cardoso y faletto. 1979. capítulo 1.pdf

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Dependencia y desaffollo en AméricaLatina Cardoso Siglo XXI editores S.A. Buenos Aires,1977 Este material se utiliza con fines exclusivamente didácticos Fernando Henrique E,nzo Faletto

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  • Dependencia y desaffollo enAmricaLatina

    Cardoso

    Siglo XXI editores S.A.

    Buenos Aires,1977

    Este material se utiliza con finesexclusivamente didcticos

    Fernando HenriqueE,nzo Faletto

  • PREFACIO

    I. TNTRODUCCIN

    TI. ANLISIS INTEGRADO DEL DESARROLLO

    l. El anlisis tipolgico: sociedades hadicionales y modemas ................. I I2. La concepcin del cambio social ............ ......................... 14

    3. Estructura y proceso: determinaciones recprocas. ..,..,.....17

    4. Subdesarrollo, periferia y dependencia................... .........22

    6. Los tipos de vinculacin de las economas nacionales al mercado.... ..........................347. Perspectivas para un anlisis integrado del desarrollo .....................,..,..37

    III. LAS SITUACIONES FT]NDAMENTALES EN EL PERIODO DE.EXPANSIN HACIA AFIJERA'

    L Control nacional del sistema productivo.... ................,.....42

    2. Las economas de enclave ......,...................48

    IV. DEARROLLO Y CAMBIO SOCIAL EN EL MOMENTO DE TRANSICIN...............,..54

    I ' El momento de transicin en las sociedades con produccin nacionalmente controladas .................57

    2. Las economas de enclave en el momento de hansicin .......................82

    V. NACIONALISMO Y POPI]LISMO: FUERZAS SOCIALES Y POLiTICADESARROLLISTA EN LA FASE DE CONSOLIDACIN DEL MERCADOINTERNO...

    l. Populismo y economa de libre empresa ....................... 109

    2. Populismo y desarrollo nacional ........ ...... 1 16

    3. EI estado desarrollista. .......123

    VI. LA INTERNACIONALIZACIN DEL MERCADO; EL NUEVO2

    102

  • CONCLUSIOI\TES

  • PREFACIO

    Este ensayo fue escrito en Santiago de Chile entre 1966 y 1967, poca en que los autores trabajabanen estrecha relacin con economistas y planificadores, en un instituto internacional de enseanza,investigacin y asesora en planificacin. En esa poca, su propsito era establecer un dilogo con loseconomistas y planificadores para destacar la naturaleza social y poltica de los problemas de desarrollo enAmrica Latina. Ninguna discordia de importancia hubo en cuanto a los aspectos sociales y polticos deldesarrollo econmico. Las dificultades aparecieron cuando se intent mostrar, de manera ms directa yespecfica, cmo se da esta relacin y qu implicaciones surgen del tipo de combinacin que se estableceentre economa, sociedad y poltica en momentos histricos y situaciones estructurales distintos.Exactamente en tal direccin se orient el esfuerzo realizado en este ensayo'

    Es posible que este limitado propsito haya sido sobrepasado en uno u otro desarrollo particular deltexto. No obstante, sigui vigente el fundamento de la discusin del ensayo. Lejos del pensamiento de losautores est el creer que el libro aborda todos los problemas del desarrollo econmico y de su relacin conlos dems procesos sociales. Por otro lado, no se tratan cuestiones histricas importantes para caracterizar lasdiferencias en el proceso de transformacin de las sociedades de los diversos pases, como por ejemplo, laarnplitud y el tipo de esclavitud habida en el pasado, el problema de la existencia de poblaciones indgenasnumerosas en muchos pases de la regin o la impofancia mayor o menor de la inmigracin europea.

    Adems del objetivo generas ya sealado, tambin se procur mostrar, implcitamente, queconsiderar los problemas econmicos o polticos de Amrica Latina como un todo, sin especificar lasdiferencias de estructura y de historia que distinguen a situaciones, pases y monibntos, dentro del conjunto,constituye un equvoco terico de consecuencias prcticas peligrosas.

  • I.INTRODUCCI

    Al terminar la segunda guerra mundial pareca que algunos pases de Amrica Latina estaban encondiciones de completar el proceso de formacin de su sector industrial y de iniciar' adems,transformaciones econmicas capaces de lograr un desarrollo autosustentado.

    En efecto, despus de reorganizar la produccin y los mercados, alterados como consecuencia de lacrisis de 1929, ciertas economas latinoamericanas que haban acumulado divisas en cantidades apreciables,que se habran beneficiado de la defensa automtica del mercado interno provocada por la guerra, parecanhallarse en condiciones de completar el ciclo denominado de "sustitucin de importaciones" y empezar'sobre una base firme, la etapa de produccin de bienes de capital, Ilamada a producir la diferenciacin de lossistemas productivos. En estos pases el mercado interno pareca lo bastante amplio para estimular el sistemaeconmico y se contaba, adems, con que Ia transferencia de mano de obra de los sectores de bajaproductividad -hacia los sectores de alta productividad sera un factor de ampliacin del mercado ms tarde,iracia 1955, para garantizar el desarrollo se consider necesario un nuevo elemento: la redistribucin de larenta. Todos esos factores, actuando en conjunto, parecian suficientes para asegurar el automatismo delcrecimiento de tal modo que condujesen a l los puros estmulos del mercado'

    Esta posibilidad, ilidamente apoyada por Ia coyuntura econmica, se formul tericamente en losescritos ms notables sobre el desarrollo econmico que se han producido en Amrica Latina. Se pasaba as,tanto en la prctica como en la teora, de una fase en que la industrializacin se conceba como un recursocomplemeniario en un proceso de desarrollo

    -basado en la exportacin de prodctos primarios- y,.adems,

    "ob unu especie de aiternativa forzosa par los perodos de contraccin del mercado intemacional,' a una

    formulacin ierica y a un conjunto de expectativas apoyadas en la conviccin de que el industrialismosucedera a la expansin de lasixportacionis, complementando as un ciclo de crecimiento e inaugurandouna fase de desarrollo autosustentado. ste debera basarse en los estmulos del mercado interno y en ladiferenciacin del sistema productivo industrial, lo que conducira a la creacin de una industria propia debienes de capital.

    Los vnculos del mercado internacional continuaran actuando tanto por necesidad de asegurarcompradores para los productos de exportacin como por la necesidad de obtener inversiones del exterior.Sin embargo, Ia expansin del mercado interno debera asegurar por s sola el desarrollo continuado. Lainstalacin de "industrias exportadoras" seguira siendo necesariapara mantener Ia "capacidad de importas",pero el sentido fundamental del desarrollo no lo dara el mercado externo sino el intemo'

    No podra negarse que a principios de la dcada de 1950 estaban dados algunos de los supuestos paraeste nuevo paso de l economa latinoamericana, por lo menos en pases como Argentin4 Mxico, Chile,Colombia y Brasil. Entre esos supuestos, cabra enumerar: l] un mercado interno suficiente para el consumode los productos industriales, formado desde el siglo pasado por la integracin de la economa agropecuaria ominera al mercado mundial; 2] una base industrial formada lentamente en los ltimos 80 aos, quecomprenda industrias livianas de consumo (alimenticias, textiles, etc.) y, en ciertos casos, la produccin dealgunos bienes relacionados con la economa de exportacin; 3] una abundante fuente de divisas, constituidapo-r ta explotacin agropecuaria y minera; 4J fuertes estmulos para el crecimiento econmico, especialmenteen pases como Brasil y Colombia, gtacias al fortalecimiento del sector externo a partir de la segunda mitadde ia dcada de 1950; 5] la existencia de una tasa satisfactoria de formacin interna de capitales en algunospases, por ejemplo, en Argentina.2

    Dese ei punto de vista econmico, por consiguiente, pareca que toda poltica de desarrollo deberaconcentrarse en dot puntos: a] la absorcin de una tecnologa capaz de promover la diversificacin de laestructura productiva y de aumentar la productividad, y b] la definicin de una poltica de inversiones que' atravs del stado, crase la infraestructura requerida por esa diversificacin.'. Las condiciones estructurales yde coyuntura, favorables, dieron paso desde entonces a Ia creencia, comn entre los economistas, de que el

    t Acerca de la necesidad de complementar el crecimiento del sector exportador de la economa mediante laindustrializacin, como recurso para solucionar los problemas creados por la depresin del mercado mundial, VaseRal Prebisch, "El desarrollo econmico de Amrica Latina y algunos de sus principales problemas", en Boletneconmico de Amrica Latina,vol.VlI, 1962,pp.. 1-24' Sobre las condiciones de desarrollo en Argentin4 vase Benjamn Hopenhavn, "Estancamiento e inestabilidad: el casoargentino en la etapa de sustitucin forzosa de importaciones", en E/ trmestre Econmico, nm. 12, Mxico, enero-marzo de 1965. pp. 126-139.I La otra alternativa habra sido incrementar el ingreso por habitante en la produccin primaria para compensar as latendencia al deterioro de los trminos de intercambio. Vase a este propsito Prebisch, op. cit., especialmente p. 6'

  • desanollo dependera principalmente de la capacidad de cada pas para tomar las decisiones de polticaeconmica que la situacin requiriese.

