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OCTUBRE 2021 - N. 9

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LA VOZ DE LOS NIñOS

UNA ESP IR ITUAL IDAD PARA LA INFANCIA MIS IONERA , SEGÚN SANTA TERESA DE L IS IEUX y SAN JUAN PABLO I I

lA CeNTrAlIdAd del reINO

PEQUEñOS MISIONEROS EN...BURUNDI

BOle í N

BOle íN SANCTA INFANTIASECRETARIATUSINTERNATIONALIS

PONTIFICIUM OPUS A

editor: Secretariado InternacionalObra Pontificia Infancia Misionerao Santa InfanciaVia di Propaganda 1/c00186 [email protected]

director: Hna. Roberta Tremarelli, AMSS

Secretariado Internacional:Giorgio BertucciEnrique H. Davelouis E.Erika Granzotto BassoHna Maddalena Hoang Ngoc Khanh Thi, A.C.MKathleen MazioAugustine G. PalayilMatteo M. Piacentini

redacción: Secretariado InternacionalCubierta, diseño gráfico y formato: Erika Granzotto Basso

Han colaborado en este número: Enrique H. Davelouis E.Erika Granzotto BassoHna Maddalena Hoang Ngoc Khanh Thi, A.C.MKathleen Mazio

Fotografías: Archivo de fotos de la Infancia Misionera, Dirección Nacional Sri Lanka, Dirección Nacional Malaui, Dirección Nacional Paquistán, Dirección Nacional Colombia, Dirección Nacional Nicaragua, Dirección Nacional Filipinas, Dirección Nacional Burundi, Vicariato Apostólico de Reyes, Diócesis de Shimoga, Arquidiócesis de Monrovia, Hna. Diana António Ialá - Ingoré, Guinea Bissau, Vicariato Apostólico de Requena

Foto de la portada: Archivo de fotos de la Infancia Misionera

CIrCUlAr de INFOrMACIóN MISIONerAN.9 - OCTUBre 2021

edITOrIAlHna. Roberta Tremarelli

eN eSTe NúMerO

lA CeNTrAlIdAd del reINOP. Leonardo Rodriguez

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lA VOz de lOS NIñOSde NUeSTrAS dIreCCIONeS NACIONAleS

SrI lANkAPAQUISTÁN MAlAUICOlOMBIAFIlIPINAS

de lAS dIóCeSISBOlIVIANICArAGUANIGerIAINdIAlIBerIAGUINeA BISSAUPerú

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eNTre lAS líNeAS...de lOS PrOYeCTOSedUCACIóN relIGIOSA Y ASISTeNCIA BÁSICA PArA lOS NIñOS de lAS AldeAS reMOTAS de BABIkO, MOU Y rAPA

el CeNTrO de reINSerCIóN NdjIATAr PArA lOS NIñOS dIVerSAMeNTe hÁBIleS

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UNA eSPIrITUAlIdAd PArA lA INFANCIA MISIONerA, SeGúN SANTA TereSA de lISIeUX Y SAN jUAN PABlO II

Rafael Santos

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PeQUeñOS MISIONerOS eN...BUrUNdI56

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E D I T O R I A L

hNA. rOBerTA TreMArellISecretario General Obra Pontificia Infancia Misionera

3BOLETíN - PONTIFICIUM OPUS A SANCTA INFANTIA - N. 9 - OCTUBRE 2021

on la fiesta de Santa Teresa del Nino Jesús ha comenzado el mes de octubre, mes misionero por excelencia en el curso del

cual cada año se celebra la Jornada Misionera Mundial. Es una cita anual importante y extraordinaria en la cual se da mayor énfasis a la oración, a la animación, a la formación y a la colecta en favor de los Misioneros y de la misión de la Iglesia universal. El tema de este año es: “No podemos callar lo que hemos visto y oído” (Hch. 4,20). En muchas iglesias locales los niños y los adolescentes son los protagonistas y los animadores no sólo del Domingo Mundial de las Misiones, sino también del mes misionero, en cuanto no se quedan con los brazos cruzados sino también son disponibles a comprometerse por ideales altos y exigentes.Creo que el tema de este año sea más que nunca a medida de niño, ya que evidencia dos características genuinas como la simplicidad y la espontaneidad. Son las mismas que cada Cristiano, evangelizador, testigo, discípulo misionero debería tener al anunciar el Evangelio, aprovechando cada ocasión oportuna e inoportuna, como decía San Pablo. Precisamente como los niños, en su simplicidad y sin velos. ¿Quién mejor de un niño o un adolescente puede enseñarnos a anunciar el Evangelio y a ser misionero? El niño no piensa ni prevé las contrariedades, procede y basta, confiando.Como un niño debemos confiar y fiarnos que la Palabra que anunciamos es la Verdad y es por el bien y la felicidad de los demás. Y es propio el “como” que marca la diferencia y nos conduce a la invitación de Jesús. Santa Teresa del Niño Jesús, patrona de las misiones, es también maestra de la infancia espiritual que no se refiere sólo a los niños sino a cada bautizado que quiere entrar en el Reino de Dios. Podemos hablar de un verdadero estilo de vida en el cual

nos identificamos con Jesús, el Hijo. Ese espíritu de infancia era ya prefigurado en otra mujer que desde inicios del 1800 decidió querer ser completamente disponible al amor de Dios. Se trata de Pauline Marie Jaricot, fundadora en mayo de 1822 de la primera Obra Misionera, la Obra de la Propagación de la Fe. En estos días ha sido anunciada la fecha de beatificación: el 22 de mayo 2022 en Lyon. Alegrémonos con toda la Iglesia por esta próxima nueva Beata, una mujer de fe que en su sensibilidad y simplicidad ha dado vida a una Obra que desde hace 200 años apoya a los misioneros y a la misión de la Iglesia universal.Es precisamente siguiendo esta intuición que Mons. Charles de Forbin Janson ha comenzado la Obra de la Santa Infancia en 1843.Así, el mes de octubre nos ayuda a hacer memoria de cuantos en el curso de los siglos han testimoniado la fe en Cristo y anunciado el Evangelio. Esta memoria alimenta la fe de cada bautizado y de las comunidades cristianas de hoy y nos incentiva a trabajar por el Reino de Dios bajo la guía del Espíritu Santo.

C

4 BOleTíN - PONTIFICIUM OPUS A SANCTA INFANTIA - N. 9 - OCTUBre 2021

El tema central de los versículos referidos antes, es el Reino, pues la pregunta que desencadena la escena está referida directamente al Reino de Dios. Ahora bien, al menos en una primera apreciación, reconocemos dos niveles diferentes entre la pregunta planteada y la respuesta ofrecida. En cuanto a la interrogante, deja en evidencia una comprensión del Reino, en su dinámica, como ámbito de poder. Mientras que la respuesta ofrecida por Jesús, se desmarca de esta comprensión y con su enseñanza y sus gestos propone un rasgo característico de la espiritualidad cristiana.El Reino no puede ser comprendido como ámbito de poder, de dominio, de privilegios, prepotencias o de concesiones deshonestas, cuando Jesús inicia su ministerio público, en el Evangelio de San Lucas, cuando es invitado a proclamar la Ley e interpretarla en la sinagoga describe el Reino:

“Jesús fue a Nazaret, donde se había criado; el sábado entró como de costumbre en la sinagoga y se levantó para hacer la lectura. Le presentaron el libro del profeta Isaías y, abriéndolo, encontró el pasaje donde estaba escrito: “El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha consagrado por la unción. El me envió a llevar la Buena Noticia a los pobres, a anunciar la liberación a los cautivos y la

vista a los ciegos, a dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor”. Jesús cerró el Libro, lo devolvió al ayudante y se sentó. Todos en la sinagoga tenían los ojos fijos en él. Entonces comenzó a decirles: «Hoy se ha cumplido este pasaje de la Escritura que acaban de oír». (Lc. 4, 16-21)

La Buena Noticia a los pobres, la libertad de los cautivos, la vista a los ciegos, la liberación de la opresión ¿pueden ser tarea de un niño? Evidentemente no, sin embargo Jesús no nos dice háganse niños, sino que nos dice: “deben hacerse como niños”.

AlGUNOS rASGOS de lOS NIñOS eN SU CAPACIdAd de relACIóN Intentemos identificar, pues, algunos rasgos propios de la capacidad de vínculos del niño, y a partir de allí, buscaremos trazar rasgos de la espiritualidad cristiana:

a) El vínculo, relación con su padre, madre, adultob) El vínculo, relación con sus paresc) El vínculo con la creaciónd) El vínculo consigo mismo

El vínculo con su padre, madre, adulto. Aún en

lA CeNTrAlIdAd del reINO

P. leONArdO rOdrIGUezDirector Nacional

OMP Uruguay

“En aquel momento los discípulos se acercaron a Jesús para preguntarle: «¿Quién es el más grande en el Reino de los Cielos?». Jesús llamó a un niño, lo puso en medio de ellos y dijo: «Les aseguro que si ustedes no cambian o no se hacen como niños, no entrarán en el Reino de los Cielos. Por lo tanto, el que se haga pequeño como este niño, será el más grande en el Reino de los Cielos. El que recibe a uno de estos pequeños en mi Nombre, me recibe a mí mismo. Pero si alguien escandaliza a uno de estos pequeños que creen en mí, sería preferible para él que le ataran al cuello una piedra de moler y lo hundieran en el fondo del mar.” (Mt. 18, 1-6)

5BOleTíN - PONTIFICIUM OPUS A SANCTA INFANTIA - N. 9 - OCTUBre 2021

medio de realidades complejas de abandono, de abuso, y otras penosas experiencias, el niño necesita del vínculo con su padre, madre o adulto referente, este vínculo configura su identidad, le otorga pertenencia y le permite el anclaje de su historia. Los vínculos maternos hasta los primeros cinco años de edad establecen matrices de aprendizaje en el niño que determinaran comportamientos, decisiones, elecciones en la vida del individuo.El vínculo con sus pares. Así como la referencia al mundo adulto es importante, desde otro lugar pero, igualmente importante será la vinculación, la relación, con sus iguales, en un reconocimiento mutuo, donde la afinidad y la diferencia articulan una dinámica estructurante y facilitadora de sentido para la vida, expresándose en experiencias y estilos de relación que hacen posible la verdadera madurez en su momento. El niño necesita interactuar con otros niños, aprender, jugar, soñar, reír, pelear…El vínculo con la creación. La lógica de relación con la creación, en el niño, está marcada por la gratuidad, la alegría y el disfrute. Así mismo, en un sentido de franqueza y sensatez, el niño no se sumerge fácilmente en la dinámica mercantilista del mundo adulto que olvida frecuentemente el valor de la creación en sí misma, y no solo como fuente de

materia prima.El vínculo consigo mismo. El niño tiende a quererse, y en su fragilidad, procura protección y cuidado, se sabe importante, se reconoce valioso. Éste es un camino interesante porque el amor a sí mismo es camino para el amor a Dios y a los otros.Considerados estos aspectos relacionales de la vida del niño, hagamos ahora el esfuerzo por trasladar esta experiencia a la vida cristiana.Hacernos como niños es establecer un especial vínculo con Dios en cuanto Padre. El Evangelio es portador de esta gran novedad: Dios es Padre, y la salvación que se nos ofrece en Jesús acarrea la condición de hijos en el Hijo, para quienes creemos en Él. Es probable que al afirmar la paternidad de Dios, afloren distintos sentimientos, de acuerdo a la propia experiencia de cada persona, su historia y la relación con su padre y con su madre; de la misma manera, en los tiempos que corren, es posible que algunas cuestiones ideológicas puedan resistir a la figura paterna de Dios, intentando agotarlo en definiciones culturales o sociológicas. Para desatarnos de estas visiones individuales o de interpretaciones ideológicas, el mismo Evangelio nos ofrece todo lo que necesitamos saber de este Dios Padre, a quien conocemos por el testimonio de Jesús, es el Padre Misericordioso que se nos presenta en el capítulo 15 del Evangelio de San Lucas (15,11-32), es el Padre que hace salir el sol sobre buenos y malos (Mt. 5,45-48), es el Padre que prefiere revelar su corazón a los sencillos y a los pobres (Mt 11, 25-27).


hACerNOS COMO NIñOS eS reCONOCer A dIOS PAdreHacernos como niños, nos pide establecer y alimentar nuestra relación con Dios desde su paternidad universal, desplegar un movimiento constante que dinamice la vivencia creyente en nosotros. Este movimiento tiene al menos cinco expresiones: escuchar, obedecer, pedir, confiar, agradecer.Escuchar. Si recorremos las páginas de los evangelios, podemos descubrir fácilmente a un Jesús que desde temprana edad se involucra en “las cosas de su Padre” (Lc 2,49), la escucha es una actitud activa, contiene en sí misma el deseo profundo de conocer la voluntad de Dios Padre. A lo largo de su vida el mismo Jesús da testimonio de la necesidad de un permanente discernimiento, porque conocer la voluntad del Padre es atender al sentido de la propia existencia, y por cierto, implica la purificación constante de las propias intenciones, así como un conocimiento de la vida de los otros para comprender la propia experiencia de Dios.Obedecer. La obediencia de la fe, encuentra su mayor expresión en Jesús, es necesario y alentador para quienes creemos acercarnos una y otra vez al hombre Jesús, que perteneciente a su pueblo, valiéndose de las claves religiosas, culturales y sociales de su contexto asume el constante combate de la fe. La mayor expresión de esta obediencia se manifiesta en su Pasión y Muerte. En la vida de la Iglesia, en nuestras vidas, la obediencia a Dios transversaliza toda la experiencia eclesial, y no como un aspecto secundario, fidelidad a Dios y fidelidad a la Iglesia son inseparables, más sin embargo, en términos puramente humanos la obediencia necesita del contexto del respeto, el diálogo, la paciencia, la disposición a acompañar los procesos personales sin

imposiciones arbitrarias o en el peor de los casos abusos de poder. La obediencia de la fe es inseparable de la experiencia de caridad.Pedir. Cuando los discípulos de Jesús, motivados por la experiencia personal del Maestro, le piden aprender a orar, Jesús les enseña a invocar al Padre común, “nuestro”, oración que nos enseña qué y cómo pedir a Dios. La petición a Dios nos corre de un lugar común en las personas de nuestro

tiempo: se trata de la autosuficiencia y la casi omniprepotencia humana. Pide quien se reconoce limitado, quien se siente necesitado, frágil, expuesto, pobre. Pedir a Dios no es solo buscar la satisfacción de necesidades, sino, especialmente aprender a ser humildes.Confiar. Les confieso que, personalmente, cuando medito la pasión de Jesús, hago el intento de introducirme en los sentimientos y emociones del Maestro en esas horas donde, en términos humanos, el proyecto se desmoronó rápidamente y las contradicciones acaparan los sucesos: soledad, traición, desprecio, condena, tortura y muerte. Me pregunto ¿qué podía quedar en el corazón de Jesús?, además de la profunda angustia que el relato evangélico describe, estoy seguro que hay algo más grande: la confianza absoluta en el Padre, y en consecuencia el verdadero abandono en sus manos. La confianza en Dios es un camino de permanente purificación, pues, en la medida en que crecemos en ella, debemos aprender a relativizar nuestras propias seguridades, sin renunciar a nuestras responsabilidades, la confianza es el fruto de una libertad que se entrega.Agradecer. ¿Recuerdan aquel episodio de la curación de los 10 leprosos? (Lc. 17,11-19) Allí son diez los sanados, más uno solo el que regresa a agradecer, y al menos en una primera apreciación, el mismo


Jesús se sorprende por la ausencia de los restantes nueve. El agradecimiento humaniza nuestras relaciones y desplaza una forma de relación que coloca obligaciones para dar lugar a un intercambio de dones entre iguales. Ahora cuando se trata de la acción de gracias a Dios, el agradecimiento es el reconocimiento de la gratuidad de Dios y la indignidad de los favorecidos. Como actitud y acción tiene la capacidad de despojarnos de cualquier tipo de relación interesada o comercial con Dios. La acción de gracias, en mi humilde comprensión y experiencia se convierte en posibilidad de perdón y misericordia.Tomando como referencia el pensamiento de Santa Teresita del Niño Jesús, podemos decir que Dios se goza en nuestra pequeñez, porque sabe que en la medida en que nos hacemos pequeños nos dejamos colmar por su grandeza. De allí que la invitación a hacernos como niños sea un camino exigente, con la cicatriz de la radicalidad pero con aterciopelada textura de la verdad de nuestra existencia abierta a la infinidad del Padre.

hACerNOS COMO NIñOS, CON UN PAdre COMúN, NOS hACe herMANOSA los adultos nos agrada sostener discursos de fraternidad, de aceptación y hermandad. Sin embargo, casi como una paradoja muy profunda, es constante el desprecio a causa de diferentes experiencias que nos distinguen a unos de otros y a las que priorizamos con acusaciones, sospechas, intrigas y no menos absurdas discriminaciones. De este color está teñido el mundo social, cultural, político, religioso, deportivo y especialmente los medios de comunicación y las redes sociales. A tal modo sucede así que progresivamente, los adultos perdemos credibilidad y confiabilidad frente a los jóvenes y niños, porque la incoherencia es casi inadmisible para el niño.En los párrafos precedentes, hemos fijado nuestra atención en la descripción de la relación con Dios

Padre, la cual asumimos como configuradora de la identidad discipular misionera cristiana. Les propongo ahora avanzar en otra dirección que es la relación con nuestros iguales. Dios es Padre de todos, no solo de los que nos resultan aceptables a nosotros. Por consiguiente de nuestra relación de filiación con Dios se desprende la relación de fraternidad con nuestros pares.Reconociendo la incoherencia entre el discurso de tolerancia y fraternidad y las prácticas separatistas y excluyentes que desarrollamos, intentamos considerar esta vocación de fraternidad universal como don y tarea para quienes nos reconocemos seguidores de Jesús.

“Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la Vida, porque amamos a nuestros hermanos. El que no ama permanece en la muerte” (1 Jn 3,14)

El niño busca a sus iguales porque sabiéndose distinto a ellos, acoge la diferencia mediante el juego, el aprendizaje compartido, y es posible que, con libertad y hasta desparpajo interrogue y demuestre las diferencias, pero con la misma libertad reconocerá la importancia de la proximidad y el reconocimiento que conducen a la solidaridad y a la amistad.Claro, es imposible saltearnos la mirada a la contaminación visual, sonora y emocional que los adultos hemos producido en el mundo de los niños, llevándolos a adquirir los criterios de adultos sin estar


equipados racional y emocionalmente para ello. Consideremos la oportunidad que la historia nos ofrece para apostar en la construcción de ambientes saludables y respetuosos que acogen la diferencia como riqueza y promueven la cultura del cuidado, especialmente hacia los más frágiles.Es necesario reconocer las incapacidades y los errores que cometemos para evitar someter al otro a nuestra voluntad. Por el contrario, el nivel de interacción global planetario, la interacción cultural, la pluralidad en la convivencia cotidiana de nuestras ciudades son el campo florecido en el cual se nos invita a ser promotores de encuentro, cuidado mutuo, diálogo y amistad social. En este sentido reconozco orientadores y desafiantes los números 1 y 2 de la Encíclica Fratelli Tutti:

1. “Fratelli Tutti”, escribía san Francisco de Asís para dirigirse a todos los hermanos y las hermanas, y proponerles una forma de vida con sabor a Evangelio. De esos consejos quiero destacar uno donde invita a un amor que va más allá de las barreras de la geografía y del espacio. Allí declara feliz a quien ame al otro «tanto a su hermano cuando está lejos de él como cuando está junto a él». Con estas pocas y sencillas palabras expresó lo esencial de una fraternidad abierta, que permite reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de la cercanía física, más allá del lugar del universo donde haya nacido o donde habite.

