terMOrgapo de Ntra. Venerable Orden Tercera de Ferro'Direccióny Administración: Colegio ile LP. Mereedarios

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ENERO DE 1919 NÚM. 6

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SUMARIO

San Pedro No-lasco, Redacción--Páginas Merce-darías, por JuliaG. Herrera -- AñoNuevo y «La Mer-ced» -- Leyendas,por Fray SerapioGonzález -- LaMística, por FrayGuillermo Váz-quez -- Secciónde Cultos -- Fe-rrol ante la epi-demia, por E. Cal-vo -- SantoralMercedario - No-ticias. Ferrol, Es-paña, Extranjero.

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Jan Pedro Nolasco

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El día 31 del corriente mes, celebramos losMercedarios la festividad de nuestro Santo Pa-

:-- rt iarca y Fundador. Es una fecha de grari regocijo,- no sólo para la Orden Mercedaria, sino tambiénE para la Iglesia católica, y aún para la humanidad.

Los Mercedarios le llamamos ¡Padre! Los creyen-tes todos de la Iglesia Católica le llaman hornoperenne de encendida caridad, dechado del mássublime amor, imagen viva del Redentor. Los in-:

r." crédulos, los racionalistas le podrían llamar filán-E- tropo, altruista inimitable... ¡Y tan inimitable, como

que en su campo no se encuentra un solo ejemplosemejante!

¡Padre, Padre!: LA MERCED es tuya corno es deMaría, de Aquella por la cual los Mercedarios

- hemos venido a la existencia; y en este primer añode su vida en que celebra tu fiesta, te pide tu ben-

- dición, que será fecunda en bienandanzas, y con: ella seguirá siendo el portavoz de las glorias y:1 grandezas de esta Orden que has fundado.

LA REDACCIÓN.

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• En una reducidísirna estncia, verdadera celdilla de cenobita,E construida en un pob , e portal- contiguo a la ermita de Santa Bár-

bara, en Madrid, habitaba, en el primer tercio del siglo xvit, unamujer verdaderamente extraordinaria, cuya fama de santidad y

: vida penitente habían traspasado hasta los alcázares reales, sien-

: do el asombro y enificación de grandes y pequeños y el remedioy consuelo de muchas almas atribuladas, que encontraban enella tesores inagotables de caridad y una intercesora poderosa

• cerca de Jesús, su Esposo divino y celestial Maestro.E Llarnábase esta sierva de Dios María Ana de Jesús y había

recibido el día de lueves Santo, 20 de Mayo del ario de 1619, el

• hábito de la Merced de manos del Maestro general de la Orden,Fr. Felipe de Guirnerin.z

• María N na contaba 49 años cuando recibió aquel sagrado• hábito, del que su profundísima humildad le hacía considerarse• indigna. Ella, que desde los primeros años de su niñez había en-

tregado su alma virginal a Él que para sí la creara, en quien semiraba como un espejo divino, a cuya semejanza iba modelando

E• su corazón con el cincel de las más ásperas penitencias; MaríaAna se había resistido largos años a vestir lo que ella considera-

: ba manto real de la esposa de Cristo, y cuando por obediencia• fué investida de esta dulcísima dignidad, renovó, si posible fuese,• sus fervores corno si entonces empezara el camino de la perfec-E• ción, y la fama de su santidad, traspasando los límites de Madrid,: lugar de su nacimiento, cundió por toda España, por donde se• esparció el suave olor de sus virtudes como fragancia vivificado-:

ra y celestial.He dicho ya que su celdilla era muy reducida: todo su ajuar

se componía de dos sillas viejas y una estera, esto por conside-:ración a las nobles damas que acudían a visitarla, solicitando suo

E• oraciones y consuelos; úna pequeña mesita, sobre la que se veía▪ una devota imagen de Cristo; una gran cruz en la que oraba ex-

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tendiendo sus brazos, y en el rincón más apartado un pedazo decorcho, que era su lecho, con un madero por almohada.

E María Ana estaba en oración, contemplando a Jesús crucifi-E cado, su espíritu, desprendiéndose de la tieria, volaba a unirse aE Él, con esa unión íntima y sobrenatural, que sólo pueden gozar

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los que, pisoteando los goces terrenos, ci ucifican su carne; losincendios de su amoroso éxtasis saliendo de su corazón abrasadoen reflejos divinos iwminaba su rostro con celestes resplandores,transfigurándola, absorta en su sublime oración, no oyó que al-

: guien llamaba a la puerta, y fué necesario que redoblaran losgolpes para que la esposa de Cristo, deseen iiendo a la tierra,acudiera a abrir la puerta. Eran dos elegantes damas, vestidas ausanza de la Corte, las que turbaran la oración de María Ana.

Mientras la más joven dirigía una curiosa mirada al interiorde la vivienda de la sierva de uios, extremeciéndose a la vista delduro lecho y tosca cruz, la de más edad, cuyo brial de negroterciopelo y ricas juyas denotaban su respetable posición, dijocon el tono enfático del que cree dispensar una gran merced:

—Vuestra augusta Soberana, la Reina D. Margarita de Aus-tria, que Dios guarde, nos envía cerca de Vuestra Merced paraque tenga a bien acompaña . nos cerca de S. M. Sabedora de susaltas virtudes, la Reina Nuestra Señora se holgará muy muchode que la acompañéis durante su paseo dc esta tarde.

María Ana quedó un momento suspensa; su humildad se re-belaba contra aquel honor inusitado que querían dispensarle;

5. por otra parte, la fama de discreción y virtud de la noble esposade del tercero de los Felipes era notoria, y el espíritu lleno decaridad de María era incapaz de mostrarse desagradecida.

Un poco asombradas de su tardanza en responder, ambasdamas miraban a la religiosa de hito en hito.

Al fin, la mas joven, con la vivacidad propia de su edad, dijo,como dirigiéndose a su compañera:

-S. M. espera.María Ana comprendió que era a ella a quien esta frase iba

dirigida.—Mucho agradezco a S. M. la Reina haber pensado en tanE

indigna criatura como yo soy, dijo con dulzura y humildad in-: decible. Su bondad me confunde; pero para encomendarla a

Dios Nuestro Señor, mejor estoy en este retiro que en el bulliciodel paseo, digánselo así Vuestras Mercedes, mis nobles señoras,y no me olviden en la presencia de Dios, que harto necesitadaestoy de sus oraciones.

----1Pero rehusáis acompañar a S. M. la Reina cuando ella lodesea 1...—exclamó en el paroxismo de su asombro la joven dama.

María Ana srialó el crucifijo.—A los pies de mi Señur mi espíritu le acompañará, rogan-

do por ella y por su augusta familia.., es cuanto puede hacer unapobre religiosa como yo.

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Era tan firme, tenía un no sé qué de sobrehumano su acentoy su mirada que, subyugadas, las damas se retiraron sin insis-tir más.

Cuando dieron a la Reina la respuesta de la religiosa, la pia-dosa esposa de Felipe III quedó pensativa, y en el fondo de sucorazón debió sentir que hay una grandeza, ante la cual el orode las coronas se hacen polvo y todas las grandezas desaparecen,la grandeza del sacrificio, del amor divino, la soberanía de lacruz.

JULIA G. HERRERA.oO(ooOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOeOOOoOOO 000

EL AÑO NUEVO Y "LA MERCED"Con este número LA MERCED entra en el segundo año de

su vida, y podemos dar gracias al cielo, que ya tenemos la sa-tisfacción de verla tan próspera.

Se la hemos ofrecido a Nuestra Santísima Madre, cuyo nombre ostenta como glorioso título, y ella, sonriéndose de gozo alver nuestro entusiasmo y la pureza de nuestras intenciones, nosbendijo con una bendición grande, Con un bendición de Madre...

He ahí lectores la única causa de que nuestra publicación seencuentre cn un estado floreciente, como ni nosotros mismosPodríamos soñar.

Es inmensamente difícil fundar y sostener una revista, y lanuestra nació cuando el precio del papel llegaba a su períodoálgido, aparte de otras dificultades que no son para dichas, y quehubieran atemorizado al más valiente. Y sin embargo salió a laluz del día llena de vida desde el primer número, y editada contal lujo, que nuestros suscriptores la . reciben casi gratuitamente.

Pero, ¿qué importan dificultades en asuntos en que intervie-ne la mano de María?

¡Y en esta publicación, que es exclusivamente obra suya, lahemos visto sus hijos tan visible!...

Por eso, en nombre de María, LA MERCED puede anunciara sus lectores con satisfacción inmensa, que la Redacción prepa-ra en ella reformas importantísimas a partir del próximo mes deAgosto, en su segundo volumen, para que nada tenga que envi-diar a las mejores de su índole.

Como no tiene límites el amor que tenemos a la Madre, tam-Poco quisiéramos que lo tuvieran las obras que a ella dedicamos.¡Madre, no nos abandones nunca; jamás nos apartes de tu

lado y seremos omnipotentes!...„

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"SPECULUM FRATRUM"

ciencia? Una cosa bella en expertas manos. Por elladescubrimos arcanos de Dios y de las criaturas. La ciencia es elalimento del alma, la cual protesta contra toda clase de velos, ycendales, y brumas, porque quisie a tener una sabiduría infini-ta; por algo está hecha a imagen y semejanza del que todo losabe. Sin embargo, la ciencia en manos del hombre maltrechopor el pecado original, es un peligro, es un escollo, es una armade fuego en manos inexpertas, es un objeto cortante manejadopor travieso niño.

—Donoso panegírico me está haciendo de la ciencia VuestraPaternidad, cuando con afán me dedico a ella, oyendo susadmirables lecciones.

—Es que yo quiero poner

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las cosas en su verdadero punto.La ciencia es buena, buena. Pero se presta más que a ningunaotra cosa buena a grandes abusos. El crapuloso y derrochador,abusa de las riquezas, el glotón, de los manjares, el beodo, de loslicores, el lujurioso, de su cuerpo, el maldiciente, de su lengua.Pues mira, hermanito; el sabio, si no es santo, abusa de la sa-biduría. Mira a Luzbel: qué le sirvió ser el más sabio delos espíritus? ¡Para su ruina!...

—Quiere decir que desde hoy acuesto los libros, hago cruzy raya a los estudios, no aparezco más por su cátedra, y me de-

! dicaré a una santa holganza, y a compadecer a los pobrecitosE «ciegos» que se dedican con afán a buscar en la ciencia una po-E quita luz.

—Hermano; no siendo V. R. corto de alcances, muy mal meE. he debido explicar para que no me haya comprendido. No deci-

mos al glotón que no coma, al lenguaraz que no hable, ni alt- creso que no use de sus riquezas, sino que usen de todas esasE cosas con su cuenta y razón. ¡Ay del sabio soberbio! li y es tanE; difícil ser sabio y humilde!! Digo, pues, que es preferible serE ignorante que ser soberbio. Luzbel con toda su ciencia está

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ardiendo en los infiernos, y San José, el pobre .carpintero de 5.,Nazaret, sin haber profundizado gran cosa en las humanas filoso- Efías, está resplandeciendo en la Patria de los bienaventurados. -

—Padre mío: Ha mudado vuestra Paternidad de cuento.Quiere decir que le ha parecido mal alguna de mis acciones; le Eha desedifica do alguna de mis palabras, le parece que mi vida Eno está en consonancia con el humilde sayal con que nos cubri-mos. Hábleme con franqueza; dígame que soy soberbio, que soy Eun religioso poco edificante y que empiezo con poco entusiasmo Eel camino de la perfección.

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E--En efecto; así es. Dios te ha dotado de claro entendimien-to, 3? tu no sabes agradecerle el beneficio. Has abrazado la vida :;"religiosa en una Orden, cuyo distintivo ha de ser la humildad y Eel amor: el desprecio propio y el amor al prójimo. Y tu te dis- Etingues en el amor propio y desprecio de los demás. Según :2adelantas en las ciencias, noto que desprecias a tus condiscípu-los de más corto entendimiento, aun cuando te aventajen en vir-tud. Pues ten presente, hermanito, que en la religión de Pedro ENolasco, no se cotizan a elevado precio los sabios, sino los san- Etos. Bien se te conoce que eres . un pobre aprendiz de la más Esublime de las ciencias, la de la salvación. Chorreas sangre por Elas heridas que te quedaron al separarte del mundo. Para cica- Etrizarlas mira muchas veces al crucifijo, a las heridas del Reden-tor, a su costado manando sangre y agua. Mira también a losreligiosos que más se distinguen por la virtud de la humildad. Y EPara tu gobierno te voy a citar un nombre que te pongo por E

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modelo. 1\10 te has fijado en nuestro cocinero?... ¡Sí, hombre, el E

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Visión simbólica de la Jerusalén celeste a S. P. Nolasco(Cuadro de Zurbardn)

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—Triste?—Sí; no por la reprimenda, sino porque tenía razón, y por-

que me he visto como soy por adentro: ¡tan feo, tan feo!...—Pues también eso tiene remedio. En primer lugar, no será

tanto, y la reprimenda del P. Bernardo sería una prueba. Ade-más, si hay algo que no sea bueno, con enmendarlo, asuntoterminado. Ahora vamos a preocuparnos de su salud corporal.

