también que el

objetivo de la filosofía es «discurrir sobre los problemas humanos, sin

preocuparse de las trabas y convenciones que todo organismo político

impone al espíritu»13. En este sentido, Vasconcelos considera que la

definición de filosofía no debe determinar su extensión, puesto que para

él la filosofía es una manera sincera de contemplar el universo.

Conviene por esto, afirma el autor, tener cuidado de nacionalismos

filosóficos que solo limitan la universalidad del filosofar.

11 Cf. José VASCONCELOS, Indología: una interpretación de la cultura Ibero-

Americana, Agencia mundial de librería, Barcelona 1926, 68. 12 Ibíd., 93. 13 Ibíd., 109.

Page 55: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

53

La segunda consideración que se quisiera rescatar es la

caracterización que se le brinda al pensamiento iberoamericano. Lo

primero que se afirma es que el parentesco del hombre con su medio se

manifiesta no solo en lo físico, sino también en lo espiritual14. De esto

que el alma necesita, según Vasconcelos, permearse de las auras

fundamentales para elevarse a lo universal, por eso toda cultura debe

ser particularista, pluralista y sintética. El autor afirma que el

pensamiento iberoamericano es aquel que no se conforma con

determinar solo algunas maneras espirituales exóticas y limitadas. Sino

aquella que comporta las tres características de la cultura ya

mencionadas. La siguiente parte de este capítulo será un recorrido

histórico y regional de la variedad de pensamientos en Iberoamérica

con el mestizaje como telón de fondo que justifica el carácter universal

y sintético de la filosofía.

Los dos siguientes capítulos se titulan «La educación» y «El

conflicto». En el primero se refiere ampliamente a la obra hecha por él

mismo en la Secretaría de educación. Y en el segundo, a la pugna entre

la raza sajónica y la hispánica.

3. «EL IDEAL» El periodo de los filósofos

En la introducción ya se había mencionado que La raza cósmica

es la obra que antecede a Indología. En la segunda parte de La Raza

cósmica se afirma que el desarrollo de la quinta raza, la mestiza, se

desarrolla entre los latinos, así mismo se encuentra Iberoamérica ante

el desarrollo de la ciencia, cuyo desarrollo puede beneficiar o perjudicar

a la humanidad. Según Vasconcelos, vivimos en la etapa intelectual, y

la siguiente es la etapa estética15.

En el último capítulo titulado «El ideal», Vasconcelos amplía

su idea de los tres estados, a saber, material, intelectual y estético y los

14 Cf. José VASCONCELOS, Indología: una interpretación de la cultura Ibero-

Americana, Agencia mundial de librería, Barcelona 1926, 114 15 Cf. José VASCONCELOS, La raza cósmica: Misión de la raza

iberoamericana. Notas de viaje a la América del sur, Espasa Calpe, Buenos

Aires 1948, 22-23.

Page 56: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Interpretación de la cultura Iberoamericana Jovani Fernández Puentes

54

convierte en cinco. Los periodos o estados ahora son: el del soldado, el

del abogado, el del economista, el del ingeniero y el del filósofo.

Vasconcelos, así como en el primer capítulo de Indología, hace

referencia a la importancia de la síntesis, de modo que a través de todo

lo que se ha afirmado se dé unidad y movimiento, propósito y acción.

En ese sentido, los cinco periodos que se exponen no se superan, sino

más bien en teoría cada periodo va condenando, va matando el principio

que sirve de base al periodo precedente; pero en realidad las normas de

cada época se mezclan y perduran en equilibrios confusos que son la

principal causa de la lentitud de nuestro progreso16.

El primer periodo se refiere al soldado, puesto que según el

autor se resalta a los intereses materiales y a las confrontaciones que

estos produjo; el segundo periodo se refiere al abogado puesto que en

este el hombre se somete al sabio, es decir, a aquel que legisla. En el

periodo del economista se ve patente que el capital ejerce un poderío

más relevante sobre el hombre que legisla de modo que el capital es el

nuevo ídolo de esta etapa. Y el periodo del ingeniero pone de relevancia

la explotación colectiva y el poder ejercido sobre las masas.

Antes de continuar, es interesante hacer la observación entre el

primer periodo y el periodo que antecede al filosófico, a saber, el del

soldado y el del ingeniero. En el primero se pone énfasis en la

repartición igualitaria de los bienes materiales y en el segundo en la

producción en beneficio de todas las personas17. Como se sabe, son

objetivos no superados.

En el quinto periodo, la dirección de los asuntos concernientes

a las personas pasará a manos de los educadores y filósofos.

Presumiblemente estarán resueltos los problemas de los alimentos y los

bienes materiales, de las energías colectivas y de la religión. En la era

16 J. VASCONCELOS, Indología: una interpretación de la cultura Ibero-

Americana, 212. 17 Cf. Raúl TREJO VILLALOBOS, Filosofía y vida: el itinerario filosófico de José

Vasconcelos, Tesis doctoral no publicada, Universidad de Salamanca,

Salamanca 2010, 256-257.

Page 57: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

55

en que gobiernen los filósofos, según Vasconcelos, no dominarán ni los

especialistas ni los técnicos. La principal tarea será educar el alma para

trascender los fines de la materia. Supone que en el periodo de los

filósofos estará superado el problema de las necesidades básicas para

que el hombre se consagre a la cultura.

El Maestro de la Juventud, después de exponer los cinco

periodos, vuelve a rescatar la teoría de los tres estados de manera que

se puede afirmar que los cinco periodos sirven para vencer el transcurso

de los estados primitivos, material e intelectual, para ascender al estado

estético, es decir, «las normas del espíritu serán las normas de la vida

privada y el derecho público»18.

El periodo de los filósofos, sin duda, se trata del florecimiento

de una nueva cultura, pero cabe preguntar, ¿se trata de una utopía? A lo

se pudiera responder, «¿se realizará sobre la tierra la República de

Platón, la Ciudad de Dios de San Agustín? Muy pobre ha de ser un

porvenir que no logre cumplirlas»19.

Conclusión

Al principio se planteó la finalidad de mostrar las

características y el papel del filósofo en Iberoamérica, haciendo un

rastreo de estas en los capítulos de la obra Indología.

El punto de partida fue mostrar dónde está ubicada la obra que

aquí se revisa, se ha podido descubrir que Indología es una obra que

busca colocarse en oposición al positivismo imperante de su contexto.

Se ha podido constatar, después de revisar la obra, que existe un

constante énfasis por rescatar el concepto de cultura con la finalidad de

mostrarse antipositivista.

En el segundo apartado se hizo una exploración de los

conceptos de la obra que aluden al filósofo y su papel en Iberoamérica.

Se ha podido verificar que el filósofo en Iberoamérica es aquel capaz

18 J. VASCONCELOS, Indología: una interpretación de la cultura Ibero-

Americana, 219. 19 Ídem.

Page 58: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Interpretación de la cultura Iberoamericana Jovani Fernández Puentes

56

de concretar una síntesis del pensamiento, en virtud de su mestizaje. La

segunda característica que se puede mencionar es aquella que alude a

la contemplación, el filósofo es el hombre que contempla a América

descubriendo su riqueza, su diversidad. Esta contemplación va

acompañada con un tipo de praxis filosófica, puesto que de la

contemplación se debe pasar a la distribución equitativa de las riquezas

naturales. La tercera característica se refiere al estudio del hombre. En

Iberoamérica es necesario estudiar al hombre, pero el filósofo tiene la

tarea de mostrar que este es ante todo el elemento de transformación de

todos los procesos en los que se encuentra Nuestra América.

En el último apartado, se buscó mostrar que el estado estético

que se opone al estado positivo de Comte solo se puede lograr mediante

el periodo de los filósofos puesto que, en todo momento se busca

trascender la necesidad para que el hombre se dedique a cultivar el

alma.

En este orden de ideas, se puede constatar que este trabajo no

ha agotado conceptos tan importantes como cultura y estado estético,

conceptos que se encuentran íntimamente ligados al pensamiento de

José Vasconcelos. Para finalizar, dichos conceptos se encuentran

ligados a la noción del filósofo que aquí se revisó, por este motivo

cabría responder, para un ulterior trabajo, a las preguntas ¿qué relación

se encuentra entre el concepto de cultura y praxis filosófica en el

pensamiento de Vasconcelos? ¿De qué modo rescata el concepto de

estado estético y qué influencia tiene el filósofo para este caso?

Page 59: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

El Logos joánico y la sabiduría divina en la tradición hebrea

Rubén Betancourt García 1

Introducción

El Logos era entendido en el pensamiento griego de muy

diversas maneras. En este artículo se revisará una acepción que permite

conectar la connotación que recibía en el pensamiento helénico con un

equivalente que se halla en el pensamiento hebreo, especialmente en

los escritos sapienciales; nos referimos a la noción de sabiduría. Según

las palabras introductorias al tema del libro de Heráclito, el Logos es

algo que uno oye; y de acuerdo con el fragmento 50, cuando el hombre

escucha al Logos adquiere la sabiduría para confesar que todas las cosas

son uno, haciéndose capaz de descubrir en la aparente pluralidad de las

cosas, al Ser único en perpetuo movimiento2.

En tres momentos se expone el contenido: Primero se hace

alusión a lo que entiende Heráclito por Logos desde el punto de vista

de los griegos; en un segundo momento, se presentan las implicaciones

doctrinales de san Juan en su Evangelio; posteriormente, realizamos

una analogía entre el Logos como Palabra en san Juan y como Sabiduría

1 Profesor de Tiempo completo de la Facultad de Filosofía, UPM. 2 HERÁCLITO, Fragmento 639, en Los Filósofos presocráticos I,

introducciones, traducciones y notas de Conrado Eggers Lan y Victoria E.

Juliá, Gredos 1981, 352.

Page 60: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Logos joanico y sabiduria divina Rubén Betancourt García

58

en la tradición hebrea. Finalmente, el artículo concluye evidenciando la

originalidad del Logos joánico.

1. El Logos en los escritos sapienciales

Según dice el fragmento 41 de Heráclito que no hay más

sabiduría que comprender el pensamiento que lo gobierna todo, el

Logos que dirige el universo entero3. El Logos se manifiesta al

pensamiento, y puesto que esta facultad es común a todos los hombres,

todos pueden conocerse a sí mismos y pensar con sabiduría en tanto

que piensen al Logos. Por su parte, para los estoicos la sabiduría del

hombre es una participación de la sabiduría del Logos (Logos

spermatikos), de quien proceden los logoi spermatikoi o semillas

racionales de los hombres. Así, el hombre que vive conforme al Logos

se conduce según el orden y la armonía establecidos en el cosmos por

la Razón universal que gobierna el acontecer de todas las cosas4.

Filón de Alejandría recogió el concepto Logos de los filósofos

griegos, atribuyéndole nociones de su fe, por lo cual lo identificó con

la Sabiduría divina, estableciendo un enlace entre el término bíblico

judaico y el filosófico helenístico, abriendo así el diálogo con la

filosofía griega. Debido a la visión panteísta tanto de Heráclito como

de los estoicos, éstos no consideran que el Logos, a quien identifican

con lo divino y con la misma sabiduría, sea un ser espiritual, personal

y trascendente, sino sólo una ley universal o principio activo inmanente

que rige el cosmos. No obstante que es divino, el Logos se encuentra

ínsito en la naturaleza de las cosas; ello en consecuencia con el

naturalismo propio de los griegos5.

En el judaísmo, por su parte, Dios es entendido como un ser

personal con quien el hombre puede comunicarse, además de

trascendente, por lo que se encuentra más allá de los límites de este

mundo material. De la misma manera que Heráclito y los estoicos,

3 HERÁCLITO, Fragmento 640. 4 Cf. P. BLANCO, Joseph Ratzinger: Razón y Cristianismo, 160. 5 Cf. W. PANNENBERG, Una historia de la filosofía desde la idea de Dios.

Teología y filosofía, Sígueme, Salamanca 2001, 107.

Page 61: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

59

aunque considerando las diferencias citadas anteriormente en cuanto a

su forma de concebir la divinidad con respecto al judaísmo, el

Evangelio según san Juan identifica el Logos con Dios6, según podemos

apreciar las palabras iniciales del prólogo, las cuales dicen: «En el

principio existía el Logos y el Logos estaba con Dios, y el Logos era

Dios» (Jn 1,1).

En este punto es necesario plantearse que el Logos que san Juan

utiliza tiene un origen en parte filosófico, tomado de los pensadores

helénicos como el mismo Heráclito o del estoicismo; y también un

origen apegado a la tradición judía, y por tanto, pudiéramos encontrar

en el filósofo Filón de Alejandría un verdadero antecedente de su

doctrina. Quizá también podamos preguntarnos si el concepto joánico

Logos no tiene nada que ver con la tradición filosófica griega, y si más

bien podemos encontrar sus antecedentes en los escritos sapienciales

del Antiguo Testamento, o quizás, aunque muy difícilmente, en una

tradición muy distinta como el gnosticismo7.

2. El Logos joánico

El concepto Logos ejerció desde la temprana filosofía griega

una gran influencia en la historia del pensamiento, cabría preguntarse

si éste es el origen del Logos joánico. La respuesta simplemente es

negativa, puesto que para los griegos, sobre todo para Heráclito y los

estoicos, el Logos es entendido como la razón que gobierna el mundo.

Es un principio que sostiene el mundo y es la causa de su armonía. Por

el contrario, el mundo del que habla san Juan en el prólogo de su

evangelio se presenta adverso al Logos de los griegos. Asimismo, el

Logos de estos filósofos tiene connotaciones de tipo moral, pues se

entiende como la ley que dirige al hombre hacia un comportamiento

6 Cf. F. OCARIZ et al., El misterio de Jesucristo, Eunsa, Navarra 2010, 110-

111. 7 Cf. N. FISCHER, La pregunta filosófica por Dios, Edicep, Valencia 2000, 69.

Page 62: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Logos joanico y sabiduria divina Rubén Betancourt García

60

razonable. A diferencia de lo anterior, el Logos de san Juan no se

identifica en ningún momento con la ley, sino que es superior a ella8.

La doctrina de Filón no atribuye al Logos la naturaleza de Dios,

pues si bien, el Logos es un ser personal y divino, no es Dios, sino un

mensajero suyo creado por Él, y por tanto inferior y subordinado a Dios

mismo, tal y como pensarán algunas sectas gnósticas, herederas del

platonismo filoniano. En todo caso, la pretensión fundamental de Filón

es utilizar al Logos como una forma de salvar el abismo que supone la

pura espiritualidad de Dios y la absoluta trascendencia de Dios con

respecto a la materialidad del mundo. Filón ve en el Logos una potencia

mediadora entre Dios y la creación, un artífice del mundo, entendido

como un demiurgo o una causa instrumental y ejemplar entre Dios y el

mundo material, según Schnackenburg9. En esta concepción se aprecia

la influencia directa del Timeo de Platón y su concepto de un demiurgo

como mediador entre el mundo inteligible y el mundo sensible.

El Logos de san Juan está muy lejos de identificarse con un

Demiurgo. El Logos no es una emanación de Dios que a través de

múltiples emanaciones sucesivas dé origen al mundo. Ni es tampoco

una forma de expresar la potencia creadora de Dios, sino que «se trata

de una persona plenamente divina, por lo que no puede ubicársele en

una posición intermedia entre Dios y el mundo»10. Otra diferencia

fundamental entre el Logos de Filón con respecto al de san Juan se da

en la forma de entender sus funciones salvíficas. Para Filón el Logos

penetra en el alma del sabio, sirviéndole como un maestro de unión con

Dios. En cambio, el Logos joánico es el Salvador mismo venido al

mundo, al cual hay que adherirse con fe para obtener la salvación11.

Debido a que Filón dio el mismo paso que san Juan, la

identificación del Logos con la Sabiduría divina, algunos pensadores

8 Cf. R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según Juan I, Herder, Barcelona

1980, 297. 9 Cf. Ibidem, 256-257. 10 R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según Juan I, 260. 11 Cf. Ibidem, 301-302.

Page 63: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

61

han tendido a ubicar al concepto joánico Logos muy próximo al

concepto filoniano. Sin embargo, a esta teoría se oponen las

considerables diferencias teológicas entre el Logos crístico de san Juan

y el de Filón12, las cuales nos hacen obtener como conclusión que el

Logos de Filón no pudo haber influido directamente en el evangelista

para la creación de su himno al Logos. El carácter personal del Logos

ya comentado con anterioridad, marca la separación con respecto a la

especulación judeo-helenística sobre la Sabiduría y sobre todo con

respecto a las creencias gnósticas de las potencias creadoras que

emanan de Dios13.

De acuerdo con el gnosticismo, Dios no es el creador del

mundo material, sino el demiurgo, el cual procede de una serie de

emanaciones de seres intermedios entre Dios y él, llamados eones, que

estaban ordenados jerárquicamente hasta llegar al demiurgo como el

eón más imperfecto, el cual aparece ante el mundo sensible como el

único Dios, siendo en realidad un ser imperfecto y malvado. Por esta

razón, la materia era vista como principio del mal, y es aquí donde entra

en juego la persona de Cristo, eón divino que se contrapone al demiurgo

comunicando a sus discípulos la forma de acceder a la gnosis para

alcanzar la salvación. Dado que ni la filosofía griega ni el Logos

filoniano explican el origen del Logos joánico, porque a pesar de las

similitudes semánticas las diferencias ontológicas que hay entre estas

concepciones son radicales, resta analizar si éste puede explicarse por

la tradición bíblica14.

3. El Logos como Palabra y Sabiduría en la tradición hebrea

En el Antiguo Testamento encontramos reflexiones sobre la «la

Palabra de Dios», que parten desde la creación y desembocan en la

literatura sapiencial15. La Palabra de Dios es entendida como una

potencia creadora y conservadora del mundo: «Dios de los Padres,

12 Cf. Ibidem, 300-301. 13 Cf. R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según Juan I, 254. 14 Cf. F. OCARIZ et al., El misterio de Jesucristo, 111. 15 Cf. R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según Juan I, 297-298.

Page 64: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Logos joanico y sabiduria divina Rubén Betancourt García

62

Señor de la misericordia, que hiciste el universo con tu palabra» (Sb

9,1). Pero no sólo eso, sino que también es capaz de dar la vida y la

salvación a los hombres: «Ni los curó hierba ni emplasto alguno, sino

tu palabra, Señor, que todo lo sana» (Sb 16,12s).

La Palabra de Dios en la creación, la pronunciada por boca de

los profetas y la expresada en la ley, cumple varias funciones que se

pueden asimilar a lo que se expresa acerca del Logos joánico16, pero no

por ello podemos concluir que la doctrina de san Juan sobre el Logos

deriva exclusivamente de aquélla, aunque sí es posible afirmar que

influyó de manera mediata a través de los escritos sapienciales17. En el

libro de la Sabiduría, la Palabra de Dios y la Sabiduría muestran una

gran afinidad, manifestada en la siguiente expresión: «Dios de los

Padres, Señor de la misericordia, que hiciste el universo con tu palabra,

y con tu Sabiduría formaste al hombre para que dominase sobre los

seres por ti creados» (Sb 9,1s).

Al iniciar el prólogo de su evangelio con la frase «En archē ēn

ho logos», san Juan pretende hacer una referencia al origen de todas las

cosas, a la obra creadora de Dios: «En el principio creó Dios los cielos

y la tierra» (Gn 1,1). Pero más que referirse propiamente al momento

justo de la creación, san Juan designa un instante previo, esto es, en un

sentido más cualitativo que temporal, la esfera de la eternidad en que

habita Dios18. No es pues la intención de san Juan señalar el comienzo

de la existencia del mundo creado, sino expresar el carácter eterno del

Logos19.

Así pues, san Juan afirma la existencia de una realidad previa

al «principio» del que habla el Génesis. Esta realidad es la Palabra

divina por la cual se hizo todo cuanto existe: «Todo se hizo por ella y

sin ella no se hizo nada de cuanto existe» (Jn 1,3). Esta Palabra es más

16 Cf. V. BALAGUER, Jesucristo, En: C. IZQUIERDO (dir), Diccionario de

Teología, Eunsa, Pamplona 2014, 522-523. 17 Cf. R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según Juan I, 298. 18 Cf. R. BROWN, El Evangelio según Juan, Cristiandad, Madrid 1979, 174. 19 Cf. R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según Juan I, 253.

Page 65: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

63

que el mero hablar de Dios en el momento de la creación; se trata más

bien de una Palabra personal, que en una determinada hora de la

historia, se encarnó en Jesucristo, pero cuya existencia se remonta más

allá del tiempo20. Estas ideas de San Juan, tienen un fuerte paralelismo

con lo expresado acerca de la Sabiduría en el libro de los Proverbios:

«Desde la eternidad fui fundada, desde el principio, antes que la tierra»

(Pr 8,23); «yo estaba allí, como arquitecto, y era yo todos los días su

delicia jugando en su presencia en todo tiempo» (Pr 8,30).

De acuerdo con los Proverbios, la Sabiduría precedió a la

creación y estaba con Dios cuando éste llevó a cabo su obra creadora,

hasta llevarla a su plenitud con la existencia de los hombres: «y mis

delicias están con los hijos de los hombres» (8,31). De esta manera, en

concordancia con la línea que siguen los Proverbios, San Juan ubica la

existencia del Logos antes de la creación. Se trata de un Logos que no

fue creado, sino que ya «estaba en el principio con Dios» (Jn 1,2),

porque era Dios mismo. El significado de la palabra griega Logos toma

dos sentidos, a saber, el primero como «proyecto» (hokmah, sophia) en

cuanto el designio de Dios en la creación, y el segundo como «palabra»

(dabar) en cuanto formula el proyecto y lo lleva a término. Así pues,

en el principio ya existía con Dios su Palabra, como proyecto formulado

que irá realizándose en su obra creadora en el transcurso de los siglos21.

La Sabiduría es descrita como luz y «reflejo de la luz eterna»

(Sab 7,26). El escritor sagrado de este libro señala que la Sabiduría es

preferible a la salud y la hermosura «porque la claridad que de ella nace

no conoce la noche» (Sab 7,10). De manera similar, podemos ver como

san Juan continúa su prólogo diciendo que en el Logos «estaba la vida

y la vida era la luz de los hombres» (Jn 1,4). Así, la Sabiduría y el Logos

son equiparables porque ambos proporcionan luz a los hombres; pero

san Juan reconoce que este Logos no sólo proporciona luz, sino también

vida divina. En plena concordancia con el versículo 4 del capítulo 1 del

evangelio de san Juan, tenemos la siguiente expresión: «La Palabra era

20 Cf. Ibidem. 21 Cf. J. MATEOS – J. BARRETO, El Evangelio de Juan, Cristiandad, Madrid

1979, 53-54.

Page 66: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Logos joanico y sabiduria divina Rubén Betancourt García

64

la luz verdadera que ilumina a todo hombre que viene a este mundo»

(Jn 1,9). Con esta expresión, san Juan transfiere al Logos la función que

tenía la Sabiduría como comunicadora de luz, que guía al hombre hacia

el conocimiento y a la elección del bien22.

Otra idea atribuida a la Sabiduría que san Juan asume en su

concepción del Logos es el haber sido rechazada por parte del mundo23.

Claramente menciona San Juan que aunque el Logos estaba en el

mundo, éste «no lo conoció» (Jn 1,10). Para ejemplificar este punto,

podemos mencionar que en el libro de los Proverbios se comenta que

la Sabiduría fue desatendida por los hombres, a quienes no interesó

escuchar sus consejos: «Ya que os he llamado y no habéis querido, he

tendido mi mano y nadie ha prestado atención» (Pr 1,24). Según

Balaguer, este aspecto que el Logos joánico toma de la Sabiduría, tiene

una asombrosa similitud con lo que Heráclito dice acerca de los que no

escuchan la voz del Logos, viviendo cada uno según su propia

inteligencia, mostrándose incapaces de comprender la inteligencia del

Logos que todo lo unifica24.

Las ideas anteriores son un reflejo de las especulaciones hechas

acerca de la Sabiduría, pues de la misma manera que el Logos puso su

tienda entre nosotros, así también lo hizo la Sabiduría en el pueblo de

Israel: «Entonces me dio orden el creador del universo, el que me creó

dio reposo a mi tienda, y me dijo: “Pon tu tienda en Jacob, entra en la

heredad de Israel”» (Si 24,8). Sin embargo, en este caso, se trata

simplemente de un lenguaje figurado, metafórico, pues no es que la

Sabiduría se haya hecho presente entre los hombres como un ser

22 Cf. R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según Juan I, 271. 23 Cf. M. GELABERT BALLESTER, Jesucristo, revelación del misterio del

hombre. Ensayo de antropología teológica, San Esteban-Edibesa, Salamanca-

Madrid, 1998, 108-109. 24 Cf. V. BALAGUER, Jesucristo, En: C. IZQUIERDO (dir), Diccionario de

Teología, 524.

Page 67: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

65

personal y se haya encarnado en un hombre, lo que sí se puede afirmar

del Logos joánico25.

4. Originalidad del Logos Joánico

A pesar de las similitudes existentes entre el Logos de san Juan

y la Sabiduría de los escritos sapienciales, hay algunas diferencias

fundamentales que nos llevan a descartar que el origen del Logos

joánico se encuentre exclusivamente en las especulaciones sobre la

Sabiduría del Antiguo Testamento26. En primer lugar porque ésta se

entiende como una compañera de Dios que le asistió en la creación; sin

embargo, no se trata de un ser personal, sino simplemente de un

conjunto de proposiciones o de leyes que Dios dispuso para realizar su

proyecto creador. Por otra parte, de acuerdo con lo que el mismo libro

de los Proverbios señala, la Sabiduría es también parte de la obra

creadora de Dios: «Yahveh me creó, primicia de su camino, antes que

sus obras más antiguas» (Pr 8,22).

Para san Juan es clarísimo que el Logos, el Verbo o la Palabra,

es una persona, y persona divina, pues el «Logos era Dios» (Jn 1,1), y

puesto que es Dios, es imposible que haya sido creado. San Juan

adjudica la actividad creadora al Logos, pues todo vino a la existencia

por su causa, «todo se hizo por ella» (Jn 1,3). Por otra parte, en la

literatura sapiencial, la Sabiduría recibe altos títulos; observemos por

ejemplo el siguiente fragmento: «Es un hálito del poder de Dios, una

emanación pura de la gloria del Omnipotente […] Es un reflejo de la

luz eterna, un espejo sin mancha de la actividad de Dios, una imagen

de su bondad» (Sab 7,25s). Es evidente que este texto habla de la

Sabiduría como un producto de la actividad de Dios, que refleja

ciertamente su omnipotencia y su bondad, pero el Logos no es ningún

producto de la actividad de Dios, sino Dios mismo27. Podemos observar

25 Cf. M.C. DOLBY, El hombre es imagen de Dios. Visión antropológica de

San Agustín, Eunsa, Pamplona 2002, 116-117. 26 Cf. G. SÁNCHEZ MIELGO, Claves para leer los evangelios sinópticos, 92-93. 27 Cf. M. GELABERT BALLESTER, Jesucristo, revelación del misterio del

hombre. Ensayo de antropología teológica, 110.

Page 68: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Logos joanico y sabiduria divina Rubén Betancourt García

66

que en este fragmento en ningún momento se predica de la Sabiduría el

Ser divino, como lo hace san Juan con respecto al Logos28.

Tras haber expuesto algunos fragmentos del prólogo de san

Juan en comparación con otros de la literatura sapiencial judía, vemos

que los más marcados paralelismos materiales que tiene el concepto

joánico Logos se tienen con las especulaciones del judaísmo sobre la

Sabiduría. Sin embargo, la doctrina de san Juan se distingue de aquélla

en tres aspectos principales, que son fundamentales en la diferenciación

de la teología judía respecto de la cristiana, a saber: el carácter de

persona del Logos, su preexistencia personal real (su coexistencia con

el Padre) y su encarnación29.