    En Amrica latina, despus de la crisis de 1929, hasta en pases de tradicin econmica "liberal"como Argentina, comenzaron a fortalecerse los instrumentos de accin del poder pblico como un medio dedefender la economa exportadora. El paso siguiente consistira en la creacin de instituciones pblicas parafomentar el desarrollo segn las nuevas ideas y lograr una redefinicin de las expectativas y delcomportamiento entre los encargados de tales decisiones en el aparato estatal.

    El fortalecimiento y la modernizacin del estado parecan Ios instrumentos necesarios para lograruna poltica de desarrollo efectiva y eficaz. Tanto fue as que los economistas latinoamericanos tuvieron querealzar el aspecto poltico de sus planteamientos, volviendo conceptualmente a Ia "economa poltica".

    El supuesto general implcito en esa concepcin era que las bases histricas de Ia situacinlatinoamericana apuntaban hacia un tipo de desarrollo eminentemente nacional. De ah que se tratase defortalecer el mercado interno y, alavez, de organizar los centros nacionales de decisin de tal modo quefueran sensibles a los problemas del desarrollo de sus propios pases.

    Esa perspectiva optimista se ha ido desvaneciendo desde fines de la dcada de 1950. Era dificilexplicar por qu, con tantas condiciones aparentemente favorables para pasar de la etapa de sustitucin deimportaciones a otra en que se abrieran nuevos campos de produccin autnoma, orientados hacia elmercado interno, no se tomaron las medidas necesarias para garantizar la continuidad del desarrollo o porqu las mismas no alcanzaron sus objetivos. Ms an, en algunos casos la tasa de crecimiento econmico,stricto sensu, no fue suficiente para dinamizar los sectores ms rezagados de la economa por lo que tampocofue posible absorber la presin que significaba el continuo aumento demogrfico. A este hecho contribuy eltipo de tecnologa adoptado en los sectores ms modernos, pues implicaba una baja utilizacin de mano deobra. Sin embargo, como todo lo dicho no signific abiertamente una depresin, tampoco llegaron aproducirse las consecuencias que suelen atribursele.

    En otras palabras, si es verdad que las condiciones econmicas de los pases ms prsperos del rea-por ejemplo, Argentina- apuntaban derechamente hacia el desarrollo hasta la mitad de la dcada de 1950,sera posible mantener Ia hiptesis de que faltaron las condiciones institucionales y sociales que habran depermitir a los hechos econmicos favorables expresarse en movimiento capaz de garantizar una poltica dedesarrollo, o haba en realidad un error de perspectiva que haca creer posible un tipo de desarrollo queeconmicamente no lo era?

    En algunos pases como Brasil, Ios acontecimientos llevaban a suponer, principalmente en los aos1950, que no eran infundadas las esperanzas en las posibilidades de un desarrollo autosuficiente. De hecho,el proceso sustitutivo de importaciones alcanz la fase de implantacin del sector de bienes de capital que,por sus caractersticas

    -el conocido efecto multiplicador que lleva consigo su dinamismo y la imposibilidadtcnica de un retroceso en la industrializacin durante los periodos de crisis, que es usual y ms fcil cuandoslo se da una produccin de bienes de consumo- pareca implicar la instauracin de una etapa nueva y denaturaleza irreversible de la industrializacin Brasilea. Los hechos, sin embargo, tampoco en este casoparecen confirmar el optimismo inicial, pues el auge a que se lleg al dar cima al prooeso de sustitucin deimportaciones sigui, en los aos 1960, un periodo de estancamiento relativo en el cual continua sumergidaIa economa brasilea.a

    De los tres pases que ms avanzaron industrialmente, apenas uno parece haber conseguido mantenerdurante mayor tiempo una tasa de crecimiento elevada. Tal es el caso de Mxico, aunque debe reconocerseque su estructura econmica

    -sobre todo la diversidad de su sector exportador- constituye un elemento quelo diferencia de los otros pases de Amrica Latina. Tambin en este caso, pese a todo, la fuerte desigualdaden la distribucin de los ingresos y la participacin creciente de capitales extranjeros en la economa, puedenser considerados como factores que alteran las hiptesis presentadas por los economistas en cuanto se refierea condiciones para el desarrollo autosustentado.

    En una primera aproximacin queda, pues, la impresin de que el esquema interpretativo y lasprevisiones que a la Iuz de factores puramente econmicos podan formularse al terminar los aos 1940 nofueron suficientes pata explicar el curso posterior de los acontecimientos. En efecto, el salto que parecarazonable esperar en el desarrollo de Argentina no se dio, ni se produjeron las transformaciones cualitativasdeseadas. Aunque las dificultades de la economa brasilea pudieron encontrar salida provisoria en elimpulso desanollista en la dcada de 1950, apoyado por el financiamiento externo a corto plazo, se reabrio Vase en este sentido "Auge y declinacin del proceso de sustitucin de importaciones en el Brasil", en BoletnEconmtico de Amrica Latina,-1964, vol. IX, pp'. l-62. Sin embargo, las caractersticas de la economa brasileaparecen indicar que se trat4 desde el ngulo econmico, de un fenmeno todava enmarcado en una situacin " dedesarrollo"-

  • una fase de retroceso y quiz de estancamiento, cuando ya se anunciaba la superacin definitiva de losobstculos del desarrollo. Finalmente, la economa mexicana, despus de las dificultades de un perodo dereajustes y transformaciones profundas, orientadas a una poltica nacionalista, parecera realizar susposibilidades de expansin en medida importante gracias a su integracin al mercado mundial, a travs de lainversin extema de capitales y de la diversificacin de su comercio exterior dentro del cual desempea unpapel importante el turismo.

    A la luz de estos hechos puede generalizarse la sugerencia implcita en la pregunta sobre las causasde la insuficiencia dinmica de las economas nacionales que presentaban perspectivas tan favorables comoArgentina. Hasta que punto el hecho mismo de la Revolucin mexicana, que rompi el equilibrio de lasfuerzas sociales, no habr sido el factor fundamental del desarrollo logrado posteriormente? No habran sidolos factores inscritos en la estructura social brasilea, eljuego de las fuerzas polticas y socales que actuaronen la dcada "desarrollista", los responsables tanto del resultado favorable como de la prdida de empujeposterior del proceso brasileo de desarrollo?

    Sin embargo, sealar el curso negativo seguido por los acontecimientos como indicador de lainsuficiencia de las previsiones econmicas anteriores y deducir de ah la necesidad de reemplazar lasexplicaciones econmicas por interpretaciones sociolgicas sera una respuesta superficial. En el planeconmico ha sido frecuente condicionar Ia posibilidad de desarrollo en Amrica Latina a la continuacin deperspectivas favorables para los productos de exportacin; y han sido precisamente las condicionesfavorables del comercio exterior las que perdieron empuje despus del boom de Corea y fueron ustituidaspor coyunturas netamente desfavorables, una de cuyas caractersticas es e continuo deterioro en los trminosde intercambio. Frente a esta situacin se plante como alternativa complementaria la redefinicin de lostrminos de la cooperacin internacional, ya sea a travs de programas directos de financiamiento exterior alsector pblico, ya sea a travs de una poltica de sustentacin de precios; tales soluciones no han llegado sinembargo a concretarse en forma satisfactoria para el desarrollo.

    A estos hechos puede atribuirse en parte que el proceso de crecimiento econmico haya sufrido unaprdida de velocidad. La tasa de aumento del producto bruto alcanz lmites apena suficientes parapromover en algunos pases la reorganizacin del sistema econmico. Sin embargo no se han reorganizadoen la direccin esperada el sistema social ni el sistema poltico. De ah que se haya pensado que aunque la"sociedad tradicional" haya transformado en buena medida su faz econmica, con todo, algunos de susgrupos no perdieron el control del sistema de poder,sa pesar de haberse visto obligados a establecer unsistema complejo de alianzas con los nuevos grupos aparecidos. As, pues, con la disminucin del ritmo decrecimiento, que se inici a fines de los aos 1950, habran reaparecido los antiguos problemas delContinente con nuevos protagonistas sociales o con los mismos de siempre revestidos ahora de aparienciamoderna.