Y el santo lego se fué a la cocina, preparó un riquísimo« ponche» de leche, huevos y azucar, que sirvió al enfermito, en-dulzado con sonrisas y palabras de gran cariño y consuelo. Conel tal refrigerio ya se vió el corista algo reanimado. Despuésllevó el hermano buena cantidad de leña para la celda del pa-ciente y en medio de ella, cuyo pavimento era de piedra, encen-dió ¡luna hoguera, que ni que fuera la víspera de San Juan!!

—Hermanito, por Dios, que me voy a ahogar con tantohumo.

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Aparición de Nuestra Santísima Madrea San Pedro Nolasco

(Cuadro de Murillo)

1. —No se ahogará vuestra reverencia, sino todo lo contrario, .7.-; que Con este caloreillo se pondrá bueno, y se le limpiará el; Pecho y los pulmones hasta del último átomo de mal.—1Ayl ['me ahogo, me ahogo!!...Y se desmayó.El beato . Ferrario todo afligido, cayó de hinojos delante del

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hermano Ferrario! ¡Ese es santo!... l'hace milagros!!... y nosotroscon todas nuestras sutilidades escolásticas, jamás llegaremos aver ni el corvo pico del águila de San Juan.

—Hace milagros el hermano Ferrario?...—Como lo oyes, Fr. Tomás. Toma por modelo al humilde

cocinero, y pronto te veré correr como gigante por el caminodel Cielo.

—Se lo prometo, Padre Bernardo. Y aún cuando nuncallegue a ser capaz de escribir ni unos pobres quodlibetos, meharé santo. Por mi parte se quedará en pañales la alquimia, y sindescubrir la piedra filosofal, pero haré por nescubrir esa piedradivina que convierte en grados de gloria todas nuestras obras ymás humildes ocupaciones.

II

5

--Como sigue el enfermito?—Muy mal, hermano Ferrario. Este pecho es un horno.—Será de amor de Dios.—No por cierto, que en ese punto es una miaja de la región

polar. Mi pecho es un horno con la calentura; tengo los pulmo-nes inflamados, y una tos que me atenaza el corazón. ¡Ay her-manito, si tuvieras por ahí alguna cosa que me suavizara las as-perezas interiores que me destrozan!

—Estando la conciencia tranquila, no se preocupe por do-lencia más o menos. Los males del cuerpo siempre son cosas demenor cuantía y absolutamente despreciables. Le escarabajea elmal y le aniquila la calentura; pues con algo caliente que letraiga a más de unas friegas que voy a darle y unas aplicacionesde mostaza, se pone bueno. En fin, no se preocupe, teniendo elalma limpia y pura y la conciencia tranquila como el corazón deun niño.

—Tampoco eso, hermanito, porque soy muy malo, y los re-mordimientos no me dejan descansar. Ya hace cuatro arios quetomé el hábito de María de la Merced, y aún estoy como el pri-mer día, lleno de defectos e imperfecciones, sin aprovecharmede los ejemplos de los santos religiosos que me rodean. Me hededicado al estudio de las ciencias, que envanecen, olvidándomede la principal de todas ellas, que es la . virtud.

Humildad, humildad y modestia.—No es humildad, sino verdad triste; pues pocos días hace

que así me lo ha dicho el P. Bernardo, que es tan sabio comosanto. Si viera, hermanito, que triste me quedé de la re-primenda.

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lecho del enfermo, que estaba pálido como una estátua yacentede marmóreo sepulcro, sin dar ni la más leve serial de vida. Le-vantó sus ojos al Cielo y dijo.—Señor: ¿por qué me abandonas?J\To me dijiste que con una senda hoguera y con mucho humo sehabía de curar el enfermito? ¡Ahora me dirán que me puse locoy que ahogué al estudiante con humo, como si fuera una alimaña!Señor ven en mi ayuda, que yo nunca hago sino tu voluntadsantísima.

La hoguera cada vez estaba más imponente. Los troncos yramas ya secas, se retorcían y silbaban entre rojas llamas. Auncuando todo estaba cerrado, fué desapan.ciendo el humo y uncalor reconfortante y dulce empezó a sentirse en la humildehabitación.

Fr. Tomás abrió los ojos como si despertara de un sueño, yvió al hermano Ferrario arrodillado y en éxtasis con los ojosfijos en el vacío; veía algo. Por fin, entre dientes dijo:—Gracias,Señor, ye sé que me oyes siempre. Se puso en pie y su rostroestaba radiante con celestial alegría.

—Xómo va el enfermito?—1Hermano Ferrario, ya estoy bueno. Tengo fuerzas de

titán, y el pecho sano, y los pulmones fuertes, sin pizca de dolor.Ya no siento calentura ni at€ nazamientos en el corazón. Ñuiereque cante?

Fr. Tomás tenia una hermosa voz de tenor, y con una dul-

zura v suavidad de cielo, entonó:Te Deum Laudamus. .

III

—Padre Bernardo: nuestra Paternidad decía bien: El herma-no Ferrario es santo. Hizo bien en recomendarme sus ejemplos.

—Yo ya sé eso hace tiempo y tú cuándo te enteraste portus ojos de una verdad para mí tan vieja?

—1Hizo conmigo un milagro!Me dió la salud con lo que debía darme la muerte.Yo tenía una pulmonía, que seguramente me llevaría al se-

pulcro. Me dió un refrigerio, y luego hizo en medio de mi celdauna inmensa hoguera con leña verde. Con el humo y el calorsofocante de la luminaria, pensé que me ahogaba y me desmayé.Cuando recobré el conocimiento. el hermano cocinero estabaarrodillado y en éxtasis. Yo estaba perfectamente curado.

--Ese milagro es poca cosa para el hermano Ferrario.— Sabe V. P. otros mayores?—Los presencié emocionado. Allá va uno de los buenos.

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El otro día se presentó en la cocina un novicio de parte delMaestre de la Orden, llamándole a su celda para recibir instru-ciones. No bien acababa de salir este novicio, entra un hermanocon otro recado del Vicario del Convento, que lo necesitabaurgentemente para tratar de asuntos de importancia. Aquí del

dió los brazos en forma de cruz, como si quisiera ir con cada

conflicto del obedientísimo hermano, por no saber a dondeacudir primero. Se quedó perplejo en medio de la cocina, exten-

uno al cuarto de cada superior; levantó los ojos al Cielo y sequedó como enagenado. Yo lo he visto con su rostro de angelenardecido como en transfiguración divina. Desde un rincóncontemplé con respeto profundo el éxtasis de un santo en íntimacomunicación con Dios. .)¿- sabes lo que pasaba en aquellosmismos instantes en las celdas de ambos superiores? ¡¡Pues, queen las dos estaba el hermano Ferrario recibiendo sus instruccio-nes y mandatos!!... ¡En tres sitios a la vez! Fr. Tomás, esta casaes un taller de santos, es una fragua en donde se caldean los es-píritus más tibios; si seguimos estacionarios en el camino de lavirtud entre almas tan enardecidas por el fuego de la caridad, notendremos perdón de Dios, y merecemos que Ja Orden nosarroje de su seno, así como el mar arroja los cadáveres para pu-rificarse.

Aparición de la Stnia. Virgen a San Pedro Nolascoen el Coro de la Merced de Barcelona

(Cuadro de Zurbardn)-:

—Me conmueve profundamente todo lo que he visto y acabode ------

......—Si Vs. Rs. me lo permiten, también terciaré en esa con-versación, que me interesa sobrem2nera, porque también tengo -

; datos que aportar para la vida de un santo. ::1:)111,11,1

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—Diga, diga el hermano Agustín.—Yo también sé un milagro y bueno del hermano Ferrario.- Otro más ?—Estaba cavando en la huerta, y de parte del Prior, un ca-

ballero le invita a que le acompañe por la ciudad. El religiosoobedeció al momento. Más he,aquí que al poco tiempo fué elP. Prior a la huerta y se encontró con el hermano que cavabacon afán ; se acercó para reprenderle por no haberle obedeci-do acompañando al caballero, y cuando distaba pocos pasos,desapareció el gentil cavador.

¡ Era un ángel, porque el hermano andaba cumpliendo laobediencia por la ciudad!

- Hermano, eso es asombroso !—Dios está con nosotros.—Diga ahora, Fr. Tomás, quién es más sabio el hermano

Ferrario ensalzándose por la humildad y abatimiento propio,y en medio de su rudeza practicando las virtudes en gradoheroico, o nosotros envalentonándonos con cuatro letras queaprendemos, por las cuales no nos han de admirar los hom-bres y tal vez nos castigue Dios?

—Padre, Padre mío no apriete más el dogal que oprime migarganta. Desde hoy 'mi principal ocupación ha de ser el san-tificarme.

El sol trasponía las montaria g del ocaso cambiando a cadainstante el matiz, entre polícromos arreboles ; la brisa del maroreaba las mejillas ardientes por el calor del día y de las emo-ciones del corazón. El ambiente estaba delicioso; numerosos pa-jarillos corrían bullangueros a refugiarse entre las ramas y arbus-tos del jardín del primer Convento Mercedario; y se disputabanlos más cómodos albergues entre chirridos y picotazos; unas pa-lomas se daban duchas entre amorosos arrullos en los chorrosde una fuente que había en medio del jardín, y el agua caía, caíarumorosa sin cesar, como cae la arena ' del reloj, marcando elpaso del tiempo hacia la eternidad. Sonó un toque de campana.

—Hermanos—dijo el P. Bernardo, sacando a los otros reli-giosos de la abstracción en que habían quedado sumidos—nosllaman a la oración; vamos al coro, y fijaos bien en las circuns-tancias en que vamos a recoger nuestro espíritu. En el altar, Je-sús Sacramentado, en el templo muchos ángeles en actitud re-verente, en el Cielo nuestro Padre y muchos hermanos nuestrosempuñando palmas de heroicos vencedores, y la Purísima Madrepresidiéndolos a todos y con ellos contemplando nuestrasluchas; y allí en el mismo coro, al lado nuestro, santos muy vi-

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LA MÍSTICA E

sibles, de carne y hueso como nosotros, pero que ya casi toclncon las manos la corona de la victoria. Estamos obligados amucho.

--Vamos, vamos—dijo conmovido Fr. Tomás—pero antesvoy a decir con el Profeta: Nuc cepi.

Fr. Serapio González Gallego.oup0000c000000000000000000000000000000000c00000000000000000000000000000ue00000000000000

Generalmente se llama místico a todo libro piadoso, y en 11.Viendo que una pert.ona se dedica a la piedad, se dice también Eque es mítica; está bien empleado ese término? -

En cierto sentido lato puede justificarse su uso, pues todo lo Eque sea verdadera piedad y devoción incluye necesariamente laacción oculta de la gracia en el alma, para santificarla y acercarlace icai Dmioisstsua.creador. No hay virtud verdadera que no suponga algo E

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¿Pero debe llamarse mística toda obra de piedad? Nuestralengua tiene palabras diferentes aun para cosas mas difíciles de Edistinguir, y cuando se trata principalmente de obras exteriores Ede virtud en beneficio del prójimo o de ejercicios de penitencia, 5,vale más llamarlos ascéticos; libros ascéticos 'Son aquellos que Eexplican cómo se han de ejercitar tales obras --

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— 207 —

II

San Pedro Nolasco abandonado en alta mar

( Cuadro de Zurbarän )

regla de Cristo Nuestro Señor: Por sus frutos los conoceréis, .12 pues el árbol bueno no puede dar malos frutos.

¿Lxiste ahora el peligro de abusar del misticismo, de que EE huían los autores ascéticos? Peligro remoto o lejano existe siem-

pre; pero ese abuso es ahora menos probable que nunca.¿Por que? Porque los errores de nuestros días van por cami-

no opuesto al de los protestantes antiguos. Los de hoy despre-cian casi en absoluto la gracia y santificación del alma, estiman-do solo las obras exteriores. Los racionalistas y materialistas sontodos de la misma opinión, y hasta entre los católicos se infiltradisimuladamente el veneno del error.