Así pues, el Logos gnóstico procede de otras fuentes, como

pueden ser el neoplatonismo y otras filosofías helenísticas, por lo que

podemos afirmar que el Logos joánico no tiene relación con aquél, y

tampoco hay razones suficientes para hacer de san Juan un escritor

gnóstico. El evangelio de san Juan es un documento que refleja el

pensamiento del cristianismo primitivo. En él se identifica al Logos con

la persona de Cristo, viendo en este último al Hijo de Dios y Salvador

del mundo, quien siendo Dios preexistía a toda la creación hecha por

su medio, cohabitando el cielo con el Padre desde toda la eternidad e

irrumpiendo en la historia haciéndose hombre para poner su morada

entre nosotros, y es precisamente por esto que tal concepto será

utilizado en la reflexión filosófica de los primeros pensadores

cristianos, destacando de manera particular Tomás de Aquino, cuyo

pensamiento sobre el Logos o Verbum Incarnato.

Conclusión

Después de las reflexiones llevadas a cabo en estas páginas,

podemos concluir que el Logos joánico se identifica indudablemente

con la persona de Jesucristo. Este Logos es el único que posee tres

características fundamentales que lo distinguen de la Sabiduría hebrea

28 F. OCARIZ et al., El misterio de Jesucristo, 112. 29 Cf. R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según Juan I, 296.

Page 69: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

67

y de las connotaciones que tiene el Logos en otras doctrinas, a saber, el

carácter personal del Logos, su preexistencia personal y real

(coexistencia con el Padre) y su encarnación.

No obstante lo anterior, se toman algunos elementos de la

filosofía griega para atribuírselos a su Logos, sobre todo del estoicismo,

en cuanto que lo relaciona con el Logos spermatikos que posee las

razones seminales que determinan el acontecer de todas las cosas

dirigiéndolas con un sentido específico, producto de una Inteligencia o

Providencia divina. Pero la principal característica del Logos consiste

en su plena identificación con el Hijo único de Dios, Jesucristo.

El Logos de san Juan posee una originalidad propia, a

diferencia de los griegos, pues a pesar de sus semejanzas con la

Sabiduría divina, difiere en algunos aspectos esenciales, a saber, su

carácter personal, su coexistencia con Dios como Dios mismo y su

encarnación en la persona humana de Jesús.

Page 70: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

El movimiento de la gnosis. Comentario a un fragmento del Himno de la perla

José Alberto Hernández Ibáñez 1

Introducción

Algunas formas del pensamiento helenista no escapan a ciertas

expresiones de carácter esotérico, entendidas éstas como

manifestaciones filosófico – religiosas cuya producción literaria

adquiere rasgos de pretendida revelación divina y especulación

hermética. Estas doctrinas se presentan como sistemas cosmológicos o

éticos, inspiradas en narrativas míticas de dominio ambiental, es decir,

nuevas versiones de los paradigmas homéricos, platónicos, bíblicos, o

semíticos en general. Está claro que el esoterismo ni los contenidos

mistéricos son objeto de la filosofía, pero muchas producciones

intelectuales de cuño helénico fueron generadas por esquemas

racionales clásicos. El gnosticismo, sistema de pensamiento emanado

de la encrucijada cultural entre la filosofía y la religión de la antigüedad

greco-romana, se le reconoce sensiblemente como una de las más

tóxicas manifestaciones heterodoxas del dogma cristiano, aunque en

contraparte es reconocido también como la consecuencia creativa de

una cultura en transición simbiótica.

1 Secretario General de la Universidad Pontificia de México. Patrólogo.

Page 71: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

69

Los autores cristianos pusieron la voz de alerta delante de las

pretensiones de los grupos gnósticos quienes, supuestamente, quisieron

usurpar la autoridad epistemológica de la fe con discursos de personas

que “no están en su sano juicio”2, y tenían razón por la peligrosidad que

representó la opinión alternativa de estos grupos identificados con la fe

cristiana, sobre todo para la interpretación bíblica y sus conclusiones

teológicas. No obstante, la gnosis se ha postulado como una actitud

intelectualista que escapa a toda clasificación, es una forma mentis

sedienta de respuestas humanísticas para justificar la existencia

humana, pretendiendo la trascendencia del alma, evadiendo las formas

canónicas; desde el punto de vista de la generación de las ideas, ha sido

un poderoso motor de búsquedas y de contradicciones, la mayoría de

ellas insalvables.

Nos entretiene ahora un fragmento del denominado Himno de

la perla, un escrito legendario emparentado con alguna de las tantas

derivaciones gnósticas del siglo segundo de nuestra era. Es el relato

legendario de una hazaña espiritual que tiene como punto de partida la

caída de un ser, aparentemente preexistente, habitante de un topos

hyperuranus, revestido de una dignidad celestial, envuelto ahora en la

desgracia de la encarnación, representada por el vestido sucio de los

seres mundanos, quien tiene como empresa recuperar su perla, una

especie de alma perdida en la inconsciencia en búsqueda de la

metempsicosis. De inicio, nos da la impresión de que dicha narración

es una relectura de los mitos antropológicos platónicos, pero con un

fuerte sabor religioso ascensionista.3

El fragmento en cuestión alude al método reminiscente que

permite al sujeto racional emprender un camino de autoconsciencia y

retorno al ser original. El texto gravita en la incerteza de su origen, y

tal parece que proviene de ambientes sirios, por lo tanto se le atribuyen

2 Ireneo DE LYON, Adv. Haer. 2,28,6. 3 El propósito de este breve análisis será la comparación con algunos lugares

del Fedro de Platón para notar su similitud y ascendente.

Page 72: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

El movimiento de la gnosis José Alberto Hernández Ibañez

70

influencias maniqueas y de la religión iraní.4 Sin embargo, en el análisis

se sugieren conceptos de índole común a varias filosofías

contemporáneas como las neoplatónicas y estoicas, sobre todo en torno

a la inspiración divina, a la inmortalidad del alma, en consecuencia se

dan los aterrizajes con el psiquismo, las ideas innatas, las operaciones

del Demiurgo y, como punto central de nuestra reflexión, el

movimiento epistemológico de recuperación de la naturaleza

trascendental. El fragmento en cuestión lo tomamos, primeramente, de

la versión propuesta por Hans Jonas:

Y la imagen del Rey de reyes se repetía por todo él...

También vi temblores por todo él, movimientos de la gnosis.

Vi que estaba a punto de hablar y percibí el sonido de sus

canciones que murmuraba en su camino descendente: «Yo

soy el que actuaba en los actos de aquel por quien fui educado

en la casa de mi Padre, y en mí mismo percibo cómo creció

mi estatura por su esfuerzo». Y con sus regios movimientos se

vierte a sí mismo fuera de mí, y de las manos de sus

portadores me insta a tomarlo; y a mí también mi amor me

urgió a correr hacia él y a recibirlo.5

Proponemos también otra versión con aproximaciones al

códice griego:

Y estaba colocada en altura la imagen del rey de

reyes, toda entera por todo el tejido… Y vi también que de

todas partes le llegaban sacudidas de conocimiento. Y que se

disponía a hablar. Yo lo oía declarar: “yo soy de aquel que

es el más valeroso de todos los hombres, porque fui inscrito

al lado del padre.” Entonces yo me di cuenta de mi estatura.

4 Alarcón SAINZ J.J. – P.A TORIJANO. Las versiones siriaca y Griega del

“Himno de la Perla”, en Collectanea Analecta Orientalia 3 (2006), 52. 5 Fragmento del “Himno de la Perla”, en Jonas H., La religión gnóstica. El

mensaje del Dios Extraño en los comienzos del cristianismo, Siruela, Madrid

2003, 147-148.

Page 73: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

71

Todos los movimientos reales reposaron sobre mí, porque él

aumentaba sus impulsos. Y se apresuró desde su mano,

extendiéndose hacia lo que recibía. Y el deseo provocó que

me lanzase a su encuentro y lo recibiera.6

Y la aproximación del texto siriaco:

Y la imagen del rey de reyes, toda entera, por todo el

tejido aparecía bordada en relieve. Volví a ver que toda ella

se agitaba sacudida por el conocimiento.7 Como si fuera de

nuevo a hablar, vi que se preparaba. Oí el sonido de sus

cantos, que musitaba mientras descendía: “Soy el más

diligente de sus servidores; por eso, he sido enaltecido ante

mi padre.” Y sentí también cómo mi estatura crecía al tiempo

que realizaba sus tareas. Y con un movimiento regio fue

desplegándose toda ella hacia mí, y de la mano de sus

portadores me incitó a tomarla. También mi amor me urgía

para que corriera a su encuentro y la recibiera.8

En breve, podemos comentar del texto que el vestido simboliza

el yo celestial o eterno de la persona, su idea original, una especie de

doble o alter ego que se mantiene a salvo en el mundo superior mientras

éste trabaja en el inferior. El Yo trascendental, el doble del salvador es,

una representación teológica particular de una idea que pertenece a la

doctrina del hombre en general y que se distingue por el concepto del

Yo.9

De acuerdo a la distinción tripartita gnóstica del hombre

psíquico, hylico y espiritual, se destaca la esencia del ser, alma

verdadera como naturaleza luminosa original o naturaleza interior,

expresión que nos recuerda al ‘hombre interior’ de san Pablo; se percibe

6 ALARCÓN – TORIJANO, 86-95, 75-78. 7 Lit. “Volví a ver que los impulsos del conocimiento lo agitaban a toda ella

por entero”: nota 125 en Alarcón – Torijano. 8 ALARCÓN – TORIJAno, idem supra. 9 Cf. Jonas H., 150.

Page 74: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

El movimiento de la gnosis José Alberto Hernández Ibañez

72

claramente que alude a una identidad, principio interno que tiene como

base la divinidad más elevada, el centro trascendente, no mundano del

ego individual. Es la representación del pneuma, el espíritu que está

dentro de nosotros, también llamado en la escatología paulina, el

hombre nuevo. Los gnósticos manejaron un psiquismo análogo al de

los mitos órficos, maniqueos y platónicos; la recuperación de la

consciencia es la vuelta a la dignidad divina. Tres mecanismos

psíquicos se involucran en el planteamiento del relato: el primero, el

reconocimiento de la perla como identidad propia; el segundo, la

parentela demiúrgica del protagonista (hijo de reyes); tercero, la

epistemología evolutiva de la monarquía en movimiento.

La profecía gnóstica se manifiesta a través de envíos o

profecías,10 por tanto, la carta ha de ser el envío del ser superior,

equivalente a una especie de delirio inspirado por los dioses sobre el

hombre animado por el mismo espíritu profético, lo que le ofrece los

medios de liberación.11 En realidad, el movimiento gnóstico ha de venir

de lo alto, ya que la amnesia de la encarnación genera oscuridad, y todo

intento soteriológico queda reducida a una simple mancia, adivinación

o indagación torpe del porvenir y nunca del camino trascendente. La

perla está encerrada en las profundidades, es el alma que requiere

recordar su origen, debe iniciar un movimiento hacia la certeza de la

inmortalidad, y de similar modo a la tesis de Heráclito, el cambio

constante hacia el porvenir del arjé, el sendero es la explicación del

10 La secta de los naasenos (adoradores de la serpiente), por ejemplo,

consideraron al ofidio del paraíso de Génesis 3 como el profeta liberador de la

opresión de Yahvé, deidad promotora de la ignorancia, envidiosa del

conocimiento del bien y del mal. Los valentinianos y marcionitas consideraron

al Cristo celeste, evangelio puro, mediación luminosa de salvación, por ser

conocimiento perfecto del Dios invisible. 11 PLATÓN, Fedro 636. Al delirio se han debido las purificaciones y los ritos

misteriosos que preservaron de los males presentes y futuros al hombre

verdaderamente inspirado y animado de espíritu profético descubriéndole los

medios para salvarse.

Page 75: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

73

logos, en la lucha de contrarios, como en una especie de provenir

dialéctico,12 de cambio de estado sustancial.

En efecto, la existencia terrena es lo contrario a la eternidad, y

mientras que la materia es contingencia que obliga hacia la muerte, el

alma gnóstica, revestida por el vestido de gala de la inmortalidad

recupera su movimiento natural.13 Suena contradictoria la afirmación

que lo inmortal (y supuestamente inmutable) tenga movimiento;

pareciera más la afirmación del motor inmóvil aristotélico, sin embargo

es la tesis platónica del Fedro que también hace la bipartición entre

frónesis e hybris, entre virtud y pasión en el mito del carro alado:

Cuando (el alma universal) pierde sus alas, se reviste de un cuerpo

terrestre, se adhiere a alguna cosa sólida; parece moverse por sí misma

(Fedro 637). El movimiento del alma gnóstica inicia con el

reconocimiento de la palabra divina que le permite reconocer su yo

trascendente y su naturaleza inmortal, la cual le permitirá ascender sin

dificultad a su principio. Aquí aparece el planteamiento de la dignidad

demiúrgica, es el dios bueno quien despierta al alma, la llama al mundo

intelectivo de los seres invisibles (gnósticos preexistentes del mundo de

12 HERÁCLITO, Fragmentos. 26; 36. El hombre prende una luz para sí mismo

durante la noche, cuando ha muerto, pero todavía vive. El soñador, cuya

visión ha sido suprimida, ilumina desde la muerte; el que está despierto,

ilumina desde el ensueño. Porque es muerte para las almas el convertirse en

agua, y muerte para el agua convertirse en tierra. Pero el agua procede de la

tierra; y del agua, el alma. 13 Fedro 636. Toda alma es inmortal porque todo lo que se mueve en

movimiento continuo es inmortal. El ser comunica el movimiento o el que lo

recibe, en el momento en cesa de ser movido, cesa de vivir; sólo el ser que se

mueve por sí mismo, no pudiendo dejar de ser el mismo, no cesa jamás de

moverse.

Page 76: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

El movimiento de la gnosis José Alberto Hernández Ibañez

74

las ideas), hace sensible al alma de la facultad de prognosis,14 del

conocimiento de sí y de los trascendentales.15

El mito gnóstico valentiniano concede al Demiurgo bueno

todas las cualidades divinas, pero es lejano, es Protopadre ignoto,

inaccesible, mientras que el demiurgo artesano, generador de la

materia,16 actúa como medio de contraste axiológico para la liberación

del alma.17 El ser racional se equipara a su principio trascendente: fui

educado en la casa de mi Padre, y en mí mismo percibo cómo creció

mi estatura por su esfuerzo». Y con sus regios movimientos se vierte a

sí mismo fuera de mí, y de las manos de sus portadores me insta a

tomarlo; y a mí también mi amor me urgió a correr hacia él y a

recibirlo. El Protopadre no se deja conocer con facilidad, el mito

advierte que la osadía del eón Sofía, en su curiosidad e imprudencia,

recibió el rechazo violento de sus hermanos superiores revirtiendo la

naturaleza divina en hybris, en fragmentación y materialización. Sin

embargo, la forma espiritual del origen quedó plasmada en el eón,

Sofía, porque como como hija es participación del ser eterno, y cada

fragmento racional materializado guarda una chispa del eón

descompuesto.

Se trata, entonces, de un movimiento intradivino con actividad

pasible, psíquica, noética y teorética. Los gnósticos, como los

platónicos y helenistas estaban anclados en la convicción del Theos

agnóstos, incognoscible, inmutable, alejado al absurdo de la

inmanencia, por lo tanto, la lectura soteriológica que realiza el

14 Termino referido a la tendencia marcionita que suponía la pre ciencia. Cf.

Orbe A., Estudios sobre la teología cristiana primitiva, Ciudad Nueva –

Editrice Pontificia Università Gregoriana, 1994, 532. 651; Ps. Clemente,

Homilía III, 17, 1. 3. 15 PLATÓN, Fedro: Es divino todo lo que es bello, bueno, verdadero, y todo lo

que posee cualidades análogas. 16 Demiurgo malo identificado con el eón Sofía o con el creador del Antiguo

Testamento bíblico. 17 PLATÓN, Fedro 637: El alma se parece a las fuerzas combinadas, su

naturaleza está mezclada de bien y mal.

Page 77: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

75

gnosticismo y la tradición platónica es una simple analogía idealista

simplista, una dialéctica del ente que depende del salto epistemológico

y no de la naturaleza propia de los seres.

La epistemología evolutiva de la monarquía en movimiento la

leemos en las siguientes expresiones: Y vi también que de todas partes

le llegaban sacudidas (toda ella se agitaba sacudida por el) de

conocimiento. (Himno 88); Todos los movimientos reales (regales)

reposaron sobre mí, porque él aumentaba sus impulsos (Himno 93).

Es un Rey que se mueve, que excita la mente del sujeto

contemplativo (vi también. Himno 88), de quien está en la disposición

gnóstica de oír (Yo lo oía declarar. Himno 90). El Rey de reyes cuya

imagen está colocada en una cierta altura, emite una especie de

manifestación reverberante con sus relieves (Himno 86), una revelación

perturbadora, no porque sea una visión nefasta sino porque el receptor

cobra consciencia de sí (entonces me di cuenta de mi estatura. Himno

92), recupera el conocimiento de que es un ser trascendente, deseoso de

regresar al origen (Y el deseo provocó que me lanzase a su encuentro y

lo recibiera. Himno 95), en una especie de epifanía de auto consciencia.

El gnosticismo es una doctrina de liberación y de ascensión,

pero este pasaje hermético pretende insinuar la mecánica de la

inspiración y de la comunicación intradivina, al menos entre el Rey de

reyes y el que es semejante a un hijo de reyes (imago et similitudo Dei).

Si se trata de la manifestación de los eones superiores o del Demiurgo

hacia el ser racional, entonces se trata de un misticismo plotiniano,

donde la creatura mortal se esfuerza, a través del éxtasis provocado por

la embriaguez intelectual.18 Por otro lado, si quisiéramos encontrar

paralelos con la Revelación bíblica, estaríamos en la sintonía de los

18 Cf. PLOTINO, Eneádas V, 5, 7-8. También la inteligencia, corriendo un velo

sobre los demás objetos y recogiéndose en su intimidad, no ve ya ningún

objeto. Pero contempla entonces una luz que no es otra cosa, sino que le

aparece súbitamente sola, pura y existente en sí misma. No sabe de dónde ha

salido esta luz: de fuera o de dentro. Cuando ha cesado de verla, dice: «Era

interior y sin embargo no lo era.» ver también: VI, 7, 31-35, VI, 9, 9-ll.

Page 78: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

El movimiento de la gnosis José Alberto Hernández Ibañez

76

oráculos y visiones de algunos profetas,19 o en la intelección de la voz

del Padre en el bautismo y transfiguración de Cristo; pero más

específicamente en el pasaje de la anunciación del arcángel a María:

ella se conturbó, discurría, no conozco, el Espíritu vendrá sobre ti, el

poder del Altísimo te cubrirá con su sombra, lo que ha de nacer de ti

será santo (Lc 1, 29-35).

Conclusión

En conclusión, eso que se puede interpretar como movimiento

de la gnosis es una licencia esotérica para intentar explicar el

conocimiento del Uno a través de la sensibilidad, al menos racional.20

Y aunque el mismo platón asevera que el Uno no está ni en reposo ni

en movimiento,21 se encuentra en el dilema de la participación, la cual

ya implica mutación o manifestación. Desde el punto de vista

ontológico sigue siendo una encrucijada para resolver el tema del uno

y del múltiple, pero ya que la corriente gnóstica no generó una

metafísica respetable nos quedamos con la provocación del

replanteamiento de algunos temas dogmáticos que tienen que ver con

el misterio y la comunicación divina, con la idea de la participación del

hombre en los dones sobrenaturales, con sus aspiraciones a la vida de

gloria, pero, sobre todo, con el estímulo intenso de buscar la mejor

explicación a todas estas interrogantes.

19 Comparando los temblores y sacudidas de la gnosis encontramos el pasaje

de 1 Re 19, 11: pero el Señor no estaba en el terremoto. 20 PLATÓN, Parménides 155 d-e: Podrá haber entonces ciencia, opinión, y

sensación de él (del Uno), puesto que ahora nosotros estamos teniéndolas

ahora sobre él. Posee, pues, un nombre y una razón propia, y se le puede

nombrar y expresar en el discurso racional; y todo cuanto a este respecto

conviene para los Otros, conviene también par el Uno. 21 Ibid. 139 b.

Page 79: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Persona como una realidad relativamente absoluta. Sobre el concepto de persona en la filosofía de Xavier Zubiri

José María Quesada Fox 1

Introducción

El concepto de persona humana ingresa en la filosofía gracias

al cristianismo. En el siglo IV los Padres Capadocios identifican la idea

de persona con la hipostasis. Ellos sugieren que la naturaleza de Dios

debe de ser entendida como una categoría general que se les aplica a las

tres Personas Divinas no como ousía (sustancia), sino como hipostasis.

Es decir, Dios debe de concebirse como una comunión amorosa de tres

personas ontológicamente distintas, lo cual en sentido filosófico, da

cuenta cabal de la densidad ontológica del ser persona2.

San Agustín descubre al “yo quien quería y no quería”, como

esa voluntad humana contrapuesta a la voluntad divina3.En la

1 Profesor de la Facultad de Filosofia y Letras, UNAM. 2 L. M. BARRETO, «Los Padres Capadocios y el Concepto de Persona». Studia

Gilosoniana, Caracas Venezuela 2013, 53-64. 3 G. REALE, & D. ANTISERI, Historia del Pensamiento Filosófico y Científico

lll. Herder. Barcelona 1988.

Page 80: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Persona: realidad relativamente absoluta José María Quesada Fox

78

antropología agustiniana encontramos en el hombre una interioridad

que se conoce a sí mismo ya que su alma dotada de memoria,

entendimiento y voluntad es capaz de razonar y a la vez de gobernar al

cuerpo. En Agustín, cuerpo y alma están separados, hay una dualidad

ontológica con una parte material y otra espiritual, donde como hemos

dicho, está ultima, de carácter eterno, se hará cargo de la primera de

carácter temporal.

Para Santo Tomás de Aquino la individualidad humana, a

diferencia de otras individualidades, se caracteriza en que todos y cada

uno de los individuos –humanos- valen ante Dios. «Muchas son las

almas dentro de la misma especie»4 El supuesto humano está

compuesto por la unidad hileomórfica de cuerpo y alma, y aunque el

alma puede prevalecer en su ser una vez destruido el cuerpo5, esta

separada de aquél, no es un hombre completo. Así pues, para el

aquinitense, el término “persona” debe ser reservado exclusivamente

para el ser humano como aquella sustancia singular de naturaleza

racional6.

Hoy hay quienes piensan que el hombre y los animales de

mayor orden biológico, tienen los mismos derechos por el simple hecho

de ser sensibles (Regan, Singer y Nussbaum7). Es decir, porque sienten

dolor, hambre, temor, etc. Otros piensan que el hombre es solamente

una realidad dada, arrojada a este mundo y condenada tanto a la libertad

como a su propia construcción. Por ejemplo se me vienen a la memoria

Nietzsche y Sartre, filósofos “bestseller” de la actualidad. Dentro de

este debate contemporáneo, ¿Cómo podemos hablar hoy desde la

filosofía8 de esa naturaleza individual llamada “persona humana” única

4 T. DE AQUINO, T. d. Suma de Teologia I –I. q.76, a, 2, r 1, Biblioteca de

Autores Cristianos. Madrid 1988. 5 Ib., 1, q.76, a.2, r 2. 6 Ib., 1, q 29, a.1. 7 Citados por (Arellano & Hall, 2012) y en mi trabajo “Bioética en la Industria

Avícola” presentado en Cefta Noviembre 2016) 8 En este ensayo vamos a tratar de hacer una aproximación filosófica del

concepto “persona haciendo una “epojé”. Es decir, poner entre paréntesis todo

Page 81: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

79

e irrepetible, que cuenta con una interioridad, inteligencia y voluntad

propias, pero a la vez creada por Dios y con vocación de religación

divina? Para dar respuesta a esta pregunta, me gustaría presentarle a

Xavier Zubiri, filósofo de origen donostiarra contemporáneo a aquellos

que somos del siglo XX.

Zubiri, partiendo de la inteligencia sentiente, nos dirá que el

supuesto humano, animal de realidades se hace persona mediante su

“personeidad y personalidad”, dentro de su realidad, «de suyo» en sí

misma”, y en la misma realidad (mundo). Ser realidad en sí misma, es

decir, que el hombre es capaz de construir su propia realidad, y que a la

vez, forma parte y pertenece a la realidad, lo hace ser para Zubiri un

“absoluto relativo”. Por ende el ser de la realidad llamada “persona” es

un “yo” que se actualiza siendo en el mundo, vertido a los demás y en

la historia. Y lo más importante, el hombre es realidad abierta, que por

ser tal, puede a la vez entregarse a Dios, y reconocer al propio Dios

como realidad absoluta, también abierta, que libremente se da al

hombre. Esto es lo que Zubiri llamará “religación”, o la dimensión

teologal del hombre. Dimensión que envuelve a Dios mismo, pero que

en este sentido, estamos hablando de una estructura humana sujeta a un

análisis inmediato9

Entender de entrada a Zubiri no es fácil, creo que para ello se

requiere de una formación filosófica previa y me atrevería a decir, que

una formación fenomenológica que nos permita ir “a las cosas mismas”

y a la vez una disposición a compenetrarse en un sistema metafísico –

el de Zubiri- dispuestos a poner entre paréntesis, la escuela o visión

concepto previo que tengamos de persona, incluyendo nuestra propia fe. Sin

embargo, la aproximación cristiana no la podemos evitar, pues el autor, es

decir yo, soy cristiano. Y por el hecho de tener fe, o la misma Gracia, esta

cosmovisión, es “mi realidad”. Espero poder explicar esto. 9 X. ZUBIRI. El Hombre y Dios. Alianza Editorial Fundación Zubiri. Madrid

2007, 12.

Page 82: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Persona: realidad relativamente absoluta José María Quesada Fox

80

metafísica que podamos tener, por más sólida que esta sea. Zubiri es un

autor que construye “su propia idea de filosofía”10.

La filosofía, nos dice Zubiri, no es algo hecho, que esté ahí, que

baste con echar mano para servirse a discreción de ello. Al contrario,

esta ha de fabricarse mediante un esfuerzo personal, no necesariamente

partiendo de cero para montar un sistema propio, dejando a un lado la

tradición filosófica. Pero aún, admitiendo filosofías ya hechas, ha de

hacerse un esfuerzo personal producto de una vida intelectual, es decir

de una vida filosófica. Recíprocamente, se puede carecer en absoluto

de originalidad, pero a la vez, “poseer en lo más recóndito de sí mismo,

el interno y callado movimiento de filosofar”11 Tarea que

humildemente trato de seguir.

Xavier Zubiri nacido en San Sebastián (Donosti) en 1898,

inició sus estudios filosóficos y teológicos en el seminario de Madrid,

siendo que para los años 20, pasa Lovaina y Friburgo donde es alumno

de Husserl y Heidegger respectivamente. Considerándose esta la etapa

fenomenológica de Zubiri. En 1944 sale a la luz pública la primera

edición de Naturaleza Historia y Dios, obra fundamental del pensar

zubiriano cuyos estudiosos a esta época la etapa “ontológica” del autor.