2. Este santo del amor fraterno, de la sencillez y de la alegría, que me inspiró a escribir la encíclica Laudato si’, vuelve a motivarme para dedicar esta nueva

encíclica a la fraternidad y a la amistad social. Porque san Francisco, que se sentía hermano del sol, del mar y del viento, se sabía todavía más unido a los que eran de su propia carne. Sembró paz por todas partes y caminó cerca de los pobres, de los abandonados, de los enfermos, de los descartados, de los últimos.

Sabernos hijos de un mismo Padre y hermanos con todos es constitutivo de nuestra identidad que aplasta las posturas rigoristas y exclusivistas que convierten a la Iglesia en un club de selectos integrantes para conducirnos en la verdad más pura del seguimiento cristiano, que resume lo expresado hasta aquí:

“Queridos míos, amémonos los unos a los otros, porque el amor procede de Dios, y el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios. El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor. Así Dios nos manifestó su amor: envió a su Hijo único al mundo, para que tuviéramos Vida por medio de él. Y este amor no consiste en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó primero, y envió

a su Hijo como víctima propiciatoria por nuestros pecados. Queridos míos, si Dios nos amó tanto, también nosotros debemos amarnos los unos a los otros. Nadie ha visto nunca a Dios: si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece en nosotros y el amor de Dios ha llegado a su plenitud en nosotros. La señal de que permanecemos en él y él permanece en nosotros, es que nos ha comunicado su Espíritu. Y nosotros hemos visto y atestiguamos que el Padre envió al Hijo como Salvador del mundo. El que confiesa que Jesús es el Hijo de Dios, permanece en Dios, y Dios permanece


en él. Nosotros hemos conocido el amor que Dios nos tiene y hemos creído en él. Dios es amor, y el que permanece en el amor permanece en Dios, y Dios permanece en él. La señal de que el amor ha llegado a su plenitud en nosotros, está en que tenemos plena confianza ante el día del Juicio, porque ya en este mundo somos semejantes a él. En el amor no hay lugar para el temor: al contrario, el amor perfecto elimina el temor, porque el temor supone un castigo, y el que teme no ha llegado a la plenitud del amor. Nosotros amamos porque Dios nos amó primero. El que dice: «Amo a Dios», y no ama a su hermano, es un mentiroso. ¿Cómo puede amar a Dios, a quien no ve, el que no ama a su hermano, a quien ve? Este es el mandamiento que hemos recibido de él: el que ama a Dios debe amar también a su hermano.” (1 Jn 4,7-21)

hACerNOS COMO NIñOS, hIjOS de UN MISMO PAdre, herMANOS de TOdOS Y VIVIeNdO eN lA CASA COMúN

“Toda pretensión de cuidar y mejorar el mundo supone cambios profundos en «los estilos de vida, los modelos de producción y de consumo, las estructuras consolidadas de poder que rigen hoy la sociedad» (LS 5)

Cambiar estilos de vida es una tarea bien compleja que supone la disposición a transitar aprendizajes complejos y procesos lentos, las consignas que proclaman los grandes problemas ecológicos parecen interesarnos, pero reconocemos una cierta inercia que nos destina a sentirnos impotentes de un cambio real, sin embargo, como en otros aspectos de la vida, no todo depende de los gobernantes, de las organizaciones, en su mayor parte la transformación depende de la decisión personal. Es precisamente

en este punto donde “la infancia” se convierte en oportunidad, el infante es deseoso de aprender, aventurado en la experiencia y sediento de conocer, nos encontramos precisamente frente a una clave brutal que puede dar ser sentido a las motivaciones más profundas en un proceso de verdadera conversión ecológica.La enseñanza del Papa

Francisco, especialmente expresada en la encíclica Laudato Si, contiene la fuerza y actualidad necesaria para motivarnos, encontrarnos con el Magisterio desde una actitud de niños, significará “corrernos” de meras interpretaciones ideológicas o político partidarias y personalizar el camino, haciendo alianza con personas que provenientes de las mismas convicciones buscan aportar su granito de arena.

“La historia de la propia amistad con Dios siempre se desarrolla en un espacio geográfico que se convierte en un signo personalísimo, y cada uno de nosotros guarda en la memoria lugares cuyo recuerdo le hace mucho bien. Quien ha crecido entre los montes, o quien de niño se sentaba junto al arroyo a beber, o quien jugaba en una plaza de su barrio, cuando vuelve a esos lugares, se siente llamado a recuperar su propia identidad”. (LS84)

hACerNOS COMO NIñOS, hIjOS de UN MISMO PAdre, herMANOS de TOdOS, VIVIeNdO eN lA CASA COMúN, reCONOCIeNdO lA dIGNIdAd de NUeSTrA SINGUlArIdAd eN relACIóNVaya si hay algo que le agrada a un niño es percibir como los demás pueden destacar sus características personales y sus habilidades, cuanto estímulo hay en esa experiencia, claro no faltará quien pueda identificar esto como una necesidad narcisista; sin embargo lejos de un narcisismo desequilibrado, es oportuno considerar en este momento la importancia


de salirnos de la tendencia a considerarnos solamente una parte del todo, un numero en la estadística, un dato en la información global. Se trata de alimentar la autoestima para alcanzar o fortalecer la conciencia de una dignidad que nos es dada por el Creador, no a algunos, sino a todos.Hay un autor que lo expresa de manera muy clara:

“El amor a los demás y el amor a nosotros mismos no son alternativas en oposición. Todo lo contrario: una actitud de amor a sí mismo se encontrará en todos aquellos que son capaces de amar a los demás” (E. FROMM)

Ese gusto del niño por recibir el reconocimiento de su lugar y su importancia es clave para que nos despojemos de una falsa humildad y cultivemos lo que en la psicopedagogía se señala como autoestima.Todos necesitamos un sano amor de nosotros mismos para desarrollar el verdadero potencial personal y en los vínculos y relaciones con los demás; las personas que logran una alta autoestima alcanzan niveles de salud física, mental y espiritual.Para fortalecer esta dimensión será importante cultivar como constante en la vida, el propio autoconocimiento, es decir realizar permanentemente el ejercicio de entrar en nuestra interioridad y contemplar todos los elementos que constituyen el propio yo: ideas, opiniones, convicciones, sentimientos, carácter, temperamento,

valores, ideales, opciones, compromisos.No conocernos a nosotros mismos o suponer ese autoconocimiento es camino seguro al engaño, teniendo una autoimagen negativa o aparentando una autoimagen “idealizada” que no corresponde a la realidad, la primera conduce al sentir inferioridad y la segunda conduce al sentir superioridad.Al autoconocimiento se lo debe acompañar de la aceptación de sí mismo, reconociendo serenamente tanto las habilidades y capacidades personales como las limitaciones, debilidades, errores y fracasos.Aceptarnos a nosotros mismos conlleva una actitud comprensiva hacia sí mismo y se siente en paz consigo mismo, con su historia, con su familia, en relación al lugar donde vive. No aceptarnos implica autodevaluación, autodesprecio y autorechazo. Finalmente la autoestima pide autoconfianza, es decir seguridad en nosotros mismos, creer en nuestras capacidades personales, saber afrontar los riesgos y no dejarnos desplazar por los fracasos o problemas.

La consideración seria de la autoestima como tarea permanente, especialmente abordada desde un ámbito de acompañamiento es base para el desarrollo de la dimensión antropológica de la espiritualidad cristianaA modo de evocación de lo que somos recogemos el texto del Eclesiástico (17,1-15):“El Señor creó al hombre de la tierra y lo hace volver de nuevo a ella. Le señaló


un número de días y un tiempo determinado, y puso bajo su dominio las cosas de la tierra. Lo revistió de una fuerza semejante a la suya y lo hizo según su propia imagen. Hizo que todos los vivientes lo temieran, para que él dominara las fieras y los pájaros.[Ellos recibieron el uso de las cinco operaciones del Señor; como sexto don, les concedió la inteligencia; y como séptimo, el lenguaje que interpreta las obras de Dios.] Le dio una lengua, ojos y oídos, el poder de discernir y un corazón para pensar. El colmó a los hombres de saber y entendimiento, y les mostró el bien y el mal. Les infundió su propia luz, para manifestarles la grandeza de sus obras, y les permitió gloriarse eternamente de sus maravillas: así alabarán su Nombre santo, proclamando la grandeza de sus obras. Les concedió además la ciencia y les dio como herencia una Ley de vida; estableció con ellos una alianza eterna y les hizo conocer sus decretos. Ellos vieron con sus ojos la grandeza de su gloria y oyeron con sus oídos la gloria de su voz. El les dijo: «Cuídense de toda injusticia», y dio a cada uno preceptos acerca del prójimo. Los caminos de los hombres están siempre ante él y no pueden ocultarse a sus ojos.”

Señalamos, al inicio de nuestro recorrido, que el centro de interés en los versículos que motivan nuestra reflexión está ocupada por el Reino de Dios. En consecuencia la enseñanza de Jesús orienta nuestra relación con Dios desde la clave de la infancia espiritual: “háganse como niños”. Para cerrar esta primera parte de nuestra reflexión, entonces vale la pena detenernos a considerar cual es la relación del mismo Jesús con el Padre. Si consideramos tan solo la forma de expresión de Jesús, se reconoce que el nombre más usado por Jesús es Padre. Esta ya existía en el Antiguo

Testamento, la novedad podría estar en la insistencia con la que Jesús recurre a ella, de tal forma que para Él la expresión está reservada a Dios, y nadie más tiene derecho a usarlo (cfr. Mt 23,9). A esto debemos agregar que el vocativo de Padre, Abba, usado por Jesús no coincide con la forma en que los judíos se dirigían a Dios, la misma expresa un tono de familiaridad, de cercanía, intimidad y confianza, absolutamente novedoso. Jesús no hace ninguna descripción del Padre, de hecho no desarrolla ninguna doctrina sobre Dios, Jesús pone el énfasis en los seres humanos y su porvenir, desde la relación con un Dios que se manifiesta Padre de Jesús y Padre de todos. La actitud de ser como niños, la aprendemos del mismo Jesús, y en Él encontramos el camino único hacia el Padre, porque el Padre y Él son uno mismo (Jn 14,8-10). Cada una de las características señaladas de la infancia espiritual nos abre sedientos al misterio de Jesús, el reino de Dios.

lOS QUe Se hACeN COMO NIñOS ACOMPAñAN A lOS NIñOS Y AdOleSCeNTeSEs tiempo de preguntarnos ¿en que medida, lo dicho hasta ahora, afecta el ministerio de animadores, asesores, docentes y acompañantes del servicio de la Obra Pontificia de la Santa Infancia a los niños y adolescentes hoy?

lA SANA dISTANCIA Un primer aspecto a considerar tiene que ver con

la relación animador/a – niño/a o adolescente. Es importante detenernos un instante en este aspecto, pues, Jesús nos llama a “hacernos como niños”, pero no a “hacernos niños”. Es decir que la integración, en nuestra espiritualidad de aquellos elementos ya mencionados no debe ser justificación para alguna actitud infantil en el joven o adulto referente. Servimos


a los niños, acompañamos y animamos, formamos a los niños pero no somos niños, es decir no nos permitimos ser infantiles, entre otras cosas porque los niños básicamente no lo necesitan, por el contrario, lo que se nos pedirá es una solidez integral e integradora. Integral, en cuanto que debemos cultivar un proceso equilibrado y continuo en la formación de los animadores y asesores, abarcando todas y cada una de las dimensiones de la persona a fin de que el itinerario a recorrer con los niños esté básicamente acompañado por un o una testigo de la fe, testimonio capaz de conducir al verdadero y constantemente renovado encuentro con Jesús, superando simpatías personales para alcanzar la altura de una auténtica experiencia evangelizadora. Integradora, ya que no elegimos a los niños o niñas por la preferencia personal, sino desde donde llegan con sus historias, deseos y búsquedas, con las particularidades propias, y el animador debe potenciar lo personal y provocar la experiencia comunitaria que consolida el camino discipular misionero.En este mismo sentido, el mantener la distancia sana, significa favorecer la creación y el sostenimiento de relaciones respetuosas y ambientes sanos que

ofrecen a los niños y adolescentes seguridad y cuidado integral.

TreS ClAVeS PArA CONdUCIr A UNA AMISTAd CON dIOS PAdre, A TrAVéS de jeSúSAntes hemos señalado aquellas dimensiones de la infancia espiritual, que desde nuestro lugar, entendemos son las más significativas. Estas se aplican para los adultos, que debemos hacer el esfuerzo por “hacernos como niños” y para los niños y adolescentes, a quienes debemos acompañar para que

en su relación con Dios alcancen la misma experiencia.Para esto, consideramos tres claves que nos permiten “aterrizar” la experiencia de animación, formación y acompañamiento de los niños y adolescentes.

1. Favorecer el sentido de vivir

En un contexto mundial de vida y dignidad amenazadas, los animadores de la Obra deben provocar, en los ambientes grupales, la pregunta por el sentido de la vida, no se trata de una elaboración teórica sobre la vida sino de una pregunta vital que debemos instalar en el núcleo de nuestros grupos y comunidades ¿qué sentido tienen el dolor, la muerte, el sufrimiento? ¿la vida de cada uno de nosotros, qué valor tiene?Lamentablemente, no pocos niños y adolescentes conviven con contextos de muerte. Pretender anunciarles a Cristo sin transitar la pregunta por el sentido de la vida, podría convertir el anuncio evangélico en una simple narración fantasiosa, no porque no tenga valor en sí mismo, sino porque no tocaría la realidad de vida de los niños y adolescentes.Recogemos aquí una expresión de Victor Frankl que nos orienta en este planteo:

Lo importante no es tanto el sentido de la vida en abstracto, sino el sentido de la vida en concreto, es


decir, de tu vida…Cada persona tiene en la vida su propia misión que cumplir, cada uno debe llevar a cabo su cometido concreto. Por tanto, ni puede ser remplazado en su función, ni su vida puede repetirse, su tarea es única, como única es su oportunidad para instrumentarla. A cada persona se le pregunta por la vida y únicamente ella puede responder a la vida respondiendo por su propia vida. Solo siendo responsable puede contestar por su vida.

El esfuerzo que realizamos desde el servicio de la POSI, pretendiendo que los niños y adolescentes descubran y asuman su vocación misionera, es experiencia favorable para animar la posibilidad de formular la pregunta por el sentido. De hecho, podríamos evitarle a los jóvenes el tránsito de experiencias angustiantes y desesperantes.Sin ánimo condenatorio, debemos reconocer que la cultura presente, especialmente en occidente está marcada por una fuerte concepción epicúrea de la vida, donde lo preponderante es el placer por sí mismo y para eso los canales privilegiados son el consumo y la evasión de la realidad.Plantear la pregunta por el sentido de la vida, no es someter a los chicos a un proceso filosófico complejo y rebuscado, sino simplemente instalar la pregunta por el sentido de experiencias que ya forman parte del haber de sus historias, y esto nos habilita a un anuncio potente de Cristo que nos dará el sentido de

la vida en el Amor.Haciendo posible el encuentro con Jesús, los chicos, con nosotros y nosotros con ellos descubriremos que Jesús es “el hombre para los demás”, capaz de “vivir para los otros” y entregarse por todos.¿No esta la dimensión universal de la misión en la que pretendemos que los niños y adolescentes sean protagonistas?

2. Construir el pensamiento religioso

La pluralidad de la sociedad en la que vivimos llega al ámbito religioso. También en nuestras ciudades y barrios convivimos personas con distintos credos y religiones. Como Iglesia, nos corresponde reconocernos en medio de este escenario plural,

donde no somos los únicos y donde la experiencia religiosa se confunde con otros elementos que no necesariamente son experiencia religiosa como tal.Son espacios donde lo esotérico y lo místico tienen un fuerte protagonismo, y en no pocas ocaciones, Dios queda reducido a una especia de energía y fuerza cósmica que se pone al servicio de las necesidades del individuo. La religión se convierte en este contexto en un mero instrumento para alcanzar bienestar.En este escenario nacen, crecen y viven muchos de los niños y adolescentes que acompañamos, si nos proponemos prestar un verdadero servicio de animación y formación misionera para ellos, es imperioso redescubrir la religión como un hecho humano universal, al ser humano como ser religioso, abierto a la trascendencia que tiende naturalmente a la relación con Dios. Cabe, en este sentido, identificar algunos elementos presentes en la religión:

a) El reconocimiento de “lo divino”. El ser humano reconoce la existencia de un ser superior, llamado Dios. La religión es precisamente, la toma de conciencia, el reconocimiento y la aceptación de esta presencia.b) La búsqueda de sentido de vida. A través de la experiencia religiosa, el humano reconoce que Dios es el origen, centro y fin de su vida. La vida tiene sentido en la medida en que se orienta a Dios.


c) El contacto místico con Dios. La persona se comunica con Dios a través de los ritos o celebraciones que ofrecen un soporte a la experiencia religiosa.d) La filiación comunitaria. La relación con Dios da origen a la pertenencia comunitaria.e) La existencia de dirigentes religiosos. Hacen parte de la mediación entre Dios y el grupo humano.f) La existencia de una moral. Es decir que desde la fe en Dios se desprende la consecuencia práctica que encarrila la vida personal y comunitaria en la vivencia de principios y valores acordes con la fe profesada.

En definitiva, en el servicio a los niños y adolescentes, debemos ser capaces de ofrecer la vivencia del encuentro permanente y renovado con Jesucristo, para que experimentándolo pueda darse la unión personal con Dios, y la misión no quede reducida a una pertenencia simpática al club de la buena gente. En segunda instancia, deseo insistir en la pregunta por el sentido de la vida, la importancia de este asunto está recogida en el Concilio Vaticano II: “Los hombres esperan de las diversas religiones la respuesta a los enigmas recónditos de la condición humana, que hoy, como ayer, conmueven su corazón. ¿Qué es el hombre? ¿Cuál es el sentido y qué fin tiene nuestra vida?” (NE 1)

La religión cristiana le da a la persona el sentido de su existencia: trabajar en unión con Cristo y su Iglesia, en el reconocimiento y el crecimiento del Reino de Dios en la sociedad y en el tiempo, con la esperanza en su realización plena en la eternidad, en el encuentro con Dios Padre cuyo rostro contemplaremos para siempre. El camino de fe cristiana es pragmático y no alienante.La formación que ofrecemos a los niños y adolescentes no puede reducirse al conocimiento de la doctrina, ni a la sola celebración cultual, menos a un solo cumplimiento de obligaciones morales. Seguir a Jesús, es reconocernos hijos del mismo Padre, hermanos de todos los seres humanos, viviendo y testimoniando el Evangelio, abrazando la totalidad de la persona. He aquí la importancia de una formación integral que favorece la vivencia total de la fe.

3. Anunciar a Dios, la mejor buena noticia para todos

“El hombre es por naturaleza y por vocación un ser religioso. Viniendo de Dios y yendo hacia Dios, el hombre no vive una vida plenamente humana si no vive libremente su vínculo con Dios. El hombre está hecho para vivir en comunión con Dios, en quien encuentra su dicha”

(Catecismo de la Iglesia Católica 44-45)

Si pudiéramos hacer una radiografía a la sociedad contemporánea, sin ánimo de ser pesimistas encontraremos al menos


tres manifestaciones de “resistencia a Dios” que no podemos ignorar:

a) Dios no es necesario para vivir. Se prioriza la materialidad: el trabajo, el dinero, deporte, apariencia, auto… Dios parece ausente en medio de este entramado.b) Creer en Dios es inútil. Ya que Dios no soluciona los problemas que nosotros ocasionamos (guerras, enfermedades, injusticias, etc.) no tiene sentido ni siquiera pensar en él.c) Dios no existe. No podemos probar científicamente su existencia así que no hay lugar a la posibilidad de su existencia.