¿En qué se conoce esa tendencia errónea? Es muy visible en E• los que se lamentan del tiempo qee se pierde en la Iglesia ha-• blando con Dios nuestro Señor, pudiendo en ese tiempo hacer

tantas obras buenas. No parece sino que el hablar con Dios es▪ obra mala.

Los que así haban se parecen mucho a Judas, que lamen-taba se gastase «-n el Divino Maestro el ungüento de la Magda-lena que podía venderse en trescientos denarios.

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• ¿Hay algún otro ejemplo palpable de ese error que el enemi-• go trata de imbuir a los católicos? Sí hay, y es consecuencia de• le anterior; el exagerado aprecio de los ejercicios de la vida ac-• tiva, que redunden en provecho de la sociedad, despreciando, por

el contrario, la vida contemplativa.Y eso, ¿qué es? Eso es utilitarismo grosero, materialista, que

• no ve en el hombre más que el cuerpo, y todo lo que no sea

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- 209 --

Aparición de San Pedro Apóstol a NuestroSanto Padre

( Cuadro de Zurbarán )

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¿Qué significa esa palabra? Ascético lo mismo que místico,es una palabra griega que designa lo que es propia del trabajo,del ejercicio exterior.

¿Cuáles son las principales diferencias entre los ascetas y mís-ticos? La más sensible está indicada ya: Los ascetas fíjanse prin-cipalmente en las obras que el cristiano ha de realizar, dan con-sejos muy precisos y detallados para corregir nuestros de-fectos: pero se ocupan menos de lo que constituye la vida delas virtudes, de lo que es el alma de nuestras almas, la graciade Dios, lo mismo la gracia santificante, cuyo aumento es el finde las buenas obras, que las gracias actuales que han de elevarnuestras obras del orden meramente natural-y humano, al divinoy sobrenatural.

Lo contrario hacen los místicos, que sin desdeñar las obrasexteriores piensan mucho en la gracia y hablan de ella continua-mente. Muchos autores ascéticns cristianos hablan de las virtu-des como podría hacerlo un filósofo pagano o un racionalistaguiado s&o por las luces de un entendimiento sano.

¿Según eso los libros ascéticos serán poco estimables?¿De ningún mono; son buenos indudablemente, pero in-

completos; falta en ellos, aunque no del todo, una cosa princi-palísima que había de animar esas virtudes, cuya práctica nos ex-plican y recomiendan; lo que había de enardecer las almas y ha-cerlas correr veloces por el camino de la perfección.

Algunos de los ascetas se excusan de tratar más detalla-damente de las operaciones interiores y ocultas de la gracia enel alma, diciendo que Dios Nuestro Señor las enseña por Sí mis-mo a los que con sincero corazón tratan de servirle; ¿tienen ra-zón en eso?

Que Dios Nuestro Señor guía por Sí mismo a los que deveras le sirven es una gran verdad. ¡Eso es precisamente la Mís-tica!; pero no por ello están excusados de explicarla y hacerlaestimar los que El ha puesto por guías de las almas, y a los quetoma por medio para santificar a muchos otros.

ómo se explica, pues, que sean bastantes los autores pia-dosos que huyen de tratar de Mística? Hubo tiempos en que seabusó de ella y los falsos místicos y verdaderos herejes oculta-ban sus vicios abominables con capa de misticismo. Gran partede los protestantes despreciaban en absoluto las buenas obrasdicienno, que les bastaba poseer la gracia de Cristo, aunque es-tuviesen encenagados en los vicios.

Y la Iglesia, ¿cómo rechazó esa doctrina? Ateniéndose a la

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ULTOS DEL ME DE LNLRO

Día i.°—Circuncisio'n del Señor.—I. P. O. (siempre qué aparezca estaabreviatura, significu: Indulgencia Plenaria de la Orden).

Oficio solemne. Predicará el R. P. Ameno.Día 2.—A las ocho, Misa de Comunión General de los Yueoes _Enea-

risticos.A las seis de la tarde, ejercicio de la Hora SantcY. Predicará el Reve-

rendo Padre Gaite.Día 3.—Primer Viernes. Los ejercicios acostumbrados, predicando el

R. P. Galle.Día 5.—I. O. P. Santísimo Nombre de Yesús..A las seis, ejercicios, predicando el R. P. Ameno.Día 6.—I. O. P. La Epifanía del Señor. Predicará el R. P. Gaite.Día 17.—AbsPlucio'n General de la Orden e 1. P. Después de Nona, se

cantará el solemne Te Deum en acción de gracias por el 684 aniversariode la confirmación de la Orden.

Día O. P. San Raimundo de PefíafortA las seis de la tarde comienza la Solemnísima Novena en honor de

Nuestro Gran Padre y Patriarca, San Pedro Nolasco. Lossermones de la Novena están , a cargo del R. P. Gaite, Rector de este Co-legio. El Panegírico lo predicará el Sr. D. Antonio María Zacarfas Castro,Arcipreste, Párroco de Cedeira.

Día 25.—I. P. O. asistiendo a la Misa Sabatina.Día 31.—Absolurio'n General de la Orden.A las ocho, Misa de Comunión General.A las 'once, la Solemne.

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FE, ESPERANZA Y CARIDAD

La última campanada del reloj en la noche del 31 de Di-ciembre nos indica el fin del ario aterrador de 1918, terminalde los cuatro de horrible hecatombe que ha conmovido almundo, y último también de tres meses de desolación dolo-rosa y cruel. Fueron esos cuatro arios de lucha en los cam-pos de batalla, impuestos por el deber, y esos tres dolorososmeses, lucha también de heroísmos y 'sacrificios, cristiana yvalerosamente ofrecidos a Dios, y por El seguramente acep-tados. Y es, por último, esta hora de fin de ario, la recapitu-lación de todo él, en el cumplimiento de todas las obras, to-dos los procederes y todos los sacrificios, cumplidos al niveldel deber, o acaso muchas veces olvidándolo. Para este exa-men que casi todos, seguramente, hacemos todos los arios¡ qué luces y qué enseñanzas nos dió en el que se concluyóel Divino Maestro, por medio de una aflicción, un castigo,una prueba cruel... de...

LA EPIDEMIALágrimas, desconsuelo, almas traspasadas por el dolor,

por la pérdida de seres amados, vidas segadas en flor, hoga-res derrumbados esto fué el cuadro que se presentó a nues-tras miradas humanas... ¡ Y era terrible.. , pero, cuando losque tanto sabemos de penas, sabemos también de fe ! comoa su clarísima luz vemos caer a raudales las Divinas miseri-cordias, dulcificando aquellas amarguras ; y llevando el con-suelo a nuestros corazones, a la vez que a las almas atribu-ladas en los lechos del dolor, fuerzas para sufrir y esperanzaspara después de haber sufrido.

¡ Ah !, si nuestros \ párrocos, si todos los dignisimos sa-cerdotes, si los padres de las dos Ordenes religiosas que endos extremos tan distantes de nuestro pueblo, cumpliendolos deberes de su Sagrado Ministerio, con un celo que no esposible encomiar bastante, sin retroceder ante sacrificios,

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útil para el cuerpo lo considera vano o malo. No hace muchoque oí decir a un pobre descarriado, que la vida contemp.ativaera inmoral ¡nada menos! Estimaba mucho a las Hermanitas delos Pobres y a las Hijas de la Caridad, por ejemplo, pero sólopor el servicio que prestan; el tiempo que gastan con Dios y en-rificar sus elmas lo consideraba perdido también.

¿Conviene, por tanto, hablar de Mística? Ahora más que nun-ca, pues en tiempo de peste son más necesarias las medicinas.

Cuál es lo fundamental en la Mística? Saber y entender bienlo que es la gi acia, al menos, en cuanto lo permite nuestra ca-pacidad.

Y es fácil comprender eso? Comprenderlo del todo quizásea imposible; pero es mucho, muchísimo lo que se puede sa-ber acerca de ello, y con lo que nos dicen la Sagada Escritura ylos santos se pueden llenar muchos libros.

Fr. Guillermo Vázquez

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E ni de descanso, por apremios de tiempo, ni de dificultades dedistancia, ni • menos del peligro del contagio, que todos huía-

: mos y sólo ellos arrostraban impávidos y tranquilos, en elcumplimiento del deber, si todos estos fervorosos apóstoles

E pudieran hablar ¡ cuánto sabríamos de favores de Dios, yE auxilios de su bendita Madre, cuántas fervorosas contriccio-E nes, y cuántas almas ansiosas de unirse a Dios!

Pero aun sin tocar, ni con el pensamiento, a esos sacra-:. tisimos misterios, pasados entre las almas y los representan-. -E tes de Dios, sólo con lo que ellos han podido y debido decir-

nos, para nuestra 'edificación y ejemplo, y lo que tambiénhemos podido oir de labios de las santas y caritativas enfer-meras, que ofrendando sus vidas por las de sus semejan-tes—alguna subió ya a recibir el premio— !cuánto podría-mos edificarnos nosotros también! Manos temblorosas . pi-diendo el Divino crucifijo, para estrecharlo amorosamentea sus labios y pedirle perdón... escapularios estrechados...apretujados sobre sus pechos oprimidos por la enfermedad;pero almas radiantes de esperanza y enardecidas de amor alcontacto con su bendita Madre... ¡ Oh, qué hermosos, quéconsoladores cuadros de fe y esperanza i ... El representantede Dios perdonando, absolviendo en su nombre y fortale-ciendo a aquellas almas atribuladas, exhortándolas a la con-fianza completa y... 'momentos después... El Divino, ofen-dido, que yp. con miseri r ord ia infinita habría perdonado...bajando a aquel pecho... entrando en aquel corazón, en aque-lla alma, ya tan suya, arrepentida y contrita, y estrechándo-la amorosamente como Padre, antes de presentarse comoJuez Supremo, ¡ cuántos que conocimos y amamos habránsubiido hasta el cielo! Qué triunfante trasporte de almas su-biendo a la gloria en el Divino ascensor de la misericordia ..

Qué victoria para los ángeles.., y... qué horrible derrotapara el infierno!... Porque, no sólo se le habrán ‘'scapado lasalmas privilegiadas, que cercanas siempre a Dios, por sussacrificios, frecuencia de Sacramentos y apartamiento delmundo, ya en el momento de la partida no tuvieron que ha-cer más que entregarse eh los brazos de Aquel a quien siem-pre habían servido, y como Padre amoroso iba a recibirlos;pero también se le habrán Volado al cielo o tal vez— porqueeso sólo Dios lo sabe—a ese lugar de esperanza, brote divi-no de la infinita misericordia de Dios para para consuelo delos que tanto le ofendemos. Almas en que el malvado rebel-

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de contaría hacer presa; porque aunque creyentes fer-vorosamente cristianas, viviendo en el tráfago de la vida, yrodeados de los atractivos que el mundo ofrece, sin preca-verse,tal vez, de sus peligros, con ellos trataría de tenderlessus asechanzas para hacerlos vacilar en la rectitud de susdeberes; pero eran almas piadosas que amaban a Dios, yEI, que no quiere que se le pierda ninguno de sus redimidos—como con furia de réprobo no se le rebele—, las llamó conel golpe de la enfermedad, y resignadas, sin la menor vaci-lación, a la primera indicación de sus cristianas familias, opor propia iniciativa, la mayor parte de las veces, pidiendo yreclamando con ansia, al que en nombre de Dios podía per-donarles y abrirles las puertas del cielo, una vez tranquilassus conciencias ¡con qué esperanza, con qué fe en las prome-sas de Dios se entregaban en sus brazos, y llenas de confian-za le entregaban también a los que amaban e iban a dejar!i qué actos de abandono, qué verdaderas oblaciones sé hanvisto en las luchas de muerte, abandonando con entera re-signación todos los goces legítimos y santos que El, quees dueño de todo, les había concedido !... Verdaderas ense-Fianzas nos dejaron los que amábamos, para que sepamos ira reunirnos con ellos.

