HISTORIA: ISA IASARTE: CHRISTOPHER PONG

EL ARTE OCULTO PARTE 1

CC 2013Isa Ias

Christopher PongVirtual Bread Editorial Libre

Nekasis Studio

Slave & Sleeps

Historia: Isa IasArte: Christopher Pong

Ilustración de portada: Diseño de portada:

Corrección de estilo: Editor:

Diseño editorial:Logotipo original:

Christopher PongTournerTournerLaughtmanVirtual BreadFulanito de tal

Agradecimientos especiales:Nekasis Studio

Y a nuestros queridos lectores de prueba

Hecho en México.

Licencia:

Este obra está bajo una Licencia Creative Commons

Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional

Virtual Breaden colaboración con

Nekasis StudioPresenta:

Historia:

Isa IasArte:

Christopher Pong

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Índice

Introducción

Prólogo

Parte 1

Ilustración 1

Ilustración 2

Omake (regalo)

Próximamente

Promo

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Introducción

Por Laughtman

En muchos sentidos Slave and sleeps es una de esas historias que toda editorial debe tener. Tiene romance, héroes, come-dia, drama e historias alternas ocultas. Esa es una de las ra-zones por las cuales me hacen tenerle tanta fe, sé que algún día nos representará como editorial, así como todas nuestras otras historias, que sabemos, están hechas de todo corazón.

Isa Ias, el famoso comentarista de anime, me entregó este gran material y hoy en día estoy satisfecho de que sea formal-mente mi primer trabajo como editor de un equipo como el de Slave and Sleeps.

Christopher Pong es un dibujante con una larga trayecto-ria que desafortunadamente no ha logrado darse a conocer, pero tengo la confianza de que este trabajo representará no sólo su estilo, también su dedicación a este tipo de trabajos.

Espero lo mejor de ambos y que crezcan lo suficiente para seguir una ruta adecuada en su vida como creadores.

Slave and Sleeps es una novela de tipo épico, es protagoni-zada por Yue, un humano de raza Slave, quien vive para ser-vir a su amo, Azaf y además de eso es muy hábil con su Arte Oculta. A pesar de que siempre es burlado por su amo viven en un eterno enlace debido a circunstancias como el origen de Yue, por lo que la lealtad no se resume a una relación amo - sirviente, sino que también son grandes amigos, sin olvidar a Zeito quien tiene un origen muy similar al de Yue.

Sin adelantar más de esta gran historia los dejo con el pró-logo y el primer capítulo, espero sea de su entero agrado.

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Prólogo

The Legend

Un hombre pasa a ser leyenda cuando se le recuerda, sin embargo a Él nadie lo conoce y a pesar de ello pasó a la historia como un Héroe.

Con una espada en mano de un filo casi invisible, la cortadora incandescente, la espada legendaria Eucloid y habilidades, que son conocidas como Artes Ocultas, él se adentró en el palacio rodeado por criaturas mons-truosas que nadie en su sano juicio podría enfrentar, aun así él lo hizo.

La persona que derrotó al Rey Yzzi, cruel y despia-dado gobernador de Efrathe, cuya capital Eli, fue de-vastada por él. Aztor fue el nombre de aquella persona que puso fin a la vida de Yzzi y al llamado Septuaginto Oscuro, una edad de la cual nadie quiere recordar, sin embargo esa historia se ha estado escuchándose últi-mamente.

¡Ábrete! — Esas palabras salieron de su boca, acom-pañada de una serie de movimientos con las manos y con ambas palmas de frente las abrió como simulando una puerta. Y la puerta de acero fue abriéndose mien-

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tras él se introducía en el Palacio. Seguido por el lago de lava, dentro de él dos montañas puntiagudas, ese fue el resultado de la batalla donde Aztor puso fin a la vida del responsable de miles de muertes de diferentes razas inclusive la mía, los Slave.

De las 22 civilizaciones que existieron sólo quedan unas pocas y otras tantas se vieron en la necesidad de aliarse para no desaparecer ante la inminente conquis-ta de Yzzi.

Aunque el supuesto fin no se aprecie en la actua-lidad, ya que el gobierno de Yzzi no terminó con su muerte, sino que el gobierno fue dejado a su sucesor legítimo, quien hasta ahora ha sometido a 19 de las 22 civilizaciones nuevamente.