Frente a esta realidad, no es precisamente el ámbito del debate teórico o abstracto el que nos llevará a buen puerto. Si lo que buscamos es que Dios sea conocido como la mejor buena noticia posible para el ser humano, nos tocará realizar un anuncio inteligente, creativo, respetuoso que se basa en el testimonio de la caridad.

CONClUSIóNIniciamos nuestro relato afirmando que el centro del diálogo evangélico está ocupado por el Reino de Dios. Hemos intentado abarcar dos dimensiones de la enseñanza de Jesús: “Háganse como niños”, sosteniendo nuestra mirada en la centralidad del Reino y queriendo puntualizar las características que “la infancia” como camino espiritual tiene

para nosotros, y luego, hemos querido señalar las consecuencias prácticas en nuestra labor a favor de la animación y formación misionera de niños y adolescentes. Al concluir deseo insistir en la dimensión universal del Reino de Dios, el Reino, comprende toda la persona y a todas las personas. Desde la POSI, reconocemos la responsabilidad carismática de sembrar en el corazón de los niños y adolescentes la universalidad real que supera fronteras existenciales y geográficas para proclamar la paternidad de Dios que con misericordia asoma su mirada sobre la vida de cada uno. De esta mirada y este compromiso del Padre somos servidores y testigos porque antes somos mirados y sanados.

BOLETíN - PONTIFICIUM OPUS A SANCTA INFANTIA - N. 9 - OCTUBRE 2021 16

Santa Teresa del Niño Jesús y de la Santa Faz, Patrona de las Misiones, proclamada Doctora de la Iglesia por san Juan Pablo II el día del Domund de 1997, fue a los siete años inscrita en la Obra de la Santa Infancia, a la que solemos llamar actualmente “Infancia Misionera” y que es una de las cuatro Obras Misionales Pontificias. El detalle no es baladí. Por un lado, porque confirma el acierto de la pedagogía cristiana/misionera que se halla en el carisma original de la Obra, fundada en 1843 por el obispo, también francés, Mons. Carlos Augusto de Forbin-Janson. Por otro, porque hace intuir que traer a la actualidad la vida y espiritualidad de esta santa puede iluminar la vida y espiritualidad de nuestra Infancia Misionera de hoy.Basta fijarse en el nombre de religión de Teresa para comprender el potencial de esa pedagogía, que es para niños, pero que no infantiliza la fe, sino que ayuda a crecer en ella y con ella. Quien había aprendido a unirse al “Niño Jesús” fue capaz de unirse hasta el amor heroico con el Cristo sufriente y salvador de la “Santa Faz”. No es descabellado pensar que la participación en la Santa Infancia

no impidió, sino, todo lo contrario, ayudó a Teresita a identificar que el Niño Jesús a quien se confió de pequeña era y es el mismo Cristo muerto y resucitado que “me amó y se entregó por mí” (Gál 2,20), y viceversa.La presente aportación se circunscribe a rastrear todo esto a través de las claves ofrecidas por Divini amoris scientia (citamos por sus números, asignando una letra a cada párrafo dentro de ellos; las cursivas son siempre subrayados nuestros). Es con esta carta apostólica del 19 de octubre de 1997 con la que san Juan Pablo II declara a la santa de Lisieux Doctora de la Iglesia universal.

el ejeMPlO de lA NIñez de TereSASan Juan Pablo II dedica tres párrafos (5a-c) a recordar los hechos más sobresalientes de la vida de Teresa hasta su entrada en el Carmelo, con quince años (cf. 6b). En sí, ofrece importantes pistas sobre el entorno que favorece el que el niño pueda identificar, interpretar y secundar la predisposición que el Espíritu le concede para ir al encuentro de Jesús; esencialmente, se destaca el papel de la familia, con referentes que acompañan la orientación religiosa de la vida incipiente, desde la virtud, el afecto y la asunción de responsabilidades pedagógicas y formativas.

UNA eSPIrITUAlIdAd PArA lA INFANCIA MISIONerA, SeGúN SANTA TereSA de lISIeUX Y SAN jUAN PABlO II

rAFAel SANTOSDirección Nacional OMP

España


Asimismo, esos párrafos dejan claro cómo el Señor puede salir y sale (de hecho, “primereando”) al encuentro del niño. En el caso de Teresa, se trata de experiencias profundas y transformadoras, ligadas a los sacramentos y a la conversión personal; san Juan Pablo II destaca “una singular experiencia de la gracia de la unión íntima con Jesús” en su primera comunión, una “viva conciencia de lo que implica el don del Espíritu Santo en la participación personal en la gracia de Pentecostés” en su confirmación y “una experiencia espiritual muy profunda, que describe como una «conversión total»”, cerca ya de sus catorce años (5b). Es evidente en ella que Dios puede regalar a los niños aun sus gracias más extraordinarias.En otro lugar de su carta apostólica, san Juan Pablo II recapitula los pilares de la vida de fe de la pequeña Teresa: “Ya desde niña, sus familiares le enseñaron a participar en la oración y en el culto litúrgico. Al prepararse para su primera confesión, para su primera comunión y para el sacramento de la confirmación, mostró un amor extraordinario a las verdades de la fe, y se aprendió casi al pie de la letra el Catecismo (cf. Ms A 37r - 37v). [...] Teresa no sólo se alimentó con las palabras de la Escritura y la doctrina de la Iglesia, sino también, desde su niñez, con la enseñanza de la Imitación de Cristo, que, como confiesa ella misma, se sabía casi de memoria (cf. Ms A 47r)” (9c-d). Alimentos (oración, culto, sacramentos, Sagrada Escritura, Magisterio, maestros de espiritualidad) que, a lo

que se ve, y en contra de temores infundados de hoy, son perfectamente asimilables (y, además, “afectivamente” asimilables) por el corazón, la razón y la sensibilidad de los niños.Podría surgir ahora una pregunta: ¿qué hace que un niño pueda aspirar a tanto, pueda aspirar a Dios? ¿Qué disposición es la que allana el camino para que un niño pueda recibir, y en grado semejante, los dones divinos? Santa Teresa del Niño Jesús nos la señala: “El que sea sencillo, venga a mí...; al pequeño se le concede la misericordia” (Ms B 1v; cf. Pr 9,4; Sb 6,6)” (cit. en 7b). Precisamente este de la “pequeñez” es el rasgo más característico de la Infancia Misionera y de su pedagogía cristiana. A este respecto, san Juan Pablo II explica que esa pequeñez prepara el terreno para:

- Acoger la revelación de Dios al propio corazón: “El Señor sigue revelándose a los pequeños y a los humildes, capacitando a sus elegidos, por medio del Espíritu [...], para hablar de las cosas «que Dios nos ha otorgado [...]» (1 Co 2,12)” (1b; cf. 7b-c).- Recibir la caridad teologal: “La ciencia del amor divino [...] es un don, concedido a los pequeños y a los humildes, para que conozcan y proclamen los secretos del Reino” (1a).

Los verbos subrayados hacen notar un aspecto importante en esta revelación de Dios-amor: cómo lo que es “don” para la persona es (y debe ser) “gracia” para los demás por el anuncio misionero.


Así, los niños, entre “los pequeños, a los que han sido revelados de manera muy especial los secretos del Reino” (1c), quedan acreditados como agentes y destinatarios, incluso privilegiados, de la misión. Se ve aquí, además, cómo Dios, que crea ex nihilo y hace de la fragilidad su propio testimonio, no actúa “eligiendo a los capacitados” según el mundo, sino “capacitando a sus elegidos”, los pequeños.

lA “INFANCIA eSPIrITUAl”Sin duda, santa Teresa de Lisieux, “la Doctora más joven de la Iglesia” (11e), experimentó en la Santa Infancia lo que es la esencia de esta Obra: la hermandad del niño con el Hijo de Dios hecho Niño. San Juan Pablo II dice expresamente que Teresa, en cuya experiencia espiritual “el centro y la plenitud de la revelación es Cristo”, “penetró en los misterios de su infancia” (8g). Dicha hermandad remite inmediatamente a un Dios: 1) que es Padre de Jesús, 2) que es Padre del niño unido a Jesús y 3) que es Padre de todos los niños del mundo, hermanos, por tanto, entre sí y llamados a unirse también a Jesús para vivir plenamente esa hermandad en el Cuerpo Místico.La infancia espiritual, en la que se sintetiza el mensaje que Dios regala a la Iglesia y al mundo a través de santa Teresita, se basa precisamente en esto. En este “caminito” se encuentra “la confirmación y la renovación de la verdad más fundamental y más universal. ¿Qué verdad hay en el mensaje

evangélico más fundamental y más universal que ésta: Dios es nuestro Padre y nosotros somos sus hijos?» (10f, autocita).San Juan Pablo II identifica dos virtualidades de

este camino para quien progresa en él, según lo que la misma santa experimenta; y es que ella- “penetra cada vez más en el misterio de la Iglesia y,- atraída por el amor de Cristo, siente crecer en sí misma la vocación apostólica y misionera, que la impulsa a llevar a todos hacia el encuentro con el Esposo divino” (5d).Los verbos destacados en cursiva en las citas resaltan de nuevo el ya mencionado binomio “don”/“gracia” misionero. En la misma línea, refiriéndose al “caminito”, san Juan Pablo II habla de “la ciencia de las realidades divinas, concedida por Dios a Teresa, para enseñar a los demás los caminos de la salvación” (10c, evocando a Benedicto XV); y también, de su “doctrina sencilla y, a la vez, profunda que ella tomó de los manantiales del Evangelio bajo la guía del Maestro divino y luego comunicó a sus hermanos y hermanas en la Iglesia con amplísima eficacia (cf. Ms B 2v-3r)” (3a). Además, destaca su universalidad: “Su persona y el mensaje evangélico del «caminito» de la confianza y de la infancia espiritual han encontrado y siguen encontrando una acogida sorprendente en todo el mundo” (10i), junto a su

proyección ecuménica y ad gentes: “Es amada y


aceptada también por hermanos y hermanas de otras comunidades cristianas e incluso por muchos no cristianos” (11e).¿En qué consiste, en definitiva, la infancia espiritual? San Juan Pablo II lo explica así:

- Desde el punto de vista del sujeto (como agentes de la misión), “en la base se halla la experiencia de ser hijos adoptivos del Padre en Jesús; ese es el sentido más auténtico de la infancia espiritual, es decir, la experiencia de la filiación divina bajo el impulso del Espíritu Santo” (8e).- Desde el punto de vista del objeto (en cuanto a los destinatarios de la misión), “también en la base, y ante nosotros, está el prójimo, los demás, en cuya salvación debemos colaborar con Jesús y en él, con su mismo amor misericordioso” (8e).— Desde el punto de vista de su mensaje doctrinal y teológico, en que “todo viene de Dios, a él vuelve y en él permanece, para la salvación de todos, en un misterio de amor misericordioso” (8f).— Desde el punto de vista de su mensaje espiritual y pastoral, en “el camino evangélico de la santidad para todos” (2b), “el «caminito», que todos pueden recorrer, porque todos están llamados a la santidad” (6e).

En definitiva, como resume san Juan Pablo II, “su enseñanza no solo es acorde con la Escritura y la fe católica, sino que también resalta por la profundidad y la síntesis sapiencial lograda. Su doctrina es, a la vez, una profesión de la fe de la Iglesia, una experiencia del misterio cristiano y un camino hacia la santidad” (7d).

lA MISIóN, SeGúN lA PATrONA de lAS MISIONeSEsta carmelita de Lisieux, que escribía cartas a “hermanos” misioneros (cf. 6f) y habría deseado ser enviada a un Carmelo en Indochina, pero que no salió de los muros de su convento, fue en 1927 proclamada Patrona de las Misiones, junto con san Francisco Javier. Así lo estableció el “Papa de las Misiones”, Pío XI, “acogiendo la petición de muchos obispos misioneros” (2a). Este patrocinio no debería sorprender, ya que, como expresa san Juan Pablo II, “con su ejemplo de santidad, de perfecta fidelidad a la Madre Iglesia, de plena comunión con la Sede de Pedro, así como con las particulares gracias que ha obtenido para muchos hermanos y hermanas misioneros, ha prestado

un servicio particular a la renovada proclamación y experiencia del Evangelio de Cristo y a la difusión de la fe católica en todas las naciones de la tierra” (10a).Es fácil intuir la c o m p l e m e n t a r i e d a d entre las figuras de san Francisco Javier, el misionero “de sangre” —valga la expresión— por la cooperación personal, y de santa Teresa de Lisieux, la misionera “de deseo”, pero

efectivamente misionera, por la cooperación espiritual. (El tercer modo de participación en la misión, la cooperación material, tiene un referente significativo en la venerable Paulina Jaricot, fundadora de la Obra de la Propagación de la Fe y figura importante en la génesis de la Obra de la Infancia Misionera). Al margen de su dimensión contemplativa, en la que no vamos a profundizar, tal vez tenga que decirnos algo el hecho de que quien fue niña de la Santa Infancia haya venido a ser Patrona de las Misiones junto con el santo navarro.


Al referirse, dentro de los textos autobiográficos de Teresa, al llamado Manuscrito C, san Juan Pablo II destaca que en él “encontramos las páginas más hermosas, dedicadas al abandono confiado en las manos de Dios, a la unidad entre el amor a Dios y el amor al prójimo, y a su vocación misionera en la Iglesia” (6d). Más adelante, el Papa se refiere a los temas en que el Magisterio ordinario ha recurrido a la doctrina de la santa, “especialmente al tratar de la vocación contemplativa y misionera, de la confianza en Dios justo y misericordioso, de la alegría cristiana y de la vocación a la santidad” (10h). Esta reunión de temas confluyentes — confianza, amor, vocación, alegría, santidad — arroja una pista sobre qué es la misión para ella.Recordando la toma de conciencia y autoapelación que, según el papa Francisco, todo cristiano debe hacerse —“yo soy una misión en esta tierra”, EG 273—, podríamos intentar concretar aún más qué misión es Teresa dentro de esa Misión que es la Iglesia. San Juan Pablo II la cifra esencialmente en esto: ella “ha cumplido la misión de hacer conocer y amar a la Iglesia, Cuerpo místico de Cristo” (8c).Se plantea, de nuevo, la pregunta: ¿cómo ha logrado la niña y la joven Teresa llevar esto a cabo? ¿Cómo ha podido situarse “en el lugar correcto” dentro de la misión de la Iglesia? Está claro que identificando y viviendo su vocación: “Teresa recibió una iluminación particular sobre la realidad

del Cuerpo místico de Cristo, sobre la variedad de sus carismas, dones del Espíritu Santo, sobre la fuerza eminente de la caridad, que es el corazón mismo de la Iglesia, en la que ella encontró su vocación de contemplativa y misionera (cf. Ms B 2r-3v)” (8h).Conviene detenerse en este punto. Esta necesidad de identificar la propia vocación y responder a ella es una necesidad acuciante de nuestra Iglesia y de nuestros niños, para bien de la sociedad y del mundo entero. La Obra de la Infancia Misionera debe ofrecer la pedagogía adecuada para facilitarlo.Por otra parte, esto remite a una dimensión importante en el carisma de la Santa Infancia, tal como lo acogió Mons. de Forbin-Janson: la del cultivo de las vocaciones de carácter misionero. De hecho, el fundador vio la Obra incipiente como una cantera de la que pudieran surgir tanto misioneros, en el caso de los niños de las Iglesias de antigua tradición, como vocaciones locales que contribuyeran a evangelizar sus propios pueblos (hoy ya estamos comprobando que también otros), en el caso de los de Iglesias en formación de los territorios de misión. En este sentido, es significativo que, junto a su patrocinio “general” sobre las misiones, santa Teresita sea también específicamente Patrona de otra de las Obras Misionales Pontificias (la tercera, de las cuatro, que mencionamos en estas líneas): la de San Pedro

Apóstol, que vela por las muchas veces llamadas “vocaciones nativas” (cf. 2bc).

UNA eSPIrITUAlIdAd PArA INFANCIA MISIONerA, SeGúN TereSA“Teresa ofrece una síntesis madura de la espiritualidad cristiana”, dice san Juan Pablo II, quien añade acto seguido una precisión iluminadora: “Une la teología y la vida espiritual” (7d). La pista es de gran importancia cara al cuidado de nuestros niños: esa integración y unificación permite


que no ofrezcamos a estos ni unos contenidos de formación doctrinal que ellos puedan percibir como teóricos (en el peor sentido de ‘desvinculados de la vida’), ni un espiritualismo subjetivo y difuso, que no oriente ni encauce la vivencia religiosa incipiente del niño conforme a la verdad de la que es depositaria y servidora la Iglesia.En efecto, frente a esos dos peligros recién citados, “la enseñanza de Teresa manifiesta con coherencia y une en un conjunto armonioso los dogmas de la fe cristiana como doctrina de verdad y experiencia de vida” (7e). Y tan interesante como lo anterior es comprobar que la santa de Lisieux nos muestra que hay (que debe haber) un tercer elemento igualmente integrado en esa unidad vital de la persona de fe: la misión. Y lo hace con una naturalidad tan aplastante que a Juan Pablo II le hacen falta muy pocas palabras (eco de otras de la santa) para expresar ya completa esa triple dimensión-dirección de la espiritualidad: “Teresa conoció a Jesús, lo amó y lo hizo amar” (8g).Con el propósito de animar a profundizar en lo que supone la articulación de estos tres “componentes”, aquí solo vamos a enumerar, remitiendo a la carta apostólica que nos sirve de guía, algunas de las importantes claves que nos ofrece al respecto esta “maestra de vida espiritual” (3a), forjada —podría decirse— en la fragua de la Infancia Misionera:

1) Formación doctrinal (verdad - “soy amado”):

a) Contenidos teológicos— “El misterio mismo de Dios Amor, de Dios Trinidad” (8e).— “Dios es nuestro Padre y nosotros somos sus hijos” (10f).— “Conocer y amar a Jesucristo y su Evangelio” (4b; cf. 7b).— “Con la luz y la fuerza... del Espíritu” (11e; cf. 1b, 7c).— “Centralidad del amor” (5d; cf. 1a, 5e, 8e-f.h).b) Pistas prácticas y pedagógicas

— “El misterio cristiano..., con el mayor realismo posible” (10j).— “Doctrina sencilla y, a la vez, profunda” (3a; cf. 8d).— “Formación exigente y, a la vez, llena de ternura” (5a).— “Lenguaje vivo y accesible” (8b).— “Gran capacidad de persuasión y de comunicación” (7d).

2) Vivencia espiritual (vida - “amo”):a) Aspectos experienciales ((“enlace” con los contenidos teológicos)

— “Búsqueda de Dios” (10e).— “Experiencia de ser hijos adoptivos del Padre en Jesús” (8e; cf. 10f).— “Experiencia del misterio cristiano” (7d; cf. 8e).

b) Disposiciones— “Confianza en el amor misericordioso y paternal de Dios” (6d; cf. 7f, 8c).— “A los pequeños y a los humildes” (1a-b; cf. 7b).— “Filial audacia” (5c).— “Amor extraordinario a las verdades de la fe” (9c; cf. 7d, 10h).c) Medios— “En la Iglesia, Esposa de Cristo y Madre de las almas” (6c; cf. 8h, 10a).— “Meditación de la palabra de Dios” (9b; cf. 9a).


— “Participar de la oración y en el culto litúrgico” (9c).— “Fe viva que actúa por medio de la caridad” (7g).d) Propuesta de santidad

— “Camino evangélico de la santidad para todos” (2b; cf. 6e, 7d).— “Camino de la perfección” (5b; cf. 5d).— “Camino de la Virgen María según el Evangelio” (6g; cf. 8i).3) Proyección misionera (misión - “hago amar”):

— “Unidad entre el amor a Dios y el amor al prójimo” (6d; cf. 8e, 9b).

— “El prójimo, los demás, en cuya salvación debemos colaborar con Jesús y en él” (8e; cf. 8f, 9b, 10c, 11e).

— “Vocación misionera en la Iglesia” (6d; cf, 8c.h).