    Aunque Ios grados de diferenciacin de la estructura social de los diversos pases de la regincondicionan en forma distinta el crecimiento econmico, no es suficiente reemplazar la interpretacin"econmica" del desarrollo por un anlisis "sociolgico". Falta un anlisis integrado que otorgue elementospara dar respuesta en forma ms amplia y matizada a las interrogantes generales sobre las posibilidades deldesanollo o estancamiento de los pases latinoamericanos, y que responda a las preguntas decisivas sobre susentido y sus condiciones polticas y sociales.

    II. ANLISIS INTEGRADO DEL DESARROLLONo es suficiente, para contestar a las interrogantes anteriores, sustituir Ia perspectiva econmica de

    anlisis por una sociolgica; el desarrollo es, en s mismo, un proceso social; aun sus aspectos puramenteeconmicos transparentan la trama de relaciones sociales subyacentes. Por eso no basta considerar lascondiciones y efectos sociales del sistema econmico. Tal tipo de anlisis ya ha sido intentado, pero no diorespuesta satisfactoria a las nterrogantes plantadas anteriormente. En efecto, a los anlisis contenidos en losesquemas econmicos de desarrollo

    -que presuponen la viabilidad del paso del subdesarrollo al desanollo, elcual se reduce en definitiva, a la creacin de un sector dinmico intemo capaz de determinar alavez tanto elcrecimiento autosustentado como la transferencia de los "centros de decisin"- se sumaron esfuerzos deinterpretacin sociolgica dirigidos a explicar la transicin de las sociedades tradicionales a las sociedadesmodernas.

    5 Vase, por ejemplo, el estudio de la Cepal, El desarrollo social de Amrica Latina en la postguerr4 Solar/Hachette,Buenos Aires, 1963, donde se sostiene la hiptesis de la flexibilidad de la dominacin tradicional.

  • I. EL ANLISfi TIPOLGICO:SOCIEDADES TRADICIONALES Y MODERNASEn esos anlisis se propone la formulacin de modelos o tipos de formaciones sociales.6 Se sostiene

    que las sociedades latinoamericanas perteneceran a un tipo estructural denominado generalmente "sociedadtradicional" y que se estri produciendo el paso a otro tipo de sociedad llamada "moderna". En el curso delproceso de cambio social parecera que antes de constituirse la sociedad modema se forma un patrnintermedio, hbrido, el cual caractenza a las sociedades de los pases "en desarrollo". Se invoca entonces lanocin de "dualismo estructural".7 En realidad, metodolgicamente se trata de una renovacin de la viejadicotoma "comunidad-sociedad" en su formulacin clsica en Tnnies.

    Es posible criticar este esquema con cierto fundamento desde dos puntos de vista. Por una parte, losconceptos "tradicional" y "moderno" no son bastante amplios para abarcar en forma precisa todas lassituaciones sociales existentes, ni permiten distinguir entre ellas los componentes estructurales que definen elmodo de ser de las sociedades analizadas y muestran las condiciones de su funcionamiento y permanencia.Tampoco se ha alcanzado, por otra parte, un nexo inteligible entre las distintas etapas econmicas

    -porejemplo, subdesarrollo, desarrollo a travs de exportaciones o de sustitucin de importaciones, etc.- y losdiferentes tipos de estructura social que presuponen las sociedades "tradicionales" y las "modemas".

    Ampliando estas consideraciones cabra suponer que las formas concretas adoptadas por las distintasfases del proceso de desarrollo es posible inferir ciertas caractersticas de los tipos de sociedad mencionadas.Sin embargo, con este procedimiento sigue siendo imposible explicar los modos de transicin de un tipo desociedad a otra. En efecto, el cambio de las estructuras sociales, lejos de ser slo un proceso acumulativo enel cual se agregan nuevas "variables" que se incorporan a la configuracin estructural,simplicafundamentalmente un proceso de relaciones entre los grupos, fuerzas y clases sociales a travs del cualalgunos de ellos intentan imponer al conjunto de la sociedad la forma de dominacin que les es propia.

    En trminos puramente econmicos, el grado de desarrollo de un sector productivo puede seranalizado a travs de un conjunto de variables y de relaciones entre variables que reflejan el proceso dediferenciacin estructural de la economa. A partir de ese anlisis y principalmente juzgando por elcomportamiento de la renta y la estructura del empleo, puede inferirse la forma que adopta la estructurasocial. Sin embargo, cuando se trata de vincular el anlisis estrictamente econmico con la comprensin deldesarrollo poltico y social, el problema bsico por determinar en demanda de formulacin ya no essolamente el del carcter de la estructura social de una sociedad dada, sino principalmente el proceso de suformacin, as como Ia orientacin y tipo de actuacin de las fuerzas sociales que presionan por mantenerla ocambiarla, con todas las repercusiones polticas y sociales consiguientes en el equilibrio de los grupos tantoen el plano nacional como en el plano externo.

    Adems, los anlisis del modemismo y del tradicionalismo parecen excesivamente simplificadoscuando se establece una relacin unvoca, por un lado, entre desarrollo y sociedad moderna y, por otro, entresubdesarrollo y sociedad tradicional. En efecto, como se indicar en el apartado correspondiente, la relacin

    6 Esta perspectiva de anlisis que hace hincapi en el paso de una sociedad tradicional a una de tipo modemo aparece enrelacin especfica a Amrica Latina en trabajos tales como los de R. Redfield, The folk Culture of Yucatn, Chicago,University of Chicago press, 1940, y ms tarde con una orientacin desididamente sociolgica en B. Hoselitz,Sociological Factors in Economic Development, Glencoe, The Free Press, 1960, y especficamente sobre AmricaLatin4 el mismo autor public "Economic Growth in Latin America", en Contribution to the First InternationalConference in Economic History Bstocolmo, 19601, The Hague, Mouton & Co., 1960. Entre los autoreslatinoamericanos fue Gino Germani quien logr posiblemete la mejor formulacin de esta perspectiv4 vase, pore.iempfo, de este autor, Poltica y sociedad en una poca de transicin, Buenos Aires, Paidos, 1962.Oportuno es aqu sealar que Ia influenia de libros como el de Talcott Parsons, The Social System, Glencoe, The FreePress, 1951, o el de Robert K. Merton, Social Theory and Social Structure, Glencoe, The Free Press, 1949, handesempeado un papel decisivo en la formulacin de ese tipo de anlisis del desanollo. Por ofa Daniel Lemer, en I/ePassing of Tradicional Society: Modernizing the Midlle Easl, Glencoe, The Free Press, 1958, formul en trminos msgenerales, es decir, no especficamente orientados hacia el problema del desanollo, el enfoque del tradicionalismo y delmofdernismo como anlisis de los procesos de cambio social. En otros autores, mis bien se han subrayado los aspectospsicosociales del paso del tradicionalismo al modernismo como en Everett Hagen, On the Theory of Social Change,Homewood, Dorsey press, 1962, y David Mc Clelland, The Achieving ociy, Princeton, Van Nostrnd, 1961.7 El concepto de dualismo estructural en ese contexto se encuentra, por ejemplo, en Jaques Lambe4 Le Brsil: structuresociale et institutions politiques, Pars, 1953, y desde la perspectiva de un economist, Albert O. Hirschman, IfreStrategt of Econimic Development, Yale, Yale University press, 1958.8 Vase, p. ej. Peter Heintz, Anliss contextual de los pases latinoamericanos, Berkeley, edicin mimeografiada"

  • entre desarrollo y modernizacin no se verifica necesariamente si se supone que la dominacin en lassociedades ms desarrolladas excluye a los "grupos tradicionales". Por otra parte, tambin puede darse elcaso de que la sociedad se modemice en sus pautas de consumo, educacin, etc., sin que en forma correlativase logre un desarrollo efectivo, si por ello se entiende una menor dependencia y un desplazamiento delsistema econmico de la periferia al centro.

    2. LA CONCEPCIN DEL CAMBIO SOCIAL

    No slo conviene seala las implicaciones, en trminos analticos e interpretativos, de los conceptosde sociedad tradicional y sociedad moderna, sino que tambin puede ser til referirse, aunque seasomeramente a la concepcin del proceso histrico que suponen estos conceptos.

    Casi siempre estuvo presente, como supuesto metodolgico, en Ios esfuerzos de interpretacin, quelas pautas de los sistemas poltico, social y econmico de los pases de Europa occidental y Estados Unidosanticipan el futuro de las sociedades subdesarrolladas. El "proceso de desarrollo" consistira en llevar a cabo,e incluso reproducir, las diversas etapas que caracterizaron las transformaciones sociales de aquellos pases.eDe ah que las variaciones histricas, es decir, las singularidades de cada situacin de subdesarrollo, tenganpoco valor interpretativo para este tipo de sociologa.