Aun así prefiero llamarlas civilizaciones y no “razas” pues siento un poco de discriminación en el término pues lo que nos diferencia a unos de otros es que cada una de las civilizaciones tiene sus propias Artes y ca-racterísticas que las hacen únicas, claro que con la ex-cepción de el “23avo Arte Oculto”, el cual se dice que sólo en base de esfuerzo, habilidad y coraje Aztor forjó en su cuerpo incluyendo los otros 22 Artes Ocultos. Eso fue lo que dio pauta a que Realizara – no, más bien Creara – el “23vo Arte Oculto”. Pero a mí me parece un tanto raro, extraño e increíble, pues nuestra raza – desde que tengo consciencia – ha sido tratada como basura humana, objetos de servidumbre que sólo de-

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ben de obedecer a un Amo, así que hacerme a la idea de que alguien que no solo perteneció a la raza de me-nor clase entre las 22 , sino que hasta se reveló y se opu-so a su Amo sobrepasando sus mismas capacidades e imponiéndose ante los demás y por el bien de todas las civilizaciones era algo que claramente no podía conce-bir.

Ahora que lo pienso llamarlo “Héroe” es un poco exagerado ya que nadie ha probado su existencia – has-ta donde yo sé – y mucho menos el “23vo Arte Oculto”.

Hablando en un tono sarcástico forcé mi boca a ha-cer una mueca parecida a una flecha y fruncí el ceño y perdido en mis pensamientos matutinos dije en voz baja

— No puede ser. Lo que no dudo por un segundo es que el Septua-

ginto Oscuro, el año de Yzzi, se caracterizó por una matanza de Slaves reduciendo su número al 5% de sus habitantes, mismos que sólo se pueden ver en la Ca-pital Eli conocida por ser la Ciudad Dorada– econó-micamente hablando, era la ciudad más alta en todo Efrathe – donde sólo vivía la gente más pudiente y sus esclavos, es decir, los que son como yo.

Cada Gobierno que compone el siglo al cual perte-nece el Septuaginto Oscuro fue cada vez peor, pero el 7mo Gobierno es sin duda el que desbordaba maldad pura, razas como la mía llegaron a ser casi extintas y

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otras se aliaron para no ser destruidas otras tantas se ocultaron sin dejar rastro. No puedo decir si lo del “Héroe” es verdad o no, ya que nunca hemos obtenido lo que llaman libertad, sólo hemos visto muerte y nos acostumbramos a ello a tal punto que nuestras emo-ciones han sido removidas por completo. Lo único que podemos hacer es aceptar nuestra “Suerte” o “Destino”, cosas que en lo personal no creo. La gente suele decir cuando algo bueno “oh, qué buena suerte” y por el con-trario, si algo malo pasa “¡no!, que mala suerte he teni-do”, replican con voz quejumbrosa, que para mí sólo es una justificación de lo que les ocurre.

Yzzi fue sin duda el peor gobernante de la historia de Efrathe, incluso me atrevería a decir que de toda Zaza-thar, sin contar que Mató a todo el que se interpuso en su camino, fueran aliados o no. Sé que llegó a matar a los miembros de toda su familia para poder ser el go-bernante de Efrathe y con esa demostración de poder llego a la cima. Sumiéndose en la locura, derrotó a los demás reyes y logro dominar 14 “Artes Ocultas” con-virtiéndose en el primero – que yo sepa – en dominar más de las que un cuerpo puede soportar y eso lo pue-do comprobar ya que la familia que él formó hasta la el día de hoy sigue poseyendo las mismas habilidades que él tuvo en su tiempo.

—Pienso que probablemente nunca obtendremos nuestra libertad, pero en alguna parte de mi aun siento

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que algo se puede cambiar, de seguro, tal vez, algún día... —Dejé salir los pensamientos dentro de mi men-te y abrí los ojos con un bostezo.

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Parte 1

—¡Oye Yue, si no te das prisa en levantar te quedaras

sin comer todo el día otra vez!Una voz que provenía de a fuera de mis pensamien-

tos brotó de la nada, abrí los ojos, me levante de la silla en la que había dormido recostando mi brazo izquier-do, pecho y cara en la mesa puesta en mi dormitorio.

—Ya escuché, no tienes por qué ser tan escandaloso en las mañanas Zeito –

Respondí casi al instante en tono algo cansado y somnoliento, a la vez que pronuncie la palabra “MAN-DATO”, mientras estiraba un poco mi mano pequeñas luces blancas y azules salían de mi mano emitiendo una luz resplandeciente y mi cambio de ropa estaba listo, una sutil camisa blanca abotonada debajo de un saco negro que combinaba con el pantalón y los za-patos y no podía faltar mi favorita, una corbata negra con rayas grises perpendiculares con el escudo de la familia a la que orgullosamente sirvo, la familia Von Frauskin los cuales desde pequeño me han cuidado y enseñado lo necesario para vivir en este mundo domi-nado por el egoísmo y la envidia. También Zeito fue adoptado, como yo. En un viaje al país de las Ilusiones Wizze, el Amo Azaf lo trajo consigo, parece ser que lo encontraron dentro de una montaña de basura mien-

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tras sostenía una foto. Nunca le he preguntado acerca de quien está en la foto, pero parece ser una persona muy importante para él.