— “Vocación al amor” (9b).

— “Un servicio particular... a la difusión de la fe católica en todas las naciones de la tierra” (10a; cf. 10i).

— “Testigo y apóstol mediante la oración” (10j; cf. 1d, 11c).

AlGUNAS CONClUSIONeSEn Santa Teresita vemos la fe, la vida de fe y la misión como los tres ángulos de un triángulo: la figura se compone con los tres, o no se compone. La enseñanza es especialmente importante con vistas al enfoque de la Obra de la Infancia Misionera y, en general, de la formación de los más pequeños. Y lo es porque vuelve a poner de manifiesto que no se puede presentar el compromiso misionero como un añadido o un adorno (cf. Francisco, Mensaje JMOV 2017), error de planteamiento que afecta, con graves consecuencias, a la catequesis y a las clases de religión. Vemos claro que si a la fe no corresponde una vida de fe, el cristiano se va

“descristianizando”, pero no que, si a la fe y a la vida de fe se les amputa la misión, el efecto es semejante y quizá, por pasar un tanto desapercibido, más sutilmente peligroso. Precisamente, desvincular la misión de uno o de los otros dos ángulos mencionados explica por qué ha sido necesario enfatizar en el Mes Misionero Extraordinario que somos “Bautizados y enviados”.Cuando san Juan Pablo II se refiere a que “Teresa experimentó la revelación divina, llegando a contemplar las realidades fundamentales de nuestra fe encerradas en el misterio de la vida trinitaria”, precisa a continuación: “En la cima, como manantial y término, el amor misericordioso de las tres divinas Personas” (8e). La expresión es muy evocadora desde el punto de vista misionero, ya que conecta con el “amor fontal” de Dios Padre (AG 2), del que provienen la misión del Hijo y la del Espíritu Santo (cf. AG 3-4); misión del Hijo que se prolonga en la de la Iglesia, bajo el impulso del Espíritu Santo (cf. AG 5). Aquí interesa destacar que en Teresa teología y misionología no son solo “conocimientos”, sino fundamento de experiencia de vida personal en el seno de la Iglesia. Así debemos procurar que sea también en el caso de nuestros niños. Para ello, podría ser interesante explorar la distinción y relación que la carta apostólica establece entre la necesaria formación en doctrina cristiana y la capacitación por el Espíritu (cf. 1b, 7c, 11e).A este respecto, al valorar en conjunto el testimonio de santa Teresita, el Papa da otra pista importante, que habría que tomar como principio práctico


para orientar la animación misionera de los niños: “La fuerza de su mensaje radica en que explica de modo concreto cómo todas las promesas de Jesús se cumplen plenamente en el creyente que acoge con confianza en su vida la presencia salvadora del Redentor” (10j). Ella, que “leyendo el Evangelio, supo captar sus riquezas escondidas con la forma concreta y la profunda resonancia vital y sapiencial propia del genio femenino” (11b), nos “ofrece su personal confirmación de que el misterio cristiano [...] debe tomarse al pie de la letra” (10j), debe vivirse, y debe vivirse como misión.

Este “realismo” (10j) respecto a Dios y respecto a la persona no contradice, sino que, al contrario, sitúa y justifica la grandeza de la propuesta: frente a supuestas pedagogías que renuncian a presentar altos ideales a los niños, condenándolos a una vida incompleta, Infancia Misionera no puede ofrecerles menos de la santidad. La Obra se sitúa así en “terreno propio”, ya que vocación a la santidad y vocación a la misión están estrechamente unidas, como explicitó san Juan Pablo II: “La llamada a la misión deriva de por sí de la llamada a la santidad”, hasta el punto de que “el verdadero misionero es el santo” (RM 90 y epígrafe).

Santa Teresa del Niño Jesús, Patrona de las Misiones, “sabe que ha sido instruida en la ciencia del amor, oculta a los sabios y a los inteligentes, que el Maestro divino se ha dignado revelarle a ella, como a los pequeños (cf. Ms A 49r; Lc 10,21-

22)” (7b). Y, sin duda, entre los “pequeños” evangélicos, también los niños están llamados a la cima de la santidad y de la misión. Hay que insistir en ello: esta propuesta, que es la que Infancia Misionera ha de presentar al niño, puede parecer extraordinaria, y lo es, pero viene garantizada por la grandeza de Quien la hace y posibilitada por la humilde pequeñez de quien la acoge.

Teresa nos muestra sencillamente lo que debemos propiciar desde

Infancia Misionera: ayudar al niño a acoger la fe en el Amor, ayudarle a vibrar con el amor a la fe, y traducir ambas cosas en la misión de extender la fe y el amor a todos, algo que se verifica como misión personal dentro de la gran Misión de la Iglesia (cf. 7f). La conciencia de que ser cristiano es serlo para los demás ella la vive, por cierto, desde una intuición extraordinaria, que afecta al centro mismo de nuestra Obra y a la esencia de su carisma, la “intimidad mística” del niño con Cristo Niño: no solo anunciamos a Jesús, no solo anunciamos con Jesús, sino que anunciamos en Jesús (cf. 8e, final), y, por tanto, en Iglesia.

En definitiva, no es de extrañar que san Pablo VI recomendara el estudio de la doctrina de esta “maestra de oración y de esperanza teologal, y modelo de comunión con la Iglesia” (10e), entre otros, a los maestros y educadores. Y tampoco debería sorprendernos que el “caminito” de quien fue niña de la Santa Infancia pueda inspirar —convenientemente adaptado al presente, desde el respeto fiel a su esencia— la espiritualidad de la Obra de Infancia Misionera en nuestros días.


SrI l

ANkA

l A V O z d el O S N I ñ O S

SrI lANkA

La Dirección Nacional de las Obras Misionales Pontificias en Sri Lanka ha realizado muchas actividades para la formación y la animación de los niños de la Infancia Misionera en el país. A partir de 2016, la formación y la animación de la Santa Infancia han tenido un nuevo rostro gracias a la introducción del “Year Plan” (Plan anual) para nuestros niños, uno de los medios más eficaces e importantes de formación y de animación. Es el sexto año que llevamos adelante este proyecto, actualizándolo con ideas y métodos diferentes.El plan anual de la Santa Infancia es para nuestros niños una guía a una vida más santa. Está dividido en base a los doce meses del calendario y cada mes está dedicado a un santo. Por lo tanto, doce santos al año. De esta manera, presentamos brevemente a los niños el nacimiento y el ambiente familiar del santo, su característica principal y su vida ejemplar.Serán al máximo tres o cuatro puntos, en los tres idiomas utilizados en Sri Lanka, así que cada uno de los 12 meses es semejante en la estructura y

nos da una presentación clara. El calendario se ha convertido en una gran plataforma para los niños para que profundicen la vida de los santos, asimilen las buenas cualidades en sus vidas y construyan en sí mismos las varias “características” de Dios.Esto está en un lado de la página. Igualmente, en el otro lado, según el santo al cual está dedicado el mes, introducimos elementos prácticos en tres o cuatro puntos, como las actividades mensuales que ayudan a los niños a convertirse en misioneros. De esta manera, el calendario anual incluye los hábitos cotidianos y semanales acompañados por los Santos, lo que constituye un buen ejercicio para el alma.Cada año proponemos doce santos y estamos contentos de informarles que, desde el 2016 al 2021, hemos presentado a los niños de la Santa Infancia 72 santos. Ahora todos nuestros


TesTIMONIO

niños conocen bien el calendario colorado, que se ha convertido en el material imprimido más solicitado. Por este motivo hemos ya preparado el calendario correspondiente al 2022, con otros doce santos, poniendo en resalto el mes de octubre 2022, en honor de Paolina Jaricot, fundadora de la Obra de la Propagación de la Fe.Este calendario ha despertado el espíritu de Dios y ha donado a las familias niños que se comportan bien y que son portadores de los valores cristianos. Gracias a ello, nacen vocaciones al sacerdocio y a la vida religiosa. Para concluir, quisiera añadir que el calendario de la Santa Infancia da a nuestros niños una marcha más en el arraigo y en desarrollo de los valores cristianos, además que en su desarrollo físico, mental y social.

P. Basil Rohan FernandoDirector Nacional OMP Sri Lanka


PAQU

ISTÁ

N

PAQUISTÁN

Los orígenes de la Iglesia católica en Paquistán puede remontarse al periodo de los cristianos de Santo Tomás y también a los tiempos del trabajo misionero de San Francisco Javier en Goa.Sin embargo, recientemente, ha habido una mayor necesidad de formar a los niños y de despertar el celo misionero, si bien ya ha habido una fuerte onda de acción misionera y aún hoy los jóvenes voluntarios están fuertemente comprometidos. Sin embargo, con el pasar del tiempo es necesario renovar el empeño misionero y, además, hay una fuerte necesidad de revitalizar el catequismo y la formación.El Encuentro nacional de formación para los Animadores de la Infancia Misionera (SOMA) se ha desarrollado del 26 al 30 de julio de 2021 en Ayubia y ha reunido

participantes de todo el Paquistán. Han intervenido también todos los directores diocesanos y los coordinadores, juntos a sus equipos. Ha intervenido también S. E. Mons. Khalid Rehmat, Presidente de las OMP en India, quien ha sido uno de los relatores. También el Arzobispo Joseph Arshad y S.E. Mons. Indrais Rehmat han sido huéspedes relatores. Ambos obispos han enfatizado el aspecto misionero en Paquistán y como llevar adelante la misión de la Iglesia en la situación actual, ya que la iglesia paquistana está afrontando numerosos desafíos. Han sido presentados varios temas en los cinco días y todos los participantes han participado activamente en los trabajos de grupo. En fin, el Nuncio Apostólico en Paquistán, el Arzobispo Christophe El-

FORMACIÓN DE LOS ANIMADORES EN PAQUISTÁNPOR MEDIO DE LA RENOVACIÓNDE LA ANIMACIÓN MISIONERA (SOMA)



Reflexionando sobre las nuevas estrategias para proclamar la fe en el tiempo de hoy, pienso que el seminario de formación de cinco días de la Escuela para Animadores de la Santa Infancia haya trasmitido grandes intuiciones y requisitos esenciales, que debemos cultivar porque parte integrante de la formación de los animadores.En mi experiencia de animadora de la Santa Infancia, en los últimos 16 años he tenido la oportunidad de profundizar y renovar mi promesa bautismal, haciendo así ulteriormente posible la animación de aquellos que encuentro en mi diócesis.Los mensajes estimulantes y alentadores de los líderes de la Iglesia me han ayudado a progresar en la santidad personal y a desarrollar una cierta eficiencia personal y espiritual.El mundo tiene una gran necesidad de animadores misioneros y ahora me siento una animadora más comprometida y más madura, que está avanzando para evangelizar el mundo para Cristo.Agradezco al Padre Asif John, Director de las Obras Misionales Pontificias en Paquistán, por el constante apoyo en la formación de los animadores que, a su vez, forman a los demás, en el trabajo divino del amor de Dios

Theresa D’Souza

Kassis, ha concluido el encuentro con la celebración de la Eucaristía. Para todos los animadores de la Santa Infancia ha sido una grande oportunidad y una experiencia formidable para fortalecer la propia fe y el propio empeño por el Señor y por su Misión. Todos han estado muy contentos de haber participado y han redescubierto esta vocación fundamental y el envío como misioneros. En la evaluación del taller los animadores han verdaderamente apreciado a todos los relatores y a sus contenidos. Han encontrado los argumentos interesantes y relevantes a su misión, evidenciando la necesidad del compartir.Esta Escuela para Animadores Misioneros había sido fijada para el 2020, pero, a causa de la pandemia global no había podido tener lugar. La Conferencia Episcopal ha prolongado el año de la juventud hasta el 2021 y, así, se ha sugerido la eventualidad de una consolidación de los animadores o de la formación de los animadores de la Santa Infancia. Para una sólida formación misionera es muy importante que estos cursos intensivos renueven el empeño de los cursos regulares, ayudando a reforzarlos.La renovación de la formación y del tirocinio están en línea con la finalidad de este proyecto, que ha sido preparado para brindar a todos los animadores una buena teología y espiritualidad, varios cursos de estudio o de formación, además de una sólida estructura misionera.Objetivos:

1. Reforzar los fundamentos espirituales de los animadores reforzando su vocación.2. Facilitar al animador y a los niños en un contexto de globalización en acto en el mundo entero.3. Enseñar el origen (la importancia espiritual) de la Iglesia católica en Paquistán.4. Brindar una sólida formación espiritual y reforzar el celo misionero.5. Darles capacidad de liderazgo.6. Ofrecer conocimientos bíblicos a la luz de la misión de la Iglesia.

P. Asif JohnDirector Nacional OMP Paquistán

TesTIMONIO


MAlAwI

Me llamo JACIntA AMAO y soy una animadora de la arquidiócesis de Lilongwe en la catedral de Nuestra Señora de África de Mala y de la Pequeña Comunidad Cristiana de San Juan Pablo II. Soy animadora desde el año 2005.

DESAFíoS DEBiDoS AL CoviD 19 QuE HE AFroNTADo Como ANimADorAPara mí, como animadora, la suspensión de los encuentros en presencia con los niños ha sido un gran desafío. Sucesivamente, cuando las Obras Misionales Pontificias han lanzado las lecciones radiofónicas y televisivas, me he unido a los otros. Sin embargo, en principio, enseñar sin ver personalmente a aquellos a quienes te diriges no ha sido fácil y, más bien, poco satisfaciente.Ya que los niños no estaban conmigo físicamente, no he podido hacerles preguntas individualmente durante la lección para comprender si habían entendido o no lo que estaba enseñando. La falta de interacción física y emotiva para mí, como animadora, ha sido un gran problema.

No oBSTANTE LA PANDEmiA DE CoviD PuDE DESArroLLAr mi TrABAJo miSioNEroSi bien el Covid 19 haya puesto fin a los encuentros, la Iglesia ha encontrado un modo de llegar a los niños por medio de la televisión. No obstante esta pandemia haga las cosas difíciles, he comprendido que puedo hacer algo por Dios y por los niños. Pienso que si alguien recibe una verdadera

llamada de Dios, servirlo no es una tarea muy difícil incluso se si deben enfrentar los desafíos. El impulso que sentía de trabajar para Dios y el amor que nutro por los niños me han dado la fuerza necesaria.

DurANTE mi TrABAJo miSioNEro EN EL PEríoDo DE LA PANDEmiA HE viviDo uNA HErmoSA ExPEriENCiA CON LOS NIñOSLa respuesta que he tenido de parte de los niños ha sido para mí un incentivo y las llamadas telefónicas durante el programa han demostrado que es posible seguir enseñando en modo diferente. Una vez una niña llamó y dijo que el programa le gustaba mucho porque aprendía muchas cosas sobre la fe que antes no sabía. Así, he descubierto que, durante este difícil período de pandemia, la Iglesia, por medio de mi trabajo misionero, ha acompañado a algunos niños dándoles una formación en la fe, y seguramente, cambiándolos.

HE ComPrENDiDo QuE TAmBiéN LoS PADrES ErAN FELiCES, PorQuE LA igLESiA TrATABA DE LLEgAr A LoS NiñoS DurANTE LA PANDEmiALos padres agradecían que, incluso en este período difícil, sus hijos pudieran todavía seguir profundizando su fe. Esto ha sido evidenciado con la enorme respuesta que los niños han demostrado

en relación a los programas, y participando y respondiendo a nuestras solitudes de ofrendas para sus coetáneos. Sabemos que los padres han prestado a los niños los teléfonos y un poco de tiempo para llamarnos aquí en el estudio. Los padres han apoyado en modo entusiasta la iniciativa de las Obras Misionales Pontificias y de la Iglesia.

EL DESAFío QuE SE mE PrESENTA EN mi TrABAJo miSioNEro DurANTE LA PANDEmiA El único desafío que puedo nombrar es no saber verdaderamente a que grupo de edad nos estamos dirigiendo, ya que falta el contacto físico con los niños. A veces, esto hace difícil M

AlAw

Il A V O z d el O S N I ñ O S


escoger las palabras justas para trasmitir el mensaje.Otra dificultad que presentan las lecciones televisivas es que, como enseñante, no logro poner a los niños las preguntas directas para conocer su nivel de comprensión, y saber así, qué debo enseñar y qué han entendido.

PALABrAS DE ESPErANzA E Di ALiENToEl hecho que hemos sido capaces de llevar adelante, no obstante todo, el trabajo de Dios y que hemos obtenido un efecto positivo en estas circunstancias difíciles, nos debe incentivar a continuar nuestro trabajo misionero, no limitándonos en las modalidades del servicio de Dios. Hemos visto que esto es siempre posible y ello nos debe volver más creativos, también después del Covid 19. Dios está con nosotros y nos guiará siempre hacia lo que quiere que hagamos por su Iglesia.

Jacinta AmaoAnimadora - Arquidiócesis de Lilongwe

y hermanas para mantenernos actualizados. A menudo miraba los programas trasmitidos por Luntha Catholic Televisión, realizados por la Iglesia gracias a las OMP, para mantener viva la atención a nuestra vida espiritual.La Iglesia por medio de las OMP me ha ayudado introduciendo programas televisivos y radiofónicos de catequesis que se transmiten el sábado y el domingo. Mis padres me han apoyado siempre con las oraciones en la familia, recordándome el momento de los programas televisivos y radiofónicos, las medidas de prevención y controlando mi estado de salud cada día.

¿Qué DEBEríA HACEr LA igLESiA Por NOSOTROS LOS NIñOS?Me gustaría que la Iglesia, por medio de las OMP, siga trasmitiendo programas televisivos y radiofónicos. Deseo también que se inicie a celebrar cada mes una misa especial por los niños para poder así unirnos a nuestros amigos que rezan por sus padres y por los sacerdotes que han fallecido a causa del Covid 19.

uNA PALABrA A miS ComPAñEroSEl consejo que doy a mis compañeros es que sigamos rezando por la misericordia de Dios y que trabajemos duro en la escuela.Gracias.

Fortune MasekoParroquia Holy ghost

Arquidiócesis de Blantyre

Me llamo Fortune Maseko y tengo 10 años. Estudio en la Marafrique Pvt Primary School, en el cuarto de primaria, y formo parte de la clase de preparación a la Confirmación.Pertenezco a la pequeña comunidad cristiana de St. Bridget, en la parroquia Holy Ghost de la arquidiócesis de Blantyre.

DESAFíoS DEL CoviD 19La llegada del Covid 19 me ha afectado psicológicamente porque he vivido con miedo, pero también me ha afectado espiritualmente y escolarmente ya que las iglesias y las escuelas han estado cerradas como medida preventiva contra el Covid 19. No he aprendido mucho en la escuela y no he ido a la Iglesia para encontrar a mis amigos.Claramente no siento que Dios me haya abandonado, no, La situación del Covid 19 me ha ayudado más bien a reforzar mi fe gracias a las continuas oraciones que hacíamos en la familia.

ACTiviDADES DESArroLLADAS EN LA CASA DurANTE EL PEríoDo DE LA PANDEmiA DE CoviD 19Durante esta pandemia en casa rezábamos todos los días y compartía el estudio con mis hermanos

TesTIMONIO


Soy la HnA. AgneS nJIRAyAkOnDA y soy parte de las Hermanas Siervas de la Beata Virgen María (SBVM).Actualmente trabajo en la escuela para sordos ciegos Chisombezi, en la parroquia de Nguludi de la arquidiócesis de Blantyre en Malawi. He iniciado a enseñar a los niños, cara a cara (en presencia), en el año 2016.