    Claro est que no se ha cado en la ingenuidad de admitir en la historia de Amrica Latinadesfasamientos con respecto a los pases desarrollados en trminos tan simples que hagan suponer queaqulla se encuentra en el siglo XD(, por ejemplo, con relacin a estos ltimos. Ms a menudo se sealacomo caracterstico de los pases subdesarrollados encontrarse "atrasados" gn ciertos aspectos de laestructura aunque no en otros. As, por ejemplo, la sindicacin en pases como Brasil y Argentina alcanzexpresin nacional y lleg a influir en las decisiones relativas al nivel de los salarios en una fase en que, porcomparacin con lo que ocurri en los pases de "desarrollo original", no era norrnal que as sucediese. Alpropio tiempo, la urbanizacin acelerada de Amrica Latin4 que precede cronolgicamente a laindustrializacin, facilita Ia difusin de aspiraciones y de formas de comportamiento poltico que favorecenla participacin creciente de las masas en el juego del poder antes de que exista un crecimiento econmicoautnomo y basado en el mercado interno. Dichas consideraciones ponen de relieve que lo que cabra llamarreivindicaciones populares respecto al control de las decisiones que afectan al consumo constituiran un dato"precof'en el proceso de desarrollo de Amrica Latina.

    Este nivel de participacin -sobre todo en los aspectos sociales-, supuestamente similar al de los

    pases centrales, ha llevado a pensar que a travs del mismo se creara una especie de puente que tendera ahacer semejantes las pautas sociales y las orientaciones valorativas en las sociedades desarrolladas y en lassociedades subdesarrolladas. Esto, glosso modo, constihrye lo que se ha dado en llamar "efecto dedemostracin".

    En el plano del anlisis econmico, el "efecto de demostracin" supone que la modernizacin de laeconoma se efectua a travs del consumo y que en ltima instancia, por consiguiente, intoduce un elementode alteracin en el sistema productivo que puede provocar una desviacin respecto a las "etapas" de laindustrializacin caractesticas de los pases adelantados. Como las inversiones, cuando se piensa en undesarrollo autnomo, dependen en gran medida del ahorro interno, la misma presin modernizadora delconsumo puede constituir un freno al desarrollo, en cuanto favorece las importaciones de bienes de consumo,as como las de bienes de capital relacionadas con la produccin de aqullos, e induce a invertir en sectoresque no son bsicos para la economa.

    Por otra parte, el "efecto de demostracin" no slo se ha pensado en trminos econmicos. Sesupone que los mismos factores que favorecen ese proceso presionan para que en los pasesinsuficientemente desarrollados se alteren otros aspectos del comportamiento humano

    -en el campo polticoy en el campo social- antes que se verifique la diferenciacin completa el sistema productivo. De ah laconveniencia de subrayar que el "efecto de demostracin" tiene lugar, por lo menos en el caso de AmricaLatina, en determinadas condiciones sociales que lo hacen posible; esto es, que opera en Ia medida en queexiste "presencia de masas"n es decir, un mnimo de participacin de estas, principalmente en el campo de Iapoltica. El anlisis sociolgico debe explicar esta posibilidad de modo que fenmenos como el consideradono se tengan sin ms como elementos "causales" del proceso. Un enfoque de este tipo equivale a considerarque el dinamismo de las sociedades subdesarrolladas deriva de factores extemos, y que las peculiaridades

    '_ Vease, especialmente, W.W. Rostow, The Stage of Economic Growt[ A Non-Comunist Manifies! Cambridge,Cambridge University Press, I 962; Wilbert Moore, Economy and Socler), Nueva York, Doubled ay, 1955; Ken, Dunlopu otros, Industrialsm and Industrial Man.

  • estructurales y la accin de los grupos e instituciones sociales de los pases subdesarrollados sondesviaciones (deviant c ases).

    Consideramos ms adecuado, por consiguiente, un procedimiento metodolgico que acente elanlisis de las condiciones especficas de la situacin latinoamericana y el tipo de integracin social de lasclases y grupos como condicionantes principales del proceso de desarrollo'

    En tal perspectiva, por ejemplo, el "efecto de demostracin" se incorporara al anlisis comoelemento explicativo subordinado, pues lo fundamental sera caracterizar el modo de relacin entre losgrupos sociales en el plano nacional

    -que, por supuesto, depende del modo de vinculacin al sistemaconmico y a los bloques polticos internacionales- y las tensiones entre las clases y grupos sociales quepueden producir consecuencias dinmicas en la sociedad subdesanollada.

    As, ms que sealar las consecuencias del "efecto de demostracin" o de otras variables exgenas,sobre el funcionamiento de los grupos sociales como "factor de modemiz;Lcin", importa realzar lascaractersticas histrico-estructurales en que se genera un proceso de semejante naturaleza y que revelan elsentido mismo que puede tener dicha modernizacin.

    3. ESTRACT(\RA Y PROCESO: DETERMINACIONES RECPROCAS

    Para el anlisis global del desarrollo no es suficiente, sin embargo, agregar al conocimiento de loscondicionantes estructurales, la comprensin de los "factores estructurales, la comprensin de los "factoressociales'', entendidos stos como nuevas variables de tipo estructural. Par adquirir significacin, tal anlisisrequiere un doble esfuerzo de redefinicin de perspectivas: por un lado, considerar en su totalidad las"condiciones histricas particulares" -econmicas y sociales- subyacentes en los procesos de desarrollo, enel plano nacional y en el plano externo; por otro, comprender, en las situaciones estructurales dadas, losobjitivos e intereses que dan sentido, orientan o alientan el conflicto entre los grupos y clases y losmvimientos sociales que "ponen en marcha" las sociedades en desarrollo. Se requiere, por consiguiente, yello es fundamental, una perspectiva que, al poner de manifiesto las mencionadas condiciones concretas -queson de carcfer estructural- y al destacar los mviles de los movimientos sociales --objetivos, valores,ideologas- analice aquellas y stos en sus relaciones y determinaciones recprocas.

    Se trata, por consiguiente, de buscar una perspectiva que permita vincular concretamente loscomponentes econmicos y los sociales del desanollo en el anlisis de la actuacin de los grupos sociales, noslo de yuxtaponerlos. Ello supone que el anlisis sobrepase el aporte de Io que suele llamarse enfoqueestructural, reintegrndolo en una interpretacin hecha en trminos de "proceso histrico. Tal interpretacinno significa aceptar el punto de vista ingenuo que seala la importancia de la secuencia temporal paraexpliacin cientfica

    -origen y desarrollo de cada situacin social-, sino que el devenir histrico slo se

    "*pli"u por categoras que atribuyan significacin a los hechos y que, en consecuencia, se hallen

    histricamente referidas. De esa manera se considera el desarrollo como resultado de la interaccin degrupos y clases sociales que tienen un modo de relacin que les es propio y por tanto intereses y valoresistintos, cuya oposicin, conciliacin o superacin da vida al sistema socioeconmico. La estructura socialy poltica se va modificando en la medida en que distintas clases y grupos sociales logran imponer susinterese, su fuerza y su dominacin al conjunto de la sociedad'

    A travs del anlisis de los interese y valores que orientan o que pueden orientar la accin, el procesode cambio sociat deja de presentarse como resultado de factores "naturales" -sto e, independientes de lasaltemativas histricas- y se empieza a perfilara como un proceso que en las tensiones entre grupos coninterese y orientaciones divergentes encuentra el filtro por el que han de pasar los influjos meramenteeconmicos.lo

    Para lograr un enfoque terico de esta nattxalez.a --en el que la temtica parece alcanzar extensin ycomplejidad crecientes- es necesario buscar las categoras que expresen los distintos momentos ycaractersticas estructurales del proceso histrico -algunos de naturaleza intema a los pases y otros extema-significativos para el desarrollo. De conformidad con el enfoque hasta ahora reseado, el problema tericofundamental lo constituye la determinacin de los modos que adoptan las estructuras de dominacin, porquepor su intermedio se comprende la dinmica de las relaciones de clase. Adems, la configuracin en unmomento determinado de los aspectos polticos-institucionales no puede comprenderse sino en funcin de lasestructuras de dominio. En consecuencia, tambin es por intermedio de su anlisis que se puede captar elproceso de transformacin del orden poltico institucional. Esta eleccin terica queda avalada

    'o Para un alisis de este punto de vista, vase F. H. Cardoso, Empresrio industrial e desenvolvimento economico, SaoPaulo, Difusao europeia do livro, 1964, cap. I y 2.