No me gusta inmiscuirme en cosas del pasado, así que enseguida que las luces en mi mano cesaron giré la perilla de la puerta y me encontré con un pasaje ce-rrado dentro de la Mansión de los Von Frauskin el cual termina en la cocina a donde yo me dirigía. Tras unos 20 pasos encontré la puerta de la cocina, abrí la puerta café ocre y una mesa de capacidad como para 6 perso-nas estaba puesta delante de mí, lo que me dejo bastan-te confundido fue que no quedaba ni un solo platillo, solo migajas y sentado en la misma mesa estaba Zeito.

—Te lo dije, no puedes confiar en tu Arte Oculta por siempre, te conozco y sé que eres muy confiado en tu habilidad “MANDATO” y por eso te levantas tan tarde pero ahora te has quedado sin comer nuevamente.

—Bueno, ya me regañaste y he aprendido la lección pero también te conozco lo suficiente para saber que es otra de tus estúpidas bromas, ahora aparece la comida si no quieres que te haga desnudar en la Plaza Comercial.

—n-n-no es porque tenga miedo, sino que me das lastima, está bien “APARECE”.

Cerrando el Puño derecho y poniendo su dedo ín-dice y el dedo medio en su ojo izquierdo sin abrir los otros 3 dedos del puño y gritando algo tartamudo y desesperadamente.

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—Oh! ¿Enserio estaba oculta? – pregunté confundi-do y sorprendido a la vez.

—¡Pensé que te habías dado cuenta! – contestó des-pués de mí, algo molesto.

Zeito, al ser del País de las Ilusiones, Wizze –misma que era conocida por sus Ilusionistas y bellos paisajes que no sabes si son verdaderos o falsos–podía hacer ilusiones con su Arte Oculta las cuales eran sencilla-mente perfectas.

—Esa intuición tuya es algo molesta – continuó ha-blando Zeito.

—Aunque no es intuición, más bien es sentido co-mún deberías de aprender a usarlo, te ayudaría mucho – Contesté en un Tono un Poco Sarcástico.

En la mesa, una cortina de luces de varios colores empezaron a brillar como si se tratara de un Arcoí-ris que subió y bajo instantáneamente y sin tiem-po de admirar los Muffins, decorados con peque-ñas pasas y otros con trocitos de nuez, empezaron a aparecer junto con pan integral en rodajas, jugo de naranja que parecía estar mezclado con extracto de zanahoria, miel y una jarra de leche que estaba puesta sobre la mesa donde nos sentamos al mismo tiempo y empezamos a beber de nuestro respectivo vaso. Y es que soy muy selectivo con los alimentos debo decir que no me llevo bien con los cítricos así que en las mañanas me limito a tomar 1 o 2 vasos de

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leche fría y, bueno, Zeito se va más por el jugo recién exprimido ya sea de naranja, mandarina, limón, to-ronja o lima.

Pasaron cerca de 5 minutos para que Zeito abriera la boca haciendo una pregunta.

—¿Has escuchado hablar de los resientes asesinatos de la familia real Lutsberg?

—No, y no me interesa – contesté algo cortante a su comentario.

—¡Pues debería! – ya que al parecer no tienen pistas del asesino, respondió Zeito un poco alterado.

—¿Y por qué me debería de importar? – ellos siem-pre nos han menospreciado y humillado públicamen-te, hasta le han quitado la vida a sus propios Sirvientes por cosas insignificantes.

—He escuchado que el Asesino utiliza “ORDEN”— Otro tipo arte oculta.

Con una cara algo sorprendida, no, más bien la pa-labra adecuada seria impactada, me limité a escuchar cuando mencionó esa palabra.

Orden, con sólo escuchar esa palabra te imaginas una petición a la cual no te puedes negar y es eso pre-cisamente lo que es, la habilidad máxima que los Slave son capases de llevar a cabo.

—¿Estás diciendo que el Asesino es un Slave?— pre-gunté todavía más confundido.

—De las 22 razas nosotros los Image, únicamente

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somos buenos haciendo ilusiones y los más cercanos a hacer algo así es tu propia raza.

Viendo a dónde se dirigía esta conversación escuché el último detalle de Zeito que era […]

—¡Eso es imposible! – afirmé con sorpresa, Además pensé que no tenían idea o pistas del Asesino, entonces ¿Cómo sabes esto Zei?

—Lo escuche de S—Ti, Al parecer no quieren dar a conocer esa información a civiles, ya sabes, por el ru-mor que ha estado corriendo acerca del Héroe. Piensan que si se hace Público la gente empezara a creer en ese rumor y causara gran alboroto dentro de los ciudada-nos y de los países cercanos…

—… y al ser de la misma raza el asesino y el héroe pensaran que es su descendiente, ¡Pero que estúpido! – terminé la frase de Zeito.