DESAFíoS DEL CoviD 19Sin embargo, el Covid 19 ha implicado desafíos en la realización de las lecciones programadas para los niños, en el sentido que la naturaleza de las medidas de prevención del Covid no permite reuniones de un gran número de personas. A causa de esto, todos nuestros programas que implicaban la agrupación de niños han sido modificados para ser realizados on line. Por ejemplo, hemos tenido reuniones trámite Zoom y lecciones para los niños en Radio Maria.Como animadores, hemos enseñado lo que habíamos planificado, pero, aún así, no estábamos satisfechos porque no todos los niños habían logrado recibir las lecciones. En efecto, algunos pertenecen a familias muy pobres que no pueden permitirse tener una radio en casa. Además, las frecuencias radio no llegan a algunos lugares por la difícil posición geográfica.

EL TrABAJo miSioNEro HA CoNTiNuADo EN moDo DiFErENTE DurANTE LA PANDEmiA DE CoviD 19La Dirección Nacional de las OMP en colaboración con la Dirección arquidiocesana ha planificado realizar la animación misionera de los niños, de los padres, y de los demás adultos por medio de la radio y de la televisión.Como animadora, no obstante la pandemia de Covid 19, me he unido al grupo de animadores de la Arquidiócesis de Blantyre que estaban realizando encuentros de animación misionera con los niños y con los adultos en Radio Maria utilizando la sede de Blantyre. Lo hemos hecho por turnos con otros animadores de la arquidiócesis de Lilongwe (estudio de Lilongwe) y de la diócesis de Mangochi (estudio principal de Mangochi).Las animaciones en la radio nos entusiasmaban porque los niños tenían la oportunidad de formular preguntas o de comentar las lecciones del día. Así, los niños nos han dado una reacción sobre los que les estábamos comunicando.

Personalmente me he sentida muy feliz y satisfecha ya que algunos niños estaban aprendiendo mucho sobre su fe católica y sobre cómo vivir la vida misionera en este tiempo de pandemia.He visto con sorpresa que también los padres estaban conmovidos por el contenido trasmitido a los niños. Recuerdo que una vez he enseñado algo sobre la Medalla Milagrosa, cuando estábamos incentivando a los niños a rezar el rosario y a pedir la intersección de nuestra Madre María en tiempo de desafíos como es el tiempo actual de la pandemia de Covid 19. Esto ha atraído la atención de muchos niños y padres. Más tarde, he escuchado de parte de otros animadores de algunas parroquias que los niños preguntaban en dónde poder encontrar la Medalla Milagrosa. Esto me ha impresionado como animadora porque indicaba que no obstante vivamos en este momento difícil a causa de la pandemia, la Palabra de Dios viene todavía compartida y la fe aumenta y se refuerza en el corazón de nuestros niños y de algunos adultos.Agradecemos a los padres que han participado proporcionando a sus hijos regalos como radios y celulares para permitirles la participación a las lecciones en line.Durante la animación en Radio María los niños han sido incentivados a ofrecer sus contribuciones económicas o a enviarlas a la cuenta autorizada e indicada a los niños. El dinero ha permitido continuar con algunas actividades de caridad en las diócesis y con otras actividades para los niños.Otra cosa buena que hemos hecho con otros animadores ha sido la creación de un grupo WhatsApp de todos los enseñantes de todas las parroquias de la Arquidiócesis de Blantyre en modo que todo lo que se enseña en la radio, venga grabado y después enviado

a otros animadores para que lo compartan con los niños de sus pequeñas comunidades o con las familias utilizando los celulares.

oTroS DESAFíoSSi bien estaba haciendo mi trabajo misionero en este tiempo de Covid 19 en la radio, además de los niños de las familias pobres que no pueden acceder a estas trasmisiones, hay también otro grupo de niños que no han podido participar a M

AlAw

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los encuentros de formación misionera: son los niños sordos. Ellos no pueden escuchar lo que se enseña en Radio María.Esperamos que la Dirección Nacional de las OMP y la diócesis encuentren otros medios para ayudar a estos niños con problemas físicos.

CoNCLuSióNYo diría que durante la pandemia de Covid 19, los esfuerzos que ha hecho la Iglesia por medio de la formación y de la animación de las OMP en radio, televisión y en las redes sociales, nos han ayudado a sembrar y a hacer crecer la semilla de la fe. Además, hemos sembrado una semilla de la vida de oración en nuestros niños y esto, estoy segura, hará caminar a la Iglesia y cambiará el rostro del mundo. Amo estar al servicio de los niños, sobre todo en este momento difícil.

Hna. Agnes NjirayakondaAnimadora - Arquidiócesis de Blantyre

Me llamo ClOtIlDe RetHAbIle lIkOngwe, tengo 9 años y frecuento el quinto año de primaria en la escuela de Mkwichi. Frecuento la parroquia católica de San Kizito en la Arquidiócesis de Lilongwe y pertenezco a la pequeña comunidad cristiana de San Paolo. Frecuento la tercera clase de catequismo.El desafío que he debido afrontar durante la pandemia de Covid 19 ha sido no poder ir ni a la Iglesia y ni a la escuela. Nunca he pensado que Dios me hubiese abandonado porque Él nos ama y está siempre presente en los buenos y malos momentos. El período que he pasado en casa lo he utilizado ayudando a mis padres con los quehaceres domésticos.Durante el período trascurrido en casa había una oración que me gustaba tanto. Me gusta mucho rezar cada día tres Ave Marías, para que nuestra Madre María interceda por nosotros. Las Obras Misionales Pontificias me han ayudado a ser una niña amorosa, premurosa y fiel gracias a los programas “Aprende la fe y vence”. Mis padres me han ayudado mucho y han estado a mi lado cuando ha estallado la pandemia de Covid 19, no permitiéndome nunca de salir sin la mascarilla.Quisiera que la Iglesia siguiese trasmitiendo el programa “Aprende la fe y gana” y ayudando a los pobres. En lo que respecta a mí y a mi familia, seguiremos dando ofrendas para los pobres. Mi consejo a mis coetáneos es, recen, tengan confianza y no se preocupen.Gracias,

Clotilda rethabile Likongwe Arquidiócesis de Lilongwe

TesTIMONIO


COlOMBIA

EN FAMILIA SEgUIMOS A JESúS

¡Amigos misioneros! Mi nombre es Melani Tatiana Romero Suárez, tengo 13 años e ingresé a Infancia Misionera de la parroquia Sagrado Corazón de Jesús en el año 2014, invitada por unos amigos del barrio que por mucho tiempo con insistencia le decían a mi mamá.Al inicio del 2015 me consagré en Trigo Verde gracias a mi asesora Claudia María Mora, quien con amor y alegría me inculcó el especial amor por Jesús y María, siempre en compañía de mi mamá María Ligia Suárez, quien cada sábado se involucraba y enamoraba al igual que yo del grupo y el conocer y amar a Jesús. Al pasar del tiempo mi mamá ya sabía varias cosas del grupo, al punto que mi profe Claudia la delegaba como asesora junto a otras dos mamitas, mientras ella realizaba un viaje importante.El amor de mi mamá por esta labor y el enseñar a los niños a amar a Jesús le encantó, así que en compañía de mi hermana mayor Aleen Camila Romero, quien también se enamoró de esta obra misional mientras ayudaba a mi mamá en la elaboración de los materiales necesarios para cada encuentro, decidieron con el apoyo de la

coordinadora Claudia Mora asistir a la formación de asesores de Infancia Misionera.En el transcurso de los meses ya casi toda mi familia: mamá, hermana y yo hacíamos parte de esta obra; faltaba mi papá Andrés Fernando Romero que al acompañarnos siempre en todas las actividades y en las salidas de misión, debido a que él trabaja en el medio del transporte, se empezó a involucrar más y más y no sólo en el grupo de la parroquia si no colaborando en las peregrinaciones de la diócesis y hoy día nos ayuda con toda la logística y fotografías de las actividades de salida. Ya mi familia está completa, ya todos somos misioneros y eso me enorgullece mucho y aún más el saber que yo inicie este proceso de familia misionera.En el proceso de lograr una familia misionera, mi profesora y coordinadora de infancia en la parroquia, Claudia María Mora cae en una larga y dolorosa enfermedad. En ese tiempo la coordinadora delega a mi mamá, mi hermana y otra mamita para hacerse cargo del grupo bajo su coordinación y así, durante dos años en los cuales a pesar de su dolor, seguía dirigiéndolas hasta su fallecimiento. Después mi mamá recibe la bandera

del grupo y el hacer parte del comité de la OMP de la diócesis de Neiva.En la actualidad me siento alegre de poder servir y tener el proceso que tengo, pues inicié en Trigo Verde, avancé a Trigo Maduro, hice mi formación como niña líder, recibí mi cruz y escudo misionero y ahora como adolescente misionera, ya hice mi formación de asesora donde ya tengo un pequeño grupo de niños de los cuales me siento orgullosa de poderlos hacer enamorar de Jesús como lo he hecho yo y esto siempre de la mano de mi mejor amigo JESÚS y de mi familia misionera, quienes han estado en todo mi proceso y me han apoyado siempre.

melani Tatiana romeroParroquia Sagrado Corazón de Jesús

Diócesis de Neiva COlO

MBI

Al A V O z d el O S N I ñ O S


“CON JESúS y MARíA…MISIONEROS TODA LA VIDA”

Mi nombre es Libia Cárdenas Castellanos, soy una de las coordinadoras de las Obras Misionales Pontificias en la animación misionera de la Diócesis de Cúcuta. Mi servicio como misionera lo presto en la IAM de la Parroquia Sagrada Familia, desde hace más de 6 años.En el transcurso de este tiempo me he enamorado cada día más de esta magnífica Obra de la Infancia. El grupo consta de 30 integrantes entre niños y adolescentes en las edades de 4 a 15 años, ellos son de Trigo Verde, Trigo Maduro y Adolescencia. Este semillero se llama “Jesús y María”. Es la escuela viva con Jesús, para Jesús. En ella los chicos encuentran un espacio de amor y convivencia fraternal, donde como dicen ellos, es el Spa de Jesús, pues con juegos, dinámicas y amor a la oración, por el prójimo han aprendido a tener sentido de pertenencia para con su parroquia, estando presentes en las diferentes actividades de desarrollo espiritual de la Diócesis.Hoy quiero compartir con ustedes esta alegría de ser IAM, de sentirme parte de una gran familia, donde se puede sembrar semillas de vocaciones y junto con los chicos, también ha crecido mi fe

y el amor a Jesús Sacramentado. En la Diócesis de Cúcuta, hay aproximadamente 28 parroquias con IAM y seguimos en la lucha de poder lograr colocar un semillero en las demás parroquias. Es duro ser servidora en el Reino de Dios y más misionera de niños, pero mis queridos amigos, es gratificante, cuando llegas a los encuentros y ellos te reciben con un abrazo, un beso, una sonrisa o un simple “Hola profe”. Aunque mi profesión es Administradora de Empresas, me siento feliz, si, muy feliz de ser instrumento de Dios para guiar a todos estos chicos que están dispuestos a ser amigos de Jesús

y María.También estoy feliz de enseñarles a aprovechar los espacios donde la IAM en Colombia promueve el crecimiento de los niños como líderes misioneros, como lo fue el concurso Cantando la misión: Bautizados y enviados. Hoy nos sentimos bendecidos por haber concursado y ganado con la canción inédita “Creciendo en la misión”.Es difícil, sí, porque nos faltan muchas más personas decididas a ser laicos servidores de Dios. Por eso, los invito a que den ese primer paso para ayudar a que esta maravillosa Obra Pontificia llegue a todas partes. Los niños y adolescentes del mundo te lo agradecerán.“Con Jesús y María… Misioneros toda la vida”, desde la Diócesis de Cúcuta un fuerte abrazo.

Libia Cárdenas CastellanosCoordinadora de la iAm

Parroquia Sagrada Familia

TesTIMONIO


FIlI

PINA

S

FIlIPINAS


No es frecuente vivir una pandemia en el curso de la propia vida. Antes de la reciente pandemia de Covid 19, la última pandemia de la historia fue la Española de los primeros treinta anos del novecientos, es una situación espantosa en el cual un virus afecta al mundo entero. Ya que la vacuna todavía no existe, las personas son invitadas a quedarse en casa, a veces sin poder ver a los amigos, a la familia y a aquellos que aman y que viven en otros lugares, para no ser infectados por el virus Covid 19. La mayor parte de las personas trabaja desde casa y algunos, desafortunadamente, han perdido el trabajo, causando m u c h a s preocupaciones a las personas en el mundo.Sin embargo, no obstante los efectos negativos de la reciente p a n d e m i a , ha habido un impacto

positivo sobre nosotros. La pandemia nos ha dado mayor tiempo para reflexionar y entender cuáles son las cosas que cuentan verdaderamente.Para nosotros los cristianos, esta pandemia podría ser una llamada a despertar para reconsiderar nuestra fe y nuestra relación con Dios. Se trata de una bendición camuflada, porque creo que esto sea uno de los modos misteriosos de Dios para acercarnos a Él. En este tiempo de incerteza, creer en Dios es la

única cosa a la cual podemos aferrarnos. Creer que Él permite que estas

dificultades sucedan por una razón y no perder la esperanza que pasarán,

manifiesta nuestra fe en Él.

También la fe en la humanidad

testimonia nuestra fe en Dios. Por este motivo debemos demostrar unos a los otros nuestro amor y la certeza

La pandemia de Covid 19 ha tenido un impacto en los diferentes aspectos de las vidas de las personas, afectando también a los niños, que han tenido que seguir lecciones online y cursos modulares, y como consecuencia teniendo una menor interacción con sus coetáneos. La mayor parte de su tiempo libre lo han pasado en la familia. La Dirección nacional de las Obras Misionales Pontificias colabora en modo continuativo con los directores diocesanos de las OMP y con los miembros de la Comisión para la Educación Católica (Mission Education Commisision – MEC) sobre cómo la Dirección puede ofrecer programas de formación misionera para los miembros de la Obra de la Santa Infancia, sobre todo en este año en que la Iglesia en Filipinas celebra los 500 años de la llegada de la cristiandad en el archipiélago.Para el año escolar 2020 – 2021 han sido registrados 6690 miembros. Ha habido una disminución significativa (de 16890) en la adhesión de nuevos miembros.Creciendo en la fe, en el amor y en la santidad en período de pandemia:Durante este año, caracterizado por los sufrimientos y por las dificultades creadas por la pandemia de Covid 19 el viaje misionero de toda la Iglesia continua. Cada miembro de la Santa Infancia es llamado a ver la oportunidad de convertirse en misionero en su pequeñez en este período difícil.


TesTIMONIO

que nos levantaremos de esta pandemia y sanaremos todos. No importa si hacemos pequeñas o grandes cosas, lo que importa es que las hagamos con sinceridad y amor. Difundir amor y optimismo es un modo para respetar toda la creación divina. Por lo tanto, cada uno de nosotros debe tratar de ser un catalizador de amor y de optimismo en estos tiempos difíciles que estamos viviendo.Para nutrir la fe en Dios es importante comunicarnos constantemente con Él. Por medio de la oración, se puede compartir y alzar hacia Dios las propias preocupaciones y las propias ansias. La oración es un medio muy potente para exprimir nuestra gratitud por todas las bendiciones y para pedir confortación a Dios en los dolores y en los sufrimientos. Durante el reciente período de cuarentena, ya que no se podía viajar y salir, las familias se han reunido y han rezado regularmente el rosario online. La pandemia

ha reunido a las familias para rezar juntas.En este período de pandemia es verdaderamente muy difícil crecer en la fe, en el amor y en la santidad. Sin embargo, continuar a tener fe en Él y a creer que nada es imposible a Dios, hace cada día soportable. La pandemia me ha enseñado verdaderamente mucho y me ha hecho entender la importancia de ser siempre agradecido y de asegurarme de dar más valor a la relación con mi familia y con mis amigos, haciendo tesoro de cada momento pasado con ellos. En fin, me ha ayudado a descubrir y a conocer mejor mi misma, permitiéndome así de demostrar mejor mi amor hacia Dios, hacia mí misma y hacia los demás.

Mia Khryselle D. Papas11 años

Grado 6 (1° media) – Manresa School


En los últimos 7 meses mi familia ha sufrido y ha debido afrontar disgustos y dificultades a causa del Covid 19. Mi madre no se pone en contacto con nosotros muy a menudo, dado que es enfermera y, últimamente, está trabajando duramente. Ha estado muy ocupada y a veces ni siquiera ha dormido. Sí, tiene buena salud, pero las posibilidades de infectarse no son nunca bajas. Mi familia y yo hemos resuelto estando en contacto en el tiempo libre. Incluso si mi mamá está ocupada, por nosotros no escatima ningún esfuerzo. También yo supero la situación confiándome a Dios.Tener fe en Dios es mejor que pecar. Lo que he hecho para crecer en la fe y en el amor de Dios es leer la Biblia y escuchar los cantos de adoración. Puede parecer muy simple, pero ayuda. En efecto, si lees la Biblia parece que Él este verdaderamente hablando contigo. Cierto, lo sé, no se escucha nada, pero Él está verdaderamente ahí, sentado, junto a ti. Después rezo en la mañana y en la noche, lo que me ayuda verdaderamente para quedarme en contacto con Dios. ¿Saben porque estas líneas son tan felices? Bien, porque es mejor estar felices que tristes. Sé que son tiempos difíciles pero todo irá bien. Sé que probablemente estarán ocupados, pero dediquen a Él al menos 5 o 10 minutos y no se preocupen, pueden entrar en contacto con Él en cualquier momento.Caminar con Cristo puede ser difícil, pero mientras estas con Él estas protegido del mal. Pide sólo tu amor y tu confianza. El diablo

podría cogerte, pero Dios no te abandonará. Él es como sea nuestro Padre Celestial y por lo tanto, dale al menos una posibilidad. Créeme, Él no te abandonará nunca. ¿Piensas que Él no estaría con los pecadores? Para nuestra fortuna, somos pecadores, y, por los tanto, no nos dejará nunca solos. No se irá hasta que no los aceptarás y no aceptarás a ti mismo.Jesucristo ha muerto por nuestros pecados y ahora toca a nosotros correr hacia Él con una gran sonrisa y un caluroso abrazo. Podrás estar deprimido, inseguro, pero ¡Dios te ama verdaderamente! Corre hacia Él, ahora o nunca más. Por esto debemos comenzar a tener fe, amor y confianza en Dios, ¿Ok? Juntos podemos lograrlo, ¡Mi fe me ha ayudado durante esta pandemia porque tengo de nuevo esperanza! Dios ha dicho que junto a Él están la luz, la esperanza y el perdón. Por esto hoy me entrego a Él. Mi mensaje a mis amigos adolescentes es, no debemos nunca perder la esperanza, el amor y la luz. En cuanto jóvenes misioneros podemos comenzar con pequeños gestos como rezar, dar esperanza y alimento y mascarillas a las personas pobres. Es nuestro deber protegerlas en este período de pandemia, Y esto es todo, no pierdan nunca la esperanza y el amor porque hacen que el MUNDO sea un puesto mejor en donde vivir.¡ Que Dios este con todos Ustedes! ¡Gracias!

ANGELYN L. LLAMOSO12 años

Grado 6 (1° media) – Canossa School

FIlI

PINA

Sl A V O z d el O S N I ñ O S


CELEbRACIÓN DE LA JORNADA DE LA INFANCIA MISIONERAEl 20 de febrero 2021 ha sido organizado un seminario web con el título “Testimoniar: hechos para donar” para ayudar a los miembros de la Infancia Misionera a equiparse para ser discípulos misioneros en sus familias y en la comunidad en estos tiempos difíciles.

