desorden alimenticio

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PSYCHOLOGICAL AND BEHAVIORAL RISK PROFILES AS THEY RELATE TO EATING DISORDER DIAGNOSES AND SYMPTOMATOLOGY AMONG A SCHOOL- BASED SAMPLE OF YOUTH. Según la Organización Mundial de la Salud, aproximadamente 155 millones de niños en edad escolar. Actualmente en todo el mundo con sobrepeso u obesidad. La incidencia de la niñez y adolescente con sobrepeso en Turquía está aumentando a un ritmo rápido. Reciente los datos indican que la proporción de sobrepeso o niños obesos de ambos sexos aumentó notablemente en diferentes áreas del mundo, incluyendo Turquía. Se estima que hoy en día, 13,8% de turco los niños tienen sobrepeso o son obesos. Infancia y obesidad en la adolescencia y el sobrepeso tienen un impacto significativo sobre la mortalidad y la morbilidad posterior en la edad adulta. Muchos de los metabólico y cardiovascular complicaciones y algunas formas de cáncer asociado con la obesidad del adulto tienen su comienzo pulg ". Por lo tanto, las personas que comen compulsivamente parecen ser un objetivo importante para los programas de intervención, en particular porque dejar de comer compulsivamente es a menudo efectiva en la estabilización del peso, lo que impide el aumento de peso y tal vez promover un peso pérdida, atracón como un patrón distintivo de comer en los obesos también fue reconocido por primera vez en 1959.

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Los tres tipos de desorden o trastorno alimenticio son: Anorexia, Bulimia y Obesidad

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Page 1: Desorden alimenticio

PSYCHOLOGICAL AND BEHAVIORAL RISK PROFILES AS THEY RELATE TO

EATING DISORDER DIAGNOSES AND SYMPTOMATOLOGY AMONG A

SCHOOL-BASED SAMPLE OF YOUTH.

Según la Organización Mundial de la Salud, aproximadamente 155 millones de

niños en edad escolar. Actualmente en todo el mundo con sobrepeso u obesidad.

La incidencia de la niñez y adolescente con sobrepeso en Turquía está

aumentando a un ritmo rápido. Reciente los datos indican que la proporción de

sobrepeso o niños obesos de ambos sexos aumentó notablemente en diferentes

áreas del mundo, incluyendo Turquía. Se estima que hoy en día, 13,8% de turco

los niños tienen sobrepeso o son obesos. Infancia y obesidad en la adolescencia y

el sobrepeso tienen un impacto significativo sobre la mortalidad y la morbilidad

posterior en la edad adulta. Muchos de los metabólico y cardiovascular

complicaciones y algunas formas de cáncer asociado con la obesidad del adulto

tienen su comienzo pulg ". Por lo tanto, las personas que comen compulsivamente

parecen ser un objetivo importante para los programas de intervención, en

particular porque dejar de comer compulsivamente es a menudo efectiva en la

estabilización del peso, lo que impide el aumento de peso y tal vez promover un

peso pérdida, atracón como un patrón distintivo de comer en los obesos también

fue reconocido por primera vez en 1959.

En un estudio de caso inicial, Stunkard ^ describe un obeso hombre que

experimentó la ingestión incontrolada de enormes cantidades de comida en un

corto período de tiempo. Los "atracones" se terminaron cuando un punto de

malestar físico fue alcanzado y se cree que es provocada por "estrés de la vida".

Spitzer et al., confirmó que aproximadamente el 30% de los individuos la

presentación de los programas de control de peso informar de lo que se ha

denominado trastorno por atracones (BED). La criterios de cama constan de:

a) comer en exceso episódica, definen como comer una cantidad de comida en

un corto período de tiempo que es definitivamente más grande que la mayoría de

las personas volvería a comer por lo menos dos veces por semana en promedio

durante 6 meses;

Page 2: Desorden alimenticio

b) una sensación de pérdida de control sobre la atracón,

c) la dificultad relacionada con el exceso, y

d) tres de cinco artículos que incluyen comer rápido, comer hasta incómodamente

lleno, deprimido o sentirse culpable después de los atracones, comer cuando no

tiene hambre física, y comer solo.

BED se diferencia de la bulimia nerviosa (BN) por la ausencia de inapropiado

conductas compensatorias para evitar el aumento de peso incluyendo el ayuno, la

purga y el ejercicio excesivo y es un diagnóstico provisional trastornos

alimentarios.

Un presente sobrepeso y la obesidad de los más grandes amenazas físicas para

la salud de los comedores compulsivos. Obeso CAMA pacientes enfrentan las

mismas amenazas a la salud como no ir de borrachera pacientes obesos, tales

como un mayor riesgo de la enfermedad coronaria del corazón, diabetes,

hipertensión, hiperlipidemia, enfermedad de la vesícula biliar, enfermedad

respiratoria, cáncer, la gota y la artritis. El problema de secuela de la salud física

relacionada con BED se agrava por la evidencia que sugiere un vínculo entre la

cama y más pobres relacionadas con el peso resultado del tratamiento.

Específicamente, las más altas tasas de deserción escolar y menor peso

pérdidas experimentadas entre los que aparecen CAMA estar mediada por disforia

psicológico.

La prevalencia del trastorno por atracones, con base en los criterios propuestos en

el diagnóstico y Manual Estadístico de los Trastornos Mentales, rangos fi-om 2,0%

y 4,0% en mujeres miembros de la comunidad y de 0,5% a 1,5% en hombres de la

comunidad.

Entre las personas que asisten a control de peso programas (N = 1785; mujeres

89,0%), la tasa para Trastorno por atracones se estima en 28,8% mientras que,

para las personas que buscan la cirugía bariátrica (N ^ 92; mujeres 71,7%), la tasa

de los atracones trastorno se estima en el 46,7%. Por otra parte, a un nivel

subclínico, el 41,9% de los de secundaria femenina estudiantes (French et al.,

1998) y 58,8% de mujeres estudiantes universitarios informan los atracones, lo

que hace atracones comer un fenómeno frecuente.

Page 3: Desorden alimenticio

El síndrome del comedor nocturno (NES) fue el primero descrito en 1955 como un

trastorno relacionado con el estrés comiendo que consiste en la mañana anorexia,

tarde hiperfagia e insomnio. La presencia de ingestas nocturnas (despertando a

comer) se añadió a estos criterios posteriores. NES también se ha asociado con

estado de ánimo deprimido, es generalmente menor en personas con NES, en

comparación con los controles y con frecuencia empeora en la noche y'' Striegel-

Moore y Collègues ^ "ponen de manifiesto que diversos NES diagnóstico

criterios han aparecido en la literatura en los últimos 50 años, y sugieren que la

información adicional sobre la naturaleza y la prevalencia de NES en diversas

poblaciones se necesita. En un estudio de psiquiátrico general pacientes

ambulatorios (de todos los índices de masa corporal), Lundgren y sus colegas

encontró que el 12,3% de los pacientes cumplieron criterios para la NES, una tasa

que es significativamente más alto que la prevalencia de NES en la población

general (1,5%) ^ ^ y similar a la prevalencia de NES entre las muestras obesas (6-

16%).

Ansia por la comida se piensa que media incontrolada conducta alimentaria, tal

como se ve en la obesidad, trastorno por atracón y la bulimia nerviosa. En

personas que hacen dieta con exceso de peso, este ansia por la comida se piensa

a estar involucrados en la incapacidad de cumplir con una dieta baja en calorías,

lo que resulta en una recaída de inicial sobrealimentación patrones. También en

muestras no clínicas, ansia por la comida que ha encontrado a estar relacionado

con peso corporal, lo que sugiere un papel ubicuo del deseo en el consumo de

alimentos. "Las investigaciones que investiga las relaciones entre los antojos de

alimentos y trastorno por atracón es necesario entender el papel de los

los antojos de alimentos en los mecanismos que controlan apetito y comer en

mujeres con trastornos de la alimentación.

La escasa investigación realizado hasta la fecha con clínica muestras sin

embargo, ha dado resultados importantes. Bulik et al., ^ ^ Encontró que cue-

exposure/response intervenciones de prevención pueden reducir la ansiedad

reactividad en pacientes bulímicos. En comparación con los asintomáticos

individuos, las mujeres con antecedentes de la anorexia nerviosa que bebían en

Page 4: Desorden alimenticio

exceso y purgarse fueron más probabilidades de informar "deseos incontrolables

de comer ciertos alimentos o tipos de alimentos "y" fuertes deseos para comer un

alimento específico ". Waters, Hill y Waller encontró que experimenta "un fuerte

impulso o deseo para un alimento en particular "fue seguido por atracones

aproximadamente el 50% del tiempo. Del mismo modo, Engelberg, Gauvin, y

Steiger : "informó de que mientras la dieta restricción no necesariamente preceder

a comer en exceso, restricción elevado precedido "fuertes" antojos y la

probabilidad de atracones. Aunque hay una oleada de artículos noche explorando

síndrome de comer, comer en exceso desorden y deseando comida con los

adolescentes en torno a el mundo, no hay ningún estudio con este grupo en

Turquía. Algunas evidencias proporciona soporte para estos diferentes propuestas

para la relación entre físico ansiedad social, conducta y ejercicio actitudes

alimentarias en las muestras de cultivo occidentales.

Sin embargo, no hay ningún intento de probar estas proposiciones en las culturas

mitad este. Los objetivos de este estudio fueron:

(a) para determinar la prevalencia de NES y BED en los adolescentes turcos en

Ankara y

(b) para determinar el efecto y la importancia de diferentes factores de riesgo

(ansia por la comida, la alimentación restringida, comer emocional y la

alimentación extema) de NES y BED en los adolescentes turcos.

Métodos

Los participantes fueron 563 estudiantes fi-om Ankara, capital de Turquía. La edad

media fue de 16,7 ± 1,3 años para los hombres y 16,6 ± 0,6 años para las

mujeres.

Los participantes asistieron a ocho escuelas diferentes en Ankara, un área que es

representativa de la mayoría partes de la Turquía. Los cuestionarios se

administraron bajo la supervisión del maestro de cuatro estudiantes de la escuela

respectiva y un investigador.

Las preguntas se puede pedir al investigador, para asegurarse de que los niños

comprenden el significado de cada elemento. Después de completar el

Page 5: Desorden alimenticio

cuestionario, cada niño fue llevado a cabo a una clase del lugar privado donde

su / su peso corporal y la altura se midió.

Las medidas de evaluación

Síndrome del comedor nocturno

Contenido dentro del Inventario Peso y Estilo de Vida es el síndrome del comedor

nocturno cuestionario (NESQ). 'El NESQ es una medida de detección de 13 ítems,

con las puntuaciones de Likert de 0-4. Evalúa el núcleo comportamientos

enumerados en los criterios provisionales y también los síntomas asociados de

ansiedad, estado de ánimo y control de la conducta alimentaria. Las puntuaciones

varían fi-om 0 a 52. El alfa de Cronbach en este estudio fue de 0,82. Binge Eating

Disorder (BED) y Bulimia Nerviosa (BN)

El Cuestionario sobre la comida y el peso

Patrones-Revisada (QEWP-R) es un uso común

Instrumento cribado para identificar y diagnosticar a los individuos con TA y la

bulimia según Criterios DSM-IV. El QEWP-R evalúa el tipo frecuencia y de las

conductas asociadas con comer en exceso, estrategias para comer de forma

compulsiva, y control de peso.

El QEWP-R es un 28-tema, basada en criterios instrumento que evalúa la esencial

DSM-IV-TR para el diagnóstico criterios para la purga y BN, como nonpurging así

como, CAMA. Este cuestionario ha sido utilizado en ensayos multicéntricos de

campo para el diagnóstico de BED, bulimia, Nerviosa, Bulimia Nerviosa y

Nonpurging.

En estos ensayos, el QEWP-R se utiliza para distinguir entre los comedores

compulsivos, comedores nonbinge, y bulímicas en tanto el peso y las variables

alimenticios, incluyendo IMC, antecedentes de peso, la edad de aparición de la

obesidad, dieta, peso y ciclismo.