—¿Qué les hace pensar que alguien que no ha apa-recido en más de 300 años repentinamente se dignara a aparecer? ¿No les parece extraño? ¿Estarán mal de la cabeza? – Pregunté en un tono molesto mientras ter-minaba de beber mi segundo vaso de leche y me levan-taba de mi asiento.

—¡Hey!, no tan rápido ¿A dónde crees que vas Yu?—A realizar mis deberes en el Estudio del Amo Azaf

por supuesto – Rápidamente contesté.—Es por eso que te pregunto, ya que El Señor Azaf

ha salido en la noche y aún no ha regresado, dijo que

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estaría en una reunión con su grupo de amigos en “Orión”. Aunque pensaba llevarte, estabas durmiendo tan plácidamente que no quiso despertarte.

—¡Ese viejo pervertido! Será mejor que vaya por él antes de que haga alguna de sus estupideces — Repro-chando y sin confianza terminé gritando.

—Antes de que te vayas entrega esto a S—Ti, hoy empieza a trabajar así que seguro estará ahí.

Tomé un pequeño sobre blanco de por lo menos 10x8 cm que recibí de las manos de Zeito y Salí a toda prisa de la Mansión rumbo a Orión.

Ahora que recuerdo, la noche anterior llegó a mí con una taza de té de limón con lo que parecía leche so-bre un pequeño plato, por un momento llegué a pen-sar que era una muestra de cariño hasta que golpeó mis rodillas cayendo de hincado en el piso y abrió mi boca con una mano mientras que con la otra arroja-ba el contenido de la taza en mi boca. Tenía un sabor amargo hasta que identifique el aroma, era un potente somnífero llamado “Polvo de Hada” y aunque es muy raro no me sorprendería que él tuviera un poco en su Almacén. Reconozco que baje la guardia ante esa si-tuación, pero ¿ir a Orión?, Enserio que nunca se en que piensa ese viejo.

Orión es un Cabaret famoso de Eli, pues sólo se veía a la crema y nata de la sociedad más alta. En Orión es donde presentaban espectáculos de baile y canto, pre-

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sentaciones instrumentales y donde podían beber el famoso Licor de “Madame Rouge” ya que su belleza es conocida en todo Efrathe, sólo superada por la prince-sa Alize de la familia Real Lutsberg.

Más sorprendente aun es que ella, Madame Rouge dirige un pequeño grupo de revolucionarios que se Oponen al Gobierno del Rey Alphonse y el Amo Azaf es parte esencial de ese grupo, aunque no creo que haya ido por “ese” asunto, sino más bien porque todas las noches había presentaciones de las chicas más hermo-sas de Orión, aunque no se comparaban con Madame Rouge. Precisamente ayer fue “Día de Contacto” pues generalmente no se permite tocar o siquiera hablarle a las chicas después del espectáculo pero tenía que ser precisamente ayer. Nuevamente reconozco que bajé la guardia pero ese día puedes felicitar a las chicas por sus actuaciones e incluso invitarlas a tomar un “trago” también, si ellas lo permiten, un abrazo o un beso.

Tomé el atajo más rápido, pasando por callejones, pasajes, calles vacías e incluso saltando entre muros y Azoteas de las casas revestidas de impermeabilizantes blancos. No por nada es la Ciudad Dorada, una Ciudad Hipócritamente vestida de blancos paisajes que a lo le-jos por el efecto del Sol pareciera que Brillara. Hasta que por fin llegue al Famoso Cabaret “Orión”, empu-je la puerta doble y alcance a ver una figura conocida que resaltaba en todo lugar, una mujer que mando una

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mirada Burlona y Seductiva que al momento de mi en-trada, nuestras miradas se juntaron y procedió a Pro-ducir una melodiosa Canción, era una Balada lenta y perfecta para ella quien hacia movimientos seductores al ritmo de la música.

—Parece que llegué a tiempo – me dije a mi mismo, mientras mi mirada recorrió todo el lugar que parecía vacío, hasta que escogí un buen lugar para sentarme a esperar así que tomé una silla de primera fila y empecé a observar el lugar.

A la entrada que se encontraba en medio del Edifi-cio de 5 pisos, en la parte derecha había 16 mesas con 6 sillas con un fino acabado y un respaldo de tela fina y relleno de algodón que hacían juego con la vajilla de platos puestos en las mesas impecablemente impías a la par con la parte izquierda cuya diferencia es que había una pequeña cantina pegada al fondo y las escaleras que subían a los pisos superiores. En frente estaba un escenario amplio en forma de medio circulo y cortinas rojas con encaje dorado que bajada del segundo piso en donde había Palcos de sillones como para 4 o 5 per-sonas, eran alrededor de 16 a 18 sillones en cada lado mismos que tenían hileras de 6 ó 7 filas en niveles para poder alcanzar a ver el espectáculo cuando lo había.