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  • empricamente por el hecho de que los cambios histricos significativos del proceso de desanollolatinoamericano han sido siempre acompaados, si no de una mud anza radic en la estructura dedominacin, por lo menos por la adopcin de nuevas formas de relaciones y por consiguiente de conflicto,entre las clases y grupos' Es evidente que la explicacin terica de las estructuras de dominacin, en el casode los pases latinoamericanos, implica establecer las conexiones que se dan entre los determinantes intemosy los extemos, pero estas vinculaciones, en cualquier hiptesis, no deben entenderse en trminos de unarelacin "causal'analtica", ni mucho menos en trminos e unu determinacin mecnica e inmediata de lointerno por lo externo. Precisamente, el concepto de dependencia que ms adelante se examina pretendeotorgar significado a una serie de hechos y situaciones que aparecen conjunamente en un moment dado yse busca establecer por su intermedio las relaciones que hacen intelibles las situaciones emplricas enfuncin del modo de conexin entre los componentes estructurales internos y extemos. pero lo externo, enesa perspectiva, se expresa tambin como un modo particular de relacin entre grupos y clases sociales en elmbito de las naciones subdesarrolladas, Por eso precisamente tiene validez centrar el anlisis de ladependencia en su manifestacin interna, puesto que el concepto de dependencia se utiliza como un tipoespecfico de concepto "causal-significante" -implicaciones determinadas pro un modo de relacinhistricamente dado- y no como concepto meramente "mecnico-causal", qul subraya la determinacinextema, anterior, para luego producir,,consecuencias" internas.

    Como el objetivo de este ensayo es explicar los procesos econmicos como procesos sociales, serequiere buscar un punto de interseccin terica donde el poder econmico se exprese como dominacinsocial, esto es, como poltica; pues, a travs del proceso polltico, una clase o grupo econmico intentaestablecer un sistema de relaciones sociales que le permitanimpon"r al conjunto.d la sociedad un modo deproduccin propio, o por Io memos intenta establecer alianzas o subordinai al resto de los grupos o clasescon el fin de desarrollar un forma econmica compatible con sus interese y objetivos. Los molos de relacineconmica, a su vez, delimitan los marcos en que tiene lugar Ia acsin poltica.

    Por consiguiente, los temas que se perfilan con mayor vigor son: los condicionantes econmicos delmercado mundial, incluso el equilibrio internacional de poder; la sFuctura del sistema productivo nacional ysu tipo de vinculacin con el mercado externo; la configuracin histrico-estructural e dichas sociedadei,con sus formas de distribucin y mantenimiento del poder, y sobre todo los movimientos y procesos poltico-sociales que presionan hacia el cambio, con sus respectivas orientaciones y objetivos. E nlisis directo delos principales factores, procesos y movimientos presentes en la situacin de subdesarrollo o en lassociedades en vas de desarrollo, es una tarea inmensa y sin lmites precisos, Sin embargo, es posibledeterminar problemas definidos, que pueden constituir un ncleo dL significacin funJamental paracomprender las posibilidades del desarrollo, en la medida en que ciertos temas, an de carcter particlar,expresan el condicionamiento global arriba mencionado, y por eso mismo su aclaracin arroja lui sobre elconjunto de situaciones de subdesarrollo. El criterio para elegir estos temas o situaciones deiender de loselementos que puedan ofrecer para la formulacin d la perspectiva integrada de anlisis antes formulada.Hay que formular los puntos de interseccin del sistema econmico con el sistema social a travs de loscuales se revelan los nexos y la dinmica de los distintos aspectos y niveles de la realidad que afectan a tasposibilidades del desarrollo.

    Esquemticamente se puede decir que el problema del control social de la produccin y el consumoconstituye el eje de un anlisis sociolgico del desarrollo orientado desde esa perspectiva. -En efecto, lainterpretacin sociolgica de los procesos de transformacin econmica requiere el an'lisis de las situacionesen donde la tensin entre los grupos y clases sociales pone de manifiesto las bases de sustentacin de laetructura econmica y poltica. Desde ese ngulo es posible efectuar el anlisis de los ,,mecanismos dedecisin", actualmente !n en boga. La problemtica sociolgica del desarrollo, sin embargo, lejos dereducirse a este enfoque, implica, como se dijo, el estudio de las eshucturas de dominacin y ae tas formasde estraticacin social que condicionan los mecanismos y los tipos de control y decisn del sistemaeconmico en cada situacin social particular. Dentro de la perspectiva general aludida, esa problemticacomprende necesariamente el anlisis de los comportamientos politicos que inciden en la relacibn entre loasclases y grupos sociales que,mantienen un patrn dado de contiol y las que se le oponen real o virtualmente,As mismo supone Ia consideracin de las orientaciones valorativl qu otorgan a la accin sus marcos dereferencia.

    La comprensin de tales movimientos y fuerzas constituyen parte fundamental del anlisissociolgico del desarrollo, ya que este implica siempre alteraciones en el siitema social de dominacin y laredefinicin de las formas de control y organizacin e la produccin y el consumo.

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  • 4, SUBDESARROLLO, PERIFERIA Y DEPENDENCIA

    Para permitir el paso del anlisis sociolgico usuales a una interpretacin global del desanollo esnecesario estudiar desde el inicio las conexiones entre el sistema econmico y la organizacin social ypoltica de las sociedades subdesarrolladas, no slo en ellas y entre ellas, sino tambin en relacin con lospases desarrollados, pues la especiflrcidad histrica de la situacin de subdesarrollo nace precisamente de larelacin entre sociedades "perifricas" y "centralesn'. Es preciso, pues, redefinir la "sifuacin desubdesarrollo" tomando en consideracin su significado histrico particular, poniendo en duda los enfoquesque la presentan como un posible "modelo" de ordenacin de variables econmicas y sociales. En estesentido, hay que distinguir la situacin de los pases subdesarrollados con respecto a los que carecen dedesarrollo, y diferenciar luego los diversos modos de subdesarrollo segn las particulares relaciones que esospases mantienen con los centros econmica y polticamente hegemnicos. Para los fines de este ensayo sloes necesario indicar en lo que se refiere a la distincin entre los conceptos de subdesarrollo y carente dedesarollo, que este ltimo alude histricamente a la situacin de las economas y pueblos -tada vez msescasos- que no mantiene relaciones de mercado con los pases industrializados.

    En cuanto al subdesarrollo, una distincin fundamental se ofrece desde la perspectiva del procesohistrico de formacin del sistema productivo mundial; en ciertas situaciones, la vinculacin de laseconomas perifericas al mercado mundial se verifica en trminos "coloniales", mientras que en otras laseconomas perifricas estn encuadradas en "sociedades nacionales". Acerca de esta ltimas, cabra aadirque en determinados crsos se realiz la formacin de vnculos entre los centros dominantes msdesarrollados y los pases perifricos cuando ya exista en ellos una sociedad nacional, al paso que en otros,algunas colonias se han transformados en naciones mantenindose en su situacin'de subdesarrollo.

    En todo caso, la situacin de subdesarrollo se produjo histricamente cuando la expansin delcapitalismo comercial y luego del capitalismo industrial vincul a un mismo mercado economas que,adems de presentar grados diversos de diferenciacin del sistema productivo, pasaron a ocuprir posicionesdistintas en la estructura global del sistema capitalista. De ah que entre las economas desanolladas y lassubdesarrolladas no slo exista una simple diferencia de etapa o de estado del sistema productivo, sinotambin de funcin o posicin dentro de una misma estructura econmica intemacional de produccin ydistribucin. Ello supone, por otro lado, una estructura definida de relaciones de dominacin.

    Sin embargo, el concepto de subdesarrollo tal como se lo emplea comnmente, se refiere ms bien ala estructura de un tipo de sistema econmico, con predominio del sector primario, fuerte concentracin de larenta, poca diferenciacin del sistema productivo y sobre todo, predominio del mercado externo sobre elinterno. Eso es manifiestamente insuficiente.

    El reconocimiento de la historicidad de la situacin de subdesarrollo requiere algo ms que sealarlas carctersticas estructurales de las economas subdesarrolladas. Hay que analizar, en efecto, cmo laseconomas subdesarrolladas se vincularon histricamente al mercado mundial- y la, forma en. que seconstituyeron los grupos sociales internos que, logtaron definir las relaciones hacia afuera que elsubdesarrollo supone. Tal enfoque implica reconocer que en el plano poltico-social existe algn tipo dedependencia en las situaciones de subdesarrollo, y Que esa dependencia, empez histricamente con laexpansin de las economas de los pases capitalistas originarios.

    La dependencia, de la situacin de subdesarrollo, implica socialmente una forma de dominacin quese manifiesta por una serie de caractersticas en el modo de actuacin y en la orientacin de los grupos queen el sistema econmico aparecen como productores o como consumidores. Esta situacin supone en loscasos extremos que las decisiones que afectan a la produccin o al consumo de una economa dada se tomanen funcin de la dinmica y de los intereses de las economas desarrolladas. Las economas basadas enenclaves coloniales constituyen el ejemplo tpico de esa situacin.