Alimentación restringida, alimentación emocional y External Comer (holandés

conducta alimentaria Cuestionario DEBQ). Este cuestionario consta de 33

artículos, que medido emocional (13 ítems), extremo, y contenida

Page 6: Desorden alimenticio

comer (ambos 10 puntos). Todos los artículos tenían que ser calificadas en una

escala de cinco puntos FIOM 1 (nunca) a 5 (muy

a menudo). Ejemplos de artículos fueron: "¿Tiene un deseo de comer cuando

están irritados? "(emocional comer), "Si los alimentos huele y se ve bien, ¿verdad

comer más de lo normal? "(extrema comer) y" no intenta comer menos en las

comidas que lo haría gusta comer? "(ingesta restringida). Las escalas DEBQ

tienen una alta consistencia intema, alta validez para consumo de alimentos, y de

alta convergente y discriminativa validez. "La fiabilidad y validez de DEBQ para la

población turca es determinada por Bozan, Bas y Asci. " Food Craving (CE) Al

igual que con el ansia por la comida original de Questionnaire- Rasgo (FCQ-T), ^ ^

la FCQ-T consta de 39 elementos que originalmente se pueden asignar a 9

subescalas, cada uno reflejando una dimensión concemed con precipitantes y

consecuencias posibles de los alimentos deseo. Estas subescalas son (1) las

intenciones y planea consumir alimentos (3 artículos), (2) la anticipación de

refuerzo positivo que puede resultar fi'om comer (5 artículos), (3) la anticipación de

alivio FIOM estados y sentimientos negativos como resultado de comer (3

artículos), (4) la posible falta de control sobre la ingesta (6 artículos), (5) el

pensamiento o la preocupación por la comida (7 artículos), (6) el deseo como un

estado fisiológico (4 artículos), (7) las emociones que se pueden experimentar

antes o durante los antojos de alimentos o de comer (4 artículos); (8) señales

ambientales que pueden desencadenar los antojos de alimentos (4 artículos), y (9)

la culpa de que se puede experimentar como resultado de la ansiedad y / o dar en

ellos (3 artículos). Los individuos tienen que indicar, utilizando una escala Likert

que van fi'om 1 (nunca o no se aplica) a 6 (siempre), el grado en el que cada

elemento sería cierto en general para ellos. La confiabilidad y la validez de FCQ-T

para la población turca es determinado por Bas y Cakir ". Índice de masa corporal

(IMC)> Altura y peso se midieron, con una altura verticales altímetro (sensibilidad

de 1 mm) y peso con una balanza de precisión (sensibilidad de 0,1 kg). La

Centi-es para la enfermedad Cond-ol tablas de crecimiento para 2000 niños, niñas

y adolescentes se utilizaron para identificar el cuerpo de índice de masa corporal

(IMC) percentiles. IMC entre 85º y percentil 95 se define como sobrepeso y

Page 7: Desorden alimenticio

IMC igual o superior a 95 por ciento se definió como obe- Percentiles de peso y

talla, a partir de los gráficos de las curvas de crecimiento para los niños turcos.

Análisis estadístico

SPSS 11,0 se utilizó para el análisis de datos. Todas las variables se distribuyen

normalmente. Un análisis de una vía de la varianza se utilizó para comparar los

informes NES, atracones rectirrent y no comer- trastornos. El supuesto de la

homogeneidad de varianzas se reunieron para todos post-hoc procedimiento se

utiliza ya que se considera estrictas y se puede utilizar variables. El Scheffe

con iguales y desiguales grupos de tamaño. Muestras independientes t-test fueron

utiliza para comparar las variables continuas en los sujetos avalando CAMA.

Pearsonjs correlación fue también aplicado. El nivel de significación se fijó en

p<0,05.

Resultados

La prevalencia de la NED, la cama y comer otro, trastorno de las 380 mujeres, 7

symptotns consistentes con 7% (380/29) aprobado un trastorno alimentario.

Catorce mujeres participantes (3,7%) «NES reportados, mientras que el 4,5%

reportado atracones sintomatología.

Además, de los 183 varones, el 7,6% (183/14) aprobado síntomas compatibles

con un trastorno alimentario. Diez participantes tnale (5,5%) informaron de NES,

mientras que 2,7% reportado atracones sintomatología. De las personas que

reportaron estos últimos, 7 cumplieron con los criterios para la purga bulimia

nerviosa (1,6% de las mujeres y el 0,5% de los varones) y 11 cumplían los criterios

para la bulimia nonpurging nervosa (2,6% de las mujeres y el 0,5% de los

hombres). Siete participantes informaron tanto comer y noche atracones (1,6% de

las mujeres y el 0,5% de los hombres). Además, dos participantes informaron tanto

del comedor nocturno y bulimia nerviosa (0,5% de las mujeres y no los hombres),

y los participantes informaron tanto 4 atracones y las purgas bulimia nervosa

(1,1% offemales y no machos)

Las diferencias de ansia por la comida y comer comportamientos en adolescentes

con NES, CAMA y No-Trastornos de la Alimentación

Page 8: Desorden alimenticio

Los análisis post hoc revelaron que el IMC en los participantes que se dedican a

NES CAMA tuvieron significativamente diferente a los trastornos de la conducta

alimentaria (No hay-DE) del grupo (p <0,001). Además, los participantes que

informaron comer en exceso tuvieron significativamente mayor IMC que los

participantes con NES (p <0,001). Como se predijo, los participantes que

CAMA informado y NES tenía resti-significativamente mayor objetivó una

alimentación [F (2,560) = 43.391, p <0,001], emocional comer [F (2,560) = 26,714,

p <0,001] y externa puntajes alimentación [F (2,560) = l8.763, p <0,001] que no

informaron los trastornos alimentarios. Los participante que informó de los

atracones tuvieron significativamente más alto comer emocional y tres ansia por la

comida individtial (FC) factores (FC-Refuerzo positivo, FC-Rehef de sentimientos

negativos, FC-Emociones experiencia) que los participantes con NES.

Discusión

El principal objetivo de este estudio fue examinar la presencia de alteraciones

patrones alimenticios, específicamente CAMA y NES, en los adolescentes turcos.

En este muestra, el prevelance general del trastorno por atracón y síndrome del

comedor nocturno de los adolescentes fue de 3,9% y 4,3%, respectivamente.

Investigación ha demostrado que los niños y adolescentes, preadolescentes

compulsivamente la conducta alimentaria, y que esta comportamiento puede estar

relacionado con aumento de la psicopatología, insatisfacción corporal, las

conductas de dieta y el aumento de peso, esta basado en la población la

prevalencia de atracón (comer en exceso con un objetivo sensación de pérdida de

control de ovpr qué o cuánto se está comiendo) entre los jóvenes es casi tan alta

como 30% para los varones y el 46% de las niñas en otros estudios étnicos. "'

Además, un estudio reciente Europa de 126 niños y adolescentes de entre 10 - |16

pacientes internados en busca de tratamiento para la obesidad encontró que el

36,5% había participado en atracones durante el mes anterior. Sin embargo, de los

126 pacientes, el 6,1% reportado por atracones comer al menos dos veces por

semana según sea necesario para cumplir con los criterios DSM-IV de trastorno

por atracones.

Page 9: Desorden alimenticio

Las hembras y los machos tuvieron tasas similares de borrachera comer, o

respectivamente el 37,3% y 35,3%. Obeso bingers eran menores de nonbingers

obesos, con media de edad de 12,24 años y 13,23 años, respectivamente.

A diferencia de los adultos obesos, obesos y obesos bingers, no bingers en esta

población no difirió significativamente en grado de sobrepeso. Además, las

estimaciones de la prevalencia de la NES han oscilado fi'om 6% " a 64%" entre los

pacientes que buscan bajar de peso, y las estimaciones de prevalencia de la NES

también han sidoreportados en los siguientes grupos: 1,5% entre la población

general, 12,3% entre un paciente ambulatorio población psiquiátrica "," y el 3,8%

entre los de tipo 2 diabéticos población. Los sujetos que no eran obesos o con

sobrepeso son más propensos a percibir su noche comiendo como no

problemática. Además, dependiendo en la definición, el comer de noche se

observa a menudo en las adolescentes sin trastornos psicológicos.

Un estudio de 9-19 años de edad hembras observó que 50 - 70% de los sujetos

comer descrito más de 25% del total de las calorías diarias después de la cena.

Furt-hermore, los episodios ocasionales de comer por la noche eran más común

(típicamente en un factor de 10) en comparación con episodios múltiples de noche

comiendo una semana.

Los atracones de comida también se correlaciona con depresión síntomas, índice

de masa corporal (IMC), e ideal-real peso discrepancia en otro estudio de los

adolescentes niñas. De manera similar, se encontró una asociación significativa

entre el trastorno por atracón y la BMI. Asimismo, el estudio indica que el cuerpo

de índice de masa fue significativa correlación con los alimentos craving y el

síndrome del comedor nocturno. Igualmente, Gendall et al., mostraron que el

índice de masa corporal se encontró que era asociado con comer en exceso en

Cravers.'' Los antojos de comida se comprobó que estaban frecuentemente

asociados con trastorno por atracón.'' ^ Los atracones de comida se define

como el consumo de grandes cantidades de comida en un corto período de

tiempo. ^ Bruce y * Agras '"informó que los atracones se presenta en personas

sanas y los trastornos alimentarios grupos. Modelos de borrachera alimentarios

han incluido los antojos de alimentos como un potencial detonante de comer en

Page 10: Desorden alimenticio

exceso. "'El presente estudio es el primero en comparar los antojos de alimentos a

través de atracones trastorno y el síndrome del comedor nocturno. Nuestros datos

sugieren que toda la experiencia general de los alimentos antojos es diferente

entre aquellos con el consumo de los alimentos. Los síntomas del trastorno y los

que no: Total de los alimentos puntuaciones de craving fueron significativamente

mayores en personas con el síndrome del comedor nocturno o comer en exceso

trastorno que los que no informar trastorno alimentario síntomas. Estos resultados

fueron congruentes con la observación por Jarosz et al. ^ ° que la asociación

positiva entre ansia por la comida y el síndrome del comedor nocturno

y el trastorno por atracón se limitan a muestra de mujeres obesas.

Propuso formalmente a finales de 1970, la dietética modelo restricción pretende

que las personas que crónicamente intentar mantener el control dietético estricto

tienen un alto riesgo de convertirse temporalmente desinhibido en el

mantenimiento de su control, que a menudo da lugar a un episodio de atracón. En

otras palabras, palabras, este modelo describe un ciclo de auto-abastecimiento de

combustible en que la restricción calórica y temporal homeostático desequilibrios,

que son comunes en individuos luchando con trastornos de la alimentación, las

causas antojos para comer. Los antojos de comida, a su vez, se puede llevar a

individuos atracones. En general, los resultados sugieren que conducen resfriado

dietético a los antojos de alimentos en personas con síndrome de comedor

nocturno y borrachera trastornos de la alimentación. Además, los antojos de

alimentos están asociados a comer en exceso en los adolescentes diagnosticados

con bulimia nerviosa. Los resultados fueron similares a los observación de

Cepeda-Benito y Gleaves, que asociación positiva entre la restricción dietética y

Ansia por la comida se limita a muestras compuestas de personas que hacen dieta

sin éxito, mientras que una serie de estudios han encontrado una asociación entre

la restricción dietética y ansia por la comida, otros no.

Estos resultados sugieren que el comer emocional llevar a los antojos de

alimentos en individuos con noche síndrome del comedor compulsivo y trastornos

de la alimentación. Además, presente estudio indicaron que ansia por la comida

era significativa correlación con el comer emocional y alimentación extema.

Page 11: Desorden alimenticio

Teniendo en cuenta los posibles factores desencadenando episodios de

atracones, algunos estudios se centraron sobre el papel de los estados

emocionales. El estudio del comer emocional, definida como "comer en respuesta

a una gama de emociones negafive tales como ansiedad, depresión, la ira, la

soledad y para hacer frente a negativo afectivo sugiere que los episodios de

atracones a menudo se precipita por el estrés y afecta negativa, y que comer en

exceso parece estar asociada con la consiguiente disminución del afecto negativo.

Sin embargo, no se está acumulando evidencia de que factores de y la

alimentación extema puede referirse a independiente construcciones y que el

mecanismo que subyace comer emocional puede ser diferente del mecanismo

que subyace a la alimentación extema. Por lo tanto, sólo emocional comer, y

comer no extema, parecía ser la preeminente variable moderadora de la relación

entre problemas cotidianos y bocadillos.

El estudio, diferentes limitaciones de datos importantes de este estudio fueron

auto-reporte. Futuros estudios son necesario para replicar estos resultados, para

entender ¿por qué esta población se encuentra en mayor riesgo de NES o BED, y

para determinar los efectos de la NES o la cama en los resultados de salud entre

los adolescentes.

En conclusión, el presente estudio sugiere que la trastorno por atracón y síndrome

del comedor nocturno son un problema muy importante entre los adolescentes,

especialmente los adolescentes con sobrepeso. Nuestro los resultados indicaron

que la experiencia de los alimentos craving es un factor importante en los

adolescentes con trastorno por atracón y el síndrome del comedor nocturno.

Índice de masa corporal se correlaciona positivamente con la ansia por la comida,

el trastorno por atracón y comedor nocturno síndrome. Por último, estos

problemas de alimentación pueden contribuir al desarrollo y / o mantenimiento

de la obesidad. Los antojos de comida como una construcción única con nueve

factores multidimensionales fue significativamente diferente en aquellos con

trastornos de la alimentación en comparación a no informar los trastornos

alimentarios. Nuestro trabajo sugiere que la experiencia de los antojos de

alimentos es un factor importante en los adolescentes con trastornos comiendo

Page 12: Desorden alimenticio

patrones que fiarther investigación méritos. Además, a corto plazo Intemet

facilitado por programa puede promover el mantenimiento de peso y reducir la

ingesta compulsiva en los adolescentes motivados.

ADOLESCENTS AND EATING DISORDERS.

Los adolescentes y los trastornos alimentarios

Alyssa E. Trujillo

Eastern New Mexico University

Portales, Nuevo México

Los medios de comunicación y la sociedad influyen en la juventud de los Estados

Unidos con poco realistas representaciones de cuerpos perfectos. Tanto las

mujeres como los varones se ven afectados por estas presiones para estar

delgada. Debido a esta presión, los adolescentes sienten que tienen que ser

delgada y fina, por lo que participar en la dieta y el ejercicio excesivo. Con el

tiempo, los pensamientos anormales asumir el control y las personas comportarse

de forma anormal que puede conducir a peligrosos trastornos de la alimentación.