Me perdí un poco en lo lujoso que lucía todo y en la cantidad de Xenma gastado, pero volví la mirada a la chica en frente de mí, quien lucía un poco molesta

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por no prestar atención a su canción la cual ya había terminado, hizo una reverencia y salto del escenario sin importarle que su vestido largo y rojo, abierto hasta un poco más allá de las rodillas se levantara dejando ver sus blancos muslos y sus zapatillas de tacón color Vino mientras se desataba el nudo de su cabello roji-zo dejándolo suelto, ese cabello brillante y natural que cuidaba desde que la conozco y en su cuello una gar-gantilla blanca con pequeñas joyas blancas y en el cen-tro una joya más grande que resaltaba de color negro, se acercó más y más hasta que se paró delante de mí y me dio un golpe en la cabeza.

—3 años sin vernos ¿y saludas con un golpe? — Pre-gunté quejumbroso.

—Es tu culpa por no leer el ambiente, además de que no escuchaste la canción que tenía preparada para ti y nuestro reencuentro – algo apenada pero agresivamen-te contestó la hermosa pelirroja en frente de mí.

—Lo siento, pensé que estabas practicando, además creo que tampoco te felicitamos por haber concluido tu entrenamiento en Murow, pero ¿Cómo sabias que vendría?

—Zeito acaba de enviar un Psylograpic y dijo que traerías algo para mí, por cierto ¿Cómo le va a él?

—Desde que fuiste a Murow se ha sentido un poco solo, pero eso no evita que haga locuras y travesuras. Hablando de traviesos, se me olvidaba algo importan-

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te. Espera, ahora regreso – Me levanté de la silla de forma precipitada y Salí corriendo hasta encontrar las escaleras del fondo dejando a la hermosa pelirroja es-tupefacta y confundida.

Subía las escaleras casi brincándolas, pasando por el segundo piso y después el tercero hasta que llegué al cuarto piso, donde si no recuerdo mal era donde se hospedaban los Clientes Frecuentes. Sin duda es donde esa persona esta.

Vine antes unas cuantas veces como escolta para el Amo Azaf y siempre que se hacía tarde se quedaba en el cuarto 97 y esta vez no es diferente de las demás, así que mientras corría buscaba el número del cuarto, algo nuevo para mí pues siempre me daban una habitación diferente y escogida al azar entre el 3ro, 4to y algunas veces en el 5to piso.

—93, 94, 95, 96… éste es, 97 – Confirmé en son de Victoria y reteniendo el aliento. En vez de tocar, abrí la puerta y decidí confirmar la situación.

Un cuarto grande, en la entrada un tocador de lado derecho y en frente un pequeño baño, finalmente a la izquierda una gran cama y sábanas blancas y cober-tores color vino, aunque lo que más destacaba no era el cuarto sino dentro de la cama el cabello largo color café nuez atado a 10 cm de llegar a la cintura, un per-fil muy varonil sino fuera por una cara que mostraba tontedad mientras babeaba la almohada blanca y mur-

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muraba cosas sin sentido, a su lado 4 hermosas jóvenes apostadas, durmiendo cómodamente en su brazo y un olor a licor mezclado con varios tipos de perfume lle-garon a mi nariz. Volteé la mirada y botellas de vino por todo el lugar, regadas en todos lados, eso sin men-cionar adornos y ropa colorida tirada en el piso y en la cama que parecía ser de Dama.

Mi mirada no pudo evitar el entrecerrar el ojo iz-quierdo como si fuera un TIC mientras calmaba mi furia y me acercaba lentamente a la cama con un ins-tinto asesino.

—¿Disfruto su velada Amo Azaf? – pregunte con un rostro calmado que no mostraba la furia que sentía por dentro.

—Claro que si, mmm… ejeje – una respuesta con voz somnolienta y tranquila, algo despistada salió de su boca quien aún se sentía soñando.

—Oh, ya veo aunque si no despierta de una vez ten-dré que despertarlo a la fuerza – respondí con el mis-mo semblante que antes.

Abrió sus parpados dejando ver sus ojos café oscuro y limpiándose los ojos levanto la mitad de su cuerpo dejando caer a las 2 chicas que dormían en sus brazos y movió a las otras 2 que se encontraban abrazadas de su pecho, tomo sus lentes de detrás de la cabecera de la cama donde había una pequeña repisa. Tomo unos cuantos segundos en despertar un poco y recorrió de

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pies a cabeza mi cuerpo, al hacerlo un sudor empezaba a salir de su cabeza y sus ojos se abrían cada vez más y con una cara temerosa y preocupada grito:

—¿Q-Q-Qué haces aquí Yu?—He venido a recogerlo, por supuesto Amo.—Pero ¿Cómo? Si el somnífero que te di es como

para que continuaras durmiendo otro medio día.—Oh, ¿así que lo tenía planeado desde el inicio?—¡Claro que sí! Es decir, te veías muy cansado tra-

bajando todo el día, así que pensé darte un pequeño descanso – Corrigió sus palabras como tratando de ocultar sus primeras intenciones.