¿Cómo TESTimoNiAS Tu FE CriSTiANA?HAnnA ISAbelA V. bASCOn, Canossa School S.Rosa, Laguna,ha respondido así:

1. Dedico un momento a la oración2. Leo y reflexiono sobre el Evangelio3. Apoyo las actividades parroquiales4. Ayudo a los necesitados

AnDRIe DAlISAy, Grade 6 Canossa Academy Calamba nos dice:

1. Rezo cada día para agradecer a Dios2. Participo a la misa todos los domingos

TesTIMONIO


l A V O C ed e I B A M B I N I

Desde el Vicariato Apostólico de Reyes – Bolivia, les comparto nuestra experiencia de fe vivida durante este tiempo tan difícil por la pandemia que aún no acaba y que tanto dolor ha causado y sigue causando en el mundo entero. Desde el mes de marzo del 2020 en Bolivia empezamos a vivir el drama que vive el mundo entero. De hecho en este tiempo se confirmó el primer caso positivo a Covid 19 en Santa Cruz-Bolivia y ese caso fue la bomba que descubrió que el virus andaba rondando por todas partes en nuestro país. Situación por la cual nuestras autoridades nacionales decidieron el cierre total de todas las fronteras, se declaró cuarentena obligatoria en todo el país, y por ende, esto derivó en la clausura del año académico escolar, el cierre de todas las actividades tanto públicas como privadas, el cierre de las Iglesias, y en general, todo tipo de evento donde haya aglomeración de personas. Para todos la pregunta era: ¿Y ahora qué hacemos?

NIñOS, ¿QUé hOrA eS? eS lA hOrA de SAlVAr el MUNdOCon nuestro Obispo Mons. Waldo R. Barrionuevo volvimos a planificar y propusimos algunas alternativas para enfrentar la situación y no quedarnos encerrados esperando que las cosas se solucionen por si solas. Es de honestos reconocer que la presencia de nuestros Laicos comprometidos ha sido vital en todo momento. Los Laicos han apoyado la misión cada día en nuestra Iglesia del Vicariato de Reyes. Vivimos la semana Santa del 2020 de una forma muy distinta, los templos cerrados, sin asistencia de fieles, todo parecía triste hasta qué, se nos ocurrió publicar por las celebraciones por internet, vía Facebook. Hicimos convenio con las diferentes radio emisoras locales para que tomen nuestra señal y así llegar lo más lejos posible, pero sobre todo a la mayor cantidad de fieles. Convocamos a todas las parroquias para que tomen la iniciativa y promuevan otras similares acorde BO

lIVI

A

BOlIVIAVICArIATO APOSTólICO de reYeSEL COVID 19 NO hA PODIDO FRENAR LA MISIÓN…



TesTIMONIaNze

a su realidad. Los resultados fueron fabulosos, porque las redes sociales se convirtieron en el canal principal para vivir y celebrar nuestra fe. Mons. Waldo propuso que cada parroquia procure un equipo de radio de comunicación FM y bajar la señal abierta de Radio María y compartir los programas católicos para niños, jóvenes y adultos. Como nuestros fieles no podían venir a las parroquias, decidimos salir a buscarlos. Con los permisos correspondientes y con las medidas de bioseguridad acomodamos en una camioneta la Imagen de la Virgen María y visitamos casa por casa, familia por familia rezando un momento con ellos e impartiendo la bendición del Señor. Es en ese momento en el que vimos la necesidad de trabajar mucho más con las familias, pero sobre todo con los niños, que sufrían por no poder salir de sus casas, mucho menos realizar actividades.La nueva idea fue convocar a todas las familias a elaborar su propio Rosario Misionero familiar con creatividad y los resultados fueron sorprendentes, la creatividad de los niños es impresionante y mucho más con la ayuda de sus padres. Los grupos de Infancia Misionera jugaron un papel muy importante, se reunían de forma virtual, y entre ellos y sus animadores evidentemente, se animaban para la construcción de los Rosarios misioneros, en general para todas las actividades. Como anécdota, se quedará para siempre en mi memoria haber visto arreglos de navidad en el mes de mayo, eso fue un espectáculo verdaderamente. Se trata del recorrido de la Virgen María por las calles de nuestros pueblos en el Vicariato, pero de una forma particular en la Parroquia Catedral de

los Santos Reyes. Es tradición en nuestros pueblos, durante el mes de mayo, realizar “velorios” a la Virgen María. Muchas personas hacen promesas a la Virgen y durante el mes de mayo cumplen estas promesas organizando una fiesta en homenaje a la Virgen María. Se canta, se baila el machetero y el tiritirí, que son músicas netamente religiosas y propicias para la ocasión. Pero como no se podía realizar ningún tipo de eventos, a uno de los fieles se le ocurrió adornar fuera de su casa un altar para la virgen María y los arreglos fueron hechos con luces navideñas. A él se sumó su vecino, luego el otro y así todo el pueblo en pocos días quedó totalmente iluminado con luces navideñas, cosa que ni en la misma navidad se había visto. Sin que se trate de hacer propaganda, me viene a la memoria el viernes Santo y la procesión con el Santo Sepulcro, sin gente para cargar el sepulcro, sin cabildo para los honores correspondientes, pero con la firme esperanza de llevar a Jesús a recorrer las calles de la parroquia. Para sorpresa mía, las calles estaban llenas de velas, de inicio a fin, creo que no he visto tantas velas encendidas como aquél viernes Santo, la gente salió a las puertas

de su casa para ver a Jesús aunque sea de lejos, esa fue la mayor demostración de fe que he visto en todo este corto ministerio sacerdotal que llevo. Velas, fe, llanto, devoción, esperanza. Esto es la misión.Nosotros, nuestros niños, nuestros jóvenes y las familias misioneras apostamos por: “No dejarnos robar la

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esperanza, por no dejarnos robar la fe” como nos lo pide el papa Francisco en la Evangelii Gaudium. Sé que la misión no es solo actividad, es la vida, pero una vida de fe, una vida cargada de esperanzas, una vida llena de amor.En algunas parroquias se llevaron a cabo otras iniciativas, como la apertura de comedores solidarios, dispensarios médicos, mesas solidarias para la distribución de víveres, aportes con materiales de bioseguridad, etc. Y todo con las ayudas solidarias que logramos canalizar. El Vicariato de Reyes fue beneficiado con 5000 US$ del fondo de emergencias para el Covid desde las Obras Misionales Pontificias que se invirtieron en alimentos y medicinas para combatir el virus.

“de lOS NIñOS del MUNdO, SIeMPre AMIGOS”Lo más hermoso que una persona puede ver, es la sonrisa de un niño. Por eso, seguimos trabajando en la animación y formación de las infancias misioneras en el Vicariato Apostólico de Reyes. En estos últimos meses buscamos las formas de reunirnos siguiendo las medidas de bioseguridad. Los padres de familia se sienten comprometido con la salud de sus hijos, pero también ven la necesidad de que sus hijos se encuentren en un lugar seguro donde divertirse y formarse cristianamente. Por eso, hemos adquirido nuevo material infantil y habilitamos puestos de higienización para precautelar la salud de nuestros niños. Siempre es edificante volverlos a escuchar gritar a todo pulmón la consigna: “De los niños del mundo,

SIEMPRE AMIGOS”. Desde el mes de enero 2021 algunas comunidades parroquiales han tratado de abrir sus puertas para iniciar nuevamente sus actividades. Nada puede detener la misión. L o s primeros valientes en retomar sus reuniones fueron los niños, los grupos de infancia misionera con el paso de los meses se han vuelto a reactivar, no con toda su fuerza, pero de a poco nuevamente se va sintiendo la presencia viva de la Iglesia en nuestros niños. A ellos se sumaron los jóvenes, que con un poco de temor pero con la esperanza de que todo vuelva a la normalidad han decidido poner el hombro a su Iglesia e ir “adelante, siempre adelante”.Desde el mes de marzo de este 2021 las actividades parroquiales en el Vicariato de Reyes están regulares, en algunos lugares aún con algunas restricciones, pero en general las cosas están volviendo poco a poco a la normalidad.Es una bendición de Dios tener la oportunidad de escribir estas líneas, pues, también vencí el virus con la ayuda de Dios, de los médicos y enfermeras, con la oración de los fieles que me acompañaron. Puedo decir sin temor a equivocarme que la Vida es la gran oportunidad que Dios nos da para ser mejores personas cada día, para servir con mayor entusiasmo, para amar sin medidas, pero sobre todo para ser agradecidos con Dios, el Dios de la Vida.No pierdas tiempo, AMA, no desaproveches el tiempo VIVE, valora el tiempo, PERDONA y si quieres ser agradecido, colabora con las MISIONES, REZA, APORTA,

HAZ PEQUEÑOS SACRIFICIOS. Ayuda a ayudar a los Niños del mundo.

P. Justo Pérez Bazán Sacerdote del

vicariato Apostólico de reyes y Director diocesano de OMP –

Misiones

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mi nombre es Nelson Francisco moraga moneada soy de la Parroquia Santo Tomas Apóstol, Capilla maría reina de la Paz. Tengo 13 años. inicié infancia y Adolescencia misionera a la edad de 10 años, actualmente soy miembro activo del grupo Trigo maduro lo cual me ayudado en aumentar mi fe y he tenido un crecimiento espiritual y he participado en la jornadas de evangelización de la parroquia en donde siempre comparto con las personas mayores de la capilla (porque se hacen pequeños grupos de señores mayores con los niños de iAm) donde ponemos en práctica nuestro lema.Este año estoy en el grupo de confirmación, para confirmar mi fe y proclamar la nueva evangelización y dárselas a conocer a mis compañeros del colegio y a mis amigos más cercanos del andén. Espero ser un misionero enamorado de Dios y de su palabra y jamás separarme de él y de su madre María.¡De los niños del mundo, siempre amigos!

mi nombre es Adriana del Socorro medal Porras de la Parroquia Santo Tomas Apóstol, capilla maría reina de la Paz, tengo la edad de 13 años. inicie infancia y Adolescencia misionera a los 5 años, soy integrante del grupo de Trigo maduro, el cual me ha ayudado a crecer espiritualmente y participar en las jornadas de evangelización que se han dado a nivel parroquial en donde doy a conocer el gran amor de Dios hacia nosotros a las demás personas.El año pasado me consagré al Ministerio de Lectores en el cual proclamo la palabra de Dios y la medito. Desde que inicié en el ministerio hasta la fecha he tenido una transformación espiritual en mi vida personal que me ha permitido dar el testimonio de mi fe. Este año con la gracia de Dios voy a confirmar mi FE y espero ser una gran misionera en compartir el Evangelio a los demás y seguir siempre de la mano con mi buen amigo Jesús y de nuestra mamita María.Y claro seguir los ejemplos de Santa Teresita del Niño Jesús y San Francisco Javier.¡De los niños del mundo, siempre amigos!

NICArAGUAl A V O z d el O S N I ñ O S

NICArAGUA

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NIGerIAArQUIdIóCeSIS de ONITShA

CeleBrACIóN 2020 de lA OBrA de lA SANTA INFANCIA

TemA: Yo soY un Don pArA mi FAmiliAEn el año 2020 el tema arriba indicado ha sido utilizado por la Arquidiócesis de Onithsa para la semana misionera anual y también para ser desarrollado a lo largo de todo el año.Las siguientes preguntas han sido utilizadas como líneas guías para los niños y los han ayudado a vivir

el tema del año:1. ¿Qué te sugiere el término “don”?2. ¿Cómo administras un don precioso que te ha sido dado por una persona muy importante?3. ¿Compartes con tu familia los dones que recibes? ¿En qué modo?4. ¿Cómo eres un don precioso para tu familia?5. Indica tres motivos para ser feliz de ser un don para tu familia.

Aproximadamente el 25% de los niños de la Arquidiócesis de Onithsa viven en áreas fluviales y la mayor parte son desplazados cada año a causa de las periódicas inundaciones, de agosto hasta la segunda mitad de diciembre. Se quedan en los centros sin seguir lecciones cada primer semestre del año escolar.Los programas de la Santa Infancia están integrados en el plan pastoral arquidiocesano. Las actividades de la Santa Infancia organizadas en la Arquidiócesis por la Dirección de las OMP, como las celebraciones de la Santa Infancia, los concursos, los cantos y las competiciones teatrales gustan mucho a los niños de la Arquidiócesis. En las escuelas y en las parroquias se realizan encuentros semanales de los grupos de la Santa Infancia, los animadores de las escuelas y de las parroquias se encuentran al inicio y al final de cada semestre para la formación misionera y para planificar el programa anual de la Santa Infancia en la arquidiócesis.Los niños dan su contribución personal por medio de la “Mission Bank” (Banca para la misión) y del programa “Presentation on the Child Jesus in the families” (Presentación del Nino Jesús en las familias). No obstante el Covid 19, también este año se ha llevado a cabo la colecta para el Fondo de Solidaridad de la Santa Infancia.El arzobispo nos ha dado un gran apoyo, ya sea financiero que de otro tipo. Cada año celebramos la Jornada Misionera de la Obra de la Santa Infancia con el arzobispo a nivel arquidiocesano y cada aspecto es patrocinado por él. Y en la jornada de la celebración parroquial los párrocos celebran con los niños en las parroquias.Imprimimos un calendario de las actividades y un afiche para la celebración de la Santa Infancia. A los nuevos miembros se les entrega un carné de identidad y la Mision Bank.Continúan las inscripciones a la Obra de la Santa Infancia, que tiene encuentros regulares en las diferentes escuelas y parroquias. De acuerdo al Estatuto, los animadores se reúnen con los Directores Diocesanos OMP dos veces cada semestre o cuando es necesario. También los encargados arquidiocesanos (Archdiocesan HCA Guardians) se reúnen regularmente con los directores arquidiocesanos OMP para discutir como ayudar mejor a los animadores de la Santa Infancia en su trabajo de animación en las escuelas y en las parroquias.



Estas son las cinco preguntas guías utilizadas por los animadores para motivar a los niños a vivir el tema del año 2020.Cuando nos hemos reunido, en noviembre 2020, los animadores han traído consigo informes que describen cómo los niños han celebrado la semana misionera y cómo han vivido el tema del año.En su conjunto, algunos niños han contado de haber entendido que los dones son algo que alguno da gratuitamente sin pedir nada en cambio, como los vestidos, los zapatos, la fruta, el pan, el dinero, etc. Estos dones son regalados por alguien muy importante, tal vez el obispo, un rey, un sacerdote, una hermana, etc. Y deben ser tenidos en alta consideración. Si se trata de alimentos, como ha dicho una niña, es necesario asegurarse que cada miembro de la familia lo pueda gustar y si es algo para vestirse, tal vez un vestido o unos zapatos, ella lo utilizaría sólo en las ocasiones especiales asegurándose que no vengan usados descuidadamente. Muchos han respondido en modo similar a la pregunta.Muchos niños creen que Dios haya dado muchos dones especiales, como la vida, la salud, los amigos, los padres, la inteligencia, los talentos, etc. Por esto, para demostrar su gratitud a Dios,

deben usarlos muy bien. Deben amar y respetar a sus propios padres, a los amigos, a los ancianos, a todos los amigos de Jesús.En el 2020 los niños, en cuanto don para la propia familia, han tratado ser de ayuda, comportándose bien, realizando las tareas domésticas regularmente, no haciendo que sus propios padres y hermanos se avergüencen de ellos robando en la escuela o litigando con otros niños. Han tratado de ser obedientes, de no decir mentiras y de no llegar tarde a la escuela. Han sido incentivados a que su propia familia esté orgullosa de ellos. Uno de ellos ha dicho che ha buscado de recordar siempre a su familia el momento de la oración por la noche.Los padres han estado muy felices del comportamiento de sus hijos durante el año de pandemia. Algunos han contado que había verdaderamente tanto para trasmitir, otros han notado algo inusual en las acciones de sus hijos.

Hna. m. Bennet Azuka Ezeokoli iHmCoordinadora de la Santa Infancia

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Los niños son intelectualmente vivaces, dotados de talentos, tienen un carácter bueno y dócil. Participan a todas las actividades de la Iglesia y están abiertos a la formación de la fe.La mayor parte de ellos pertenece a la clase media y a las clases más humildes. La pobreza económica los lleva a la privación de los servicios primarios y, por esto crecen tímidos y temerosos. Aumentan las familias problemáticas y, por lo tarto, los niños, sobre todo los varones, abandonan la escuela secundaria para entrar a formar parte de la fuerza laboral no cualificada.En la Diócesis hay 16 casas de acogida y la mayor parte de los niños católicos son instruidos en ellas. Aproximadamente 1128 niños pobres son acogidos, alojados y educados y, además, 1020 niños obtienen una ayuda parcial por su instrucción por medio de becas de estudio, libros, uniformes, etc. trámite nuestro Centro de Asistencia Social (ICDP Integral Child Development Programme – Programa de asistencia integral del niño). El Director diocesano de la Santa Infancia visita cada parroquia y el Centro Misionero dando sugerencias a los niños sobre la importancia de la Jornada de la Santa Infancia.La Diócesis organiza campos de formación en la fe en cada uno de los cuatro decanatos, a los cuales participan

los niños de la escuela media (de los 14 a los 16 años). Para la Diócesis, la formación a la fe es muy importante y el catecismo dominical ha sido hecho obligatorio para todos los niños católicos de nuestras parroquias y de nuestros Centros Misioneros, de la escuela primaria a la secundaria (de los 6 a los 17 años). Además para los adolescentes de los 9 a los 17 años hay también libros de texto para el catecismo y las lecciones se hacen aún más interesantes por medio del uso de los medios de comunicación social, presentaciones Power Point, esquemas, historias de la vida de los santos, etc. Cada año tenemos un examen de catecismo, de modo que

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los niños tomen las lecciones seriamente y aprendan los elementos importantes para su propia vida. Para los adolescentes de los 11 a los 16 años los exámenes se desarrollan a nivel diocesano, y son también previstos premios.Para los niños de los 6 a los 11 años cada párroco organiza campamentos.Por culpa del Covid 19 las lecciones de catequesis han sido canceladas por la seguridad de los niños. Muchas parroquias han iniciado los encuentros online, enviando los textos a los padres por medio de WhatsApp en modo que los niños pudieran descargarlos y estudiarlos. Los padres verdaderamente se han empeñado en esta colaboración. Se han llevado a cabo exámenes, concursos y otras actividades, con una buena participación.Siempre a causa del Covid 19, este año hemos cancelado los consuetos campamentos diocesanos de verano Jeevamrutha y Diksuchi. En efecto, por el confinamiento nacional no hemos podido reunir a los niños. Sin embargo, hemos llegado a ellos en varios modos: han sido organizados concursos online para los varios grupos de edad como, por ejemplo, la lectura veloz de las citaciones de la Biblia, concursos de canto, de danzas, etc. Los niños han participado con interés a las competiciones y ganado muchos premios. Para ellos ha sido una gran oportunidad para hacer emerger los propios talentos y para exhibirse mostrando todas sus capacidades.La Obra de la Santa Infancia está presente en la mayor parte de las parroquias y de los Centros Misioneros y están todos bien organizados y activos. Los niños son incentivados a representar las historias de la Biblia para comprender el significado que tienen para sus vidas, contribuyen con la Obra con sus pequeños ahorros; se reúnen para hacer inolvidable la Jornada dedicada a

la Santa Infancia, por medio de juegos y de programas culturales. Este año, a causa del Covid 19, varios grupos no han podido organizar encuentros ni desarrollar programas, y ni siquiera celebrar la Jornada. Muchas parroquias han comenzado a tener encuentros online y a los niños han sido dadas las informaciones respecto a las varias Asociaciones a las cuales pertenecen, como la Santa Infancia, la Legión de Maria y otras asociaciones a nivel parroquial, de modo que no pierdan el contacto con ellas. La Obra de la Santa Infancia ha enseñado a los niños a ayudar a los demás en dificultad con lo que poseen, y esta situación de pandemia les ha ayudado a ser más responsables, sensibles y generosos.