Hay tres tipos de comer o trastornos, la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa y

trastornos alimentarios no especificados en otra categoría.

Los trastornos alimenticios afectan a los adolescentes socialmente,

académicamente, en lo personal, psicológica y médicamente. Hay muchas

señales de advertencia y los síntomas de estos trastornos. Los padres, maestros,

y los consejeros escolares tienen un papel crítico en la prevención de los

trastornos alimentarios. Existen varios métodos se usa para tratar los trastornos

alimentarios. Muchos adolescentes en los Estados Unidos sienten la necesidad de

ser delgada y bien formada estos pensamientos están basados en nociones

sociales que con el fin de ser considerados bello o atractivo, una persona tiene

que ser delgada. Películas, programas de televisión y revistas personificar estas

nociones.

Atractivas mujeres jóvenes generalmente se presenta como alto y delgado,

mientras que los chicos son atractivos generalmente musculares. La mujer

perfecta y el hombre en los medios de comunicación son ilusiones, que no existen.

Page 13: Desorden alimenticio

Según Kowalski (2000), los medios de comunicación crea imágenes que los

espectadores y los lectores tonto en creer que muchas personas son modelo

similar, cuando en realidad la mujer estadounidense promedio pesa ciento

cuarenta libras y es de cinco pies cuatro pulgadas de alto. En contraste, el modelo

típico es cinco pies y once pulgadas de alto y pesa ciento diecisiete libras. Tal

poco realista imágenes colocar inmensas presiones sobre los adolescentes tienen

"ideales" de los cuerpos. No es una coincidencia que el establecimiento de un

ideal de cuerpo delgado y el surgimiento de comer trastornos en los Estados

Unidos ha surgido y desarrollado simultáneamente (Vaskchenko, 2005).

Los investigadores han vinculado la presión para ser delgada como el factor

principal de mantener o perder peso. Una mayor presión para lograr un cuerpo

ideal puede aumentar la probabilidad de trastornos alimentarios (O'Dea y

Abraham, 1999). Según Peaslee (2006), dos de cada cuatro jóvenes tienen

Ideas saludables sobre la alimentación, la dieta y el peso. El número de casos de

trastornos de la alimentación tienen aumentado debido a los mensajes engañosos

que nuestros jóvenes están interiorizados que llevan a la autoestima baja,

Ideas saludables sobre la alimentación y la insatisfacción corporal. Trastornos de

la alimentación es un grave problema que necesita ser tratado. Los trastornos

alimenticios son la tercera enfermedad crónica más común entre las adolescentes

estadounidenses (Fisher, de oro, y Katzman, 1995).

El propósito de este trabajo es el de crear conciencia sobre los trastornos

alimentarios entre los adolescentes. Con el fin de crear conciencia, los temas se

abordarán las siguientes: tipos de trastornos alimenticios, trastornos de la

alimentación cómo afectan a los adolescentes de ambos sexos, los factores de

riesgo de trastornos de la alimentación, la prevención en la escuela, el hogar y la

comunidad, y por último, el tratamiento.

Tipos de Trastornos Alimentarios

Según la Asociación Americana de Psiquiatría en el diagnóstico y estadístico

Manual de Revisión de Trastornos Mentales texto, hay tres clasificaciones para los

trastornos de la alimentación, que son la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa y el

"trastorno alimentario no especificado." En anorexia nerviosa, hay dos subtipos;

Page 14: Desorden alimenticio

restringir y tipos atracones. Kerwin y Berkowitz (1996) definen los dos subtipos. En

primer lugar, el subtipo restrictivo de anorexia logra pérdida de peso en función de

la restricción de la ingesta calórica a través de dietas, ayunos, y / o excesivo

ejercicio. En segundo lugar, el subtipo purgante se refiere a los ciclos de atracones

/ purga cuando el individuo se involucra en los episodios de comer en exceso que

co-ocurren con sentirse fuera de control. Purga, realizada por vómitos

autoinducidos y / o el abuso de laxantes, diuréticos y enemas, sigue atracones. En

aquellos que sufren de anorexia nerviosa, hay una cantidad extrema de la pérdida

de peso.

Una persona con anorexia nerviosa es más del quince por ciento por debajo del

peso esperado. Los pacientes con anorexia niegan a mantener el peso en, o por

encima, lo que es mínimamente normal para la edad y altura, y tienen un miedo

intenso a aumentar de peso o grasa devenir. Tienen una alteración de la imagen

corporal que causa una excesiva influencia en la autoestima (Berg, 1995). Pryor y

Wiederman (1998) describen las personas con anorexia como reservado,

introvertido, constreñida, obsesiva y compulsiva. Los conocimientos de las

personas que se ven afectadas por esta tipo de trastorno de la alimentación se

distorsionan. Por ejemplo, están constantemente preocupados por su peso y

forma del cuerpo. Ellos puede ser muy delgado y esbelto, pero debido a su forma

de pensar distorsionada, todavía siento gorda y poco atractivo. Algunos

"anoréxicas" están muy preocupados por ciertas partes de su cuerpo como

abdomen, las nalgas y los muslos como ser "demasiado gorda". El DSM-IV-TR

(2000) establece la revisión del texto que "anoréxicas" utilizar una amplia variedad

de técnicas para estimar o medir su tamaño corporal o peso, incluyendo excesivo

de pesaje, de medición obsesiva de partes del cuerpo, y el uso constante de una

reflejan en busca de áreas percibidas de "grasa".

El segundo tipo de trastorno de la alimentación es la bulimia nerviosa. Las

personas con bulimia atracón sin control de grandes cantidades de comida, a

veces miles de calorías a la vez y luego purgar las calorías que salen del cuerpo a

través del vómito, muriendo de hambre, ejercicio excesivo, laxantes, o

Page 15: Desorden alimenticio

otros métodos (Peaslee, 2006). La bulimia tiene dos subtipos, el tipo de purga y

purga no.

El subtipo purga describe presentaciones en las que la persona recurre

regularmente a sentido vómito o uso excesivo de laxantes, diuréticos o enemas

durante el episodio actual.

Los individuos que se clasifican en el tipo no purgante han utilizado otras

inapropiado conductas compensatorias, como el ayuno o el ejercicio excesivo,

pero no recurre regularmente a vómitos autoinducidos o uso excesivo de laxantes,

diuréticos o enemas durante el episodio actual (DSM-IV-TR, 2000). La diferencia

entre la bulimia nerviosa y la anorexia nerviosa es que bulimia impide la obtención

de peso, mientras que en la anorexia, hay una pérdida extrema de peso.

Recurrentes conductas compulsivas tales como vómitos autoinducidos, uso de

laxantes, el exceso de ejercicio, y los diuréticos prevenir el aumento de peso. Un

componente importante de la bulimia nerviosa es borrachera comiendo. Kerwin y

Berkowitz (1996) define los atracones como algo que ocurre durante un episodio

de comer en exceso en el que la persona experimenta una falta de control

mientras se come y se siente que el consumo de no puede ser detenido a pesar

de que un extremo puede ser deseado. Durante un atracón, la persona come

rápidamente y sólo se detiene el comer rápido cuando él / ella tiene dolores

abdominales. Además, los episodios de comer en exceso suelen tener lugar en

privado, debido al factor de la vergüenza. De acuerdo con el DSM IV-TR (2000)

revisión del texto, para que una persona sea diagnosticada, los atracones y las

conductas compensatorias inapropiadas tienen lugar, como promedio, al menos

dos veces a la semana durante tres meses. La clasificación final de los trastornos

alimentarios es "trastornos alimentarios no especificados en otra categoría". Esta

categoría es para los trastornos de la alimentación que no cumplan con los

criterios de cualquiera alimentación específica trastorno. Los individuos que no

cumplen los criterios para ningún trastorno específico de comer, podrá tienen

síntomas similares a los diagnosticados con anorexia nerviosa o la bulimia

nerviosa, pero carecen de uno de los criterios de diagnóstico para adaptarse a

estos trastornos. Según Berg (1995) "atracones trastorno "también se incluyen en

Page 16: Desorden alimenticio

esta categoría. "Trastorno por atracón" incluye episodios recurrentes de la

alimentación compulsiva asociada con la angustia marcada. Comportamientos

específicos que se producen durante una borrachera incluyen comer rápido,

comer hasta sentirse incómodamente lleno, comer grandes cantidades de comida

cuando no hambre, y baja auto-estima (Kerwin y Berkowtz, 1996). Purgar no debe

ser con el fin de ser considerado trastorno por atracones. Kerwin y Berkowtz

(1996) también declaró que la falta de compensación comportamientos implica

que el individuo también puede ser obesas, y este tipo de trastorno asociado se

con una historia de vida de la obesidad. Este trastorno se encuentra que es

igualmente común en ambos sexos. De acuerdo con los criterios de investigación

para "trastorno por atracón" en el DSM-IV-TR (2000) revisión del texto, la ingesta

compulsiva debe llevarse a cabo, en promedio, al menos dos días a la semana

durante seis meses. Adolescencias Cómo se ven afectados por trastornos de la

alimentación Los tres tipos de trastornos de la alimentación son muy frecuentes

entre adolescencias. Ambos mujeres y los hombres se ven afectados. Los

desórdenes alimenticios generalmente se asocian y se encontró entre las

adolescentes. Según Berg (1995), algunos estudios han encontrado que hasta uno

de cada cien niñas entre las edades de doce y dieciocho años se ven afectados

por la anorexia nerviosa. El uso de laxantes en adolescentes con anorexia

nerviosa ha aumentado en frecuencia más tiempo (Turner, Batik, Palmer, Forbes, y

McDermott, 2000). Los adolescentes varones no puede ser ignorada porque ellos

también se ven afectados. A pesar de que la bulimia nerviosa es común en las

mujeres, hombres bulímicas están siendo identificados con mayor frecuencia en

diversos estudios de la escuela secundaria y poblaciones universitarias, la

prevalencia de la bulimia nerviosa ha oscilado entre ocho y veinte por ciento

por ciento entre la población femenina y un 1,4 por ciento entre los hombres (Zraly

y Swift, 1990). American Psychiatric Association. (2000). Diagnostic and statistical

manual of mental disorders (4th ed., test revision). Washington, DC: American

Page 17: Desorden alimenticio

VARIABLES ASSOCIATED WITH THE RISK OF EATING

DISORDERS IN ADOLESCENCE

Es bien conocido que los trastornos de la conducta alimentaria (TCAs) afectan

ante todo a la población femenina, muy especialmente durante la adolescencia.

Ahora bien, ¿hasta qué punto cambia el riesgo de que la población adolescente no

clínica padezca tales trastornos en función de variables que pueden ser objeto de

atención preventiva? Este estudio pretendía esclarecer si dicho riesgo: 1. es

mayor en el grupo de edad de 15-18 años que en el de 12-14 años; 2. si

guarda relación con el autoconcepto físico; 3. si se relaciona con la actividad física

practicada; 4. si es siempre mayor en las mujeres adolescentes que en los

adolescentes varones con independencia de las tres variables citadas arriba.

Participaron en el estudio 740 adolescentes, 366 hombres (49.46%) y 374 mujeres

(50.54%), con edades comprendidas entre los 12 y 18 años ( =14.33; DT=1.41).

Todos los participantes respondieron al Eating Disorders Inventory (EDI), de

Garner y Olmsted, un cuestionario destinado a evaluar conductas y pensamientos

propios de los TCAs. Todos completaron también un cuestionario acerca de sus

hábitos de actividad física. Además, una parte de esta muestra, concretamente

347 sujetos (172 hombres y 175 mujeres), contestó el Cuestionario de

Autoconcepto Físico (CAF), de Goñi, Ruiz de Azúa y Rodríguez.

Se llevaron a cabo diferentes análisis estadísticos mediante el programa SPSS

11.5 para Windows: análisis de la varianza factorial, ANOVA de un factor,

contraste de medias, análisis de gráficos de perfil para interacciones, así como

comparaciones múltiples de Bonferroni.

Los resultados obtenidos permiten afirmar que el riesgo de padecer trastornos

alimentarios, tal como lo indican unas puntuaciones significativamente superiores

en el EDI, es mayor en lasmujeres que en los hombres, en el grupo de edad de

15-18 años que en el de 12-14 años, en personas con autoconcepto físico bajo

y en quienes realizan actividad físico-deportiva de forma esporádica en

comparación con quienes la practican de forma habitual. La insatisfacción corporal

y las conductas bulímicas se incrementan, en efecto, en el segundo tramo de la

adolescencia con independencia de que la práctica deportiva se realice de forma

Page 18: Desorden alimenticio

esporádica o habitual. La insatisfacción corporal, igualmente, aparece asociada

con puntuaciones bajas en el autoconcepto físico (tanto en la dimensión de

condición física como en la de atractivo físico), pero tal asociación no es

significativa en el grupo de 12 a 14 años. Las chicas de entre 15 y 18 años

muestran un riesgo significativamente mayor que los chicos. Asimismo, las

diferencias de género en trastornos alimentarios, que no son significativas

en el grupo de 12-14 años, vuelven a ser claras en éste. Estos datos reclaman

prestar atención al grupo de edad de entre 15 y 18 como etapa particularmente

crítica, al menos con respecto a la primera adolescencia (12-14 años).