—Mentiroso, no intentes engañarme – repliqué.Lo tomé del cuello y lo arrojé a la cama bruscamente,

las Chicas en la cama despertaron y gritaron. Una por una salieron desesperadamente de la cama vistiendo lencería provocativa y sensual, sólo tuvieron tiempo de recoger el resto de su ropa del suelo.

—¡Ah, no se vayan, todavía podemos “jugar” otro rato más, no me dejen solo con este Demonio! – Grita-ba algo desesperado y triste con lágrimas falsas en su cara.

—¿Quién es el demonio? – Pregunté enojado.—¿Ves a alguien más aquí? – El Amo preguntó.Una respuesta que hirvió mi sangre, levanté mi

mano y dije: MANDATO; “LEVITA”

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Unas luces blancas y azules se formaron en mi mano y se dispersaron en el aire, después la cama que estaba en el cuarto se levantó y floto en el aire.

—¿Q-Q-Que estás haciendo?—¿Acaso no lo ves? Por cierto ¿Qué pared está más

dura? No importa realmente, la entrada es más fácil de Arreglar.

Y la cama que flotaba se arrojó a la entrada del cuar-to, estrellándose con la pared y derrumbándola crean-do un enorme agujero. Me acerqué y un sentimiento brotó de mi interior, una presencia de maldad se sentía pero la ignoré y seguí caminando. Llegué a la cama he-cha pedazos y un golpe salió de repente, dio en mi cara y estrellé en la esquina derecha del cuarto.

—Tch – Hizo un sonido de molestia – tendré que en-señarte modales nuevamente pequeño insolente – pa-labras más serias salieron de la boca de mi Amo.

—Creo que los dos debemos aprender eso. – Contes-té burlonamente.

Me levanté y extendí mi mano, a la vez que restos de madera de la cama, botellas y muebles salieron vo-lando en dirección del Amo, todo lo que las pequeñas luces tocaban salían volando, pero cada una de ellas las esquivaba con gran agilidad.

—Te faltan mil años para poder ponerte a mi altura, pequeño tonto – reclamó en voz engreída y altiva.

—¿Eso crees? – Volví a preguntar, como retando.

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Un objeto grande atravesó el piso de madera y llegó hasta mí, era uno de los sillones grandes que estaba en el segundo piso y se lo arrojé a la persona de cabello café el cual impactó en él y perforó los 3 pisos hasta llegar al primero. Salte sobre el hoyo hecho por el gran sillón sobre un trozo de madera que se suspendía en el aire gracias a mi habilidad. Al llegar al primer piso lo primero que hice fue ir a revisar dónde había caído el sillón previniendo cualquier ataque en esa dirección.

—¿Pensaste que eso me detendría?La voz provenía de mi espalda, pero ya era demasia-

do tarde pues él tomó mi cabeza y la estrelló en el piso destruyendo el bello acabado.

—HaHaHa ¿ya tuviste suficiente por hoy Yu? O po-demos estar así toda la tarde — reía burlonamente.

—Me temo que no, aunque me gustaría seguir pero recuerde que tiene cosas que hacer – levanté mi cara y mi cuerpo, sacudiendo el polvo despreocupadamente, como si no hubiese pasado nada.

—¡Es cierto! Tengo que ir a ver a las chicas, espero que no estén asustadas, mejor voy a consolarlas jejeje.

—Claro que no es eso, recuerde que hoy tiene que hacer una visita al Secretario Real — Exclamé indig-nadamente mientras abría una agenda con las activi-dades preparadas.

Sin embargo la situación cambió repentinamente, la presencia de maldad que sentí hace un momento lan-

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zó una flecha de luz hacia el Amo Azaf y utilicé los restos de vidrios de botellas vacías para hacer un escu-do, cuando termine de decir: MANDATO; “ESCUDO” y la flecha de luz se desvió hacia la pequeña cantina destruyendo las botellas de licor, vino, cerveza y todo cuanto había en ella.

—¡Ups! Parece que fallé – Una voz con tono engreí-do se escuchó, misma que provenía de los palcos del 2do piso.

—Oye ¿Qué crees que haces amenazando la vida de mi Amo?

Dirigí mi atención a la persona del segundo piso. Ojos rojos y cabello corto de color negro, típicos de la Familia Lutsberg.

—¿Tu Amo?, a mí no me parece que haya tal relación entre ustedes. Además se veían tan serios hace un mo-mento que decidí ayudarte, deberías darme las gracias Yue.

—Perdón señor Lutsberg, pero he de recordarle que no debe atentar a la vida de mi Amo, mi deber es prote-gerlo en todo momento – Con voz respetuosa contesté mientras me inclinaba haciendo una reverencia.