    Frente a la argumentacin presentada., el esquema de "economas centrales'o y "economasperifrica" pudiera parecer ms rico de significacin social que el esquema de economas desarrolladas yeconomas subdesarrolladas. A l se puede incorporar de inmediato Ia nocin de desigualdad de posiciones yde funciones dentro de una misma estructura de produccin global. Sin embargo, no sera suficiente nicorrecto proponer la sustitucin de los conceptos desarrollo y subdesarrollo por los de economa central yeconoma perifrica o -como si fuesen una sntesis de ambos- por los de economfas autnomas y economasdependientes. De hecho, son distintas tanto las dimensiones a que estos conceptos se refieren como susignificacin terica. La nocin de dependencia alude directamente a las condiciones de existencia yfuncionamiento del sistema econmico y del sistema poltico, mostrando las vinculaciones entre ambos,tanto en lo que se refiere al plano interno de los pases como al externo. La nocin de subdesanollocaracteriza a un estado o grado de diferenciacin del sistema productivo

    -a pesar de que, como vimos, ello

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  • implique algunas "consecuencias" sociales- sin acentuar las pautas de control de las decisiones deproduccin y consumo, ya sea intemamente (socialismo, capitalismo, etc.) o externamente, (colonialismo,periferia del mercado mundial, etc.). Las naciones de "sentro" y "periferia", por su parte, subrayan lasfunciones que cumplen que cumplen las economas subdesarrolladas en el mercado mundial y sin destacarpara nada los factores poltico-sociales implicados en la situacin de dependencia.

    Adems, una sociedad puede sufrir transformaciones profundas en su sistema productivo sin que seconstituyan al mismo tiempo en forma plenamente autnoma los centros de decisin- y los mecanismossociales que los condicionan. Tal es el caso de Argentina y Brasil al terminar el proceso de sustitucin deimportaciones e iniciarse el de la produccin de bienes de capital, momento que les permiti alcalo.z.ardetermiinado grado de madurez. econmica, incluso en lo que respecta a la distribucin del ingreso (comoocurri hasta cierto puntoo en la Argentina). Por otra, part, en casos lmites, una sociedad nacional puedetener cierta autonoma de decisiones sin que por ello el sistema productivo y las formas de distribucin de larenta le permitan equipararse a los pases centrales desarrollados ni siquiera a algunos pases perifricos enproceso de desarrollo. S da esta hiptesis, por ejemplo, cuando un pas rompe los vnculos que lo ligan a undeterminado sistema de dominacin sin incorporarse totalmente, a otro (Yugoslavia, China, Argelia, Egipto,Cuba e incluso el Mxico revolucionario).

    Como consecuencia de ese planteamiento, cuando se trata de interpretar globalmente un proceso dedesarrollo, es necesario tener presente que no existe un nexo inmediato entre la diferenciacin del sistemaeconmico y la formacin de centros autnomos de decisin., y por lo tanto que los anlisis deben definir noslo los grados de diferenciacin estructural que las economas y las sociedades de los pases que se hallanen la fase de transicin alcanzaron en el proceso de integracin en el proceso mundial sino, tambin el modomediante el cual se logr histricamente esa integracin. Semejante perspectiva aconseja una gran cautela enla interpretacin de como se han producido el desarrollo econmico y la moderniz.acin de la sociedad enAmrica Latina.

    Diversos autores han subrayado el carcter de "resultado imprevisto" que el desarrollo asume en.Amrica Latina. Algunos pases, por ejemplo, al proyectar Ia defensa de su principal producto deexportacin, propusieron una poltica de devaluacin que tuvo como consecuencia indirecta, y hasta ciertopunto no deliberada, la creacin de condiciones favorables al crecimiento industrial. Sin embargo, seradificil sostener que Ia diferenciacin econmica as alcanzada -en funcin de variaciones coyunturales delmercado y sin implicar un proyecto de autonoma creciente y un cambio en las relaciones entre las clases-pueda por s sola alterar en forma sustantiva las relaciones de dependencia. La esfera poltica delcomportamiento social influye necesariamente en la forma del proceso de desarrollo. Por ello, si se parte deuna interpretacin global del desarrollo los argumentos basados en puros estmulos y reacciones de mercadoresultan insuficientes para explicar la industrializacin y el progreso econmico. Para que tales estmulos omecanismos de defensa de la economa subdesarrollada, puedan constituir el comienzo de un proceso deindustrializacin que reestructure el sistema econmico y social, es necesario que se hayan producido en elmismo mercado internacional transformaciones o condiciones que favorezcan el desarrollo, pero es decisivoque el juego poltico-social en los pases en vas de desarrollo contenga en su dinmica elementos favorablesa la obtencin de grados ms amplios de autonoma.

    Debe tenerse en cuenta como qued sealado anteriormente, que el enfoque propuesto no consideraadecuado, ni aun desde un punto de vista analtico, separar los factores denominados "externos" y los"intemos"; al contrario se propone hallar las caractersticas de las sociedades nacionales que expresan lasrelaciones con lo externo.

    Son justamente los factores poltico-sociales internos -vinculados, como es natural, a la dinmica, delos centros hegemnicos- los que pueden producir polticas que se aprovechen de las "nuevas condiciones" ode las nuevas oportunidades de crecimiento econmico. De igual modo, las fuerzas intemas son las queredefinen el sentido y el alcance poltico-social de la diferenciacin "espontnea" del sistema econmico. Esposible, por ejemplo, que los grupos tradicionales de dominacin se opongan en un principio a entregar supoder de control a los nuevos grupos sociales que surgen con el, proceso de industrializacit, pero tambinpueden pactar con ellos, alterando as las consecuencias renovadoras del desarrollo en el plano social ypoltico.

    Las alianzas de los grupos y fuerzas sociales intemas estn afectadas a su vez por el tipo e intensidadde los cambios, y stos dependen en pafte del modo de vinculacin de las economas nacionales al mercadomundial; la articulacin de los grupos econmicos nacionales con los grupos y fuerzas extemas se produceen forma distinta y con consecuencias diferentes antes y despus de empezar un proceso de desarrollo. Elsistema interno de alianzas polticas se altera, adems, muchas veces por las alianzas existentes en el planointemacional.

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  • Tal perspectiva implica que no se puede discutir con precisin el proceso de desarrollo desde unngulo puramente econmico cuando el objetivo propuesto es comprender la formacin de economasnacionales. Tampoco es suficiente, con fines de descripcin, el anlisis del comportamiento de variablesderivadas -dependientes, por lo tanto, de los factores estructurales y del proceso histrico de cambio-, comoes el caso de las tasas de productividad, ahorro y renta, de las funciones de consumo, del empleo, etctera.

    Para que los modelos econmicos construidos con variables de esta naturaleza puedan tenersignificacin en el anlisis inegrado del desarrollo deben estar referidos a las situaciones globales -socialesy econmicas- que le sirven de base y les prestan sentido. La interrelacin de lo econmico y lo social sehace notoria en la situacin de "enclave colonial", en donde la desigualdad de la situacin poltica entre lacolonia y la metrpoli hace que el sistema econmico sea percibido como directamente ligado al sistemapoltico poniendo as, de relieve ms claramente la relacin entre ambos. Y, por el contrario, cuando eldesanollo tiene lugar en "stados nacionales", la faz econmica se toma ms "visible" y los condicionantespolticos y sociales aparecen ms fluidos; no obstante, estos ltimos mantienen una influencia decisivarespecto al aprovechamiento, y continuacin de las oportunidades de desarrollo que ocasionalmente semanifiestan en el mercado.

    Por consiguiente, al considerar la "situacin de dependencia" en el anlisis del desanollolatinoamericano, lo que se pretende poner de manifiesto es que el modo de integracin de las economasnacionales al mercado intemacional supone formas definidas y distintas de intenelacin de los gupossociales de cada pas, entre s y con los grupos extemos. Ahora bien, cuando se acepta la perspectiva de quelos influjos del mercado, por s mismos, no son suficientes para explicar el cambio ni para garantizar sucontinuidad o su direccin, la actuacin de las fuerzas, grupos e instituciones sociales pasa a ser decisivapara el anlisis del desarrollo

    5. il "SABDESARROLLO NACIONAL"Se hace necesario, por lo tanto, definir una perspectiva de interpretacin que destaque los vnculos

    estructurales entre la situacin de subdesarrollo y los centros hegemnicos de las economas centrales, peroque no atribuya a estos ltimos, la determinacin plena de la dinmica del desarrollo. En efecto, si en lassituaciones de dependencia colonial es posible afirmar con propiedad que Ia historia y -por ende el cambio-aparece como reflejo de lo que pasa en la metrpoli, en situaciones de dependencia de las "nacionessubdesarrolladas" la dinmica social es ms compleja. En ese ltimo caso hay desde el comienzo, una doblevinculacin del proceso histrico que crea una "situacin de ambigedad" o sea, una contradiccin nueva.Desde el momento en que se plantea como objetivo instaurar una nacin -como en el caso de las luchasanticolonialistas- el centro poltico de la accin de las fuerzas sociales intena ganar cierta autonoma alsobreponerse a la situacin del mercado; las vinculaciones econmicas, sin embargo, continan siendodefinidas objetivamente en funcin del mercado externo y limitan las posibilidades de decisin y accinautnomas. En eso radica, quiz el ncleo de la problemtica sociolgica del proceso nacional de desarrolloen Amrica Latia.