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La situación general de los niños en la arquidiócesis de Monrovia es como en el resto del país. Hay un alto porcentaje de desnutrición infantil, con la tercera parte de los niños menores de 5 años raquíticos y el 6 % con desnutrición grave. Las principales causas de defunción son la diarrea y la pulmonía, debido al agua no potable y a la poca higiene. Son frecuentes las epidemias de cólera y la crisis de ebola del 2014 ha demostrado como esta falta de acceso al agua potable y a los servicios clínico sanitarios pueda ser peligrosa. La tercera parte de los niños tiene menos de 5 años. A lo largo de los años, la mortalidad infantil ha disminuido y el país se desarrollado más, y así la Arquidiócesis.En nuestro país las restricciones debidas al Covid han disminuido desde mayo 2020. A las personas se les recomienda, sin embargo, que sigan los protocolos sanitarios y que practiquen una higiene segura. Durante el año ha habido una serie de encuentro de niños, de retiros, de encuentros, de seminarios (para los niños sobre el ser misioneros, los protocolos sanitarios y las normas higiénicas), de actividades recreacionales y religiosas gracias a los

fondos recibidos por la Obra Pontificia de la Infancia Misionera. Una parte de los fondos ha sido utilizada para pagar los gastos médicos y, una pequeña parte, para la tutoría de niños con padres en dificultad financiera por causa de la actual crisis sanitaria. La mayor parte de los subsidios ha sido utilizada para las actividades misioneras de los niños, las cuales han sido realizadas principalmente en pequeños grupos de no más de 50 niños. Nuestra consueta misa por la Jornada Mundial de la Infancia Misionera y las actividades recreativas han tenido lugar en los decanatos, en lugar de la regular celebración diocesana en el Centro Juvenil Don Bosco. Una misa conclusiva para celebrar la cuaresma de los niños ha sido celebrada el 19 de abril 2021 con la presencia de estudiantes de 15 escuelas y parroquias.

CONSCIeNCIA MISIONerA de lOS NIñOS /eNCUeNTrOS Y SeMINArIOSLos seminarios para niños misioneros y la promoción del lema “Los niños ayudan a los niños” en las escuelas elementales se han desarrollado con 4 talleres para niños misioneros. Uno se ha llevado a

lIBerIAArQUIdIóCeSIS de MONrOVIA



cabo en la ciudad de Monrovia (la capital), uno en la ciudad de Paynesville y dos en Kakata (en las afueras de Monrovia), respectivamente el 12, 14, 18 y 19 de diciembre. Aproximadamente 200 niños de los 7 a los 16 años han participado a los seminarios, que se centraban principalmente en la propagación de la fe entre los niños y adolescentes y sobre cómo los adolescentes pueden ayudar a los demás a vivir la fe. El punto de referencia principal han sido los dos más grandes mandamientos: la alabanza evangélica del Amor y la oración personal.

SeMINArIO COVId-19La salud es nuestra riqueza. Todos nuestros niños son preciosos para nosotros y es nuestra responsabilidad protegerlos del Coronavirus. Al respeto, la Santa Infancia ha organizado un seminario de un día, el 22 de diciembre 2020 para los animadores de los niños y para los representantes de 10 escuelas en el Sacred Heart Hall en Monrovia. Los participantes han sido sensibilizados respecto al Covid 19 y se les han enseñado los protocolos sanitarios básicos. Al final del seminario hemos distribuido desinfectantes y mascarillas a los participantes y a los estudiantes que no han podido participar a causa de las restricciones Covid relativas a las reuniones.

PrOGrAMA “lOS jóVeNeS eNCUeNTrAN CrISTO” (TeC- TeeNS eNCOUNTer ChrIST)A causa de la pandemia de Covid 19, el campamento de los niños misioneros ha sido sustituido por el programa TEC, es decir “Teens Encounter Christ” (Los jóvenes encuentran a Cristo). El programa instruye a los niños sobre la vida y la misión de Jesús en el Evangelio y sobre sus responsabilidades en relación a sus vecinos y a los otros niños. Esto sucede por medio de canciones, espectáculos, bromas, reflexiones

bíblicas, juegos, etc. El programa se dirige a 48 – 50 niños al día. 250 niños de 5 diferentes comunidades parroquiales han beneficiado del programa. Este ha tenido lugar sólo los sábados, en 5 comunidades: la catedral del Sagrado Corazón, la Escuela de Cristo Rey, la comunidad de Paynesville, Kakata City (para la escuela de San Cristóbal /Comunidad parroquial) y la comunidad de Bangor, entre enero y marzo 2021.

reTIrOSe han realizado retiros, dos en el período de

Adviento y dos durante la cuaresma, respectivamente en el centro de Monrovia y en Margibi Alta, para hacer meditar a los niños el Evangelio de Cristo y hacerles descubrir quiénes son espiritualmente, para estar al paso con las enseñanzas de la Iglesia. Los dos enfoques principales han sido, entre otros, “Sé misericordioso como misericordioso es tu Padre celeste” y la reciente encíclica del Papa “Hermanos Todos” (somos todos hermanos y hermanas). Los aspectos que han sido resaltados se han centrado en la fraternidad entre todos los niños, la interdependencia, la unidad en la diversidad, la amabilidad y

la misericordia. A los que provenían de la ciudad o de las áreas urbanas se les ha pedido que sean amables con aquellos que provenían de las zonas rurales y viceversa.Aproximadamente 300 niños han participado a estos retiros. Al final de los retiros de cuaresma se ha tenido una misa de agradecimiento para todos los niños de las regiones Montserrado y Margibi. Quisiera subrayar que durante la cuaresma algunos niños han recolectado contribuciones materiales y en dinero para los demás niños de sus comunidades locales y han mejorado su proprio comportamiento. Los niños esperan con ansia el próximo retiro y otros encuentros de niños.

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jOrNAdA MUNdIAl de lA SANTA INFANCIALa celebración del Domingo Misionero Mundial de los niños misioneros en octubre 2020 se ha desarrollado con menor fuerza. Los niños han sido invitados a participar en la misa en las varias parroquias, a causa de las restricciones debidas al Covid 19. Todas las celebraciones (Santa Misa en conmemoración de la Jornada, teatros, danzas celebrativas, etc.) han tenido lugar de diciembre 2020 a enero 2021.El 10 de abril 2021 se ha celebrado una misa de agradecimiento para concluir las obras de misericordia de cuaresma organizadas para los niños (durante la cuaresma los niños han sido motivados a realizar obras de misericordia en respuesta a las necesidades de los niños en torno a ellos). El ejercicio ha culminado en las regiones de Monstserrado y Margibi.

eNCUeNTrO de lOS NIñOS MISIONerOSEn las cinco áreas han sido organizados cinco encuentros de niños misioneros. Durante estos encuentros los niños pueden conocerse, jugar, compartir sus experiencias misioneras, sobre todo aquellas relativas a las obras de caridad cuaresmales y a otros encuentros, y hacer teatralización de su vocación misionera delante a los coetáneos.

AlGUNAS eXPerIeNCIAS de lOS NIñOS PArA COMPArTIr

a) Recolección de regalos, ya sea de materiales que de ofrendas en dinero y acción de compartir

con los otros niños en los orfanatos o en la comunidades difíciles.b) Las historias de la vida, de las experiencias y de los itinerarios espirituales de los misioneros laicos, jóvenes, sacerdotes y religiosos que han impresionado mucho a los niños.c) Escuchar a otros niños compartir el Evangelio y las experiencias de vida durante el programa TEC ha sido muy rico espiritualmente.d) Participación a la misa como lectores, acólitos, ministros de la acogida, danzadores celebrativos; ofrecer oraciones para cada uno durante la misa y para los niños en estado de indigencia en las áreas en dificultad o en las zonas de guerra.e) Sensibilizar y participar a los Encuentros de los jóvenes con Cristo (TEC). En las parroquias en donde hemos trabajado, muchos niños y adolescentes se han comprometido a traer a sus coetáneos a los encuentros, etc.f) Los niños han hecho crecer la fe en los otros y han testimoniado su vocación misionera por medio de teatralizaciones, TEC, los encuentros y la misa. Los niños han rezado y compartido los valores evangélicos del Amor y de la Misericordia.

Durante los programas TEC, los encuentros y las varias experiencias misioneras hemos recogido las impresiones de algunos niños. Tres de las estudiantes del Convento St. Teresa (sólo para niñas) y de la Catedral del Sagrado Corazón , de 12, 14 y 15 años, han dicho que, antes de participar a los programas de la Santa Infancia se avergonzaban de hablar de Jesús y de su valor evangélico de amor hacia Dos y hacia el próximo delante de sus coetáneos. Sin embargo,



después de haber escuchado las experiencias y las reflexiones de los otros niños y los programas de Encuentro de los jóvenes con Cristo (TEC) se han convertido en misioneras convencidas delante a los demás, sin más timidez.Otro estudiante, de nombre Solomon, de la escuela St. Mary / Parroquia St. Mary, ha dicho: “Creía que los encuentros y los retiros fueran sólo para los adultos. Creía que habría sido muy aburrido y por lo tanto no estaba verdaderamente interesado. Sin embargo, escuchando a la Hna. Evelina, me he sentido muy bien y he comenzado a interesarme al argumento espiritual del cual estaban hablando”. Una parroquiana (Raquel, 16 años) de la iglesia de Cristo Rey ha narrado que los juegos que se han desarrollado durante el programa TEC le han enseñado a ser una buena oyente y a dedicar su vida a Jesús: “He aprendido que si quieres la FELICIDAD debes amar a Jesús, a los demás y a ti mismo – esto da FELICIDAD”.

el reTIrO de lOS NIñOSCada año, durante el período de cuaresma, los católicos renuevan su empeño y regresan hacia Dios con el corazón lleno de tristeza y de arrepentimiento. Los niños misioneros han participado a este viaje espiritual con el Señor ofreciendo sacrificios materiales y participando a los retiros, como renovación de su estadía misionera y de su metanoia. El retiro de este año con el tema “Sé misericordioso” se ha desarrollado el 27 de marzo.Objetivos:

• Ayudar a los niños a rezar con sus coetáneos,• Compartir y vivir el Evangelio de “AMOR y MISERICORDIA”,• Ayudar a los niños a descubrir su rol evangelizador en la Iglesia.

Los dos temas principales han sido:• “Sean misericordioso, como vuestro Padre es misericordioso” (Lc. 6,36-38)

• “Somos todos hermanos – Hermanos todos”

Los niños han sido muy atentos y receptivos a las presentaciones, a las oraciones, a los cantos, etc. Esta

completa participación ha sido muy apreciada. Su encuentro ha sido gratificante porque los ha ayudado a redescubrir quienes son –niños de un único Dios- y su empeño de uno hacia el otro. Les ha dado la oportunidad de ver a Dios en el “pecador” y en el que sufre y les ha ensenado a ofrecer ayuda en donde es necesario.

P. Johnny - Clement KomboDirector Diócesano Santa Infancia

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Soy la HnA. DIAnA AntónIO IAlá, de las Hermanas Adoratrices de la Sangre de Cristo (A.S.C.). Vivo en Ingoré (Guinea Bissau) y soy animadora de la Infancia Misionera (IAM), en la Parroquia Santa María de Mattias.Es con grande alegría que hablo de mi experiencia como animadora de este grupo. Afortunadamente en la comunidad de Ingoré tenemos muchos niños que participan activamente, el martes y el jueves en la formación de la IAM. En la formación semanal buscamos ayudar a los educadores a despertar en los niños y en los adolescentes el espíritu de solidaridad, así como la vocación misionera. Al mismo tiempo proponemos también a los niños que imiten la vida de los santos: Mons. Carlos Forbin-Janson y otros santos de su edad. Hacemos juegos recreativos y el domingo por la tarde hacemos con las niñas el bordado, en donde aprenden a hacer encajes, cojines… en cambio con los niños hacemos

otros trabajos manuales con las cuentas y el hilo.Son niños alegres, amables y generosos con lo poco que tienen y lo comparten con grande alegría. En todos los ministerios que he desarrollado, me estoy dando cuenta que trabajar con los niños es algo muy importante y único, ya que son puros y los veo como ángeles, llenos de sueños, que con frecuencia no se realizarán nunca, a causa de la situación del país, y terminan por perder el período de la adolescencia.Es urgente, en efecto, invertir en la formación de los niños para hacer crecer y animar a los futuros misioneros de la Iglesia y para continuar la misión de Jesucristo en el mundo. Es también necesario hacer comprender a los niños que son misioneros, introduciéndolos en actividades misioneras de una dimensión universal. En estos días estoy haciendo una experiencia interesante: es verdaderamente más fácil para un niño evangelizar a otro niño, porque en cada clase de formación, he pedido a los niños que traigan a otros niños al encuentro siguiente, y cuando llega el día, cada uno trata de traerme el mayor número posible. ¡Qué hermoso ver una marea de niños!Las dificultades que a veces encuentro se dan durante el período de los anacardos. Son pocos los niños que participan a las actividades ya que casi todos van a trabajar ayudando a sus padres en la recolección de los anacardos. Esta recolección es, a veces, el único sostén de la familia. Por lo tanto, en este período, muchas actividades se debilitan.Pero todo está yendo bien con la gracia de Dios.

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GUINeA BISSAUMI ExPERIENCIA COMO ANIMADORA DE LA INFANCIA MISIONERA



Soy JOSeFInA MISSAU, tengo 13 años y vivo en Ingoré (Guinea Bissau).Quisiera hablarles un poco de mi experiencia en la Infancia y Adolescencia Misionera y cómo anuncio a Jesús a mis amigos y coetáneos del barrio, en la escuela y en otros lugares que habitualmente frecuento.Anuncio a Jesús en la escuela, por medio de mi comportamiento, narrando la historia de algunos santos que conozco bien: como Mons. Charles de Forbin Janson y otros. La formación que recibo en la IAM me ayuda mucho, y por tal motivo invito a los demás a formar parte del grupo al cual pertenezco y les digo que somos niños y que tenemos el derecho de anunciar a Jesús para que todo hombre pueda salvarse, porque Jesús nos ha amado y ha dado su vida por nosotros. En casa, he reunido a los niños del barrio, sobre todo aquellos más jóvenes de mí, les cuento las historias de las vidas de los santos, y algunos pasajes del Antiguo Testamento: Caín y Abel, y del Nuevo Testamento me gusta contar el nacimiento de Jesús y a ellos les gusta escuchar. A veces, incluso si estoy cansada, sobre todo al final de la semana, si vienen a pedirme de contarles la historia, lo hago con grande disponibilidad, alegría y gratitud, porque sé que estoy anunciando a Jesús.Las dificultades que a veces encuentro es que algunos niños no me hacen caso y otros en cambio se divierten conmigo, incluso me llaman hermana y santa, pero con todo esto me siento orgullosa y no me interesa lo que digan de mí, porque lo que quiero es anunciar a Jesús a mis hermanos, con las palabras y con el testimonio de mi vida misma. Soy feliz de pertenecer a Jesús.

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La realidad que vivimos, hasta en los lugares más alejados, es similar a la que se vive en otros territorios. Y, si estos son territorios de misión, fácil es entender la pobreza de medios para afrontar esta circunstancia vital no esperada y para la que nadie estaba preparado.Aunque la población total del Vicariato no es muy numerosa (apenas 170.000, o poco más, habitantes), la mayoría es muy joven, menores de 20 años, como se puede valorar por la cantidad de niños y jóvenes escolarizados en los Centros Educativos.La situación económica puede calificarse, en general, de pobreza y, en una cantidad importante, pobreza extrema, muy especialmente en los numerosos caseríos por donde está dispersada la población.Las familias suelen ser numerosas, con escasos recursos. Las casas que habitan, especialmente en las periferias de los pueblos grandes y en los caseríos, son una única estancia, en la que entra todo: habitación,

cocina, comedor. Los niños son los que más sufren estas condiciones precarias, que afectan a su misma educación y desarrollo. En situaciones como las que vivimos, se manifiesta la falta de recursos para poder seguir, por ejemplo, los programas educativos y, por ello, su educación es muy deficiente.Somos una Iglesia situada en un territorio que entraña muchas dificultades para la comunicación (las vías de comunicación son los ríos: excepto en dos poblaciones no hay luz eléctrica las 24 horas; no existe agua potable ni otros medios al servicio de la población) y para el mismo desarrollo de los pueblos (falta de trabajo estable y de medios que conlleva el progreso). Y, sin embargo, con un nivel de crecimiento poblacional muy elevado, con todo lo que esto supone de desafíos y necesidades que nosotros procuramos responder con los pocos medios que disponemos.Pe

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PerúVICARIATO APOSTÓLICO DE REQUENA



Nuestras principales dificultades, además, provienen de los pocos religiosos y religiosas que vivimos en esta Vicariato. En la actualidad no llegamos ni a 30. Una situación que nos preocupa grandemente, pues es muy difícil encontrar congregaciones que puedan o deseen compartir nuestra misión. Y la situación de este año, como pueden comprender, ha sido más especial y difícil como ha ocurrido y sigue siendo lo común en casi todas las partes del mundo. Entre nosotros las dificultades han aumentado por el confinamiento, incomunicación y faltas de medios.Casi el mismo día que íbamos a comenzar las actividades escolares y, paralelamente, las pastorales, nos vino la llamada urgente a recluirnos todo lo que pudiéramos y a que tomáramos muy en serio las recomendaciones que el gobierno dictaba para todo el país, y que se agravaba en estos territorios amazónicos.En el año 2020 no ha sido posible realizar la Jornada de Infancia Misionera, debido a las medidas estrictas de confinamiento a que hemos sido sometidos, incluso en este momento en que escribo (finales de marzo 2021), las condiciones son casi idénticas. No se pudo realizar ninguna colecta ni tampoco actividades, como otros años se pudieron hacer, para recaudar fondos con lo que ayudar a las campañas.La situación de las ciudades y capitales de distritos era muy distinta que la de los caseríos diseminados por todos los ríos de nuestro territorio. En estos, al aislamiento se unió muy gravemente la escasez de medios, aunque muchos pensaran que bastaban los recursos propios. Podría ser para un tiempo breve, pero no para uno largo e ilimitado. Y más aún cuando el tránsito de las lanchas (y, por tanto, el transporte de alimentos y materiales) quedó prácticamente paralizado.Añádase a esto que el confinamiento obligaba a encerrarse en las casas propias. ¿Cómo, si estas casas son muy reducidas, sin espacios diferenciados, muy habitadas en número? ¿Cómo resistir allí los abuelos y los nietos, los jóvenes y los adultos? Se abría un tiempo duro. Y tuvimos que hacer frente a las realidades y urgencias que se iban manifestando con insistencia y urgencia.Por todo ello no ha habido actividad escolar durante todo el año, aunque se previno unas actividades virtuales, con medios de comunicación. Pero ¿cómo si en los caseríos no hay energía eléctrica, ni internet, ni hasta allí llegan las ondas radiales? Podemos imaginar

el abandono que, sobre todo en los caseríos, han vivido los niños y jóvenes.Pero se prevé que este año será igual o muy similar al pasado. Nos vamos preparando como podemos. ¿Qué se ha hecho en este año en algunas de nuestras Parroquias con los niños y los jóvenes? Cuando se pudo, retomar algunas actividades, manteniendo las normas del protocolo. Así, en varios lugares (Orellana Tierra Blanca y Jenaro), respetando todas las normas, tuvieron encuentros y actividades.Es importante destacar la participación en acciones

humanitarias, como repartir alimentos a personas mayores con muchas limitaciones y en situación de abandono en los lugares tan alejados. Además, los jóvenes ayudaron en el reparto de medicamentos. En tantos lugares fue la Iglesia la que estuvo presente y activa en todo momento. Y ellos fueron un buen sostén de estas acciones.En Tierra Blanca, los miembros de Infancia Misionera trabajaron fabricando pequeña artesanía religiosa que les ayudó a llevar la noticia del Evangelio a muchas familias. Han sido acciones pequeñas, pero bastante importantes y llenas de ánimo por parte de los niños y adolescentes. Hemos de agradecer a las religiosas que animaron estos proyectos y la vida de las comunidades.La ayuda que recibimos con el subsidio ordinario es repartida a las comunidades de Jenaro Herrera, Orellana y Tierra Blanca y es gestionada par las religiosas que trabajan en las Parroquias. La actividad pastoral ha sido muy escasa, pero sí todo el importe recibido ha sido destinado a las necesidades, sobre todo, de los niños, en cuestión de alimentación y medicamentos. Y aunque no hemos realizado colectas en favor de Infancia Misionera, la vida de nuestras comunidades (religiosas y religiosos, catequistas y animadores) ha sido el mejor testimonio.Personalmente, me siento muy contento y agradecido por la labor que realizan en sus respectivas parroquias. Este año, de forma muy especial, todos los religiosos y religiosas han sido fundamentales en sus lugares para superar momentos de mucha necesidad, apoyando a muchas familias y poblaciones.