Obra de esos tiempos lo es también Sobre la Esencia pilar fundamental

de su metafísica, que quedará sólidamente construida al final de su vida

con la publicación de la llamada “trilogía sentiente” (Inteligencia

Sentiente, Inteligencia y Logos e Inteligencia y Razón) obras que

consolidan lo que sus estudiosos llaman etapa metafísica12. Zubiri

muere el 21 de Septiembre de 1983. La fundación Xavier Zubiri,

dedicada a cuidar el acervo del autor y promover el estudio de su obra,

ha publicado otra cantidad de obras producto de la recopilación de

10 D. GRACIA, Voluntad de Verdad. Para leer a Zubiri. Triacastela. Madrid

2008. 11 X. ZUBIRI, Naturaleza, Historia y Dios. Alianza Editorial Fundación Xavier

Zubiri, Madrid 2015. 12 D. Gracia, Voluntad de Verdad. Para leer a Zubiri. Triacastela. Madrid

2008.

Page 83: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

81

todos sus escritos y publicaciones. Entre ellas están 5 Lecciones de

Filosofía, Estructura Dinámica de la Realidad y El Hombre y Dios, obra

en la que he basado esta presentación.

1. Inteligencia Sentiente

El hombre, a diferencia de los demás seres vivientes es

inteligencia sentiente. Es decir, “siente realidad”. Al igual que los

demás seres vivos es un “autos”, es decir, vive por y para sí mismo,

tiene movimiento propio. Al igual que los animales, siente y ese sentir

es un proceso que consta de tres momentos esenciales. El primero es

la suscitación, que no solamente se limita a un proceso de excitación,

sino también a todo aquel estímulo tanto interno como externo que

produce una modificación tónica en el estado del animal, que a su vez

provoca una respuesta de este a tal estímulo o suscitación.

Formalmente este proceso único de tres pasos se definirá como

la impresión que provoca en el sentiente lo sentido (los colores,

sonidos, olores, temperatura, etc.) que a su vez, no es un mero “pathos”

del sintiente, sino que tiene en él un momento de alteridad en la

afección, a lo que Zubiri llamará nota. No como un símbolo, sino como

el “noto” que hace alusión al conocerse, o al sentirse algo. Y esta

alteridad provocará a su vez una fuerza de imposición en la que ese algo

sentido se impone formalmente al sentiente. La unidad intrínseca de

estos tres momentos es lo que constituye la impresión formal. En el

animal esta impresión es solamente sustitutiva, es decir, siente algo que

le provoca una respuesta, de ahí que Zubiri diga que el animal es un

“sentiente suscitativo”. En cambio el hombre siente “realidad”. Es

decir, en la formalidad de la impresión, no solamente siente algo, siente

realidad.

La realidad es el «de suyo» de la fuerza de imposición. Por

ejemplo ante la elevación de la temperatura, el animal sentirá “lo”

caliente, mientras que el hombre sentirá “lo-que-es” caliente. Es decir,

sentirá el calor. Esta notaridad, o conjunto de notas que formalmente

constituyen el calor, es la realidad que el hombre intelige

sentientemente, o siente intelectivamente. De ahí que para Zubiri el

primer paso del acto intelectivo es la aprehensión primaria de realidad,

Page 84: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Persona: realidad relativamente absoluta José María Quesada Fox

82

de la formalidad del «de suyo». Así pues, el hombre es inteligencia

sentiente13 porque en el acto primario de aprehensión, aprehende

realidad, que a su vez es el acto fundamental del proceso cognitivo que

se reafirma en el hombre mediante el logos y la razón.

Lo real no es real porque existe, sino porque le compete el «de

suyo» la notas que lo constituyen. Para Zubiri, el ser, la esencia y la

existencia son ulteriores a la realidad. Lo que es, es «de suyo» en sí

mismo y tanto las notas como la existencia son momentos del mismo

contenido de lo real. Y el momento de la cosa sentida en el intelecto es

a lo que Zubiri llamará respectividad.

El hombre es un animal de realidades. Es sustantividad humana

que vive, siente e intelige sentientemente. Es un sistema sustantivo que

a su vez se compone de dos subsistemas, a los que Zubiri llama “cuerpo

y psique”14. Cuerpo es el conjunto de las notas fisico químicas a las que

más bien se le puede llamar el organismo y que constituye la actualidad

de cada hombre en el mundo. Al otro subsistema, que llama psique, no

quiere llamarle ni alma ni espíritu ya que aunque la psique tiene cierta

dominancia sobre el cuerpo, no deja esta de ser solamente un

subsistema parcial de notas dentro del sistema total de la sustantividad

humana.15

Por lo tanto, para Zubiri, el hombre no tiene cuerpo y psique,

sino que es “psico-orgánico”. Es numericamente e identicamente uno.

Tanto las notas orgánicas como las notas de la psique, son notas-de este

compuesto o sistema único. A mi parecer, aunque Zubiri pretende

separarse del hilemorfismo tomista aristotélico en realidad coincide con

este. El hombre es animal de realidades porque es realidad que está en

la realidad. A esto, Zubiri le llamará suidad.

13 X. ZUBIRI, Inteligencia Sentiente. Inteligencia y realidad. TECNOS.

Madrid 2004. 14 X. ZUBIRI. El Hombre y Dios. Alianza Editorial Fundación Zubiri. Madrid

2007, 39. 15 Ib., 49.

Page 85: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

83

Ahora bien, la suidad es la razón formal de la “personeidad”

que no hay que confundir con la personalidad y ambas, personeidad y

personalidad, constituyen lo que para Zubiri es la persona humana. Se

es persona en el sentido de personeidad por el mero hecho de ser

realidad humana, es decir por tener inteligencia. Desde el momento en

que el embrión humano adquiere inteligencia en base a su constitución

genética, automáticamente adquiere ya la personeidad correspondiente.

La personeidad no se adquiere solamente ejecutando actos, sino que

también se recibe pasivamente a través de la herencia genética y se va

desarrollando a lo largo de la vida hasta el momento de la muerte. La

personalidad es la concreción de la personeidad. El hombre por ser un

viviente, no solamente es independiente ante el medio, o un implante

dentro de la realidad. El hombre es suyo en su realidad propia frente a

toda realidad posible, inclusive la realidad divina. Por eso se dice que

su modo de realidad es ab-soluto relativo. Realidad propia, que el

mismo construye, dentro de la realidad que le rodea.

El “yo” es la actualidad mundanal de esa realidad relativamente

absoluta. Esto es, el yo es el ser de la persona, el ser de la realidad

“relativamente absoluta”. El yo no consiste en ser el sujeto de sus actos,

sino que es un modo de ser, un modo de actualidad mundanal de lo

relativamente absoluto. Esto no quiere decir que yo soy relativamente

absoluto, sino que lo relativamente absoluto soy yo. Es decir, esa

realidad de la que formo parte y esa realidad que yo voy construyendo,

soy “yo mismo”. Si me pongo a comer una manzana, no se trata de un

animal comiendo una manzana. Soy yo que “me” como la manzana y

en este acto de estar comiendo la manzana, soy yo mismo quien me

actualizo en el acto de comer dicha manzana. Así, el yo no es solamente

el ser de mi sustantividad personal, sino que además este yo tiene en

cada instante una figura determinada. Soy yo, y el modo en como soy

yo, es lo que es la personalidad.

Karol Wojtyla (San Juan Pablo ll) llama a esto experiencia del

hombre. “La experiencia que el hombre puede tener de alguna realidad

exterior a sí mismo está siempre asociada a la experiencia del propio

yo, de tal forma que nunca experimenta nada exterior sin al mismo

Page 86: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Persona: realidad relativamente absoluta José María Quesada Fox

84

tiempo tener la experiencia de sí mismo”16. Se nota un cierto

paralelismo en el planteamiento de ambos autores en el sentido de que

la persona se va actualizando o es actualidad en sus propios actos. Para

un fenomenólogo, como lo fue Wojtyla, la persona es una unidad

fenomenológica de vivencias intencionales, mientras que para nuestro

autor, la persona es la suma de actualidades de sí misma como realidad

dentro de la misma realidad (relativamente absoluta). Aquí vemos la

compleja formación fenomenológica tanto husserliana como

heidegariana de Zubiri. El problema para comprender a Zubiri es que

la persona deja de ser sujeto, para convertirse en momento (Heidegger),

pero a la vez es realidad. Es decir, no es solamente presencia. Sea como

sea, para nuestra reflexión, tomemos en cuenta que cada momento

actuante o actualizante tiene su propio valor intrínseco. Por eso dice

Zubiri que el pecado es terrible, porque en el momento en que yo

cometo una falta, esto ya está hecho. Puedo arrepentirme y también

puedo ser perdonado, pero el acto realizado no puede ser borrado, ahí

queda como una realidad. Soy yo quién ha cometido la falta y esta falta

sigue siendo momento de mi realidad. El arrepentimiento consiste en

asumir el yo, como ese yo que cometió la falta, pero ahora soy yo

arrepentido de haber cometido dicha falta. De ahí que para Zubiri, yo

no es un sujeto lógico ni un sujeto metafísico, sino que es pura y

simplemente la actualización mundanal de la suidad personal. “El yo

está puesto en la realidad y la realidad humana siendo es el hombre

siendo yo”17.

2. Vertido a los demás

Pero yo no estoy solo en el mundo, esa suidad personal que esta

puesta en la realidad, a la vez coincide y convive con otros. Cada

hombre no es simplemente un miembro más de su especie, como lo

sería por ejemplo lo sería un perro de la especie canina, o una vaca de

la especie bovina. Cada hombre es un animal de realidades, o un propio

16 K. WOJTYLA, Persona y Acción, BAC. Madrid 2007. 17 X. ZUBIRI. El Hombre y Dios. Alianza Editorial Fundación Zubiri. Madrid

2007, 59.

Page 87: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

85

animal personal, es decir una persona única e irrepetible. Pero a la vez,

como esquema, es esquema de un «animal personal de otra persona»,

pero este esquema no es marginal al esquema de la otra persona. Más

bien es un momento constitutivo de ella y por ende de su vida propia,

resulta que mi sustantitividad está constitutiva y vitalmente vertida

desde sí misma a otras personas. Es por esto, que los otros no son algo

añadido a mí, sino algo a lo que constitutivamente estoy vertido desde

mi mismo. Soy «de suyo» esquemáticamente a las otras personas18. Y

de igual forma, los otros al estar esquemáticamente vertidos a mi están

ya refluyendo sobre mí mismo. De esto resulta que cada persona tiene

una doble vertiente. Por un lado la persona es una realidad «de suya»

determinada como absoluta frente a toda realidad, tal y como hemos

visto. Pero, por el otro lado, la realidad de la persona está co-

determinada por la refluencia de otras personas como absolutos.

Esta co-determinación de las personas según Zubiri se proyecta

en tres dimensiones. Primera dimensión: Los distintos hombres como

miembros del phylum humano no solamente son diversos, sino que son

diferentes, tienen una dimensión única e individual. Segunda

dimensión: Mi realidad individual está vertida a los demás vivientes del

phylum, siendo esta la versión estructural de la convivencia, pero no de

una convivencia de realidades que incorporo a mi realidad, como sería

por ejemplo convivir con los animales.

Es la convivencia de un hombre con los demás hombres en

tanto realidades propias y esto es lo que formalmente constituye la

sociedad humana. De ahí que a la sociedad pertenezcan no solo las

notas naturales sino también las notas apropiadas por una opción ante

lo real como tal. Por lo que en la sociedad se puede convivir de forma

impersonal o en comunión personal. Se convive en forma impersonal

cuando cada persona funciona solo como «otra» para mí. Y esto es lo

estrictamente constitutivo de la sociedad (actual) la cual es

esencialmente una convivencia impersonal. Pero, una persona puede

estar vertida a otra persona no en tanto a otra, sino en tanto a persona,

18 X. ZUBIRI. El Hombre y Dios. Alianza Editorial Fundación Zubiri. Madrid

2007, 61.

Page 88: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Persona: realidad relativamente absoluta José María Quesada Fox

86

lo cual es una forma distinta de convivencia a la que Zubiri llama

«comunión personal».

El hombre, vertido como animal de realidades a la realidad del

otro, lo realiza en comunidad. Y en esta comunidad cada hombre que

forma parte de ella queda afectado por los demás, lo cual es el momento

de “héxis”, de habitud de alteridad personal. Estos tres momentos

(verterse, comunidad, habitud) se hallan fundados cada uno en el

anterior. Su unidad radical es la realidad de todo lo social, es decir la

sociedad humana. Visto esto podemos concluir que el hombre es un

«animal social» no solamente por compartir con los demás su realidad

psico-orgánica, sino porque el yo, tú, etc. No solo se diversifican, sino

que se co-determinan. El yo, al envolver al tú, no sigue siendo

solamente un ser individual, sino justamente al revés, es un ser común.

Mi ser, ya no es el yo individual, sino es congéneremente comunal; es

la “comunalidad” del ser humano. Se es común ya no por comunicación

o participación, sino por algo previo, la realidad humana «siendo» en

su comunidad. El hombre ya no es solamente un yo absoluto, sino que

es comunalmente absoluto en la medida en que desde sí mismo se está

dando y conviviendo con los demás hombres en cuanto a realidades19.

Es importantísimo que notemos aquí como Zubiri da un vuelco

a su definición de persona no solamente como un absoluto individual,

sino que ahora ya señala, que el hombre es absolutamente comunal. La

comunidad se forma en la medida en que la persona se abra y se vierta

a los demás. Es decir, que viva en comunión. Si recordamos la mención

hecha arriba de los Padres Capadocios conforme a la dimensión

trinitaria de Dios, esta ha de entenderse como una integración divina de

la comunión amorosa de tres personas ontológicamente distintas en

forma hipostática, es decir en una sola que es Dios20.

19 X. ZUBIRI. El Hombre y Dios. Alianza Editorial Fundación Zubiri. Madrid

2007, 68. 20 L. M. BARRETO, «Los Padres Capadocios y el Concepto de Persona». Studia

Gilosoniana, Caracas Venezuela, 62.

Page 89: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

87

En forma análoga podemos sugerir que la verdadera

comunidad humana debería de ser comunión amorosa entre las

personas, y que si esto a muchos les parece una irrealidad, simplemente

deben de observar si lo aquí expuesto por Zubiri en relación a la

dimensión absolutamente comunal del hombre es o no realidad. A

través de la historia y en cada momento el hombre ha mostrado su

capacidad de vivir en comunidad, pues de no ser así, no existirían

familias, pueblos, naciones, comunidades religiosas, asociaciones

civiles, etc., etc. Ciertamente los hombres se unen a veces por

simplemente compartir intereses, otras veces por conveniencia y otras

por amistad, siendo esta última la forma más perfecta de la convivencia

humana diría Aristóteles21. Y en términos cristianos esto es el

cumplimiento del segundo mandamiento de amar al prójimo como a sí

mismo, lo cual junto con el primero es fundamento de la comunidad en

Cristo22. Y es por esto que la Iglesia promueve la fraternidad humana

como fundamento de la convivencia social, ya que la sociedad –

volviendo a Zubiri es un momento de la realidad humana.

La tercera dimensión de la co-determinación interpersonal del

hombre es la historia. El phylum de la especie es genéticamente

prospectivo. Es decir, el hombre no solamente es diverso, o convivencia

con los demás, es también determinación de la continuación de la

especie. Esta preservación o continuación tiene dos aspectos. El

filogenético mediante el cual los padres engendran a sus hijos

heredándoles determinadas características filogenéticas, y la historia o

la cultura que es la tradición mediante la cual el hombre ha estado y ha

ido modificando la realidad. El hombre es esencia abierta y por tanto

sus formas de estar en la realidad han de ser necesariamente elaboradas

y mediante la tradición, la historia, estas formas elaboradas son

heredadas a los descendientes.

La historia del hombre no es una sucesión de vicisitudes, ni

tampoco un relato, o un testimonial documental. Ni tan siquiera es un

21 ARISTÓTELES. Ética Nicomáquea1172a. Ética Nicomáquea. Ética Eudema.

Biblioteca Clásica Gredos. Madrid 1985. 22 Mt 22, 34-40

Page 90: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Persona: realidad relativamente absoluta José María Quesada Fox

88

sentido. Lo que la historia trasmite son las formas de estar en la realidad

de los progenitores como posibilidades de estar en la realidad para

quienes la reciban. La historia no son “hechos” sino “posibilidades” que

se aceptan o se rechazan, o se substituyen para ser ejercitados. Si la

historia fueran puros hechos, su juicio sería universal y su enseñanza

también. La historia es pues posibilidad que se trasmite de generación

en generación ya sea como proceso o capacitación. Y cada proceso

histórico, como proceso, tiene su tiempo.

Es lo que comúnmente conocemos como la “altura de los

tiempos”. Una acción que se ejecutó hoy, o hace cinco siglos puede no

ser igual, ya que dicha acción queda enmarcada en el contexto propio

de su tiempo. Por eso es que muchos relatos bíblicos por ejemplo, no

deben de ser tomados de cuenta en forma literal. Las realidades

humanas de un mismo proceso histórico no son coetáneas entre sí, sino

coetáneas en una misma altura.

3. El hombre experiencia de Dios

Vistas ya las tres dimensiones (unicidad, comunidad e

historiedad) que co-determinan a la persona humana en relación a los

demás, queda por ver una cuarta dimensión, su dimensión teologal, o

lo que también pudiéramos llamar, experiencia de Dios.

Dios es absoluto -absoluto, es decir, se basta a sí mismo, por lo

que no necesita de ningún referente creado para subsistir en sí mismo.

Sin embargo a la vez es fundamento absoluto de todas las cosas y por

ende está presente en el fondo de las cosas y de modo especial en el

fondo de las personas. El hombre es experiencia de Dios, la cual tiene

dos vertientes. Por una parte Dios es una realidad que se da en la

experiencia y por otra parte, el hombre es capaz de tener experiencia de

Dios.

Dios da de sí la realidad en qué el mismo consiste (se revela) y

da-de-si la realidad de lo que no es Dios (lo creado), por lo que Él

mismo es fundante de esta realidad. Luego Zubiri nos dice que existen

dos tipos de realidad metafísica: las realidades de esencia cerrada y las

Page 91: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

89

realidades de esencia abierta23 y que por consecuencia el dar-de-sí de

Dios tiene dos modos. En las realidades de esencia cerrada, la

fontaneidad de Dios consiste en hacer que las cosas sean «de suyo» lo

que son. Por ejemplo si pensamos en el fuego que quema, no es que

Dios queme las cosas con el fuego, sino que ha hecho posible que el

fuego queme las cosas porque es fuego. La esencia del fuego se reduce

a calentar o quemar, por lo tanto es cerrada. En las cosas de esencia

abierta, las que no son «de suyo», sino «suyas», la fontaneidad de Dios

consiste en donación. Y solo hay donación de Dios cuando aquello a

que se da es una persona. Es una donación interpersonal, donde lo que

se dona es la misma verdad de Dios24

Esta donación de Dios al hombre se da en tres dimensiones.

Primeramente desde el momento en que Dios está dándose como

absoluto experiencial en forma universal, se da como el absoluto

experiencial en la propia constitución del hombre. Dios es de alguna u

otra forma, una actualización de ese don en el que se constituye el ser

del hombre. Es una especie de presencia de seguridad y fidelidad que

fundamenta la propia realidad del ser siendo del hombre. Otra forma de

donación es la propia gracia de Dios, que como sabemos es la presencia

de Dios en las personas en forma de donación constitutiva de su relativo

ser absoluto. La tercera forma de donación es la presencia misma de

Dios en la persona constituyendo en ella su dimensión relativamente

absoluta. Esto es lo que ocurre solamente en la encarnación de

Jesucristo, quién es la Verdad de Dios en persona. El Verbo hecho

carne25. Así pues bajo estas tres dimensiones (fundamento absoluto,

gracia y encarnación) Dios se da en experiencia al hombre.

Pero, por otra parte el hombre es experiencia de Dios, lo cual

no quiere decir que el hombre tenga experiencia de Dios en un sentido

posesivo, pues Dios no es un objeto que se pueda poseer como lo sería

por ejemplo manejar un automóvil. Ni tampoco es el estado en el que

23A. FERRAZ, Zubiri: El realismo radical. Editorial Cincel. Madrid 1988, 223. 24 X. ZUBIRI. El Hombre y Dios. Alianza Editorial Fundación Zubiri. Madrid

2007, 315. 25 Cf. Jn 1,14

Page 92: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Persona: realidad relativamente absoluta José María Quesada Fox

90

el hombre está. La experiencia de Dios por parte del hombre consiste

en la misma experiencia de ser fundamentado en última instancia en la

realidad de Dios. En la experiencia de Dios lo que hay es la experiencia

de la realidad fontanal y fundamentante de Dios en la religación como

ultimidad, posibilidad última y como impelencia suprema26. El hombre

también experimenta a Dios mediante la gracia, su propia libertad y en

la vida de Cristo, siendo esta última también experiencia humana del

absoluto divino en la persona del mismo Jesucristo. (“Nos hiciste señor

para ti y nuestro corazón está inquieto hasta que o descanse en ti”27.

La experiencia de Dios no solo se da en la dimensión individual

del hombre. Se da también en las dimensiones social e histórica28. Cada

persona tiene su experiencia individual de lo absoluto, pero el hombre

también tiene una experiencia social de Dios, multiforme como son las

sociedades. Y también una experiencia histórica de Dios a lo largo de

la historia del hombre, concretamente en la fe cristiana la llamada

Historia de la Salvación.

Donado Dios como realidad absoluta y personal al hombre que

es realidad relativamente absoluta, el hombre puede entregarse a Dios

en tanto como asumir a Dios como el fundamento de su realidad (que

de hecho lo es), en tanto posibilidad de posibilidades y en tanto

impelencia suprema, es decir como fundamento de toda razón. Esta

entrega a Dios ya sea mediante la adoración, oración, suplica o

contemplación son formas de religación humana a lo que es «de suyo»

su realidad Absoluta. Esta es la dimensión teologal de la persona

humana, que como todo lo que trabaja Zubiri es realidad. Hemos visto

así las cuatro dimensiones que caracterizan a la persona humana en

Zubiri y que son: Unicidad, comunidad, historicidad y religiosidad (en

términos de religación). La persona humana lejos de ser un constructo

biológico o social, o una especie más que puebla la tierra o el universo,

26 X. ZUBIRI. El Hombre y Dios. Alianza Editorial Fundación Zubiri. Madrid

2007, 326. 27 G. REALE, & D. ANTISERI, Historia del Pensamiento Filosófico y Científico

lll (San Agustín. Conf 1.1.1). Herder, Barcelona 1988. 28 A. FERRAZ, Zubiri: El realismo radical. Editorial Cincel. Madrid 1988, 225.

Page 93: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

91

es un absoluto relativo porque es realidad y a la vez se va haciendo

realidad propia en forma histórica en comunión con Dios y los demás.

Automáticamente esto le da su propia dignidad y derechos

fundamentales. Es un en sí, para sí, y para los demás. Y también lo es

para Dios.

Page 94: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas epistemológicos a enfrentar en una fundamentación filosófica de la Misión ad Gentes

Jorge Luis Ortiz Rivera 1

Introducción

El presente trabajo tiene como objetivo explicitar los

presupuestos epistemológicos que debieran sustentar las actividades de

un Instituto dedicado a la formación, investigación y enseñanza de

aquello que dentro de la Iglesia Católica recibe el nombre de Missio ad

Gentes, es decir, la acción de anuncio y propagación, no solo de los

dogmas y ritos propios de la fe específicamente católica, sino,

considerados más en general aún, de los valores supuestos como

inspiradores del pensamiento cristiano y los cuales son considerados

como universalmente ofertables a todos los pueblos y cultura en tanto

que válidos.

Si ello es así, entonces, en determinadas circunstancias, la labor

misionera se ha de concretizar en actividades pastorales contextuales

más que en reflexiones teóricas y teológicas:

1 Profesor de asignatura de la Facultad de Filosofía, UPM.

Page 95: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

93

Entonces la Iglesia tiene que ponderar si estas

condiciones exigen de nuevo su actividad misional. Además

en ocasiones, se dan tales circunstancias que no permiten,

por algún tiempo, proponer directa e inmediatamente el

mensaje del Evangelio; entonces las misiones pueden y deben

dar testimonio al menos de la caridad y bondad de Cristo con

paciencia, prudencia y mucha confianza […]2

Esto es importante, pues en la medida en la cual la sociedad

contemporánea ha evolucionado con respecto a la sensibilidad de los

derechos humanos y sus libertades, en la misma medida se ha tomado

mayor conciencia del valor intrínseco presente en cada civilización y

manifestación cultural existente sobre el planeta. En efecto, nos

encontramos en un momento histórico que dista mucho de concebir la

existencia real de algo así como “subcultura” o “culturas primitivas” y

otros conceptos similares marcados por centrismos y dualismos,

xenofobias e intolerancias, los cuales han pasado a ser una especie de

recuerdo bochornoso de la historia de las ideas de la humanidad.

Este ha sido el objetivo de la política cultural de

muchos gobiernos y entidades vinculadas a la cultura [elevar

el nivel cultural con respecto a ciertos criterios considerados

como propios]. El problema de este enfoque consiste, por

supuesto, en cómo los diferentes actores –gobiernos, grupos,

individuos, valoran las distintas manifestaciones culturales

¿Cuáles son los criterios para manifestar qué

manifestaciones culturales se consideran superiores o

mejores que otras? ¿Cuáles han de promoverse y cuáles no?

La historia demuestra que estas preguntas responden con

frecuencia a planteamientos económicos y políticos, más que

netamente culturales, sobre todo en la situación colonial y en

2 A.G. 6.

Page 96: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas en Misso ad gentes Jorge Luis Ortíz Rivera

94

las relaciones entre países industrializados y el Tercer

Mundo.3

Ahora bien, si ello es así, el problema que se plantea es el

siguiente: ¿cómo definir los términos en los cuales se ha de entender y

describir el mandato de «ir por todo el mundo y predicar el evangelio a

todos los pueblos»4? Es pertinente la pregunta, pues la práctica de la

expiación de ideas pertenecientes al terreno de las verdades religiosas

y de sus posibles adeptos, a veces, pudiera contemplarse como un

campo de lucha en el cual, la consecución de nuevos seguidores para

cada grupo religioso sea considerada más como ganancia, entendida

ésta en términos mercantiles, que como una actividad de tinte espiritual:

Proponíamos la necesidad de repensar el rol del

catolicismo dentro del campo religioso latinoamericano.

Argumentamos que, para evaluar más adecuadamente el tipo

de influencia que ejerce dentro de éste, era necesario, en

primer lugar, reconsiderar el concepto de “monopolio

religioso” y examinar más finamente sus distintos efectos

sobre variables que a menudo son consideradas

coextensivas: creencias, identidad y, especialmente,

legitimidad.5

Es más, el solo suponer que se pueda proponer con viabilidad

de aceptación un exclusivo tipo de pensamiento religioso supone un

concepto de verdad el cual conservara en sí las características clásicas

3Rodolfo STAVENHAGEN, «La cultura popular y la creación intelectual», 1986.

en http://cdigital.uv.mx/bitstream/123456789/2239/2/198657P5.pdf, [22

septiembre de 2017]. 4 Mc. 16, 15. 5Alejandro FRIGERIO, and Hilario WYNARCZYK. «Diversidad no es lo mismo

que pluralismo: cambios en el campo religioso argentino (1985-2000) y lucha

de los evangélicos por sus derechos religiosos», en Sociedade e Estado Vol.