—Oye, oye no te lo tomes así, vamos ¿Por qué no mejor te haces mi lacayo? Te lo he dicho muchas veces además me agradan tus habilidades. – Como siendo excitado por el momento y la adrenalina lo poseyeran, replicaba.

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—Lo siento Señor pero he jurado Lealtad a un sólo Amo y ese es el Amo Azaf — me forzaba a mí mismo a seguir respondiendo.

—Olvídate de eso, júrame lealtad a m […]La frase fue interrumpida por un golpe que parecía

un rayo y dio en la espalda de la persona en frente de mí, quien impacto en el piso y terminó de destruir el bello acabado.

—Maldito Ren ¿cómo pudiste destruir el néctar de la vida? – Señalando a los restos de la pequeña can-tina destruida, mientras lágrimas salían de sus ojos. – Además ¿Quién te ha dado permiso de convencer a mi Siervo y traicionarme en mi cara? – Agregó Azaf la persona del cabello largo y café.

—No era necesario su intervención Amo – bajé mi mano y empezaron a descender muchos objetos que suspendían en el aire en dirección donde esta-ba Ren.

Saliendo de entre los escombros la persona de ojos rojos murmuró: — ¡Auch! Eso duele, tan impredecible como siempre Lord Von Frauskin, admito que no vi venir ese golpe y creo que fue un buen calentamiento, pero es hora de ponernos serios, esta vez con intención de matar – Tomando una pose de 4 patas, colocó sus manos en el suelo y flexionó sus piernas y rodillas y dijo en voz fuerte:

“IMITA”

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Sus dientes blancos se curvearon y alargaron como si fueran espadas, también su cara se extendió y toma-ron forma de fauces de tigre mientras su cuerpo se lle-naba de pelo. Tomó posición de ataque y se lanzó a su objetivo.

Una luz de gran tamaño en forma de rayo de sol se interpuso entre el ahora mitad bestia—humano y la persona del cabello café, Azaf. El rayo de luz provenía del piso superior, en donde se suponía estaban los pal-cos.

—¿Podrían evitar tratar de matarse cada vez que se encuentran? Además, les importaría parar esto, par de Idiotas, antes de que destruyan el resto de mi tienda, o lo que queda de ella, o tendré que aplicar un castigo.

Con ojos azules como si fuera un cielo despejado, que al verlos puedes sentir como tus preocupaciones y dolores desaparecen, cabello rubio y brillante en un es-tilo ondulado, su cuello cubierto con una estola de piel de zorro de la media noche blanco y un vestido negro brillante como si fuera polvo de diamante, combinan-do unos zapatos de tacón plateados. Pero lo que más destacaba – aparte de la ropa carísima – es la delga-da espada que portaba en las manos, casi transparente pero emitía un rayo de luz enorme que se extendía y contraía. La llamada Estalactita. Una de las 7 espadas sagradas, creadas durante el Septuaginto Oscuro y for-jadas por los Sira, Maestros Espadachines y Forjadores

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que se opusieron a Yzzi y se convirtieron en un gran obstáculo, por lo que el gobierno asesino a la gran ma-yoría de ellos, quienes forjaron las 7 espadas sagradas.

—Es culpa de ese estúpido de Ren, si no hubiese in-tervenido en nuestro entrenamiento…

—Calla Frauskin, si no te hubiese detenido hubieses destruido todo el lugar, Madame él merece una repre-salia.

Los dos se quedaron inmóviles y paralizados ante la hermosa rubia quien guardaba su espada y le susurro a la misma “DESCANSA”.

—Sephira, lleva a los 3 abajo – dijo la rubia mientras bajaba las escaleras del 2 piso.

De entre las sombras, junto al escenario se escuchó una voz familiar

—A la orden Madame Rouge – dijo la pelirroja, con la que hace poco platicaba.

—Que aburrido, prefiero ir con las chicas aún estoy preocupado por ellas, mejor voy a consolarlas – Decía la persona de cabello café, Azaf, reprochando y hacien-do pucheros.

— … — Sin quejarse, Ren quien había vuelto a su forma original, seguía también a la pelirroja obedien-temente, la cual se paró detrás de las escaleras y puso la mano en la pared, giro su mano un poco a la izquierda y un circulo luminoso de donde salió una esfera empe-zó a brillar con un amarillo tenue.

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—Ya veo, un espacio temporal. Entonces, ¿dónde es-tamos? ¿Kepra?, ¿Finicia?, ¿Nive? — preguntaba Ren como si supiera de lo que se trataba.

—No, de hecho seguimos estando en Orión pero hemos movido las Instalaciones al Cuarto Oculto, en otras palabras estamos debajo de Orión.

Finalmente fuimos trasportados a una gran Sala con una mesa en forma redonda con 12 sillas y una 13ava silla más grande que las otras 12. La sala estaba rodea-da por varios afiches con imágenes del Rey Alphonse con una “X” enorme cubriendo su cuerpo y cara retra-tada en el afiche.