Y en todos los medios sociales los mismos ejemplos, idén-ticas enseñanzas. Esos valerosos muchachos—que no sóloPara morir en las trincheras se necesitará valor--primerasvíctimas de la epidemia, muertos en el hospital edificando aSU confesor con su resignación y fervor—tomo él de modotan emocionante lo dijo cuando con ocasión solemne pidióPara ellos sufragio—seguramente ignorantes y sabiendo po-co 'del vivir cómo nos enseñaron la dificil ciencia del bienmorir

¡Pequeño sector de Ferrol; átomo insignificante en lainmensidad del mundo ; qué grande aparecerás en el cieloteniendo a tantos de tus hijos entre los santos !... Benditasea mil veces la infinita misercordia de El que con los bra-zos tendidos en la cruz está dispuesto a perdonarnos tantasN nos acercamos.veces cuántas sean las que verdaderamente arrepentidos a

Después de tratar con tal" pobre pluma tan soberanas vir-tudes como la fe y la esperanza, dos palabras sobre la cari-dad: que de esto también ha sabido Ferrol. _-Dos plumas, no mojadas en tinta, :sino empapadas en elbálsamo de esa sublime virtud, iniciaron una obra, no de

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filantropía ni altruismo, sino de perfecta caridad cristiana,• de las que suben a Dios, y Ferrol, respondiendo hermosa-• mente, 'como responde siempre que a sus caritativos senti-:• miento.s se llama, acudió, hasta donde fué posible, al socorro

E de tantos hogares desolados, a la vez que por la epidemiagrippal, por esa otra epidemia que se llama miseria, hambrey desconsuelo.

▪ A los que con su iniciativa han procurado auxilio a tantasalmas atribuladas, y a las que personalmente acudieron aconsolar esos infortunios, a la vez que con recursos materia-:

• les, con palabras de aliento y compasión. El que 'dijo queno dejará sin recompensa ni un vaso de agua que se dé en sunombre, en las Eternas recompensas se lo contará.

Que no todos los que en aquellos aflilctivos días han me-: reciclo, recibieron ya el premio. Muchas almas que avisadaspor la enfermedad, y con la muerte muy cerca se prepara-

: ban a recibirla con cristiana re .signación—acaso alguna de-:seándola—se han quedado aquí acrecentando sus méritos.Tal vez... el Divino . cosechero que no quiere recoger susfrutos hasta que estén en sazón para presentarse en el ban-

: quete del cielo, los ,dejó para madurar Mejor al sol de la▪ caridad, y el fervor, que en el momento .de la prueba tanto

habían manifestado... tal vez..., para sufrir más... o cumplirmás deberes, tal vez.., pero esto no podemos saberlo ahora..•para después... ¡ para el 'cielo !... Mientras... Bienaventura-

• dos los que lloran !... ¡ El Maestro lo dijo!.ELVIRA CALVO,

Terciaria de la Merced.

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Día i.°--LaCircun-eisión del Señor.

San Severino de Fran-cia.-Mártir. Doctor enTeología y e n ambosDerechos por la Uni-versidad de París. Tuvosiempre gran poder so-bre los demonios, aquienes vencía nom-brando a la Madte deDios. Sus palabras erantan poderosas y per-suasivas, que se convir-tieron muchos gentilesa nuestra santa fé. Su

vida es un dechado de penitencia, pues comía poquí-simo y descansaba sentado sobre una dura piedra,recostando la cabeza sobre el brazo. En Fez y Ma-rruecos fué objeto de la persecución de moros y ju-díos por que predicaba a Cristo crucificado y por la

conversión de un rabino, gran Maestro de la Ley, a quienbautizó el Santo. Concedióle el Señor espíritu de profecía,don de lágrimas y una sublime contemplación, en la quepadecia maravillosos éxtasis. Enviado nuevamente a Argel,corro redoblase el celo de sus predicaciones, le pusieron enuna horrorosa cárcel:en laque sufrió el maltratamiento deaquellos bárbaros. Como perseverase constante en confesara Cristo, dió el Virrey sentencia: de que:lo empalasen. Ca-minaba el Santo al lugar del suplicio predicando en alta vozla 16 de J> es cristo, recibiendo muchos ultrajes. Por fin, des-

ahogando su corazón en mil afectos a Jesús crucificado e implorando laprotección de María, sufrió heroicamente el tormento atado al palo, eudonde expiró alabando el Nombre de Jesús. Lo , moros ejecutaron en elSanto mil crueldades, y últimamente lo quemaron. Desde i.° de Enerode 1419 celebró toda la Orden día tan festivo para ella.

Venerable Catalina de Solaguti.—Primera religiosa del observantísi-mo convento de Orozco, en'donde murió en el beso del Señor, ario 1573,

después de una vida consumada en todo género de virtudes.Venerable Beatriz de Yesiís.—Virgen esclarecida, de gran oración y

humildad profundísima, que recibió muchas consolaciones del Niño Jesús,que se comunicaba familiarmente con ella. Su vida es digna del aplausode la posteridad y su muerte fué la de los santos.

Día 2.—Beato Guillermo de Loarte.—Doctor en Teología, de cuya Fa-cultad fué lector con gran provecho en Huesca. Padeció con gran resig-nación las persecuciones de sus émulos, En Granada rescató a 6o cauti-

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vos, y en dicha ciudad se quedó en rehenes sepultado en una hedionda E

el gozo de la visión del Serinr».

rribles tormentos que había padecido en el cautiverio, llevándole nuestro

santo en la tierra. De él dice el antiguo Menologio; «El Beato Guiller-mo buscó la ciencia de los antiguos, interpretó a los profetas y entró en

Señor a descansar a mejor vida, dejando nombre y opinión de grande

morir de unos dolores muy grandes en los huesos causados por los ho-

vina ser llegado el día de s tránsito, mostró grande alegría para morir,

maestro de tantas ciencias y artes, edificando a todos los que le vieron

primos del Rey, que huyendo a Córdoba vistieron nuestro hábito y per-

ejemplar. Llevaba cadenas de hierro a raiz de las carnes y pasaba losdías y las noches en alta contemplación. Conociendo por inspiración di-

mazmorra por espacio de dos arios, Allí bautizó a Mahom ad ya Alizahen,

severando en el rigor de la vida monástica tuvieron dichoso fin y muerte

« haciéndose discipulo de todas las obras de virtud el que había sido

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Venerable Ana de la Cruz.—Despreciando un rico patrimonio, siguióa Cristo, pobre y humilde, y por sus h-roicas virtudes se vió precisadaa gobernar el re l igiosísimo convento de la Asunción de Sevilla, de cuyoMonasterio fué largo tiempo Abadesa hasta el día en que pasó de estaVida mortal a gozar de los imperecederos bienes de la eterna.

Día 3.—Beato Gillermo Vives.—XIV Prior de Barcelona. Defensor delas inmunidades y exencione de la Orden, mostrando en todo una ad-mirable prudencia y afable mansedumbre de que Dios le había dotado,rigiendo el Priorato por espacio de trece arios con asombrosa integridad.En vida llamáronle -Venerable» y en la muerte aclamfironle Santo.

Día 4.—Venerable Luis de Hales.—Sabio teólogo y eminente cano-nista. Animado de fervoroso celo y caridad recorrió los países domina-dos por los sarraceno-, visitando cárceles y consolando a los pobres cau-tivos, dando libertad a 358 cristianos. Fué recibido en el Paraíso en 4 deEnero de 1271, en donde goza en compañía de todos los santos la coronaeterna de sus muchos y apostólicos merecimientos.

Venerable Clara de Ugarte.—Virgen de esclarecidas virtudes y unade las primeras religiosas del Convento de Orozco, en donde murió san-tamente.

Día 5.—Venerable Dionisio Anmalio.—De noble familia francesa, fu6en el claustro espejo de modestia e ideal de toda santidad. Rescató enTúnez a 13 0 cautivos cristianos el ario 1360, y después de una vida todadivina, acabó sus días en el Convento de Montblanc, con gran fama debienaventurado.

Venerable Gaspar de Torres.—Obispo de Madauro. Honor de su sigloY padre de la modestia, varón prudentísimo y doctísimo. Regentó Cáte-dras de diversas facultades en 11 Universidad de Salamanca por espaciode más de treinta arios, dándole, además, leyes, 9tatutos y constitucio-nes tan acertadas, que Felipe II mandó cumplir por real decreto. El san-to canonista apoyó el derecho del piadoso Monarca al reino de Portugal.Pué muy amigo de San Pío V. La provincia de Castilla le hizo su preladoY es el XX de los Provinciales. Verdaderamente escogido por Dios paraconvertir almas, en la fé pasó al Nuevo Mundo. Hizo diversas misiones,saliendo de Quito a las provincias de los Cayapas y Barbacoas.., entrandotan ajeno de comodidades que iba a pió, y a veces descalzo, sin cama,ropa, ni prevención de sustento alguno; toda su compañia y consuelo eraCl breviario y una imagen de la Madre de Dios. Con su predicación yVida ejemplar, redujo innumerables pueblos a las sendas del Evangelio.Después volviendo a los suyos y en edad muy avanzada entregó al Señor

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su alma en la ciudad de Sevilla el ario 1589 y fué honoríficamente sepul-tado en el Convento de la Asunción.

Día 6.—La Epifanía del Señor.San Raimunde de Blanes.—Protomártir de la Orden. Uno de los pri-

meros que recibieron el hábito de manos de nuestro Padre San PedroNolasco. «Cuán grande haya sido la santidad de este hombre admirablesin dificultad se conoce en haberle Dios señalado para que fuese el pri-mero de los mártires de nuestra. sagrada Milicia, y el primero que encumplimientb de su santa profesión dejase la vida en las manos de losenemigos del nombre cristiano. Padeció martirio en Granada el ario 1235habiendo venido a hacer una redención en ella, por mandato de nuestroPadre, que le profetizó cuanto .había de sucederle, y los medios por don-de había de alcanzar la corona y palma que hoy gloriosamente posee.Después de tenerle encerrado en una oscura cárcel cargado de grillos ycadenas, viendo los moros su invicta constancia en confesar a Cristo, lle-váronle a la plaza pública y, después de traspasar su cuerpo con agudassaetas le cortaron inhumanamente la cabeza. Con este martirio abrié-ronse le al atleta de Cristo las puertas del Cielo.

Día 7.—Venerable Leandro de Murcia. —Sa bio Maestro en SacraTeología y versadísimo en las Santas Escrituras, peritlaimo en las len-

E guas latina, griega, hebrea,, arábica, caldea y aramea. Escribió muchoslibros de celeste doctrina en buena prosa, y elegantes versos sagrados.Con poder preciarse de tantos dones como Dios le comunicó. tuvo ensumo grado el de ser humilde de que dejó muchos y asombrososej emp los.

Venerable Leonor de Yeszís y Maria.—Tu yo siempre singular devo-ción al Niño Jesús, ante cuya imagen se quedaba absorta. Dotada de unbuen natural y de una rara mansedumbre, jamás mostró ni la más míni-ma impaciencia. Su muerte diehosa fué en Madrid el ario 1676.

Día 8.—Venerable Diego de Buenaventura.—Floreció en el Conventode Cazorla este santo maestro de virtudes, con quien estaba ufana y

: rica toda Andalucía, por la luz y claridad de sus loables costumbres y: por los milagros que Nuestro Señor obraba por su intercesión.E N Venerable Baltasar Benavente, Obispo de Potenza.—Norma de pre-

lados y celoso predicador del Evangelio, padre de los pobres e insignebienhechor de los necesitados y propagador de la devoción de NuestraMadre, que le consoló en su dichoso tránsito.

Venerable Yacobela.—Una de las Santas fundadoras del Convento deAlan ón, al cual legó el fervor de su espíritu y dejó el ejemplo de subli-mes virtudes de pureza, silencio y humildad.

Venerable Angela María de la Asuncio'n.—Fayorecida visiblementepor el Cielo, trabajó mucho por los aumentos espirituales y temporalesdel muy observante Cohvento de la Encarnación de Santiago, en dondereposan sus restos mortales.

Venerable Adriana de San Gabriel.—Virgen que ilustró con su ejem-plar vida el religiosísimo Convento de Orozco. Amantísima de NuestraMadre, ante cuya sagrada imagen se extasiaba con tierno afecto. Voló sualma al Cielo dejando en la celda en que murió, olor, de suavísimafragancia.

Día 9.—Venerabfe Yustino de San Leonardo.— .-Maestro en Teología,tan excelente predicador, tan lleno de espíritu y fervor del Cielo y de lahonra de Dios, que no había ninguno que lo oyese sin enmendarse y re-ducirse a penitencia, porque eran tan eficaces sus palabras, que poníatemor y espanto con ellas a los de mayor corazón y ánimo.

Venerable Pedro Ricaudón.—Pasando a Argel en 1662, recorrió día ynoche los Barios, instruyendo, consolando y confesando a los cautivoscristianos. Después de rescatar a muchos, volvióse a su Convento deBurdeos, en donde acabó santamente los días de su vida.