23 No. 2, mayo/agosto 2008. 229.

Page 97: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

95

de ser una, absoluta, inmutable y eterna,6 sería considerado por muchos

como una actitud inadmisible, puesto que:

Olvida [rían] esas voces algo esencial, por ejemplo

lo que dice Russell Shorto en su celebrada crónica del

cartesianismo: que «buena parte de lo que el papa y otros

conservadores religiosos del mundo actual denuncian suena

exactamente igual a las protestas de los críticos

contemporáneos de Descartes» (Shorto, 2009:57). Y cuáles

eras esas denuncias de antaño, sino que las ideas de

Descartes relativizaban el universo cerrado y montado sobre

las verdades absolutas del escolasticismo.7

Y es que es innegable que una visión tal de lo que es la verdad,

aunque completamente alineados con el sentir de la fe, el cual contiene

pretensiones de universalidad, provoca efectos específicos,8 ya que,

por coherencia interna de la misma teoría, definirían a la “misión” en

términos de superación de un discurso defectuoso, o al menos

incompleto, por otro que se considera óptimo. En este tenor de ideas se

hace necesario el posicionamiento en cual se reconozca que la esencia

del ser “discurso es la representación de distintas voces o perspectivas

ideológicas y lo que se denomina «significado real» de un enunciado

viene determinado por el contexto de los otros enunciados y de las otras

voces, cada una con su propia perspectiva ideológica. El hablante o el

escritor reflejan con su lenguaje esta pluralidad de voces”.9

6 Vid. Marquéz MURO, Lógica, Editorial Porrúa, México 1960. 180-816. 7Josep CATALÀ M. «Los estragos de lo real en el fotoperiodismo: por una

superación ética de la óptica» Periodismo en televisión: nuevos horizontes,

nuevas tendencias, 2011. 212-229. 8 Se ha preferido utilizar “específicos”, en aras de evitar que el texto se presente

como un juicio de valor, lo cual, a estas alturas del texto supondría un pre-

juicio 9Anna, CAMPS «Aprender a escribir textos argumentativos: características

dialógicas de la argumentación escrita» Comunicación, lenguaje y

educación vol. 7, año 2, 1995. 51-63.

Page 98: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas en Misso ad gentes Jorge Luis Ortíz Rivera

96

Ahora bien, si se ha de fundamentar teóricamente la Missio ad

Gentes10 no toda reflexión habrá de versar sobre los presupuesto

epistemológicos de una formación para la misión. Se debería tener en

cuenta, además, la perspectiva antropológica, la concepción que la

misma Iglesia tenga de sí al respecto de su razón de ser en el mundo y

el contenido de carácter teológico que ha de considerarse

irrenunciable.11 Sin embargo, no ha de obviarse los problemas

gnoseológicos, críticos y epistemológicos que tal objeto de estudio

supone.

A). Presupuestos gnoseológicos

La labor misionera consiste fundamentalmente en la

transmisión de una serie de proposiciones que se consideran como

infaliblemente verdaderas por acción de la fe, la cual es una virtud

teologal. En otras palabras, los contenidos concretos comunicados por

la misión son verdades cuya certeza está dada por un “hábito infuso”

por Dios que obliga al intelecto, mediante un acto de la voluntad, a la

aceptación de los mismos con un grado de certeza indubitable.

Siendo así las cosas, el problema gnoseológico principal que se

presenta es asegurar que esos contenidos son verdaderos como se

presupone, pues es Dios mismo quien lo ha revelado. En el fondo, ello

implica una petición de principio y un círculo vicioso. Petición de

principio al aseverar la verdad de los contenidos de la fe porque son

revelados por Dios y un círculo vicioso pues, si se cree que lo revelado

por Dios es verdadero, es gracias a la Fe.

Deshacer este intrincado asunto es solo es posible si nos

salimos de los mismos términos del problema, considerando el

10 Más allá de los supuestos bíblicos, teológicos, pastorales, sacramentales,

espirituales, etcétera los cuales han de ser determinados en otro lugar. 11 Estos son los tres puntos que Juan Pablo II proponía como preámbulo a los

trabajos de la III Conferencia General del Episcopado Latinoamericana,

momento en cual se planteaba una nueva evangelización. Cfr Juan Pablo II,

«Discurso en la inauguración de la Tercera Conferencia General del

Episcopado Latinoamericano» I1 - I9, 28 de enero de 1979.

Page 99: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

97

problema más allá de los contenidos de la Fe y de su veracidad misma.

Por ello, lo primero que ha de exigirse en este intento, es demostrar la

legitimidad la aceptación de estas verdades. Ahora bien, “lo que

garantiza esta creencia, como también la de haber recibido por

revelación las verdades absolutas, es que estas no contravienen a

ninguna obligación epistemológica que una ética de las creencias

podría o desearía oponer”.12 En otras palabras, que lo creído no viola

ninguna de las exigencias propias de una teoría de conocimiento

adecuada al objeto propio de la Fe.

Para ello, habría de transitar desde una duda razonable, la cual

arriesgara la hipótesis que sostenga que los datos de la revelación y de

la fe en general no son sólo oraciones sin sentido por no tener referente

alguno, al menos en uno de sus términos, sino que puede ser

considerados como proposiciones enunciativas, es decir posibles de ser

calificadas de verdaderos o falsos. De lo contrario solo serían

proposiciones absurdas.13

Por lo tanto, debe ser posible la descripción de un proceso que

garantice la legitimidad de las proposiciones de la fe, como primera

exigencia gnoseológica, no tanto de la labor misionera en sí, sino de los

contenidos mismos transmitidos por ella. Ahora bien, la fe, como se ha

dicho un poco más arriba, es una virtud teologal. Pero, ahora bien,

¿existe una epistemología que fundamente la legitimidad de las

virtudes? Elizabeth Anscombe14 ha sido una de las principales

promotoras de epistemología de estos fenómenos; sin embargo, Pouivet

afina el problema, aún más, al hacer su propia interpretación de esa

misma teoría. Al parecer de este último, “la carga epistémica se

desplaza de la creencia a las personas, o más bien, a las cualidades de

12Roger, POUIVET. Épistémologie des croyances religieuses. París, Éditions

du Cerf. 2003. 9. Citado por Alejandro PÉREZ en «La racionalidad del

creyente: la propuesta filosófica (y teológica) analítica de Roger Pouivet» en

scientia et Fides, Vol. 3, Número 2, 2015. 13 Cfr. P.F., STRAWSON «On Referring» en Mind Vol. 59, No. 235 (Jul., 1950).

320-344. 14G. ANSCOMBE, «Modern Moral Philosophy», en Philosophy, 33 (124), 1-19.

Page 100: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas en Misso ad gentes Jorge Luis Ortíz Rivera

98

las personas”,15 pues las primeras no han de ser, en su justo sentido,

consideradas como facultades de las cuales haya de esperar poder

justificar un adecuado funcionamiento, sino acción ya realzadas y, por

lo tanto, susceptibles de juicio moral.

De esta manera, la gnoseología de las virtudes de la fe transita

al ámbito moral y ello será lo que garantice la legitimidad de una

creencia. En esta justificación, resulta necesario cumplir con ciertos

requisitos:

(1) Que result [en] de un proceso fiable que no insiste

en las capacidades cognitivas (como lo hace Sosa y Greco),

sino en las disposiciones intelectuales, (2) que el creyente

[sea] virtuoso […] y (3) de un situacionismo cognitivo –según

el cual la persona tiene una capacidad a captar su situación

cognitiva, es decir que el virtuoso logra adoptar la actitud

correcta en su búsqueda de la verdad de la fe.16

En otras palabras, la fundamentación gnoseológica de los

fenómenos religiosos apunta, en los tiempos contemporáneos más a la

verosimilitud que a la veracidad intrínseca de los contenidos de la fe;

ya no tanto a la demostrabilidad lógica, como a la verdad moral del que

la propone. Esto resulta de particular importancia para la

fundamentación que habrá detener un Instituto de Misionología, pues,

en efecto, al ser los contenidos a transmitir en la misión pertenecientes

al ámbito de la fe, la coherencia entre la verdad proclamada y la vida

del que la proclama ha de ser en todo satisfactoria para los

interlocutores.

En conclusión, más que aceptación incondicional basada en la

fuerza argumentativa o incluso en la veracidad real de lo que se quiere

trasmitir, la cognoscibilidad del mismo fenómeno religioso se verá

afectada por este correlato con el ámbito moral, pues “ya no se trata de

15 Alejandro, PÉREZ. «La racionalidad del creyente: la propuesta filosófica ( y

teológica) analítica de Roger Poulvet». Scientiaet fides 3.2 (2015), 214. 16 Idem.

Page 101: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

99

establecer una verdad (lo cual es imposible), sino de aproximársele, de

dar la impresión de ella, y esta impresión será tanto más fuerte”. 17 La

vida diaria ha demostrado la verdad de esta afirmación. El ámbito de

las creencias religiosas suele poseer cierto grado de aceptación o

tolerancia - escucha - en la misma medida en la cual sus promotores

asumen una coherencia de vida con aquello proclamado desde la acción

misionera.

B). Presupuestos críticos

Lo que ha de entenderse por verdad ha pasado por varias etapas

a lo largo de la historia. Así, Kant no duda, criticando la tradición

occidental de la cual es conocedor, en resumir lo que de ella se ha dicho

como la “concordancia del conocimiento con su objeto”. Dicha

definición hunde sus raíces en la teoría aristotélica sobre el problema

de la verdad: “Decir que lo que es, no es o que lo que no es, es, es falso,

y decir que lo que es, es y que lo que no es, no es, es verdadero”.18

Los esfuerzos kantianos por fundamentar la posibilidad del

conocimiento humano hacen frente por al alto índice de contenido

metafísico que esta postura supone. Así, la verdad ha de suponerse

como un adecuar el pensamiento como la realidad. Es por ello que

Vernaux sostiene: “La definición que es clásica en la escuela tomista es

la siguiente: adaequatio rei et intellectus, la conformidad de la

inteligencia con la realidad. Intentaremos demostrar que no se trata sólo

de una definición «nominal», sino que es la definición «real» de la

verdad, y que hay razón de quedarse con ella”.19 Pero todo esto no es

sino síntesis20 de una preocupación patente a lo largo de los primeros

17Tzvetan TODOROV, «Lo verosímil.», Editorial Tiempo Contemporáneo,

Buenos Aires, 1970, en

http://www.periodismo.undav.edu.ar/asignatura_lic/cs230_analisis_del_discu

rso/material/todorov-lo_verosimil.pdf [1 de octubre de 2017]. 18 ARISTÓTELES, Metaphysica, IV, 7, 1011 b 26-27. 19 Roger VERNAUX, Epistemología o Crítica del Conocimiento, Barcelona,

Herder, 1985, 118. 20 Cfr. DÜRING, I. Aristóteles. Exposición e interpretación de su pensamiento,

UNAM, traducción y edición de Bernabé Navarro, México 2005. 386.

Page 102: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas en Misso ad gentes Jorge Luis Ortíz Rivera

100

siglos de la existencia de la filosofía. El problema de fondo radica en el

hecho de poder fundamentar la capacidad humana de conseguir un

conocimiento verdadero.21

Ahora bien, según esta tradición, en la medida que el concepto

se forma al descubrir la esencia de lo conocido, la verdad no puede sino

poseer la notas de eternidad e inmutabilidad y ello derivaría en la

aceptación de la unicidad de la verdad: “Similiter etiam sua cognitio

non concernit aliquod tempus, cum aeternitate mensuretur, quae

abstrahit ab omni tempore, omne tempus continens. Unde relinquitur

quod non sunt plures veritates ab aeterno”.22 Y al ser una y única,

adquiere el carácter de ser absoluta.

Pero ¿qué pasa cuando esta concepción de verdad es asumida

sin cortapisa alguna? La propuesta emanada de tiende a convertirse en

lenguaje unidireccional, hegemónico, absoluto y dogmático. Pero,

como es patente, ello no es, en el fondo, una fundamentación válida del

quehacer misionero. En efecto, aunque es verdad que la misión es una

actividad cuyo “fin propio […] es la evangelización e implantación de

la Iglesia en los pueblos o grupos en que todavía no ha arraigado” y el

medio principal para ello “es la predicación” 23 de un discurso

específico, se ha de tomar en cuenta que ello se realiza en un contexto

determinado.24

De lo anterior se deriva que no se trata de una actividad de

información, entendida ésta en su sentido etimológico de “meter en una

forma” específica sin adecuaciones pertinentes. En este sentido, ha de

quedar clara, como quedó demostrado en el apartado anterior, la

21 Vid. LOBATO, De la verdad, «Introducción» en Tomás de Aquino,

Opúsculos y cuestiones selectas I, Filosofía (1), edición bilingüe, BAC,

Madrid 2001, 192. 22 De Ver, q. 1 a. 5 co [De, la misma manera, su conocimiento no incluye

algún tiempo, cuando se mide por la eternidad, que se abstrae de todo tiempo

y contiene todo tiempo. De donde resta que no son muchas las verdades desde

la eternidad (traducción personal)], 23 LG, 6. 24 Idem.

Page 103: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

101

importancia que reviste el propio estilo de vida de aquél que predica,25

lo cual ha de acompañar a la trasmisión de carácter oral y escrito del

mensaje evangélico. Debe, pues, quedar clara una diferencia

fundamental. No es lo mismo texto que discurso. El texto debe expresar

un contenido verdadero, pero el discurso no puede asumirse, de inicio,

con la misma fuerza y pretensión. Primeramente, es importante hacer

notar que:

Texte est un objet linguistique-historique qui établit

des rapports avec soi même et l’exteriorité. C’est à dire: le

texte est à la fois un objet empirique, doué de commencement,

développement et fin, et un objet discursif caractérisé

parl1’incompletude. Il est donc en rapport avec son

extériorité constitutive, l’interdiscours, qui représente la

mémoire du dire. C’est à partir de cette historicité du texte

qu’il est possible de travailler et d’interpréter la trame de

sens qui s’y établit. Dans ce sens, texte est une unité d’analyse

affectée par ses conditions de production.26

En este sentido, es necesario entender que las pretensiones de

veracidad difieren más en el discurso que en el texto. Esto es, el texto,

en este caso, bíblico, ha de ser fielmente transmitido. En ello no puede

haber desviaciones; es decir, no se puede hacer decir a la Sagrada

Escritura, por ejemplo, lo que no dice o callar lo que sí dice; pero se ha

25 AG, 11. 26 Orlandi, Eni PUCCINELLI. «Texto e discurso», en Organon, vol. 9, No. 23,

1995. 111. [El texto es un objeto lingüístico-histórico que establece relaciones

con el yo y la exterioridad. Es decir: el texto es al mismo tiempo un objeto

empírico, dotado de inicio, de desarrollo y de fin, y un objeto discursivo

caracterizado por el carácter incompleto. Por tanto, está relacionada con su

exterioridad constitutiva, interdiscursos, que representa el recuerdo de decir.

Es de esta historicidad del texto que es posible trabajar e interpretar el marco

de significado quien se estableció allí. En este sentido, el texto es una unidad

de análisis afectada por sus condiciones de producción. (Traducción

personal)].

Page 104: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas en Misso ad gentes Jorge Luis Ortíz Rivera

102

de poner especial atención en el discurso que subyace en la trasmisión

de él.

Ello encuentra una explicación lógica si se considera la

situación actual con respecto a la concepción de verdad. En efecto,

nunca antes como en el siglo XX la concepción única de verdad había

estado cuestionada con tanta fuerza. Los grandes regímenes totalitarios

habían conseguido fuerza y mortalidad precisamente sustentado cada

uno de ellos ser poseedor de una verdad absoluta. Así la humanidad se

enfrenta a la necesidad de redefinir la misma.

Ello trae como consecuencia la fragmentación del concepto de

verdad en sentido fuerte y conformación de un concepto débil del

mismo.

Ahora bien, si por un lado resulta cierto que la

fragmentación del conocimiento es la nota dominante en el

panorama epistemológico contemporáneo, también resulta

cierto que, como consecuencia de este dato, se precisa la

búsqueda de un principio a través del cual se pueda dar

cuenta de la unidad de las ciencias en sus diferentes

direcciones, porque, desde nuestro punto de vista, no basta

con reconocer la dispersión del conocimiento.27

Sin embargo, este principio de unificación no ha de ser

obtenido a prioiri, pues se estaría imponiendo como válido y verdadero,

sino como resultado de un proceso que partiendo fenoménicamente de

cómo ha sido concebida la verdad para, desde ahí, constatar cómo se ha

transitado del concepto duro a uno en el cual se considera la misma

verdad como constructo de las aportaciones de una comunidad, pues

“no es un sujeto en solitario quien consigue la verdad, se requiere

además el concurso sociológico del otro, es decir, del semejante. La

verdad no es una empresa privada, es una actividad comunal, una

27 Roberto Andrés GONZÁLEZ, «Integración epistémica y humanismo: un

acercamiento a la fenomenología dialéctica de Eduardo Nicol», en

THÉMATA. Revista de Filosofía, NO. 45, 2012. 194.

Page 105: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

103

hazaña que se consigue mediante una acción comunicativa”.28 Lo cual

resulta especialmente válido para las ciencias humanas.

Sin embargo, hasta el mismo conocimiento científico ha

suavizado sus pretensiones de veracidad, pues aunque ésta se

fundamente en las relaciones matemáticamente expresables de la

realidad, ha permitido en los últimos años que las tesis e hipótesis que

la generan incluyan aquéllas, las cuales incluso han sido demostradas

como falsas; pero, contrariamente a la tradición moderna y medieval,

son consideradas como productoras de conocimiento pues “

El valor epistemológico de una proposición sólo

puede ser el resultado de una alternativa. La verdad primitiva

no posee opción, es un hecho. Nicol mismo, indirectamente,

así lo ha sugerido cuando afirma contrastantemente: ‘El

científico puede ser engañoso. Pero la relación pura con el

ser siempre es verdadera, aunque resulte errónea [...]. El

error es una aproximación fallida, y tiene la misma intención

que la verdad’ ”29

Pero ya se apunta en este fragmento algo de vital importancia

para lo aquí tratado. No se trata de una fragmentación anárquica de los

contenidos de la verdad, sino que lleva como meta el descubrimiento

de lo que ha de ser considera, metodológicamente, como la única

verdad indubitable, la cual, contrario a lo que Descartes proponía, no

se encuentra en la soledad del yo etéreo, sino en la constatación

innegable dela presencia del ser humano ante el ser. Esta evidencia

apofántica y ahistórica es el fundamento de tanto de la verdad como

28 Rush GONZÁLEZ. «Verdad de hecho y verdad de teoría: acerca del sentido

de la verdad y los principios de la ciencia en Eduardo Nicol», en Ciencia ergo

sum, Vol. 12, No. 3 Noviembre 2005- febrero 2006. 256. 29 Rush GONZÁLEZ. «Verdad de hecho y verdad de teoría: acerca del sentido

de la verdad y los principios de la ciencia en Eduardo Nicol», en Ciencia ergo

sum, Vol. 12, No. 3 Noviembre 2005- febrero 2006. 258. La cita dentro a la

que hace referencia el fragmento se refiere a Eduardo NICOL, La reforma de

la filosofía, FCE, México 1980. 229.

Page 106: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas en Misso ad gentes Jorge Luis Ortíz Rivera

104

grupo y de la verdad científica y ello radica en “el hecho de la

omnipresencia del ser; el de la temporalidad de lo real; el de la

comunidad de aquella presencia; el de la comunidad de la propia razón

y la racionalidad de lo real”30

Lo que haya de ser una base epistemológica de la actividad

misionera, por lo tanto, ha de considerar necesariamente que ésta se

trata, en el fondo de una labor que pretende acercar un discurso

determinado a una comunidad que no lo ha recibido y que, por lo

mismo, no maneja las mismas categorías racionales, lingüísticas,

simbólicas. Se trata, en otras palabras, de indagar las condiciones que

posibiliten la adecuación de dos cosmovisiones y permitan la adecuada

traducción entre las mismas. A saber, de la tradición cristiana y aquella

a la cual se dirige la labor ad gentes.

Ahora bien, en todo proceso de traducción existe una serie de

elementos que son ciegos a la percepción del otro. Ello es así, pues en

palabras de Marshall,31 en el lenguaje existe una dimensión elíptica

conformadas por dos centros, uno es el del conjunto de signo

característicos de un grupo, su propia lengua, la cual puede ser

traducida a otro conjunto diferente; pero, además, se encuentra el centro

al rededor del cual giran los elementos axiológicos y “cosmovionales”

propios, los cuales son intraducibles. Es sobre este segundo centro

sobre el cual han de versar los esfuerzos de fundamentación

epistemológica de la missio ad gentes, más que en el carácter veritativo

del primer centro.

Siguiendo esa línea de pensamiento, la aparente

“incomunicación” axiológica en la cual parece hundir la propuesta de

Urban ha de ser superada. Coseriu supone que tal tesis adolece de ser

una visión simplificada que no apunta directamente al problema, pues

“a la insuficiente sistematización de la experiencia acerca de los

30 Eduardo NICOL, Crítica de la razón simbólica. La revolución de la Filosofía,

FCE, México 2002. 72. 31 Cfr. Marshall, URBAN WILBUR. Lenguaje y Realidad: La filosofía del

lenguaje y los principios del simbolismo, FCE, México 1952. 162 -164.

Page 107: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

105

entornos se deberá la fragilidad de las teorías aludidas. Ellas suelen

destacar el carácter “elíptico” del lenguaje. Pero elíptico ¿con respecto

a qué?” 32 Se pregunta el mismo autor. Se trata, pues, de hacer patentes

la diversidad de contextos idiomáticos, verbales y extraverbales,33 los

cuales inducen a plantear una forma de racionalidad propia que permita

la comprensión entre ellos.

C). Presupuestos epistemológicos

Todo ello da como resultado la necesidad de plantear y

explicitar un tipo de racionalidad conveniente con lo expuesto hasta

este momento, la cual, resumiendo lo dicho ha de ser capaz de favorecer

el diálogo intercultural, propiciando, al menos de entrada, un concepto

de verdad en sentido débil que permita el primer contacto entre aquellos

que poseen un vivencia determinada de relación con la divinidad y

aquellos que, como misioneros, llegan a trasmitir otra. De otra forma,

esta labor sólo podría llevarse a cabo impositivamente.

Pero es así que el mensaje cristiano, debe ser propagado ante

todo como una forma de promoción humana:

Es necesario tener en cuenta estas circunstancias

para comprender los numerosos ensayos teológicos

publicados en estos últimos años sobre estas cuestiones. Si

revisten un carácter científico, no son, por ello, en primer

lugar, como los frutos de una investigación teórica; no se

presentan, ante todo, como una teología «escrita». Ellos

quieren permanecer en contacto estrecho con la vida

cotidiana de las poblaciones víctimas de la miseria y con la

tarea que la Iglesia debe llevar a cabo en esta coyuntura. Su

intención es la de hacer oír ampliamente el grito del hermano

pobre y sufriente, la queja que suscitan el hambre, las

32 Eugenio, COSERIU, Lingüística del texto. Introducción a la hermenéutica

del sentido, Arco/Libros, Madrid 2007. 309. 33J. M. HERNÁNDEZ TERRES, La elipsis en la teoría gramitical, Departamento

de lingüística general y crítica literaria, Mugica 1984.

Page 108: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas en Misso ad gentes Jorge Luis Ortíz Rivera

106

enfermedades, la explotación injusta, practicada con espíritu

de lucro, el exilio forzado, la opresión.34

Las condiciones de posibilidad de un tipo de racionalidad ad

doc para estos fines encuentra su fundamento teórico en el pensar

hermenéutico el cual permite que la discusión se traslade de la

consideración de las innegables diferencias existentes entre las diversas

cosmovisiones al reconocimiento mutuo de convergencias que

permitan, por medio del lenguaje, un ir y venir de ideas fundamentadas

en el diálogo.

La idea de la “razón hermenéutica” entraña una

noción de diálogo que supone una caracterización

pragmática del mismo. Donde hay comunicación existe

pragmática compartida y un lenguaje viable. Entendido de

este modo, la mirada sobre el lenguaje deja de considerarse

desde la sintaxis y se convierte en una reflexión acerca de la

actuación lingüística del hombre, la cual, dada la inevitable

multiplicidad de culturas, debe ser diversa. Por ello, tal

perspectiva supone sumergirse en las diversidades y huir de

las generalidades. Desde ese punto de vista, el estudio del

lenguaje coloca en primer plano al sujeto que habla en una

relación dialógica. Por lo tanto, resulta ficticia la distinción

entre lenguaje y mundo, y entre pensamiento y lenguaje.35

De esta manera el pensar humano logra no únicamente un

propósito cognoscitivo y un dominio instrumental, lo cual es de todo

tipo necesaria en un pensar dogmático o científico instrumental, sino

34 Comisión Teológica Internacional, «Promoción humana y salvación

cristina», en Documenta (1969-1985) (Città del Vaticano [Libreria Editrice

Vaticana] 1988 160-202. El texto de las relaciones previas al documento puede

verse en Comisión Teológica Internacional, Teología de la liberación (Madrid,

BAC, 1978). 35 Escuela de Filosofía, «Fundamentación» en Plan de Estudios de la

Licenciatura en Filosofía, Universidad Intercontinental, México 2008, 2.

Page 109: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

107

un reconocimiento de la validez inherente en los diferentes discursos

presentes en la historia de la humanidad.

Ello supone necesariamente hacer patente la voluntad de una

racionalidad, considerada más como interpretativa que explicativa, la

cual entienda la realidad como un texto que se transmite. Así, desde

perspectiva hermenéutica el mundo debe ser considerado, no como algo

dado, sino como ámbito de significación y, en ese sentido se encuentra

sujeto a múltiples interpretaciones, porque no existe un solo sentido de

concebir la realidad. Por tanto, más allá del sentido superficial, en cual

radican las diferencias interculturales, se debe rastrear el sentido de

toda realidad cultural desde la cual y a la cual se refiere la labor

misionera. Ello supone que “la hermenéutica, pues, en cierta manera,

descontextualiza para recontextualizar, llega a la contextualización

después de una labor elucidatoria y hasta analítica”.36

Entonces, “el objetivo de la hermenéutica es la comprensión

del sentido a través de la interpretación, que tiene como medio la

contextualización”. 37 De esta manera, al poner el texto en su contexto

y aplicarla a una situación concreta actual, la transmisión de los

contenidos de la fe rehúyen de una perspectiva aséptica a una

comprensión vivencial, esta conclusión se encuentra ya contenida en

las palabras de Gadamer, quien entiende la comprensión como la

“facultad fundamental de la persona que caracteriza su convivencia con

los demás y actúa específicamente por la vía del lenguaje y del

diálogo”.38

La comprensión sucede y cumple su cometido cuando en el

devenir histórico se plantea un diálogo en el cual la estructura conjunta

del círculo hermenéutico, precomprensión y prejuicio, proyección,

36 Mauricio BEUCHOT, Perfiles esenciales de la hermenéutica, México,

Universidad Nacional Autónoma de México, 1997, 8. 37 Escuela de Filosofía, «Fundamentación» en Plan de Estudios de la

Licenciatura en Filosofía, Universidad Intercontinental, México 2008, 4. 38 Gadamer H-G, Verdad y método II, 319.

Page 110: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Problemas en Misso ad gentes Jorge Luis Ortíz Rivera

108

interpretación, “distancia en el tiempo”, conciencia de la historia

efectual, diálogo, “fusión de horizontes” y aplicación.39

Conclusión

Todo lo expuesto en el presente trabajo no constituye sino un

delineado muy austero de aquello que supondría fundamentar

epistemológicamente la misio ad gentes. Cada uno de los rubros, a

saber, gnoseológicos, críticos y epistemológicos- tomado éste concepto

en sentido estricto- deberán ser profundizados en subsecuentes

consideraciones, las cuales han de tomar en cuenta la misma naturaleza

de la racionalidad propuesta en estas páginas y por ello han de surgir

producto de una acción y reflexión dialógica la cual ha de distinguir el

quehacer académico, pedagógico, educativo y formativo de un Instituto

de Misionología.