Por otro lado, se confirma que los trastornos de alimentación conforman una

patología propia de mujeres. La percepción del atractivo físico propio tiene, por

ejemplo, un comportamiento diferente de un género a otro: no se correlaciona con

los trastornos en el caso de los varones pero sí en el de las mujeres. De todos

modos, estas consabidas diferencias de género no son las mismas, como ya se ha

dicho, en distintos grupos de edad ni tampoco cuando tanto los chicos como las

chicas realizan actividad física de forma habitual. En este último supuesto

persisten las diferencias entre ambos pero se reducen. La edad y el autoconcepto

se convierten, en consecuencia, en variables moduladoras del riesgo de padecer

trastornos alimentarios, así como la actividad física.

De los resultados del estudio se desprende que la actividad física moderada se

correlaciona con menor incidencia de patología alimentaria, por lo que se convierte

en altamente recomendable. No obstante, entre los asuntos que precisan más

investigación figura el de la relación entre distintas modalidades e intensidades

de actividad física y el bienestar psicológico, más allá de la clasificación

dicotómica en adolescentes poco activos versus adolescentes activos utilizada en

este estudio. El riesgo, evaluado mediante el EDI, de padecer trastornos

alimentarios se ha mostrado fuertemente asociado con el autoconcepto físico

medido con el CAF, lo que invita a incluir este último constructo no sólo en los

diseños de investigación sobre la autopercepción del yo físico sino también en los

programas de orientación, por dos razones básicas. De un lado, la utilización de

cuestionarios como el CAF que miden autoconcepto físico puede convertirse en

Page 19: Desorden alimenticio

una forma rápida y económica de detectar precozmente sujetos con riesgo de

padecer trastornos alimentarios entre población adolescente no clínica. De otro,

una forma viable de educar con respecto a los TCAs consiste en fomentar el

desarrollo del autoconcepto físico por medio de programas de intervención

adecuados.

MÉTODO

Hubo 740 participantes adolescentes, 366 hombres (49,46%) y 374 mujeres

(50.54%), con edades comprendidas entre los 12 y 18 (= 14.33 años, SD = 1,41).

El 12 a 14 años grupo de edad de edad, fue compuesta por 227 hombres (= 13,48

años; SD = 0,87) y 248 mujeres (= 13,49 años, SD = 0,88); y el grupo de 15 a 18

años de edad estaba compuesta por 139 hombres (= 15.88 años, SD = 0,73) y

126 mujeres (= 15,84 años, DE = 0,70).

Los participantes eran de clase media y de familias integrados en la vida social de

su zona. Llegaron de tres ciudades pequeñas (con entre 50 y 100 mil habitantes)

en el norte de España y lideró a todos los una vida normal de la escuela,

asistiendo a las escuelas públicas. Ninguno de ellos tenía sido previamente

diagnosticados con trastornos de la alimentación. La muestra total obtuvo 20,28 en

la masa corporal Quételet índice, una puntuación que está dentro de los límites

normales, aunque fue menor (media de 19,82) entre las mujeres que entre los

hombres.

Instrumentos

Todos los participantes completaron el Inventario de Trastornos Alimentarios (EDI),

por Garner y Olmsted (12), un cuestionario diseñado para evaluar los

comportamientos y pensamientos típicos de TCAs. El equipo se compone de ocho

escalas: tres que miden comportamientos y características directamente

asociado con TCAs, y cinco que evaluar la personalidad rasgos asociados con

tales comportamientos. También es posible para obtener una puntuación global de

la suma de los logrado en ocho escalas del cuestionario. En este informe, sin

embargo, sólo los datos correspondientes a la puntuación total del EDI se

presentan, junto con la tres escalas más directamente relacionados con la

anorexia y bulimia nervosas: Obsesión por la Delgadez (obsesión con

Page 20: Desorden alimenticio

delgadez, la preocupación excesiva por el peso, miedo intenso de poner en peso);

Bulimia (tendencia a pensar / caer en atracones sin control), y la insatisfacción

corporal. El método de respuesta para el intercambio electrónico de datos consiste

en un 6 - grado de la escala Likert en la que las tres primeras no califican

y la cuarta, quinta y sexta hacerlo con valores de 1, 2 y 3, respectivamente; las

puntuaciones más altas reflejar un mayor riesgo o la probabilidad de padecer

algún tipo de TCA. Este cuestionario ha demostrado ser un método eficaz de

evaluar el riesgo de desarrollar algún tipo de TCA

(1). Con base en las respuestas dadas, numerosos estudios Se han llevado a

cabo con ambas muestras clínicas y los sujetos sin diagnóstico clínico previo (27,

33). Todos los participantes también completaron un cuestionario sobre

sus hábitos de actividad física, formado por los elementos seleccionados

Comportamiento de Salud Wold en escolares (34). La respuestas a este

cuestionario nos permitió clasificar cada sujeto como esporádico (de vez en

cuando) o habitual (Dos o más días a la semana) deportista. Además, parte de la

muestra, específicamente 347 sujetos (172 hombres y mujeres 175) se les pidió

que completar el Cuestionario de autoconcepto Físico (CAF) por Goñi, Ruiz de

Azúa y Rodríguez (15). Esta instrumento, escrito originalmente en español,

consiste en 36 artículos divididos en seis escalas, de los cuales cuatro

(Habilidad física, condición física, atractivo físico y Fuerza) se consideran las

dimensiones del autoconcepto físico; las otras dos escalas de medición física

general el autoconcepto y la autoestima general. En este informe, los datos sólo

correspondiente a las cuatro subescalas específicas son presentado. Confiabilidad

coeficientes (alfa de Cronbach) para estas escalas son las siguientes: la

capacidad física, 0,8488; física condición, 0,8850, atractivo físico, 0,8700, Fuerza,

0,8379. Estos cuatro componentes representaron el 61,34% de la varianza del

cuestionario.

Un número de diferentes análisis estadísticos se llevaron a cabo utilizando el

programa SPSS 11.5 para Windows: análisis factorial de varianza, ANOVA de un

factor, significa verificación, el análisis de los gráficos de perfil de interacciones y

comparaciones múltiples de Bonferroni.

Page 21: Desorden alimenticio

RESULTADOS

Los datos presentados en la tabla 1 nos permiten comparar la respuestas dadas

por los dos participantes masculinos y femeninos para el intercambio electrónico

de datos.

DISCUSIÓN

El objetivo principal de este estudio fue identificar algunos riesgos factores

asociados con trastornos de la alimentación y primarios no asociada con otras

patologías, que afectan adolescentes de no-clínica de la población con edades

comprendidas entre 12 y 18 años. A diferencia de muchos otros estudios, los

participantes no habían sido diagnosticados previamente con el consumo de

trastornos, el grupo de la muestra estaba compuesta por estudiantes de diferentes

escuelas que vivieron una vida escolar normal.

Más de 30 variables han sido reportados como putativo los factores de riesgo para

el desarrollo de los trastornos alimentarios. Delgado Preocupación por el cuerpo y

la presión social son los más fuertes indicadores proximales de su inicio (29), pero

el género, adolescencia y la actividad física son también muy alta factores de

riesgo importantes. La construcción de un amplio contexto teórico de los factores

de riesgo aunque no, la tema de este artículo, es sin embargo una importante

corriente paso en esta área de investigación (17). El estudio de la interacción entre

diversos factores de riesgo, nuestro objetivo específico en este momento, también

pretende sistematizar los conocimientos disponibles con respecto a los factores de

riesgo para padecer trastornos alimentarios. Los resultados obtenidos nos

permiten afirmar que, como se indica por puntuaciones significativamente más

altas en el intercambio electrónico de datos, el riesgo de sufren de trastornos de la

alimentación es mayor entre las mujeres que los hombres, en el rango de edad 15-

18 que en el 12-14 uno, en los que tienen un físico bajo concepto de sí mismo y en

los que se dedican de manera esporádica y no regular en algún tipo de actividad

física.

Un gran número de proyectos de investigación anteriores han llegó a la conclusión

de que el periodo de mayor prevalencia de trastornos de la alimentación es de

Page 22: Desorden alimenticio

entre 12 y 25 años de edad. Los datos publicados por este estudio apuntan al

periodo entre el 15 y 18 años como una etapa particularmente crítica, al menos en

comparación con la adolescencia temprana (12-14 años). Cuerpo insatisfacción y

aumento de conductas bulímicas durante este período, independientemente de si

el sujeto se dedica a regular o esporádica actividad deportiva. Del mismo modo, el

cuerpo insatisfacción se asocia durante este período con un bajo autoconcepto

físico (tanto en el estado físico y dimensiones físicas atracción), a pesar del hecho

de que esta asociación no es significativa durante el 12 a 14 años. También cabe

destacar que durante este período, las niñas son mucho más riesgo que los

varones, y además, las diferencias de género en los trastornos de la alimentación

que no son significativas durante el período de 12 a 14 años convertido en

claramente lo que durante la etapa posterior. En cuanto a la prevención

y las cuestiones de orientación, estos datos nos instan a prestar atención

a los adolescentes, especialmente entre los 15 y 18 años de edad, y en particular

a las jóvenes.

Nuestros resultados, por lo tanto, confirmar que los trastornos alimentarios

constituyen una patología de las niñas y las mujeres. La percepción de atractivo

físico sí mismo, por ejemplo, implica un comportamiento muy diferente, de un

género a la otra, que se correlaciona con trastornos de la alimentación en el caso

de las mujeres, pero no en la de los hombres. Sin embargo, como hemos dicho,

estos a menudo grabadas las diferencias de género difieren de período de edad a

la siguiente, así como cuando los niños y niñas en cuestión participar en

actividades físicas sobre una base regular (en este último caso, las diferencias de

género permanecen, pero se reducen en gran medida). La edad, el autoconcepto

y la actividad física, por lo tanto, se convierten en variables de modulación para el

riesgo de padecer trastornos de la alimentación.

La actividad física moderada es claramente mejor que un sedentario estilo de vida,

la participación en la actividad física regular es altamente recomendable, en

general, como una manera de prevenir trastornos de la alimentación. La situación

de quienes se dedican en la actividad física / deporte en un compulsivo o

altamente competitivo manera, sin embargo, es muy diferente. En tales casos, el

Page 23: Desorden alimenticio

reto es cómo canalizar su exceso de actividad (4). Estos defensores de programas

de estudio dirigidos no sólo a aumentar actividad física, sino también en el

mantenimiento de cuerpo satisfacción (22). En este sentido, uno de los aspectos

que los requieren más investigación es la relación entre los diferentes tipos e

intensidades de actividad física y psicológica bienestar (14) desde una perspectiva

que va más más allá de la clasificación dicotómica utilizada en este estudio de los

adolescentes, ya sea como sujetos activos o no activos. El riesgo de padecer

trastornos de la conducta Se ha encontrado que estar estrechamente asociado

con física autoconcepto. Esto sugiere que el último constructo deben incluirse no

sólo en los diseños de investigación proyectos centrados en la auto-percepción de

lo físico-yo, pero también en el diseño de programas de orientación, para dos

básico razones. Por un lado, la utilización de cuestionarios tales como la CAF, que

miden el autoconcepto físico, puede resultar un método rápido y económico de

asegurar la detección temprana de los sujetos entre los no-clínica población

adolescente en riesgo de sufrir de comer trastornos. Y en la otra manera, uno

viable de evitar TCAs es promover el desarrollo de la física concepto de sí mismo

a través de programas de intervención adecuados. El grupo con mayor necesidad

de apoyo educativo en este campo es la población de mujeres adolescentes de

edades comprendidas entre 15 y 18 años. Este estudio proporciona básico de dos

criterios a este respecto: en primer lugar, que la promoción de actividad física

regular puede ser uno, aunque no la sólo, recurso, ya que por sí misma no es lo

suficientemente eficaz para erradicar el riesgo de trastornos de la alimentación, y

segundo, que se debe prestar especial atención a los que tienen desarrollado una

baja auto-percepción tanto de su físico condición y el atractivo físico.

PROFILAXIA Y TRATAMIENTO DE LA OBESIDAD Y LA DELGADEZ

Fecha Sábado, 27 de julio de 1996

Publicación Gordos y flacos

Autor Dr. Gregorio Marañón

Page 24: Desorden alimenticio

-Gordos y flacos

PROFILAXIA Y TRATAMIENTO DE LA OBESIDAD Y LA DELGADEZ • Esquema

del problema Naturalmente, no vamos a hacer aquí un estudio detallado del

tratamiento de los estados extremos de la obesidad y de la delgadez. Lo esencial

es esto: la delgadez extrema y la gran obesidad son estados difíciles de curar;

pero relativamente fáciles de prevenir. Lo importante, por lo tanto, es que no se

llegue a ser un ser escuálido o un gordo formidable.