    La situacin de "subdesarrollo nacional y supone un modo de ser que a la vez depende devinculaciones de subordinacin al exterior y de la reorientacin del comportamiento social, poltico yeconmico en funcin de "intereses nacionales"; esto caracteriza a las sociedades nacionalessubdesanolladas no slo desde el punto de vista econmico, sino tambin desde Ia perspectiva delcomportamiento y la estructuracin de los grupos sociales. De ah que la finalidad del anlisis integrado delproceso de desarrollo nacional consista en determinar las vinculaciones econmicas y poltico-sociales quetienen lugar en el mbito de la nacin. Esas articulaciones se dan travs de la accin de tos grupos socialesque en su comportamiento real ligan de hecho la esfera econmica y poltica. Conviene subrayar que dichaaccin se refiere siempre a la nacin y a sus vinculaciones de todo orden con el sistema poltico y econmicomundial.

    La dependencia encuentra as no slo "expresin" intema sino tambin su verdadero carcter comomodo determinado de relaciones estructurales: un tipo especfico de relacin entre las clases y grupos queimplica una situacin de dominio que conlleva estructuralmente la vinculacin con el exterior. En estaperspectiva, el anlisis de la dependen significa que no se la debe considerax ya como una "variable extema",sino que es dable analizarla a partir de la configuracin del sistema de relaciones entre las distintas clasessociales en el mbito mismo de las naciones dependientes.

    Para emprender este anlisis tambin debe desecharse la idea de que la accin de las clases y lasrelaciones, entre estas tengan en los pases dependientes un carcter semejante al que se dio en los pasescentrales su fase de desarrollo originario. La hiptesis ms generalizada sobre el modo de funcionamiento

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  • del sistema poltico y econmico en los inicios del proceso de desarrollo en los pases centrales supone queel libre juego del mercado actuaba, por as decirlo, como rbitro para dirimir el conflicto de intereses entreIos grupos dominantes. De ah que la racionalidad econmica, medida por el lucro, se impona como norma ala sociedad y que el consumo y la inversin se definan dentro de los lmites establecidos por el crecimientodel sistema econmico. Se supona, adems, que la posibilidad de expansin del sistema se deba a laexistencia de un grupo dinmico que controlaba las decisiones en materia de inversin y que dominaba lasposiciones de poder necesarias y sucientes para imprimir al conjunto de la sociedad una orientacincoincidente con sus intereses. La clase econmica ascendente posea, pues, eficiencia y consenso.

    Con toda la simplificacin inherente a ese esquema, se consideraba que Ios grupos dirigentesexpresaban el inters general y que, en esas condiciones, el mercado funcionaba adecuadamente comomecanismo regulador de los intereses generales y de los intereses particulares. En este caso se entenda por"funcionamiento adecuado" la capacidad de servir al crecimiento econmico, descartando la hiptesis de queexistieran otros grupos que presionaran para participar en los frutos del "progreso" y en el control de lasdecisiones. Slo mucho despus de realizado el esfuerzo inicial de industrializacin estuvieron las clasespopulares en condiciones de hacerse presentes en las sociedades industriales como fuerza poltica y socialparticipante.rrLo que contribuy al xito de las economas nacionales en los pases de "desarrollooriginario" fue el hecho de que stas se consolidasen simultaneamente con la expansin del mercado.urdiul, de manera que dichos pases pasaron a ocupar las principales posiciones en el sistema dedominacin internacional que se estableca.

    Sin confiar demasiado en el valor del esquema presentado para caracterizar las condiciones generalesdel "desarrollo originario", que es poco preciso y de carcter muy amplio, es evi.dente que hay diferenciassignificativas entre-ese esquema y lo que ocurre en Amrica Latina. En efecto, dado que existen relacionesdJ subordinacin entre las regiones desarrolladas y las insuficientemente desarrolladas -o, mejor dicho, entrelas sociedades centrales y las dependientes-, el anlisis no puede desconocer esa caracterstica bsica, parapressntar como una desviacin lo que realmente es una manera de ser'

    Entre los conceptos "desarrollo" y "sistema capitalista" se produjo tal confusin que se lleg asuponer que para lograr el desarrollo en los pases de Ia periferia es necesario repetir la fase evolutiva de Iasecnomas de los pases centrales. Sin embargo, es evidente que el proceso capitalista supuso desde suscomienzos una relacin de las economas centrales entre ellas y otra respecto a las perifricas; muchaseconomas "subdesarrolladas" -como es el caso de las latinoamericanas- se incorporan al sistema capitalistadesde los comienzos de la formacin de las colonias y luego de los estados nacionales y en l penanecen alo largo de todo su transcurso histrico, pero no debe olvidarse que lo hacen como economas perifericas.

    Los distintos momentos histricos del capitalismo no deben estudiarse, pues, con el afn deencontrar su repeticin retrasada en los pases de la periferia, sino para saber cmo se produjo en cadamomento particular, Ia relacin entre periferia y centro. Son varios los aspectos por analizar uno de ellos serefiere a los caracteres del capitalismo como sistema econmico internacional. De otra manera, si en elproceso pueden distinguirse momentos de predominio tales como el capitalismo mercantil, el capitalismoindustrial y el capitalismo financiero, no nos corresponde preguntamos a cul de estos momentos seaproximan las economas, latinoamericanas en la actualidad, puesto que de heoho no contituyen economasseparadas del mercado capitalista internacional, sino que es necesario esclarecer que signific en trminos de"estructuras de la economa" y "estructura social", la relacin de dependencia para los paseslatinoamericanos durante estos distintos momentos. Lo mismo sucede con los concepto' "capitalismocompetitivo" y "capitalismo monoplico" que se dan como tendencia en las tres etapas sealadas delcapitalismo, aunque con mayor acentuacin de uno u otro de los trminos en cada caso.

    Asimismo corresponde al anlisis determinar la sigaificacin de estos conceptos con respecto a lossi stemas naci onal es dependientes.

    Lo expuesto tambin tiene connotaciones histricas de cierta importancia. Los paseslatinoamericanos, como economas dependientes, se ligan en estas distintas fases del prooeso capitalista adiferentes pases que actan como centro, y cuyas estructuras econmicas inciden significativamente en elcarcter que adopta la relacin, El predominio de la vinoulacin con las metrpolis peninsulares -Espaa oPortugal- durante et perodo colonial, la dependencia de tnglaterra ms tarde y de Estados Unidos por ltimo,tiene mucha significacin. As, por ejemplo, tnglaterra, en el proceso de su expansin como economa,exiga en alguna medida el desarrollo de las economas perifricas, dependientes de ella, puesto que lasnecesitaba para abastecerse de materias primas. Requera, por consiguiente, que la produccin de las

    r Sobre este punto vase Alain Touraine, "Industrialisation et conscience ouvrire Sao Paulo", en Sociologie duTravail, abril de 1961.

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  • economas dependientes logra cierto grado de modernizacin; estas mismas economas, ademas, integrabanel mercado comprador de sus productos manufacturados, por lo que tambin era evidentemente necesarioque se diera en ellas cierto dinamismo. La economa estadounidense, en cambio contaba con recursonaturales y con un mercado comprador interno que le permita iniciar un desarrollo ms autnomo enrelacin con las economas perifericas, es ms, en atgunos casos la ubicaba en situacin de competencia conrespecto a los pases productores de materias primas. La relacin de dependencia adquiere, as unaconnotacin de control el desarrollo de otras economas tanto de la produccin de materias primas como dela posible formacin de otros centros econmicos. El papel dinamizador de la economa de Estados Unidosrespecto a las economas latinoamericanas en la etapa anterior a la formacin de los "conglomerados"actuales, es, por consiguiente, menos importante que en el caso anteriormnte descrito'

    Metodolgicamente no es lcito suponer -dicho sea, con mayor rigor' que en los pases "endesarrollo" se este repitiendo la historia de los pases desarrollados. En efecto, las condiciones histricas sondiferentes: en un caso se estaba creando el mercado mundial paralelamente al desarrollo gracias ala accin dela denominada a veces bourgeoisie conquerante, y en el otro se intenta el desarrollo cuando ya existenrelaciones de mercado, de ndole capitalista, entre ambos grupos de pases y cuando el mercado mundial sepresenta dividido entre el mundo capitalista y el socialista. Tampoco basta considerar las diferencias comoesviaciones respecto de un patrn general de desarrollo, pues los factores, las formas de conducta y losprocesos sociales y econmicos, que a primera vista constituyen formas desviadas o imperfectas deiealizacin del patrn clsico de desarrollo deben considerarse ms bien como ncleos del anlisis destinadoa hacer inteligible el sistema econmico-social.