39 Gadamer plantea cuatro mecanismos de validación de la comprensión

hermenéutica:

1. La objetividad resulta de la convalidación que las opiniones previas

van obteniendo a lo largo de su elaboración.

2. La distancia en el tiempo, que elimina prejuicios inútiles y deja

surgir otros que la comprensión guía correctamente.

3. La figura de la distancia en el tiempo adquiere forma en la tradición

ejemplificada en la figura de lo clásico.

4. La apertura opera como criterio de legitimidad de la pregunta.

Page 111: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Estudio crítico y traducción del Opúsculo Sobre los principios de la naturaleza al Hermano Silvestre de Tomás de Aquino

Luis Pascal Pellat Thomé 1

1. Biografía

La vida de santo Tomás de Aquino, uno de los pensadores más

importantes de la Edad Media, es dedicada íntegramente al estudio, a

la redacción de numerosos escritos y a la docencia. Santo Tomás nace

alrededor de 1224-1225 en el castillo de Roccasecca, cerca de Aquino,

en el reino de Nápoles. Landolfo, su padre, pertenece a una familia

noble de origen lombardo, y es el señor de Roccasecca. Su madre

Teodora, hija de los condes de Chieti, tuvo al menos nueve hijos.

Tomás es el menor de los varones. Al cumplir cinco años, Tomás

ingresa como oblato en el monasterio benedictino de Montecassino

para hacer sus primeros estudios.

En 1239, alrededor de los quince años, es enviado al monasterio

benedictino de San Demetrio en Nápoles. En esta ciudad, además de

proseguir sus estudios, conoce a algunos frailes dominicos, entre ellos,

1 Alumno de doctorado canónico en Filosofia de la Facultad de Filosofia,

UPM.

Page 112: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

110

a Juan de San Giuliano, de quien se hace amigo. Este hecho es decisivo

en su vocación dominica. Así, a principios de 1244, poco después de la

muerte de su padre, Tomás ingresa en la Orden de santo Domingo. En

ella, el estudio tiene un papel fundamental y un carácter obligatorio

pues su carisma es Veritas y su misión, conseguir la salvación de las

almas a través de la predicación.

Su deseo de entrar en la Orden de Predicadores no gusta a su

familia, que busca que Tomás sea abad de la abadía benedictina de

Montecassino. Además, la Orden fundada por Domingo de Guzmán

(1170-1221), veinticuatro años antes, cuenta aún con poco prestigio e

influencia. Por eso, Tomás es recluido por sus hermanos y su madre en

el castillo familiar de Montesangiovanni durante casi año y medio. Su

vocación dominica no hizo sino reafirmarse. Una vez libre, en 1246,

Tomás va a París. Allí permanece de 1246 a 1248. Continúa sus

estudios de filosofía en la facultad de Artes de la Universidad de París

y empieza los de Teología en el convento de Saint-Jacques. Estudia

bajo el magisterio de Alberto Magno, a quien acompaña a Colonia en

1248. En Colonia sigue asistiendo a los cursos de Alberto Magno y se

inicia como profesor. En 1252, por orden del maestro general de la

orden y recomendado por Alberto Magno, Tomás de Aquino ocupa una

de las cátedras de Teología de la Universidad de París. Cuando llega a

esta máxima casa de estudios, se encuentra con un ambiente de

agitación y tensión entre profesores seculares y regulares. El principal

opositor a los mendicantes es Guillermo de Saint-Amour. El conflicto

finaliza por la bula del Papa Alejandro IV en 1256, la cual condena a

Saint-Amour al destierro. Así, en 1257, el dominico Tomás de Aquino

y el franciscano Buenaventura (1221-1224), entre otros frailes

regulares, se incorporan al claustro de la Universidad, aunque ambos

ya enseñaban desde hacía tiempo en su cátedra.

Tomás permanece enseñando en París durante cuatro años.

Durante estos años escribe el Comentario a las Sentencias de Pedro

Lombardo e importantes opúsculos: Sobre el ente y la esencia, que

contiene lo esencial de su metafísica (1250-1256) y Sobre los principios

de la naturaleza (1255), en el cual expone su cosmología. Escribe

también las Cuestiones disputadas sobre la verdad (1256-59) donde se

Page 113: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

111

encuentran sus principales tesis sobre la definición de la verdad y su

filosofía del conocimiento. Además, comienza la redacción de la Suma

contra los gentiles a petición del dominico Raimundo de Peñafort para

ayudar a los frailes a defender la fe católica frente a las creencias

musulmanas.

En 1259, Tomás regresa a Nápoles acompañado de Reginaldo

de Piperno. Es predicador general y profesor. En 1261, es enviado a

Orvieto en cuanto lector de la orden. El Papa Urbano IV le hace varios

encargos: (1) La redacción de una Glosa continua de los cuatro

evangelios, la Catena aurea. (2) La redacción de un opúsculo titulado

Contra los errores de los griegos en el que examina las cuatro grandes

cuestiones que habían provocado el cisma entre las iglesias de Oriente

y Occidente: la procesión del Espíritu Santo, el primado del Papa, la

utilización del pan ázimo y la existencia del purgatorio. (3) La

elaboración de himnos eucarísticos para la liturgia de Corpus Christi.

Además, continúa la redacción la Suma contra los gentiles que termina

en 1264. Escribe varios opúsculos y comentarios, como la Exposición

al libro sobre los nombres divinos del seudo Dionisio.

En 1265, tras cuatro años de magisterio en Orvieto, recibe el

encargo de abrir un estudio provincial en el convento de Santa Sabina

en Roma. Como maestro regente en Teología, introduce en el sistema

de estudios las cuestiones disputadas. Se conservan muchas de ellas

como las Cuestiones disputadas sobre el mal (1266-1267), que es una

respuesta al maniqueísmo cátaro. Por otro lado, las deficiencias que

encuentra en las Sentencias de Pedro Lombardo, obra clásica para la

enseñanza de la Teología, lo motivan a escribir una nueva obra, más

sistemática, la Suma teológica, que comienza a redactar en 1265. Es su

magna obra. Trabaja en ella hasta el final de su vida, pero no la termina.

En 1267, es trasladado a Viterbo, residencia de la corte pontificia, por

el capítulo general de su Orden. Allí, cuenta con la ayuda de Guillermo

de Moerbeke, quien traduce directamente del griego al latín las obras

de Aristóteles, sin la mediación de la traducción árabe, pues Europa

conoce originariamente a Aristóteles por los pensadores y

comentadores árabes.

Page 114: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

112

En 1269, Tomás de Aquino regresa a la Universidad de París,

donde siguen los conflictos entre el clero secular y el regular. Los

maestros seculares, ahora representados por Gerardo de Abbeville, se

oponen a la presencia de las órdenes mendicantes en la Universidad.

Tomás de Aquino les responde, en 1269, con La perfección de la vida

espiritual y Contra los que retraen para su defensa.

Además, surge en la Universidad de París un nuevo conflicto

provocado por la aparición y difusión de las doctrinas averroístas de

Singer de Brabante, opuestas a la escolástica clásica. Para Averroes,

comentador árabe de las obras de Aristóteles, la filosofía es un saber

superior a la teología, el alma personal es mortal, el entendimiento

agente es uno para todos y la creación es eterna. Estas tesis son

aceptadas por el averroísmo latino de Singer de Brabante, quien

sostiene además la tesis de la doble verdad: una de razón y otra de fe.

Frente a él, Tomás de Aquino acude directamente a los textos de

Aristóteles y muestra las veces en que son mal interpretados por

Averroes. Así, se enfrenta a la tesis averroísta de la existencia de un

único intelecto para todos los hombres en su escrito Sobre la unidad del

entendimiento contra los averroístas (1270) y establece claramente una

relación armónica entre la fe y la razón: dos vías para descubrir la

verdad, la cual es una sola y no puede contradecirse a sí misma.

Asimismo, el Aquinate lucha a favor del realismo de la filosofía

de Aristóteles frente a la oposición de profesores de corriente platónica.

Nace una pugna entre la tradición agustiniana, defendida por los

franciscanos, y el aristotelismo de los dominicos. Durante esta segunda

estancia en París de tres años y medio, Tomás es muy productivo.

Además de continuar dictando la Suma teológica, elabora sus

comentarios a toda la obra de Aristóteles.

En 1272, Tomás de Aquino abandona París y retorna a Nápoles

para ser regente de Teología de la Universidad de esa ciudad. En 1273,

tras una visión mística, Tomás interrumpe definitivamente su actividad

como escritor, considerando que su obra no es más que paja frente a la

grandeza inefable del misterio de Dios. Poco después, en 1274, muere

en la abadía cisterciense de Fossanova, en camino al II Concilio

ecuménico de Lyon, convocado por el Papa Gregorio X.

Page 115: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

113

2. Contextualización histórica, cultural y filosófica

Tomás de Aquino (s. XIII) vive durante la Edad Media, periodo

histórico que suele situarse entre la caída de Roma, capital del imperio

romano, y el descubrimiento de América. El siglo XIII, se caracteriza

por un fuerte desarrollo económico e intelectual. El desarrollo de la

agricultura debido a nuevas tecnologías como el molino hidráulico, el

de viento, el arado de ruedas, nuevos sistemas de tiro para bueyes y

caballos, la brújula, el torno de hilar, la aplicación de la energía

hidráulica para forjas y serrerías, la pólvora, relojes mecánicos,

manufactura del papel, etc. Gracias a estas nuevas tecnologías, permite

el desarrollo de la agricultura que, a su vez, provoca un crecimiento

demográfico y, además, permite que parte de la población se dedique a

otros trabajos, surgiendo así artesanos y comerciantes.

La sociedad medieval se organiza conforme al régimen feudal.

Sin embargo, el aumento de la producción y del comercio se acompaña

del desarrollo de las ciudades. Sus habitantes son burgueses y artesanos.

Los artesanos trabajan en talleres con maestros, oficiales y aprendices;

se agrupan por gremios. Los comerciantes son intermediarios que

organizan el intercambio de bienes y servicios. La fe católica y a la

Iglesia son el centro de la organización social. Políticamente, el

régimen político es monárquico. En el siglo XIII, las relaciones entre

monarcas son mediadas por el papado cuya autoridad espiritual, moral

y también terrenal rige ultimadamente la política.

Espiritualmente, en la Edad Media, emergen los monasterios

como los principales centros espirituales de cultura y de conocimiento.

Principalmente copistas, conservan y difunden los escritos bíblicos y el

acervo de la sabiduría antigua. En el siglo XII, además de las órdenes

monásticas, aparecen las órdenes mendicantes: principalmente

franciscanos y dominicos, a los cuales pertenece Tomás de Aquino.

Además, en las ciudades, empieza la fundación de universidades

pontificias y reales, las cuales son, en el siglo XIII, los principales

centros de estudio. Toman gran renombre las universidades de París,

Boloña, Oxford, Salamanca y Colonia, para citar algunas de las más

importantes. La universidad de París destaca en Teología. En ella

imparte clases Tomás de Aquino, aunque también en Colonia y en otras

Page 116: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

114

universidades italianas, según las necesidades de su orden religiosa y

de la iglesia. El latín sigue siendo la lengua culta de todo Occidente.

Por lo que se refiere al contexto filosófico, existe un diálogo

intenso entre pensadores principalmente árabes, judíos y cristianos. En

efecto, a través de los pensadores árabes, Occidente, principalmente

neoplatónico, se ve desafiado por el descubrimiento de la filosofía de

Aristóteles que los pensadores árabes y judíos estudian, comentan,

trabajan y comunican. En efecto, hasta el siglo XIII el mundo cristiano

sólo conoce las obras de lógica de Aristóteles. Sin embargo, sus obras

propiamente filosóficas son conservadas y traducidas al árabe en la

escuela de Cosroes (Persia) entre los siglos III y IV, al cerrarse la

Academia platónica en 529 d.C. A partir de los siglos IX y X, tanto en

el Masrek, Califato de Bagdad, como en el Magreb, Califato de

Córdoba, Aristóteles es estudiado y comentado por el Jadiz, uno de los

cuatro componentes de la filosofía árabe musulmana que se concentra

en el conocimiento de la filosofía helénica2.

El hecho relevante está en que, en el mundo cristiano, la

filosofía de la naturaleza de Aristóteles comienza a ser conocida con

entusiasmo e interés en las universidades europeas durante el siglo XIII.

Los textos aristotélicos vienen acompañados de los Comentarios de

Averroes del Califato de Córdoba. En menos de quince años, la mayor

parte de la obra de Averroes es conocida por la mayor parte de los

estudiosos españoles, italianos y franceses. A lo largo del mismo siglo

sus teorías son expuestas en los principales centros de cultura europeos.

El aristotelismo de Averroes se combina con el neoplatonismo de

Avicena. Los principales pensadores islámicos que Tomás de Aquino

conoce y estudia son Avicena (980-1037), de quien toma la tan

significativa distinción entre esencia y existencia, y Averroes (1126-

1198) a quien nombra el Comentador de la obra de Aristóteles. Al

parecer, por algunas contradicciones que encuentra en los textos

aristotélicos traducidos del árabe al latín, el Aquinate va a optar por leer

y comentar los textos aristotélicos traducidos directamente del griego

2 Los otros tres son el Fiqh (derecho), el Kalan (teología natural y

ciencias naturales) y el Suní (la religión islámica).

Page 117: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

115

por Guillermo de Moebecke, dominico también. Como descubre

errores, considera a veces al Comentador como un Traidor del

pensamiento genuino de Aristóteles. En suma, un entorno caracterizado

por la efervescencia del pensamiento filosófico-teológico es claramente

parte del contexto en el que vive Tomás de Aquino.

El Aquinate es teólogo antes que filósofo. Consigue

fundamentar y defender racionalmente la credibilidad de los artículos

de la fe católica. Su formación filosófica es sólida gracias a su maestro

Alberto Magno, dominico también. Por él, se inicia en el estudio de

Aristóteles a quien terminará conociendo profundamente por su estudio

personal. Encuentra en Aristóteles la herramienta filosófica para la

explicitación más profunda del misterio revelado en Jesucristo.

En sus escritos, Tomás de Aquino se refiere a Aristóteles como

el Filósofo, es decir, aquel que alcanza el conocimiento de la verdad a

la luz de la razón natural. En un inicio, los estatutos de 1210 de la

universidad de París prohíben la enseñanza de la obra de Aristóteles –

excepto las obras de lógica (es decir, el Organon)– por considerarla

peligrosa para la fe. El obispo de París prohíbe también, en varias

ocasiones (1240, 1270 y 1277), las tesis aristotélicas. Sin embargo,

Tomás de Aquino descubre en las obras de Aristóteles, un

conocimiento penetrante, verdadero y ordenado de los principios

físicos y metafísicos indispensables para una teología sana y profunda.

La teología de Tomás de Aquino acaba convirtiéndose pronto en el

pensamiento oficial de la Iglesia.

El Opúsculo Sobre los principios de la naturaleza es de los

pocos escritos puramente filosóficos del Aquinate. Siguiendo de cerca

la Física y la Metafísica de Aristóteles, este corto tratado es una

explicación filosófica del mundo natural y sus principios, es decir, de

la realidad en movimiento, no según la construcción de hipótesis

científicas a comprobar, sino conforme al descubrimiento filosófico de

los principios mismos de la realidad natural.

Page 118: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

116

3. Presentación del Opúsculo Sobre los principios de la

naturaleza

El Opúsculo Sobre los Principios de la Naturaleza es una de

las primeras obras de Santo Tomás de Aquino, redactada alrededor de

1254, aproximadamente a sus 30 años, en la universidad de París. Se

clasifica como un opúsculo. Un opúsculo es un término que procede del

vocablo latino opusculum, que es el diminutivo de opus, que puede

traducirse como “obra corta”. Un opúsculo es entonces un escrito que

tiene una extensión reducida. Así, en la obra de Tomás de Aquino, un

opúsculo es un corto tratado filosófico o teológico.

En particular, este opúsculo está dirigido al hermano dominico

Silvestre, hoy desconocido, dos interpretaciones con respecto a este

detalle subsisten: o bien este opúsculo es una respuesta explicativa a las

interrogaciones y preguntas que le dirige fray Silvestre; o bien es un

escrito o un resumen ordenado de las principales cuestiones de la

filosofía de la naturaleza estudiadas en la universidad, que le dedica,

por estima, a este fraile.

Además, este opúsculo es claramente y exclusivamente una

obra filosófica. No hay duda sobre su autenticidad. Aquí, el Aquinate

rescata, en una bien articulada síntesis, las tesis centrales de la filosofía

de la naturaleza de Aristóteles, basándose en los dos primeros libros de

la Física y de algunos capítulos del libro quinto de la Metafísica. Sus

otras fuentes, éstas secundarias, son la Física de Avicena y los

Comentarios de Averroes a la Física y a la Metafísica de Aristóteles.

Probablemente también son fuentes los cursos que recibe de Alberto

Magno, las síntesis de lógica y particularmente el De divisione de

Boecio.

En efecto, Tomás de Aquino adopta deliberadamente la

filosofía de la naturaleza aristotélica por su consistencia filosófica y su

conformidad a la realidad. Ambos factores no son sólo útiles, sino

también necesarios para la teología. La física del Estagirita forma lo

esencial de la filosofía de la naturaleza de Tomás de Aquino. Éste

escrito no es un acontecimiento intelectual aislado, sino que pertenece

Page 119: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

117

a un conjunto de investigaciones filosóficas sobre la naturaleza

extraordinariamente vivo y fecundo en el siglo XIII.

Por otra parte, como lo evidencia el título, se trata de exponer

y analizar los principios constitutivos de la naturaleza, a saber, de las

realidades en movimiento. La filosofía de la naturaleza se remonta a

descubrir y explicitar los principios de los entes naturales para explicar

ordenadamente la realidad. Tomás de Aquino se detiene sobre el estatus

ontológico y el epistemológico de los entes naturales. La filosofía de la

naturaleza de Tomás de Aquino es una cosmología, pues estudia el

orden del universo. Su objeto es el ente natural en cuanto está en

movimiento. Éste se descubre compuesto de tres principios estáticos

(materia y forma y privación) y de dos principios dinámicos (eficiencia

y finalidad).

Tomás de Aquino opta por la profundidad filosófica del

hilemorfismo aristotélico. Dentro de este marco, la noción de materia

tiene una cierta connotación metafísica. En efecto, la materialidad

equivale a una característica ontológica constitutiva y distintiva de

todas las creaturas con respecto al Dios creador. La esencia de la

materia, a saber, ser potencialidad pura, es universal, pues es la misma

para cualquier substancia natural. Por otra parte, con el fin de explicar

la generación evidentemente constatable en la naturaleza, se sirve

también de la potencialidad de la materia. En este contexto, su

perspectiva es principalmente física.

El Aquinate comienza haciendo una distinción entre dos

significados de materia. En términos generales, la materia es lo que está

en potencia con respecto a ser o algo accidental o algo sustancial.

Hablando con propiedad, la materia es lo que está en potencia con

respecto al ser sustancial solamente. En otras palabras, la materia es

exclusivamente un ser en potencia, sin forma alguna. Por esta distinción

propia al hilemorfismo aristotélico, Tomás de Aquino tiene la intención

de establecer la noción correcta de la materia como principio de la

naturaleza, independientemente de la actividad fabricadora. Mientras

que la materia se caracteriza por la incompletitud ontológica y su

dependencia existencial sobre la forma, toda substancia natural posee

un ser completo en sí y, aunque sea material, no es puramente materia.

Page 120: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

118

Así, siguiendo a Aristóteles, Tomás de Aquino logra explicitar lo que

es la materia en su sentido más adecuado con la realidad natural. La

materia, junto con la forma y la privación, son los principios intrínsecos

necesarios para la generación. Trata de explicar cómo se relacionan

respectivamente entre ellos y con los principios extrínsecos: la causa

eficiente y la causa final. Además, distingue los principios, las causas

y los elementos que componen a los entes naturales.

En cuanto a la materia y la privación, Aquino comenta que,

mientras que la materia existe en potencia, la privación es la ausencia

de forma. En otras palabras, materia y privación difieren según la razón,

pero su fundamento real es el mismo. De hecho, la privación es la

propiedad de la materia. La facultad de filosofía de París no era

partidaria del hilemorfismo universal. Entonces, el Aquinate, al

respaldar coherentemente la tesis de la potencialidad de la materia

prima universal y al negarse a atribuir a la materia prima alguna

potencialidad activa, defiende el hilemorfismo y consigue refutar las

posiciones filosóficas que distinguían la noción física de la noción

metafísica de la materia, sostenidas por ciertas tradiciones teológicas

presentes en la universidad de París.

Por otra parte, en el Opúsculo Sobre los Principios de la

Naturaleza, Tomás de Aquino se ve en la necesidad de definir

claramente el significado de principio, causa y elemento, porque se

usan a veces indistintamente en el lenguaje. El elemento es lo que

constituye el ente natural en primer lugar y le es únicamente intrínseco;

son la tierra, el fuego, el aire y el agua. La causa es la que produce el

ser de una cosa y puede estar en la cosa, como la materia y la forma, o

fuera, como la causa eficiente y la final. Por último, principio denota el

primero en un orden, pudiendo no ser causa; el punto de partida local

del movimiento es su principio, pero no es su causa.

El texto está dividido en seis capítulos: En el primer capítulo,

analiza el ente natural como un ser compuesto de potencia y acto, de

substancia y accidentes, de materia y forma. Presenta dos clases de

substratos que son principios en los cuales acontece el cambio: la

materia y el sujeto. A su vez, la forma accidental y la substancial los

actualizan al ente natural en el ser o en el modo de ser. Entonces, la

Page 121: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

119

generación puede ser o sustancial o accidental. Pero la generación es

también un paso del no-ente, entendido como privación, al ente. Así

explica la incorporación de la privación como un tercer principio

intrínseco de la naturaleza.

El segundo capítulo está dedicado a presentar a cada uno de los

tres principios encontrados del ente natural: la materia, la forma y la

privación, esto es, los principios de la naturaleza. En este capítulo,

examina principalmente la materia y la privación y la relación que

guardan entre ellas: se refieren fundamentalmente a la misma realidad,

aunque difieran según la razón.

En el capítulo tercero explicita ampliamente las causas que

relaciona y compara con los principios ya presentados en los dos

primeros capítulos. Introduce la causa eficiente y la final como causas

del cambio, extrínsecas al ente natural. Además, Tomás de Aquino

incorpora la noción de elemento a su opúsculo para definirla, explicarla

y conjugarla entre los principios la substancia natural.

En el capítulo cuarto, Tomás de Aquino, analiza las relaciones

entre los cuatro tipos de causas según distintos órdenes: el del tiempo,

el de la generación, el de la necesidad, el de la perfección.

En el capítulo quinto, el Aquinate ordena las causas según su

anterior y su posteridad. El orden entre la causa anterior y la causa

posterior es respectivamente equivalente al de causa primera y causa

segunda, causa próxima y causa remota, causa simple y causa

compuesta, causa en potencia y causa en acto.

El capítulo sexto, Tomás de Aquino realiza un análisis de los

modos de predicación de los principios (unívoco, equívoco o análogo)

para describir la multiplicidad numérica de los entes que componen el

universo natural. Analiza la universalidad de la intencionalidad lógica

según la conveniencia y la diferencia de los principios, y su relación

con la conveniencia y la diferencia de los entes que se componen de

dichos principios.

En resumen, en el Opúsculo Sobre los principios de la

naturaleza, el Aquinate expone con claridad los principios de la

Page 122: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

120

realidad sujeta al cambio desde el punto de vista de su comprensión

estática (materia, forma y privación), dinámica (causa eficiente y final)

y numéricamente múltiple o plural (según la analogía). No disputa aquí

con otros planteamientos filosóficos, pero incorpora a la tradición las

nuevas perspectivas que aporta el patrimonio aristotélico.

4. Traducción del Opúsculo Sobre los Principios de la

Naturaleza de Thomás de Aquino

De principiis naturae

ad fratrem Sylvestrum

Thomae de Aquino

CAPUT I

Nota quod quoddam potest esse

licet non sit, quoddam vero est.

Sobre los principios de la

naturaleza al hermano Silvestre

Thomás de Aquino

CAPÍTULO I3

Ten en cuenta4 que alguna cosa,

aunque no exista, puede llegar a

existir, mientras que alguna otra

en verdad existe.

3 El Aquinate, en el Capítulo I, analiza la realidad y el ente en ser en potencia

y ser en acto, en sustancial y accidental, y define la materia, la forma y la

privación. Estos principios explican la generación y la corrupción de los seres

naturales. 4 Tomás de Aquino se dirige a alguien en este tratado, le responde a una

pregunta; probablemente al hermano Silvestre.

Page 123: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

121

Illud quod potest esse dicitur

esse potentia; illud quod iam est,

dicitur esse actu.

Sed duplex est esse: scilicet esse

essentiale rei, sive substantiale

ut hominem esse, et hoc est esse

simpliciter. Est autem aliud esse

accidentale, ut hominem esse

album, et hoc est esse aliquid. Ad

utrumque esse est aliquid in

potentia. Aliquid enim est in

potentia ut sit homo, ut sperma

et sanguis menstruus; aliquid est

in potentia ut sit album, ut homo.

Tam illud quod est in potentia ad

esse substantiale, quam illud

quod est in potentia ad esse

Aquello que puede existir se

llama ser en potencia; aquello

que ya existe, se llama ser en

acto5.

Pero el ser existe de dos maneras:

el ser esencial o substancial de

una cosa6, por ejemplo, cuando se

es hombre; esto es el ser

considerado en sí mismo. Y

también el ser accidental, por

ejemplo, cuando un hombre es

blanco, y esto se dice porque

existe por otro. En cada caso, hay

en el ser algo que está en

potencia. En efecto, hay algo que

está en potencia de ser hombre,

como, por ejemplo, el esperma y

la sangre menstrual; y algo que

está en potencia de ser blanco,

como, por ejemplo, el hombre.

Tanto aquello que está en

potencia con respecto al ser

sustancial como aquello que está

en potencia con respecto al ser

accidental puede llamarse

materia, como el esperma lo es

5 Tomás de Aquino establece una distinción entre los seres, desde el

punto de partida de su cosmología (o filosofía de la naturaleza): el ser existe

de dos maneras: en potencia y en acto. 6 La segunda distinción que asienta es la de ser substancial y ser

accidental.

Page 124: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

122

accidentale, potest dici materia,

sicut sperma hominis, et homo

albedinis.

Sed in hoc differt: quia materia

quae est in potentia ad esse

substantiale, dicitur materia ex

qua; quae autem est in potentia

ad esse accidentale, dicitur

materia in qua. Item, proprie

loquendo, quod est in potentia

ad esse accidentale dicitur

subiectum, quod vero est in

potentia ad esse substantiale,

dicitur proprie materia.

Quod autem illud quod est in

potentia ad esse accidentale

dicatur subiectum, signum est

quia; dicuntur esse accidentia in

subiecto, non autem quod forma

substantialis sit in subiecto. Et

secundum hoc differt materia a

subiecto: quia subiectum est

quod non habet esse ex eo quod

advenit, sed per se habet esse

completum, sicut homo non

habet esse ab albedine.

con respecto al hombre, y el

hombre lo es con respecto a la

blancura.

Pero en esto difieren: la materia

que está en potencia con respecto

al ser sustancial se dice materia

‘ex qua’ (a partir de la cual se

realiza el hombre); y la que está

en potencia con respecto al ser

accidental se dice materia ‘in

qua’ (en la cual se realiza la

blancura). Asimismo,

absolutamente hablando, lo que

está en potencia con respecto al

ser accidental se llama sujeto,

mientras a lo que está en potencia

con respecto al ser sustancial se

le llama propiamente materia.