Este cuidado profiláctico, preventivo, corresponde a los padres y maestros, sobre

todo, como es natural, a aquéllos. Es frecuente, en la práctica, que los padres se

preocupen mucho más —cuando no se hacen los distraídos del todo— de las

condiciones intelectuales y culturales de sus hijos que de estos estados

morfológicos, que luego, como hemos visto, pueden influir tanto, incluso sobre la

misma vida psíquica. Cuando un niño está muy flaco, la omisión es menos

frecuente, porque suele asociarse la mezquindad del peso con signos de

enfermedad. Pero los niños gordos no despiertan en los progenitores y en el resto

de la fa- 107 milia más que sentimientos de admiración satisfecha; y en los

vecinos de envidia mal disimulada.

Es, pues, preciso que los padres de los niños gordos sepan que bajo el aparente

florecimiento de la salud se esconde, con toda seguridad, un trastorno, que

puede llegar a ser grave, de la nutrición: el desequilibrio del aparato regulador del

metabolismo, que en las páginas precedentes hemos descrito. Y que el precoz

obeso cuyo retrato se exhibe con orgullo, mostrando los miembros rollizos, sobre

un almohadón de terciopelo es, tal vez, un futuro mixedematoso, o un futuro

eunuco. Y esta obesidad será tanto más difícil de combatir cuanto más nos

alejemos de la niñez. Sobre todo, pasada la pubertad, el metabolismo adquiere

una fijeza mucho mayor y se redoblan los inconvenientes de nuestra terapéutica

para modificarlo.

¡Guerra, por lo tanto, sin cuartel, a los niños cebones, «a los rollos de manteca»!

Prevención y cura de la obesidad en los niños En estas primeras etapas de la vida

Page 25: Desorden alimenticio

es fácil hacer el diagnóstico de los posibles trastornos neuroglandulares

responsables de la obesidad.

Los factores exógenos son prácticamente nulos en la niñez: los niños, salvo

excepción, comen lo que deben, si no se les educa mal; y aunque 108 coman con

algún exceso, compensan éste con el gasto muscular incesante. La terapéutica

queda, pues, limitada, a lo endocrino. La insuficiencia tiroidea, que en sus formas

atenuadas reviste apariencias a veces dudosas, pero bien conocidas, se

diagosticará y se tratará con éxito. Igualmente los trastornos hipofisarios y

suprarrenales capaces de determinar la obesidad.

Y con mayor facilidad aún, sobre todo en los niños del sexo masculino, la

insuficiencia genital, defecto que se ofrece al observador, a flor de piel.

Desgraciadamente, los prejuicios de una moral absurda suelen entorpecer,

todavía, aunque ya mucho menos que antes, esta observación: en perjuicio

evidente del futuro eunucoide.

A mí me ha sucedido y a nuestros antepasados en la Medicina les pasaba, sin

duda, con mucha mayor frecuencia, que acuden a mi consulta adolescentes o

jóvenes, casi adultos, con un defecto genital ya bien constituido, y, por lo tanto,

con remedio difícil; y con ellos sus madres, que, sollozando, nos confiesan que lo

venían advirtiendo desde los primeros días de la vida, cuando les mudaban los

pañales; pero que «les había dado reparos hablar del asunto con nadie; incluso

con el propio marido».

Lo que antes de la pubertad hubiera tenido remedio fácil, estaba ya fuera del

alcance de nuestra eficacia.

Los resultados que se consiguen en los niños diagnosticados a tiempo, con una

ligera reducción del régimen y una opoterapia conve- 109 niente (generalmente

con extracto tiroideo), son admirables; a veces, de teatral eficacia.

Page 26: Desorden alimenticio

El haber contribuido en mis constantes recomendaciones a este diagnóstico

oportuno de las insuficiencias genitales del niño y a su tratamiento, es una de las

satisfacciones de mi vida.

El problema de la obesidad en los adultos • Cuando se trata de adultos, con

obesidad ya hecha, el problema es mucho más difícil.

Los resortes metabólicos se mantienen obstinadamente en su vicio, y la grasa

acumulada resiste con tenacidad. En muchas formas de adiposidad, pasados los

cuarenta años, la grasa se organiza en forma lipomatósica o en lipomas

verdaderos, que apenas obedecen a los más rigurosos ataques.

Las medicinas antes citadas suelen ser, entonces, mucho menos útiles. Y las

restricciones de la alimentación, para que tengan verdadera eficacia, implican tal

cantidad de sacrificios en el enfermo, que si no se cuenta con un convencimiento

previo y con una voluntad casi heroica del paciente, no suelen servir para nada. O,

a lo sumo, sirven para disminuir unos pocos kilos que, a la vuelta de unas

semanas, en cuanto el rigor del médico se atenúa, se recobran otra vez.

110 El obeso adulto, constituido, debe tener en cuenta que su adelgazamiento no

será obra de un plan médico, sino de un cambio total de régimen de vida. El ser

gordo es el resultado de toda una vida incorrecta; y hay que corregirla toda ella. Si

no se plantea así el problema, el paciente irá de consulta en consulta, de sanatorio

en sanatorio, adelgazando un poco, volviendo a engordar y, al fin, se cansará y se

resignará con su peso. Mientras el gordo no se coloque en la situación mental

comprensiva de su problema, tendrá razón al decir, como Beraud: «Todo hace

engordar a los obesos»: el régimen, los deportes, las duchas, la falta de sueño. . .,

hasta la guerra; la guerra, sí, la misma guerra, ha sido para muchos un factor del

embonpoint.

Page 27: Desorden alimenticio

Valor del empirismo y de la sugestión en el tratamiento de la obesidad Es

necesario que ese convencimiento y esa aptitud para el sacrificio sobrevengan

para que el gordo adelgace. Y entonces, adelgazará sin necesidad de recetas.

Puede, pues, decirse, sin exagerar, que el único remedio eficaz para perder grasa

es la convicción, o, si se quiere, la sugestión.

Pero, ¡cosa extraña! Esa convicción, esa sugestión, que no la comunica, puede

decirse 111 que jamás, el médico con razones teóricas; que la logra

espontáneamente el paciente por consideración a su propia salud, aun en los

casos en que, notoriamente, se ve que la obesidad dificulta la vida; se adquiere,

en cambio, por las razones que rigen la moda y que hemos comentado ya. Yo he

tratado, inútilmente, con todo rigor y con toda corrección científica, a muchas

mujeres y hombres (más mujeres) obesos, sin conseguir más que resultados

mediocres y efímeros. Y estas mismas personas, años después, al sobrevenir la

moda de la flacura, han adelgazado espontáneamente hasta límites extremos: por

la simple sugestión, principalmente erótica, del ambiente.

Les he preguntado muchas veces a estos enfermos, médicos de sí mismos, qué

han hecho para adelgazar. Y, casi siempre habían hecho, no un plan determinado

por un hombre de ciencia, sino lo que se les había ocurrido, lo que el instinto les

aconsejaba: o bien retazos de regímenes tomados de aquí y de allá, y adaptados

empíricamente a sus vivencias. Porque cada gordo lo es por un mecanismo

individual; y, en cuanto adquiere la convicción de que debe adelgazar, se aplica,

por instinto, el mecanismo de reducción apropiado. Para adelgazar hay, por de

pronto, que pasar hambre durante mucho tiempo; y este sacrificio no se hace casi

nunca por prescripción facultativa. Es curioso, no obstante, hacer notar la

importancia que la mente actual da al refrendo científico; lo demuestra el hecho de

que muchos de estos planes espontáneos llevan el nombre de un médico; con el

mío han corrido en estos años, por lo menos dos o tres, que jamás había pensado

yo; y, sin duda, esta forma apócrifa ayudaba a ser constantes a los entusiastas

obesos que seguían el duro método; y puedo asegurar que varios de ellos habían

Page 28: Desorden alimenticio

desmayado a los pocos días de intentar seguir los consejos que yo mismo, en

realidad les había dado con el mismo fin adelgazante.

Mucho más eficaz que la ciencia es casi siempre la magia con un sello de

pretendida ciencia. Y el médico debe reconocerlo así, con humildad, y pensar en la

perfección de una medicina futura, sin localizar su vanidad en las imperfecciones

de la presente.

En cambio, cuando los obesos piden un plan al médico, muchas veces obedecen

subconscientemente a un subterfugio para tranquilizar a su conciencia, sin hacer

el menor sacrificio. Las trampas que el apetito inventa para burlar un régimen de

alimentación, son incalculables. Muchas veces me ha ocurrido ver a obesos que

no adelgazaban con un régimen bien calculado. Me reiteraban que lo seguían

escrupulosamente; y, ciertamente, no tenían la intención de mentir. Pero me

bastaba comer un día con ellos, y controlar con disimulo su alimentación para ver

cómo llenaban, sin darse cuenta, el desnivel entre la ración prescrita por el médico

y la exigida por su apetito.

• Reglas generales Mi actitud, en este punto, es pues, escéptica respecto a la

eficacia de la Medicina. Creo que una moda como la actual, con el enorme poder

sugestivo de su sentido erótico, puede hacer más por lograr una alimentación

correcta que todos los esfuerzos de los médicos. Sin embargo, si se me pidiese

una norma general de tratamiento para la obesidad de los adultos, yo diría estas

reglas esquemáticas, arrostrando todos los inconvenientes de usar en Biología de

los aforismos: l9 Todo gordo debe hacer doble ejercicio del que hace. Sobre todo,

es importante hacer un ejercicio que suponga un juego forzado del diafragma,

porque la obesidad abdominal, en gran parte, está determinada por la falta de

gimnasia suficiente del músculo diafragmático.

Por ello, debe aconsejarse a todo obeso y singularmente a todo obeso incipiente,

que haga, cada mañana, una sesión, aunque sea corta, de movimientos

Page 29: Desorden alimenticio

respiratorios profundos, de verdadera gimnasia de diafragmática; es el mínimo de

lo que se llama «cultura física», lo más inocente, lo más hacedero y creo que lo

más eficaz.

29 Todo gordo debe comer la mitad de lo que come. Ya hemos insistido sobre el

valor del factor alimenticio en la génesis de la obe- 114 sidad y sobre el gran

disparate de querer ajustar la alimentación a módulos generales. Así, muchos

obesos nos afirman que comen poco. Y será verdad, comparado con la ración

general de su familia o de su raza. Pero, con arreglo a su propio metabolismo, es

seguro que comen demasiado. Digamos esquemáticamente que comen el doble

de lo que deben; y deben, en consecuencia, reducir proporcionalmente su ración.

39 En todo gordo debe analizarse cuidadosamente el estado de equilibrio de su

sistema regulador de la nutrición (neuro-endocrino), y ayudar las prescripciones

dietéticas expuestas con la medicación oportuna. En esta medicación, juega la

tiroidina un papel primordial, aunque no constante.

Tratamiento de la delgadez El tratamiento de la delgadez tiene mucha menos

importancia. La delgadez, como ya hemos dicho, casi nunca constituye una

enfermedad, ni da ocasión a tratarla. Pero si esta ocasión llega, nos regiremos por

principios contrarios a los que hemos dicho para la obesidad: menos ejercicio; más

alimentación, y las drogas oportunas, que no pueden ser expuestas aquí de un

modo circunstanciado. Recordemos sólo nuestros ensayos, ya citados, y

confirmados cada día, sobre la influencia de las pequeñas dosis de tiroidina en el

aumento del peso, 115 y la indudable acción de la insulina, a pequeñas dosis, para

lograr el engrasamiento en muchas formas obstinadas de delgadez.

Conclusión Como conclusión de esta monografía, podríamos decir: parte de la

humanidad come con tanto exceso, como otra parte de la misma come

defectuosamente. Reduciendo aquélla a la mitad de su presupuesto alimenticio y

dándoselo a los que comen mal, podrían, sin privarse de ninguno de sus gustos,

Page 30: Desorden alimenticio

seguir siendo felices; vivirían más años y con menos achaques; su éxito sexual se

multiplicaría; y habrían, en fin, contribuido grandemente a resolver el problema

económico del mundo: que, al fin, se resolverá, de grado o por fuerza. Cierto que,

mientras la especie humana perdure, habrá gordos y flacos. Lo deseable es que

cada vez sea mayor el número de los que no lo sean del todo, para su propio bien

y el de los demás.

Título ANOREXIA Y BULIMIA EL HAMBRE DE SER

Fecha Miércoles, 1 de febrero de 2006

Publicación Max

Autor Rosalina Piñera

Página Laboratorio

No son un problema femenino, diez por ciento de las personas con desórdenes

alimenticios son hombres y la tendencia esta en aumento

Emociones caníbales

La obsesión por la esbeltez distorsiona la percepción corporal: los hombres se

sienten y se ven gordos aun cuando su peso esté muy por debajo del indicado.

Los pacientes masculinos han incrementado, hace 20 años era uno por cada 20

mujeres, hoy, es uno por cada 10 aunque resulta menos evidente por razones

culturales. Además, se advierten otro tipo de prácticas que son igual de dañinas y

peligrosas como extenuantes jornadas de ejercicio o uso de esteroides.