Día to.—Venerable Raimundo del Fosso .—Recomendable a la posteri-dad, por su vida de oración y desprendimiento. En 1486 rescató en Ma-rruecos a 140 cautivos, y pasando a Argel en 150 0 , dio libertad a 8o queestaban en peligro de apostatar.

Venerable Yuán Calvo.—Varón eminente en las lenguas árabe,hebrea, griega y latina. Paso dos veces a Argel, y en una de ellas senten-ciáronle a morir quemado por haber salido a la defensa del nombre deCristo, contra un moro que blasfemaba, sentencia que conmutaron enotra, apaleándole tan bruscamente, que le dajaron medio muerto. Con-servole el Señor la vida un poco de tiempo, y volviendo a los suyos, en-tregó su alma a Dios.

Día I.---Venerable Rosa Fernanda del Santísimo Sacramento.—Mo-delo de almas enamoradas de la Eucaristía. Murió el ario 1708 en eiConvento de San Fernando, de Madrid.

Venerable liana de San Pedro Pascual.—Que en el mismo día, en elmismo año y en el mismo Convento, pasó a recibir la corona de sus vir-tudes y méritos.

Día I2.—Venerable Bernardo de Plano. XVI Maestro General—Lumbrera de Santidad y espejo de clarísimas virtudes, amante de la pazy muy venerado por su sabiduría, por su caridad para los cautivos y porsu celo de la gloria de Dios. Su muerte fué acompañada de varias seria-les, y su bendito cuerpo sepultado en el Convento de Perpignan, el ariode 1419.

Venerable Clemencia de la Santísima Trinidad.---Fundó el Conventode Lora, plantel de vírgenes gloriosas. Después de una vida inocentísi-ma fué llamada por el Divino Esposo a descansar de sus trabajos, en elario 161o.\ Día 1 3.—Beato Mateo de Lana.—Santo Varón y Siervo de la Virgen

María, gran confesor y celoso misionero, que recorrió todo Aragón pre-dicando y reduciendo a penitencia a rudos e ignorantes, mereciendopor su infatigabln caridád el titulo de Apóstol de aquel reino. Celebran-do una noche de Navidad el Santo Sacrificio, descendió sobre su cabezauna hermosa y resplandeciente estrella que iluminó todo el templo.Tuvo noticia de su muerte, que fué en el Olivar, donde fueron deposita-das sus reliquias en una urna honorífica.

N7- Venerable Raimundo de San Francisco.—Dotado de una adn- irabledulzura de carácter, concilióse los ánimos de los grandes y de los humil-des. Era tal su modestia y devoción cuando celebraba el santo sacrificio,que parecía transfigurarse. Murió invocando a Nuestra Santísima Madreen Granada, el ario 1603.

Venerable Alonso Tellez. Maestro de Novicios.—Santo religioso ygran padre de espíritu, que dirigió por los senderos de la más emcum-brada perfección a los religiosos de Lima y de Quito, en donde vió elfin de sus días en buena vejez y. con aclamaciones de bienaventurado.

Día t4.—Beato Guillermo de San Apareciösele la Virgen y lemandó vistiese nuestro hábito. Su ciencia parecía infusa y era visible enM. la asistencia del Espíritu Santo. Redujo a penitencia a muchos peca-dores especialmente a mujeres disolutas y atrajo a nuestra fe a un sin-número de infieles. Pasaba las noches en oración, y en obras de caridadlos días, Su muerte fué llena de maravillas y misterios, pues cantando el

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- salterio para prepararse a ella, se oían algunas voces que le respondíany ayudaban a rezar. Al fin del salmo CL al decir: Gloria Patri et Filio

▪ et Spiritu Sancto, expiró placidamente.• Venerable Catalina de la Visitacidn.—Virgen favorecida con sigula-• res mercedes del Cielo a cuya mansión voló, en el Convento de Orozco• en donde perdura aún la fragancia de sus muchas virtudes.▪ Día r 5.—San Diego de Soto, Mártir—Recibió el hábito de manos de

San Pedro Nolasco el mismo año de la fundación de la Orden. Su vida-:- en el claustro fué tan admirable, que obligó a todos a que aún Viviendo:: en carne mortal, le diesen conmunmente el título de Santo; pero con su: gloriosa muerte, de tal manera se dilató su fama, que todos le veneraban-: como a un Santo canonizado. Habiendo ido el glorioso Mártir, por orden: de nuestro Santo Patriarca a redimir cautivos, al volverse con los redi-

midos, cayó en manos del alcaide moro del Castillo de Taxarxa, que: maltrató a aquellos que acababan de recobrar su libertad, y sepultó en: una cárcel al invicto confesor de la fé. Instábanle a que renegase del:: nombre de Cristo, pero ni halagos ni amenazas pudieron distraer su

constancia. Mandó entonces el moro que le golpeasen en la boca y que-:: con hierros candentes le rayeran el cuerpo. Más Diego entonando el: cántico de Ios niños del horno de Babilonia mostrábase alegre en medioE de tantos tormentos. Lleváronle de nuevo a la mazmorra en donde pro--: siguió dicho cántico, y timando dos maderos que encontró en la prisión,: formó una cruz, y abrazándose a ella cantó con más dulzura el verso:-: '«Bendecid todos los religiosos al Señor Dios de los Dioses...» y expiró: placidamente. Fué su martirio a 22 de Noviembre de 1237 y los antiguos:: menologios de la Orden hacen su conmemoración en ambos días.

Venerable Agustín de Jesds y María.—Varón penitentísimo y lleno:: del espíritu del Señor. Murió con gran opinión en Madrid, el ario 1674.: Día t6.—Venerable Yuana de la Pasidn.—Llena de virtudes y dones-

sobrenaturales, afianzó la vida eterna al dejar la temporal. Fué su Muerte-:: el ario 1661 y está enterrada en el Convento de Toro.: Día 17. Aniversario de la Solemne Confirmación de la:- Orden.—E1 Papa Honorio III aprobó y confirmó de palabra vivce vocis:- oraculo nuestra Celeste, Real y Militar Orden a petición del Rey donE Jaime I, y Gregorio IX en el año 1235 que es el octavo de su pontificado,: confirmó solemneMente la Orden a ruegos de San Pedro Nolasco por la: bula Devotionis vcstrce, expedida en Perusa el 17 de Enero de dicho ario:- y entregada a San Ramón Nonnato que entonces era Procurador Gene-:- ral de nuestra Sagrada Milicia.: Venerables Miguel de Santa María y 7uan de, Santa María.—Muy:- parecidos los dos en la virtud y dones sobrenaturales de milagros y pro-:: fecías e imperio sobre los demonios. Convirtieron muchos millares de- indios y fueron tenidos en vida y muerte por Santos.-: -,. Día t8.—Beato .'Juan del Yerco, Patrón de los Navegantes.—Muy cur-▪ sado en las Santas Escrituras cuyas verdades meditaba día y noche. Con-:- su buen exterior, antes de,empezar a predicar movía los corazones exci-:_ tändoles a compasión. Ejercitaba su caridad en hacer bien a la gente de: mar, especialmente curando sus enfermedades, dándoles limosna e ins-- tando a los capitanes de los bajeles para que aliviasen en algo a los qu e-: estaban condenados a trabajos forzados y aconsejándoles evitasen la fa-:- miliaridad con los infieles que venían en las galeras al remo. Las frecuen-: tes apariciones y milagros le aclamaron Santo en tanto grado, que cre-:: yéndole entre los bienaventurados, invocáronle unos holandeses en pe-: ligro de naufragio, y el Beato, apareciéndose, calmó la tempestad. Al-:- gmumummilm1111111111 111111 111111111111511111~11181111111.~11811111111111~1 101 1--

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llegar a Barcelona preguntaron los pasajeros por su sepulcro para de-positar sus exvotos de cera, oro y plata, pero aun vivía el Siervo de Dios,a quien los agradecidos devotos preguntaron por sus reliquias y altar, yal ver que no era muerto, cobráronre mayor cariño y devoción, colocan-do su efigie en el navío, extendiéndose la fama de sus portentos porItalia, Francia y Alemania. Predijo su muerte, y pasados algunos añosen rigurosa austeridad y en la contemplación de la bondad divina, en-tregó su hermosa alma al Señor, diciendo al expirar: Inmisit in os meumcanticuni novum, quedando su rostro lleno de resplandores y la celda conOlor de inefable fraganch.

Depositaron sus restos mortales en el Convento de Santa Eulalia, deBarcelona.Día 19.—Beata Isabel de Bertini, Vda.—Renunciando un fabuloso pa-

trimonio en favor de los pobres, vistió nuestro santo hábito el 15 deAgosto de 1265, distinguiéndose por su espíritu de laboriosidad despuésde vacar a la oración, en la que mereció singulares favores de Jesús y deMaría. Asistía al Hospital de los eautivos para curar sus llagas y aliviarsus penas. Al fin, sin enfermedad alguna, llevósela el Señor al Paraíso,

E dándole la inmarcesible corona de los santos.Día 20. —Venerable Bernardo de Poneellis.—Dirigió por los senderos

; de la virtud a la Virgen Santa Natalia, de Tolosa, en cuya ciudad llenóde días y méritos trocó esta vida corruptible por la eterna.

Z' Venerable Francisco de .Bolaños.—Adornado con los dones del Espín--.;

▪

tu Santo y enriquecido con grandes carismas de la divina gracia,.btiscó el1- aumento de estos tesoros celestiales en el silencio y en la soledad. Sus

milagros le hicieron acreedor a los honores de bienaventurado, de los; que disfruta desde su preciosa muerte, acaecida en Quito el ario 1786.Día 21.—Conmemoración del nacimiento de la Beata Mariana de Yesiís.• —Virgen devotísima del Sacramento del Altar. Su festividad se celebra• el 17 de Abril, por decreto del Pontífice Pío VI.

Día 22 . — Venerable Yacinta Ignacia del Eterno Padre.—Vivió unavida toda entregada al amor de Dios, en cuyos incendios se abrasaba su

• alma, 45lima,p7yf. ué su muerte dichosa en el Convento de San Fernando, ela

Venerable Raimunda Tátia.—Terciaria que dejó en la ciudad de Va-;

•

lencia singulares ejemplos de todas las virtudes, especialmente en el fer-• voroso amor a Jesús Sacramentado, ante cuya soberana presencia pade-cía amorosos deliquios, quedándose arrebatada en maravillosos éxtasis.17: Murió colmada de las bendiciones de Dios y de los hombres a la edad de• 88 arios, y fueron depositados sus restos en sepulcro especial con gran-11. des muestras de veneración.

Día 23.—San Raimundo de Pehafort.—Iniciado en las letras divinas y; humanas, leyó, siendo aún muy joven, Derecho, en la Universidad de• Bolonia. En 1215 nombróle Canónigo de su Iglesia el Obispo de Barce-lona, y en 1218 tuvo la misma y gloriosa aparición y•mandato de la VirgenI; María que en la misma noche memorable del 1 al 2 'de Agosto tuvieron. San Pedró Nolasco y el Rey de Aragón, D. Jaime, de fundar la Orden de

Santa María de la Merced de los Cutivos Era el Santo confesor de PedroNolasco y del Rey, y comunicándose los tres la feliz aparición, realizaron11 los designios de la Reina del Cielo el o de Agosto del mismo año. Abra-zo más tarde Raimundo el hábito dominicano, y en 1230 se dirigió a Roma

Por mandato de Gregorio IX y allí compiló las Decretales. Rehusó por; humildad el arzobispado de Tarragona que le ofrecía el Pontífice, pero.«

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o pudo excusar su elección al Supremo Maestrazgo de su Orden, que

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'gobernó con sumo acierto por espacio de dos años, procurando su aumen-▪ to y coordinando las Constituciones' de sus dos predecesores. RenuncióE el generalato, que sólo por obediencia había aceptado, retirándose alE Convento de Santa Catalina, de Barcelona, donde terminó su preciosaE vida llena de méritos y de días, pues contaba cerca de ioo años cuando

abandonó esta carrera mortal para volar al Cielo, deSde donde vela por•T su Orden e intercede por la nuestra.• Venerable Yuan Infante.—De santas y acrisoladas virtudes, que pasóE por Capellán de la primera Armada que el Almirante Cristóbal ColónE llevó a América. Celebró la primera misa tomando posesión con la Hostia-: Consagrada, en nombre de Cristo y su Iglesia, de aquella dilatadísima- parte del mundo, coito se lee en la inscripción latina que en el Convento• de Xerez tiene su imagen.• --- Venerable Bernardo de Bochorques.—Creció de virtud en virtud hasta

llegar a altura grande de perfección: en nada se le conoció voluntad pro-:

▪

pia, y su caridad era sumamente ardentísima: jamás se desnudó siuo para• lo forzoso de la limpieza; ririóle en una gravísima enfermedad, viéndole▪ vestido y calzado el médico, y él respondió: «Esta es la senda por donde

me guía al Cielo mi Constitución; no tengo, por un año o dos más de vida,• de desviarme del camino.» Fué celosísimo de la conversión de los infie-

les y logró hermosos resultados. En tiempo de contagio pestilente entre-E góse al servicio de los enfermos, y habiendo obrado Dios por él muchas

maravillas, premió Dios su caridad llevándosele herido del mismo acha-que a las mansiones de la gloria. Fué su muerte en Castro-Virreyna, en

Día 24.—Venerable Felipe de Guimerans, Obispo.—ne santas y loa -

bles costumbres; fué el primero de los Provinciales de Valencia cuandose separaron de dicho reino los Conventos de la corona aragonesa.