Asimismo, el signo de porqué a

aquello se le llame sujeto es que

está en potencia con respecto al

ser accidental; y son llamados

accidentes del sujeto, pero no

como la forma substancial está en

el sujeto. Y en este aspecto, la

materia difiere del sujeto: porque

el sujeto es lo que no posee el ser

a partir de lo que le adviene, sino

que posee por sí mismo el ser

completo, así como el hombre no

posee el ser por la blancura.

Page 125: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

123

Sed materia habet esse ex eo

quod ei advenit, quia de se habet

esse incompletum. Unde,

simpliciter loquendo, forma dat

esse materiae, sed subiectum

accidenti, licet aliquando unum

sumatur pro altero scilicet

materia pro subiecto, et e

converso.

Sicut autem omne quod est in

potentia potest dici materia, ita

omne a quo aliquid habet esse,

quodcumque esse sit sive

substantiale, sive accidentale,

potest dici forma; sicut homo

cum sit potentia albus, fit actu

albus, per albedinem et sperma,

cum sit potentia homo, fit actu

homo per animam.

Et quia forma facit esse in actu,

ideo forma dicitur esse actus.

Quod autem facit actu esse

substantiale, est forma

substantialis, et quod facit actu

esse accidentale, dicitur forma

accidentalis.

Sin embargo, la materia tiene el

ser a partir de lo que le adviene,

porque de suyo tiene un ser

incompleto7. De donde, hablando

absolutamente, la forma le da el

ser a la materia, pero el sujeto se

lo da al accidente, aunque a veces

se tome el uno por el otro, a saber,

la materia por el sujeto y

viceversa.

Sin embargo, como a lo que está

en potencia se le puede llamar

materia, entonces cada cosa a

partir de la cual se posee el ser,

cualquiera que sea este ser, o

sustancial o accidental, puede

decirse forma; por ejemplo, el

hombre que está en potencia de

ser blanco, pasa a ser blanco en

acto por la blancura, y el

esperma, que sería un hombre en

potencia, llega a ser hombre en

acto por el alma.

Porque la forma realiza a un ser

en acto, entonces a la forma se le

dice que es un acto. Asimismo, lo

que realiza en acto al ser

substancial es la forma sustancial

y lo que realiza en acto al ser

7 Es decir, una carencia de ser o una privación.

Page 126: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

124

Et quia generatio est motus ad

formam, duplici formae

respondet duplex generatio:

formae substantiali respondet

generatio simpliciter; formae

vero accidentali generatio

secundum quid. Quando enim

introducitur forma substantialis,

dicitur aliquid fieri simpliciter.

Quando autem introducitur

forma accidentalis, non dicitur

aliquid fieri simpliciter, sed fieri

hoc; sicut quando homo fit

albus, non dicimus simpliciter

hominem fieri vel generari, sed

fieri vel generari album. Et huic

duplici generationi respondet

duplex corruptio, scilicet

simpliciter, et secundum quid.

Generatio vero et corruptio

simpliciter non sunt nisi in

genere substantiae; sed

generatio et corruptio secundum

quid sunt in aliis generibus.

accidental se le llama forma

accidental.

Además, puesto que la

generación es el movimiento para

poseer la forma, a una doble

forma le corresponde una doble

generación: a la forma sustancial

le corresponde la generación

considerada en sí misma; y a la

forma accidental, la generación

relativamente a otro. En efecto,

cuando una forma sustancial es

infundida8, se expresa que algo

llega a existir en sí mismo. Pero

cuando es infundida una forma

accidental, lo que se expresa es

que pasa a ser así o asá; por

ejemplo, cuando un hombre es

blanco, no estamos diciendo que

un hombre es creado o generado,

sino que es creado o generado

blanco. Y a estos dos modos de

generación le corresponden

también dos modos de

corrupción distintos, a saber, una

de sí misma y otra relativamente

a otro. Ciertamente, la

generación y la corrupción

absolutamente hablando

pertenecen al género de la

substancia; pero la generación y

8 Es decir, cuando le adviene la forma a la materia o cuando la materia

es informada.

Page 127: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

125

Et quia generatio est quaedam

mutatio de non esse vel ente ad

esse vel ens, e converso autem

corruptio debet esse de esse ad

non esse, non ex quolibet non

esse fit generatio, sed ex non

ente quod est ens in potentia;

sicut idolum ex cupro, ad quod

idolum est (cuprum) in potentia,

non in actu.

Ad hoc ergo quod sit generatio,

tria requiruntur: scilicet ens

potentia, quod est materia; et

non esse actu, quod est privatio;

et id per quod fit actu, scilicet

forma.

Sicut quando ex cupro fit

idolum, cuprum quod est

potentia ad formam idoli, est

materia; hoc autem quod est

infiguratum sive indispositum,

la corrupción relativamente

hablando, pertenecen a

cualquiera de los otros géneros

accidentales.

Además, puesto que la

generación es un cierto

movimiento que pasa del no-ser

al ser o del no-ente al ente; e

inversamente, la corrupción es

pasar del ser al no-ser, aunque no

sea a partir de la nada que la

generación existe, sino a partir

del ente que existe en potencia;

como, por ejemplo, la estatua, a

partir del bronce, ya que (el

bronce) es la estatua en potencia

y no en acto.

Entonces, para que haya

generación, se requieren tres

cosas: a saber, el ser en potencia,

que es la materia; el no-ser en

acto, que es la privación; y

aquello por lo cual algo es en

acto, es decir, la forma.

Por ejemplo, cuando se hace una

estatua de bronce, el bronce es lo

que está en potencia con respecto

a la forma de la estatua, y es la

materia; pero a aquello que está

Page 128: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

126

dicitur privatio; figura autem a

qua dicitur idolum, est forma,

non autem substantialis quia

cuprum ante adventum formae

seu figurae habet esse in actu, et

eius esse non dependet ab illa

figura; sed est forma

accidentalis. Omnes enim

formae artificiales sunt

accidentales. Ars enim non

operatur nisi supra id quod iam

constitutum est in esse perfecto a

natura.

sin figura o es informe, se le

llama privación. En efecto, la

figura de la estatua se llama

forma; pero no es sustancial,

porque el bronce posee el ser en

acto antes de recibir la forma o la

figura y su ser no depende de esta

figura; sino que es una forma

accidental. Ciertamente, todas las

formas artificiales son

accidentales. En efecto, el arte

produce solamente sobre lo que

ya está constituido en una

existencia perfecta por la

naturaleza.

CAPUT II

Sunt igitur tria principia

naturae, scilicet materia, forma

et privatio; quorum alterum,

scilicet forma, est id ad quod est

generatio; alia duo sunt ex parte

eius ex quo est generatio. Unde

CAPÍTULO II9

Son tres, por consiguiente, los

principios de la naturaleza, a

saber, la materia, la forma y la

privación; uno de ellos, es decir

la forma, es el principio “para lo

cual” la generación existe10, los

9 El Aquinate, en el Capítulo II, explica detalladamente tres principios de la

naturaleza: materia, forma y privación y cómo se relacionan entre sí, para

distinguirlos gnoseológicamente y ordenarlos según la generación del ente

natural. 10 La forma es hacia lo que la generación se da, la dirección que toma el

movimiento de la generación hacia un punto final: que la materia adquiera la

forma.

Page 129: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

127

materia et privatio sunt idem

subiecto, sed differunt ratione.

Illud enim idem quod est aes est

infiguratum ante adventum

formae; sed ex alia ratione

dicitur aes, et ex alia

infiguratum.

otros dos son principios “a partir

de lo cual” la generación existe11.

De donde la materia y la

privación son lo mismo en el

sujeto, pero difieren en la

razón12.

En efecto, el bronce es el mismo

considerado sin forma o privado

de forma, que considerado como

materia o antes del advenimiento

de la forma; pero por una razón

se le llama bronce13 y, por otra,

privado de forma.

11 Materia y privación son el origen de la generación, se origina porque hay

materia y privación y se orienta a adquirir de una forma, es decir, para ser

informada. La generación es el movimiento substancial que consiste en pasar

del no-ser al ser. De la nada, nada sale, excepto lo creado. En efecto, la

generación consiste en adquirir una forma. El problema de la generación toma

un valor significativo cuando se considera la creación. Suma contra Gentiles

1, 28 “La creación consiste en dar una nueva forma a la materia”, por eso la

forma es el punto final de la generación. Esta idea viene de la generación y de

la corrupción de Aristóteles donde establece que la materia es el sustrato que

recibe la forma en la generación. 320a 2. Santo Tomás quiere distinguir dos

procesos: el origen y el punto de llegada de la generación. La creación es una

generación sui generis, porque Dios parte de la nada y no de una materia

previa. La información producida por las causas segundas es la generación. La

creación es dar el ser por vía de la participación entitativa. En la naturaleza, el

proceso es de información, de dar forma a una materia y no de participación

del ser. 12 El origen de algo puede ser considerado como materia o como privación. Es

el acto de informar algo amorfo. 13 En cuanto materia.

Page 130: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

128

Unde privatio dicitur esse

principium non per se, sed per

accidens, quia scilicet concidit

cum materia; sicut dicimus quod

hoc est per accidens: medicus

aedificat: non enim ex eo quod

medicus, sed ex eo quod

aedificator, quod concidit

medico in uno subiecto.

Sed duplex est accidens: scilicet

necessarium, quod non

separatur a re, ut risibile

hominis; et non necessarium,

quod separatur, ut album ab

homine. Unde, licet privatio sit

principium per accidens, non

sequitur quod non sit

necessarium ad generationem,

quia materia a privatione non

denudatur; inquantum enim est

De donde se dice que la privación

es un principio, no per se, sino

por accidente, porque,

efectivamente, coincide con la

materia; como al predicar que «el

médico construye», esto lo es por

accidente; ya que no se lo

atribuimos porque es médico,

sino porque el constructor

coincide con el médico en un

único sujeto.

Pero un accidente existe de dos

maneras: a saber,

necesariamente, al no separarse

de la cosa, como la risa, del

hombre14; y no-necesariamente,

al separarse, como lo blanco, del

hombre15. De donde, aunque la

privación sea un principio por

accidente, no se sigue que no sea

necesaria para la generación,

porque la materia no se despoja

de la privación16; en efecto, en

14 Se trata del propio, uno de los predicables esenciales, entre los cinco

predicables. El propio emana de la esencia, es uno con ella y convertible con

ella. La propiedad está en cada uno de los individuos de una especie con misma

esencia, solamente en ellos y siempre presente en ellos (omni, soli et semper). 15 El accidente. 16 La materia siempre conlleva e implica una privación: aunque la materia

tenga una forma, no posee la forma que no tiene. Entonces, la materia no

difiere de la privación, son necesariamente un solo e inseparables en la

realidad. Materia, privación (y potencia) son lo mismo in re, es decir, en la

realidad.

Page 131: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

129

sub una forma, habet

privationem alterius, et e

converso, sicut in igne est

privatio aeris, et in aere privatio

ignis.

Et sciendum, quod cum

generatio sit ex non esse, non

dicimus quod negatio sit

principium, sed privatio, quia

negatio non determinat sibi

subiectum. Non videt enim potest

dici etiam de non entibus, ut

Chimaera non videt; et iterum de

entibus quae non nata sunt

habere visum, sicut de lapidibus.

Sed privatio non dicitur nisi de

determinato subiecto, in quo

scilicet natus est fieri habitus;

sicut caecitas non dicitur nisi de

his quae sunt nata videre.

cuanto existe bajo una forma,

tiene la privación de otra y

viceversa, así como el aire es

privación de fuego y el fuego es

privación de aire.

También debe tenerse en cuenta

que, como existe la generación a

partir del no-ser, no decimos que

la negación sea un principio, sino

la privación, ya que la negación

no determina por sí misma al

sujeto17. En efecto, «que no ve»

puede predicarse tanto de

algunos no-entes, como de la

quimera que no ve; como

también de los entes que no

tienen vista por naturaleza, como

las piedras. Pero la privación

sólo se predica de un

determinado sujeto, a saber, de

aquel que se le debe por

naturaleza una capacidad. Por

ejemplo, la ceguera sólo se

predica de aquel que, por

naturaleza, debería ver18.

17 Se distingue así la privación y la negación: la negación no es principio,

mientras que la privación sí lo es, aunque lo sea por accidente. 18 La privación es algo que no se tiene cuando sí se debería tenerlo. La negación

es lo que no se tiene y no le corresponde tenerlo por esencia.

Page 132: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

130

Et quia generatio non fit ex non

ente simpliciter, sed ex non ente

quod est in aliquo subiecto, et

non in quolibet, sed in

determinato (non enim ex

quolibet non igne fit ignis, sed ex

tali non igne, circa quod nata sit

fieri forma ignis), ideo dicitur

quod privatio est principium. Sed

in hoc differt ab aliis, quia alia

sunt principia et in esse et in

fieri.

Ad hoc enim quod fiat idolum,

oportet quod sit aes, et quod

ultima sit figura idoli; et iterum,

quando iam idolum est oportet

haec duo esse.

Sed privatio est principium in

fieri et non in esse: quia dum fit

Así, porque la generación no se

hace a partir del no-ente

absolutamente considerado, sino

a partir de un no-ente que existe

en algún sujeto, y no en

cualquiera, sino en uno

determinado19 (en efecto, el

fuego no se produce desde

cualquier no fuego, sino desde un

no fuego tal que en él pueda

producirse naturalmente la forma

del fuego), por eso, se dice que la

privación es un principio. Sin

embargo, en esto difiere de los

otros, en que los otros son

principios tanto del ser como del

hacerse20.

En efecto, para que una estatua se

haga, es necesario que exista el

bronce y, ultimadamente, que

tome la figura de la estatua;

asimismo, cuando ya existe la

estatua, es necesario que estos

dos existan.

Pero la privación es un principio

del hacerse21 y no del ser: puesto

19 Las posibilidades de generación son determinadas por las privaciones de un

sujeto determinado, el cual puede ser esto o aquello, pero no puede ser

cualquier cosa, porque no puede dejar de ser lo que es. 20 O del “devenir” o del “llegar a ser”. 21 O del “devenir”.

Page 133: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

131

idolum, oportet quod non sit

idolum. Si enim esset, non fieret,

quia quod fit non est, nisi in

successivis. Sed ex quo iam

idolum est, non est ibi privatio

idoli, quia affirmatio et negatio

non sunt simul, similiter nec

privatio et habitus.

Item privatio est principium per

accidens, ut supra expositum est,

alia duo sunt principia per se.

Ex dictis igitur patet quod

materia differt a forma et a

privatione secundum rationem.

Materia enim est id in quo

intelligitur forma et privatio:

sicut in cupro intelligitur figura

et infiguratum. Quandoque

quidem materia nominatur cum

privatione, quandoque sine

privatione: sicut aes, cum sit

que, mientras se esté realizando

la estatua, es necesario que la

estatua no exista todavía. En

efecto, si existiese, no estaría

siendo hecha, porque lo que se

está haciendo no existe, sino en

proceso. Pero una vez que ya

existe la estatua, allí no hay

privación de una estatua, porque,

así como la afirmación y la

negación no son simultáneas, así

tampoco la privación y la

posesión lo son.

La privación es, entonces, un

principio por accidente, como

anteriormente fue expuesto, y los

otros dos22 son principios por sí

mismos.

De lo dicho queda claro, por lo

tanto, que la materia difiere de la

forma y de la privación según la

razón. En efecto, la materia es

aquello en lo que se concibe la

forma y la privación: así como en

el bronce se concibe la figura y lo

configurado. En efecto, a veces,

a la materia se le nombra junto

con una privación y, a veces, sin

la privación: como, por ejemplo,

al bronce, en cuanto materia de la

22 Materia y forma.

Page 134: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

132

materia idoli, non importat

privationem, quia ex hoc quod

dico aes, non intelligitur

indispositum seu infiguratum,

sed farina, cum sit materia

respectu panis, importat in se

privationem formae panis, quia

ex hoc quod dico farinam,

significatur indispositio sive

inordinatio opposita formae

panis.

Et quia in generatione materia

sive subiectum permanet,

privatio vero non, neque

compositum ex materia et

privatione, ideo materia quae

non importat privationem, est

permanens: quae autem

importat, est transiens.

Sed sciendum, quod quaedam

materia habet compositionem

formae: sicut aes, cum sit

materia respectu idoli, ipsum

tamen aes est compositum ex

materia et forma; et ideo aes non

dicitur materia prima, quia

habet materiam.

Ipsa autem materia quae

intelligitur sine qualibet forma et

estatua, se le considera sin la

privación, porque a esto que se

llama bronce, no se concibe

como privado de alguna figura;

sin embargo, la harina, en cuanto

materia para hacer pan, considera

en sí misma la privación de la

forma del pan, porque a esto que

llamo harina, la privación de la

forma del pan es significada por

oposición.

Asimismo, puesto que en la

generación permanece la materia

o el sujeto, la privación no, ni

tampoco el compuesto de

materia y privación, porque la

materia que no implica privación

es permanente; pero, la que la

implica, es transitoria.

Pero debe saberse que la materia

posee una composición con la

forma; por ejemplo, el bronce,

que es la materia de la estatua, él

mismo también es el bronce

compuesto de materia y forma, y,

por eso, al bronce no se le llama

materia prima, pues posee una

materia.

Así, la materia misma que se

concibe sin forma ni privación

Page 135: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

133

privatione, sed subiecta formae

et privationi, dicitur materia

prima, propter hoc quod ante

ipsam non est alia materia. Et

hoc etiam dicitur yle.

Et quia omnis definitio et omnis

cognitio est per formam, ideo

materia prima per se non potest

cognosci vel definiri sed per

comparationem ut dicatur quod

illud est materia prima, quod hoc

modo se habet ad omnes formas

et privationes sicut aes ad

idolum et infiguratum. Et haec

dicitur simpliciter prima.

Potest etiam aliquid dici materia

prima respectu alicuius generis,

sicut aqua est materia

liquabilium. Non tamen est

prima simpliciter, quia est

composita ex materia et forma,

unde habet materiam priorem.

alguna, pero como sujeto de la

forma y la privación, es llamada

materia prima, por esto que ella

misma no existe por otra materia.

También se le llama “yle”23.

Porque toda definición y todo

conocimiento existe por la

forma, entonces, la materia

prima por sí misma no puede ni

ser conocida ni ser definida, más

que por comparación, puesto que

se dice que la materia prima es

aquello que de este modo posee

en sí a todas las formas y las

privaciones como el bronce a la

estatua y la falta de forma. A ésta

se le llama prima absolutamente.

También se le puede llamar

materia prima a algo con

respecto a algún género, como el

agua es materia de los líquidos.

Sin embargo, no es prima

absolutamente, porque está

compuesta de materia y forma,

por lo que posee una materia

previa.

23 Término griego ampliamente usado por Aristóteles para significar materia.

Page 136: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

134

Et sciendum quod materia

prima, et etiam forma, non

generatur neque corrumpitur,

quia omnis generatio est ad

aliquid ex aliquo. Id autem ex

quo est generatio, est materia; id

ad quod est forma. Si igitur

materia vel forma generaretur,

materiae esset materia, et

formae forma, in infinitum. Unde

generatio non est nisi compositi,

proprie loquendo.

Sciendum est etiam, quod

materia prima dicitur una

numero in omnibus. Sed unum

numero dicitur duobus modis:

scilicet quod habet unam

formam determinatam in

numero, sicut Socrates: et hoc

modo materia prima non dicitur

unum numero, cum in se non

habeat aliquam formam. Dicitur

etiam aliquid unum numero, quia

est sine dispositionibus quae

faciunt differre secundum

numerum: et hoc modo dicitur

materia prima unum numero,

quia intelligitur sine omnibus

Debe saberse también que la

materia prima, y también la

forma, no es generada ni

corrompida, porque toda

generación es para algo a partir

de algo. Eso a partir de lo cual

hay generación es la materia. Y

eso para lo cual existe la

generación, es la forma. No

obstante, si la materia o la forma

fuera generada, la materia

existiría a partir de la materia y la

forma a partir de la forma, hasta

el infinito. Por lo tanto,

propiamente hablando, sólo hay

generación de lo que es

compuesto.

También, se debe saber que la

materia prima se dice

numéricamente una para todas

las cosas. Pero lo numéricamente

uno se predica de dos modos: a

saber, de lo que tiene una única

forma determinada

numéricamente, como Sócrates:

y la materia prima no se dice una

numéricamente de este modo,

porque no tiene, en sí misma,

forma alguna. También se dice

que algo es numéricamente uno,

cuando existe sin las

disposiciones que lo harían

diferir según el número: y es de

este modo que se dice que la

Page 137: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

135

dispositionibus a quibus est

differentia in numero.

Et sciendum quod licet materia

non habeat in sua natura

aliquam formam vel

privationem, sicut in ratione

aeris neque est figuratum neque

infiguratum; tamen nunquam

denudatur a forma et privatione:

quandoque enim est sub una

forma, quandoque sub alia. Sed

per se nunquam potest esse, quia

cum in ratione sua non habeat

aliquam formam, non habet esse

in actu, cum esse in actu non sit

nisi a forma, sed est solum in

potentia. Et ideo quicquid est

actu, non potest dici materia

prima.

materia prima es una

numéricamente, puesto que se

concibe sin todas las

disposiciones por las cuales

existe una diferencia numérica.

Además, se debe saber que,

aunque la materia no tenga en su

naturaleza alguna forma o

privación, como en la razón del

bronce no está ni lo configurado

ni lo no-configurado, tampoco se

despoja jamás de una forma o

una privación: en efecto, a veces

existe bajo una forma y, a veces,

bajo otra. Sin embargo, nunca

puede existir por sí misma,

porque, al no tener forma alguna

según su razón propia, tampoco

posee el ser en acto, puesto que

el ser no existe en acto sino por

la forma, pero solo existe en

potencia. Luego entonces, todo

lo que existe en acto no puede ser

llamado materia prima.

Page 138: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

136

CAPUT III

Ex dictis igitur patet tria esse

naturae principia scilicet

materia, forma et privatio. Sed

haec non sunt sufficientia ad

generationem. Quod enim est in

potentia, non potest se reducere

ad actum: sicut cuprum quod est

potentia idolum, non facit se

idolum, sed indiget operante, qui

formam idoli extrahat de

potentia in actum. Forma etiam

non extraheret se de potentia in

actum (et loquor de forma

generati, quam diximus esse

terminum generationis); forma

enim non est nisi in facto esse:

quod autem operatur est in fieri,

idest dum res fit. Oportet ergo

praeter materiam et formam esse

aliquod principium quod agat, et

hoc dicitur esse efficiens, vel

CAPÍTULO III24

De lo dicho consta, pues, que los

principios de la naturaleza son

tres, a saber, la materia, la forma

y la privación. Sin embargo, éstos

no son suficientes para la

generación25. En efecto, lo que

está en potencia no puede hacerse

pasar a sí mismo26 al acto, como

el bronce, que está en potencia de

ser estatua, no se hace a sí mismo

una estatua, sino que requiere de

un agente que haga pasar la

forma de la estatua de la potencia

al acto. Tampoco la forma se

haría pasar a sí misma de la

potencia al acto (y hablo de la

forma de lo generado, la cual

dijimos ser el término de la

generación); en efecto, la forma

es el ser hecho: pues lo hecho

existe al hacerse, esto es,

mientras la cosa se hace. Es

24 En el Capítulo III, el Aquinate introduce la causa eficiente y la final, causas

extrínsecas del ente. Muestra así que las causas son cuatro. Asimismo,

distingue entre principio, causa y elemento. 25 Porque se necesita también explicar el movimiento y no sólo que el

movimiento es necesario, según esos tres principios: materia, forma y

privación. Estos últimos muestran sólo la necesidad del movimiento, pero no

lo explican. 26 Es la posibilidad otológica de que algo dé lo que no tiene. Si nada da lo que

no tiene, lo que existe en potencia no tiene acto, necesita entonces de una causa

en acto para pasar al acto.

Page 139: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

137

movens, vel agens, vel unde est

principium motus.

Et quia, ut dicit Aristoteles in

secundo Metaph., omne quod

agit, non agit nisi intendendo

aliquid, oportet esse aliud

quartum, id scilicet quod

intenditur ab operante: et hoc

dicitur finis. Et sciendum, quod

omne agens tam naturale quam

voluntarium intendit finem, non

tamen sequitur quod omne agens

cognoscat finem, vel deliberet de

fine. Cognoscere enim finem est

necessarium in his quorum

actiones non sunt determinatae,

sed se habent ad opposita, sicut

se habent agentia voluntaria; et

necesario, por lo tanto, que

además de la materia y la forma27

exista algún principio que obre28;

y a éste se le llama lo eficiente, o

el motor, o el agente; esto es, el

principio “desde dónde” existe el

movimiento.

Como dice Aristóteles en el libro

II de la Metafísica29, todo lo que

actúa, actúa sólo tendiendo hacia

algo y, por eso, es necesario que

exista otro principio, el cuarto, a

saber, lo que es intencionado por

el agente: a esto se le llama fin.

Además, debe saberse que todo

lo que obra, ya sea natural, ya sea

voluntario, procura un fin, pero

no se sigue que todo agente

conozca el fin o delibere sobre el

fin. En efecto, conocer el fin es

necesario para aquellas cosas

cuyas acciones no son

determinadas, pero que se tienen

por opuestas, por ejemplo, al ser

27 Los cuales son los principios intrínsecos del ente natural. 28 Es interesante notar Tomás de Aquino usa el verbo agere (y no el verbo

facere). Podría traducirse también como “ponga en movimiento”. Este, la

causa eficiente, es uno de los principios extrínsecos del ente natural, el otro es

la causa final, la cual explica inmediatamente después. Así, el principio que

explica el movimiento intrínsecamente es la privación, pero ésta no es

suficiente; lo que explica el movimiento extrínsecamente, es la causa eficiente

y el fin. 29 Cf. 994B 13‑ 14.

Page 140: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

138

ideo oportet quod cognoscant

finem per quem suas actiones

determinent. Sed in agentibus

naturalibus sunt actiones

determinatae: unde non est

necessarium eligere ea quae

sunt ad finem. Et ponit

exemplum Avicenna de

citharaedo quem non oportet de

qualibet percussione chordarum

deliberare, cum percussiones

sint determinatae apud ipsum;

alioquin esset inter percussiones

mora, quod esset absonum.

Magis autem videtur de operante

voluntarie quod deliberet, quam

de agente naturali. Et ita patet

per locum a maiori, quod

possibile est agens naturale sine

deliberatione intendere finem: et

hoc intendere nihil aliud erat

quam habere naturalem

inclinationem ad aliquid.

poseídas por agentes voluntarios;

y por eso es necesario que

conozcan el fin por el cual

determinan sus acciones30. Sin

embargo, en los agentes

naturales, las acciones están

determinadas; por ende, en este

caso, no se necesita elegir las

cosas que son para un fin. Así,

Avicena da el ejemplo del

citarista, que no necesita

deliberar sobre cada percusión de

las cuerdas, puesto que las

percusiones están ya

determinadas por él mismo; de

otra manera habría una pausa

entre las percusiones, lo que sería

disonante31. En efecto, esto

aparece mejor a partir del que

hace lo que delibera

voluntariamente que a partir del

agente natural. Pues así es claro,

con mayor razón, que es posible

que un agente natural tienda a un

fin sin deliberación: este tender

no es otra cosa más que tener una

inclinación natural hacia algo.

30 Es por oposición entre el ente puramente físico y el ente voluntario, pues el

ente voluntario conoce y elige su fin. La acción del ente voluntario se explica

por su fuerza eficiente (como en el ente puramente físico) pero sobre todo por

la decisión de dirigirse al fin que eligió libremente. 31 Cf. Sufficientia I 14 (fol.22J).