El estigma del cuerpo

Los desórdenes alimenticios son más frecuentes en países industrializados donde

ser esbelto es sinónimo de salud y belleza, pero sólo es el factor desencadenante;

en realidad se derivan de un conjunto de circunstancias familiares, físicas,

psicológicas y sociales: “Es una forma de manejar problemas de autoestima y

seguridad” interviene el psiquiatra Alfredo Zúñiga.“Hay un condicionamiento claro:

asociar comida con bienestar, por ejemplo si un bebé llora lo primero que hace la

Page 31: Desorden alimenticio

madre es darle de comer”. Mantenerse delgado se establece como una forma de

ser aceptado por los demás.

Dieta letal

Comer o no comer, ese es el dilema de quienes padecen algún trastorno

alimenticio. Sean anoréxicos, bulímicos o comedores compulsivos, han perdido

el control sobre su forma de alimentarse haciéndose daño y arriesgando su vida.

La Organización Mundial de la Salud, en el documento publicado en 1991 sobre

Prevención del Suicidio, incluye a la anorexia y la bulimia dentro de las

situaciones de riesgo. No es exageración: 20% de los anoréxicos mueren

prematuramente por inanición, suicidio o complicaciones relacionadas con el

padecimiento: insuficiencia renal o paro cardiaco, entre los más frecuentes.

Lecciones de ingesta

La anorexia y la bulimia son problemas de origen emocional y deben ser tratados

por psicólogos. La terapia cognitiva conductual, ha demostrado más eficacia en

este tipo de afecciones comparada con otros métodos como el psicoanálisis.

Dependiendo del grado de afectación se recomienda el apoyo de un médico y un

nutriólogo para resarcir los estragos físicos y establecer una relación sana entre la

comida y el paciente.

Anorexia

Literalmente significa “falta de alimento”. La persona limita su ingesta de comida

al grado de morirse de inanición. Comienza eliminando los carbohidratos y las

calorías, continúa con las grasas para seguir con las proteínas e incluso los

líquidos. El cuerpo baja el ritmo metabólico para guardar reservas: no produce

suficiente calor, ahorra energía en la digestión tornándola deficiente y comienza a

consumirse a sí mismo. Algunos enfermos de anorexia presentan conductas

Page 32: Desorden alimenticio

compensatorias como los bulímicos: uso de diuréticos, pastillas de dieta, laxantes

o vómitos provocados.

MANIFESTACIONES FÍSICAS

--*Ritmo cardiaco bajo, riesgo de arritmias o infarto

--*Baja la presión arterial

--*Disminución de masa ósea

--*Trabajo intestinal insuficiente y estreñimiento

--*Anemia, desnutrición

--*Vello fino en espalda, antebrazos, muslos, cuello

--*Piel deshidratada y agrietada

--*Uñas quebradizas, caída del cabello

--*Hinchazón y dolores abdominales

--*Infecciones respiratorias

--*Dolor de cabeza y espalda

MANIFESTACIONES EMOCIONALES

--*Miedo intenso a ser obeso

Page 33: Desorden alimenticio

--*Depresión, sentimientos de culpa y odio a sí mismo

--*Baja autoestima, irritabilidad, ira

--*Realiza rituales con la comida

--*Ropa holgada para esconder el cuerpo

--*Disminución del deseo sexual

TEST

¿Tienes un trastorno alimenticio?

Anorexia

1.- ¿Haces cualquier cosa para evitar comer aunque tienes hambre?

2.- ¿Estas obsesionado con la comida, la talla, el peso y la forma de tu cuerpo?

3.- ¿Tienes un temor intenso a subir de peso?

4.- ¿Lo único que comes son alimentos light?

5.- ¿Te aíslas socialmente?

6.- ¿Te volviste vegetariano y aun así te restringes?

7.- ¿Te sientes gordo y te aíslas por ello?

8.- ¿Te sientes obeso aun cuando sabes que estas por debajo de tu peso normal?

Page 34: Desorden alimenticio

9.- ¿Niegas que tienes hambre?

Bulimia

1.- ¿Ingieres grandes cantidades de comida en secreto?

2.- ¿Estás obsesionado con la comida, la talla, el peso y la forma de tu cuerpo?

3.- ¿Preguntas constantemente cómo luces?

4.- ¿Vomitas a escondidas después de comer?

5.- ¿Te aíslas socialmente?

6.- ¿Usas sustancias para modificar tu peso (laxantes, diuréticos, pastillas de

dieta, enemas)

7.- ¿Te ejercitas como castigo cuando comes de más?

8.- ¿Te sientes culpable después de comer?

9.- ¿Te levantas a comer a la mitad de la noche?

10.-¿Te “ganas” la comida con el ejercicio?

*Más de tres respuestas positivas indican

Los desórdenes alimenticios tienen la mortandad más alta entre todas las

enfermedades mentales

Page 35: Desorden alimenticio

Bulimia

Literalmente se traduce como: "hambre de buey". El individuo ingieren grandes

cantidades de comida en poco tiempo con sentimientos de culpa que conducen a

conductas “compensatorias” para contrarrestar el efecto de la comida en el peso

corporal: se inducen al vómito, ingieren laxantes, se aplican enemas o sobre

ejercitan. De hecho, la diferencia entre los comedores compulsivos y los bulímicos

son las conductas compensatorias, iguales a las de los anoréxicos

MANIFESTACIONES FÍSICAS

--*Engrosamiento de las glándulas del cuello

--*Lesiones vasculares en mejillas y bajo los ojos

--*Garganta y esófago irritados (por el vómito)

--*Fatiga y dolores musculares

--*Desgaste de esmalte y perdida de dientes (por el vomito)

--*Oscilaciones de peso, entre 5 y 10 Kg.

--*Debilidad, mareos

--*Afecciones gástricas

--*Deshidratación

--*Parálisis intestinal por el abuso de laxantes

Page 36: Desorden alimenticio

MANIFESTACIONES EMOCIONALES

--*Baja autoestima, depresión y tristeza

--*Sensación de fracaso y perdida de control

--*Desmotivación para disfrutar la vida

--*Baja el deseo sexual

--*Ansiedad, nerviosismo

Título ANOREXIA NERVIOSA DESORDEN OBSESIVO –

COMPULSIVO EN PACIENTES ADOLESCENTES CON

ESQUIZOFRENIA COMPLICACIONES ACADÉMICAS EN

LA UDG: DOCTOR CARLOS RAMÍREZ ESPARZA

APUNTES Y RECOPILACIONES INFECCIONES VIRALES

EL SÍNDROME METABÓLICO EN PACIENTES CON

ENFERMEDAD MENTAL SEVERA MANIFESTACIONES

DEL NIÑO PREMATURO RELACIONADAS CON EL

NEURODESARROLLO

Fecha Jueves, 1 de diciembre de 2005

Publicación Investigación en Salud

Autor Gerardo Tovar Rubio, María Teresa Salcido Ramírez,

Claudia Ontiveros Esqueda, Rodolfo Morán, Óscar Raúl

Santos López, Alma Gabriela González Saray

Investigación en Salud

Diciembre-, 2005;

Volumen 7: Numero 3

Page 37: Desorden alimenticio

La anorexia nerviosa (AN) es un trastorno alimenticio que usualmente comienza

en la adolescencia y se caracteriza por una dieta rigurosa, casi siempre

acompañada por ejercicio compulsivo, y en algunos pacientes, con vómitos

inducidos posterior a la ingestión de una gran cantidad de alimentos, resultando

esto en una pérdida de peso sostenida. Otros hallazgos incluyen una imagen

corporal distorsionada, además de un deseo vehemente de perder más y más

peso, y un miedo perverso a ganar kilos. Las mujeres tienen un riesgo mayor de

padecer este trastorno, pero los hombres no están exentos. Este padecimiento

se asocia frecuentemente con depresión mayor, distimia, trastornos de ansiedad y

trastorno obsesivo-compulsivo.

Título TIPOS DE OBESIDAD

Fecha Lunes, 26 de febrero de 1996

Publicación EPOCA

Autor Verónica Pérez Alejos

Gelatinosa." En este tipo de obesidad hay retención grave de líquidos,

principalmente en la capa subcutánea de la piel, dando un aspecto empastado y

gelatinoso. Un estado más avanzado del proceso hace que se formen fibras o que

se aumenten las ya existentes, de ahí el nombre de fibrositis. Existen numerosos

factores que pueden producirla, entre los que se encuentran las emociones

(disgustos, nerviosismo), problemas hormonales e ingestión de toxinas, así como

procesos medicamentosos. Uno de los peores ene- migos es el consumo de

productos azucarados de muy difícil digestión, como son los almidones, celulosas,

féculas y harina de trigo.

Generalizada." Acumulación de grasa en el tejido celular subcutáneo y alrededor

de los órganos, dando al organismo una conformación que excede los límites del

biotipo normal, que se refiere a la cantidad de kilos igual a la de centímetros en

que la talla del individuo sobrepasa al metro. Se debe tomar en cuenta la

constitución del individuo. La obesidad parte en todos los casos de una evidente

desproporción entre el desarrollo del tejido adiposo y la estructura somática

Page 38: Desorden alimenticio

individual, de la cual es indicio el exceso de peso corporal. La obesidad no

depende únicamente del exceso alimenticio, aún cuando éste sea uno de los

factores principales, sobre todo si va acompañado de insuficente actividad física.

Otra causa puede ser la herencia, pues generalmente de padres obesos resultan

hijos con iguales características. La obesidad predispone a la diabetes,

hipertensión arterial y a la descompensación de cardiopatías. Existen dos clases

de obesidades de este tipo: la exógena, debida a un exceso de apetito o a falta de

ejercicio y tendencia al reposo; la endógena, está relacionada con alteraciones

endócrinas (hipófisis y tiroides).

Conflictiva." Sobreviene en variadas ocasiones tales como la pubertad, el

matrimonio, embarazo, separación del medio familiar, etcétera. El alimento

representa una compensación, debida a la depresión sufrida por el sujeto.

Desgraciadamente, esta obesidad es de pronóstico reservado, ya que no existe

un verdadero deseo de cambio.

Hídrica." Se localiza generalmente en la parte inferior del cuerpo. La cantidad de

comida ingerida es normal y el ejercicio físico no hace ningún efecto. Las

retenciones más frecuentes son en las piernas, hinchamiento desde los tobillos

hasta la rodilla o cadera. Otras veces se suele localizar en la parte superior de los

muslos y glúteos; en otras ocasiones, se advierten durante los cambios de clima

ciertas inflamaciones en cadera, vientre y extremidades inferiores. Las personas

aquejadas de este tipo de obesidad deben suprimir en su alimentación ensaladas,

verduras, sopas, consomés y, sobre todo, la sal. Se recomienda no tomar bajo

ninguna circunstancia sustancias alcohólicas, además de medir su consumo de

agua.

Infantil." Es causada por varios factores: los familiares generalmente también

comen en exceso. Existe una teoría psicológica que ha denominado a este tipo de

obesidad como de Trastornos de la Relación Llevados al Ambiente, que no es

más que un trastorno de la personalidad. El niño, a quien le falta amor y no lo

Page 39: Desorden alimenticio

encuentra, desarrolla su emotividad tomando la posibilidad que se le ofrece: la

comida. Al sentirse en un ambiente hostil se intenta compensarlo con una

situación sustitutiva por medio de la comida. También se dá por herencia, ya que

las estadísticas médicas han demostrado que el 80 por ciento de niños obesos

provienen de familias cuyos padres también lo son.

Título EL AMBIENTE FAMILIAR COMO FACTOR DE LA

DISTORSIÓN DE LA IMAGEN CORPORAL

Fecha Lunes, 1 de octubre de 2007

Publicación Eurhythmie

Autor Laura Patricia Domínguez Juárez

EURHYTHMIE

Asesor: Martha Hidalgo Cisneros

Actualmente en nuestra sociedad se da mucha importancia a la imagen Corporal y

muchas veces el Ambiente Familiar en el que nos desenvolvemos influye para

que nos sintamos inconformes con nuestro aspecto físico.

Por ello en esta investigación se aborda la relación entre el Ambiente Familiar y la

Imagen Corporal, entendiendo lo último como el conjunto de representaciones,

percepciones, sentimientos y actitudes que el individuo ha elaborado con respecto

a su cuerpo durante su existencia y a través de diversas experiencias, la imagen

del cuerpo es casi siempre una representación social y evaluativo (Bruchon,

Schwe-tzwer, 1992). Para entender más sobre Imagen Corporal es necesario

saber qué es la Identidad, cómo se conforma y qué la compone.

Erikson, en 1963 mencionó que la Identidad es la autodefinición madura que las

personas tienen, en un sentido firme de quién es uno, hacia dónde se dirige en la

vida y en qué forma encaja en la sociedad; existen 4 estados que explican el

Page 40: Desorden alimenticio

proceso que se debe pasar para lograr su conformación, las cuales son: Difusión,

Exclusión, Moratoria y Logro de Identidad, descritas por Marcia en 1983.

Todo este proceso requiere de bastante tiempo y existen diferentes factores que

influyen en él, ya sean los cognoscitivos, los escolares, los sociales y sobre todo

el estilo de crianza. Esto nos da indicio de que es de suma importancia la relación

que se entabla con la familia y el apoyo que en ella se obtiene para resolver los

conflictos que se presentan en la adquisición de la Identidad.