mons. Juan Bautista oliver Climent, ofmvicário Apostólico

TesTIMONIO


Iniciamos nuestro caminar pastoral con mucha ilusión, los niños v adolescentes lo primero que hacemos es poner en punto el patio, dejando todo listo para iniciar las actividades de la IAM, oyendo sobre un virus que está alterando el mundo, por nuestra residencia lejana creemos que no llegará aquí; nos vamos preparando viviendo la cuaresma como un tiempo privilegiado con los grupos de la IAM donde se notó una participación bastante nutrida en las celebraciones litúrgicas, por parte de los animadores hubo esfuerzo para animar la vivencia sacramental de nuestros fieles (preparación litúrgica, procesión, cantos, etc.). En medio de esta preparación el gobierno del Perú nos declara en estado de Emergencia y la inmovilización total, por tal motivo suspendemos todas las actividades de las IAM.Viviendo este tiempo en reclusión en nuestras casas, los animadores jóvenes, se dan cuenta que hay muchas familias que no tienen lo necesario para una alimentación adecuada y preguntaron si se los puede ayudar con alimentos. Gracias a Dios fue posible y ayudamos a 84 familias, que recibieron con mucha alegría y emoción. Los animadores fueron de gran ayuda tanto en preparar las bolsas como en el reparto, han dado y dan de su tiempo para ayudar siempre, con todas las precauciones necesarias por la pandemia.La Semana Santa la hemos vivido de una manera diferente. Para no dejar de vivir este tiempo hablamos con las radiofonías para realizar el viacrucis por las emisoras a una hora determinada y así todos podían participar. Uniéndonos a nuevas iniciativas sobre cómo vivir los diferentes días de la semana santa pedimos a los fieles y miembros de la IAM vivir estos días con intensidad dentro de nuestros hogares.A finales del mes de julio las cosas se fueron calmando y también nos replanteamos iniciar nuestras actividades de reunión en la parroquia.Es así como la primera semana de agosto recomenzamos nuestras actividades con la IAM, siguiendo todo el protocolo con los niños y adolescentes. Las reuniones

fueron en el patio. Gracias a Dios contamos con un buen espacio para reunirnos al aire libre. Estas reuniones las dividimos en dos: la primera parte era deporte y la segunda era de catequesis y terminamos rezando por el fin de la pandemia. En Octubre abrimos las puertas de la Iglesia para ir rezando todos los días el Santo Rosario misionero junto a los animadores y a sus familias por las noches. Ha sido una experiencia nueva donde hemos compartido la oración elevada a Dios por todo nuestro país y el mundo entero.Otra de las actividades que tiene mayor relance en nuestra preparación en la vida de fe, son los retiros espirituales realizados con los animadores, donde se les anima y motiva para hacer el sacramento de la penitencia. Durante este año tan complicado no hemos tenido reunión con los padres de los grupos de sacramentos, pero sus compromisos con la ayuda a la iglesia siempre han estado presente.Una de las actividades culturales que se ha motivado en este año es el apoyo a algunos jóvenes para que desarrollen sus habilidades artísticas, haciendo unos murales en el antiguo hospital, que ahora funciona como salón de catequesis y almacén de utensilios para las actividades semanales de los participantes de IAM.Los animadores adolescentes se han implicado en la realización de trabajos manuales: este año por las circunstancias antes mencionadas no han podido realizar actividades para recaudar fondos para el Domund. Lo que los jóvenes aprovecharon fueron los frutos que dan en la huerta parroquial como el aguaje para vender por los barrios de nuestro centro

TIERRA bLANCA PARROQUIA NUESTRA SEÑORA DE LOURDES

Perú



poblado. Su entusiasmo nos anima a continuar y a seguir impulsando este tipo de actividades.Nuestra metodología ordinaria tiene como eje trasversal que todo sea educativo. Por ello se insiste en la puntualidad, en el orden, en la limpieza, en el respeto, en el trabajo voluntario. Dichos valores los vamos enseñando y aplicando en la práctica con las siguientes acciones: los de mayor edad, que son jóvenes animadores, del grupo de perseverancia y algunos que ya se han confirmado y son del grupo de mantenimiento, son los encargados de cuidar de los pequeños, cuidar y vigilar en el patio haciendo juegos y organizando competencias deportivas, hasta el momento de la catequesis. Llegada la hora de entrar a los salones, primero hacemos una oración general, donde se hace Ia oración y se da algunas indicaciones, luego cada animador va con su respectivo grupo a su sala de catequesis. Después de la catequesis nuevamente nos reunimos para un momento de animación y la oración final. Luego se les reparte refresco con bizcocho. Después que todos los chicos han ido a su casa, nos reunimos con los animadores para una charla formativa y/o acuerdos.Los domingos por la tarde dejamos el tiempo y locales disponibles para los responsables de los grupos, para encuentros de distención y convivencia espontánea. Contamos con un grupo de 28 animadores, la mayoría son adolescentes y algunas personas adultas.

Hna. Leonarda inés Anchíraico Espinar

TesTIMONIO


En burundi, la Infancia Misionera ha tenido inicio el 6 de enero 1975 en la actual arquidiócesis de Buyumbura, gracias a la iniciativa de S.E. Mons. Michel Ntuyahaga.Diez años después, esta iniciativa se había difundido en todas las diócesis de Burundi. Hoy, la Obra Pontifica de la Infancia Misionera es cada vez más dinámica respecto a las otras Obras Misionales Pontificias y los niños que adhieren a ella aumentan constantemente. También sus animadores aumentan en las mismas proporciones, lo que facilita la actividad misionera de los niños en los diversos ámbitos.Además, el apostolado de la Infancia Misionera es apreciado por los cristianos adultos y suscita en ellos un empeño misionero. Así, en todas las parroquias de Burundi hay grupos de Infancia Misionera con sus respectivos animadores. Se trata de sacerdotes, religiosos, catequistas o laicos cristianos que son motivados por las actividades misioneras de los niños.Durante sus actividades, la Infancia Misionera ha dado vida al grupo de apostolado anexo a esta Obra, es decir los Cantores de la Estrella. Este grupo anima a las familias llevándoles la alegría de la Navidad y solicitando ofrendas para dicha Obra.

La actividad está concentrada en torno a la Epifanía que es el día de la Infancia Misionera. En este período, los niños de los grupos de la Infancia Misionera en compañía de seis animadores, se comprometen con los Cantores de la Estrella.Se debe notar que los niños misioneros que superan los 14 años, entran directamente en el grupo juvenil misionero que agrupa a los adolescentes que quieren continuar el camino de la Infancia Misionera y a otros jóvenes con espíritu misionero. Y cuando después alcanzan la madurez y se casan, entran directamente en el grupo de las familias misioneras también en apoyo de las vocacionesLas actividades formativas ordinarias propuestas por la Dirección Nacional son:

• Elaboración de un folleto anual de catequesis adaptado a los niños sobre algunos pasajes de la Biblia que muestran la compasión de Jesús por los enfermos, los ciegos, los lisiados y los hambrientos para incentivar a los niños a vivir su fe imitando a Jesucristo.Los animadores de todas las parroquias de la BU

rUNd

I

BUrUNdIdIreCCIóN NACIONAl

P e Q U e ñ O S M I S I O N e r O S e N . . .


Iglesia de Burundi reciben estos materiales.• La organización de encuentros de los Directores diocesanos. Estas reuniones tiene un doble objetivo: proporcionar formación misionera a los Directores diocesanos de las OMP y hacer una evaluación de las actividades de la Infancia Misionera programadas en los encuentros precedentes.Otras posibles actividades:

• La preparación de pequeños recuerdos para los niños en las parroquias.• La organización de festivales.• La organización de peregrinaciones de los niños de la Infancia Misionera acompañados por sacerdotes y líderes en lugares espirituales.• La organización de juegos y concursos de dibujo para niños (por ejemplo, antes de Navidad o de Epifanía los niños dibujan o preparan nacimientos en arcilla).• Las visitas de los niños a hospédales y orfanatos para dar esperanza a los niños enfermos y abandonados.• El intercambio de correspondencia entre los grupos de la Infancia Misionera para compartir las experiencias con otros grupos de la Infancia Misionera.• La intensificación de los encuentros con los niños a nivel parroquial.

• La supervisión de los niños en las comunidades eclesiales de base.

lA “VIGIlIA” de lOS NIñOS MISIONerOSEn algunas diócesis los animadores de la Infancia Mesonera han creado grupos de niños de la Infancia Misionera al interno de las comunidades eclesiales de base. Estos niños se reúnen una vez a la semana, para recitar el rosario y meditar sobre algunos pasajes bíblicos. Los frutos de esta actividad de la Infancia Misionera se ven ya de un año al otro porque notamos que todos los hijos de las familias cristianas participan abundantemente. Y así otros entran en los grupos de la Infancia Misionera. Por eso la Dirección Nacional de las Obras Misionales Pontificias incentiva a las diócesis que ya han instituido estos grupos en las comunidades eclesiales de base y pide a las otras diócesis que tomen en consideración esta iniciativa. Para revitalizar esta actividad, la Dirección Nacional ha preparado un programa que todas las diócesis pueden utilizar para acompañar mejor a estos niños.


BUrU

NdI

Me llamo Steve nDAyIkeZA, tengo 10 años, frecuento el quinto grado y soy miembro del grupo de la Infancia Misionera. En cuanto bautizado, hijo de Dios y hermano de Jesús, estoy contento cada vez que nos reuinimos para rezar el rosario por la unidad y la paz en todo el mundo, en particular, en unión con los niños del mundo el 18 de octubre a las 9 de la mañana.El año pasado era un domingo y nos hemos reunido en la iglesia.Me siento contento cuando visitamos a los niños internados en el hospital llevándoles dones. En el año 2020 hemos visitado a estos niños enfermos y les hemos llevado 15 jabones, 15 kilos de harina, 10 kilos de frejoles y 6 kilos de arroz.También hemos visitado a los niños abandonados por sus padres, llevándoles 6 kilos de frejoles, 5 kilos de arroz y 10 kilos de harina. Desarrollando este apostolado con espíritu de amor y de misericordia siento mucha alegría. También estoy feliz porque como miembro del grupo de la Infancia Misionera me he empeñado en el apostolado parroquial como ministrante / monaguillo.Lamento mucho ver que algunos niños no participan a nuestro grupo de Infancia Misionera. Como sea, yo me uno a todos los niños del mundo en la oración, en el sacrificio y en la recolección de fondos para la promoción de la misión.

CeleBrACIóN de lA jOrNAdA de lA INFANCIA MISIONerA 2021No obstante la pandemia, la Jornada de la Infancia Misionera 2021 ha sido celebrada en todas las parroquias de Burundi el domingo de la Epifanía, en el respeto de las medidas establecidas por el Gobierno y por Conferencia Episcopal con el objetivo de prevenir la pandemia de coronavirus.La Dirección Nacional ha proporcionado los instrumentos necesarios para la animación de la jornada:

• La imagen del fundador de la Obra de la Infancia Misionera, Mons. Charles de Forbin Janson, con la oración de los niños de Burundi.• El folleto guía a las actividades de los Cantores de la Estrella.• Las estrellas para poner en las puertas de las familias durante la visita de los niños.

P. Salvator NgendabanyikwaDirector Nacional OMP Burundi

P e Q U e ñ O S M I S I O N e r O S e N . . .


Me llamo eric MAnIRAkIZA y soy un niño misionero. He comenzado mi apostolado en la Infancia Misionera a la edad de 8 años, en 2016. Entonces era monaguillo y el párroco de mi parroquia había decidido que todos los niños comprometidos en la parroquia, cualquiera que fuese su grupo de pertenencia, debían escribirse obligatoriamente en el grupo de la Infancia Misionera. Yo, como los otros niños de mi edad, para no ser excluso de las actividades de la parroquia, he decidido de inscribirme, si bien con pocas ganas. Seguramente el amor de Cristo nos empuja. El primer día que he participado a la Infancia Misionera he sido acogido positivamente y me han mostrado las actividades que realizaban. También me han contado la historia de la Infancia Misionera y su espiritualidad. He notado que en la Infancia Misionera se pone en el primer puesto la espiritualidad misionera, y esto lo diferencia de otros grupos.En los encuentros de la Infancia Misionera se nos enseña a ayudar a los otros, a rezar por los demás, a cumplir obras de caridad y de misericordia, y a buscar a los amigos de Jesús – todo esto en favor de la misión. En nuestro grupo de la Infancia Misionera organizamos vigilias misioneras, concursos de dibujo y danzas misioneras, invitando a nuestros padres a participar.El grupo de la Infancia Misionera me ha ayudado a convertirme en un dócil instrumento de evangelización. Queridos niños, vengan también Uds., numerosos a la parroquia, entren en el grupo de la Infancia Misionera. Les ayudará mucho a construir positivamente vuestra personalidad, vuestra vida humana y cristiana. Todos Ustedes miembros de la Infancia Misionera, den sin cesar consejos a los niños que se portan mal, para ayudarlos a convertirse.Busquemos ser verdaderos misioneros con los otros niños que se encuentran en situaciones desagradables.


e N T r e l A S l í N e A S

. . . d e l O S P r O Y e C T O S

Hna. Maddalena Hoang Ngoc

edUCACIóN relIGIOSA Y ASISTeNCIA BÁSICA PArA lOS NIñOS de lAS AldeAS reMOTAS de BABIkO, MOU Y rAPADIÓCESIS DE BEREINAPAPUA NUEVA GUINEA

BAKIKO, MOU y RAPA son remotas aldeas que pertenecen a la parroquia de la Diócesis de Bereia. Se trata de áreas aisladas, con calles sucias, en malas condiciones y sin estructuras sanitarias para asistir a los enfermos. Durante la estación seca, es necesario caminar al menos dos horas antes de llegar a una posta médica, mientras que durante la estación de las lluvias es mucho más difícil. Hay una escuela elemental dirigida por la Diócesis, pero los alumnos que no frecuentan son muchos. El año pasado las Hermanas de la Comunidad Cavanis Jesús Buen Pastor han comenzado a impartir lecciones de catequesis a los niños. Hasta hoy, las Hermanas los han visitado una vez al mes, generalmente cuando el párroco de la parroquia viene a celebrar la Santa Misa.En la zona hay también muchos niños discapacitados, che necesitan de cuidados especiales o, simplemente, a veces, de una visita en sus chozas para pasar con ellos un poco de tiempo y compartir una sonrisa. Sin embargo, no ha sido posible responder a todas las exigencias por falta de suficientes medicinas, de leche vitaminizada y de fondos para el trasporto.Proyecto:Visitas semanales o quincenales a los niños de las aldeas remotas de Babiko, Mou y Rapa.Finalidad: Realizar actividades de educación religiosa y proporcionar asistencia básica, incluso médica, alimentos a los niños enfermos y emarginados.

Actividades:• Reunir a los niños después de la misa / liturgia de la Palabra para realizar actividades adaptas a ellos y así hacerles conocer y amar a Jesús, enseñarles el Evangelio, a rezar y a ayudar a quien está en situación de necesidad, incluso los niños pobres de otros países, en modo de estimular en ellos actitudes misioneras;• Mientras tanto, identificar a los niños enfermos y desnutridos y darles asistencia en el mismo lugar si es posible o, en caso contrario, facilitar otros tipos de intervención (llevar a los niños al hospital, llevarlos temporáneamente en la casa familia para que se restablezcan, o bien encontrar un lugar seguro o una familia en la cual poder estar).• Algunos grupos van a buscar a los niños diversamente hábiles para llevarles alegría y para estimular en cada uno de ellos la atención hacia los últimos y los necesitados.

En el futuro serán escogidos voluntarios, adultos y responsables, que serán formados y apoyados para que puedan asumir la responsabilidad de ocuparse de los niños. Se les proporcionará materiales religiosos, libros, colores, etc. para que sean utilizados con los niños.


Kathleen Mazio

el CeNTrO de reINSerCIóN NdjIATArPArA lOS NIñOS dIVerSAMeNTe hÁBIleSDIÓCESIS DE DoBACHAD

El centro de reinserción Ndjiatar de Doba se ocupa de niños diversamente hábiles dándoles una formación que les permita la inclusión en la sociedad, los responsabilice y los haga sentirse útiles. La formación abarca más disciplinas: para las niñas, la costura (2 años de formación), el bordado y el tejido (creación de toallas decorativas, de vestidos para niños (6 meses de formación), la fabricación artesanal de jabones y de otros trabajos manuales (2 meses de formación); para los niños, la carpintería, la soldadura, la sastrería y la fabricación de jabones. Actualmente el centro hospeda 12 niñas y 11 niños. Los medios limitados de los padres de familia no les permiten satisfacer las exigencias de su formación. Los niños benefician también de una formación catequética y de los sacramentos, recitan el rosario cada día y rezan por sus benefactores.

“Queridos benefactores, me llamo Denise Jamadji y vivo en una familia cristiana del pueblo de Kouh-Wété, cerca de Béboto. Tengo trece años. Desde el 2012 sufro de osteomielitis. Las dificultades financieras de mis padres han marcado mi triste destino. Pero gracias a la gracia y a la misericordia de Dios he tenido la oportunidad de ser apoyada por la Iglesia por medio del Centro para los diversamente hábiles, que me cuida a nivel sanitario y que me ha

salvado la vida. Mi pierna derecha era torcida, pero ahora se ha enderezada un poco. Quisiera agradecer a Dios y a uds. que me han ayudado durante un año a recibir una formación con cursos de francés, de tejido, costura y otras cosas, permitiendo de inserirme mejor en la sociedad. Estoy muy orgullosa y feliz de recuperar una vida normal en el Centro y entre mis amigos o mis hermanos diversamente hábiles como yo.Mi sueño es integrarme completamente en la sociedad y les agradezco por vuestra generosidad hacia mí. ¡Que el Eterno, el buen Dios les conceda la gracia y los guie en vuestras misiones!

Kouh-Wété, 16/08/2020


PONTIFICIUM OPUS A SANCTA INFANTIASECRETARIATUS INTERNATIONALIS

Beata Pauline-Marie Jaricot,

Tu vida nos enseña que estar constantemente unidos a Jesús, da buenos frutos, frutos que permanecen.

Un día, fuiste conquistada por Cristo, te entregaste completamente al Reino, desde entonces, la oración y la caridad se convirtieron en ofrenda de tu vida.

¡Tú pasión por sostener la Misión, te ha hecho fundadora de obras de oración y de caridad universal! Tu preocupación por la justicia te ha permitido

conocer a los pobres y luchar con ellos hasta la raíz de sus males.

Eres modelo para los discípulos misioneros que deseamos ser en nuestro tiempo, para los bautizados comprometidos, que caminan tras los pasos del

Resucitado.

Acompáñanos en nuestra conversión a la Misión que pide simplemente dejar que Jesús haga su morada en nosotros y dejar que el Espíritu de amor obre

en todo.

Amen.

¡beata Pauline-Marie Jaricot, mujer apasionada por la Misión, ruega por nosotros!

Obras Misionarias Pontificias - Canadá Montreal

octubre 2021 - n. 9 bole í n

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