Page 141: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

139

Ex dictis ergo patet, quod sunt

quatuor causae: scilicet

materialis, efficiens, formalis et

finalis. Licet autem principium

et causa dicantur convertibiliter,

ut dicitur in quinto Metaph.,

tamen Aristoteles in Lib. Physic.,

ponit quatuor causas et tria

principia. Causas autem accipit

tam pro extrinsecis quam pro

intrinsecis. Materia et forma

dicuntur intrinsecae rei, eo quod

sunt partes constituentes rem;

efficiens et finalis dicuntur

extrinsecae, quia sunt extra rem.

Sed principia accipit solum

causas intrinsecas. Privatio

autem non nominatur inter

causas, quia est principium per

accidens, ut dictum est. Et cum

dicimus quatuor causas,

intelligimus de causis per se, ad

quas tamen causae per accidens

reducuntur, quia omne quod est

per accidens, reducitur ad id

quod est per se.

De lo dicho está claro, pues, que

las causas son cuatro: a saber, la

material, la eficiente, la formal y

la final. Aunque, ciertamente,

principio y causa se prediquen de

manera convertible32, como es

dicho en el libro V de la

Metafísica33, también

Aristóteles, en el libro de la

Física34, establece cuatro causas

y tres principios. En efecto,

entiende las causas tanto en

cuanto extrínsecas como en

cuanto intrínsecas. La materia y

la forma se llaman intrínsecas a la

cosa, puesto que son partes

constituyentes de la cosa; la

eficiente y la final se llaman

extrínsecas porque están fuera de

la cosa. Sin embargo, por

principios admite solamente a las

causas extrínsecas. La privación,

en efecto, no se menciona entre

las causas, porque es un principio

por accidente, como se ha dicho.

Así, cuando hablamos de las

cuatro causas, comprendemos las

causas per se, a las cuales se

reducen las causas accidentales,

porque todo lo que es por

32 Tomás de Aquino propone así no sólo hallar los principios de la naturaleza

según los presocráticos, de segundo grado de abstracción, sino las causas del

ente natural, en el tercer grado de abstracción. 33 Cf. 1013A 17. 34 Cf. 198A 22.

Page 142: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

140

Sed licet principia ponat

Aristoteles pro causis intrinsecis

in primo Physic., tamen, ut

dicitur in undecimo Metaph.,

principium dicitur proprie de

causis extrinsecis, elementum de

causis quae sunt partes rei, idest

de causis intrinsecis, causa

dicitur de utrisque. Tamen

aliquando unum ponitur pro

altero. Omnis enim causa potest

dici principium, et omne

principium causa. Sed tamen

causa videtur addere supra

principium communiter dictum,

quia id quod est primum, sive

consequatur esse posterius sive

non, potest dici principium, sicut

faber dicitur principium cultelli,

accidente se reduce a lo que es

per se.

Sin embargo, aunque Aristóteles

tome los principios por causas

intrínsecas en el libro I de la

Física35, también, como se dice

en el libro XI de la Metafísica36,

principio se predica propiamente

de las causas extrínsecas;

elemento, de las causas que son

partes de la cosa, es decir de las

causas intrínsecas; causa se

predica de uno u otro37. No

obstante, a veces, se toma uno

por otro. En efecto, toda causa

puede ser llamada principio y

todo principio, causa. Sin

embargo, la causa parece

considerar algo más que el

principio comúnmente dicho,

porque lo que es primero, o bien

35 Cf. 189B 27 ‑ 191A 24. 36 Cf. 1070B 22‑ 26. 37 La distinción entre causa, principio y elemento. Los elementos son

intrínsecos al ente natural y componen la causa material en primer grado de

abstracción. Los principios son primeros en un orden, un “desde” o “a partir

de”. Son de segundo grado de abstracción, pues formalizan los componentes

del ente natural, no según la materia, sino el ente natural en particular

compuesto una materia específica y una forma en particular. En cambio, las

causas son de tercer grado de abstracción, pues formalizan y universalizan

cada uno de los principios. Así, la causa material es la causa potencial de ser

informado por la causa formal, la cual determina al ente a ser lo que es (y no

solamente a ser algo en particular).

Page 143: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

141

ut ex eius operatione est esse

cultelli. Sed quando aliquid

movetur de nigredine ad

albedinem, dicitur quod nigrum

est principium illius motus; et

universaliter omne id a quo

incipit esse motus dicitur

principium: tamen nigredo non

est id ex quo consequatur esse

albedo.

Sed causa solum dicitur de illo

primo ex quo consequitur esse

posterioris: unde dicitur quod

causa est ex cuius esse sequitur

aliud.

Et ideo illud primum a quo

incipit esse motus, non potest

dici causa per se etsi dicatur

principium: et propter hoc

privatio ponitur inter principia,

es seguido por un ser posterior, o

bien no puede ser llamado

principio, por ejemplo, el

artesano es llamado principio del

cuchillo, puesto que a partir de su

trabajo existe el ser del cuchillo.

Pero cuando algo es cambiado de

la negritud a la blancura, se dice

que el negro es principio de aquel

cambio; pues universalmente

todo aquello a partir de lo cual el

movimiento38 comienza a existir

es llamado principio: no

obstante, la negrura no sea

aquello a partir de lo cual se siga

la existencia de la blancura.

Pero la causa solamente se

predica de aquello primero a

partir de lo cual se sigue el ser de

lo posterior: de donde se dice que

una causa es aquello desde lo

cual se sigue el ser de otra cosa39.

Por lo tanto, aquello primero a

partir de lo cual el cambio

comienza a existir, no puede ser

llamado causa per se, aunque sea

llamado principio: por esto la

privación se coloca entre los

38 El movimiento en sentido amplio o el cambio en general. 39 O también se puede traducir como “a partir de otro cuya existencia se sigue”

o “es consecuente” o hasta “es lograda”.

Page 144: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

142

et non inter causas, quia privatio

est id a quo incipit generatio.

Sed potest etiam dici causa per

accidens, inquantum concidit

materiae, ut supra expositum est.

Elementum vero non dicitur

proprie nisi de causis ex quibus

est compositio rei, quae proprie

sunt materiales. Et iterum non de

qualibet causa materiali, sed de

illa ex qua est prima compositio:

sicut nec membra elementa sunt

hominis, quia membra etiam

sunt composita ex aliis; sed

dicimus quod terra et aqua sunt

elementa, quia haec non

componuntur ex aliis

corporibus, sed ex ipsis est

prima compositio corporum

principios y no entre las causas,

porque la privación es aquello a

partir de lo cual comienza la

generación. Pero puede también

ser llamada causa por accidente,

en cuanto coincide con la

materia, como se expuso más

arriba.

Por cierto, elemento se atribuye

propiamente a las causas a partir

de las cuales existe la

composición de una cosa,

propiamente las que son

materiales40. Pero no de cualquier

causa material, sino de aquella a

partir de la cual existe la primera

composición: por ejemplo, los

miembros no son elementos del

hombre, porque los miembros

también son compuestos a partir

de otras cosas; sin embargo,

40 Tomás de Aquino distingue causa, principio y elemento. La composición es

una propiedad de la criatura, nunca de Dios. En efecto, en el libro de las

Confesiones, Agustín había precisado, por vía de eminencia, que Dios es

simplísimo, en superlativo, para poder atribuírselo a Dios. Para Tomás de

Aquino, la atribución por analogía es sólo de las perfecciones, la composición

no es una perfección y no puede ser atribuida analógicamente a Dios. Los

entes naturales están compuestos de causa material y formal, pero también la

causa material se compone de distintos elementos: agua, tierra, fuego y aire (o,

en su caso, de los elementos de la tabla periódica o de los elementos que

componen el átomo o hasta los Quart, o de elementos que componen las

partículas del átomo). Una definición de elemento es como sigue: el elemento

es la causa material que se encuentra en la primera composición.

Page 145: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

143

naturalium. Unde Aristoteles in

quinto Metaph. dicit quod

elementum est id ex quo

componitur res primo, et est in

ea, et non dividitur secundum

formam.

Expositio primae particulae, ex

quo componitur res primo, patet

per ea quae diximus.

Secunda particula, scilicet et est

in ea, ponitur ad differentiam

illius materiae quae ex toto

corrumpitur per generationem:

sicut panis est materia

sanguinis, sed non generatur

sanguis nisi corrumpatur panis;

unde panis non remanet in

sanguine: unde non potest dici

panis elementum sanguinis. Sed

elementa oportet aliquo modo

decimos que la tierra y el agua

son elementos, porque éstos no se

componen de otros cuerpos, sino

que a partir de ellos mismos

existe la primera composición de

los cuerpos naturales. Por lo que

Aristóteles en el libro V de la

Metafísica41 dice que un

elemento es aquello a partir de lo

cual una cosa es compuesta

primeramente y existe en ella y

no es dividida según la forma42.

La exposición de la primera

parte, “a partir de lo cual una cosa

es compuesta primeramente”, es

clara por lo que ya dijimos.

La segunda parte, es decir,

“existe en ella”, se establece para

marcar la diferencia con aquella

materia que es corrompida del

todo por la generación: por

ejemplo, el pan es materia de la

sangre, pero la sangre no es

generada si el pan no es

corrompido; por ende, el pan no

permanece en la sangre:

entonces, el pan no puede ser

llamado elemento de la sangre.

41 Cf. 1014A 26-27. 42 Cf. 1014a 26‑ 27. El elemento es, entonces, aquello que, al dividirse, su

forma permanece, como el agua que, al separarse, sigue siendo agua.

Page 146: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

144

manere, cum non corrumpantur,

ut dicitur in libro de Gener.

Tertia particula, scilicet et non

dividitur secundum formam,

ponitur ad differentiam eorum

scilicet quae habent partes

diversas in forma, idest in

specie, sicut manus, cuius partes

sunt caro et ossa, quae differunt

secundum speciem. Sed

elementum non dividitur in

partes diversas secundum

speciem, sicut aqua, cuius

quaelibet pars est aqua. Non

enim oportet ad esse elementi ut

non dividatur secundum

quantitatem, sed sufficit si non

dividatur secundum speciem: et

si etiam non dividatur, dicitur

elementum, sicut litterae

dicuntur elementa dictionum.

Pero es necesario que los

elementos permanezcan de

alguna manera, puesto que no son

corrompidos43, como se dice en el

libro De la generación y la

corrupción44.

La tercera parte, a saber, “no es

dividida según la forma”, se

establece para hacer la diferencia

de aquellas cosas que tienen

diversas partes en la forma, esto

es, en la especie, como la mano,

cuyas partes son carne y huesos,

las cuales difieren según la

especie. Pero un elemento no se

divide en diversas partes según la

especie, como el agua, cuya

cualquier parte es agua. En

efecto, no es necesario para que

exista un elemento que no se

divida según la cantidad, pero

basta si no se divide según la

especie: si no se divide, se llama

elemento, como las letras se

llaman elementos de las

palabras45.

43 El elemento es la materia que no se corrompe por generación. 44 Cf. 327B 29-31. 45 Un elemento es divisible según la cantidad, sin perder su forma, pero no es

divisible según su forma, su especie o su esencia.

Page 147: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

145

Patet igitur quod principium

quodam modo in plus habet se

quam causa; et causa in plus

quam elementum. Et hoc est

quod dicit Commentator in

quinto Metaph.

Es claro, entonces, que el

principio tiene un cierto

significado más amplio que la

causa y la causa, más amplio que

el elemento. Esto es lo que dice

también el Comentador sobre el

libro V de la Metafísica46.

CAPUT IV

Viso igitur quod quatuor sunt

causarum genera, sciendum est

quod non est impossibile quod

idem habeat plures causas: ut

idolum cuius causa est cuprum et

artifex, sed artifex ut efficiens,

cuprum ut materia. Non autem

est impossibile ut idem sit causa

contrariorum: sicut gubernator

est causa salutis navis et

submersionis, sed huius per

absentiam, illius quidem per

CAPÍTULO IV47

Pues bien, visto que cuatro son

los géneros de causas, se debe

saber que no es imposible que la

misma cosa tenga muchas

causas, como la estatua cuya

causa es el bronce y el artesano,

pero el artesano como el

eficiente, el bronce como la

materia. Sin embargo, no es

imposible que lo mismo sea

causa de los contrarios: por

ejemplo, el capitán es causa de la

46 Cf. AVERROES, Metaph. V 4 (fol.50RA 49‑ 54). La conclusión es entonces

que el principio es más amplio que la causa y que el elemento es más amplio

que el elemento. El principio es un primero a partir de lo cual algo se ordena;

la causa implica una implicación real y positiva; el elemento es lo que compone

la causa material y es, a su vez, necesariamente material, en lo cual se reduce

la composición material de un ente natural. 47 En el Capítulo IV, Tomás de Aquino, analiza los distintos órdenes entre las

causas descubriéndolas como anteriores o posteriores según distintos órdenes:

el del tiempo, el de la generación, el de la necesidad, el de la perfección.

Page 148: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

146

praesentiam. Sciendum est etiam

quod possibile est ut aliquid

idem sit causa et causatum

respectu eiusdem, sed

diversimode: ut deambulatio est

causa sanitatis ut efficiens, sed

sanitas est causa deambulationis

ut finis: deambulatio enim est

aliquando propter sanitatem.

Et etiam corpus est materia

animae, anima vero est forma

corporis.

Efficiens enim dicitur causa

respectu finis, cum finis non sit in

actu nisi per operationem

agentis: sed finis dicitur causa

efficientis, cum non operetur nisi

per intentionem finis. Unde

efficiens est causa illius quod est

finis: ut sit sanitas; non tamen

facit finem esse finem, et ita non

est causa causalitatis finis, idest

non facit finem esse finalem:

sicut medicus facit sanitatem

salvación y del hundimiento de la

nave, pero de esto por su

ausencia, de aquello por su

presencia. Se debe saber también

que es posible que lo mismo sea

causa y causado48 con respecto a

lo mismo, pero de diverso modo;

como caminar es la causa de la

salud en cuanto eficiente, pero la

salud es causa del caminar en

cuanto fin: en efecto, algunas

veces, el caminar es para la salud.

Así también, en realidad, el

cuerpo es la materia del alma y el

alma es la forma del cuerpo.

Por otra parte, a la eficiente se le

llama causa con respecto al fin,

puesto que el fin sólo existe en

acto por la operación del agente:

pero al fin se llama causa de la

eficiente, puesto que sólo se obra

por la intención de un fin. Por lo

tanto, la eficiente es la causa de

aquello que es un fin: como, por

ejemplo, sería la salud; pero no

hace que un fin sea fin y, por eso,

no es la causa de la causalidad del

fin, esto es, no hace que el fin sea

lo final: como, por ejemplo, el

médico hace que la salud exista

48 O “causa y efecto”.

Page 149: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

147

esse in actu, non tamen facit

quod sanitas sit finis.

Finis autem non est causa illius

quod est efficiens, sed est causa

ut efficiens sit efficiens: sanitas

enim non facit medicum esse

medicum (et dico sanitatem quae

fit operante medico), sed facit ut

medicus sit efficiens. Unde finis

est causa causalitatis efficientis,

quia facit efficiens esse efficiens:

similiter facit materiam esse

materiam, et formam esse

formam, cum materia non

suscipiat formam nisi per finem,

et forma non perficiat materiam

nisi per finem. Unde dicitur quod

finis est causa causarum, quia

est causa causalitatis in omnibus

causis.

Materia enim dicitur causa

formae, inquantum forma non

est nisi in materia; et similiter

forma est causa materiae,

inquantum materia non habet

en acto, pero no hace que la salud

sea un fin.

En cambio, el fin, a su vez, no es

la causa de aquello que es

eficiente, pero es la causa de que

lo eficiente sea eficiente; la

salud, en efecto, no hace que el

médico sea médico (y me refiero

a la salud por la cual se hace

eficiente como médico), pero

hace que sea eficiente en cuanto

médico. Por lo tanto, el fin es la

causa de la causalidad eficiente,

porque hace a la eficiente ser

eficiente: similarmente, hace que

la materia sea materia y que la

forma sea forma, puesto que la

materia sólo toma una forma por

el fin y la forma sólo perfecciona

a la materia por el fin. Por eso se

dice que el fin es la causa de las

causas, porque es la causa de la

causalidad de todas las causas49.

Ciertamente, se dice que la

materia es causa de la forma en

cuanto la forma existe sólo en la

materia e, igualmente, que la

forma es causa de la materia en

49 La causa final les da sentido a las otras causas. La salud es la que le da

sentido a la dieta y no la dieta a la salud, pues la dieta puede ser causa de su

opuesto, la enfermedad.

Page 150: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

148

esse in actu nisi per formam.

Materia enim et forma dicuntur

relative ad invicem, ut dicitur in

secundo physicorum. Dicuntur

enim ad compositum sicut partes

ad totum, et simplex ad

compositum.

Sed quia omnis causa,

inquantum est causa, naturaliter

prior est causato, sciendum quod

prius dicitur duobus modis, ut

dicit Aristoteles in decimosexto

de Animal.; per quorum

diversitatem potest aliquid dici

prius et posterius respectu

eiusdem, et causa et causatum.

Dicitur enim aliquid prius altero

generatione et tempore, et

iterum in substantia et

complemento. Cum ergo naturae

operatio procedat ab imperfecto

ad perfectum, et ab incompleto

ad completum, imperfectum est

prius perfecto, secundum

generationem et tempus, sed

perfectum est prius in

complemento: sicut potest dici

cuanto la materia posee el ser en

acto sólo por la forma.

Ciertamente, la materia y la

forma se predican relativamente

de una y otra, como se dice en el

libro II de la Física50. Se

predican, en efecto, del

compuesto como las partes al

todo y como lo simple a lo

compuesto.

Sin embargo, como toda causa en

cuanto causa es naturalmente

anterior a lo que es causado51, se

debe aclarar que anterior se

atribuye de dos maneras, como lo

dice Aristóteles en el libro XVI

de Los animales52; por esta

diversidad, algo puede decirse

una causa y un efecto, anterior y

posterior, con respecto a sí

mismos. En efecto, se dice que

algo es anterior a otro con

respecto a la generación y con

respecto al tiempo y también con

respecto a la substancia y con

respecto a la perfección. Luego,

puesto que el acto de la

naturaleza procede de lo

imperfecto a lo perfecto y de lo

incompleto a lo completo, lo

50 195A 8‑ 11. 51 O “al efecto”. 52 Cf. 742A 19-22.

Page 151: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

149

quod vir est ante puerum in

substantia et complemento, sed

puer est ante virum generatione

et tempore.

Sed licet in rebus generabilibus

imperfectum sit prius perfecto, et

potentia prior actu,

considerando in aliquo eodem

quod prius est imperfectum

quam perfectum, et in potentia

quam in actu, simpliciter tamen

loquendo, oportet actum et

perfectum prius esse: quia quod

reducit potentiam ad actum, actu

est, et quod perficit imperfectum,

perfectum est. Materia quidem

est prior forma generatione et

tempore: prius enim est cui

advenit, quam quod advenit.

Forma vero est prior materia

perfectione, quia materia non

habet esse completum nisi per

formam.

imperfecto es anterior a lo

perfecto según la generación y el

tiempo, pero lo perfecto es

anterior en perfección: por

ejemplo, se puede decir que el

hombre adulto es previo al niño

en sustancia y perfección, pero el

niño es previo al adulto en la

generación y el tiempo.

Pero, aunque en las cosas

generables lo imperfecto sea

previo a lo perfecto y la potencia

previa al acto, considerando que,

en algo con respecto a sí mismo,

existe antes lo imperfecto que lo

perfecto y en potencia que en

acto, así, absolutamente

hablando, es necesario que el

acto y la perfección sean

anteriores: porque lo que lleva la

potencia al acto es el acto y lo

que perfecciona a lo imperfecto

es lo perfecto. La materia,

ciertamente, es anterior a la

forma en la generación y el

tiempo: cierto, primero es

aquello “a lo que adviene”53 que

“aquello que adviene”54. Pero la

forma es previa en la perfección,

53 Es decir, la materia en potencia a recibir la forma. 54 Es decir, la forma.

Page 152: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

150

Similiter efficiens prior est fine

generatione et tempore, cum ab

efficiente fiat motus ad finem;

sed finis est prior efficiente

inquantum est efficiens, in

substantia et complemento, cum

actio efficientis non compleatur

nisi per finem.

porque la materia no posee el ser

completo, sino por la forma.

Similarmente, lo eficiente55 es

anterior al fin en la generación y

el tiempo, puesto que56 por lo

eficiente se genera57 el

movimiento hacia el fin; pero el

fin es anterior a lo eficiente en

cuanto es eficiente, con respecto

a la sustancia y al

cumplimiento58, puesto que la

acción de lo eficiente no se

completa más que por el fin.

55 O “la causa eficiente”, pero “causa” no aparece aquí en el texto latino,

aparece solamente “efficiens”. 56 En latín, cum + subjuntivo es explicativo y se traduce como “puesto que”. 57 En latín dice “fiat”, literalmente, “se hace” o “se produce”. 58 En latín, el texto dice “in complemento”. Primero, para no contradecir que

la causa eficiente y la causa final son ambas extrínsecas a la cosa (como lo

explica el Aquinate en el texto) se prefiere traducir la preposición in + ablativo

como refiriéndose a una relación, a saber, por la expresión “a propósito de” o

“tratándose de”. El significado de la palabra latina “complemento”, que

literalmente se traduce por “complemento” en español, es difícil de

comprender. Parece que Tomás de Aquino significa aquí “aquello que

completa” una cosa, en el sentido de un cumplimiento o de una perfección

alcanzada o de una plenitud acabada que la finalidad causa. En español, parece

que la palabra “complemento” no comunica en primer lugar la idea de

perfección, por lo que la traducción por “complemento” quedaría

incomprensible. Así, se prefirió traducir “in complemento” como “a propósito

del cumplimiento”, es decir, del acabamiento que realiza el ser en acto. Así se

conserva también la similitud de la raíz latina entre complemento y

cumplimiento. En español, cumplir es una manera de completar.

Page 153: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

151

Igitur istae duae causae, scilicet

materia et efficiens, sunt prius

per viam generationis; sed forma

et finis sunt prius per viam

perfectionis.

Et notandum quod duplex est

necessitas: scilicet necessitas

absoluta et necessitas

conditionalis. Necessitas quidem

absoluta est quae procedit a

causis prioribus in viam

generationis, quae sunt materia

et efficiens: sicut necessitas

mortis quae provenit ex materia

et ex dispositione contrariorum

componentium; et haec dicitur

absoluta quia non habet

impedimentum. Haec etiam

dicitur necessitas materiae.

Necessitas autem conditionalis

procedit a causis posterioribus

in generatione, scilicet a forma

et fine: sicut dicimus quod

necessarium est esse

conceptionem, si debeat

generari homo; et ista est

conditionalis, quia hanc

Por consiguiente, estas dos

causas, a saber, la materia y lo

eficiente, son primeras por la vía

de la generación, pero la forma y

el fin son primeras por la vía de

la perfección.

Asimismo, se debe notar que hay

una doble necesidad: a saber, la

necesidad absoluta y la necesidad

condicional. Ciertamente, la

necesidad absoluta es la que

procede de las primeras causas

en la vía de la generación, las

cuales son la materia y la

eficiente: como la necesidad de

la muerte que proviene de la

materia y de la disposición de

componentes contrarios; ésta se

dice absoluta, porque no tiene

impedimento. Ésta también se

llama necesidad de la materia.

En cambio, la necesidad

condicional procede de las

causas segundas59 según la

generación, a saber, la forma y el

fin: así decimos que es necesario

que haya concepción, si se debe

generar un hombre; y ésta es

condicional, porque a esta mujer

no le es necesario concebir

59 O “causas posteriores”.

Page 154: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

152

mulierem concipere non est

necessarium simpliciter, sed sub

conditione, si debeat generari

homo. Et haec dicitur necessitas

finis.

Et est sciendum quod tres causae

possunt incidere in unum,

scilicet forma, finis, et efficiens:

sicut patet in generatione ignis.

Ignis enim generat ignem, ergo

ignis est causa efficiens

inquantum generat; et iterum

ignis est forma inquantum facit

esse actu quod prius erat

potentia; et iterum est, finis

inquantum est intentum ab

agente et inquantum terminantur

ad ipsum operationes ipsius

agentis.

Sed duplex est finis, scilicet finis

generationis, et finis rei

generatae: sicut patet in

generatione cultelli. Forma enim

cultelli est finis generationis; sed

incidere, quod est operatio

cultelli, est finis ipsius generati,

scilicet cultelli.

absolutamente, sino bajo una

condición: si se debe generar a un

hombre. Ésta se llama también

necesidad del fin.60

Asimismo, se debe saber que tres

causas pueden incidir en una

sola, a saber, la forma, el fin y la

eficiente; como es claro en la

generación del fuego. El fuego,

en efecto, genera fuego,

entonces, el fuego es la causa

eficiente en cuanto genera;

además, el fuego es la forma en

cuanto hace existir en acto lo que

antes era en potencia; y también

es el fin en cuanto es lo intentado

por el agente y en cuanto las

mismas operaciones del mismo

agente se terminan.

Pero el fin es doble, a saber, el fin

de la generación y el fin de la

cosa generada: como es claro en

la generación de un cuchillo. En

efecto, la forma del cuchillo es el

fin de la generación; pero cortar,

que es la operación del cuchillo,

60 Para Tomás de Aquino, la causa material y la eficiente son primeras en la

generación natural, anteriores a la causa formal y a la final. En efecto, en el

orden de la naturaleza, la potencia es anterior al acto.

Page 155: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

153

Finis autem generationis

concidit ex duabus dictis causis

aliquando, scilicet quando fit

generatio a simili in specie, sicut

homo generat hominem, et oliva

olivam: quod non potest intelligi

de fine rei generatae. Sciendum

autem quod finis incidit cum

forma in idem numero, quia illud

idem in numero quod est forma

generati est finis generationis.

Sed cum efficiente non incidit in

idem numero, sed in idem specie.

Impossibile est enim ut faciens et

factum sint idem numero, sed

possunt esse idem specie: ut

quando homo generat hominem,

homo generans et generatus sunt

diversa in numero sed idem in

specie.

es el fin propio de lo generado, a

saber, del cuchillo.

Por otra parte, el fin de la

generación coincide a veces con

dos de las causas mencionadas, a

saber, cuando la generación se

hace a partir de la similitud en

una especie, como un hombre

genera un hombre o una oliva,

una oliva: lo cual no puede

entenderse a partir del fin de la

cosa generada. Entonces, se debe

saber que el fin coincide con la

forma en un mismo número,

porque aquello, numéricamente

igual, que es la forma de lo

generado, es el fin de la

generación. Pero, con respecto a

la eficiente, no coincide en el

mismo número, pero en la misma

especie. Ciertamente, es

imposible que lo que hace y lo

que es hecho sean iguales en

número, pero pueden ser de la

misma especie: como cuando un

hombre genera un hombre, el

hombre que genera y el que es

generado son diferentes en

número, pero son de la misma

especie.

Page 156: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

154

Materia autem non concidit cum

aliis, quia materia, ex eo quod

est ens in potentia, habet

rationem imperfecti, sed aliae

causae cum sint actu, habent

rationem perfecti; perfectum

autem et imperfectum non

concidunt in idem.

Por otra parte, la materia no

coincide con las otras61, porque

la materia, por eso que es un ente

en potencia, tiene razón de

imperfección, pero las otras

causas, puesto que existen en

acto, tienen razón de perfección;

luego, lo perfecto y lo imperfecto

no coinciden en lo mismo.