Es el XXXVII de los Mae.-tros Generales de la Orden que gobernócon gran celo y discreción. Admitió al hábito a la Beata Mariana, impo-niéndoselo él mismo; profetizó la Santidad de esta esclarecida Virgen.Nombrado Obispo de Jaca, fué dechado de sencillez y humildad hasta eld a de su muerte, que fué a 24 de Enero de 1617, como él siervo deDies había profetizado.

Venerable Gregoria de Yesús y Maria.—Fué una de las primeras re-ligiosas que perfumó con sus heroicas virtudes el Convento de Alarcónen donde falleció el año 1656.

Día 25.—Venerable Leonor, Reina de Aragón, Terciaria de la Orden—Que fué de los primeros terciarios que vistieron el escapulario deMaría de la Merced, por cuya intercesión se vió libre de muchas tribula-ciones que sufrió mientras duraron, con ejemplares muestras de pacien-cia y humildad. Fué devotísima de la Santa Cruz, y tuvo una muertehermosa a los ojos del Señor.

Venerable Miguel. de las Llagas.—Devotísimo de la pasión del Señor'y embellecido con ricos dones sobrenaturales que solía manifestar conseñales milagrosas, exc -lente en santidad y muy favoi ecido de la Em-peratriz de los Cielos. Trabajó mucho en dilatar la Orden, y coronó ClSeñor sus anhelos con felices resultados. Murió con gran fama de Santo,en Mesina (Sicilia), el año 1618.

Venerable Yuana de Cristo.—Virgen penitentísima que desde susmás tiernos arios se consagró al Señor, corriendo alegremente por lassendas de los Santos hasta llegar al fin de su carrera, recibiendo del

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i."▪ donde se conserva incorrupto, habiendo Dios obrado muchos milagrospor su intercesión.

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Esposo la diadema de la inmortalidad, el ario • 1616, en el Convento de :-• Fuentes. :

ii Día 26.—Venerable Armado de Prades.—Escogido or S Pedro --. Nolasco para la redención de cautivos, pasó en 123 -3 a Valencia, y entre;• mil penas y trabajos, zozobras y angustias santamente sufridas, logró.• arrancar de la esclavitud a 197 cristianos.:.

•

Venerable Claudio de San Román.— Enviado a Marruecos en 1321; trabajó denodadamente en la salvación de las almas, con versión de los• infieles y redención de cautivos. Como era muy sabio, de hermosa pre-

sencia y gran predicador, captose las simpatías del Rey Miramolín que le; concedió mucha libertad a despecho de los moros, mosirándosele muy,%.• amigo. Rescató muchos cautivos, vivió santamente y su tránsito fuéfelieísimo.

. Día 27.—Venerable Gonzalo Díaz de Amarante.—Lego Santísimo,

.; llamado a la Orden por la Virgen María que se le apareció muchísimas: veces en el curso de su vida; humilde, abstinente, casto, penitente, ador-

nado del don de profecías, obrador de innumerables milagros, terrible a•

•

los demonios, amable a los Angeles que frecuentemente se le manifes-E taban y conversaban con él; socorría a los pobres, atendía a las necesi-

dades y miserias de los indios instruyéndolos en los misterios de la re-::• ligión. Ilustrado del día de su muerte, preparóse a ella con gran gozo,r,

• v

olando al Cielo el 27 de Enero. El Arzobispo de Lima colocó el cuerpo: del siervo de Dios, en el Convento del Callao, en donde se conservan; sus venerandos despojos.

.. Venerable Pedro de San Antonio.—Que después de una vida en todo: ajustada al rigor de la disciplina monástica, murió en Lora del Rio el; ario 1610 con tódas las señales de predestinación..

•

Venerable Teresa de Santa María de Cervellózz.—Oue se santificó en:• el Convento de San Fernando, de Madrid, en donde murió el ario 1756,: dejándonos ejemplos de su inculpable vida.

. ,

.

•

Venerable Lucia. —Virgen dotada de inestimables dones del Cielo y-: tan devota de la Reina de los Angeles que andaba absorta en la contem-plación de los misterios de la Augusta Madre de Dios, cuyas imágenes

Zla llenaban de santa alegria. Oraba incesantemente por los pobres cauti-., vos y era un dechado ejemplarísimo de humildad. Nació para la gloria

e eterna el ario 1700, en el Convento de la Asunción de Sevilla.I., ... . Día 2 8.—Venerable .7uan de Medina.—Doctor en Santa Teoiogía,

Insigne en todo género de virtudes, que enviado al Africa, se hubo concgrriasht i apnaocise.ncia

entre los moros, y sacó de la esclavitud a 159 cautivos

• Venerable Diego de Luna.—Pasó al Africa el ario 1471 y allí predicócon gran fervor la' buena nueva a los infieles y rescató a un crecido ral-

11 mero de cautivos cristianos..

•

Día 29.—Venerable Melchor de los Reyes.—Adornado de angelicalescostumbres, resplandeciendo por su pureza y candor, grande contem-

; ,P lación, asiduidad a los divinos oficios y por sus muchas y ásperas mor-1....; dtiofiscaccaitoitniuos.s.Redimió en Argel en el mes de mayo de 1653, a trescientos

.

•

Venerable Lorenza Marz'a de la Trinidad.—Vistió nuestro santo há-

.

bito en el Convento de San Fernandó, en donde perseveró con gran fer-avlorreeinnosuetperrnopoósito, hasta que el Señor fué servido llevarla a descansar...

.4 ,• Venerable María de la Asuncio'n.—Devotísima del deifico Corazón deJ:: esus cuyas alabanzas traía siempre en sus labios. Dejó este destierro en7:11

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el mismo Convento de San Fernando, en el mismo día y mes, pero noen el mismo ario.

Dia 3o.—Beato Ferrario el Angélico.—Así llamado este bienaventu-rado lego por el candor e inocencia que se reflejaba en todos sus actosy por la asistencia que le dispensaban los espíritus celestiales. Por hu-mildad y sencillez santa, por el desprecio de sí mismo, por rotos y vileshábitos, pobre celda, cama en el suelo, mortificación continua, oraciónprolongada y trabajo sin descanso, llegó a una santidad muy elevada, re-cibiendo señalados favores del Señor por su pronta obediencia, especial-mente al partir de esta vida temporal que fué seguida de grandes mis-terios, presagio del alegría grande con que la recibían en las eternasmoradas.

Día 3 1.--San Pedro Nolasco, Patriarca dela Orden.--Hijodc nobilfsima familia francesa emparentada con la Casa real de aquellanación. Ya desde la cuna fué objeto de las divinas bondades, puts unenjambre de avejas volando a su mano derecha dejó en ella un panal demiel, presagio de la dulzura y caridad de su alma inmaculada. Educöseen un Monasterio cisterciense hasta la muerte de -su padre. Muerta sumadre, vióse heredero de cuantiosos bienes de los que distribuyó buenaparte a los pobres.

Encerrado en su Castillo solitario de Recando, dedicose con su pri-mo hermano Arnaldo de Carcasona a una vida más de cenobita que dehidalgo, rezando el Oficio Divino y orando con gran fervor, viendo mu-chas veces a su lado a su angel custodio. Viendo su país perturbado porla herejía albigénse, vendió su patrimonio y se encaminó a España, visi-tó el Santuario de Monserrat donde permaneció muchos días en oracio-nes, vigilias y penitencias, pasando después a Barcelona. Allí, estandouna noche meditando se le apareció la Virgen, serena y apacible, vesti-da de blanco y rodeada de Angeles, mandándole fundase la Orden deSanta María de la Merced de los cautivos. La misma aparición y man-dato tuvieron D. Jaime I de Aragón y San Raimundo de Periafort, en-tonces canónigo y confesor del Rey y del Santo. A ro de Agosto de 1218pusieron por obra el mandato del jelo, vistiendo San Pedro Nolasco ysus Santos trece compañeros blancos hábitos, predicando en la ceremo-nia San Raimundo, oficiando de Pontifical el Obispo D. Berenguer Pa-lou y asistiendo D. Jaime, la nobleza y el pueblo.

Algunas noches después vió a la Virgen vestida con el hábito de laOrden bendiciendo los dormitorios. Premió la divina Señora el fervordel Santo, apareciéndosele la noche del dos de Febrero del ario siguien-te cantando con los Angeles el Oficio de la Inmaculada. Deseando visi-tar los sepulcros de San Pedro y de San Pablo, apareciósele el Príncipede los Apóstoles, diciendo, venía a consolarle ya que él .no podía ir averle. Hizo muchas redencidnes dando libertad a millares de cautivos.Profetizó al Rey Conquistador la toma de Valencia y Murcia, y como ha-bían de ser cristianas dichas ciudades. Honriironle con su amistad SanFernando, San Luis de Francia, Andrés de Hungria, Santo Domingoy San Francisco. Tuvo maravillosas visiones como la del Olivo, la de laSanta Jerusalem y la de las siete estrellas del Puig. En 1241 renunció elGeneralato, designando para sucederle al Beata Guillén de Bás. Siendoya muy viejo y no pudiendo a veces encaminarse al coro, llerábanle losAngeles. Al fin de sus días apareciösele San Ramón declarándole quepresto recibiría el premio eterno, noticia que confirmó la misma Empe-ratriz de la Gloria, señalándole la noche del veinticuatro de Diciembrecomo término de su carrera mortal. Preparose con oraciones y lágrimas,

224 -

y llegada la Vigilia de Navidad de 1256, después de recibir la Ericarestír,abrazándose a un crucifijo, pronunció en trasportes de júbilo celestialestas palabras: «Mandó el Señor a su pueblo la redención» dejando estedestierro para triunfar en el reino eterno.

Fr. Amerio S. Blanco.00000000000000000000000000000o 0 oo 0 000000000000000000000p00000p000000000000000poope00000

SECCIÓN DE NOTICIAS

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Novenario solemne.—Lo fué el celebrado, desde el día 9 ennuestra Iglesia en honor de la «Inmaculada›; los sermones, que han sidouna exposidón del « Magnificat», estuvierdn a cargo de nuestro P. RectorR. P. Gaite. Las señoritas García Restrevada y Patiäo Veiga, Camarerasde Nuestra Santima Madre, han recibido muchos y muy merecidos plá-cemes, al que unimos el nuestro, por el exquisito gusto que una vez máshan demostrado en el adorno del altar.

En acción de gracias.—Se cantó una misa en aeción de graciasPor haber recobrado la saiud el R. P. Ameno, moderador de la V. O. T.de la Merced.

Peregrinación al Puntal.—Aunque sin ostentación, merece con-signarse como uno de los números más atrayentes de nuestras fiestascentenarias la Peregrinación que el día 5 de Diciembre hicieron nuestrosTerciarios al vecino Santuario de la Merced, del Punta', en donde comul-garon en la misa que se ha celebrado, rezaron el Santo Rosario con lasPreces a Nuestra Santísima Madre y concluyeron con el Himno de leOrden Tercera. Regresaron a pié, rezando el Rosario.

Los Padres del Corazón de María.—Han escrito una brillan-te página con la celebración del grandioso Novenario a su Augusta Pa-trona. El templo ostentaba una brillantísima iluminación eléctrica. Predi-có elocuentemente y con un celo verdaderamente apostólico al R. P. Fer-nández, de la residencia de Baltar, y el Panegírico estuvo a cargo delP. Gaite, Rector de este Colegio. Una de las notas más conmouedoras fuéla parte musical, que dirigio el virtuoso P. Zarantón y que fué interpre-tada con maravilloso acierto y maestría por el pueblo. Nuestra Comuni-dad ha estado representada en estos cultos. correspondiendo a la cariño-sa invitación de los Padres Misioneros. Nuestra enhorabuena a todos yl in gularmente al P. Alonso Director de la floreciente Archicofradía delInmaculado Corazón de María.