—Nuevamente aquí – no pude evitar dar un suspiro y mencionar esas palabras con desaliento.

—Yu, debes de acostumbrarte, además Madame Rouge espera mucho de ti, dice que tienes buenas habi-lidades y tal vez te haga su aprendiz – decía la pelirroja en un tono emocionado.

—El mocoso ya tiene maestro y ese soy yo – creo, aunque no sé si llamarlo entrenamiento – salió el Amo Azaf en protesta de las palabras de la pelirroja.

—¿Maestro?, ¡ja!, hasta donde yo sé nunca has re-cibido entrenamiento de Lord Frauskin, ¿Qué te hace pensar que Madame Rouge se molestaría en enseñar-le a alguien como tú?, cuando ya me tiene a mi como su aprendiz. Pero es interesante, si esas habilidades las haz adquirido sin entrenamiento, me pregunto lo que

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lograrías con un buen maestro. Decía Ren, al momen-to sus ojos Rojos Voltearon a verme.

—Oye, oye, oye pequeño ¿estas insinuando que no soy un buen maestro? Él está bien como esta, no necesita nin-gún entrenamiento además de que el no aspira a ser Ge-neral ni Cabeza de Clan ni nada por el estilo ¿verdad Yue?

—Juré protegerlo Amo Azaf, lo que pase conmigo y las decisiones que tome son mi responsabilidad.

—No peleen, además Madame Rouge está por llegar – contestó la pelirroja.

—Por cierto, Zeito me dio algo para ti.Saque una Carta que tenía dentro del Saco Negro y

se la entregue a la Pelirroja.—Oh, ¿puedo abrirla?—Desde luego, es tuya.Con sus Manos delgadas tomó un extremo del sobre

y cortó una orilla. Tiró de un Papel que se encontraba dentro pero al momento de sacarlo este cayó al piso.

—Ten cuidado, entiendo que estés nerviosa y más trabajando para Madame Rouge pero debes ser más cuidadosa. Toma.

Le entregue el papel blanco que al momento de reco-gerlo pude ver que decía:

Para S—TiUn Amuleto para tener dulces Sueños o para no

Dormir. Úsalo con precaución. : Zeito:

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—¿Eso es todo? — Mi cara denotaba la decepción de tan humilde regalo.

—Creo que sí… no, espera, hay algo más en el sobre.No podía ver bien pero creo que era una foto. S—Ti

sacó lo que parecía una foto, le dio una mirada y su cara se tornó de un color rojizo junto con sus ojos los cuales parecía que divagaban en otro mundo.

—¿Estas bien? – Pregunté confundido.S—Ti tomó la foto, la hoja de papel y los metió en el

sobre rápidamente.—C-c-claro, nada que te incumba – respondió la pe-

lirroja.—Wow, ¿De qué hablan? Déjenme unirme a su con-

versación — Decía mientras se acercaba la persona de cabello y ojos cafés, el Amo Azaf.

—Como siempre tan animados, pero es hora de em-pezar la Reunión Estratégica “Asalto”.

No nos percatamos que una 5ta persona había apa-recido en el “espacio temporal”. Madame Rouge salió de la nada, con su atmosfera tan tranquila, como era su costumbre pues no pierde la calma por más aprietos de los que esté.

—Iremos al punto, El incidente de hoy lo pasaré por alto, pero a cambio deberán de realizar un trabajo es-pecial esta noche – dijo Madame Rouge.

—Directo al punto, no se anda con Rodeos Madame – Intervino Azaf.

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—Primero que nada, tomen asiento, siéntanse como en su casa. Quiero ser breve, pero sin pasar por alto la hospitalidad – continúo diciendo Madame Rouge.

—Si eso es cierto, me gustaría un té o jugo y unas galletas para acompañar, pues aún no he desayunado. – Habló despreocupadamente el Amo Azaf.

A lo que Madame Rouge pretendió no escuchar.—He escuchado que iras a ver al Secretario Real

Azaf ¿Es Cierto?—Claro, iré con Yue esta noche ya que fui invitado

a un banquete que se celebrará en honor de la visita de un Noble de Efrathe y…

—Esta noche debemos matar a ese Noble – Madame Rouge Interrumpió rápidamente.

Todos en la Sala se Sorprendieron y se miraron fija-mente unos a otros.

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Omake

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Además de ilustrar Slave and Sleeps, Christopher Pong también trabaja en sus historias , la siguiente ilus-

tración forma parte de su trabajo y fue expuesta en la exposición ge-

neral de dibujantes de la CONVAS 2013, al lado de Laughtman, Aster

Crowley y Dario Muriño, todos por parte de Virtual Bread.

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Próximamente

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CC 2013Virtual Bread Editorial Libre

Slave and Sleeps

Hecho en México.

Licencia:Este obra está bajo una Licencia Creative Commons

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YUE