CAPUT V

Viso igitur quod sint quatuor

causae, scilicet efficiens,

materialis, formalis et finalis,

sciendum est quod quaelibet

istarum causarum dividitur

multis modis. Dicitur enim

aliquid causa per prius, et

aliquid per posterius, sicut

dicimus quod ars et medicus

sunt causa sanitatis: sed ars est

CAPÍTULO V62

Así pues, una vez visto que las

causas son cuatro, a saber, la

eficiente, la material, la formal y

la final, se debe saber que

cualquiera de estas causas se

divide de múltiples modos. En

efecto, se dice que cierta causa es

primera63 y también que cierta

causa es segunda64, como

decimos que el arte65 y el médico

61 La materia no coincide con las otras tres causas. 62 En el Capítulo V, Tomás de Aquino distingue la causa anterior y la causa

posterior como causa primera y causa segunda, causa próxima y causa remota,

causa simple y causa compuesta, causa en potencia y causa en acto. 63 O per prius. En español, se puede traducir por anterior. Pero se optó por

traducir per prius por primera y, por lo tanto, per posterius, por segunda,

porque estas expresiones son más usuales. 64 O per posterius. En español, se puede traducir por posterior. 65 El arte de curar, la medicina.

Page 157: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

155

causa per prius, et medicus per

posterius; et similiter in causa

formali, et in aliis causis. Et

nota quod semper debemus

reducere quaestionem ad

primam causam, ut si

quaeratur: quare est iste sanus?

Dicendum est: quia medicus

sanavit et iterum, quare

medicus sanavit propter artem

sanandi quam habet.

Sciendum est quod idem est

dictu causa propinqua quod

causa posterior, et causa

remota quod causa prior. Unde

istae duae divisiones causarum:

alia per prius, alia per

posterius; et causarum alia

remota, alia propinqua, idem

significant. Hoc autem

observandum est, quod semper

illud quod universalius est,

causa remota dicitur, quod

autem specialius, causa

propinqua: sicut dicimus quod

forma hominis propinqua est

son causa de la salud66: pero el

arte es causa primera y el médico,

segunda; similarmente en la causa

de lo formal y en las otras causas.

También ten en cuenta que

debemos referir siempre una

pregunta a la primera causa; por

ejemplo, si se pregunta ¿por qué

éste está sano?, se dice: por qué el

médico lo sanó y, además, por lo

que el médico lo sanó: debido al

arte de sanar que posee.

Se debe saber que lo mismo es

decir causa próxima que causa

segunda67 y también causa remota

que causa primera68. Por eso, hay

dos divisiones de las causas: una

entre primera y segunda y, otra,

entre remota y próxima, y ambas

significan lo mismo.69 También se

debe observar que a aquella que

es más universal, se le llama causa

remota, pero a la que es más

especial, causa próxima: por

ejemplo, decimos que la forma

próxima del hombre es su

definición, a saber, animal

racional mortal, pero animal es

66 La salud es causa final; la medicina y el médico son causas eficientes. 67 O causa posterior. 68 O causa anterior. 69 Tomás de Aquino pasa aquí a considerar metodológicamente las causas

desde el punto de vista lógico de lo universal y de la definición.

Page 158: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

156

sua definitio, scilicet animal

rationale mortale, sed animal

est magis remota, et iterum

substantia remotior est. Omnia

enim superiora sunt formae

inferiorum. Et similiter materia

idoli propinqua est cuprum, sed

remota est metallum, et iterum

remotius corpus.

Item causarum alia est per se,

alia per accidens. Causa per se

dicitur causa alicuius rei

inquantum huiusmodi, sicut

aedificator est causa domus, et

lignum materia scamni. Causa

per accidens est illa quae

accidit causae per se, sicut cum

dicimus grammaticus aedificat.

Grammaticus enim dicitur

causa aedificationis per

accidens, non enim inquantum

grammaticus, sed inquantum

accidit aedificatori. Et similiter

est in aliis causis.

Item causarum quaedam est

simplex, et quaedam composita.

Simplex causa dicitur quando

solum dicitur causa illud quod

per se est causa, vel etiam solum

illud quod est per accidens:

sicut si dicamus aedificatorem

más remota y sustancia es más

remota aún. Ciertamente todas las

superiores son formas de las

inferiores. Similarmente, la

materia próxima de la estatua es el

bronce, pero la remota es el metal

y, a su vez, la más remota, el

cuerpo.

Asimismo, hay otra división de

las causas entre causa por sí

misma y causa por accidente. Se

le llama causa por sí misma a la

causa de alguna cosa en cuanto

tal: como el constructor es causa

de una casa y la madera es materia

de una banca. La causa por

accidente es aquella que acaece

con la causa por sí misma, como

cuando decimos: “el gramático

construye”. En efecto, el

gramático se llama causa de la

construcción por accidente, no en

cuanto gramático sino en cuanto

al constructor le acaece.

Similarmente, en las otras causas.

Asimismo, la división de las

causas puede ser entre simple y

compuesta. A la causa se le llama

simple cuando la causa se le

atribuye a algo único que es causa

por sí mismo o también a algo

único que lo es por accidente: por

ejemplo, si decimos que el

Page 159: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

157

esse causam domus, et similiter

si dicamus medicum esse

causam domus. Composita

autem dicitur quando utrumque

dicitur causa, ut si dicamus:

aedificator medicus est causa

domus. Potest etiam dici causa

simplex, secundum quod

exponit Avicenna, illud quod

sine adiunctione alterius est

causa, sicut cuprum idoli, sine

adiunctione enim alterius

materiae ex cupro fit idolum; et

sicut dicitur quod medicus facit

sanitatem, vel quod ignis

calefacit.

Composita autem causa est,

quando oportet plura advenire

ad hoc quod sit causa: sicut

unus homo non est causa motus

navis, sed multi; et sicut unus

lapis non est materia domus, sed

multi.

Item causarum quaedam est

actu, quaedam potentia. Causa

in actu est quae actu causat

rem, sicut aedificator cum

aedificat, vel cuprum cum ex eo

constructor es la causa de la casa

y, similarmente, si decimos que el

médico es la causa de la casa. Se

le llama compuesta cuando a uno

y otro se les atribuye ser causa,

como si diríamos: “el constructor

médico es causa de la casa”.

Como lo expone Avicena70, a la

causa simple se le puede llamar

también a algo que es causa sin

añadimiento alguno; así como el

bronce de la estatua, sin la

añadidura de otra materia, es

hecho estatua a partir del bronce;

también como se predica que el

médico produce la salud o que el

fuego calienta.

La causa es compuesta cuando es

necesario que concurran muchas

cosas para que sea causa: así, un

hombre solo no es causa del

movimiento del barco, sino

muchos; y así, una piedra sola no

es la materia de la casa, sino

muchas.

Asimismo, acerca de las causas,

algunas están en acto, otras, en

potencia. La causa en acto es la

que causa a la cosa en acto: como

el constructor que construye, o el

70 Cf. AVICENA; Phys. II 8 (fol.51RA) y Suffic. I 12 (fol.20RAB).

Page 160: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Sobre los principios de la naturaleza

158

est idolum. Causa autem in

potentia est quae licet non

causet rem in actu, tamen potest

causare: ut aedificator, dum

non aedificat.

Et sciendum quod loquendo de

causis in actu, necessarium est

causam et causatum simul esse, ita

quod si unum sit, et alterum. Si

enim est aedificator in actu, oportet

quod aedificet; et si sit aedificatio

in actu, oportet quod sit aedificator

in actu. Sed hoc non est

necessarium in causis quae sunt

solum in potentia. Sciendum est

autem quod causa universalis

comparatur causato universali,

causa vero singularis comparatur

causato singulari: sicut dicimus

quod aedificator est causa domus,

et hic aedificator huius domus.

bronce que, a partir de él, es una

estatua. La causa en potencia es la

que, aunque no cause a la cosa en

acto, sin embargo, puede causar:

como el constructor mientras no

construye.

Se debe saber que, hablando de las

causas en acto, es necesario que la

causa y lo causado71 se den

simultáneamente, tal que, si uno

existe, el otro también. En efecto, si

el constructor está en acto, es

necesario que construya; también si

la construcción está en acto, es

necesario que el constructor esté en

acto. Pero esto no es necesario en las

causas que sólo están en potencia. En

efecto, se debe saber que la causa

universal se equipara con el efecto

universal y, verdaderamente, la causa

singular se compara con el efecto

singular: así como decimos que “el

constructor es causa de la casa” y

“este constructor, de esta casa”.72

71 O el efecto. 72 Para precisar los vínculos entre las causas, Tomás de Aquino muestra que

existe una equivalencia en la manera como uno llama y se refiere a las causas,

que puede esquematizarse como sigue: Causa primera Anterior Remota Universal simple

Causa segunda posterior Próxima Particular compuesta

Page 161: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

La amistad en Aristóteles y San Agustín

Gabriel Fierro Nuño 1

Introducción

La amistad ha sido un tipo de relación interpersonal que, aun

en la cotidianidad y la aparente inmanencia, no ha escapado a la

reflexión filosófica a través de la historia. En esta reflexión convergen

los postulados filosóficos teóricos, por una parte, y las experiencias

personales, por otra parte. Esta convergencia hace que el tópico de la

amistad sea considerado de muy diverso modo por dos filósofos

icónicos, uno de la antigüedad, otro de lo medieval; uno griego, el otro

latino; uno pre-cristiano, otro cristiano. Sus diversos ejes de reflexión

analítica, así como la vivencia de la amistad de su contexto, nos

posibilidad una visión sinóptica de ambos pensadores sobre un mismo

tema.

Aristóteles, filósofo macedonio del siglo IV a.C., es quizá el

máximo representante de la antigüedad griega en cuento al pensamiento

filosófico. Entre sus múltiples tratados, tomaré su Ética a Nicómaco

como ejemplificación de su pensamiento sobre el amigo como “otro”.

De San Agustín, filósofo y obispo cristiano del siglo IV d.C., tomaré

1 Profesor de la Facultad de Teología, UPM. Especialista en temas sobre

Sagrada Escritura.

Page 162: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Amistad en Aristóteles y San Agustín Gabriel Fierro Nuño

160

como guía para comentar su escrito autobiográfico Las Confesiones, así

como una de sus cartas.

1. El “otro” como amigo en la Ética Nicomaquiana de

Aristóteles

Si bien el filósofo griego no dedicó un tratado específico para

la otredad, su pensamiento se puede deducir de su planteamiento que

hace sobre la relación con el amigo. Aristóteles plasmó su pensamiento

sobre la amistad principalmente en su libro de la Ética nicomaquiana,

en sus libros VIII y IX. Veamos los puntos más relevantes de la

exposición del gran filósofo de la antigüedad.

1.1. El amigo como el otro más próximo

En el octavo libro de su Ética2, Aristóteles comienza por

decirnos que la amistad es una virtud o va acompañada de una virtud.

La amistad es lo más necesario para la vida: es el único refugio en la

pobreza, en la juventud nos sirve para evitar el error, y en la vejez nos

sirve para suplir la debilidad. Esta amistad se da de forma natural entre

padres e hijos, sobre todo entre los hombres, por lo que amamos a

nuestros semejantes, a los otros. De este modo, solemos llamar amigos

a quienes tienen benevolencia recíproca, donde cada uno desea el bien

del otro sin que el otro le sea desconocido.

Aristóteles menciona enseguida tres clases de amistad3: en

primer lugar, están los que quieren por interés y no se quieren en cuanto

sí mismos, sino en la medida que se benefician algo los unos de los

otros; en segundo lugar, están los que quieren por placer, es decir, las

personas frívolas que no tienen afecto con los otros porque sean de una

índole determinada, sino porque les resulta agradable; estas dos

amistades que se han mencionado lo son por accidente, puesto que no

se quiere al amigo por ser quienes son, sino porque busca en un caso

tener utilidad y en el otro caso placer. Por último, la amistad perfecta

2 Cf. ARISTÓTELES, Ética a Nicómaco II [trad. de Pedro Simón Abril],

Ediciones Folio, Navarra 1999, 69-98. 3 Cf. Ibidem, 74-76.

Page 163: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

161

es la de los hombres buenos e iguales en virtud, ya que estos quieren el

bien del otro porque son buenos en sí mismos.

Aristóteles sostiene que estos amigos quieren el bien por causa

de sus amigos y no lo son por accidente, de modo que su amistad

permanece mientras son buenos, porque la virtud es una cosa

permanente. Cada uno de ellos es bueno absolutamente hablando, y

también bueno para su amigo, es útil para su amigo y también

agradable, porque son agradables las actividades semejantes. Esto hace

que sean amistades duraderas. Por esta razón, estas amistades son raras,

pues son pocos los hombres que se relacionan con el otro de esta

manera.

La amistad que se dará de manera primaria y perfecta es aquella

que es por semejanza en la medida que está en ellos algo bueno. Tal

como existen hombres buenos por su disposición y otros lo son por su

actuación, también se puede decir que los que conviven se complacen

los unos a los otros y los que están alejados no están ejerciendo su

amistad, pero tienen la disposición adecuada para ellos. También existe

otra amistad fundada en la superioridad, como la del padre hacia el hijo.

Estas amistades están regidas por un afecto proporcional, de modo que

el que es mejor reciba más afecto que profesa, produciéndose así una

igualdad propia de la amistad, correspondiendo a las relaciones de

clientelismo o patronazgo tan características de la sociedad

mediterránea de la antigüedad.

La mayoría de los hombres –continúa Aristóteles– parecen

preferir, por ambición, ser queridos a querer. Pero la amistad consiste

más bien en querer que en ser querido. Así, querer constituye la virtud

propia de los amigos. La comunidad es la base de toda amistad. La

amistad entre ciudadanos, miembros de una tribu, o algo similar, se

parece más a la de una comunidad que surge de un acuerdo.

En el libro IX4, Aristóteles entra en un ámbito más casuístico

sobre la amistad. Se discute si deben deshacerse o no las amistades

4 Cf. ARISTÓTELES, Ética a Nicómaco II, Ediciones Folio, Navarra 1999, 101-

125.

Page 164: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Amistad en Aristóteles y San Agustín Gabriel Fierro Nuño

162

cuando los amigos dejan de ser lo que eran. Una máxima importante

que aparece en este libro dice que se puede definir al amigo como el

que quiere y hace el bien. Además, las relaciones amistosas están

determinadas por los sentimientos que tenemos hacia nosotros mismos.

El hombre bueno cumple estas condiciones: está de acuerdo consigo

mismo y desea las mismas cosas con toda su alma. Tal como desea el

bien para sí mismo, lo práctica para con sus amigos.

El número de los amigos es limitado, pues no es posible

convivir con muchos y repartirse entre muchos. En realidad, quienes

tienen muchos amigos, los tienen por motivos de utilidad o civilidad.

Termina el libro noveno diciendo que la amistad se hace más necesaria

en la desgracia, aunque es más noble en la fortuna.

1.2. Las clases de amistad

Como ya he adelantado en el punto anterior, la interpretación

tradicional sobre Aristóteles distingue tres tipos de amistad. La primera

amistad se refiere a quienes quieren a su amigo solo por interés; ellos

buscan un amigo solo para obtener un beneficio. La segunda amistad

se refiere a quienes quieren a su amigo por placer; ellos buscan un

amigo para obtener una sensación agradable. Y la tercera amistad se

refiere a quienes quieren a su amigo por virtud; ellos buscan un amigo

buscando su bien5.

Respetando esta interpretación tradicional, quiero exponer una

nueva y posible interpretación que difiere de este punto de vista

conocido por la mayoría. Desde esta nueva perspectiva, Aristóteles no

estaría hablando de tres clases distintas de amistad, sino de un proceso

de amistad. Ateniéndonos a las categorías del acto y la potencia de la

metafísica aristotélica, podríamos decir que las amistades por interés o

5 Esta clasificación aparece en el siguiente artículo: Leonardo POLO, «La

amistad en Aristóteles», en Anuario Filosófico, Publicación cuatrimestral del

Departamento de Filosofía de la Universidad de Navarra, Navarra, vol. 32,

núm. 1, 1999, 479.

Page 165: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

163

por placer son en realidad estadios en potencia para poder llegar a la

amistad de virtud, que es ya la amistad en acto.

Siguiendo esta línea de reflexión, los dos tipos de amistad no

pueden ser considerados propiamente amistad, sino modos imperfectos

de amistad. Incluso podríamos añadir por nuestra parte que la amistad,

al igual que la virtud, no es algo que se pueda conseguir en estado de

acto puro, sino que es siempre perfectible. En otras palabras, la amistad

nunca puede concebirse como algo ya realizado, sino como una

dinámica siempre en realización6.

1.3. El amigo como encuentro con el otro

Para Aristóteles, la amistad es una virtud política, ya que el

amigo verdadero o virtuoso encuentra el sumo bien en el encuentro con

el otro. Aristóteles fundamenta a la verdadera amistad en el diálogo,

porque la amistad hace al diálogo algo propio y posibilita la

contemplación. Los amigos verdaderos son otros mismos en nuestros

cuerpos, pero ellos tienen el beneficio de ver a nosotros mismos en el

sentido tal como nosotros somos vistos por el daimon que los llama a

ser quienes realmente somos7.

No es posible perseguir la amistad en lo abstracto. Los amigos

se producen y son producidos a través del diálogo. La amistad delimita

un espacio entre la multitud y lo singular en lo cual nosotros

permanecemos no solo ante los otros, sino ante el cosmos en un

momento de aislamiento puro. Así, para Aristóteles, como también lo

era para Platón, el amigo es integral en la revelación de la verdad. El

amigo nos muestra quiénes somos en verdad y no en apariencia.

6 Me he limitado a la dimensión humana de la amistad. Esta misma amistad

puede abrirse a la trascendentalidad del Otro, como en el ensayo de: Enrique

MUÑOZ, «Alcances a la noción de amistad en Aristóteles», en HYPNOS,

Publicación semestral del Instituto Hypnos, Sao Paolo, vol. 22, núm. 1, 2009,

61-72. 7 Cf. Bryan BRADLEY, «Approaching Others: Aristotle on Friendship´s

Possibility», en Political Theory. An International Journal of Political

Philosophy, Publicación cuatrimestral, vol. 37, núm. 6, 2009, 769.

Page 166: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Amistad en Aristóteles y San Agustín Gabriel Fierro Nuño

164

La conclusión de esta posibilidad de amistad a través del

diálogo trae como consecuencia que la amistad se presenta a nosotros

siempre como una posibilidad. El extranjero que viene a nosotros en

una hora de necesidad, siempre se nos presenta en una relación de

anonimato ante nosotros. Este extranjero es identificado por su rol que

desempeña y por el beneficio que nos puede proporcionar. Pero ellos

se acercan a nosotros con gestos de alguna forma, invitándonos al

diálogo, y quizá ahí mismo nos presenta la posibilidad para contemplar

la clase de existencia que nosotros quisiéramos compartir8.

Aristóteles, entonces, esboza la idea de que el otro como amigo

es otro como yo. Antes de que yo pueda meterlo en una categoría

conceptual, yo recibo esa singularización, desde percibirlo como

alguien menos que yo, hasta percibirlo como alguien capaz de

interpelarme como alguien igual que yo9.

2. El “otro” como aspiración a lo superior en san Agustín

2.1. El otro y mi interioridad

San Agustín es el máximo representante de la temprana edad

media. El cristianismo, en medio de persecuciones, había dejado su

tono apologético para pasar a una filosofía más reflexiva y propositiva.

En este nuevo contexto, san Agustín fue heredero de la filosofía griega

clásica, principalmente de Platón y Plotino. Sin embargo, san Agustín

también se muestra crítico con la sabiduría griega, a la cual no juzga de

falsedad, sino de ignorancia.

San Agustín «apela al hombre interior, al espíritu humano.

Aquí la razón, antes de expresar el ser de las cosas, es una íntima

8 Cf. Bryan BRADLEY, «Approaching Others: Aristotle on Friendship´s

Possibility», en Political Theory. An International Journal of Political

Philosophy, Publicación cuatrimestral, vol. 37, núm. 6, 2009, 771. 9 Cf. Bettina BERGO, Ethics as First Philosophy: Levinas’s Reading of

Aristotle [en línea], San Francisco, 2011, <www.academia.edu>, [23 de Julio

de 2016], 16.

Page 167: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

165

propiedad del ser personal»10. Precisamente esta capacidad del hombre

para entrar en su intimidad personal emprendió una nueva situación

metafísica que ayudó a poner al ser humano en su adecuado lugar en el

universo y, por ende, frente al otro ser humano.

2.2. El otro como amigo interesado

Al igual que Aristóteles, san Agustín aborda el tema de la

otredad desde la perspectiva filosófica de la amistad. Antes de emitir

algún comentario, propongo la lectura de un párrafo de su libro más

conocido, donde plasma su vida y el pensamiento que surgió a partir de

ella:

« ¿Y qué era lo que me deleitaba, sino amar y ser

amado? Pero no guardaba modo en ello, yendo de alma a

alma, como señalan los términos luminosos de la amistad,

sino que del fango de mi concupiscencia carnal y del

manantial de la pubertad se levantaban como unas nieblas

que obscurecían y ofuscaban mi corazón hasta no discernir

la serenidad de la dilección de la tenebrosidad de la

libídine»11.

Todo parece indicar que san Agustín no está hablando en este

pasaje de las mujeres, sino de los amigos: «Hay una probable, o incluso

muy clara, alusión a una homosexualidad juvenil»12. De hecho, la

homosexualidad no era algo extraño para los jóvenes en el contexto

romano donde se desenvolvía san Agustín13. No obstante, el filósofo

10 Jesús CONILL, «Experiencia hermenéutica de la alteridad», en En-claves del

pensamiento. Revista de Humanidades, Publicación semestral de la Escuela de

Educación, Humanidades y Ciencias Sociales del Tecnológico de Monterrey,

vol. 2, núm. 4, 2008, 53. 11 SAN AGUSTÍN, Confesiones II, 2 [trad. de Ángel Custodio Vega] (Obras de

San Agustín II), Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid 1979, 112-113. 12 Javier RUIZ, Alteridad. Un recorrido filosófico, Guadalajara, Universidad

Iberoamericana – ITESO, 2007, 61. 13 Para otro autor se trataría más bien de un amor con mujeres, “que iba más

allá de los instintos pasionales propios de la pubertad”, Teófilo VIÑAS, «La

Page 168: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Amistad en Aristóteles y San Agustín Gabriel Fierro Nuño

166

cristiano, después de su conversión, concibió a estas relaciones de

amistad de su pasado como una apropiación y expropiación, que no se

basaban en el verdadero amor, sino en un interés. La amistad de ese

tipo estaba basada en intereses, pero nunca en un verdadero amor.

El amigo, el otro, desde una amistad interesada, se vuelve

simplemente en el objeto de un amor correspondido, que se conforma

con la visita frecuente y la bondad y que, incluso, puede conformarse

con algo meramente físico, que se confía de rasgos perceptibles y

constatables. El problema con este tipo de relación yo-él radica en que

podemos ser capaces de elegir un amor inferior a nosotros mismos y

fijarnos solamente en lo físico o interesado del otro, concibiendo en él

su inferioridad. Será pues necesario una nueva clase de amigo, una

manera diversa de relación yo-tú.

2.3. El otro como amigo verdadero

San Agustín decía que debíamos aspirar a lo superior en el otro

y lo superior en uno mismo. El obispo de Hipona designaba a esta

amistad que busca lo superior como amistad verdadera. De manera

análoga a Aristóteles, se pueden descubrir tres fases en la amistad,

según Agustín:

1. La amistad de tipo pagano. Reducida al placer y la utilidad.

2. La amistad de tipo noeplatónica. En ella se busca la sabiduría

y la benevolencia en común.

3. La amistad espiritual-mística. Aquí se ejerce la caridad14.

De este modo, san Agustín enfatiza el sentido de trascendencia

como fundamento de una auténtica relación yo-tú, que no se limita a

los amigos en sentido restrictivo, sino a la relación de pareja o de

fraternidad también. Leamos un extracto de uno de sus escritos:

amistad en san Agustín», en Cuadernos de Espiritualidad Agustiniana,

Federación Agustiniana Española, Madrid 2003, 5. 14 Cf. J. RUIZ, Alteridad. Un recorrido filosófico, Guadalajara, Universidad

Iberoamericana – ITESO, 2007, 63.

Page 169: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Vol. 8, no. 1 Inserciones

167

«Nadie puede ser verdaderamente amigo del hombre

si no lo es primero de la Verdad misma, y si tal amistad no es

gratuita, no existe en modo alguno. Sobre este punto

hablaron harto los filósofos. Mas no se encuentra en ellos la

verdadera piedad, es decir, el veraz culto a Dios, del que es

menester derivar todos los oficios de una vida recta. Y no por

otro motivo, a mi juicio, sino porque quisieron fabricarse a

su modo una vida bienaventurada, y estimaron que esa vida

había que fabricarla más bien que impetrarla, y el que la

otorga no es otro que Dios. Tan solo el que hizo al hombre

hace bienaventurado al hombre»15.

Podemos deducir del fragmento anterior que la verdadera

amistad no es solo llamada, sino que además es un don, un regalo que

proviene de Dios. Por eso, san Agustín espera y anhela que triunfe la

amistad basada en la caridad, que se opone al amor propio (yo-yo), al

amor de las cosas mundanas (yo-ello), y el amor por interés (yo-él)16.

Esta trascendentalidad no anula ni limita la individualidad del hombre,

sino que la potencia.17

Conclusión

Hemos visto que los postulados de reflexión filosófica sobre la

amistad son distintos en Aristóteles y San Agustín. Para Aristóteles, la

amistad se vive en varios niveles y está en un proceso siempre abierto

15 SAN AGUSTÍN, Carta 155, I, 1-2 [trad. de Lope Cilleruelo] (Obras de San

Agustín XI), Biblioteca de Autores Católicos, Madrid 1980, 365. 16 Cf. Mauricio BEUCHOT, Historia de la filosofía medieval, Fondo de Cultura

Económica, México 2013, 39. 17 «El hombre permanece siendo el individuo que es y la subjetividad humana

queda siempre individualizada y diferenciada respecto del ser de Dios, aunque

Él esté presente como núcleo de esta subjetividad», Diego ROSALES, «El

radical deseo de la vida. De la inmanencia en Michel Henry a la alteridad en

san Agustín», en Pensamiento. Revista de Investigación e Información

Filosófica, Publicación cuatrimestral del Departamento de Filosofía,

Humanidades y Comunicación, Universidad Pontificia de Comillas, vol. 69,

núm. 258, Madrid 2013, 44.

Page 170: Revista semestral Volumen 8, no.1 2018 · 2019. 5. 8. · Comentario a un fragmento del Himno de la perla”, del Lic. Vol. 8, no. 1 Inserciones ... La postura de San Agustín completa

Amistad en Aristóteles y San Agustín Gabriel Fierro Nuño

168

y dinámico. Desde las categorías del acto y la potencia, Aristóteles

pugna por una amistad siempre en una tensión, de la potencia al acto,

siempre perfectible, siempre en proceso de ser un amigo más perfecto,

desligado del simple interés o conveniencia. Aunque no habla de

trascendencia de la amistad, uno podría inferirlo como la amistad en

acto puro.

Precisamente, San Agustín da el brinco hermenéutico para

hablar de ese acto puro de la amistad, llevándola a la trascendencia, a

la amistad con Otro, desde la mística y la interioridad. De este modo,

las posturas aristotélicas y agustinianas no son necesariamente

excluyentes, no estamos ante una aporía, sino ante una

complementariedad. La postura de San Agustín completa y perfecciona

a la de Aristóteles.