Sufragios.—La V. O. T. de la Merced, la Asociación de los Jueves5-ucarísticos, Roperillo y Escuelas Dominicales han celebrado en estaIglesia sufragios por el alma del hermano de nuestro amadísimo Prelado.LA MERGED se asocia a la pena del celosísimo y virtuoso Obispo deMondoriedo., En San Francisco.—La Novena que las Hijas de María hán cele-orado en honor de la Inmaculada ha resultado muy brillante, siendo muyelogiados los sermones pronunciados por D. Cipziano Tapia, acerca de'Las Bienaventuranzas».

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San Martín del Porto.—Con objeto de ultimar algunos detallesreferentes a nuestra T. O„ ha estado en esfa feligresía el R. P. Ameno.

En Cedeira.—Tomamos de «El Correo Gallego» del día 7 de Di-ciembre la siguiente crónica enviada de aquella importante villa: «Solem-nísima resulta la Novena que en honor de la Inmaculada están celebran-do las Hijas de María de este pueblo y en la que predica el elocuentísi-mp orador Mercedario R. P. Gaite, Rector del Colegio de Ferrol. Tene-mos «cuatro» ejercicios diarios distribuidos de la siguiente manera:

«A las seis de la mañana, está el Padre Gaite en el púlpito para dirigirlos cantos populures, Ejercicio cotidiano y Plática que predica mientrascelebra la Santa Misa el Señor Cura Párroco.

A las diez, Catecismo a los niños que asisten con verdadera avidez.A las doce, una conferenda a las Hijas de María.A las seis de la tarde, la Novena solemne.A todos los ejercicios asiste numerosfsima concurrencia, hasta el ex-

tremo de ser insuficiente la capacísima Iglesia para contener a todos losfieles, a pesar del orden con qift se colocan, obedeciendo las acertadasdisposiciones del Padre.

Desde el segundo día fué tal el concurso de fieles al confesionario,que se hizo preciso traer confesores de fuera, y cada vez en aumento.

Hoy tenemos la Vtgilia de la Adoración Nocturna. Asiste gran núme-ro de adoradores, y todo el púeblo, ávidos de oir al Padre en la explica-ción de las verdales eternas, que es la materia preferente de sus elo-cuentes sermones.

Proyecta el Padre Gaite un solemnísimo Rosario de la Aurora. y contal motivo reina gran entusiasmo en la villa y su comarca, prometiendodejar recuerdo imperecedero.

Podemos afirmar, sin temor a equivocaciones, que esta Novena supe-ra en fruto a muchas Misiones al menos así lo hace esperar el entusias-mo, cada vez en aumento.—E1 Corresponsal.»

Noticias que últimamente hemos recibido, confirman la anterior cró-nica: el Señor Cura Párroco en su viaje reciente a esta ciudad nos dijoque el día de la Inmaculada han comulgado «mil quinientas veintiocho>personas, de ellas más de «seicientos hombres».

El Rosario de la Aurora, que salió de la Iglesia parroquial a las cincode la mañana del día 7, fué una manifestación como no se recuerda enaquella villa, comulgando después cerca de mil personas, Nuestra en-horabuena al celosísimo Don Antonio M. Castro Prieto, Cura Párroco yDirector de las Hijas de María, de Cccleira.

En el Socorro.—Solenroísíma ha sido la función que se celebróen honor a Santa Lucía. El panegírico y sermón de la tarde los ha pro-nunciado el R. P. Gaite.

En las Escuelas Dominicales.—Hermosa ha sido la fiesta quese celebró en la Escuela principal del Centro el día 24, con motivo delreparto de cartuchos de Navidad a las alumnas. Hubo cánticos hermososcon acompañamiento de armonium, propiedad de las Escuelas, discursos,alegría, vivas y entusiasmó sin límites.

Al final, habló el P. Serapio González, Director de las Escuelas, entono levantado, animando a todos y felicitando a las premiadas. Por últi-mo, se repartieron los premioS, que formaban un espléndido aguinaldo.

Comunión mensual.—La han celebrado el día 22 los niños deeste Colegio.

Navidad.—Con gran concurso de gentes se han celebrado en estaIglesia los cultos preparatorios para la fiesta de Navidad. El P. Gaite, en

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m editaciones sencillas, dedujo de los misterL,s que la Iglesia conmemora,consecuencias prácticas para la vida cristiana.

A media noche del 24, después de solemnes Maitines, se eantó la Misa.Ei día 25 comenzó el Octavario al Niño Jesús, predicando los Reve-rendos Padr2s Gaite, Serapio, Ameno y Luis. Con inusitado fervor, a la11 terminación de estos cultos acudían los fieles a besar el pié del Divi; no Niño.

Despedida del año.---Dando gracias a Dios por los beneficios re-; cibidos de su liberal mano en el año que feneció, tan glorioso para nues-Zi Ira amada Orden, y en súplica de nuevas gracias para el presente, cuna-: pliendo con lo preceptuado en el «Ritual de la Orden», se cantaron las

Antífonas y se hizo la destribución de los Santos Protectores a la Comu-nidad y Terciarios.

Orden Tercera.---E1 día de la Natividad del Señor fueron admiti-r. dos al Hábito y Profesión numerosos fieles. El R. P. Ameno, Moderador•*,: de la Orden Tercera, hizo con este motivo una Plática alusiva al Peto.

Roperillo.---E1 dia 23 eelebró junta extraordinaria esta caritativa yfloreciente Asociación, que, obedeciendo las indicaciones hechas por suDirector, R. P. Gaite, acordó un reparto extraordinario oe ropas, a fin demitigar en lo posible las también extraordinarias necesidades actuales.-

: Siervas de Jesús.---Pagando su tributo a la fatídica epidemia quesembró la desolación y la muerte en nuestra cludad, y víctimas de su ar-diente celo en la asistencia de los contagiados, estuv , eron enfermas SorMercedes, Sor E velina y Sor Rocío. Esta última, tan conocida y popularen Iz,•rrol y tan amada de la Comunidad en que forma parte, inspiró se-Nuestra c:,rdial enhorabuena a tan beneméritas religiosas.

Trzlduo en Gedeira.---C bedeciendo a requerimieutos del SeñorArcipreste-Párroco y heles de la próxima villa ae Cedeira, salió el PadreCi aite, ,ou objeto de predicar un Tríduo al Niño Jesús, de Praga.Nuevo Terciario.---E] día 23 vistió el Santo Escapulario de la Or-; den el bizarro Capitán de Infantería de Marina D. Alejandro Fery ySuances. Sea enhorabuena.

Desde Berriz.---E1 día 20 de Noviembre tuvo lugar la ceremoniade la toma de hábito para religiosas de coro de las señoritas Felisa y Vic-r. toria Bernaola.

La plática estuvo a cargo del olocuente orador Sr. D. Ignacio Orbea.Se las impuso los nombres de María de las Mercedes y María de laI; Concepción, respectivamente.La ceremonia resultó muy solemne.La Niña María en Berriz.---Como en arios anteriores, las alum-na s de este Colegio celt-braron con toda solemnidad la fiesta de su Pa-: trona la Niña María. Previo un tríduo t,reparación, el día 21, a las

;n ueve en punto, se celebró una solemne Misa, en la que predicó congrande elocuencia el Señor Arcipreste de Durango. Terminada la Misa,

r: la imagen de la Niña María fué llevada procesionalmente por las alumnase externas a la porteria del Colegio, donde tuvo lugar la ceremonia d 1, resentaeión de la Santísima Virgen en el Templo. Entre himnos y cán-ticos fué conducida la imagen al coro, donde se cantó una solemne Salve E• a cuatro voces, y terminada ésta, se formó la procesión, que recorrió los Ei Ardines y salones del Colegio. Se terminaron tan simpaticas solemnida-

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rios cuidados. Hoy, gracias a Dios, están completamente restablecidas.

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E:des con el acto de besar el pié a la Virgen ita María, cuya imagen es tan .-:: venerada en este Convento-Colegio.- En estas funciones religiosas, el coro de alumnas internas interpretó 5

con toda maestría obras muy difíciles, de autores como Singuerbergen, 5Iruarrizaga, Bilbao, Pontoglio, etc., todas ellas muy clásicas y estricta-mente litúrgicas. ,

En el mismo Colegio.---Fn las fiestas de Navidad, las alumnas r...'celebraron varias veladas literario-musicales, Se pusieron en escena la 5comedia «Parientes lejanos», el drama «La fuga de un Angel» y varios 5sainetes. Escogidas piezas de canto, piano y mandolinas, amenizaron los .1.entreatos.

"Vacaciones".---Así se titula un periódico «saladísimo», órgano 5oficial del Colegio Mercedario de Berriz. .:

Cuentos, chistes, noticias, artículos hermosísimos escritos por plumasadmirablemente cortadas y presentado todo con gran lujo tipográfico, :contribuirá grandemente como lazo de unión entre alumnas y exalumnas 5de aquel acreditado Colegio y como heraldo de la piedad, cultura y buen 5espíritu de sus distinguidas profesoras. .,

El R. P. Armengol Fernández.---Después de haber predicadonna solemne Novena en Jerez de los Caballeros, ha salido a Zamora, ;acompañado del R. P. Martín López, con objeto de predicar una Santa '5Misión. ,

El R. P. Cesáreo Fernández.---De nuestro querido colega. «El 5,Tämega», de Verín, copiamos lo siguiente: .

«Una baja muy sensible tenemos que lamentar esta semana, entre laspocas que ha habido en la villa. La del R. P. Cesáreo, Superior de esta :.0residencia Mercedaria, fallecido a consecuencia de la grippe. .

Si alguna vez puede darse el nombre de héroe, tan prodigado en estostiempos sin virtudes, esta es una en la que la hipérbole no tiene cabida. ;porque el P. Uesäreo, perteneciente al clero regular, estaba exento de 5estos sacrificios encomendados por su misión al clero secular. Por eso suvirtud se destaca más en esta ocasión.

El P. Cesáreo fué y murió como un héroe, asistiendo enfermos apes-tados, amortajando sus cadáveres en el hospitalillo, llevando día y nochesobre sí una gran faena, una labor árdua y resignada, a la par que snfri- 5da, de una manera evangélica, cual fueron sufridas las penalidades de la 5redención de cautivos por sus hermanos de Congregación.

Víctima del contagio bajó al sepulcro. Allí - duerme el dulce sueño delque, de un modo tan desinteresado, ha cumplido con su deber, sellandolos hechos de su historia con el sacrificio de su vida, dada en holocausto 5de los pobres apestados. ,E- Verín debe depositar un recuerdo en la tumba de este virtuoso monje,: :" ya que él halló la muerte por salvar la vida de nuestros convecinos.

E Esperamos ver atendida y realizada nuestra modesta indicación, para 5:: honra de todos los hijos de este pueblo. ,:'-. Quien como el P. Cesáreo entrega su existencia en los albores de la 5: vida, bien merece un obsequio póstumo que perpetúe su memoria.: Descanse en paz el abnegado y virtuoso hijo de la Merced.»_-.. ;: Novena a Santa Bibiana.---Con gran concurso de gentes y so" 5: lemnidad inusitada, se ha celebrado esta popular Novena en la Iglesia de: la 'Buena Dicha«, de Madrid. Predicó todas las tardes el M. I. Dr. Don-: Diego Tortosa, CanAnigo de aquella S. I. C: Académico y Profesor de la 5: Real Academia de Jurisprudencia. A muchos niños se le han impuest o .E

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los cordones y medallas milagrosas de la Santa, inscribiéndose en tanantigua Asociación.

A la Reina Madre.---El M. R. P. Alberto Barros, Procurador Ge-neral de ia Orden. ha ofrecido, en nombre de la misma, a S. M. la ReinaDoña María Cristina una valiosísima imagen de Nuestra Santísima Madre,colocada en un riquísimo estuche-capilla, cubierto de piel «fantasía» yforrado de terciopelo carmesí. La image, ' , que es una acabada obra dearte, está sobre pedestal de caoba con los escudos de r spaña y de laOrden en el frente y lados respectivamente. El obsequio fué muy delagrado de S. M.