Por otra parte, al hablar de Identidad no podemos olvidar los componentes de la

misma, que son 3; el primero de ellos es el Autoconcepto, que se refiere a la

actitud que tiene la persona sobre sí misma, el segundo es la Autoimagen, que es

la opinión que se tiene sobre sí misma y por último es la Autoestima, y se refiere a

la satisfacción corporal que tiene cada individuo. Estos 3 componentes son los

que van a darnos un esquema de nosotros y el que existan problemas en todos o

alguno de ellos propicia la Distorsión de la Imagen Corporal.

Cuando se habla de Distorsión de la Imagen Corporal se hace mención a una

preocupación exagerada que produce malestar hacia un defecto imaginario o

extremado de la apariencia física (Raich, 2000). En este trabajo, se pretende

demostrar que muchas mujeres mexicanas presentan insatisfacción con su

cuerpo, sin necesidad de tener un trastorno alimenticio y que una influencia

importante de dicha insatisfacción es causada por los problemas que se llegan a

presentar en el Ambiente Familiar que muestra conflictos o falta de interés por sus

miembros.

Abordando el tema de la Familia se puede decir que es un pilar importante dentro

del desarrollo emocional de cada persona es por ello, que dentro de este estudio

se habla de las funciones familiares, las cuales son diversas pero fundamentales,

por otra parte el tema central de la Investigación es el ambiente familiar y la

importancia que tiene en el desarrollo de la personalidad, la cual radica en que el

Page 41: Desorden alimenticio

entorno determina en el individuo procesos implicados en su personalidad y

adaptación social (Quintana, 1993).

Por lo que es de gran importancia, para nosotros como psicólogos, observar el

efecto que pueden tener los miembros de una familia sobre la Identidad de una

persona, no dejando de lado que aunque se supone, ya se pasó la etapa de la

conformación de la misma, las experiencias de la infancia y la falta de apoyo de

los padres puede influir en que las mujeres se sientan sin una guía y por lo mismo

tiendan a compararse con los modelos estéticos que están presentes en los

medios de comunicación.

Se pretende a través de este trabajo dar información a los psicólogos que se

dedican a la práctica clínica, sobre las causas de la Distorsión Corporal, haciendo

hincapié en que no es necesario presentar un trastorno como Bulimia y Anorexia

para que las mujeres se sientan insatisfechas con su cuerpo y esto influya

significativamente en sus relaciones interpersonales. Además de hacer conciencia

del daño que puede producir un ambiente familiar caótico, permitiendo a su vez

crear mejores estrategias de comunicación familiar en futuros programas o

Terapias dedicadas a la Familia.

Título POPULISMO DE DERECHA, TAN REPULSIVO COMO EL

DE IZQUIERDA: DR. SIMI

Fecha Miércoles, 20 de abril de 2005

Publicación Destape 2006

Autor Por Rosa Contreras Marín

La decisión del gobierno federal de no informar que empresas participan en las

licitaciones para la construcción de casas y departamentos dentro de los

programas del Infonavit, significa un acto vandálico y que sólo ayuda a fomentar la

corrupción, y eso sólo le traerá críticas a Marta Sahagún, esposa del Presidente

de México, porque es conocido de que hijos laboran en esta rama.

Page 42: Desorden alimenticio

Indicó el presidente del Movimiento Nacional Anticorrupción, Víctor González

Torres, al tiempo que precisó que cuando se realizan actos semejantes, es que

hay algo que ocultar, y en este caso todo apunta a que no les importa actuar con

transparencia, por cubrir un acto nada claro.

Informó que este es otro motivo por el cual no está de acuerdo con la señora, ya

que su populismo de derecha es tan repulsivo como el de izquierda, mismos que

sólo aparentar ayudar a los más necesitados pero en realidad no es así.

Precisó que hay otras formar de apoyar a las clases necesitadas sin caer en

actitudes populistas, que ya benefician a la gente en realidad.

El también candidato independiente a la Presidencia de México, pidió que en ese

espíritu de transparencia se aclare el origen de los recursos que son utilizados

para la Fundación Vamos México, que preside Marta Sahagún.

Más adelante, Víctor González Torres habló del grave problema que atraviesa el

país a raíz del crecimiento en la tasa de mortalidad por suicidio, y dijo que éste es

sólo un afecto provocado por muchas causas, desde las económicas hasta las

familiares.

Precisó que los individuos que están mal emocionalmente lo reflejan a través de

una adicción o un trastorno alimenticio como la bulimia o la anorexia, además

de la depresión.

El mejor conocido como el Dr. Simi, aseguró que el suicidio es muy común entre

las personas que son fármaco dependiente. Por eso en Laboratorios Best se ha

puesto especial atención a ese problema, donde hay orientación sicológica a

aquellas personas que así lo requieran a través de un número telefónico, donde

los atenderá personal calificado.

Page 43: Desorden alimenticio

Enfatizó que el gobierno mexicano no ha vigilado el área emocional de la gente

por atender otros asuntos, sin embargo, las cuestiones económicas y sociales las

resienten todos y lamentablemente algunos caen en adicciones, trastornos

alimenticios o bien en depresión.

Los laboratorios Best tienen 52 años de experiencia en la fabricación de

medicamentos con los más altos estándares de calidad, mediante la utilización de

tecnología avanzada.

Esta empresa cien por ciento mexicana, forma parte del grupo Por un País Mejor y

brinda además de medicamentos a bajo costo, servicio de estudios clínicos,

donde se ofrece electrocardiogramas y ultrasonidos.

Sus medicamentos son distribuidos en México, Argentina y Guatemala, y cuenta

con planes de expansión hacia Honduras, Nicaragua, El Salvador, Ecuador, Costa

Rica y Panamá.

Implicación de la ansiedad y la depresión en los trastornos de alimentación

de jóvenes con obesidad

IMPLICATION OF THE ANXIETY AND

DEPRESSION IN EATING DISORDERS

OF YOUNG OBESE

Objetivos: Los objetivos del presente estudio son:

1) comparar los niveles de ansiedad, depresión y trastornos de alimentación

en jóvenes atendidos en un hospital pediátrico por obesidad;

2) determinar si la ansiedad y la depresión explican los síntomas de

trastornos de alimentación, y

3) conocer cuáles de esos síntomas discriminan mejor entre jóvenes con

distintos grados de obesidad.

Material y métodos: Estudio descriptivo, transversal con una muestra de 281

jóvenes (56% mujeres) de entre 11 y 17 años. Los percentiles de IMC se

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calcularon utilizando las tablas de crecimiento de la OMS. Se crearon dos

grupos de estudio: obesidad severa y sobrepeso-obesidad leve-moderada.

Se utilizaron los siguiente cuestionarios: Eating Disorders Inventory-2 (EDI-

2), cuestionario de depresión (CDI) y cuestionario de ansiedad estado-rasgo

(STAI).

Resultados: Los jóvenes con obesidad severa mostraron más problemas

psicológicos que los jóvenes con sobrepeso-obesidad leve-moderada, un

12% presentaban ansiedad y un 11% depresión. En ambos grupos, las

conductas relacionadas con los trastornos de alimentación eran, en parte,

explicadas por la mayor presencia de síntomas de ansiedad y de depresión.

La insatisfacción corporal junto con una elevada ansiedad rasgo

incrementaban el riesgo de perpetuar la obesidad y eran los dos

síntomas que mejor discriminaban a los pacientes con o sin obesidad

severa.

Conclusión: Los programas de prevención de la obesidad deberían incluir la

insatisfacción corporal y la ansiedad rasgo en los protocolos de evaluación

y tratamiento, y prevenir que la ansiedad se instaure como rasgo de

personalidad.

Introducción

La prevalencia de la obesidad está aumentando en todas las edades, y los

adolescentes representan el grupo con la mayor tasa de incremento1,2. Esto hace

pensar que puede haber factores psicosociales durante la adolescencia que

predispongan a la obesidad en la edad adulta.

En el tratamiento multidisciplinar de la obesidad infanto-juvenil, la intervención

psicológica busca minimizar las conductas que interfieren en la pérdida de peso.

En muchas ocasiones encontramos que, las dificultades para bajar de peso o

mantenerlo, no se deben únicamente a unos inadecuados hábitos de alimentación

o a la poca actividad física, sino que están muy relacionados con los índices de

ansiedad y de depresión, y que estas dificultades se incrementan en

jóvenes con obesidad severa.

Numerosas investigaciones indican que la obesidad frecuentemente coexiste con

Page 45: Desorden alimenticio

otras patologías como depresión, problemas de conducta5ç, trastornos de

ansiedad y, en general, con la presencia de mayor psicopatología, principalmente

en jóvenes con obesidad crónica.

Por otro lado, se sabe que la ansiedad y la depresión tienen una amplia gama de

consecuencias para el adolescente y pueden servir como precursores para el

desarrollo de trastornos de la alimentación. Un tercio de los jóvenes con obesidad

que busca tratamiento presenta ya trastornos de alimentación y se calcula que el

75% de estos jóvenes presentarán a lo largo de su vida ansiedad. La comorbilidad

entre depresión y trastornos de alimentación está, por lo tanto, bien establecida.

Además se ha demostrado que la presencia de elevados síntomas de depresión

en la obesidad predice la aparición de otros trastornos de alimentación, entre ellos

el trastorno de bulimia o el síntoma de sobreingesta. La presencia de estos

factores interfiere en el tratamiento de la obesidad infanto-juvenil y su

identificación puede ayudar a mejorar la adhesión a unos hábitos

de vida saludables y, con ello, a la prevención de las complicaciones asociadas a

la obesidad. El tratamiento de la obesidad infanto-juvenil supone una prioridad

médica y social por las repercusiones físicas y psicológicas que conlleva, y por la

carga asistencial que supone para los servicios de salud.

La mayor parte de los estudios han comparado jóvenes obesos versus

normopeso, y son menos frecuentes los trabajos que analizan en profundidad las

características psicológicas de pacientes en tratamiento por obesidad.

El primer objetivo del presente estudio fue comparar los niveles de ansiedad,

depresión y trastornos de alimentación en jóvenes atendidos en un hospital

pediátrico en un programa de tratamiento de la obesidad, diferenciando aquéllos

con sobrepeso-obesidad leve-moderada de los que presentaban obesidad severa.

El segundo objetivo fue determinar, tal y como señala la literatura sobre el tema, si

la ansiedad y la depresión explican los síntomas de trastornos de alimentación en

ambas muestras. Y finalmente, determinar qué síntomas

discriminan mejor entre jóvenes con sobrepesoobesidad leve-moderada y

obesidad severa.

Nuestra hipótesis fue que la obesidad severa estaría asociada a más problemas

Page 46: Desorden alimenticio

psiquiátricos, y que los jóvenes con mayores niveles de ansiedad y depresión

presentarían mayor riesgo para el desarrollo de trastornos de alimentación.

Material y métodos

Sujetos

Fueron estudiados un total de 281 adolescentes que formaron parte de la muestra

total visitada por problemas de exceso de peso en la Unidad de Gastroenterología

Pediátrica del Hospital Sant Juan de Dios de Barcelona (España) durante el

periodo de 2005-2007. Un 56% eran mujeres (157) y un 44% hombres (124),

siendo la media de edad de 13,2 años.

Material

El peso y la altura de los sujetos fueron registrados mediante una báscula/

tallímetro marca Seca Vogel and Halke (Hamburgo), modelo 701. Las medidas

fueron tomadas con los sujetos descalzos y con ropa ligera. Se calculó el índice

de masa corporal (IMC) y se transformó en percentil utilizando las tablas de

crecimiento de la

Organización Mundial de la Salud18. Los jóvenes atendidos en el hospital

pediátrico para el tratamiento de la obesidad eran: jóvenes con obesidad severa

(IMC ≥ al percentil 99), con obesidad moderada (IMC entre el percentil 95 y 98) y

con sobrepeso (IMC entre el percentil 85 y 94). Para el presente estudio se

definieron dos grupos: jóvenes con obesidad severa (IMC igual o superior al

percentil 99) y jóvenes con sobrepeso-obesidad levemoderada (IMC entre el

percentil 85 y 98) (tabla I). Se excluyeron del estudio aquellos pacientes cuyo

exceso de peso era secundario a una patología orgánica o a tratamientos

farmacológicos.

Procedimiento

A todos los sujetos se les valoró siguiendo el protocolo de evaluación psicológica

de la Unidad de Gastroenterología, el cual incluye, entre otras pruebas, el análisis

del grado de ansiedad, depresión y los síntomas que acompañan a los trastornos

de alimentación, en este orden. El psicólogo de la unidad llevó a cabo todas

las evaluaciones. A todos los pacientes se les pidió el consentimiento informado

de sus padres y a los mayores de doce años su asentimiento. El estudio fue

Page 47: Desorden alimenticio

revisado y aprobado por el Comité de investigación de la Fundación Sant Juan de

Dios.