    6. LOS TIPOS DE VINCULACIN DE LAS ECONOMAS NACIONALES AI" MERCADO

    Debe fenerse en cuenta que, al romperse el pacto colonial, la vinculacin entre las economasperifricas y: el mercado intemacional asume un carcter distinto, ya que en esta relacin a la condicin de"economa perifrica" debe agregarse la nueva condicin de "nacin independiente"'

    La ruptura de lo que l,os historiadores llaman el "Pacto colonial" y la primera expansin delcapitalismo industrial europeo son, pues, Ios rasgos histricos dominantes en el perodo de formacin de las"naciones nuevas" en el siglo XIX. La expansin de las economlas centrales industrializadas -primero la deInglaterra y ms tarde la de Estados Unidos- no se realiz en el vacio, puesto que se enconfi con sistemasecnmicos y sociales ya constituidos por efecto de la precedente expansin colonial. A partir del perodo dela independncia, desde el punto de vista sociolgico, la dinmica de las economas y de las sociedadesrecin iormadas se presentaalavez como refleja y como autctona en la medida en que la expansin delcentro encuentra situaciones nacionales que hacen posible distintos tipos de alianza, de resistencia y detensin.

    El tipo de vinculacin. de las economas nacionales perifericas a las distintas fases del procesocapitalista, con los diversos modos de dominacin que ste supone implica que la integracin a la nueva fasese realiza a travs de una estructura social y econmica que, si bien modificada, procede de la situacinanterior. Sern distintos el modo y las posibilidades de desarrollo de una nacin que se vincula al sectorexpolador internacional con un producto de alto consumo, segn se verifique en el perodo del capitalismoprdominantemente competitivo o en el perodo predominantemente monopolista. De igual modo serndistintas, comparadas con las "colonias de explofacin", las posibilidades de integracin nacional y deformacin de un mercado interno en aquellos pases: cuya economa colonial se organiz ms bien como"colonias de poblacin" es decir, formadas sobre la explotacin (controlada por productores all radicados)de productos que requieren mano de obra abundante. En estos casos, y en el perodo posterior a laindependencia., fue ms fcil la organizacin de un aparato poltico-administrativo interno para promover yejecutar una "poltica nacional". Adems, la propia base fisica de la economa -como por ejemplo, el tipo ylas posibilidades de ocupacin de la tierra o -el tipo de riqueza mineral disponible- influir sobre la forma y,las consecuencias de la vinculacin al mercado mundial posterior al perodo de formacin nacional.

    En cada uno de los tipos de vinculacin posibles, segn esos factores las dimensiones esenciales quecaracterizan la dependencia se reflejarn sobre las condiciones de integracin del sistema econmico y delsistema poltico. As, la relacin entre las clases, muy especialmente, asume en Amrica Latina formas yfunciones por completo diferentes a las de los pases centrales. En rpido bosquejo, podra decirse que cadaforma histrica de dependencia produjo un acuerdo determinado entre las clases, no estitico, sino de carcterdinmico. El paso de uno a otro modo de dependencia, considerado siempre en una perspectiva histrica,debi fundarse en un sistema de relaciones entre clases o grupos generado en la situacin anterior. De estemodo, por e.jemplo, cuando se rompe la dependencia colonial y se produce el paso a la dependencia de

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  • Inglaten4 sta tiene como sostn social al grupo de productores nacionales, que por el crecimiento de subaie econmica -crecimiento ya dado en la situacin colonial- estaban en condiciones de suscitar un nuevoacuerdo entre las distintas fues sociales gracias al cual estaban llamados a tener, si no el dominio absoluto,por lo menos una situacin privilegiada. l purut de la hegemona de Inglaterra a la de Estados Unidos;nfan enjuego nuevos factores que encuentran su origen en la situacin anterior. En efecto, como entonces,junto al .."I*i.nto de los gruios exportadores se prodqio un crecimiento significativo de los sectoresurbanos, y esta nueva u"orolu"in deLi hallarse presente en la relacin con Estados Unidos' Lo que sequiere sealar brevemente -por ahora es que- si Ia nueva forma de dependencia tiene explicaciones exteriores

    la nacin, tampoco es ajina a ella la ielacin interna entre las clases que la hace posible y le dan sufisonoma. Fundamentalmente, la dinmica que puede adquirir el sistema econmico dependiente en elmbito de la nacin, estri determinado -dentro de ciertos lmiies- por la capacidad de los sistemas.internos dealianzas para proporcionarles capacidad de expansin. De esta manera se da el caso, paradjico slo enapariencia, de que la presencia di las masas en los ltimos aos haya constituido, a causa de su presin porincorporarse al'sistema poltico, en uno de los elementos que ha- provocado el dinamismo de Ia formaeconmica vigente.

    Admitiendo como vlida esa interpretacin se obtendr un marco de la actividad de las presiones enfavor del desanollo en Amrica Latina qu muestra, con respeoto a los patrones europeos o,norteamericanos,no una desviacin que debe corregirse, sino un cuadro histrico distinto por su situacin periferica' EI..enfientamiento" que resulta de laslresiones a favor de la modemiz.acin se produce en la actualidad entrelas clases populares que intentan imponer su participacin, a menudo en alianza con los nuevos gruposeconmicamente dominantes, y el sisiema de aiianza vigente entre Ias clases predominantes en Ia situacinanterior,

    En la fase inicial de este proceso los grupos industriales aparecan en algma medida en una situacinmarginal. Sin embargo, por el helho de formar parte de los nuevos sectores urbanos, su papel alcatzacteriaimprtancia porque-de'hecho, en este conglomerado, constituyen el nico grupo que posee una baseecnmica ,, onqrr. sta no sea decisiva si Ia referimos a la otalidad del sistema econmico vigente y apesar tambin de su arcter coyuntural. Por ser el grupo industrial el que plantea la posibilidad de absorberen forma productiva a los setores urbanos populort, se sita en un lugar estratgico que le permiteestablecer trminos de alianza o compromiso con el resto del sistema social vigente y ello explica suimportancia en el periodo posterior a la crisis del sistema agroexportador.

    7. PERSPECTIVAS PARA UN ANLISIS TNTEGRADO DEL DESARROLLO

    En sntesis, reconociendo la especificidad de las distintas formas de comportamiento, el anlisissociolgico trata de explicar las aparentes desviaciones a travs de la determinacin de las caracteristicasestructurales de las sociedades subdesarrolladas y mediante un trabajo de interpretacin' No es exageradoafirmar que es necesario un esfuerzo de anlisis a fin de redefinir el sentido y las funciones que, en elcontexto estructural de la situacin de subdesarrollo tienen las clases sociales y las alianzas que ellasestablecen para sustentar una estructura de poder y generar la dinmica social y econmica'

    -

    Las dos dimensiones del sistema econmi, en los pases en proceso de desarrollo, la interna y laexteman se expresan en el plano social, donde adoptan una estructura que se orgatrizay funciona en trminosde una doble conexiOn segrin las presiones y vinculaciones externas y segn el condicionamiento de losfactores intemos que inciden sobre la estratificacin social'

    t a complijidad de la situacin de subdesarrollo da lugar a orientaciones valorativas que, aun siendocontradictorias., cexisten. Parecera que se producen alavezciertas situaciones en las cuales la actividad delos grupos sociales conesponde a las pautas de las "sociedades industrializadas de masas" y otras en Ias quetienn ireponderancia las normas roid"r tpicas de las "situaciones de clase" y hasta de las "situacionesestamentales".

    La interpretacin general aqu sostenida subraya que esta ambigedad es tpica de la situacin desubdesarrollo y que, por l tanto, es necesario elaborar conceptos y proponer hiptesis que la expresen ypermitan ,o.ir"rdrr.l subdesarrollo bajo esa perspectiva fundamental. sta expresa la contradiccin enheia nacin concebida como una unidad social relativamente autnoma (lo que obliga, por lo tanto, a referirsede manera constante a la situacin interna de poder) y el desarrollo como proceso logrado o que se estIogtando, a avs de vnculos de nuevo tipo cn las economas centrales, pero en cualquier caso, bajo laspautas definidas por los intereses de aqullas.

    La perspectiva en que nos colocamos pone en tela de juicio precisamente lo que se acepta comonecesario

    ", Iu

    "onr*p"in usual del anlisis de las etapas del desarrollo. En efecto, las transformaciones

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