Colegio de San Pedro (Madrid).---Ha sido nombrado Superiorde esta Casa el R. P. Valentín Rodríguez, que hace varios arios dirige congraa acierto aquel Centro docente. De su celo y relevantes dotes, son deesperar días muy prósperos para aquella Casa.

Toma de hábito.---Con gran solemnidad ha vestido el Santo hábi-to en el Convento de Santa Ana de Escoriaza Sor María del Niño Jesús.A nuestra nueva hermana enviamos la más cordial enhorabuer a.

Sor Casimira de Jesús María Cenitagoya. --Por carta quecon fecha 18 de Diciembre nos escriben desde el Convento de Escoriaza,h emos sabido con honda pena la muerte de esta ejemplarísima re-l igiosa acaecida u los veintisiete arios de edad. Su vida, nos dicen,fué ejemplar. Jamás se la veía proceder con, precipitación, sinos iempre con gravedad y orden, y con una naturalidad y sencilleztal, que causaba edificación. Fué grande su mortificación, de senti-dos y potencias, buscando siempre la humillasen. A pesar de care-cer de salud, procuraba sujetarse a la vida de comunidad, que si-guió puntualmente hasta la víspera de su muerte. Los deseos demacerar su inocentísimo cuerpo eran grandes. Su trato carecía detoda lisonja y blandura pueril; pero eera tan ingenua y poseía unaprudencia y un tacto para acomodarse al gusto de los demás, que'se captaba las simpatías de toda le comunidad. Con ejemplar pa-ciencia y resignación admirable vino sufriendo la larga y penosadolencia que le condujo al sepulcro, habiendo recibido untes losSantos Sacramentos. Murió el 23 de Febrero de 1918, a Vas seis dela mañana, rodeada de las religiosas, para quienes fué verdadera-mente 'sensible y llorada la pérdida de Sor Casimira. Nos asocia-rnos la este sentimiento y pedimos a nuestros lectores la enco-mienden a Dios.

Una limosna.---La suplicamos para una Comunidad de Religi, sasque se hallan en tanta necesidad que casi carecen del pan cuotidiano.donativos pueden enviarlos a este Colegio.

Desde Darcelona.---Hemos recibido un largo telefonema, en quese nos comunica el final de las fiestas Centenarias. En la BasílicaMercedaria los cultos han sido solemnisimos, respondiendo en ex-plendor y entusiasmo a la grandeza de la fecha que se ha conme-morado. Nos anuncian el envío de la "Crónica", lu j osamente edi-tada.

CrÖrliea, eXtriartj er

En Santiago de Chile.---Brillo vtrdaderamente extraordinariohan revestido .las festividades Mercedarias este erio. La concurren,da, que durante todas las noches del mes acudía a la iglesia, era

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ap lausos y cristalizaba en lágrimas de júbilo, y cuando aun resonabanlos .ecos de los aplausos, el pueblo entero saludó a su madre conlas notas del Himno Patrio que salió robusto y espontáneo de esas -millares de voces que llenaban el recinto del templo. A continua-ción el P. Esparza pronunció una breve y tiernísima alocución que,hizo derramar lágrimas a los oyentes y con la cual se despidió alos piadosos peregrinos que con tantas incomodidades habían ve-nido a participar y solemnizar las fiestas de su •madre celestial. Ter-minóse con el rezo de la novena y exposición del Santísimo.

Los días restantes de la novena fueron encomendados a las de-más Ordenes y Congregaciones Religios,as en el orden siguiente:

Día 21, PP. Carmelitas. En la mañana vinieron en romería conlas congregaciones establecidas en su iglesia. Por la noche predicóel P. J. Antonio,

Día 23, Seminario conciliar.Día 24, Comunidad Mercedaria. Pontificó el Ilmo. Sr. Carlos

Silva Cotapos, con asistencia del Sr. Nuncio, e Ilmo. Sr. Arzobis-p o Valenzuela. Predicó el sermón el R. P. Cerda, conocido oradorsagrada.

Día 25, PP. Franciscanos. Predicó el R. P. Luis Orellana.Día, 26, PP. Dominicos. Predicó el P. J. Meza.Dia 27, PP. del I. Corazón de María. Vinieran en romeria con

las sociedades y congregaciones de su Iglesia. Predicó el P. JoséCo diera.

Día 28, PP. Jesuitas. Predicó el P. Carlos Galcerán.Día, 29, PP. Agustinos. Por la noche Predicó el Sr. Pbro. Pedro

N. Donoso. Para poner término a las Festividades, después de lanovena se organizó una procesión, por la Iglesia, a la que concu-rrió numeroso gentío, terminándose con la bendición papal, con-cedida especialmente por Su Santidad.

El altar y la Iglesia fueron regiamente arreglados por el PadreCarlos Infante y Hermano Serapio Ruiz con guirnaldas y luze léctrica que daban , muy bonito golpe de vista.

Nota verdaderamente simpática fue la grandiosa romería quede distintos puntos de la República vino a la, coronación de la Vir-gen de la Merced. Más de dos mil personas se contaban entre losromeros, fuera de muchos que venían como particulares. Feliz ideaconcebida y llevada a cabo por el P. Pedro A. Vistoso, a quien noP o demos menos de felicitar por su espléndido resultado.

Rancagua.---Solemnisimas resultaron las fiestas en honor ele Nues-tra Madre del convento de Ranicagua. Enorme era la afluenciaq ue cada día acudía _a la Iglesia '. Las pláticas fueron predicadasLor los PP. Pedro A. Vistoso, Ramón Pifia, Policarpo Gazulla,Joaquín Silva y Pedro A. Diaz. El domingo 29 hubo misa solem-ne, oficiada por el señor Cura( Germán Gamboa. El sermón lo preLd'.có el P. José Esparza, que con palabras llenas de piedad y un-ión recontó las gracias y favores que la Virgen de la Merced ha

derramado por el inundo. Por la tarde se efectuó la procesión, quefué conicurridísima.

Las anclas fueren arregladas por las familias siguientes: SanRamón, familias Torres y Guerrero; San Pedro Nolasco, convento;l a Santísima Virgen y altar mayor, seriara María Bascopé. Duran-te la procesión el anda de la Virgen fué escoltada por la policía yla banda municipal tocó hermosas marchas..

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enorme. Hubo pláticas durante todo el mes por los padres de laComunidad.

Pero el acontecimiento más grandioso y solemne, acaso "nuncavisto" en Chile, fué el que tuvo lugar el día 22 die S,eptilembrei, díade la coronación canónica de la Virgen de la Merced, que desde an-tiguo se venera en este templo de Santiago. Desde temprano, lasnaves de la Iglesia Catedral, adonde había sido trasladada la,

Sagrada imagen el día anterior, velanse invadidas por una oleadainmensa de gente venida de toda la ciudad y de distintos puntosde la República, ansiosas ,de rendir una pública 'mainifiesta 'ción deamar a .la Virgen de la Merced en, el día de sus triunfos. A las 9 die,

la mañana dióse comieno a las ceremonias, bendiciendo lai her-mosísima corona ,de aro adornada de perlas y piedras preciosas.Pontificó la misa el Ilmo. Sr. Valenzuela, con asiste ,nicia del exce-lentísimo señor Nuncio, Auditor de la Nunciatura, Ilmo. señorObispo Carlos Silva Cotapos, Cabildo, Clero y Comunidades Reli-giosas. La nave central la ocupaban los padrinos y personas inrvi-tadas. Al Evangelio pronunció un hermoso discurso el R. P. Pro-.vinvial, Manuel J. Flores. Terminada la misa se procedió a la coro-nacion ,die la Imagen, acto que era .ansiosarniente esperado por elpúblico y que fué como un soplo que impresionó los corazones, ca-yendo de rodillas casi todas las personas ante la imagen, mientrasen el coro se cantaba un solemne Regina Coeli y las campanas dela, ciudad se echaban al vuelo anunciando tan' fausto acontecimiento.

No fué menos solemne y conmovedor el acto de la tarde, du-rante la procesión. Al salir la imagen, de la Catedral, un grito deentusiasmo se esoapó ,de todos los labios, avivando a la Virgen co-ronada. Y entre aleadas de incienso y cánticos 'de triunfo fué pa-seada por las calles de la ciudad, las cuales se hallaban engalan ,a-,das con escudos, banderas y flores naturales, recorriendo las ca-lles ,die la Merced, Santa Lucía, Huérfanos y Claras para volvernuevamente a su templo ,. Durante' el trayecto la banda del Pudeto,de San Vicente •de Padiil y del Regimiento de Carabineros, tocaronherm,osaS marchas.

La procesión iba organizada 'en el siguiente orden: Cruz Alta,Venración Perpetua; Obreros del Corazón de María; Orden Ter-cera de la Merced; Peregrinos de Chimbarongo; Peregrinos deRancagua; Colegio y Sociedad de Santa María de , Cervellón; Cofra-día del Niño Jesús de . Praga; Corte del Carmen; Peregrinos deMelipilla; Centro 21 de Mayo de la Unión Nacional; Anda de SanRamón; banida del Pud,eto; Peregrinos de Chillan; Peregrinos dieSan Javier; Sociedad Bernardo O'Higgins de Rancagua; ColegioS. Pedro Nolasco; Anda de. S. Pedro Nolasco; Obreros de San Jo-sé; banda de San Vicente de Paúl; caballeros católicas; clero ycomunidades; Ilr-io. Sr. ,Valenzuela y asistentes; Excmo. Sr. Nun-cio, Auditor y cabildo; Anda de la Stma. Virgen; banda del Regi-miento de Carabineros y una multitud de fieles que seguía tras elanda.

Al entrar la Virgen al templo, aquellos millares ,de hijos y de-votos suyos, no pudiendo .contener el júbilo de sus corazones, pro-rrumpieron en un viva" estruendoso seguido de aplausos que , seprolongaban por largo rato. Aquello 'era hondamente conmovedor;era la expresión el cariño inmenso a María que , se manifestaba en

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.7.

▪

El canto de la novena y des la misa estuvo a cargo de la seña-: rita Carmela, Silva y Ále un escogido coro de señoritas y jóvenes

de la sociedad Rancagiiina.Chimbarongo.---Debido al esmero y entusiasmo del P. Comenda-

dor celebráronse las fiestas con todo esplendor. Las pläticae, dedor, oelebraronset las fiestas con todo explendor. Las plánticas del

• la novena estuvieron a cargo del padre Jiménez. El último día hubo: misa solemne con sermón por el Padre Jorge Doozan. Por la tarde• se organizó la procesión, recorriendo el trayecto acostumbrados.▪ Concepción.—Grandiosas sobre toda ponderación han estado las

fiestas que con motivo del Centenario se han celebrado en nuestro:".." convento des Concepción'. El 8 del pasado, el Ilustrísimo señor▪ zobispo Valenzuela bendijo la nueva Iglesia que el R. P. Comenda-E •dor, Ramón Hsarrison, cons su celo y entusiasmo, ha logrado levan-- tar en ese pueblo, en honor de Nuestra Santísima Madre de la Mer--▪ ced. El mismo señor Arzobispo bendijo la hermosa sacristía y

consagró los altares de la nueva Iglesia.▪ Celebróse además una grandiosa asamblea en el Seminario de• la ciudad, a la que 'asistió una concurrencia 'enorme, de la másE distinguido 'de la sociedad. Nuestras felicitaciones al R. P. Harri--- son que tan espléndidamente ha ' 'sabido celebrar el séptimo c'en--: tenario de su Orden, y nuestras felicitaciones a todas las pesonasE que lo secundan y ayudan en tan nobles empresas.• San Javier.---E1 I • ° de Septiembr-: celebráse en ese Convento un• solieimnísirno triduo predicado por los PP. Manuel Flores, Ramón• Cerda y Luis Márquez. Pontificaran los ilustrísimos señores Va-: lenzuesla y Sepúlveda y asistió una numerosa concurrencia y muchosE caballeros de la sociedad sawjavierina.

Obras de misericordia.-,- Sabemos que en Quillota y Talca se

- han hecho solemnidades religiosas espe'cia'les para conmemorar▪ nuestra séptimo Centenario. En Quillota se dió a los reos de la cár-▪ cel un piadoso retiro predicado por los ' Padres de ese convento Y-- el último día se les hizo una función del 'caridad en la cual se re-E partieron ropas y alimentos. En Talca se celebró uni gran triduo• religioso con asistencia del Ilmo. y Rvdo. Sr. Arzobispo de Gaw-• gra y Gobernador Eclesiástico de la ciudad y con procesión de▪ Nuestra Santísima Madre el último día.gon

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