Los instrumentos utilizados fueron:

– Eating Disorder Inventory19, EDI-2. Prueba autoaplicada de 91 ítems que

evalúa once agrupaciones de síntomas cognitivos y conductuales característicos

de los trastornos de alimentación: obsesión por la delgadez (preocupación por el

peso y miedo a engordar), bulimia (tendencia a pensar o tener atracones

de comida), desconfianza interpersonal (dificultad para expresar los propios

sentimientos y pensamientos), ineficacia (sentimientos de inseguridad y baja

autoestima), conciencia introceptiva (dificultad para identificar ciertas sensaciones

viscerales relacionadas con el hambre y la saciedad), insatisfacción corporal

(descontento con su imagen corporal), miedo a la madurez (inseguridad con los

cambios propios de la adolescencia), perfeccionismo (niveles de autoexigencia

elevados), impulsividad (dificultad para regular los propios impulsos), ascetismo

(tendencia a sobrevalorar las restricciones orales) e inseguridad social (falta de

seguridad en las relaciones interpersonales).

– Cuestionario de Ansiedad Estado-Rasgo20, STAI. Autoinforme de 40 ítems que

evalúa dos tipos de ansiedad: la ansiedad-estado (A-E) que recoge los

sentimientos subjetivos de tensión y aprensión que pueden variar con el tiempo y

fluctuar en intensidad, y la ansiedad- rasgo (A-R) que señala la tendencia

relativamente estable de la persona a percibir las situaciones como

amenazadoras.

– Cuestionario de Depresión21, CDI. Autoinforme de 27 ítems que recogen la

distinta intensidad o frecuencia de la depresión.

Análisis de datos

El test de t de Student de dos colas independientes fue utilizado para comparar

los dos grupos de pacientes en las variables IMC y edad. Se realizaron análisis

exploratorios ANOVA para comparar ambos grupos en las distintas escalas del

STAI, CDI y EDI-2. Se llevaron a cabo distintas ecuaciones de regresión lineal

para evaluar si el aumento de ansiedad y depresión estaban relacionados con los

síntomas cognitivos y conductuales propios de los trastornos de alimentación.

Page 48: Desorden alimenticio

El análisis de regresión logística se utilizó para determinar las probabilidades de

que un paciente fuera clasificado con o sin obesidad severa, sobre la base de la

ansiedad, la depresión y los síntomas propios de los trastornos de alimentación.

Se consideró un valor p inferior a 0.05 como estadístico significativo. Los datos

fueron analizados mediante el programa SPS.

Resultados

Variables IMC y edad

Como era de esperar, el IMC difiere significativamente entre los jóvenes con o sin

obesidad severa, y en promedio los jóvenes con obesidad severa pesaban 16 kg

más que los jóvenes con sobrepeso-obesidad leve-moderada.

También se hallaron diferencias significativas en la edad, los jóvenes con

obesidad severa eran, en promedio, nueve meses mayores que los jóvenes con

sobrepesoobesidad leve-moderada (p = 0,003).

Síntomas de ansiedad, depresión y trastornos de alimentación en los jóvenes

Los jóvenes con obesidad severa informaron de mayor ansiedad estado (p =

0,001), ansiedad rasgo (p < 0,001) y síntomas de depresión (p < 0,001) que los

jóvenes con sobrepeso-obesidad leve-moderad. Entre los jóvenes con obesidad

severa, el 12% presentaban puntuaciones centiles ≥ 90 en la escala de ansiedad

rasgo y un 11% presentaban puntuaciones centiles ≥ 90 en la escala de

depresión. En el grupo de sobrepeso- obesidad leve-moderada estos porcentajes

fueron de 6,7% y 6%, respectivamente.

Los jóvenes con obesidad severa informaron de puntuaciones significativamente

mayores que los jóvenes con sobrepeso-obesidad leve-moderada en ocho de las

once escalas de los trastornos de alimentación del EDI-2: obsesión por la

delgadez (p = 0,001), bulimia (p = 0,024), ineficacia (p = 0,027), conciencia

introceptiva (p = 0,009), insatisfacción corporal (p = 0,001), ascetismo (p = 0,004)

e inseguridad social (p = 0,011) (tabla II).

Síntomas de los trastornos de alimentación explicados por las escalas de

ansiedad y depresión

Se realizó un análisis para determinar si la ansiedad y la depresión explican los

síntomas de trastornos de alimentación en aquellas escalas que habían mostrado

Page 49: Desorden alimenticio

diferencias significativas entre ambos grupos.

Los resultados de la regresión lineal indican que, en jóvenes con obesidad severa,

el incremento de la ansiedad rasgo y de la depresión explicarían la mayor parte de

los síntomas de los trastornos de alimentación: conciencia introceptiva (ansiedad:

18%; depresión: 16%), obsesión por la delgadez (ansiedad: 11%; depresión:

12%), desconfianza interpersonal (ansiedad: 10%; depresión: 16%) y bulimia

(ansiedad: 17%; depresión: 12%). Entre paréntesis se indica el porcentaje de

varianza explicada por la ansiedad y la depresión en las subescalas del EDI-2.

En jóvenes con sobrepeso-obesidad leve-moderada, la ansiedad estado y la

ansiedad rasgo explican diferencialmente las escalas de trastornos de

alimentación. La depresión y ansiedad estado explican: la ineficacia (depresión:

14%; ansiedad-estado: 27%), la insatisfacción corporal (depresión: 20%;

ansiedad-estado: 23%) y el ascetismo (depresión: 24%; ansiedad-estado:

17%). La depresión y la ansiedad rasgo explican: la conciencia introceptiva

(depresión: 24%; ansiedad rasgo: 22%), la inseguridad social (depresión: 20%;

ansiedad rasgo: 23%), la desconfianza interpersonal (depresión: 15%; ansiedad

rasgo: 11%) y la bulimia (depresión: 13%; ansiedad rasgo: 10%).

Variables psicológicas que mejor diferencian entre jóvenes con obesidad severa y

jóvenes con sobrepeso-obesidad leve-moderada

Se ha utilizado el análisis de regresión logística para determinar las probabilidades

de que un paciente fuera clasificado con o sin obesidad severa en función de la

ansiedad, la depresión y los trastornos de alimentación. Los resultados indican

que el incremento de peso de estaría relacionado con el aumento de los niveles

de insatisfacción corporal y ansiedad rasgo (odds-ratio =

1,02 y 1,01, respectivamente). El análisis de la regresión logística muestra que la

insatisfacción corporal (p < 0,001; OR = 1,02; CI: 1,01 a 1,03) junto con una

elevada ansiedad rasgo (p = 0,001; OR = 1,01; CI: 1,01 a 1,03) incrementan el

riesgo de perpetuar la obesidad y son los dos síntomas que mejor discriminan los

paciente con o sin obesidad severa.

Discusión

Se sabe que la ansiedad, la depresión y los trastornos de alimentación interfieren

Page 50: Desorden alimenticio

en el tratamiento de la obesidad22,23,24. La comparación entre las dos muestras

indica que los jóvenes con obesidad severa eran, en promedio, nueve meses

mayores que los adolescentes con sobrepeso-obesidad leve-moderada, y

presentaban más sintomatología que ellos. En consonancia con investigaciones

anteriores, el 12% de los jóvenes con obesidad severa presentaban ansiedad

rasgo, un 11% depresión, más de la mitad presentaban insatisfacción con su peso

y su figura y un 42% estaban obsesionados con adelgazar. Dentro de la literatura

pediátrica, la obesidad se asocia a una mayor presencia de ansiedad y

depresión6, y a más problemas psicopatológicos, principalmente en la obesidad

crónica. En cuanto a los trastornos de alimentación, la mayoría de estos estudios

sugieren que los jóvenes con obesidad presentan más trastornos de alimentación,

más insatisfacción corporal, más atracones y, en general, están más descontentos

con su peso.

Los resultados de este estudio sugieren que las conductas relacionadas con los

trastornos de alimentación son, en parte, explicadas por la mayor presencia de

síntomas de ansiedad y de depresión, tanto en jóvenes con sobrepeso-obesidad

leve-moderada como en jóvenes con obesidad severa. Ambos grupos muestran

dificultades para establecer relaciones interpersonales satisfactorias y, lo que es

más importante, tienden a confundir los estados emocionales con la sensación de

hambre y saciedad, y, como consecuencia, a paliar la ansiedad comiendo. En los

jóvenes con obesidad severa la depresión y la ansiedad rasgo se presentan como

una tendencia estable de la persona a percibir las situaciones como

amenazadoras que puede deberse a una mayor cronificación de los problemas, lo

que es consistente con otros estudios que han encontrado mayores

problemas psicopatológicos en obesidad severa. Sin embargo, los jóvenes con

sobrepeso-obesidad levemoderada responden ansiosamente de manera reactiva

a situaciones en las que se sienten ineficaces o insatisfechos con su imagen

corporal. Esto nos lleva a suponer que estos jóvenes, que presentan una

predisposición a comer en exceso y cuando se encuentran en un entorno familiar

obesógeno tienen mayor tendencia a paliar la ansiedad comiendo.

Por último, nos plateamos qué síntomas discriminan mejor entre jóvenes con

Page 51: Desorden alimenticio

sobrepeso-obesidad leve, moderada u obesidad severa en base a la ansiedad, la

depresión o los trastornos de alimentación. Los resultados indican que la

insatisfacción corporal junto con una elevada ansiedad rasgo incrementan el

riesgo de perpetuar la obesidad y son los dos síntomas que mejor discriminan

los pacientes con o sin obesidad severa. Aunque el papel de la ansiedad ya ha

sido detectado como variable relacionada con los trastornos de alimentación,

nuestros datos destacan que es la ansiedad rasgo (tendencia relativamente

estable de la persona a percibir las situaciones como amenazadoras) la que

incrementa sustancialmente el riesgo de perpetuar la obesidad en jóvenes.

Mientras que la ansiedad estado (sentimientos subjetivos de tensión y aprensión

que pueden variar con el tiempo y fluctuar en intensidad) no alcanza un valor

predictor en la explicación del IMC de los jóvenes con obesidad severa. A

diferencia de otros autores que señalan la presencia de depresión y,

concretamente, la baja autoestima como precursora de los trastornos de

alimentación.

Los datos de este estudio ponen de relieve la naturaleza y la gravedad de la

obesidad en jóvenes y tiene importantes implicaciones en el tratamiento de la

obesidad. Del conjunto de resultados se destaca que los jóvenes con sobrepeso-

obesidad leve-moderada u obesidad severa presentan altos niveles de

psicopatología.

En particular los jóvenes con obesidad severa presentaron en su conjunto más

insatisfacción corporal y ansiedad rasgo que los jóvenes con sobrepeso-obesidad

leve-moderada. Es por todo ello que creemos que el mejor momento para una

intervención psicológica es en la fase de sobrepeso-obesidad leve-moderada.

Estos resultados ayudan al diseño de estrategias eficaces en el manejo de la

obesidad, en particular en la incorporación de la insatisfacción corporal y la

ansiedad rasgo como componentes críticos en las intervenciones de pediatría

para la gestión del peso, ya que inciden en el desarrollo de la obesidad y actúan

como barrera para impedir disminuir de peso. En ambos grupos habría que

enseñarles a identificar correctamente las señales de hambre y saciedad y a

saber diferenciarlas de los estados emocionales negativos (ansiedad,

Page 52: Desorden alimenticio

preocupación, tristeza…), tal y como otro autores han señalado33,34.

Dado que la literatura sobre obesidad pediátrica sigue avanzando, habrá cada vez

más estudios sobre potenciales factores individuales que sean susceptibles

de ser modificables. La evaluación y tratamiento de la insatisfacción corporal y la

ansiedad rasgo de los jóvenes con obesidad en el contexto de la intervención

pediátrica deben ayudar a comprender mejor el funcionamiento psicológico. Los

resultados de este estudio deben ser considerados en el contexto de sus

limitaciones. Como se ha señalado, esta es una muestra clínica en la que se ha

reconocido la importancia de evaluar los aspectos psicológicos de los

adolescentes que estaban siendo atendidos en el hospital pediátrico para un

programa de tratamiento de la obesidad. Futuras investigaciones son

fundamentales para comprender mejor si estas características individuales de un

grupo seleccionado son extrapolables a jóvenes con obesidad en población

general.

Por último, la naturaleza transversal de este estudio limita nuestra capacidad para

extraer conclusiones de causalidad o direccionalidad. El uso de diseños

longitudinales y prospectivos es importante para avanzar en esta esfera. El

seguimiento del desarrollo de la obesidad y el funcionamiento psicosocial a lo

largo del tiempo debe permitir aclarar mejor las características personales

potencialmente modificables para la promoción de un peso saludable.

A pesar de estas limitaciones, nuestros datos se añaden a la creciente literatura

sobre el tema que señala una importante asociación entre sintomatología

ansioso-depresiva en la obesidad4,6,25. Nuestros hallazgos indican que los

síntomas de insatisfacción corporal y ansiedad rasgo en la adolescencia

aumentan el riesgo de perpetuar la obesidad. Por esta razón sugerimos que los

programas de prevención de la obesidad consideren la evaluación de estos

síntomas como potenciales factores de riesgo para el desarrollo de la obesidad y

que específicamente se controle la ansiedad estado para que no se cronifique y

se organice como rasgo de personalidad.

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Título Populismo de derecha, tan repulsivo como el de

izquierda: Dr. Simi

Fecha Miércoles, 20 de abril de 2005

Publicación Destape 2006

Autor Por Rosa Contreras Marín